Carné B47706 Champeil-Desplats, V. (2010). El derecho a la cultura como derecho fundamental. Revista Electrónica Iberoamericana, 4 (1), 93-115.
Síntesis de lectura semana 3
El derecho a la cultura como derecho fundamental, de Champeil-Desplats (2010),
realiza un contraste entre las distintas escuelas filosóficas y jurídicas que han trabajado el término derecho a la cultura y el término derecho fundamental. Respecto el derecho a la cultura, el texto señala dos vertientes, (1) la universalista, nacida del espíritu de las Naciones Unidas, después de la Segunda Guerra Mundial, la cuál habla de valores compartidos a los que todas las personas deben tener acceso, y (2) la diferencialista, basada en la pluralidad cultural de los pueblos y a la que, pareciera ser por el papel que juega Claude Lévi-Strauss, es apoyada desde la Antropología. Respecto al derecho fundamental, se habla de este desde una lógica iusnaturalista, la tradición jurídico-filosófica que explica el origen del poder político con base en los derechos naturales, anteriores a la conformación del estado; y rescata a los derechos humanos inherentes y universales del individuo. Ahora, el texto considera que ambas definiciones del derecho a la cultura y el derecho fundamental presentan un problema axiomático, pues uno evoca a la colectividad, apuntando la vertiente diferencialista, mientras que otro hace referencia a los seres humanos como individuos, acercándose al universalismo. Sin embargo, la tención generada por estas definiciones es la que le permite al derecho fundamental a la cultura ser atribuida a todo sujeto de derecho. A partir de este punto el texto se dedica a dar ejemplos de tratados internacionales y políticas públicas nacionales de como se considera el derecho a la cultura, para concluir señalando que la fundamentalidad del derecho a la cultura dependerá del contexto, de la definición y del estatus jurídico que se le otorgue en cierto sistema específico. Después de leer este texto, no puedo evitar recordar la tesis de Barrantes Reynolds (2008), quién concluye que la persona de los derechos humanos, como constructo teórico, es un vacío que se convierte en un paradigma, dependiendo de quién y cómo lo esté llenando. Finalmente la ley y los tratados internacionales, parecieran depender únicamente de la interpretación que se hace de estos, pues no existe un consenso respecto a cuál debe ser la episteme que se sobreponga al resto. Además esto último nunca debería suceder, puesto que si pasara nos encontraríamos con sistema autoritario. Finalmente, respecto al texto, concluyo que es un texto oscuro, complicado de leer, que realmente no me explica con claridad la construcción epistémica del derecho a la cultura o el derecho fundamental. Siento que lo intenta, pero es mucha Jimena Víquez Monge Carné B47706 Champeil-Desplats, V. (2010). El derecho a la cultura como derecho fundamental. Revista Electrónica Iberoamericana, 4 (1), 93-115.
información en muy poco espacio y su conclusión termina siendo relativista, pero en
un sentido que no me termina de parecer constructivo, icluso un relativismo determinista, si es que esto puede exitir, es decir, como si la interpretación del derecho ya estuviera determinada a partir del contexto en el que se interprete. Considero que estas concepciones de derecho son un producto cultural de la construcción de la idea de derecho que hemos hecho en occidente, basada o en el iusnaturalismo, o en el iuspositivismo, como si no existiera ninguna otra opción. Y es justo a partir de esta reflexión que me es inevitable pensar en la pluralidad cultural. En otras palabras, siento que el texto solo explora el fenómeno del derecho a la cultura como un derecho fundamental desde la construcción occidental de la teoría jurídica, lo que me genera sospecha y me hace preguntarme por la construcción del sujeto de derecho desde otras perspectivas culturales. Es aquí cuando me doy cuenta que a pesar de lo anterior, el texto si me atravesado, pues puedo comprender a mi posicionamiento como diferencialista, porque me parece que las respuestas no las vamos a encontrar debatiendo los mismos argumentos que pertenecen a nuestra óptica, como un uróboro, sino que incluyendo la otredad y las distintas visiones que pueden tener otras construcciones culturales sobre este problema.
Fuentes
Champeil-Desplats, V. (2010). El derecho a la cultura como derecho fundamental. Revista
Electrónica Iberoamericana, 4 (1), 93-115.
Barrantes Reynolds, M. P. (2008). El Fundamento Ideológico de los Derechos
Humanos. Crítica ideológica al discurso de la Corte Interamericana de Derechos Humanos [Tesis de Grado para optar por el Título de Licenciada en Derecho]. Universidad de Costa Rica.