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Características que debe tener el intérprete bíblico

Un intérprete debe ser primeramente transformado por el Espíritu Santo, y ser lleno de Él,
para poder comprender lo que está escrito en la palabra de Dios, recordando también que es
inspirada por Dios mismo. También debe ser analítico y exacto al momento de conjugar las
palabras, es decir, para que sea efectiva una predicación, debe de haber una buena
preparación en la lectura, pero todo esto lo logramos cuando tenemos el Espíritu Santo que
nos guía a toda verdad y justicia, como dijo el apóstol Pablo: “Ya no vivo yo, más Cristo
vive en mi…” Gálatas 2:20.

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