Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
domicilios en Latinoamérica
• https://www.negociosyemprendimiento.org/2021/04/historia-rappi.html
El modelo de negocio que tenía Rappi era muy simple: la compañía no era más
que una “intermediaria” entre los usuarios, los comercios y su equipo de
repartidores, a los que denominan “Rappitenderos”. Así, cada vez que un
usuario realizaba un pedido a un comercio aliado, Rappi se encargaba de
cobrarle un 10% de comisión al comercio y un valor por el domicilio al usuario,
que oscilaba entre $1 y $3 dólares, dependiendo la distancia. Dicho pago era
completamente para el rapitendero. Sí, por el contrario, un usuario hacía un
pedido de algún producto que no se encontraba entre los comercios aliados,
este tendría que asumir el 10% adicional de comisión.
Rappi, en lugar de ver a sus repartidores como empleados de la empresa, los
ven como “emprendedores independientes” que pueden conectarse y
desconectarse cuando quieran de la app, ya que no tienen que cumplir con
ningún tipo de horario u obligación que no deseen, pudiendo incluso rechazar
pedidos.
Este modelo laboral ha generado todo tipo de reacciones. Por un lado, está la
compañía y algunos de sus simpatizantes que dicen que este modelo “facilita” la
relación entre los miembros de Rappi y los “colaboradores”, y que genera, una
reducción de costos innecesarios; además de que posibilita que los trabajadores vean
la aplicación como un trabajo a medio tiempo, para las noches o los fines de semana,
tiempo como lo prefieran. Por otro lado, algunos medios y defensores de los
derechos laborales consideran la aplicación como “una nueva modalidad de
explotación laboral”, ya que argumentan que, bajo esta figura del “colaborador
libre”, lo que realmente se esconde es un método con el cual emplean a una persona
en un trabajo duro sin tener que preocuparse por sus derechos, tales como primas,
vacaciones, cesantías y las prestaciones de ley (que incluyen pensión, afiliación a salud
uniforme o el maletín, son cosas que debe comprar el Rappitendero por sus propios
Este tipo de denuncias cada vez tienen una mayor relevancia, debido a la legislación
de diversos países que han establecido que estas plataformas sí tienen empleados, y
por lo tanto deben cumplir con los derechos y condiciones laborales establecidas por
la ley. Además, han traído consigo varias protestas en distintas ciudades por parte de
Fue así cómo, en noviembre del 2016, recibieron una inversión de $9 millones de
en Facebook y Airbnb en sus inicios. Poco después, recibieron una inversión de $53
millones de dólares por parte de Sequoia Capital, una empresa de capital de riesgo
A medida que Rappi crecía, fue desarrollando nuevos servicios, como Rappi
Mall, que facilita la compra de ropa; Rappi Cash, para solicitar pedidos de
dinero en efectivo; Rappi Care, que ofrece telemedicina y servicios como
plomería; Rappi Games, para acceder a videojuegos y participar en
torneos; Rappi Travel, un servicio de compra de boletos de avión; Rappi Live,
una plataforma para la gestión de eventos en vivo; Rappi Music, un servicio de
música digital; y, en algunos países, Rappi Apuestas, para participar en juegos
de azar. Incluso, existe la posibilidad de acceder al servicio “Hacer favores”, una
opción en la cual el usuario especifica la razón para solicitar un rappitendero, y
éste por la plataforma decide si puede o quiere realizar dicha petición. En varias
entrevistas, Simón cuenta algunas de las cosas más insólitas que se han
solicitado por Rappi, como la necesidad de un repartidor para que juegue Play
Station con un grupo de amigos, solicitudes para picar cebolla, o, la ocasión en
que fue solicitado uno para que acompañara a una mujer en su despecho. En
todas estas situaciones, el Rappitendero cobraba por horas de servicio.