PALABRAS DE DESPEDIDA A LOS ESTUDIANTES DE 11.

Queridos estudiantes, de 11A, modalidad de sistemas. Hoy con este solemne acto inicia la recta final
hacia el más grande logro propuesto hasta ahora… la graduación como Bachilleres, bachilleres técnicos
en la modalidad Técnica de Sistemas. De los 31 que iniciaron este sueño, solo 16, ustedes lo lograron,
eso demuestra que todo lo que nos proponemos con responsabilidad y esfuerzo es posible.

Mis hijos, Me basta que sean jóvenes para amarlos como a hijos. San Juan Bosco. Cuán difícil ha sido
para mí, no poder asumir el papel que me fue encomendado por Dios y la institución, responsabilidad
que asumí con amor, pero debido a mi problema de salud me fue imposible cumplir, personalmente no
estuve, pero siempre han estado presentes en mi vida y mis oraciones.

Hoy es un día muy especial para todos, seguramente los embargan sentimientos encontrados:
emoción, orgullo, felicidad, satisfacción, realización de sueños, aprendizaje, promesas, de planes y
caminos, de tristeza y dolor por la separación, de vidas compartidas, de amistad y hermandad, de
futuros porque sienten que una etapa llega a su fin. Las palabras que hoy escuchan representan sus
silencios y miradas, esa mezcla de melancolía, alegría, tristeza y miedo. Esa contradicción entre las
ganas de irse y de quedarse, entre el no saber si llorar de felicidad por haber terminado, por sentirse
realizados en esta etapa, por comenzar algo nuevo o simplemente si llorar de nostalgia por todos los
recuerdos juntos, por saber que el año próximo no van a verse todos los días, ni compartir nuevas
vivencias en el colegio.

Hoy me uno a la celebración de ustedes y de sus familias, estoy feliz, de estar con ustedes,
compartiendo este logro en sus vidas, será uno más de todos los que Dios tiene dispuestos para
ustedes, la responsabilidad, la disciplina, la perseverancia y la lucha, serán valores que siempre deben
permanecer en cada proyecto que se propongan, la lucha continúa, en la medida en que pase el
tiempo se van a ver enfrentados a diversos retos, y cada uno de ellos tendrá mayor exigencia, no
desmayen, sigan luchando que la victoria es de los perseverantes, no será fácil, pero cada uno de
ustedes tiene la capacidad de lograr lo que se proponga en su vida.

Anhelo verlos realizados como profesionales éticos y responsables, aportando positivamente a sus
familias y esta sociedad que tanto lo necesita.

Hoy tienen la responsabilidad de elegir una carrera, háganlo siendo fiel a su vocación, no es el dinero lo
que proporciona felicidad, es la satisfacción de hacer con amor lo que nace del corazón. Tómense el
tiempo para analizar lo que quieren, y tomen la mejor decisión. Ustedes tienen el compromiso de
llevar su nombre en alto y con orgullo. Hoy llegó el día de volar, se sienten ganas de permanecer y la
nostalgia es inevitable.

Mis niños, mil disculpas por todos los regaños, y los malos ratos causados, siempre lo hice pensando en
el bienestar de cada uno de ustedes. Hoy los despido con el corazón en la mano y la confianza plena,
que Dios hará su voluntad en sus vidas,

Se termina la etapa en esta institución, lugar donde surgieron bellas amistades, aquí lloraron y rieron,
actuaron y fueron genuinos, ofendieron y perdonaron, bailaron, competieron, soñaron, perdieron,
ganaron, simplemente vivieron... porque vivir implica esto.…
Gracias mis niños, por cada momento compartido, por permitirme entrar en sus vividas, por abrirme el
corazón, por la confianza y el apoyo que me brindaron. Ustedes son unos maestros, fueron muchas las
enseñanzas que me dejaron.

Mis hijos, Los llevaré en mi corazón y pediré a Dios por su felicidad.