TÍTULO DEL SERMÓN:

Las decisiones que traen desgracia destructiva

TEMA: CONSECUENCIAS DE LA CAÍDA DEL HOMBRE

TEXTO: Génesis 3:7-23

I. Espiritual: “ciertamente morirás”, (Gen.2:17). La muerte.

II. Ético-moral: “conocieron que estaban desnudos” (v.7). La vergüenza

III. Estética: “cosieron hojas de higueras y se hicieron delantales” (v.7). La vestimenta

IV. Psicológica: “oí tu voz en el huerto, y tuve miedo” (v.10). El miedo

V. Física: “multiplicaré en gran manera los dolores”, “con dolores comerás” (v.16-17). El dolor
incrementado

VI. Económica: “con el sudor de tu rostro comerás” (v.17). El trabajo duro

VII. Social: “la mujer que me disté por compañera me dio del árbol y yo comí” (v.12). Dañar y echar
la culpa a otros.

VIII. Intelectual: “sabiendo el bien y el mal” (v.22). La mente corrompida

XIX. Matrimonial: “y tu deseo será para tu marido y él se enseñoreará de ti” (v.16). Crisis
matrimoniales y familiares.

X. Cultural: “para que labrase la tierra” (v.23). Constantes cambios culturales y tecnológicos

El título del sermón:

"El precio de ser seguidor de Cristo".

Tema: IMPLICACIONES DEL DISCIPULADO

Texto: Lucas 9:57-62

Introducción: Todo éxito tiene un precio en la vida. ¿Cuánto más el seguir a Jesús? No hay
neutralidad, tampoco comodidad, menos inestabilidad para seguir a Cristo. Más bien, sólo
radicalidad, es decir, sí o no; frío o caliente, eres o no eres, así de simple.

I. Seguir a Cristo implica sufrimiento (v.57-58)

II. Seguir a Cristo implica decisión muy personal (v.59-60).

III. Seguir a Cristo implica renunciar las comodidades familiares (v.61-62)

Conclusión. Seguir a Cristo es abnegación, el yo del hombre queda atrás, sino el vivir de un
cristiano es Cristo. Primero es Cristo, luego es Cristo y después es Cristo. El discipulado es vivir la
radicalidad de la fe cristiana.

El título del sermón: "El precio de ser seguidor de Cristo".

Tema: IMPLICACIONES DEL DISCIPULADO

Introducción: Todo éxito tiene un precio en la vida. ¿Cuánto más el seguir a Jesús? No hay
neutralidad, tampoco comodidad, menos inestabilidad para seguir a Cristo. Más bien, sólo
radicalidad, es decir, sí o no; frío o caliente, eres o no eres, así de simple.

I. Seguir a Cristo implica sufrimiento (v.57-58)

II. Seguir a Cristo implica decisión muy personal (v.59-60).

III. Seguir a Cristo implica renunciar las comodidades familiares (v.61-62)

Conclusión. Seguir a Cristo es abnegación, el yo del hombre queda atrás, sino el vivir de un
cristiano es Cristo. Primero es Cristo, luego es Cristo y después es Cristo. El discipulado es vivir la
radicalidad de la fe cristiana.

[10:28 p. m., 26/11/2020] Nicodemo: LA VERDADERA LIBERTAD

TEXTO: JUAN 8:31-47

PROPOSICIÓN: No hay verdadera libertad en la vida cristiana si no existe una fe genuina en Jesús y
en sus enseñanzas. Desarrollaré esta tesis bajo las siguientes afirmaciones:

Introducción: La historia de Lutero y libertad en un momento crítico sobre la Reforma Protestante

del Siglo XVI.

I. Primera afirmación:

Permanecer En La Verdad Es Libertad (31-33)

II. Segunda afirmación:

Aceptar El Perdón De Nuestros Pecados Es Libertad (34-38)

III. Tercera afirmación:

Obedecer A Nuestro Padre Es Libertad (39-47).

Conclusión: Juan Knox defendió siempre en Escocia la verdadera libertad. Bajo una consigna:
¡Dame Escocia o me muero!

[10:28 p. m., 26/11/2020] Nicodemo: El título del sermón:

Sermón: "El precio de ser seguidor de Cristo".

Tema: IMPLICACIONES DEL DISCIPULADO

Introducción: Todo éxito tiene un precio en la vida. ¿Cuánto más el seguir a Jesús? No hay
neutralidad, tampoco comodidad, menos inestabilidad para seguir a Cristo. Más bien, sólo
radicalidad, es decir, sí o no; frío o caliente, eres o no eres, así de simple.

I. Seguir a Cristo implica sufrimiento (v.57-58)

II. Seguir a Cristo implica decisión muy personal (v.59-60).

III. Seguir a Cristo implica renunciar las comodidades familiares (v.61-62)

Conclusión. Seguir a Cristo es abnegación, el yo del hombre queda atrás, sino el vivir de un
cristiano es Cristo. Primero es Cristo, luego es Cristo y después es Cristo. El discipulado es vivir la
radicalidad de la fe cristiana.