Está en la página 1de 4

César Romero Gabriell

Della Porta, Donatella y Michael Keating. “¿Cuántos enfoques hay en ciencias sociales?
Introducción epistemológica” en Della Porta y Keating. Enfoques y metodologías de las
ciencias sociales. Una perspectiva pluralista, Madrid, Ed. Akal, 2013, pp. 31-51.

¿Cuántos enfoques hay en ciencias sociales?

En el presente trabajo se elaborará un breve ensayo crítico en el que se explicará en


términos generales las principales ideas de los autores y sus propuestas, así como una
reflexión personal respecto a la lectura de Della Porta y Keating.
Los autores señalan primero el tema de los paradigmas en las ciencias sociales y
para ello se basan en el concepto de Thomas S. Kuhn en el que las disciplinas científicas
maduras tienen un paradigma que define lo que se estudia, por qué se estudia y cómo se
estudia.
Hay sociólogos que afirman que hay un solo enfoque en las ciencias sociales en
el que los enfoques cuantitativos y cualitativos están presentes: deben tener como meta
la inferencia, sus procedimientos son públicos para que su fiabilidad pueda ser
comprobada, las conclusiones son inciertas y el contexto de la investigación es el
método.
Sin embargo no toda la ciencia social puede verse de esta forma. Hay quienes
afirman que es preparadigmática o posparadigmática, los hay también quienes afirman
que no es paradigmática y que no puede haber un enfoque hegemónico, sino que el
mundo social debe entenderse de múltiples maneras, y cada cual sirve para diferentes
propósitos. También hay quien dice que la ciencia social es mutiparadigmática, con
diferentes paradigmas que luchan entre sí o se ignoran.
Luego los autores describen a grandes rasgos los enfoques divergentes en las
ciencias sociales. El primero es el ontológico que observa la existencia de un mundo
real y objetivo; después está la epistemología que tiene que ver con la posibilidad de
conocer el mundo y de qué forma lo conocemos y la metodología que son los
instrumentos utilizados para adquirir el conocimiento.

1
El enfoque epistemológico trata de un conocimiento proposicional, distinto de la
creencia, y se basa en dar razones para decir que algo es así. El enfoque tradicional del
positivismo que está en el pensamiento de Comte, Spencer y Durkheim considera a las
ciencias sociales como si fueran ciencias exactas o de la naturaleza. Parten de la premisa
de que el investigador puede alejarse de su objeto de estudio y es capaz de observarlo
con neutralidad.
Luego están las pospositivistas en las que el conocimiento causal ya no es
preponderante, sino que los fenómenos no se rigen por leyes causales sino por leyes
probabilísticas. Otra idea de esto es la del construccionismo social que piensa que las
clasificaciones no reflejan cómo es el mundo, sino que son formas de representarlo.
Estas ontologías y epistemologías se juntan en el enfoque interpretativo. Este
enfoque se caracteriza porque los significados objetivos y subjetivos están conectados,
resalta los límites de las leyes mecánicas y da mayor importancia a la voluntad del ser
humano. En tanto que los seres humanos son agentes significativos, se intenta descubrir
los significados que motivan sus acciones, en vez de conformarse con leyes universales
ajenas a los agentes.
Los autores hablan después de las metodologías en las ciencias sociales. Hablan
del enfoque inductivo y del hipotético-deductivo. El primero extrae generalizaciones a
partir de casos concretos y en el segundo el estudio de la realidad social se basa en el
marco conceptual, las técnicas de observación y medida, los instrumentos de análisis
matemático y los procedimientos de inferencia de las ciencias naturales.
En cambio en la investigación interpretativa y cualitativa lo fundamental no es
descubrir leyes cuyo centro sea la causalidad, sino comprender el carácter humano, la
diversidad de sociedades y de culturas.
Respecto a los métodos, los autores nos dicen que son formas de reunir datos y
presentan un conjunto simplificado de opciones que van de la más rígida a la más
flexible. El primero es encuadrar la cuestión a investigar. Los positivistas comienzan
con hipótesis derivada de la teoría y el conocimiento previo. Los interpretativistas
elaboran la cuestión a investigar en el desarrollo de la investigación y modifican en el
trayecto. Otra diferencia está en el número de casos analizados y los criterios de
elección; mientras que los positivistas tienen un gran número o sus elecciones son

2
seleccionadas minuciosamente, los interpretativistas seleccionan los casos según su
interés inherente. Los positivistas usan el lenguaje de las variables y no están muy
interesados en los casos per se, sino en las propiedades que los diferencian. Los
enfoques interpretativos plantean los objetos de manera más completa, tomando en
cuenta su complejidad. Otro aspecto es el del valor-neutralidad, para los positivistas el
investigador no “contamina” al objeto con normas, ideologías o políticas y los
interpretativistas no hacen esta distinción, incluso llegan a negar la distinción entre
hecho y axioma.
Por último, los autores señalan tres formas de conocimiento en las ciencias
sociales: el enfoque paradigmático y exclusivo que sigue la propuesta de Kuhn sobre el
paradigma y su relación con la teoría, los métodos y las pautas. El segundo es el
anarquista e hiperpluralista a la usanza de Feyerabend en el que se combina el
escepticismo ante el verdadero conocimiento con la incitación a la experimentación en
distintos ámbitos del saber. El tercero (el que proponen los autores a lo largo de esta
obra) es el de la búsqueda del conocimiento comparable en el que se afirma que entre
los extremos hay posturas que admiten diferencias en las vías de conocimiento y niegan
la existencia de una que sea mejor. Aspiran a hacer compatibles ambos extremos. Estas
aproximaciones se pueden combinar y las formas de combinar el conocimiento se
clasifican en síntesis, triangulación, perspectivas múltiples y fertilización cruzada.
Para concluir es importante hacer notar que los autores, así como Beltrán, hacen
una especie de taxonomía de los métodos, las aproximaciones y enfoques en las ciencias
sociales, lo que quiere decir que no existe uno solo y que son variables y se modifican
en tanto que el objeto de estudio es también mutable y que el investigador toma una
postura determinada para acercarse a la cosa que desea estudiar. También es notable que
persista el debate de la diferencia entre sujeto y objeto y que mientras unos piensan que
en el objeto está el sentido que ha de develarse, otros consideren en el extremo que no
hay realidad tal cual sino sólo interpretaciones. Es una especie de reminiscencia de la
discusión racionalismo-empirismo llevada a las ciencias sociales y que, por tanto, la
elección del investigador será determinante en la exposición del objeto. Así podemos
establecer, junto a Michel de Certeau, que la ciencia es un discurso que apela a la
superación de la creencia. Además, este conflicto recuerda claramente el que se da

3
ahora en el nuevo realismo (Grondin, Ferraris, Gabriel) contra las concepciones
simbólicas y semánticas de la realidad.

También podría gustarte