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Administrar e innovar en medios

La empresa periodística

Referencias bibliográ cas


LECCIÓN 1 de 2

La empresa periodística

A diferencia de otras empresas, cuyo fin es el de comercializar bienes y servicios, la empresa periodística se encuentra atravesada por la consagración del
derecho a la comunicación, vinculada al ejercicio de la libertad de expresión, que constituye un derecho humano y constitucional fundamental y protegido por
normativa internacional. 

Es posible pensar, entonces, que la empresa informativa se propone resolver una


necesidad básica de los ciudadanos, como lo es la necesidad de producir y recibir
información.

Además de incorporar dicha función social, este tipo de empresas requiere de trabajadores profesionales y de una estructura organizativa especial.

“ Se trata de una unidad de producción que combina una serie de recursos de diferente naturaleza (material, económica y humana) para
la satisfacción de una necesidad en el mercado, mediante la producción de bienes o servicios y que persigue unos objetivos
determinados; y que se va a distinguir de otras empresas fundamentalmente por dos características: el tipo de necesidad que
satisface, la necesidad de información, entretenimiento y persuasión, y el tipo de trabajo que aporta valor al producto o servicio que es
intelectual, creativo y ejecutado por profesionales. ”

(Caro González, 2007, pp. 21-22).

Podemos destacar, entonces, algunos aspectos centrales que caracterizan a las empresas informativas con objetivos periodísticos. 

1 En primer lugar, la naturaleza del producto, ya que “la principal característica del producto o servicio informativo es que se trata de un bien perecedero y no
almacenable” (Caro González, 2007, p. 23). La información tiene fecha de caducidad casi inmediatamente después de haber sido publicada. El vencimiento de la
materia prima informativa es uno de los rasgos propios de este rubro. En el caso de un periódico, “cuando la información, ‘materia prima’, llega a la redacción es
preciso transformarla para convertirla en el producto informativo listo para ser distribuido” (Caro González, 2007, p. 24). Normalmente, la información llega a manos
del periodista en estado “crudo” y es necesario elaborarla para que, eventualmente, pueda ser publicada. Los aspectos tecnológicos y de distribución serán clave a
la hora de planificar una estrategia de comercialización del producto elaborado, en este caso, el producto periodístico.

2 El segundo factor que es importante considerar es el tipo de empleados, que se vincula al tipo de trabajos desarrollados en las redacciones, estudios o salas de
producción. El trabajo en las empresas informativas se caracteriza por ser creativo, intelectual y llevado adelante por profesionales de la comunicación. Claro que
existen excepciones de la regla y muchas veces nos encontramos con personalidades que no necesariamente se formaron como periodistas, pero que ejercen
cierta influencia en la opinión pública a partir del desarrollo de contenidos mediáticos. Las características que deben reunir los profesionales de las redacciones
son: cultura, dominio del lenguaje, sentido profesional, ética, capacidad de trabajo, creatividad y capacidad de trabajo en equipo (Caro González, 2007). En
contextos de convergencia digital, también podríamos agregar la capacidad de adaptarse a distintos escenarios y de afrontar certeramente las demandas del
multitasking, si delimitamos la dedicación y el alcance de las tareas que implican desde la producción de una nota hasta publicaciones en redes sociales.

3 En tercer lugar, la función social que cumple una empresa informativa es un rasgo distintivo de otros tipos de empresas. Esta función social se relaciona
directamente con la capacidad de formar opinión y de incidir en la opinión pública. Esta función se ve condicionada tanto por las demandas de la sociedad civil
como por las condiciones de existencia y desarrollo de los medios, en cuanto empresas sostenibles en el tiempo.
“ La única manera de garantizar una sociedad pluralmente informada es evitando la concentración de la propiedad en los medios, algo
que en el sistema económico actual resulta muy complicado. Por ejemplo, la intervención del estado en el sector audiovisual, mediante
una legislación específica, pretende garantizar el pluralismo informativo, es decir, reconocer la legitimidad de todas las opciones
culturales, modos y estilos de vida, posturas ideológicas, políticas y valores.”

 (Caro González, 2007, p. 31).

4 Asimismo, la modalidad de organización bicéfala es un rasgo propio de este tipo de empresas. Por un lado, se encuentra la actividad social de informar; por otro
lado, la actividad económica, que es el corazón del negocio mediático. Sin embargo, ambas dimensiones conviven y dialogan en el modelo de negocio que debe ser
capaz de potenciar estos aspectos para garantizar la sostenibilidad del proyecto comunicacional y de la estructura de costos y rentabilidad de una empresa
informativa. La coordinación entre la gerencia comercial y la dirección periodística es clave en este sentido.

5 Por último, las empresas periodísticas se enfocan en el doble mercado, integrado por los anunciantes y las audiencias. Los medios intentan fortalecer la llegada a
públicos/audiencias/usuarios y, al mismo tiempo, apuntan a captar anunciantes públicos o privados.

Existen también experiencias mediáticas que unen el concepto de anunciante con el de


audiencia y que plantean una estrategia comercial de tipo colaborativa mediante el uso
del concepto de comunidad (ver Figura 1).

Figura 1: Para captar recursos económicos, Futurock desarrolla campañas para sumar miembros de su comunidad y
apunta a las audiencias

Fuente: captura de pantalla de la web de Futurock. Recuperado de https://futurock.fm/comunidad/


En el campo mediático, también participa otro tipo de organizaciones mediáticas que conforman el denominado tercer sector. Las radios y señales de televisión de
gestión cooperativa o comunitaria ingresan en esta categoría y presentan modelos de negocios bien distintos al de una empresa informativa tradicional. Las
estrategias de sostenibilidad desplegadas por las empresas autogestionadas por sus propios trabajadores reconocen cuestiones que han sido planteadas por

organismos internacionales como la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) 1. Este organismo plantea una serie
de indicadores que son útiles a la hora de evaluar la viabilidad de estos modelos alternativos.

“ El entorno general para los negocios favorece la viabilidad de las organizaciones de medios, ya que genera niveles de riqueza, recursos
y la estabilidad económica necesaria para fomentar la existencia de medios de comunicación libres e independientes, y para sostener
el consumo de medios por parte del público. ”

(UNESCO, 2008). 

 Considerando este factor, nos preguntamos: ¿Son viables los medios de comunicación sin fines de lucro? ¿Qué estrategias de sostenibilidad
implementan? ¿Es posible hacer periodismo emprendedor? 

Entendemos por emprendedor a “una persona que descubre una oportunidad en un determinado mercado y decide aprovecharla poniendo en marcha una
actividad profesional o empresarial” (Caro González, 2007, p. 199). 

En principio, es necesario reconocer que los medios del tercer sector (Segura y Waisbord, 2016) configuran un:

“ … heterogéneo grupo de estaciones de radio, cooperativas de TV y video y publicaciones, conectados con una miríada de movimientos
sociales y organizaciones de trabajadores, campesinos, agricultores, mineros, pueblos indígenas, grupos de derechos humanos,
sindicatos, las asociaciones vecinales y pobres urbanos aglutinados entre sí por su vocación de priorizar la voz y participación
ciudadana.”

(Rivero y Monje, 2018, p59)

En estos medios, el objetivo del vínculo con las audiencias y la función social son predominantes. Asimismo, en estos casos, los trabajadores de prensa no son
empleados, sino dueños del medio, y participan tanto de la producción periodística como de la gestión administrativa y comercial.

“ Existen asambleas, con distintas frecuencias y obligaciones, para definir temas relacionados a la gestión del proyecto. Y hay en casi
todos los casos una persona o un grupo de personas que se encarga de la gestión administrativa, los trámites, el pago de cuentas, la
realización de balances y otras tareas contables.”

(Godinez Galay, Binder y Fisher, 2017, p. 62)

Figura 2: Comercio y Justicia: el primer diario cooperativo autogestionado por sus trabajadores
Fuente: captura de pantalla de la web de Comercio y Justicia. Recuperado de www.comercioyjusticia.info

Video 1: Experiencia Comercio y Justicia II

Experiencia Comercio y Justicia II

Fuente: Universidad Nacional de Córdoba [Universidad Nacional de Córdoba] (2009/09/08). Experiencia Comercio y Justicia II. [YouTube]. Recuperado de

https://www.youtube.com/watch?v=bS9v9TPOzRE

En este tipo de medios, la innovación viene de la mano con los procesos de gestión colectiva y de administración participativa de los recursos, lo cual implica el
desempeño de un rol activo por parte de quienes trabajan en la empresa. La vieja dinámica del patrón y el empleado cede ante nuevos mecanismos de
organización del trabajo que generan un vínculo más directo entre el producto y quien lo realiza, ya que en ocasiones son los mismos periodistas quienes asumen
funciones de administración: pensemos, por ejemplo, en los consejos de administración de los medios cooperativos. Estos consejos se encuentran integrados
habitualmente por personal de administración, pero también por periodistas, editores y, jefes de sección que suman a sus funciones periodísticas las de
administración de la empresa en la que trabajan.

En el caso de los medios autogestionados del tipo emprendedores, sucede algo similar.
Muchas veces son los mismos creadores y directores del medio quienes coordinan el
proyecto periodístico y asumen funciones de gestión y administración.

También existen casos en los cuales se incorpora a socios con perfiles comerciales o de administración para el desarrollo de estas tareas, ante las cuales los y
las periodistas ejercen cierta resistencia.

No obstante, la innovación en los modelos de negocios periodísticos responde fundamentalmente a las miradas cruzadas entre quienes se especializan en
aspectos periodísticos y comunicacionales y quienes conocen de administración. Es en el cruce entre ambas perspectivas que surgen las estrategias creativas e
innovadoras que permiten ampliar horizontes y explorar nuevos formatos que den respuesta a los usos y a los cambios culturales y tecnológicos de los tiempos
que corren.

1 Para mayor información, lee el artículo Proyecto de indicadores de viabilidad de los medios de comunicación (2014), en bit.ly/2WqT3hr
LECCIÓN 2 de 2

Referencias bibliográficas

Caro González, F. J. (2007). Gestión de Empresas Informativas. Sevilla, ES: McGraw-Hill/Interamericana de España.

Godinez Galay, F., Binder, I. y Fisher, P. (2017). Como sea: sostenibilidad económico-administrativa en radios comunitarias de Argentina. Buenos Aires, AR:
Ediciones del Jinete Insomne.

Monje, D. y Rivero, E. (2018) La televisión cooperativa y comunitaria argentina frente al imperativo de la convergencia digital. Commons, Revista de Comunicación y
Ciudadanía Digital.

[Video]. Informe U Diversidades. Experiencia Comercio y Justicia II (2009) Universidad Nacional de Córdoba. 

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