Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Confesiones
La primera infancia no la recuerda, en la niñez experimentó miserias y
engaños ya que se le proponía como norma del buen vivir obedecer a sus
preceptores que lo amonestaban para sobresalir en el arte de la palabra y
así alcanzar el renombre mundano. Si era perezoso en aprender le
pegaban, pero afortunadamente conoció a hombres que creían en Dios.
Su madre se preocupaba porque él conservara la fe y se fortaleciera en ella,
y aún así su bautizo fue aplazado. Durante su niñez no le gustaba leer, pero
sí le gustaba el latín, y leía todos los libros que tuviese en sus manos.
Le gustaba encontrar la verdad en todo, no le gustaba que lo engañaran y
tenía muy buena memoria.
En la adolescencia se descarrió y siempre trataba de saciar sus deseos y
pasiones más bajas, a los 16 años en lo único que pensaba era en fornicar