Melina Tornese. mtornese@agro.uba.ar “Historia de la Educación Argentina y Latinoamericana”.

LA MISIoÓN.
Los hechos a los que hace referencia la película ocurrieron en
1750 en los límites entre Argentina, Brasil y Paraguay.
Los portugueses y españoles solían comercializar esclavos
indios.
A partir de 1750, fueron las misiones jesuíticas, las
encargadas de brindar refugio a los indígenas del lugar y
también de llevarles la palabra de Dios. Estos indígenas,
identificados como Guaraníes, aún estaban en estado natural.
La película comienza cuando uno de los sacerdotes jesuitas,
llamado Gabriel, escala las cataratas del Iguazú con la idea de
formar la misión de San Carlos.
Una vez adentrado en la selva, el Padre Gabriel comienza a
tocar la flauta, lo cual provoca un acercamiento desconfiado
de los Guaraníes hacia él. Uno de ello le rompe la flauta y la
arroja al agua; otro la recoge y la arregla. Entonces deciden
llevar al padre con ellos, sometiéndose a la misericordia de
Dios.
Rodrigo Mendoza captura a algunos Guaraníes para
comercializarlos como esclavos.
Luego, Rodrigo mata a su hermano Felipe en una pelea por
una mujer. Tras este acto decide internarse en un convento
para cubrir su culpa.
Años más tarde, el padre Gabriel va a ver al Sr. Mendoza al
convento y lo convence para que sane su culpa ayudando lo
en la misión. Durante el viaje, Rodrigo por voluntad propia
lleva una carga muy pesada colgando de su espalda como
penitencia.
Los sacerdotes y el Sr. Mendoza son recibidos bien por los
nativos. Y son los indios quienes a pesar de reconocer que ese
hombre que acompañaba a los padres era quien había
capturado años antes a sus pares quienes le quitan la
penitencia y lo perdonan. De hecho, lo incluyen en todas sus
actividades.
Todos juntos construyeron la iglesia de la misión de San
Carlos.

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Cuando Mendoza les agradece a los sacerdotes de la órden

por aceptarlo, ellos le responden que le debe agradecer al
pueblo guaraní y el Padre Gabriel le da una Biblia para leer.
Cuando Rodrigo termina su lectura, pide permiso para tomar
los votos y ser de la órden.
Después se muestra una reunión en la que está Su Santidad
(representante máximo de la iglesia), los representantes de
los reinos de España y de Portugal y los religiosos de la Orden
Jesuítica.
La discusión está basada en si es conveniente que se
transfiera la órden a los gobiernos de España y Portugal o bien
que siguiese bajo la tutela de la Iglesia. También se examina
si los indígenas deben ser considerados humanos.
El Padre Rodrigo Mendoza debe pedir disculpas por
contradecir en público al representante del Reino de España,
siendo él un simple novicio de la órden.
Para tomar una decisión, Su Santidad decide ira a visitar la
misión más antigua, llamada San Miguel. El padre Gabriel le
pide que también visite la misión de San Carlos. Tras aceptar,
cuando llegan a la nueva misión, los nativos los reciben con
agrado. El coro de la iglesia canta para Su Santidad.
Días después, es el representante de la Iglesia quien decide
que los indios deben dejar la misión y que deben volver a la
selva, ellos se rehúsan a aceptar y dicen que van a luchar por
quedarse en la misión. Los sacerdotes son amenazados con la
excomunión si apoyan a los indígenas. La órden será
transferida, a todo esto, son los Guaraníes quienes dicen que
Dios los ha abandonado.
Rodrigo Mendoza quiere renunciar a la órden para poder
ayudar a los indios y pelear con ellos. Todos los sacerdotes
hacen lo mismo menos el Padre Gabriel quien cree que puede
haber un mundo con amor y paz.
La misión de San Miguel es invadida por los soldados y se
espera lo mismo para la de San Carlos.
Los Guaraníes, junto a los sacerdotes construyen sus propias
armas para defenderse. La noche previa al ataque Rodrigo va
al campamento de los soldados junto con un indígena y roban
las armas, la pólvora, etc. En la misión se preparan
emboscadas para atacar a los soldados reales. En la batalla

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Melina Tornese. mtornese@agro.uba.ar “Historia de la Educación Argentina y Latinoamericana”.

los indígenas atacan por río y por tierra, pero son los soldados
quienes incendian la iglesia, donde se agrupaban las mujeres,
los ancianos y los niños. Toda esta lucha ha terminado en una
gran matanza del pueblo guaraní.
Fin.