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THE CAMBRIDGE HANDBOOK OF HUMAN nuevo campo de investigación, la «com-


AFFECTIVE NEUROSCIENCE. putación afectiva», que pone en relación
Preparado por Jorge Armony y Patrik Vuilleumier. emociones y otros fenómenos afectivos. La
Cambridge University Press; Cambridge, 2013. base de este tipo de computación reside en
el establecimiento de modelos fundados
en indicaciones psicológicas y neurocien-
tíficas. Armony, por ejemplo, propone un
modelo conexionista computacional de
condicionamiento del miedo, delimitado
por lo que se sabe sobre la neuroanatomía
y neurofisiología del aprendizaje del mie-
do; en particular, mediante la modeliza-
ción de las vías corticales y subcorticales
Cognición emocional hasta la amígdala.
Pero ¿qué es una emoción? A imagen
Neurociencia de la afectividad de lo que clásicamente se dice del tiempo,
todos saben qué es una emoción hasta

D irigido por Jorge Armony y Patrik


Vuilleumier, dos reconocidos exper-
tos en mecanismos cerebrales del proce-
con especial atención al miedo, a partir
de estímulos visuales (por ejemplo, la
expresión facial). Hoy el estudio de las
que se les pide una definición. Las de-
finiciones de emoción varían no solo en
función de la disciplina, sino también a
samiento emocional y neuroimagen de emociones cubre diversas modalidades lo largo de la historia y a través de las
la cognición, respectivamente, y escrito sensoriales, procesos, interacciones con culturas. Los griegos la llamaban pathos.
por jóvenes investigadores, este manual otros sistemas y diferencias individuales. Para Aristóteles, la emoción era aquello
representa un hito en la evolución del De intento se ha dejado aquí de lado las en razón de lo cual las personas cambia-
pensamiento sobre el papel de las emo- emociones en el reino animal, lo que no ban y diferían en sus juicios y de lo cual
ciones en la mente. El propio panorama significa minusvalorar su importancia. De esperaban dolor o placer. Esta definición
abarcado constituye un testimonio de la hecho, numerosas aportaciones obtenidas ejerció una gran influencia; amén de su-
madurez del campo. La emoción ha en- de experimentos con animales han per- gerir un vínculo entre emoción y juicio,
trado ya en el núcleo temático de la antro- mitido perfilar el cuadro en cuyo interior contenía también la dimensión que hoy
pología y la neurociencia, la inteligencia se ha desarrollado la neurociencia de las incorporan los modelos: la valencia, es
artificial y la filosofía. emociones. decir, dolor y placer. LeDoux subraya hoy
Desentrañar la emoción humana y los Desde su emergencia en los años no- que las emociones no pueden ser incons-
mecanismos que subyacen a su genera- venta del siglo pasado, la neurociencia cientes, pues están cargadas de afecto y
ción o expresión ha constituido una preo- de la afectividad ha extendido su campo estados de consciencia que se experimen-
cupación intelectual durante milenios. de interés científico. No se ciñe a las emo- tan subjetivamente. Las emociones son
Pero su estudio científico, en particular ciones, sino que abarca otros fenómenos estados de consciencia. Neurológicamen-
desde el punto de vista de la biología, es afectivos (talante, preferencias y disposi- te, se trata de un conjunto de respues-
muy reciente; sobre todo, si lo compara- ciones). Así, suele definirse la neurocien- tas que proceden de partes del cerebro
mos con la visión, el lenguaje, la atención, cia afectiva en relación a la neurociencia a estímulos corporales, y de partes del
la memoria u otros procesos mentales. cognitiva. En última instancia, la razón cerebro a otras zonas del mismo.
Pese a tal arranque tardío, el enfoque neu- postrera de la importancia creciente de la Dentro de la propia categoría de emo-
rocientífico de las emociones ha experi- neurociencia cognitiva hay que buscarla ción caben diferentes tipos. Descartes dis-
mentado un desarrollo espectacular a lo en el reconocimiento de que las emocio- tinguía seis emociones primarias: admi-
largo de los últimos diez años. Y hemos nes entran en el ámbito de los conceptos ración, amor, odio, deseo, gozo y tristeza.
asistido al nacimiento de una nueva dis- y métodos propios de la neurociencia cog- Admitía que las demás se reducían a estas
ciplina: la neurociencia de la afectividad. nitiva para constituir una neurociencia o eran una combinación de las mismas.
Los resultados cosechados se deben en cognitiva de las emociones. Podemos re- Ahora, el grupo básico, capítulo obliga-
buena medida a los importantes progre- cordar, por botón de muestra, las interac- do de toda investigación neurocientífica
sos en el empleo de técnicas de neuroima- ciones entre emoción y atención, y entre sobre las emociones, está integrado por
gen no invasivas: tomografía por emisión emociones y toma de decisiones. el miedo, el disgusto, la angustia, la frui-
de positrones (PET), electroencefalografía Herbert Simon y Marvin Minsky, pio- ción o gozo, la tristeza y la sorpresa. Cada
(EEG), magnetoencefalografía (MEG) y, neros en inteligencia artificial, han desta- emoción presenta su propia singularidad
en particular, resonancia magnética fun- cado el papel de las emociones dentro de característica, que se fue alcanzando y de-
cional (fMRI), junto con refinamientos en la exposición de modelos de mente. Para finiendo a lo largo de la evolución. Buena
métodos más tradicionales (estudio de le- Minsky, no se trata de si las máquinas inte- parte de la investigación acometida en los
siones, medidas de conducta y registros ligentes pueden presentar emociones, sino últimos diez años sobre neurociencia de la
fisiológicos). de si puede haber máquinas inteligentes afectividad se ha centrado en la búsqueda
Apoyada en la investigación fisiológica sin emociones. Esa perspectiva visionaria, de los sistemas cerebrales que subyacen
que la había precedido, la neurociencia de acuerdo con la cual las emociones de- bajo cada una de las emociones, valién-
de la afectividad comenzó centrándose ben modelarse en inteligencia artificial, dose de disociaciones neuropsicológicas
en las denominadas emociones básicas, fue determinante para la creación de un y de las técnicas de neuroimagen.

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Una división común parte las emocio- es el yo, no el episodio desencadenante. sica de las emociones que consideramos
nes en positivas y negativas. El motivo Uno puede sentirse avergonzado de uno hoy clásicas (la existencia del sistema lím-
discriminante estriba en el componente mismo y sentir miedo de una serpiente. bico) constituyó una reacción a una expo-
sensorial de la emoción: si produce pla- Parece indicado que en este contexto se sición muy controvertida y específica de
cer, se dice que es una emoción positi- estudien también emociones tales como las emociones, la teoría de James-Lange.
va; si desagrado, una emoción negativa. la humillación, la gratitud, la envidia y Esta tesis se fundaba sobre el marco ge-
Aunque a veces ante un mismo aconteci- los celos. Estas emociones autoconscien- neral que era habitual en las teorías pro-
miento pueden darse, a un tiempo, sen- tes (o morales) han recibido creciente puestas por James (1884) y Lange (1885),
saciones de gozo y dolor. Por ejemplo, la atención en neurociencia de la afectivi- para quienes las emociones eran cambios
relación sexual puede considerarse posi- dad. Se habla también en este caso de corporales subsecuentes a la percepción
tiva porque produce placer, pero puede emociones sociales y sirven para regular de un hecho excitante; en concreto, nues-
considerarse también negativa si entra la conducta social. tra sensación de dichos cambios conforme
en conflicto con las convicciones morales Ciertas emociones (interés, confusión, van aconteciendo definía la emoción. En
del sujeto. En razón de si la emoción es sorpresa, apercibirse) se relacionan con el 1894, Exner sugería un centro de proce-
positiva o negativa se activan diferentes conocimiento y el aprendizaje, motivo por samiento de la aversión en el cerebro; en
sistemas cerebrales. Se ha investigado, en el cual se denominan a veces emociones el mismo año, Freud avanzaba la teoría
ese sentido, qué mecanismos cerebrales epistémicas. Así, la emoción «interés» de la red neuronal sobre la memoria emo-
participan en un sistema de dolor/aver- desempeña un papel clave en la explo- cional y en 1907 Waynbaum introducía el
sión y cuáles en un sistema de placer/re- ración, el aprendizaje, el desarrollo del centro cerebral de las emociones.
compensa. La red del dolor constaría del conocimiento y el desarrollo de la capa- La teoría neurocientífica de Cannon
córtex cingulado anterior dorsal, la ínsu- cidad en muchos dominios. Por su parte, en 1927 sobre las emociones apuntaló las
la, el córtex somatosensorial, el tálamo las emociones se desencadenan típica- bases para los debates contemporáneos
y la materia gris periacudúctea. Por su mente cuando las personas se entregan sobre el respectivo rol del sistema ner-
parte, la red de recompensa la integra- a la contemplación de obras de arte o se vioso central y del sistema nervioso pe-
rían el área tegmental ventral, el estriado extasían ante fenómenos de la naturale- riférico en las emociones. En 1937, Papez
ventral, el córtex prefrontal ventromedial za. Cuasiemociones se supone que son los produjo la primera propuesta explícita
y la amígdala. Se disputa si la oposición sentimientos aflorados en las intrigas de de un circuito cerebral como mecanismo
entre emociones positivas y emociones la ciencia ficción y en la creación literaria de la emoción, agregándole el hipocampo
negativas se funda en la asimetría esféri- o cinematográfica. Se produce entonces la y el córtex cingulado. En 1952, McLean
ca funcional; en el hemisferio izquierdo paradoja de la ficción, cuando el mons- propuso un concepto que ejerció suma
habría un centro para los sentimientos truo que aparece en la pantalla provoca influencia en el campo: el sistema límbi-
positivos, y en el derecho, otro para los un sentimiento de miedo parecido al que co; incluyó la amígdala en este sistema.
sentimientos negativos. En particular, se se presenta cuando nos hallamos ante un Sin embargo, la idea de sistema límbico
habla de la hipótesis del hemisferio dere- peligro real. como base unitaria del cerebro emocio-
cho, según la cual todos los mecanismos El período que resultó determinante nal ha recibido críticas duras. Aunque la
relacionados con la emoción se hallarían para la génesis y el desarrollo de las cien- teoría talámica, el circuito de Papez y el
más lateralizados en ese hemisferio. cias de la afectividad fue la segunda mitad sistema límbico han dejado de ser con-
Un ejemplo típico de otra distinción, del siglo xix. La mayoría de los modelos siderados modelos predominantes de la
basada en el tipo de objeto que desenca- pueden retrotraerse a esa época y a los emoción basados en el cerebro, tuvieron
dena la emoción, corresponde a las emo- escritos de Darwin, Dewey, Irons, James, una influencia crítica en lo que se deno-
ciones autorreflexivas: vergüenza, pertur- Lange, Spencer y Wundt, por citar solo al- minó neurociencia afectiva unos decenios
bación, culpa u orgullo. Propio de esta gunos de los estudiosos más notables. De posteriores.
categoría es el que el objeto de la emoción hecho, la exposición neurocientífica clá- —Luis Alonso

DISCOVERY AND CLASSIFICATION IN


ASTRONOMY. CONTROVERSY AND
CONSENSUS
A poyado sobre los fundamentos esta-
blecidos por Martin Harwit en Cos-
mic discovery: The search and heritage of
Por Steven J. Dick. Cambridge University Press; astronomy, hace más de 30 años, Steven J.
Cambridge, 2013. Dick nos ofrece en el libro de cabecera una
documentada exposición histórica de la
astronomía observacional desde comien-
zos del siglo xvii, al tiempo que se aden-
tra en el terreno de la filosofía de la cien-
cia para arrojar luz sobre los conceptos
Epistemología de descubrimiento y clasificación, moto-
res del desarrollo de la disciplina. Descu-
y astronomía brimiento y clasificación van de la mano.
Estructura metacientífica La clasificación ha resultado determinan-
de descubrimientos y clasificaciones te para el desarrollo de la química (tabla

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periódica), de la física (modelo estándar) cial de la ciencia, de manera muy sig- nowitz anunciaron el descubrimiento de
y, sobre todo, de la biología (con sus cin- nificativa desde Herschel. Aparte de su 2003 UB313, un cuerpo transneptuniano
co reinos y tres dominios). Aunque abar- descubrimiento de Urano en 1781 y de que denominaron Xena y recibió luego el
ca desde la observación de los satélites de haber acuñado el término asteroide para nombre oficial de Eris. Este parecía lige-
Júpiter, anillos de Saturno y cúmulos este- la nueva clase de objetos hallada en 1801, ramente mayor que Plutón en extensión
lares hasta las nebulosas de William Her- el barrido de los cielos que realizó con y masa. A los pocos meses, Brown y sus
schel y los descubrimientos modernos de sus grandes telescopios reveló un núme- colegas anunciaron que Eris tenía un sa-
cuásares y púlsares, toma por caso para- ro elevado de nebulosas, que él percibía télite, más tarde denominado Disnomia.
digmático el asunto Plutón. en diverso estado de desarrollo. ¿Era Eris el décimo planeta o acaso Plutón
Harwit se había propuesto un doble El descubrimiento de Plutón en 1930 no era un planeta? Y, puesto que se supo
objetivo: determinar qué campos de la no significó ninguna innovación radical, pronto de la existencia de numerosos ob-
astronomía tienen el mayor número de pues se le supuso perteneciente a la cla- jetos similares allende Plutón, ¿qué esta-
descubrimientos potenciales y explorar se de los planetas. Después de todo, el tuto había que concederles?
qué campos de la astronomía podrían hallazgo llegó tras una búsqueda delibe- Intervino la UAI. Owen Gingerich
propiciar los avances más inmediatos rada a raíz de una predicción específica, distinguía dos tipos de aproximaciones
y las recompensas más prometedoras. predicción que hoy sabemos carente de a la definición de planeta: dinamicistas
Buceó en la historia para responder a fundamento. Tampoco el descubrimiento y estructuralistas. Los primeros se cen-
tales cuestiones, tomando como eje de en 1978 de Caronte, la primera luna de traban en las interacciones entre Plutón
su inquisición la idea de descubrimiento. Plutón, constituyó una nueva clase de y otros cuerpos; los segundos atendían a
Dick reconoce también una deuda par- objetos, sino que se limitó a añadir un la naturaleza física de Plutón y de otros
ticular con Norwood Russell Hanson y miembro más a la clase de satélites cuyo objetos similares. Era obvio que se nece-
Thomas Kuhn. El primero es conocido establecimiento comenzó con el hallazgo sitaba un discriminante físico claro, no
por sus Patterns of discovery (publicado galileano, Luna terrestre aparte, de las una línea divisoria artificial. Tras no pocos
originalmente en 1958, se tradujo al es- lunas de Júpiter. Ahora bien, al permitir tanteos, se llegó a la siguiente conclusión:
pañol en 1977), donde elaboraba su tesis el cálculo de la masa de Plutón, Caronte planeta es aquel cuerpo celeste que gira
central de observaciones cargadas de teo- marcó el inicio de la degradación del es- en órbita alrededor del Sol, presenta masa
ría: lenguaje de la observación y lenguaje tatuto planetario de aquel: con la simple suficiente para que su autogravedad venza
de la teoría se encuentran inextricable- aplicación de las leyes de Kepler para dos las fuerzas de cuerpo rígido, de suerte que
mente entrelazadas, igual que se hallan cuerpos en órbita, la masa resultante era adquiera una forma de equilibrio hidros-
entrelazados la interpretación histórica de solo 1/400 de la masa de la Tierra y un tático (casi redonda) y encuentre libre la
y la contemporánea de los fenómenos. diámetro mucho menor que el de nuestra vecindad inmediata de su órbita. Había
Su ensayo póstumo «An anatomy of dis- Luna. James W. Christy se percató de que ocho planetas: Mercurio, Venus, la Tierra,
covery», publicado en 1967 en Journal las imágenes de Plutón aparecían elonga- Marte, Júpiter, Saturno, Urano y Neptu-
of Philosophy, constituye el punto de das, mostrando un sutil alargamiento me- no. Se concluía también que un planeta
partida canónico del que han arrancado ridional en abril y un ligero alargamiento enano es un cuerpo celeste que gira en
cuantos se han acercado a la cuestión. septentrional en mayo. ¿Tenía Plutón una órbita alrededor del Sol, tiene masa su-
A Kuhn, famoso por sus paradigmas y luna? La existencia de Caronte, que así ficiente para que su autogravedad venza
revoluciones científicas, le debe la idea de se llamó, quedó plenamente confirmada las fuerzas de cuerpo rígido, de suerte que
que el descubrimiento es un proceso pro- en 1980. En 2005, los astrónomos del Te- adquiera una forma de equilibrio hidros-
longado, según detalla en The structure lescopio Espacial Hubble anunciaron el tático (casi redondeada), pero no se halle
of scientific revolutions. Lo cierto es que descubrimiento de otras dos lunas exte- libre la vecindad de su órbita ni sea un
la mayor parte de la ciencia no se forja riores, llamadas Hydra y Nix, a las que satélite. Por fin, el resto de los objetos,
con revoluciones, sino con hallazgos. El se sumó un cuarto satélite en 2011 y un exceptuados los satélites, se denominarán
descubrimiento constituye un proceso ex- quinto en 2012. «cuerpos menores del sistema solar». La
tenso y complejo, que no consiste solo en A comienzos de los años noventa, el UAI resolvió que Plutón era un planeta
la detección, sino también en la interpre- estatuto de Plutón empezó a tambalearse. enano, de acuerdo con la definición an-
tación y niveles diversos de comprensión Los astrónomos encontraron una varie- tedicha. Y al poco establecería que todos
subsiguiente a la interpretación. dad de objetos más allá de Neptuno, en los planetas enanos con órbita trans-
El 24 de agosto de 2006, la Unión As- una zona que dista entre 30 y 55 unidades neptuniana se denominarían «plutoides».
tronómica Internacional (UAI) —la ins- astronómicas del Sol, conocida por cin- Integraban esa categoría Plutón, Haumea,
titución que determina la designación turón de Kuiper o cinturón de Edgewor- Makemake y Eris.
oficial de un cuerpo celeste— rebajaba th-Kuiper. Algunos objetaban que por Teniendo delante semejante y rica
el estatuto de Plutón, descubierto en aquellas fechas no se sabía lo suficiente historia de una clase de objetos, pode-
1930, a la categoría de planeta menor. sobre el cinturón de Kuiper para afirmar mos imaginarnos qué cabe esperar de la
Tal degradación, al tiempo que obligaba que Plutón era un cuerpo de ellos, desde revisión histórica de otras clases de ob-
a corregir todos los manuales de astro- el propio diámetro: mientras que el de jetos astronómicos descubiertos a lo lar-
nomía, desencadenó un interesante de- Plutón se acercaba a los 1200 kilóme- go de los últimos 400 años: planetas, es-
bate metacientífico sobre el particular. tros, el tamaño de 1992 KB1 se estimaba trellas y galaxias. Los dos primeros son
La cuestión de Plutón puso de relieve en solo 200 kilómetros. Pero en julio de conocidos desde la antigüedad, habida
que las clasificaciones, lejos de ser un 2005 se produjo un hecho decisivo. Mi- cuenta de que uno de los aspectos más
asunto irrelevante, forman parte esen- chael Brown, Chad Trujillo y David Rabi- obvios del firmamento nocturno es que

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los planetas («errantes», en griego) se cercana —que no fuera nuestro Sol— in- llas fijas, el reino de las galaxias tenía que
distinguen de un fondo de estrellas fijas. vierte 4,2 años. descubrirse. Algunos de sus miembros se
El dominio de las galaxias no quedó de- Para determinar la verdadera natu- habían detectado mucho antes de que se
finitivamente acotado hasta la obra de raleza de una estrella se necesita cono- supiera de su existencia fuera del sistema
Edwin Hubble en los años veinte del si- cer no solo su espectro, sino también su solar. A simple vista, podían observarse
glo pasado. Las lunas de Júpiter y los magnitud absoluta, a partir de la cual se Andrómeda y las Nubes de Magallanes. A
anillos de Saturno constituyeron los pri- determina su brillo o «luminosidad». Eso principios del siglo xx reinaba todavía mu-
meros ejemplos de lo que se convertiría requiere un conocimiento de las distan- cha inseguridad sobre la existencia real de
un lugar común en astronomía: «ver» cias estelares, que tenían que determinar- objetos extragalácticos. Se suponía que el
no es siempre «conocer», ni «detección» se a través de los movimientos propios o universo entero era nuestra galaxia. En el
implica «descubrimiento»; es decir, que establecerse a través de paralajes trigono- primer tercio de esa centuria, Hubble ha-
el reconocimiento de una nueva clase de métricas. A lo largo de la segunda mitad bía clasificado las galaxias en tres o cuatro
objeto astronómico puede ser una difí- del siglo xix y primera mitad del siglo xx, grupos. Distinguió también los primeros
cil tarea en la que intervengan muchos el avance de la técnica posibilitó el descu- miembros del Grupo Local. Por los años
factores. Allende la órbita de Neptuno brimiento de nuevas clases de estrellas. treinta, el atlas galáctico de Shapley y
(descubierto en 1846), fueron aparecien- En un comienzo, se dispusieron de acuer- Ames mostraba que el Grupo Local forma-
do miles de objetos. do con las peculiaridades de sus líneas ba parte, a su vez, del cúmulo de Virgo, que
Si el descubrimiento del dominio de espectrales, pero luego se ordenaron de contiene más de un centenar de galaxias
los planetas fue difícil, en el reino de las acuerdo con su tamaño y luminosidad. (hoy sabemos que son más de 2000), que
estrellas las dificultades se multiplica- Se corrieron así las primeras etapas ha- abarcan más de 10 millones de años luz.
ron. Mientras que Plutón, que represen- cia el descubrimiento de enanas y gigan- En el meridiano del siglo, Gerard de Vau-
taba la frontera del sistema solar cono- tes entre 1905 y 1913, supergigantes en couleurs reunía pruebas del Supercúmulo
cido en 1930, se halla a unas 40 veces la 1917, subgigantes en 1930 y subenanas Local, que contenía al menos 50 cúmulos
distancia de la Tierra al Sol (40 unidades en 1939. Cada una de esas estrellas tiene galácticos que abarcaban 110 millones de
astronómicas), la estrella más cercana su propia historia de descubrimiento y años luz, del cual nuestro Grupo Local
se halla unas 7000 veces más alejada. clasificación. no es más que un miembro apendicular.
Mientras que un haz de luz procedente A diferencia de los reinos de los pla- Treinta años más tarde se descubrió la es-
de Plutón tarda unas pocas horas en lle- netas y estrellas, observados aquellos en tructura a gran escala del universo.
gar a la Tierra, la luz de la estrella más su andar errante sobre el fondo de estre- —Luis Alonso

NATURE’S ORACLE. THE LIFE AND WORK el punto de vista del gen, puede un orga-
OF W. D. HAMILTON nismo comportarse de manera altruista,
Por Ullica Segerstrale. Oxford University Press; si, con esa conducta, ayuda a los otros
Oxford, 2013. que portan copias de sus propios genes:
a sus parientes. Tal fue la solución des-
cubierta para resolver el problema que
planteaba el altruismo a la teoría darwi-
nista. ¿Por qué un ave avisa a los demás
de la presencia de un depredador si de
ese modo llama la atención de este con
peligro de su vida? Darwin no encontró
salida a esa cuestión. Hamilton la halló,
Darwin renovado de forma precisa y matemática. Con ello
inició un cambio de paradigma en el neo-
Cambio de perspectiva: darwinismo imperante.
del individuo al gen Hamilton resolvería otros problemas
y abriría nuevos caminos con sus tra-
bajos sobre evolución de la sexualidad,

W illiam Donald Hamilton (1936-


2000) desató dos nudos de la teo-
ría de la evolución que se le habían re-
mo no recíproco podría manifestarse allí
donde se dieran mecanismos que asegu-
rasen que el coeficiente de parentesco ten-
proporciones entre sexos, coevolución
del parásito y su huésped, elección del
compañero sexual, cooperación entre no
sistido a Charles Darwin y a cuantos le dería a superar la razón coste-beneficio emparentados, dispersión, senescencia y
siguieron durante más de un siglo: por del acto altruista. evolución de la sociabilidad. Cedió a otros
qué los organismos se muestran altruis- Genes egoístas, altruismo, selección el mérito de poner nombres llamativos
tas en un mundo de sangrienta competi- de parentesco, son términos que ahora a sus propias ideas: «gen egoísta» en el
ción y por qué se encuentra tan extendi- nos resultan familiares. Hoy no se cues- caso de Richard Dawkins o «Reina Roja»,
da la reproducción sexual, pese a su doble tiona que lo que realmente importa en en el de Matt Ridley. (En 1976 apareció
coste. Le debemos también la regla que evolución no es la supervivencia del or- el libro de Dawkins The selfish gene. Re-
lleva su nombre, según la cual el altruis- ganismo animal, sino sus genes. Desde conoce que las ideas desarrolladas allí

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habían sido ya expuestas por Hamilton, Hamilton estaba convencido de que del trabajo en la revista The American Na-
Edward O. Wilson, Robert Trivers y John había un fundamento genético para el al- turalist, con el título «The evolution of al-
Maynard Smith.) truismo, por contraintuitivo que ese com- truistic behavior». Antes lo había enviado
Hamilton nació en El Cairo, donde su portamiento pareciera en relación con la a Nature, a sugerencia de su supervisor Ce-
padre trabajaba adscrito al Cuerpo de In- eficacia biológica (éxito reproductor) del dric Smith. Recibió la respuesta negativa
genieros de Inglaterra. Este despertó en individuo. ¿Por qué habría de comportar- del editor, que lo consideraba demasiado
su hijo el interés por el razonamiento ló- se un animal como si redujera su eficacia específico, y le aconsejaba una revista de
gico y matemático como forma de aproxi- biológica poniéndose él mismo en peligro psicología o sociología. En Nature no per-
mación a la realidad. Andando el tiempo, (por ejemplo, emitiendo una señal de alar- cibieron el carácter genético del artículo
Hamilton construiría modelos visuales, ma) o absteniéndose de la reproducción ni la potencia intelectual del mismo. En
cuyos mecanismos físicos imaginaba, una (como las obreras de muchos insectos so- él podía leerse la regla de Hamilton, re-
habilidad que permitió que otros biólogos ciales)? ¿Por qué una abeja aguijonea a sumida en la ecuación r > c/b, donde r
eximios de formación técnica, como Geor- los invasores del panal y pierde su propia simboliza el coeficiente de parentesco,
ge Price y Maynard Smith, se percataran vida? Esos tipos de conducta no confieren c representa el coste que supone para el
del alcance de sus propuestas. A los nueve al animal ninguna ventaja evolutiva. donante y b indica el beneficio que com-
años, sus padres le regalaron Butterflies, Ese rasgo contraintuitivo, cavilaba porta para el receptor. En virtud de dicha
de E. B. Ford, que presentaba una breve Hamilton, podía difundirse bajo determi- regla, la selección de parentesco provoca
introducción al neodarwinismo, teoría nadas condiciones. Bastaba simplemente que los genes incrementen su frecuencia
que recurría a la genética de poblaciones que los beneficios de la acción altruista no cuando el parentesco genético de un indi-
para explicar la evolución como cambio recayeran al azar en cualesquier miembro viduo multiplicado por el beneficio obte-
de frecuencias génicas en el seno de una de la población, sino sobre individuos que nido por el receptor es mayor que el coste
población. El libro describía también la estuvieran genéticamente emparentados reproductor del actor.
naturaleza de los pigmentos de las alas con el donante. El ave que da la voz de Titulado «The genetical evolution
de las mariposas: melanina, carotenoides alarma puede sacrificarse en pro de sus of social behavior», el artículo desarro-
y flavonas. parientes, lo que obligaba a replantearse llado, hito de su carrera científica, fue
Hamilton se formó en la Universidad el concepto de eficacia biológica: no solo publicado en el Journal of Theoretical
de Cambridge. No se encontraba a gusto contaba la del individuo, sino la del grupo Biology, en 1964. Constaba de dos par-
con un planteamiento excesivamente fi- de familiares que portaban los genes del tes, consagrada la primera a la deducción
siológico de la biología, ni la evolución individuo. matemática del concepto de eficacia bio-
constituía un asunto que apasionara en Su propuesta de trabajo en esa línea lógica inclusiva y la segunda a ejemplos y
Cambridge, aunque ningún profesor cues- no fue bien recibida en Cambridge. Se le análisis. Hamilton buscaba un principio
tionaba el supuesto de que los animales sugirió que se encaminase hacia el depar- general similar al teorema fundamental
operaban en beneficio de la especie. Para tamento de demografía de la Escuela de sobre selección natural de Fisher. Este
el alumno recién ingresado supuso, sin Economía de Londres. A finales de 1960, famoso teorema establecía que la efica-
embargo, todo un descubrimiento el libro atendiendo a la naturaleza genética del cia biológica, en promedio, continuaría
de Ronald Aylmer Fisher The genetical proyecto de Hamilton, se dispuso que se incrementándose. Al poner sobre el ta-
theory of natural selection, que sacó de registrara parcialmente en el Universi- pete la eficacia biológica inclusiva, des-
la biblioteca de St. John’s College. Hamil- ty College, de Londres, y tuviera un su- taca dos aspectos revolucionarios: uno,
ton estudió botánica, zoología, fisiología pervisor de la Escuela de Economía. Se la desconexión de un gen respecto del
y matemática entre 1957 y 1959; optó propuso encontrar un marco teórico que individuo en cuyo cuerpo habita el gen
también por la genética y, en particular, explicara por qué la constitución genética (porque los familiares pueden portar
el enfoque matemático de esta que le pro- determinaba el comportamiento social. también copias de dicho gen); dos, el
porcionaba la obra de Fisher. En el último Empezó por considerar tipos de pares interés de un gen no es necesariamente
curso de carrera, para cumplir la praxis de parientes, para ir generalizando has- el mismo que el interés de su portador.
investigadora, quedó asignado a Anthony ta convertirlo en principio general. (El Utiliza el coeficiente de parentesco de
Edwards, discípulo de Fisher, quien esta- parentesco genético entre pares de indi- Sewall Wright entre dos familiares como
ba escribiendo su tesis doctoral sobre la viduos emparentados puede calcularse medida de la verosimilitud de que porten
proporción entre sexos. como la probabilidad de que ellos hayan réplicas de un mismo gen heredado de
Terminado su período de formación heredado una copia del mismo gen. Por antepasados comunes.
en Cambridge, se le ofrecen dos opcio- ejemplo, la mitad de los genes de her- Hamilton distinguía cuatro tipos de
nes. Encontrar una plaza para alumnos manos son, en promedio, idénticos para conductas sociales, de acuerdo con un do-
de doctorado en un departamento de ge- el descendiente común; lo mismo ocurre ble criterio: si el agente A inflige un daño
nética era una. Obtener un diploma de con progenitor e hijo. La proporción es al agente B o le produce un beneficio. La
capacitación pedagógica y convertirse en de un octavo entre primos hermanos y de conducta que entraña un beneficio para
profesor de segunda enseñanza, la otra. 1/32 para primos segundos. De ese modo, uno mismo y daño para los demás se lla-
Muchos científicos de primera línea ha- el coeficiente de parentesco respectivo ma egoísmo; la que comporta daño para
bían seguido ese camino, como Ronald será 1/2, 1/8, 1/32, etcétera. mí mismo y beneficio para los demás se
Fisher y David Lack. Además, la enseñan- Así fue madurando el artículo que so- llama altruismo. La que causa beneficio
za, menos dura que la genética, le dejaría lucionaría la aporía del altruismo en una a uno y a otro se denomina cooperación.
tiempo para seguir desarrollando su pen- evolución que primaba la eficacia biológi- Y la que causa daño a sí mismo y otros,
samiento sobre el altruismo. ca. Apareció primero, en 1963, un resumen estupidez. Adviértase que aquí el compor-

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tamiento social se clasifica estrictamen- senescencia, en cuanto tal, resultaba ine- la eficacia biológica inclusiva. Refinó la
te en términos del efecto que la eficacia vitable, al margen del valor reproductivo. regla de Hamilton sustituyendo el coefi-
biológica de un individuo ejerce sobre la Ningún animal podía escapar a ella. En ciente de parentesco por el coeficiente de
eficacia biológica de otro. Se trata de un 1966 publicó su teoría de la senescencia regresión de parentesco, que le otorgaba
altruismo de comportamiento; concierne en el Journal of Theoretical Biology («The mayor generalidad. Iniciaba el artículo
a las consecuencias de una acción, no a moulding of senescence by natural selec- preguntándose: «¿En qué sentido pue-
su motivación. tion»), donde acotaba los factores prin- de el autosacrificio de la hormiga estéril
Los dos proyectos subsiguientes a cipales de la misma. Hamilton comprobó considerarse lucha por la existencia o
esos artículos de 1964 versaban sobre la que la proporción ideal entre machos y empeño por maximizar el número de la
proporción entre sexos y la senescencia, hembras no era de 1:1, según propusiera progenie?». Sugirió más tarde que la cul-
que él consideraba interrelacionados con Fisher. En las condiciones de endogamia tura contaba con un soporte genético. Fe-
la eficacia biológica inclusiva. La senes- se producía a menudo un sesgo favorable nómenos que reputamos exclusivamente
cencia era una de las grandes cuestiones a las hembras 9:1. Publicó en Science sus culturales esconden un origen biológico,
planteadas por Fisher en The genetic conclusiones sobre la proporción entre como la xenofobia. Lo relacionaba con
theory of natural selection. Para él, la sexos el año 1967 con el título «Extraor- su concepto de niveles de selección; no
tasa de mortalidad en el hombre suele dinary sex ratios». En su artículo se hace había una unidad singular de selección,
tomar un curso inverso a la curva del patente la fuerza real de la selección na- sino que se operaba en muchos niveles
valor reproductivo. Pensaba que el valor tural en su capacidad de aportar predic- a un tiempo. Otros campos que roturó
reproductivo de un individuo comenzaba ciones cuantitativas. fueron el de la influencia del hábitat en
a decaer conforme aumentaba la morta- En 1972 revisó con nuevos datos, en la convergencia funcional pese a la dis-
lidad. Pero Hamilton halló que no existía Annual Review of Ecology and Systema- paridad filética y el de la dispersión de
tal nexo necesario entre sexo y muerte. Y tics («Altruism and related phenomena, las especies.
desarrolló modelos para demostrar que la mainly in social insects»), su tesis sobre —Luis Alonso

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