0 calificaciones0% encontró este documento útil (0 votos)
17 vistas1 página
La Asamblea Mundial de la Salud adoptó en 2004 la Estrategia mundial sobre salud reproductiva para acelerar el avance hacia los objetivos internacionales de desarrollo. La Estrategia se centra en mejorar la atención prenatal, obstétrica y neonatal, ofrecer servicios de planificación familiar de alta calidad y eliminar los abortos peligrosos. También busca combatir las infecciones de transmisión sexual y promover la salud sexual a través de cinco esferas clave como fortalecer los sistemas de salud y mejor
Descripción original:
Título original
Estrategia Mundial Sobre Salud Reproductiva Para Acelerar El Avance Hacia La Consecución de Los Objetivos y Las Metas Internacionales de Desarrollo
La Asamblea Mundial de la Salud adoptó en 2004 la Estrategia mundial sobre salud reproductiva para acelerar el avance hacia los objetivos internacionales de desarrollo. La Estrategia se centra en mejorar la atención prenatal, obstétrica y neonatal, ofrecer servicios de planificación familiar de alta calidad y eliminar los abortos peligrosos. También busca combatir las infecciones de transmisión sexual y promover la salud sexual a través de cinco esferas clave como fortalecer los sistemas de salud y mejor
La Asamblea Mundial de la Salud adoptó en 2004 la Estrategia mundial sobre salud reproductiva para acelerar el avance hacia los objetivos internacionales de desarrollo. La Estrategia se centra en mejorar la atención prenatal, obstétrica y neonatal, ofrecer servicios de planificación familiar de alta calidad y eliminar los abortos peligrosos. También busca combatir las infecciones de transmisión sexual y promover la salud sexual a través de cinco esferas clave como fortalecer los sistemas de salud y mejor
“Estrategia mundial sobre salud reproductiva para acelerar el avance hacia la
consecución de los objetivos y las metas internacionales de desarrollo” fue
adoptada por la 57a Asamblea Mundial de la Salud en mayo de 2004 (WHA57.12).
Como es de todos conocido, la finalidad de la Estrategia es contribuir a mejorar la
salud sexual y reproductiva, y se centra en cinco aspectos prioritarios:
mejorar la atención prenatal, obstétrica, posparto y neonatal;
ofrecer servicios de planificación familiar de alta calidad, incluidos servicios de atención a personas con problemas de infertilidad; eliminar los abortos peligrosos; combatir las infecciones de transmisión sexual (ITS), en particular el VIH, las infecciones del aparato reproductor, el cáncer cérvicouterino y otras afecciones ginecológicas; y promover la salud sexual.
La Estrategia tiene en cuenta cinco esferas clave:
• fortalecer la capacidad de los sistemas de salud;
• mejorar las fuentes de información para establecer prioridades; • movilizar la voluntad política; • crear marcos legislativos y reglamentarios de apoyo; y • reforzar la vigilancia, la evaluación y la rendición de cuentas