ELECTROTERAPIA Y SUS

CONTRAINDICACIONES

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A menudo en fisioterapia empleamos la electroterapia como técnica
asociada a nuestros tratamientos de terapia manual. Estos dispositivos
son una ayuda en el tratamiento de diversas patologías, incrementando
los beneficios del tratamiento y facilitando, en gran medida, nuestra
práctica clínica. Aunque en la mayoría de los casos sabemos bien las
indicaciones de cada dispositivo, en ocasiones olvidamos algo quizás
más importante aún, sus contraindicaciones relativas y absolutas. En
este artículo se pretende realizar una síntesis de las contraindicaciones y
precauciones que debemos tener en cuenta en la utilización de los
dispositivos de electroterapia más comunes.

Contraindicaciones
Se describen a continuación las contraindicaciones de los equipos de
electroterapia:

Corrientes galvánicas
La corriente galvánica se emplea con la finalidad de conseguir efectos
hiperemiantes, analgésicos y antiespasmódicos. Los efectos que se
producen son, bajo el polo positivo una liberación de oxígeno,
vasoconstricción, sedación y coagulación proteica; y bajo el polo
negativo, vasodilatación y estimulación. En la región intermedia
provocaría una acción vasomotora, trófica y de incremento térmico.1 Las
contraindicaciones de este tipo de corriente son:

 Endoprótesis y osteosíntesis. Pudiendo producir quemaduras si se

aplica, ya que dada la conductividad de los metales que las componen,
se podría dar lugar a un acúmulo de cargas eléctricas y convertirse en
un pseudoelectrodo y llegando a acumularse calor.2–4
 Marcapasos1,2
 Región precordial cuando existen problemas cardíacos. Esto es
debido a que el sistema generador de impulsos eléctricos biológico se
puede ver influenciado por los campos eléctricos alterando el ritmo y
llevando a la aparición de extrasístoles o la ausencia de latidos.1,2
 Embarazo2,3
 Procesos cancerígenos2
 Tromboflebitis, salvo indicación concreta y controlada.2
Ilustración 1. Iontoforesis, corrientes galvánicas

 Precaución en las zonas de glándulas endocrinas. Por evitar

efectos a nivel orgánico que no son buscados ni deseados.2
 Piel en mal estado o con heridas. Porque la región dañada hará
una reducción de la resistencia lo que puede derivar en una
concentración excesiva de energía eléctrica que podría provocar lesión
o quemadura de los tejididos.3
 Alteraciones en la sensibilidad de los pacientes.2

Se trata de aplicar medicamentos (analgésicos, anestésicos, etc.) y

facilitar su penetración a través de una corriente continua o carga
eléctrica aplicada sobre la piel. El objetivo es enviar concentraciones
terapéuticas del fármaco a una región corporal evitando la exposición del
resto del cuerpo a dicha sustancia.5 Con ello se obtienen efectos polares,
sensitivos y circulatorios que se potencian por la introducción del
medicamento.3,6,6 La penetración se estima entre 1 y 5 mm, logrando una
mayor profundización mediante la circulación capilar llegando a alcanzar
hasta 5 cm.5 Clásicamente, la corriente empleada ha sido la galvánica y
es por ello que las contraindicaciones serán las mismas que las de
dichas corrientes añadiendo las propias del ion transferido que son: 5,7

 Alergia al medicamento.
 Eczema.
 Infecciones cutáneas.
Otra opción, aunque menos frecuente, sería emplear corrientes
interferenciales cuyas contraindicaciones las veremos a continuación. 5

Estimulación Eléctrica Nerviosa Transcutánea (TENS) y

Estimulación Muscular (EMS)
Las ondas TENS se emplean fundamentalmente en la reducción del
dolor excitando únicamente fibras sensitivas en cambio las EMS se
utilizan para estimular la fibra muscular e hipertrofiar, mejorar la
resistencia muscular y tonificar.2,8 Las principales contraindicaciones de
estas técnicas son:2,9

 Marcapasos y región precordial.

 Epilepsia.
 Fiebre.
 Alteraciones de la sensibilidad (precaución).

Ilustración 2. Electroestimulador y TENS.

 En regiones próximas al feto de mujeres embarazadas.

 Procesos neoplásicos si están cercanos a la región a tratar o
metástasis.
 Procesos tromboflebíticos y varices muy pronunciadas.
 Pacientes con miedo o reacción de histerismo a la corriente
eléctrica.
 Alteraciones en la piel como heridas, úlceras, etc.
 Proximidad al sistema nervioso central (SNC) o ganglios
neurovegetativos.

Media frecuencia: interferenciales y Método Koth (corrientes

rusas)
Las corrientes interferenciales se emplean con una finalidad más
analgésica y de estimulación de la circulación, mientras que las
corrientes rusas o de Koth son empleadas como una modalidad más de
electroestimulación (fortalecimiento muscular). Estas corrientes se
aplican en trastornos del equilibrio neurovegetativo y procesos
traumáticos y post-operatorios como luxaciones, esguinces, contracturas,
mialgias, etc. Con la finalidad de alivio del dolor, estimulación muscular,
aumento del flujo sanguíneo local y reducción del edema.10
Las contraindicaciones de estas técnicas son:8,11

 Procesos infecciosos y fiebre.

 Procesos tumorales.
 Tuberculosis.
 Procesos inflamatorios agudos.
 Tromboflebitis .
 Marcapasos, DIU o cualquier dispositivo eléctrico o metálico
instalado dentro del cuerpo (osteosíntesis o endoprótesis cercanas).
 Embarazo.
 Roturas tisulares recientes si se aplican con efecto motor.
 No invadir el corazón, centros neurovegetativos o sistema nervioso
central en el campo eléctrico.
 Precaución en la aplicación sobre ganglios nerviosos simpáticos y
parasimpáticos colocados a lo largo de la columna vertebral.

Alta frecuencia: diatermia, onda corta y microondas

La alta frecuencia produce en el cuerpo efectos térmicos mejorando la
oxigenación celular, neuromusculares, antiinflamatorios, vasodilatadores
e hiperemiantes, bactericidas y antiséptico por la formación de ozono.2,12
Las contraindicaciones de estas técnicas son:2,12–14

 Procesos inflamatorios agudos (como artritis y brotes) y fiebre.

 Implantación de dispositivos intrauterinos (en aplicaciones sobre la
zona).
 Marcapasos.
 Osteosíntesis y endoprótesis metálicas.
 Tuberculosis activa e inactiva.
 Hemorragias o lesiones recientes (heridas, úlceras o
menstruación).
 Tromboflebitis.
 En abdomen o pelvis durante el embarazo.
 Procesos tumorales.
 Procesos de calcificación incipientes.
 Procesos infecciosos y abscesos purulentos (salvo si pretendemos
su explosión).
 Evitar el SNC, ojos, oídos, testículos, glándulas hormonales y
región coronaria.

Ilustración 3. Diatermia.

 Denervaciones totales, así como disminuciones de la sensibilidad

térmica (típica en ancianos).
 Ganglios linfáticos infartados.
 Hemofilia y tratamientos con anticoagulantes.
 Hematomas, roturas tisulares y derrames recientes agudos.

Magnetoterapia
La magnetoterapia se emplea con la finalidad de reducir dolor, estimular
el metabolismo del calcio y colágeno del hueso (estimulando la
osificación y cicatrización de heridas), reducir el espasmo muscular,
obtener efectos antiinflamatorios y mejora de las defensas.10,15 Con todo
ello ofrece mejoría clínicas en procesos reumáticos, trastornos de la
osificación, traumatología general, patología vascular periférica, sinusitis,
migraña y síndromes vertiginosos.2,15
Aunque no existen contraindicaciones absolutas, si que hay situaciones
que requieren precauciones especiales como son:2,10,15,16

 Embarazadas.
 Tuberculosis.
 Hipotensión.
 Trayectos cardíacos en pacientes con cardiopatía.
 Enfermos portadores de marcapasos.
 Enfermedades víricas o micosis.
 Hemorragias o heridas hemorrágicas.
 Procesos cancerígenos.
 Osteosíntesis metálicas porque la experiencia clínica dice que se
puede aumentar la respuesta de rechazo.

Ultrasonidos
La terapia con ultrasonidos se basa en la conducción de ondas sonoras
(vibraciones mecánicas) sobre un tejido con finalidades analgésicas,
antiinflamatorias, de vasodilatación y antiespasmódicas mejorando con
ello el rango de movimiento. Con todo ello produce mejoría notables en
retracciones musculares, fibrosis, lesiones ligamentarias, cartilaginosas,
fascitis plantares y espolones calcáneos.17,18
Las contraindicaciones de esta técnica son:2,17,19,20

 Ojos, testículos, sistema nervioso central y canales del oído

interno.
 Sobre la región abdominal en embarazadas.
 Procesos cancerígenos.
 Procesos infecciosos agudos y sepsis.
 Marcapasos.
 Afecciones vasculares, zonas de tromboflebitis y proximidades.
 Sobre corazón en cardiopatías.
 Fracturas recientes con callos incipientes.
 Heridas recientes.
 Focos de tuberculosis.
 Cicatrices queloideas.
 Osteosíntesis o endoprótesis.

Infrarrojos
Los infrarrojos forman parte del espectro electromagnético invisible a los
ojos humanos a pesar de que en clínica se aplican mediante una
bombilla coloreada artificialmente. Esta técnica se aplica con varias
finalidades: como medio de preparación para otras técnicas como el
masaje, electroterapia o movilizaciones articulares provocando analgesia,
relajación muscular, desinflamación, vasodilatación e hiperemia. En
general se aplica sobre procesos dolorosos, crónicos o patología
circulatoria.21
Las contraindicaciones de esta técnica son:2,21

 Insuficiencia cardio-respiratoria.
 Patologías psicológicas depresivas.
 Inflamaciones agudas, infecciones o fiebre.
 Pacientes que tomen medicación con anticoagulantes.
 Tromboflebitis y alteración de la circulación periférica.
 Alteraciones de la sensibilidad, parálisis total o severa.
 Heridas sangrantes y purulentas.
 Cicatrices queloideas.
 Derrames intraarticulares e intratisulares recientes.
 Procesos cancerígenos.
 Procesos tuberculosos activos y otras infecciones en tejidos
profundos que puedan sufrir reactivación.

Terapia láser
La terapia láser consiste en la aplicación de un rayo electromagnético al
cuerpo con la finalidad de producir un aumento de la actividad
metabólica, disminución del dolor, vasodilatación, mejora del drenaje
linfático, efectos antiinflamatorios, bioestimulantes y
descontracturantes.  Con todo ello lo podremos aplicar en procesos
22,23

artríticos, artrósicos, tendinopatías, bursitis, lumbociáticas y neuralgias

entre otras aplicaciones.24
Aunque las contraindicaciones no están claramente definidas, existen
determinadas situaciones donde debemos actuar con prudencia.2,23 No
obstante, estamos hablando de IR y el organismo está entrenado a
recibir dicha radiación de forma natural, en tal cantidad que la
necesitamos para mantenernos vivos.2 Estas precauciones deben
tenerse en: 22,2,24

 Procesos cancerígenos, aunque la  banda de infrarrojos todavía

permanece, claramente, dentro de las radiaciones no ionizantes,
distanciada del inicio de las ionizantes por todo el espectro visible y los
UVA y UVB.
 Embarazo por desconocerse los efectos.
 Procesos bacterianos.
 En pacientes con pérdida de sensibilidad térmica, aplicando
potencias menores de lo habitual y dosis bajas.
 Evitar el contacto con los ojos con las correspondientes gafas
protectoras.
 Epilepsia.