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TEMA. LA RESTITUCIÓN DE MEFIBOSET. 2 Samuel 9:1-10.

Texto clave. 2 Samuel 9:7.

—¡No tengas miedo! —le dijo David—, mi intención es mostrarte mi bondad por lo que le prometí
a tu padre, Jonatán. Te daré todas las propiedades que pertenecían a tu abuelo Saúl, y comerás
aquí conmigo, a la mesa del rey.

I. UNA PERDIDA INVOLUNTARIA. 2 Samuel 4:4.


I.1. Fue lisiado de sus pies desde su niñez.
I.2. Fue llevado a la tierra del olvido. 2 Samuel 9:3-5.
I.3. Fue engañado por su tutor Siba. 2 Samuel 14:1-4; 2 Samuel 19:24-43.

II. UN ESTADO DESASTROZO.


II.1. Lodebar, tierra de los olvidados, era tierra de los desahuciados.
II.2. De vivir en un palacio, a vivir en un lugar siniestro, pero tenia un buen recuerdo de
su casa.
II.3. Su auto estima descendió hasta los suelos, el se consideraba un perro.
II.4. Posee un terror de perder la vida de un momento a otro por ser del linaje de Saul.

III. UNA RESTITUCIÓN MERECIDA. 5-10.


III.1. El rey David busca a quién favorecer.
III.2. Mefi-Boset era merecedor de la Bondad del rey para ser restituido.
III.3. La restitución de la dignidad de Mefi-Boset esta basada en un pacto.

David le dijo a Mefi-Boset:—¡No tengas miedo! —le dijo David—, mi intención es mostrarte mi
bondad por lo que le prometí a tu padre, Jonatán. Te daré todas las propiedades que pertenecían
a tu abuelo Saúl, y comerás aquí conmigo, a la mesa del rey.

III.4. David le devolvió a Mefi-Boset todo lo que le pertenecía. Y he hizo que el


palacio volviera ser su casa, y comiera a la mesa del rey como un principe.

IV. TU RESTITUCION DE TU DIGNIDAD ESTA PRONTO.


4. Alguien esta por mostrar su bondad para contigo.
5. En un solo día tu dignidad será restituida.
6. La bondad de Dios y su misericordia, te levanta del polvo para sentarte en el lugar
de honor.
7. TU ORIGEN ES SER PRINCIPE, HIJO DE UN GRAN REY. NO IMPORTA QUIEN TE
DESVIO DE TU POSESION Y PROPOSITO, QUIEN TE ENGAÑO Y SE APROVECHO DE TI,
DIOS TE HA MANDADO A LLAMAR, TEN FE, CREELE A DIOS, TU ETERNIDAD SERA EN EL
LUGAR QUE TE PERTENECE. BIENVENIDO A CASA DEL PADRE, A TU CASA.

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