|. Alegre Aragtiés - L. Alonso Schdkel
J.I. Blanco - J. Calvo
J. R. Flecha - P. I. Fraile
A. Gil Modrego - J. Ruiz Martorell
V. Morla Asensio
Personajes
a1 Antiguo Testamento
Vol. I
wialiest Ries ac oN petites arcrtiucs Geciwus.6 Parsonajes del Antigno ‘L
Luis Alousw Schikel
Qobelet: ¢Un postmoderno en la antigiiedad? 0.00. 201
Pectro Ipnaciv Fraile
‘Tobias: La religién en dificultudés oe 213
P
Lewacie Praile
Judas Macabeo: ;Adaptacion o fundamencalismo?Tobias:
La religion en dificultades
Pedra lunetcio Fraile
«Bui joven, ya soy viejo: nunca he vistv 4 un justo ahan-
donado ni a sus hijos mendigando pan» (Sal 37,25).
1. El libro de Tobias
Vamos a coger entre las manos una obra pequefia, s6lo 14
capftulos, que frecuentemente pasa desapercibida para los lec-
tores de la Biblia. Un Libro ameno de leceura y con una seric
de rasgos propios que hacen de él una obra interesante y su-
gerente a la yez.
El libro de Tobfas no es un caso tinico en la Sagrada Es-
Critura, sino que forma parte de un conjunto més amplio di-
ficilmence clasificable cn los esquemas bien conocidos de
«Ley», «Historia», «Profetas», «Poesia» y «Sapienciales».
Tobyas, junto con los libros de Rur, Judie y Ester, forma par-
te de un reducido grupo que Alonso Schikel recoge en su
Nueva Biblia Popafiola (NBE) bajo el citulo de «Narraciones».
Hoy la mayorfa de los especialisras nos habla de que estamos
no tanto ante «rclaros histéricos» cuanto ante «relatos didac-
ticos». La finalidad, composicién, recursos literarios emplea-
dos estén lejos de la narracién histérica. En el caso de Tobias
la trarna se desarrolla en torno a los avatares de una familia
piadosa judia que se ve sometida al exilio en Ninive bajo el
dominio asirio.Tobias: Ta ridigitn en difienttades 235
& if 2
Haved el bien y bendecid «@ Dios en todo momento
Uuo de los aspectos mas resaltados en el libro es el com-
portamiento de sus protayonistas, especialmente el anciano
Tobit, cuya vida ha estado mareada por el cumplimiento ri-
guroso de la ley de Moisés y sus preceptos concreros, y por su
firme piedad manifesrada en la practica de las buenas obras,
entre las que destacan la oracién y la limesna. La imposibili-
dad de aeceder al templo y a su culto leva a poner el acento
en los deberes personales y privados hacia Dios y el préjimo
(si bien éste se queda reducido a los familiares y @ los compa-
triotas judios).
Ya hemos hablado de los consejos que da Rafael con sabor
sapiencial: «haced el bien y el mal no os alcanzara» (12,7), «la
limosna hecha con rectitud vale mds que la riqueza lograda
con injusticia» (12,8), «la limosna libra de la muerte y puri-
fica de todo pecado», etc. Entre estos deberes destacan, adc-
mis de la limosna, la asistencia, la hospitalidad, la justa retri-
bucién y dar sepulrura a los difuntos.
Junto con la invitaciGn a realizar siempre el bien, el autor
insiste en la alabanza a Dios. «Bendecid a Dios y reconoced
ante todos los seres vivos todo el bien que Dios os ha hecho
para que todos bendigan y alaben su nombre» (12,6); «es bue-
no guardar el secreto del rey y hay que proclamar las obras de
Dios abiettamente» (12,11), «bendecid a Dios por siempre...
bendecidlo y alabado dia tras dia» (12,18)
El Libro de Tobfas acaba con una invitacién a la alabanza.
El Sefior nunca abandona a su pueblo. El ha tenicdo la expe-
tiencia. Por cso desea que el lector se deje llevar por la con-
fianza en la providencia divina, sea fiel a la fe de su pueblo y
sus tradiciones, y asi obtenga la bencicién abundante de
Dios.
Bibliografia
Cazelles, H., Inti
1989
Flecha, J. t., Byiewedores de Dior I, Ed. Atenas, Madrid 1993,
Gonzalez Lamacrid, A., Lett tradiciones histérices de Lrveel, Editocial Verba
Divino, Estella 1995
in critica af Antigns Testamento, Herder, Barcelona