Universidad Tecnológica Nacional

Facultad Regional Concepción del Uruguay

INSTALACIONES TERMOMECÁNICAS – (O 953S)
Profesor: Arq. Carlos R. Canavessi
Auxiliar: Ing. Martín Scelzi

MONOGRAFÍA Nº 3
PROCEDIMIENTOS DE CÁLCULO PARA INSTALACIONES DE CALEFACCION

a) - AGUA CALIENTE por CIRCULACION NATURAL

En todo circuito constituido por la circulación del agua a través de las cañerías, las
unidades terminales (calefactores) y la caldera, hay una cantidad de resistencias que se
oponen al avance del fluido que deben ser vencidas por la “presión eficaz” (H) disponible. En
el caso de circulación natural (o por termosifón) la “presión eficaz” se debe a la mayor
densidad del agua en el retorno en relación a la alimentación.

El cálculo o dimensionamiento de las cañerías se puede realizar de dos formas, según se

trate de instalaciones pequeñas o grandes.

En instalaciones pequeñas (edificios de hasta dos plantas y superficie cubierta limitada)

pueden emplearse para el cálculo procedimientos aproximados, que consisten en el empleo de
un ábaco o de tablas de doble entrada (se acompañan como anexo), que establecen el  de la
cañería en función de dos variables:
a) la diferencia de altura “h” (m) entre el centro de la caldera y el centro del
calefactor, y
b) la cantidad de calor o “caudal calórico” (Q), en Kcal/h, que debe transportar el
tramo, considerando todos los calefactores a los cuales sirve.
El cálculo se debe comenzar por el circuito cerrado del calefactor más desfavorable, que es
el más bajo y alejado con respecto a la caldera (en el caso de “distribución superior”). Luego
se continúa con los tramos siguientes.
El empleo de estas tablas y/o ábacos permitirá determinar el  de los tramos verticales y se
adoptará el mismo  para los tramos horizontales que sean su continuación.

Cuando dos o más tramos verticales inciden sobre un tramo horizontal, la sección de éste
se tomará como la suma de las secciones de los tramos verticales concurrentes.

Para los retornos se adoptará el mismo  que los tramos de alimentación correspondientes.

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Para instalaciones grandes, con varias plantas y gran superficie por planta (mucho
desarrollo horizontal de cañerías) es necesario realizar un cálculo más preciso. Para ello se
emplea el método de Riestchel.

Este sistema tiene en cuenta el “gradiente de pérdida de carga” (caída de presión por
metro), el que variará en función de tres variables:
a) La diferencia de altura “h” (m) entre el centro de la caldera y el centro del
calefactor considerado;
b) Los pesos específicos o densidades del agua, tanto en la alimentación como en el
retorno (Kg/m3), y
c) La longitud “l” (m) de la cañería en el tramo considerado.

Sabemos que la presión eficaz “H” es:

H = h (r - a)
donde
H = presión eficaz (Kg/m2 = mm.c.a.)
h = diferencia de altura entre centros de caldera y calefactor (m).
r ; a = densidades del agua en el retorno y la alimentación respectivamente (Kg/m3).

En las instalaciones de calefacción por agua caliente se puede considerar que el 50% de
“H” se empleará para vencer los rozamientos del agua en las cañerías y el otro 50% servirá
para vencer la sumatoria de las resistencias individuales ofrecidas por los diferentes
accesorios que se encuentren montados sobre las mismas, tales como codos, curvas, tees,
válvulas, reducciones, etc. Los valores de estas resistencias individuales se tomarán en
función de “metros de cañerías rectas de igual ” para cada elemento. Existen tablas que nos
dan, para cada accesorio y para cada  comercial, la “longitud equivalente” en metros de
cañería recta de igual . (Por ejemplo: una curva a 90° de 25 mm, equivale a 0,50 m de caño
recto de 25 mm).
(Ver tablas: “Longitud equivalente de cañerías (m)” – Quadri, p. 192 o “Longitudes
equivalentes por resistencia de accesorios (m)” – Llobera, p. 267).

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Esa presión eficaz “H” corresponderá al recorrido total de cañerías (m), y de acuerdo a lo
dicho anteriormente podemos considerar que:

H = H1 + H2

donde H1 = 50% correspondiente al rozamiento en los tramos de cañerías rectas.

H2 = 50% correspondiente a las resistencias individuales de los diversos accesorios.

Para poder determinar, en ambos casos, el “gradiente de pérdida de carga”, deberemos

dividir los valores de H1 por la “longitud real” (longitud de cañerías en desarrollo) y el de H 2
por la “longitud equivalente” de los accesorios.

En consecuencia, tendremos:
H1 = H1 / l1 – Gradiente de pérdida de carga por longitud de tramos de cañerías rectas.
H2 = H2 / l2 – Gradiente de pérdida de carga por sumatoria de accesorios individuales.

Con los valores así calculados, estaremos en condiciones de proceder al cálculo, operando
de la siguiente forma:

1. Comenzaremos por el calefactor más alejado de la caldera, considerando los metros de

recorrido de la cañería de la instalación, para lo cual previamente debemos preparar un
esquema detallado de la misma, incluyendo los accesorios y preferentemente en axonometría,
indicando para cada tramo su longitud en metros (m);

2. Numeramos cada calefactor y colocamos sobre él su consumo calórico (Q) en Kcal/h,

de acuerdo a los datos obtenidos previamente en el Balance Térmico;

3. Normalmente se considerará que el salto término del agua en los calefactores será de
unos 20 °C (alimentación: 90 °C – retorno: 70 °C);

4. Se calcula la presión eficaz “H”, considerando el peso específico del agua para dichas
temperaturas. (P.e. agua 70 °C = 977,8 Kg/m3 - P.e. agua 90 °C = 965,3 Kg/m3);

5. Calculado el valor de “H”, tomamos el 50%, correspondiente a H1 (pérdida de carga

por rozamientos en tramos de cañerías rectas) y lo dividimos por la longitud de cañerías, entre
la salida de la caldera y la entrada del calefactor, determinando así el gradiente de pérdida de
carga por metro:

H1 = H1 / ll

6. Con el gradiente así obtenido, entraremos a Tablas (se adjuntan) hasta encontrar el
caudal calórico “Q” (Kcal/h) más aproximado por exceso, al que corresponda al tramo
considerado y así determinaremos el  comercial (en pulgadas o mm) de la cañería. Este  es
válido también para el retorno de dicho tramo.

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7. Con el otro 50% de “H”, es decir “H2”, correspondiente a las “pérdidas por
accesorios”, haremos la verificación del cálculo. Teniendo en cuenta los  obtenidos en el
cálculo, tendremos los  de los accesorios y con ello podremos determinar la “longitud
equivalente” (l2) por medio de las tablas antes indicadas.

8. Conocida la “longitud equivalente” (l2), con el gradiente H1 hallamos la presión

consumida por los accesorios, la que deberá ser menor o igual que el 50% de “H” reservado
para ello.

l2 x H1 ≤ H2

9. Si esta expresión no verificara, deberemos recalcular la instalación, o alguno de sus

tramos.

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b) - AGUA CALIENTE por CIRCULACION FORZADA

El procedimiento de cálculo para instalaciones de calefacción por agua caliente por

circulación forzada, se divide en tres partes fundamentales, a saber:
1. Predimensionamiento de los  de las cañerías del sistema;
2. Selección de la bomba circuladora;
3. Verificación del cálculo.
Este cálculo se realiza según lo que se conoce como “procedimiento de Pérdida de Carga
Constante”.

La ecuación fundamental de equilibrio, en un circuito cerrado como el de las instalaciones

de calefacción por circulación forzada, es:

H =  (lr + leq) x R

donde:
H = presión eficaz de la bomba o presión manométrica (m.c.a. o mm.c.a.);
lr = longitud real del circuito más largo (m);
leq = longitud equivalente del circuito más largo (m);
R = gradiente de pérdida de carga por metro (gradiente hidráulico o caída de presión por
metro) (mm.c.a./m).

Esta es una ecuación de tres incógnitas, donde el único dato conocido es la longitud real
(lr) de los tramos rectos de cañerías. El resto de los datos no se disponen, porque aún no están
calculados los  de las cañerías respectivas.
En esta situación, se podrían proyectar distintas alternativas de redes de distribución de
cañerías que satisfagan la cantidad de calor a transportar, debiéndose elegir aquella solución
que sea la más económica y que no provoque ruidos molestos ni erosión en las mismas.

El procedimiento de diseño que tiende a lograr esos objetivos es el denominado “de igual
fricción” o “pérdida de carga constante”.

Consiste en fijar el gradiente de pérdida de carga por metro “R” (mm.c.a./m) constante a lo
largo de la red de cañerías, predimensionando de esta forma los  de cañerías.
Con esos resultados, se efectúa a continuación el cálculo de la bomba circuladora y por
último se verifica que se cumpla en cada circuito cerrado la ecuación fundamental de
equilibrio antes indicada: H =  (lr + leq) x R

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1.- Predimensionamiento de los  de la red de cañerías

El  de los tramos que comprenden la instalación se establece mediante un gráfico que
permite su determinación sobre la base del caudal de agua circulante (litros/hora) y el
gradiente de pérdida de carga “R” (mm.c.a./m), que se supone constante. Es decir que lo
primero a establecer es el gradiente de pérdida de carga “R”.

Para poder determinar el gradiente “R” constante, que permita el diseño de las cañerías, se
consideran dos variables:
a) La velocidad máxima de descarga de la bomba en la cañería, sobre la base de
que el nivel de ruido sea aceptable. En general, no conviene que esa velocidad
supere los 2 m/s, fijándose en la práctica velocidades de 0,40 a 0,80 m/s, con el
fin de lograr una circulación suficientemente rápida pero que no origine ruidos
molestos ni erosión en la red. Generalmente se toma una velocidad promedio:
0,50 m/s.
b) El caudal que transporta la cañería principal, el que surge de la fórmula:

C (l/h) = Q (Kcal/h) / 10

donde:
C = es el caudal transportado, en litros / hora.
Q = es la cantidad máxima de calor transportada, en Kcal/h.
10 = es un factor que surge de considerar un salto térmico en los radiadores de 10 °C.
(90 ºC a la entrada y 80 ºC a la salida de los mismos).

Con los datos de la velocidad de descarga de la bomba y el caudal de la cañería, mediante

el uso de un ábaco (Quadri, p.200), se establece un punto que define -además del  de la
cañería de salida de la bomba- el gradiente de pérdida de carga “R”, el que se supondrá
constante en toda la instalación.
Sobre ese punto se traza una recta de maniobra, correspondiente a “R” constante, sobre la
cual –y en función de los diversos caudales transportados por cada uno de los tramos de
cañerías considerados- se predimensionan los  de las mismas.

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2.- Selección de la bomba circuladora

Para determinar las características de la bomba circuladora, se deben conocer dos datos
fundamentales que son: caudal y presión necesarios.

- Caudal a transportar, en litros/hora: C (l/h) = Q (Kcal/h) / 10

- Presión manométrica o presión eficaz “H”, en mm.c.a./m. Se determina con la ecuación

fundamental:

H = (lr + leq) x R

donde:
H = presión manométrica de la bomba a instalar, en mm.c.a./m;
R = gradiente de pérdida de carga que se estableció como constante al efectuar el
predimensionado, en mm.c.a./m;
lr = longitud real del tramo de cañerías rectas que constituye el circuito más largo, en m;
leq = longitud equivalente de las resistencias individuales del circuito más largo cuyo 
hemos predimensionado, en m.

En la práctica, para instalaciones normales y por razones de economía de cálculo y

practicidad, se estima leq = lr, por lo tanto:

H = 2 x lr x R

Con estos valores de caudal (C) y presión manométrica (H) se pueden definir las
características comerciales de la bomba mediante la consulta de folletos técnicos, tablas,
curvas de rendimientos y capacidades, confeccionadas por los diversos fabricantes, en base a
pruebas experimentales.

El consumo eléctrico, o potencia de la bomba, está en función directa del caudal y presión
manométrica de la misma, de acuerdo a:

CV = H x Cs / 75 x 

HP = H x Cs / 75 x 

KW = H x Cs / 102 x 

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donde:

CV, HP o KW = potencia absorbida por la bomba (caballos o kw).

H = presión manométrica, en metros de columna de agua.
Cs = caudal de agua, en litros / segundo ó litros / hora x 3.600.
 = rendimiento del conjunto motor-bomba, que varía entre 0,40 y 0,60.

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3.- Verificación de los  de las cañerías

Consiste en determinar en cada circuito cerrado que se cumpla que

H   (lr + leq) x R

Para esto se trabaja con el ábaco antes indicado (Quadri, p.200), buscando el verdadero
valor del gradiente de pérdida de carga “R” (mm.c.a./m) a partir del caudal transportado por
cada tramo y el  predimensionado para él.
Por supuesto que estos valores no van a ser coincidentes con el gradiente provisorio –que
se supuso constante- y que sirvió de base para el predimensionamiento, por la aproximación a
 comerciales que se hace al comienzo del cálculo.

Por otra parte, se calculan las longitudes equivalentes (leq) en forma detallada, teniendo en
cuenta los accesorios de cada tramo, empleando para ello las tablas de longitudes equivalentes
ya indicadas.

Con esos valores y usando la fórmula fundamental para cada circuito, se establece la real
pérdida de carga o caída de presión, la que debe ser menor o igual a la presión de la bomba
circuladora.

De no cumplirse esta condición, debe corregirse el cálculo, aumentando o disminuyendo

alguno de los Ø, de modo de llegar a la solución más aproximada posible.

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