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Cadena de Hábitos

Cada vez que hacemos algo sin pensar y lo hacemos siempre de la misma forma, es porque hemos
adquirido un hábito. Por ejemplo, imaginémonos por un momento que salimos de casa por la
mañana en dirección al trabajo. No necesitamos pensar que debemos ir por tal y tal calle, doblar a
la derecha en tal esquina, cruzar la próxima calle, etc. No necesitamos pensar en todo es to porque
lo hemos hecho tantas veces que el recorrido lo tenemos grabado en nuestro cerebro. Incluso
aunque vayamos pensando en algo que nos absorbe toda nuestra atención, nunca nos
equivocamos.
Ahora quiero que piensen ustedes en algunos casos en que nosotros hacemos algo mal o bie n por
hábito. Yo quiero darles un ejemplo más de un mal hábito que he observado con bastante
frecuencia. Hay algunos de ustedes que en algunas ocasiones usan la herramienta incorrecta para
realizar un trabajo, por ejemplo, intentan golpear con una llave o cualquier otra cosa menos con e l
martillo. Lo peor del caso es que algunos ya lo hacen por hábito, porque les parece que da tan
buen resultado como un martillo. Un hábito así puede producirles una lesión, por lo tanto, es
necesario que corrijan este hábito y lo transformen en uno correcto.
Para terminar, quiero recordarles que todas las personas, lo reconozcamos o no, actuamos
dejándonos guiar por hábitos.
Como esto es algo que no podemos evitar, aunque quisiéramos, debemos trat ar de adquirir
hábitos correctos, ya que es tan fácil adquirir hábitos correctos como incorrectos. Cuantos más
hábitos correctos tengamos, menos lesiones sufriremos.

CHARLA 88

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