“HOMBRE DE DIOS, HUYE DE ESTAS COSAS”

TEXTO; 1ª. Timoteo 6:11.

INTRODUCCION:
*En este capitulo Pablo aconseja al joven Timoteo a mantenerse firme en
los principios cristianos y alude a cualquiera que enseña “otra cosa” y no se
mantiene firme en las sanas palabras, simplemente, el que enseña otra cosa,
está envanecido, esta muy enfermo por que delira acerca de tonterías,
contiendas y cosas carnales que lo único que producen serán frutos de la
carne; envidias, pleitos, blasfemias etc. A esta gente Pablo la cataloga
como “corruptos de entendimiento y privados de la verdad”, le aconseja al
joven Timoteo a apartarse de los tales. También le hace ver el valor de la
humildad y el contentamiento con lo que tenemos sea mucho o sea poco
(Salmo 50:15, Mateo 6:33, Hebreos 13:4).

EL AMOR AL DINERO:
*Advierte que una de las principales razones por las cuales muchos
creyentes y principalmente líderes se turban, se desvían y se arruinan en lo
espiritual es por amor al dinero, la avaricia, la rapiña, la codicia, por el dios
Mamón. Este es un rasgo característico de la sociedad actual; “amar más al
dinero que a Dios” es uno de los rasgos distintivo de la gente de este siglo,
el deseo de enriquecerse trae graves consecuencias; tentación, lazo,
necedad, daños y finalmente ruina total. Muchísimos por esta razón se
apartaron de Cristo y su alma fue gravemente herida, y otros se extraviaron
de la fe e hicieron un gran negocio con la fe a costa de perder su propia
salvación. La Biblia es enfática en señalar la gravedad del pecado de la
codicia (Salmo 119:36, Colosenses 3:5, Hebreos 13:5, 2ª. Pedro 2:14, 1ª.
Corintios 10:6).

“HUYE DE ESTAS COSAS”:

*Pablo, que consideraba a Timoteo no solo “un buen joven” sino “un
hombre de Dios” le aconseja a huir de estas cosas, ¿Qué cosas? La
palabrería, el envanecimiento, la codicia, el amor al dinero etc. Cosas de las
cuales también nosotros debemos huir. Los creyentes debemos ser valientes
y enfrentar problemas, situaciones, desafíos etc. Pero hay cosas de las
cuales es mejor huir que enfrentar (Génesis 6:5, Jeremías 17:9, Mateo
15:18-19) un dicho popular dice: “soldado que arranca sirve para otra
batalla”, los cristianos la mayoría de las veces buscamos las cosas de las
cuales debemos huir, y huimos de las cosas que debemos buscar, debe ser
todo lo contrario, “huyamos de estas cosas”. José huyó de la poderosa
tentación de una seductora mujer (Génesis 39:12), debemos a veces huir
del diablo (Éxodo 2:15), huir de hombres o hermanos malvados (2ª.
Samuel 15:14), huir de situaciones que pudieran dañar a nuestros hijos
(Mateo 2:13), huir de los que estorban la predicación del evangelio (Mateo
10:23), huir de la fornicación (1ª. Corintios 6:18), huir de la idolatría (1ª.
Corintios 10:14), huir de las pasiones juveniles (2ª. Timoteo 2:22), huir de
todo lo que nos pueda corromper (2ª. Pedro 1:4).

“SIGUE ESTAS COSAS”:

*No obstante Pablo recomienda Timoteo a seguir, buscar, ponerse como
meta etc. La piedad, la fe, el amor, la paciencia, la mansedumbre, o sea los
frutos del Espíritu Santo ¡como nos cuesta buscar las cosas de Dios¡
(Colosenses 3:1-2), nuestra prioridad debería ser buscar las cosas
espirituales de Dios antes que las materiales del mundo (Deuteronomio
4:29, Jeremías 29:13, Salmo 105:4) ; “buscad a Jehová mientras pueda ser
hallado, llamadle en tanto que esta cercano” Isaías 55:6, el señor Jesucristo
nos demanda buscar el reino de Dios y su justicia antes que todo (Mateo
6:33), debemos buscar estar en la casa de Dios (Salmo 27:4, Hebreos
10:25), buscar la paz con todos (Salmo 34:14, Hebreos 12:14), buscar lo
bueno (Amós 5:14), buscar la patria celestial (Hebreos 13:14), buscar el
bien del otro (1ª. Corintios 10:24), buscar la sabiduría (Proverbios 4:7) y
así muchísimos “buscad”, “buscad”, “buscad” etc.

CONCLUSION:
*Reconocer nuestras capacidades, virtudes, dones y talentos es
importantísimo porque así podemos ponerlos al servicio del señor y
enfrentar al diablo, superar las dificultades y hacer la obra de Dios, pero
también debemos estar concientes de nuestras debilidades, falencias y
flaquezas para que así nos cuidemos y huyamos o evitemos los peligros,
 tentaciones y cosas que nos pueden dañar, influenciar o arruinar; “el
avisado ve el mal y se esconde; Mas los simples pasan y reciben el daño”
Proverbios 22:3.