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TRASTORNO DE

CONDUCTA/
PSICOPATÍA
INFANTO-JUVENIL

DSM V
• El TC aparece clasificado en el DSM-5 bajo el
epígrafe «Trastornos perturbadores, del control
de impulsos y de conducta», junto con el
trastorno negativista desafiante (TND), el
trastorno explosivo intermitente, el trastorno
antisocial de la personalidad (TAP), la
piromanía, la cleptomanía y otros trastornos
perturbadores, del control de impulsos y de
conducta especificados y no especificados.
• Engloba aquellos trastornos que presentan
déficit en el control emocional y
comportamental que, a diferencia de los
trastornos de otras categorías con déficits
similares, se manifiestan en conductas que
violan los derechos de los demás y/o conducen
al individuo a conflictos significativos con
normas sociales o figuras de autoridad.
• La característica esencial del TC es un patrón de comportamiento repetitivo y
persistente en el que se violan los derechos básicos de otras personas o normas
sociales que se consideran adecuadas para la edad del individuo y que provoca
una interferencia clínicamente significativa en algún área (social, académica o
laboral).
• Se define por la presencia de tres (o más) criterios de un total de quince que
deben haber estado presentes durante los últimos doce meses, de los cuales uno
en los últimos seis.
• Los quince criterios se clasifican en cuatro categorías de comportamientos
generalizados:
1. agresión a personas y animales;
2. destrucción de la propiedad;
3. fraudulencia o robo, y
4. violaciones graves de normas.
• Dada la gran heterogeneidad de los comportamientos de las
personas con TD, el DSM-IV-TR contemplaba dos
especificadores: edad de inicio y gravedad. El DSM-5 los
mantiene y añade uno nuevo. El especificador edad de inicio
distingue los subtipos infantil o adolescente.
• La característica diferenciadora es que al menos uno de los
criterios del TD empiece antes de los 10 años de edad. El DSM
5 añade un nuevo subtipo, denominado “no especificado”,
para aquellos casos en los que resulta difícil determinar la edad
de inicio del primer síntoma.
• Esta diferenciación tiene que ver con la consistente evidencia
sobre la asociación entre un inicio temprano de problemas de
conducta y comportamiento antisocial persistente a lo largo
del ciclo vital.
• El TD de inicio infantil parece
estar más relacionado con
persistencia de los problemas
de conducta, con disfunción e
inestabilidad familiar, con
problemas temperamentales,
con déficits neuropsicológicos
y cognitivos, y con cierta
vulnerabilidaddad genética.
• El TD de inicio adolescente se
relaciona con más niveles de
rebeldía y mayor rechazo de las
normas convencionales.
• Presenta asociaciones más débiles
con factores familiares negativos y
problemas temperamentales y
cognitivos, menor riesgo genético
y generalmente se debe a formas
negativas de aprendizaje social en
el grupo de iguales.
• La principal novedad del DSM-
5 es la aparición del
especificador con emociones
prosociales limitadas.
• Esta etiqueta da cuenta de los
rasgos “dureza e insensibilidad
afectiva” (DIA), características
que han mostrado relativa
estabilidad a través de la
infancia y la adolescencia, que
tienden a estar asociadas con
problemas de conducta más
graves, delincuencia o agresión,
que presentan mayor
heredabilidad y que muestran
una peor respuesta al
tratamiento.
• TC puede detectarse a partir de la edad preescolar y puede ser diagnosticado incluso en la
edad adulta. Sin embargo, los síntomas más relevantes suelen aparecer en el período
comprendido entre la mitad de la infancia y la mitad de la adolescencia, siendo poco
habitual que aparezcan después de los 16 años.
• En los casos de inicio más temprano es frecuente que vaya precedido por un diagnóstico
de TND
• Los niños y adolescentes con TD con y sin rasgos DIA difieren en sus características
emocionales, cognitivas y de personalidad.
• Todo ello le convierte en un especificador clínicamente relevante.
• Las cuatro características descriptoras del especificador son:
A. Ausencia de remordimiento o culpa.
B. Dureza-falta de empatía
C. Despreocupación por el rendimiento
D. Afecto superficial o deficiente
A U S E NC I A D E
R E M O R D I M I E NT O O
C U L P A:

• La persona no se siente
mal o culpable cuando
hace algo incorrecto
(excluir el
remordimiento cuando
se manifiesta solo si es
descubierta y/o ante la
posibilidad de recibir un
castigo).
• Muestra una ausencia
total de preocupación
por las consecuencias
negativas de sus acciones
DUREZA-FALTA DE EMPATÍA:

• La persona no tiene en cuenta y no se


preocupa por los sentimientos de los demás.
• Es descrita como fría e insensible.
• Se muestra más preocupada por los efectos de
sus acciones sobre sí misma que sobre los
demás, incluso cuando producen un daño
sustancial a otros.
DESPREOCUPACIÓN POR
EL RENDIMIENTO:

• La persona no muestra preocupación por un


rendimiento bajo/problemático en la escuela,
en el trabajo o en otras actividades
importantes.
• No se esfuerza lo suficiente para conseguir un
buen rendimiento, incluso cuando las
expectativas puestas en el mismo son
evidentes, y generalmente culpa a otros de su
pobre desempeño.
AFECTO SUPERFICIAL O
DEFICIENTE:

• La persona no expresa sentimientos o no


muestra emociones a los demás, excepto
de una forma que parece superficial o poco
sincera, o cuando dichas expresiones se
utilizan para obtener alguna ganancia.
• Para indicar este especificador, deben haberse manifestado dos (o más) características de
manera persistente durante al menos 12 meses y en relaciones y contextos múltiples.
• Son necesarias múltiples fuentes de información para evaluar los criterios del
especificador.
• En general, el TD presenta ciertas dificultades inherentes a su definición o criterios
diagnósticos.
Primero, el hecho de que niños/as y adolescentes estén en fase de desarrollo puede
dificultar discernir si el problema es lo suficientemente persistente para justificar un
diagnóstico.
Segundo, todos los niños/as y adolescentes desobedecen en algún momento de su vida.
• Los comportamientos aislados son comunes y los actos antisociales específicos pueden
ocurrir en un alto porcentaje de menores, siendo signos normales del desarrollo si se dan
de manera infrecuente y no violan los derechos de los demás.
• Tercero, el contexto social en el que
viven niños/as y adolescentes
influye en su comportamiento. En
estos casos, el diagnóstico de TD
puede estar aplicándose
incorrectamente a personas cuyos
comportamientos son de
protección o de supervivencia
dentro de un determinado
contexto cultural.
• Cuarto, si tenemos en cuenta que
considerarse culpable puede reducir
o evitar un castigo, la evaluación de
la autenticidad del remordimiento
experimentado se ve dificultada.
CARACTERÍSTICAS:

a) Hiporreactividad sensorial y patrones de búsqueda intensos, junto con


hiperactividad motora. Quienes padecen TD tienden a conductas de riesgo y, si
existe deprivación emocional, a patrones antisociales.
b) Escaso o nulo desarrollo de la capacidad de empatía, presentando dificultad
para comprender los sentimientos y deseos de los otros, ausencia de
sentimientos de culpa y remordimiento.
c) Alteraciones en el establecimiento de vínculos y de compromiso afectivo.
d) Dificultades en el control de los impulsos, sobre todo de los agresivos,
expresándose de manera intensa, inmoderada y sin mayor análisis de los
elementos de la situación.
e) Intolerancia a la frustración , con dificultad para postergar la gratificación más
inmediata de las propias necesidades , deseos o requerimientos.
f) Irritabilidad, temperamento explosivo y actitud
desconsiderada con los otros .
g) Deficiencias en su desarrollo moral, se
manifiesta en su expresión leve, en la presencia
de mentiras, conductas de robo, vandalismo,
abuso sexual, sadismo y desconsideración por
el otro.
Estos comportamientos patológicos provocan
serias dificultades en el desenvolvimiento social,
académico y ocupacional de quienes las presentan
y pueden manifestarse en una variedad de
contextos como el familiar, el educacional y/o
comunitario.
Los individuos agresivos con TC tienden a percibir erróneamente las intenciones de los demás,
fundamentalmente en situaciones ambiguas, las interpretan como más hostiles y amenazadoras de lo
que son en realidad y responden con agresiones que considera razonables y justificadas.
Entre las características de personalidad frecuentemente asociadas se encuentran rasgos de
emotividad negativa y pobre autocontrol que incluyen:
a. escasa tolerancia a la frustración,
b. irritabilidad,
c. explosiones de ira,
d. desconfianza,
e. insensibilidad al castigo,
f. búsqueda de sensaciones e
g. imprudencia
FACTORES PARTICIPANTES EN LA
PRESENTACIÓN DEL TRASTORNO.

Factores Causales o de Riesgo


FACTORES INDIVIDUALES:

a) Mayor vulnerabilidad a este trastorno en niños considerados de temperamento difícil.


b) Antecedentes de lesiones prenatales o posnatales.
c) Diferencias en su presentación de acuerdo al sexo: el TC de inicio en la infancia es más común
en varones, con comportamientos de agresión más abiertos y con confrontaciones ( peleas
físicas, vandalismo). Las niñas presentan conductas de tipo no confrontacional (mentiras,
fugas, uso de sustancias, prostitución) .
d) Respecto de la relación entre variables evolutivas y manifestaciones sintomáticas ,estas variarán
con la edad, con la progresión del crecimiento físico, desarrollo sexual y evolución del
desarrollo cognitivo.
e) Las conductas de menor severidad aparecerían primero ( mentiras, robos de objetos sin mayor
valor.
f) Las conductas de mayor gravedad aparecerían más tarde (asalto y robo).
FACTORES COGNITIVOS:

• Disfunción Ejecutiva: Bajo nivel de


logro, comprometen el aprendizaje, la
aplicación de normas y límites, el
razonamiento abstracto, la resolución
de problemas, la auto observación,
inhibición de respuestas inadecuadas y
la identificación de acciones previas
para lograr un objetivo.
• Déficits verbales: bajo puntaje en la
escala de habilidad mental.
FACTORES FAMILIARES:

• Mayor riesgo en niños con padres biológicos o adoptivos con trastornos de personalidad
antisocial; con padres biológicos con dependencia al alcohol, con antecedentes de TDAH,
o trastorno de conducta TC, trastornos del estado de ánimo o trastornos psicóticos.
• Las características de la dinámica familiar son determinantes en la presentación del
trastorno.
a. Rechazo afectivo o negligencia parental
b. Abuso físico o sexual hacia el niño = conductas agresivas o violentas
c. Cambios frecuentes de las personas a cargo del cuidado del niño e institucionalización
temprana.
d. Tamaño de la familia
e. Familias en cuyo proceso de socialización están presenten conductas delictivas.
f. A diferencia de TOD , en el TC no se observa en los padres una vinculación estrecha,
dependiente o simétrica; se aprecia una relación más desligada, desapegada y utilitaria.
FACTORES
SOCIOCULTURALES:

• Se observan con mayor frecuencia en niveles


socioeconómicos de extrema pobreza, en
supervivencia para la persona.
• Asociación con un grupo pares delincuentes.
• Ausencia de figuras familiares prestigiosas de
identificación.
• Imitación de modelos que muestran
comportamientos agresivos y antisociales: en
la familia, entre pares, medios de
comunicación.
CONDICIONES ASOCIADAS:

• Autoestima disminuida, inclusive bajo la proyección de una imagen de gran fortaleza.


• Rendimiento intelectual bajo el promedio = dificultades en el aprendizaje y/o habilidades
comunicacionales.
• Niños con comportamientos agresivos muestran una tendencia a percibir el mundo en términos
más hostiles.
• Presencia de ideas e intentos de suicidio consumados en mayor proporción de lo esperado.
• En niños, asociación con TDAH, trastornos ansiosos, del ánimo, abuso de sustancias.
• Presentación de un alto índice de lesiones físicas por accidentes o peleas.
• Consumo temprano de tabaco, alcohol o de sustancias ilegales ; comportamiento sexual precoz.
• Problemas legales, enfermedades de transmisión sexual y/o embarazo y paternidad temprana.

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