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Excma.

Cámara de Apelaciones en
lo Civil y Comercial

REGISTRADA AL
TOMO 2020 FALLO Nº 19.824
DEL LIBRO DE SENTENCIAS

FORMOSA, DIECINUEVE DE NOVIEMBRE DEL AÑO DOS MIL VEINTE.-


V I S T O:
Estos autos caratulados: “CAMPÍAS, MERCEDES DEL CARMEN Y OTROS C/
HONORABLE CONCEJO DELIBERANTE DE LA MUNICIPALIDAD DE VILLA
ESCOLAR S/ JUICIO DE AMPARO (LEY 749)” -Expte. Nº 12.196/20, registro de
Cámara-, venidos del Juzgado de Primera Instancia en lo Civil y Comercial Nº 4, con asiento en
esta ciudad, puestos a conocimiento de esta Sala I -Año 2020- de la Excma. Cámara de
Apelaciones en lo Civil y Comercial; y,
CONSIDERANDO:
Que por Sentencia Nº 264/2020, obrante a fs. 149/155 vta., la Juez de primera instancia,
resolvió hacer lugar a la acción de amparo interpuesta por los accionantes, declarando la
arbitrariedad e ilegalidad manifiesta de la Resolución Nº 247/2019 dictada en fecha 13/12/2019 por
el presidente del HCD de Villa Escolar, dejando sin efecto dicha resolución y disponiendo el
restablecimiento en el cargo y en la misma situación de revista laboral a cada uno de los amparistas.
Contra dicho resolutorio, el Dr. Daniel Majda, apela y expresa agravios a fs. 160/164. A fs.
169 se concede el recurso en relación, en ambos efectos, corriéndose traslado de la expresión de
agravios a los amparistas, quienes contestan a fs. 174/176 vta. Elevadas las actuaciones a esta
Alzada a fs. 180 se dicta la providencia de autos, la que se encuentra firme.
En el memorial, se agravia el recurrente y considera la resolución de la magistrada errada y
arbitraria, al no resultar una derivación razonada del derecho vigente y de los propios antecedentes
del caso, generando un precedente que llevará a un estado de anarquía total a los municipios cuyas
gestiones ejecutivas y legislativas están próximas a finalizar, lo que tiene implicancias de gravedad
institucional. Afirma el recurrente, que no se tuvo en cuenta la existencia de un acto administrativo
regular luego invalidado. Considera que el primer error radica en considerar a las Resoluciones en
cuestión como actos administrativos regulares, sin analizar que su anulación respondía estrictamente
a vicios de apartamiento a normas y procedimientos legales para su dictado. Asimismo, resalta el
apelante que la Resolución Nº 247/19 dejada sin efecto por la magistrada, fue dictada en
cumplimiento de la Ley Nº 25.917 de responsabilidad fiscal, a la que la Provincia se hallaba
adherida, y conforme el art. 10 los gobiernos se comprometen a no incrementar la relación de
cargos ocupados en el Sector Público existente al 31 de diciembre de 2017 y el art. 15 bis que
establece que durante los dos últimos trimestres del año de fin de mandato no se podrán realizar
incrementos del gasto corriente de carácter permanente, detallando las excepciones, que -señala el
recurrente- ninguna tiene que ver con la naturaleza del acto administrativo plasmado en las
resoluciones anuladas, ya que constituyen nuevas y originarias designaciones de personal, sin
antecedentes, con pase a planta permanente en forma directa, sin concurso, sin respetar la carrera
administrativa y que genera una erogación y afectación permanente del gasto público. Señala el
recurrente también, que además de violarse normas de orden público en materia de responsabilidad
fiscal, se omitió el procedimiento especial y específico fijado por Decreto Ley Nº 696/978 en
relación al ingreso a la administración publica, a los nombramientos y calificaciones. Concluye
afirmando que, si las disposiciones administrativas agregadas a la causa y dejadas sin efecto por la
actual gestión del HCD de Villa Escolar mediante resolución Nº 247/19 son equiparables a actos
administrativos regulares, definitivamente los estados están condenados al fracaso más rotundo.
A fs. 174/176 vta. los amparistas contestan el traslado del memorial de agravios, citando
precedentes de este Tribunal, afirmando que en el caso, el HCD de la Municipalidad de Villa Escolar
a través de una resolución emitida sin haber llevado adelante previamente la apertura de un sumario
administrativo, tal como lo establece el Estatuto para empleados de la Administración Publica
Provincial y el Decreto ley de Procedimiento Administrativo Provincial y omitiendo el
procedimiento que se debe llevar a cabo para decidir la cesantía de empleados públicos, ha
vulnerado derechos adquiridos en pleno ejercicio. Afirma que las resoluciones que el HCD deja sin
efecto gozan de presunción de legitimidad y ejecutoriedad como actos administrativos. Alega que
los trabajadores no pueden asumir la responsabilidad y ser víctimas de los daños que la mala
administración o desconocimiento del empleador de las leyes vigentes pueda provocar. Señalan que
no es imputable a los amparistas que el Ejecutivo Municipal del mandato anterior haya hecho caso
omiso de la Ley Provincial Nº 1670 y de la Nacional Nº 27.428, debiendo en todo caso, instruirse
por la vía judicial respectiva, la anulación de los decretos, conforme lo establece el art. 57 del Dcto.
Ley 971/79. En cuanto al agravio relativo a la orfandad del concurso de antecedentes para el acceso
al empleo público de los amparistas, afirman que siguiendo esa línea argumentativa, todos los
empleados públicos de la provincia y de los municipios deberían ser despedidos, sin perjuicio de
ello, afirma que todos los amparistas contaban con antecedentes previos a los nombramientos y
también con seis meses de prestación efectiva de servicios conforme lo exige el art. 6 del Decreto
Ley 696 para conferir carácter definitivo a los nombramientos.
Que expuestos así los agravios y su contestación, cabe adelantar, que la cuestión
debatida en autos ha sido ya analizada por este Tribunal (Fallos Nº 19.688/20, 17.941/16,
15.996/12, 15.966/12, entre otros), arribándose a una solución concordante con la de la
magistrada en el fallo recurrido, no advirtiéndose en el presente caso circunstancia alguna que
justifique un apartamiento de dicha doctrina. Asimismo, tal como lo menciona la juez de
primera instancia, el Superior Tribunal de Justicia se ha expedido en Fallo Nº 9786/11 en igual
sentido, resolución que resulta obligatoria para los magistrados inferiores conforme lo establece
el art. 171 de nuestra Constitución Provincial.
Que, respondiendo ahora a los agravios expuestos en la presente apelación, los que se
centran en la falta de examen de la sentenciante de la Ley Nacional Nº 25.917, a la que adhiere
la Provincia por Ley Nº 1670, cabe señalar -sin ingresar al análisis de la misma y a su
implicancia en las resoluciones dejadas sin efecto por el HCD- que el recurrente no ataca el
principal fundamento de la resolución apelada y es justamente la vía prevista para dejar sin
efecto un acto administrativo previo, que como tal goza de presunción de legitimidad, y que
además ha generado derechos subjetivos que se estaban cumpliendo a favor de los amparistas,
conforme las pruebas analizadas.
La Administración Pública, en el ejercicio de funciones que le son propias, puede llevar a
cabo de oficio la extinción de sus actos, por la ilegitimidad de éstos o bien por existir razones de
mérito, conveniencia y oportunidad que así lo aconsejen, sin embargo, la revocación puede ser
declarada, sin recurrir a la justicia, hasta que el acto comienza a cumplirse, ya que si ha tenido
principio de ejecución, deberá plantearse judicialmente su anulación. La legislación que ahora, en el
marco de la presente apelación cita el recurrente, deberá ser invocada -en su caso- en el proceso
judicial contencioso administrativo ante el Superior Tribunal de Justicia, pues resulta el único
competente para disponer la anulación de los actos administrativos en cuestión.
De las documentales obrantes en la causa, más precisamente de los recibos de haberes
adjuntados, surge claramente que las Resoluciones Nº 135/19, 143/19, 141/19, 133/19, 205/19,
139/19, 140/19, 207/19 y 142/19 generaron derechos subjetivos, por cuanto los amparistas
efectivamente percibieron sus haberes de acuerdo a la situación laboral y categorías adquiridas por
los mencionados instrumentos. Que ante tales circunstancias, independientemente de los vicios que
se le atribuyen, la Municipalidad de Villa Escolar debió requerir la anulación de dichos instrumentos
en sede judicial en el fuero contencioso administrativo. Y en tal sentido se viene expidiendo este
Tribunal en Fallos Nº 17.941/16, 15.996/12, 15.966/12 y recientemente, en Fallo Nº 19.668/20, ha
señalado que los decretos de nombramiento “mantienen su validez por imperio de la "presunción de
legitimidad y ejecutoriedad" propias de los actos administrativos, lo que importa su inmediata
aplicación hasta tanto sean anulados o suspendidos sus efectos, para lo cual debe señalarse que los
decretos derogatorios impugnados en esta acción carecen de eficacia para ello. (...) si existieron
irregularidades deberán canalizarse en el ámbito propio administrativo y contencioso
administrativo, siendo improcedente, en consecuencia, acoger el recurso y por ende la defensa
intentada, porque lo que aquí se juzga -como se expresó- es la legalidad o no de los decretos
impugnados en la instancia de grado, y como se expresó los mismos carecen de eficacia para
cumplir la finalidad pretendida por encontrarse afectada la garantía del debido proceso, al
haber omitido utilizar las vías nulificatorias que prevé la ley para tales casos.”
Que la gravedad del vicio del que podría adolecer el acto de nombramiento (falta de
previsión presupuestaria, irregularidades de los agentes propuestos como empleados, omisión de la
ley presupuestaria fiscal) y la facultad de revocar de oficio de la que goza la Administración, no han
sido puestas en discusión y si bien -como se dijo- esta última existe y debe ser practicada, encuentra
un freno ante las circunstancias del caso. Nos encontramos ante la presencia de derechos subjetivos
en plena ejecución, que justifican la limitación de las potestades del estado, resultando decisivo el
aspecto subjetivo de la persona involucrada y el principal fundamento de la necesidad de acudir a la
instancia judicial.
Cabe dejar en claro que el presente fallo, no importa juzgamiento alguno sobre la
legalidad o legitimidad de las resoluciones de ascensos, recategorizaciones o promociones a
planta permanente, siendo el Superior Tribunal de Justicia, como órgano competente, quien
juzgará eventualmente la pertinencia o no de la anulación de las mismas, a través de la
correspondiente acción de lesividad (art. 17 CPA).
Finalmente, en relación a lo afirmado por el recurrente, que considera que la sentencia que
se confirma, llevará a un estado de anarquía total, condenando al fracaso más rotundo a los estados
nacionales, provinciales y municipales, cabe traer a colación lo dicho por Francisco de las Carreras
en la obra Tratado Jurisprudencial y Doctrinario-Derecho Administrativo, Dir. Tomas Hutchinson,
Tomo II, pag. 801, quien afirma que con soluciones como la presente, “se está asegurando que no
se lesionen arbitrariamente los derechos que se encuentren en pleno uso y goce por los
administrados y se reivindica el principio constitucional de la división de los poderes del Estado y
el rol reservado a los magistrados del Poder Judicial, cuestiones que, a no dudarlo, creemos,
coadyuvan al Estado de Derecho y en definitiva “a promover el bienestar general” como lo
establece el Preámbulo de la Constitución Nacional”.
Que en consecuencia, y conforme todo lo expuesto, no cabe más que rechazar el recurso de
apelación interpuesto a fs. 160/164 y confirmar la sentencia recurrida, con costas al apelante
conforme al principio objetivo de la derrota (art. 68 del C.P.C.C.).
Por ello, con la opinión coincidente de las Señoras Jueces de Cámara, Dras. VANESSA
JENNY ANDREA BOONMAN y TELMA C. BENTANCUR, suscribiendo el fallo el Dr.
HORACIO ROBERTO ROGLAN -Presidente- sin emitir su voto por haberse alcanzado la
mayoría legal (conf. art. 33, Ley Nº 521 y sus modificatorias, art. 5 del Reglamento de este
Tribunal y Acta Nº 01/19, puntos segundo y tercero), la SALA I -AÑO 2020- de esta EXCMA.
CÁMARA DE APELACIONES EN LO CIVIL Y COMERCIAL,
R E S U E L V E:
I.- RECHAZAR el recurso de apelación interpuesto a fs. 160/164 y, en su mérito
confirmar la Sentencia Nº 264/2020 (fs. 149/155 vta.), con costas en esta instancia al recurrente
(art. 68 del C.P.C.C.).-
Regístrese, notifíquese y, oportunamente, bajen los autos al Juzgado de origen.-

-Fdo.- -Fdo.- -Fdo.-


DRA. VANESSA J. A. BOONMAN DRA. TELMA C. BENTANCUR DR. HORACIO ROBERTO ROGLAN
JUEZ JUEZ PRESIDENTE
CÁMARA CIVIL Y COMERCIAL CÁMARA CIVIL Y COMERCIAL CÁMARA CIVIL Y COMERCIAL

-Fdo.-
ANTE MI DR. RAMÓN ULISES CÓRDOVA
SECRETARIO
CÁMARA CIVIL Y COMERCIAL
ES COPIA

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