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SARTRE, J.P.

El pensamiento político de Lumumba

Es por la no violencia por lo que se impone el MNC. Lumumba en sus conferencias: “no tenemos opción económica”.

Lumumba, de un discurso a otro varia la forma, pero el fondo no cambia, sin duda, él evolucionó. En un momento
soñó con una comunidad belgocongoleña, pero a partir de 1958 la independencia se vuelve en su único objetivo.
Hasta es contradictorio, muestra las dos concepciones opuestas de la obra “civilizadora” de Bélgica, porque éstas
coexisten en él y reflejan la profunda contradicción de su clase.

Hijo de campesinos, accedió a la educación en manos de misioneros. A los 18 años se va a la ciudad, donde trabaja
en una oficina para un correo. Ahora es un evolucionado. Los evolucionados forman una capa social que crece
lentamente y es auxiliar indispensable de las grandes compañías y de la administración. Pero con una misma
preparación y trabajo, un empleado belga gana el doble de su salario. Adivina la lucha de clases desnuda, a los 30
escribia: “existe un verdadero duelo entre empleadores y empleados con motivo de salarios”. Su matricula, lo separa
de los negros sin asimilarlo a los blancos. Es víctima de prácticas segresionistas. Es que el racismo y la segregación
son nuevas para él, porque en la selva, al no haber blancos, no se percibe, aunque si existía la sobreexplotación, el
paternalismo amable de los misioneros le creó ilusiones.
30 de junio de 1960: “el trabajo agotador exigido a cambio de salarios que no nos permitían saciar nuestra hambre ni
vestirnos o alojarnos, ni educar a nuestro hijos… (habla en nombre de todos) … “hemos conocido en las ciudades
casas magnificas para los blancos y chozas miserables para los negros, no se admitía nunca a un negro ni en los cines,
ni en los restaurantes,,, (es la clase de los evolucionados quien habla por su voz)
Esta elite creada por los belgas, exige una asimilación cada vez mayor igualdad de blancos y negros en el mercado de
trabajo. Lumumba experimenta la contradicción de su clase, creada por las necesidades de la colonización, el
porvenir le es negado por los colonos y la administración.
La mayor parte de las organizaciones nacionalistas se forman en un marco regional. La ABAKO es un partido regional
y étnico (los bakongo). Su líder Kasavubu, es elegido presidente del Congo independiente, y su partido le ordena que
preserve la unidad nacional, mientras su pueblo le reclama que sea cesionista. Separatista en esencia, la ABAKO,
debía arruinar a los nacionalistas en provecho de las potencias extranjeras.
Los evolucionados no tenían ningún poder sobre las masas. Lumumba no hizo la revolución congoleña, su situación
de evolucionado separado del proletariado urbano y todavía más del campo, le impedía recurrir a la violencia. Sabe
que puede convencer a un auditorio con su don discursivo, pero necesita otros dotes. Sin embargo, es él quien capta
la Revolución y la orienta, porque su condición de asimilado le permiten elevarse hasta la universalidad. El concepto
universal sitúa a Lumumba por encima de las etnias y del tribalismo. La PBE comente un error, se considera como la
clase universal. Lumumba, escuchado en todas partes, creía que las masas seguirían a los evolucionados hasta el
final. Esa unidad era para él, la Nación misma. Quiere sustituir la multiplicidad de los movimientos nacionalistas por
un partido único, un partido a lo africano.
El MNC es la pequeña burguesía congoleña que descubre su ideología de clase. Lumumba es el más radical, su país
solo podrá sobrevivir a la independencia dentro del marco de un África libre. Asiste a la conferencia panafricana de
Accra. Para él, luchar por la independencia es luchar por la unidad nacional. Al mismo tiempo, por el África libre. Los
estados que han logrado la independencia deben ayudar a los países dominados a librarse. El panafricanismo de
Lumumba le valió algunos de sus más temibles adversarios: los bancos de Rhodesia, del África del sur, los
conservadores ingleses. Liberado, el Congo estaba rodeado de enemigos mortales.
Lumumba da a entender que la independencia congoleña no es un fin sino el comienzo de una lucha a muerte por
conquistar la soberanía nacional. No sabe que las antiguas metrópolis buscan nativos que gobiernen en función de
los intereses coloniales, no sabe que los cómplices son designados por adelantado en Europa y que pertenecen a su
propia clase. Pertenece a la elite, sus militantes son todos pequeños burgueses. Su empresa es limitada y universal.
Ese humanismo que en los demás enmascara la particularidad de los intereses de clase, él lo convierte en su pasión
personal. Quiere devolverle a los subhombres de la superexplotación colonial su humanidad natal. Pero su
formación demócrata burgués le impide ver la necesidad de esa restructuración fundamental.

Lo que generó el conflicto con sus ministros: esos pequeños burgueses querían constituir la pequeña burguesía en
clase dirigente, lo que equivalía a acercarse a las potencias imperialistas; se decía guía, no se creía de ninguna clase,
se negaba, en su celo centralizador, a tomar en serio las diferencias de origen económico, ni más ni menos que con
las divisiones tribales: el partido único saltaría las barreras y conciliaría todos los intereses. Se sospechaba de
Lumumba y no solo por los aviones rusos lo tacharon de comunista. Los parlamentarios temían que su humanismo
unitario terminara en socialismo. Lo importante es que llevó a su clase al poder y se disponía a gobernar en contra
de ella.

Las razones del fracaso


Levantó un frente común que ganó las elecciones del 60. Pero el frente era frágil por sus particularismos. La base
real de los partidos aliados era para cada uno provincial. El universalismo cultural oculta el deseo de los líderes de
formar con sus grupos la nueva clase dirigente. Lumumba líder indiscutible del centralismo, sus enemigos se revelan
en cuanto demuestra su poder de orador y su arte de negociador.
Tshombé – CONAKAT – Katanga.
MNC se divide. Ala Kalonji (se implanta en Kasai del Sur) =/= ala Lumumba. ABAKO – Kasavubu (federalismo)
Al independizarse y formar un gobierno quedan 2 fuerzas: la ABAKO y el Bloque Nacionalista (MNC y aliados)
Bélgica duda entre los dos movimientos. Lumumba mantiene el orden público, ha obtenido la mayoría de los votos,
pero su centralismo preocupa.
Negociaciones: la ABAKO reclama la constitución de una provincia autónoma Bakongo soberana dentro de una
confederación de un Congo unido. Bajo amenaza de un levantamiento Bakongo, deciden que la ABAKO aporta el Jefe
de Estado (Kasavubu) y algunos ministros, y el Bloque Nacionalista proporciona el Primer Ministro (Lumumba) y el
resto del equipo, aunque algunos escaños son reservados a la CONAKAT.
La fuerza de Lumumba era parlamentaria, la de Kasavubu era real y masiva.
Después de la partida de los belgas, los votos perdieron su importancia, Lumumba fue derrocado y detenido, la
democracia fue rechazada, se conservó su apariencia, pero el poder se apoyó en la fuerza.
Como Primer Ministro se estableció en Leopoldville, pero la capital era separatista, el jefe era Kasavubu. Lumumba
sin fuerzas se va a Stanleyville, haciéndose separatista de manera provisional.
La unidad era necesaria para el Congo para su independencia, pero la formula europea no correspondía a las
necesidades de los congoleños; lazos más fuertes y más sólidos los unían a su suelo natal, la etnia. La centralización
solo representaba la conciencia de clase de los centralizados, es decir, los evolucionados.
La independencia ha sido otorgada y Lumumba era consciente de eso. “No he visto en ningún lugar del mundo que la
antigua potencia organice y dirija las elecciones que consagran la independencia de un país. Cuando en 1830 Bélgica
conquistó su independencia, fueron los mismos belgas los que primeramente organizaron un gobierno provisional”

El rey Baduino dio un discurso paternalista, “les regalamos un juguetito, no lo rompan”
Lumumba indignado toma el micrófono y da el discurso que tengo en fotocopia, bastante radical, haciendo alusión a
que a independencia fue conquistada por años de luchas de los congoleños. Una independencia concedida no es
más que una reglamentación de la servidumbre. Las jornadas de enero de 1959 habían sido sino las causas, la
ocasión para la nueva política colonial del gobierno belga.
Por ejemplo, en Vietnam y en Argelia la unidad u la centralización precedieron a la independencia. En el Congo no
fue así, cambiaron las mentalidades y provocaron problemas. Pero nunca estuvieron orquestadas, no tenían ni el
mismo origen ni las mismas razones ni los mismos objetivos.
Error de Bélgica: su empecinamiento por mantener a ese país conquistado dentro de la ignorancia y el
analfabetismo; en su deseo de conservar las feudalidades; las rivalidades, las estructuras tradicionales, el derecho
consuetudinario. Después de haberlo atomizado, decide de pronto abandonarlo, segura de que la ausencia de
cuadros y el desmenuzamiento de los poderes lo pondrán a su merced.
Lumumba, cualquiera que sea su popularidad, la adquiere de una legalidad importada de Europa y que los
congoleños no reconocen (salvo los evolucionados). El 1ro de julio de 1960 Lumumba está solo, sin poder,
traicionado por todos y ya perdido.
Lumumba era un revolucionario sin revolución. Se encontraba en cierta forma en la etapa siguiente a una
insurrección que no había tenido lugar. No podía proyectar los cuadros administrativos como lo hubiese podido
hacer en plena acción. Era preciso africanizar los cuadros.
Antes de la independencia los congoleños advirtieron que exigirían la supresión de los privilegios a los blancos. Tras
el conflicto de raza se perfilaba en conflicto de clase: los pobres hartos del lujo de los ricos y querían ocupar su lugar.
Lumumba cometió el error de pedirle a Janssen una medida a medias a lo que le respondió: “ustedes no obtendrán
nada. Ni hoy ni nunca”. Los soldados se levantaron contra Janssen y contra Lumumba que había esperado la rebelión
para destituirlo. Es decir, a la vez, contra el paternalismo colonial y contra la joven democracia congoleña.
Los funcionarios huyeron, las empresas privadas cerraron sus puertas. Lumumba hizo lo que pudo para retenerlos.
Pero al mismo tiempo llegaron tropas belgas, tuvo que romper con Bélgica, lo que acabó de asustar a la población
blanca. Sin embargo, las masas querían expulsar a los belgas. Se le reprochó a Lumumba que no se ponga a la cabeza
del movimiento. Los obreros reclamaban un aumento de salario. Estallaron huelgas contra él, Lumumba las reprimió,
quería salvar la economía congoleña.
La desigualdad laboral y la lucha de los evolucionados contra esto ayudó a acercar a la pequeña burguesía al pueblo,
las masas los veían como los nuevos amos. La pequeña burguesía negra solo podía establecer su autoridad
abandonando el Congo al imperialismo. Lumumba, lejos de representar los intereses de clase de los evolucionados,
veía disminuir u poder porque se oponía a ellos. Es cierto que no era en nombre de los intereses de la masa, sino en
nombre del universalismo jacobino.
Kasavubur, la ABAKO, los provocadores belgas hicieron pasar a Lumumba por tirano. Nada más lejos de su carácter.
Lumumba debe atacar a la clase dirigente, su propia clase, para mantenerla en el rango de clase universal, lo que
implica que en nombre de la unidad que cada grupo social sacrifique sus intereses al interés común. Pero no piensan
hacerlo.
A falta de un movimiento de masas, de una lucha armada, de un programa socialista, el centralismo, como praxis
unificadora, le parece a todos arbitraria. Lumumba tiene a todos en su contra.
La secesión katanguesa que precipita el desastre es el resultado de un acuerdo entre las feudalidades locales, el
colonato de poblamiento y la Unión Minera.
Los belgas, los franceses, los ingleses, las grandes compañías y M.H. mandaron a asesinar a Lumumba por sus
hombres de confianza, Kasavubu, Mobutu, Tscombé, Munongo, y América del Norte viró la cara para no ver la
sangre. Así, por medio de ese asesinato se instaura el neocolonialismo en el Congo.
Lumumba era el hombre del tránsito de poderes, inmediatamente después debía desaparecer. Todo porque en vida
rechazaba la solución neocolonialista.
Las ambiciones de Kasavubu y su separatismo mantienen las antiguas discordias alentadas por la administración
belga y sin que los blancos se hagan sospechosos de haberse inmiscuido.
El futuro de Katanga se arregló entre belgas, ingleses, franceses, americanos, rhodesianos, blancos de África del Sur.
Los soldados que cuidan a Lumumba se amotinan: si no se les paga lo libertarán. Los dirigentes de Leopolville
recurren a los katangueses. Tschombé pagará el sueldo; a cambio ellos de entregarán a Lumumba. Hasta en la
prisión, el primer ministro destituido demuestra la necesidad del centralismo. Estallan disturbios de campesinos y
obreros que se movilizan contra el mantenimiento de la economía colonialista.
Gizenga, nuevo líder del centralismo, toma medidas radicales en Stanleyville: los trusts son africanizados, los belgas
asignados a residencias y sometidos a un impuesto excepcional.
“vocación socialista de África”: neocolonialismo o socialización. Lumumba podía hacerlo, esto generaba temor entre
sus enemigos.
Lumumba se había enterado que Bélgica traicionaba lo dicho, que la Unión Minera fomentaba las secesiones, que los
soldados de la ONU habían protegido a Kasavubu el separatista y dejado al Primer Ministro centralista a merced de
sus enemigos. Lo que temían más que nada los evolucionados y las Grandes compañías, era la radicalización de
Lumumba por las masas y la unificación de las masas por Lumumba. Su asesinato selló la alianza reciente del
imperialismo y de la pequeña burguesía negra.
Un fracaso de Lumumba fue el panafricanismo. N´Krumah envió tropas de Ghana al Congo bajo la autoridad de la
ONU quien usó esas tropas en contra de Lumumba, a pesar de las protestas de Ghana. La ONU no era una
organización imparcial, sino un sistema dirigido a defender el imperialismo. Toda África, humillada por no haber
podido salvar al hombre de Accra. Lumumba en un momento de exasperación, indignado por la actitud de
Hammarskjold, había apellado a la URSS que le había enviado aviones. Se apresuraron a tildarlo de comunista. África
comprendió: cuando un jefe de gobierno “independiente” le pide ayuda a los soviéticos, los occidentales los
destituyen.
Lumumba fue mártir del panafricanismo.
Al abrigo del Ejército Nacional Congoleño la burguesía congoleña, esa clase de traidores y de vendidos van a
perfeccionar su obra y a constituirse en clase de explotación.

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