Escuela Nacional de Antropología e Historia

Licenciatura en Etnohistoria

Asignatura:

Antropología General

Integrantes:

Baleón Carrillo Juan Carlos

Bustos Flores Edgar Daniel

López Avila M. Rafael

Tema:

La Etnografía
La responsabilidad de la Etnología con respecto a su objeto de estudio y con su

propio discurso es un aspecto que no debe dejar de marcarse, esto por una

sencilla razón: acabar con, y de ninguna manera alimentar, el prejuicio de una

perspectiva estrecha hacia alguna forma cultural ajena a la propia realidad ya

que este tipo de actitudes se considera como etnocentrista. La Etnografía,

como método de la Etnología, no de be de ser diferente de esto y deberá de

trabajar de manera parcial, profesional y eficiente.

El primer paso del proceso etnográfico implica la elección del tema y de la

comunidad a estudiar, lo cual corresponde a diversos factores, de tipo

personal, psicológico, institucional, económico o coyuntural. Lo que procede es

la elaboración de un proyecto de investigación en el que se delimite la temática

a abordar, los problemas a resolver, así como el uso de técnicas y el marco

teórico y conceptual que se utilizarán.

Los fenómenos que observa el etnógrafo son variados y distintos todos ellos

entre sí, como por ejemplo se observa la infraestructura, antecedentes

históricos, demografía, lengua, salud, vivienda, indumentaria, artesanías,

territorio, ecología y reproducción social, migración, organización social,

cosmogonía y religión, fiestas, relaciones con otros pueblos, movimientos

sociales y organizaciones indígenas contemporáneos y por supuesto la

localización.

Los etnógrafos utilizan varios métodos para registrar sus datos, principalmente

notas de campo, grabaciones videográficas y filmaciones. Elegir cual de estos

métodos es el más apropiado dependerá de las finalidades que cada etnógrafo

persiga, de la naturaleza del contexto y de los recursos financieros disponibles,

si bien estas técnicas no son mutuamente exclusivas. Su utilidad también

variará en función del tipo de datos que se deban registrar.

En otros ámbitos, las fases de observación y redacción no podrán ser

organizadas tan fácilmente pero, normalmente, habrá momentos en que los

participantes estén ocupados en actividades que no sean relevantes para la

investigación. Seguramente, será imposible aprovechar toda la información

adquirida en el trabajo de campo, pero ello no obsta para que se hagan todos

los esfuerzos para registrarla. La memoria no es una base apropiada para el

análisis. Evidentemente, el registro de la información es selectivo y siempre

implica una interpretación por mínima que sea. No existe ningún cuerpo básico

de datos indudables a partir del cual se puedan deducir todos los otros. Lo que

se registra dependerá en gran medida de los propósitos y prioridades de la

investigación y de las condiciones en que ésta se lleve a cabo.

En etnografía el análisis de la información no es un proceso diferente al de la

investigación. Éste comienza en la fase anterior al trabajo de campo, en la

formulación y definición de los problemas de investigación, y se prolonga

durante el proceso de redacción del texto. Formalmente, empieza a tomar

forma mediante notas y apuntes analíticos; informalmente, esta incorporado a

las ideas, intuiciones y conceptos emergentes del etnógrafo. De esta manera,

el análisis de la información es paralelo al diseño de la investigación.

En el transcurso del trabajo de campo el etnógrafo suele hacer un ejercicio

literario continuo. Las notas de campo, los apuntes y los diarios son, por un

lado, la información registrada; por otro, son escritos que constituyen análisis

preliminares y representaciones.

Una de las mayores dificultades que normalmente encontramos en la redacción

de etnografía es: reordenar la información y la experiencia como observadores

participantes dentro de un relato lineal. Se ha de ordenar el texto según una

secuencia de temas, asuntos, argumentos, etc. Un texto comienza en el inicio y

continua hasta el final, donde la narración acaba. Formas posibles de ordenar

el texto seria a través de estrategias como la historia natural, la cronología,

estrechar y aumentar el foco (moverse a través de diferentes niveles de

generalidad o especificidad).

Como conclusión tenemos que la producción etnográfica es resultado de una

interpretación, de la visión propia de un investigador en torno a un tema, quien

pretende fijar en un texto la cultura de un grupo o pueblo determinado en un

momento de su historia. El texto constituye un saber y una aproximación a una

realidad por demás compleja; en este sentido, el investigador da a conocer, el

producto de su investigación.
 Bibliografía

Hammersley, Martín y Paul Atkinson. Etnografía. Barcelona: Paidós, 1994.