ADORACIÓN EUCARISTICA

Canto

S: Bendito, alabado y adorado sea Jesús en el Santísimo Sacramento del altar.

T: Sea para siempre bendito y alabado.

S: Mi Jesús sacramentado, mi dulce amor y consuelo.

T: Quien te amara tanto que de amor muriera.

ACOLITO 1: Ante tu presencia amado padre, venimos para alabarte, bendecirte y adorarte. Tú nos llamas,
Señor, y nosotros hemos respondido a esta llamada. Ayúdanos a caminar hacia tu reino de paz. Que el tiempo
que estemos aquí sea totalmente tuyo. Entra en nuestro interior, habita en él. Danos tu luz para que podamos
contemplar tu bondad y vivamos con el corazón de hermanos que nos haz regalado. ¡Ven Señor! ¡Ven a nuestro
corazón! ¡Que no nos separemos nunca de Ti!

ACOLITO 2: Señor Jesucristo, hermano, amigo y Redentor del hombre, míranos a nosotros jóvenes con amor,
y abre para nosotros el camino de la eterna misericordia que nos regala tus enseñanzas en evangelio. Dóciles a
tu llamada, hemos venido para estar contigo y adorarte. Otórganos señor, un corazón semejante al tuyo, manso
y humilde, para escuchar tu voz y tus consejos, llevándolos como prenda en el diario vivir.

S: Lectura del santo evangelio según San Lucas (5, 1-11)

1En cierta ocasión, Jesús estaba junto al lago de Genesaret y el gentío se agolpaba sobre él para oír la palabra de
Dios. Jesús vio que cerca de la orilla del lago estaban dos barcas, y que los pescadores habían bajado de ellas
para lavar sus redes. Jesús entró en una de aquellas barcas, la cual era de Simón, y le pidió que la apartara un
poco de la orilla; luego se sentó en la barca, y desde allí enseñaba a la multitud. Cuando terminó de hablar, le
dijo a Simón: «Lleva la barca hacia la parte honda del lago, y echen allí sus redes para pescar.» Simón le dijo:
«Maestro, toda la noche hemos estado trabajando, y no hemos pescado nada; pero ya que tú me lo pides, echaré
la red.» Así lo hicieron, y fue tal la cantidad de peces que atraparon, que la red se rompía. Entonces hicieron
señas a los compañeros que estaban en la otra barca, para que vinieran a ayudarlos. Cuando aquellos llegaron,
llenaron ambas barcas de tal manera, que poco faltaba para que se hundieran. Cuando Simón Pedro vio esto,
cayó de rodillas ante Jesús y le dijo: «Señor, ¡apártate de mí, porque soy un pecador!» Y es que tanto él como
todos sus compañeros estaban pasmados por la pesca que habían hecho. También estaban sorprendidos Jacobo y
Juan, los hijos de Zebedeo, que eran compañeros de Simón. Pero Jesús le dijo a Simón: «No temas, que desde
ahora serás pescador de hombres.» Llevaron entonces las barcas a tierra, y lo dejaron todo para seguir a Jesús.

Momento de Silencio

Preces
Padre misericordioso que escogiste a los humildes de corazón como la santísima virgen María, danos la gracia
de servir a todos nuestros hermanos como lo hizo ella con los primeros apóstoles, diciendo todos:
R.- ven salvador nuestro.

1. – Por el Papa, los obispos y sacerdotes, para que siendo fieles a la llamada que un día recibieron, hagan
crecer la gloria y la santidad de la Iglesia. Oremos
2. –Tú que diste a María la gracia del Espíritu Santo, por intercesión de María otórganos los frutos de este
mismo Espíritu. Oremos

S: Te damos gracias Señor, por haber, nacido de María. Tu nos preparas en este tiempo para vivir el perdón y
la reconciliación.

Canto

S: Les diste pan del cielo. (T.P. Aleluya).

T: Que contiene en sí todo deleite. (T.P. Aleluya).

Oremos.
Oh Dios, que te hiciste hombre en el seno de María permítenos vivir con humildad las enseñanzas dadas por tu
madre, para experimentar con mayor conciencia los misterios de tu redención, y ser así la imagen de la
misericordia viva en nuestras acciones del día a día. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos.

R. Amen.

Bendito sea Dios.

Bendito sea su santo Nombre.
Bendito sea Jesucristo, Dios y Hombre verdadero.
Bendito sea el Nombre de Jesús.
Bendito sea su Sacratísimo Corazón.
Bendita sea su Preciosísima Sangre.
Bendito sea Jesús en el Santísimo Sacramento del Altar.
Bendito sea el Espíritu Santo Paráclito.
Bendita sea la excelsa Madre de Dios, María Santísima.
Bendita sea su Santa e Inmaculada Concepción.
Bendita sea su gloriosa Asunción.
Bendito sea el nombre de María Virgen y Madre.
Bendito sea San José, su castísimo esposo.
Bendito sea Dios en sus Ángeles y en sus Santos.

Canto