Está en la página 1de 7
INVIERNO 207 occ VERRO DIVINO N72. MESOPOTAMIA Y LA BIBLIA Coordinador: Pedro Ignacio Fraile Yécora EDITORIAL... SECCION MONOGRAFICA. 1. La cultura mesopotémicay la Biblia... Francesc RAMIS DARDER 2. Génesis 1-3 y los relatos babilénicos de Ia creacién ..... Koldo ESTEBAN 3.El imperio asirio y el profeta Tsaias... Piro Ignacio FRAILE YECORA 4. Asitios y babilonios en el libro de Jeremias Pedro Ignacio FRAILE 'VECORA Pag, 2 Pag. 5 Pag. 15 ns Pag, 25 Pag. 35 5. [1 influjo del zorvastrisino persa Ta Biba nen Jess CAMPOS SANTIAGO. SECCION ABIERTA 1, Mesopotamia en Ledn.. Jestis GARCIA RECIO SECCION DIDACTICA 1."Torre de Babel: historia y mit Juan Carlos GARCIA DOMENE SECCION INFORMATIVA 1. Boletin bibliografico biblicO...... 2.Noticias...... Pig Pag. 5) on Pag, . Pag. . Pag. 7 43 64 palit ASIRIOY EL PROFETA ISAIAS Bisel La proficta biblica no se puede entender reunstancias histricas al marger )y dos en el reino del dos son testigas or la que se d tanto de la p peligrosamente ambos reinas como vable de los a: del ascenso it os. Es bien siempre baje veerd para de los soldados del Tigris. Judit, tras sobrevivir, pero De en Isc muchas peripecias, po tiene los dfas conta profetas nos fijun jas, testigo ta, de la de de li guerra siro-e ricidne de Samaria, de la crueldac asiria, a la v que profeta de ta santidad de Dios, que solo él puede salvar, y del amencio Mesias, waa Jersine cre evuna TOT» ©. (2e 18-19) Tian) SOLO SALVA FL SENOR profeiza que Jerusalén debe vest, ya qu la mayt9 de Vsiwe enced sobre Asur, En efecto, la Biblia nos dice {que un azote vino sobre of ejércite de Senaquerth, que tuvo que ctiarse pre- Gpitadamene (2 Re 19,355 Is 17.14) Se desconocen las eircunstancias que impidieran Ja capture de Jersalén Para Herddoio, la retirada se debe @ tuna iawvasi6n de ratas (peste), que era el terror de ta época, Por otra parte, Se- haquerib two que volver ripidamente para luchar contra wna nice subllevae Gion de palacio. En civeunstencias tan Gramaticas, Isaias se vuelve contra ‘Asiria, que ha sobrepasado sx mision de “instrumento divine” (Is 10,5-65 98,2). condena su orgullo y prepoten- nas y costosisimas consecencias, meee 17 14s 14.2427 3027-335 pensanéo que ev eflay ests Ie salvar ¥ le seevidn en pros de Ts 36-39) ¥ Bran, En la época de Tsuias, estas po~ Jmuncia la salvaci6n para Jerusalén tencias eran dos: Ios asirios y Tas €— >> (hs 31.565 37.33-39). ios. Loe reyes se balancearon entre ambos: Ajne pid syuda a los asirios para defenderse de 1a coalicién aye tos sirios e Isracl (guerra "siro-efraimite” i mas cde, Ezequins pedird ayuda a Egipto para defenderse de los asirios. bates es ol profeta del mesianismo, de la santidad de Digs y de su salvacién Los ues no son distinens ‘unus de ovros, sino que estén intima mente articulados entre si, La pregun- ta de fondo es: équién es santo, sino Dios?, aquién puede salvar, sino Dios?, da quién debemos dar culto, sino a Dios?, éen quign podemos de positar nuesira confianza, sine en Dios? Juds, en Ia persona de sus reyes, de= muestra ser Wo mucho mejor que guios pueblos. Cuando Tega el mo- mento del peliyro, aeude * las poten Cas militares, aun a costa de gravis La reacci6n euférica del pueblo tras la retimada de. Se- naguerth de Jemsalen provacs la decepehin del prof dqus promriia ds duis ordeulos de condens contr la sr gucta inconsciente del pucbio y su negativa & can sentirge (Is 22 1-145 149) TE] mensaje de Isafas es claro: sola Dios salva; solo @ die puede adovar: nia la violencia. ia Jas atm ot ‘figs, que solo ten injustcis y provocan una secucla Ezequias se rindié y siguié reinando hasta el 289 687, sung solo en Jerusalén, wnientras que el resto de a Judd ps6 a Tos fists. Aguel seinado qc hab comeny nee zado brillantemente aeahé en una eatSstrole: Jerusalém [Vale] es el Dios que me salvay fora vasallo de Asiria hasta la caida de Ninive, ¥ todo el tengp vonliancay mote Sr sie aga de cultos extanjero 4 porque mi fuerza y mi alegria cs Yahets pois sabe sed ‘De cultos extranjeros (2 Re 234-10, rier EEE! ASIRIOS vas):\5) 60) (0s EN EL LIBRO DamalslaVIEN Pedro Ignacio Fraile ¥écora La figura proféticu central a finales fig del sigio VIL) 1 VT es Jeremie que coincide con el reinado del piadloso durante S, Josias, la caida de los asivios y la irrupcién de los babilonios; con cl fin de Jerusalés, del reino de Judit Jeremias es ol profeta que esté dia a dia de la “casa de David”. en el asedio y toma de la Ciudad Santa; ve cémo la destrupen y cémo sus dirigentes van al destierro. Predicd incansublemente que habia futuro si cran capuces de convertirse y se enfrenté con los “profetas dle Ia mentira”, én suelen datarse en este tiempo los profit Sofonius, de Nabi lu catia: de Ninive (612), que nar y de Habacuc, todos ellos ciertanente anteriores al exilio, El cambio de siglo (VII-VI) conocié la violencia exirema de asirios y babilonios » comacié la tentacién de las alianzas de los pequetios reinas buscando la proteccién de Egipto. Dios les aseguraba el futuro si se con wtfan, si volvian a él ON El castigo se hace irratediable, porque et pueblo no Ju observady Ia alianzi que realiz6 con Israel cuando salig de Egipto (Jr 11,1-8). Como en todos Tos protesas preeslicos, también en Jeremias Ia “llamada @ Ta con. Yersidn” va unida al “anuncio del castigo” en caso de que el pueblo no cambie, Heya un mor mento en el que Jeremias considera ya pasado cl tiempo de la conversiGn: “EL Seftor me dijo: ‘Aunque se presentare ante mi Moisés y Samuel, nov me apia~ daria de este pueblo: échalos de mi presencia, que se vayan” ([r 15,1-2). La frase que resume esta predicacion ex: "Veni sin remedio of rey de Ba pilonia” (Jr 36.29). La perversion ha aleanzad a los grandes y a los ped os: “Recoreed las calles de Jerusal mirad y comprobad; busead por ss plazas a ver si encontrfis un nombre, uno solo, que practique Ia justicia y busquc la verdad y yo perdonaré fest cudad” (}r'5,1-9). Divs, por medi del profits Je~ ‘remias, exige 1 sometimienty al poder habilonio camo ceplacién del cistigo y dmico medio de salvaguardar en cierta medids el reine. Un eapttala aparie merecen los profetas contempt: eos a Jeremfas cuyo mensaje es de paz. La versidn griega de los Serenta (LXX) matiza: no les lama “pro- Fecas", sino “falsos profecas”; pata cllos cx imposinle que Dios deje de ofrecer shal, es decir, paz y felie dad a su pueblo, Jeremias los califica como “predicado- res de rebelién” (29,32) 0 “seductores” del pueblo (38.22). El problema se agudivat: dquién riene razon? quign prodica la anréntica Palabra de Dios? (cl. cap. 28) Una ve? que cae Jemisalén, suena a reproche sus pala- Ineas: “aDénde estén vuestros profetas, que os protetiza- tan: *No vendrd contra vosotros el ey de Babilonia ni invaditd el tervitoxio'?” (37.1%), 1p) JERFMIAS, PROFFTA DE SALYACION Jeremias, que anumci6 y vivid la cra gedia mais grande de la historia de su pueblo, no es solo tn profeta Ge an huza y castigo; Jo es también de con- suelo y esperanza, Hegde ef momen- to crucial, cuando la eatdstrofe ex inminente, Jercmnias abre paso a 1a es petanza, Dios no ha terininada can su puede trasfor- ‘mura interior y exteriormente a Judi, la salvucién no es automtica, sino consecuen- cela (Jr 7,23) 0, parndojicamence, de la neeplacién del eastigo tanto por los ya desterrados {eap. 29) coma por fos no desterrarios: “Pero vienen iss, ordculo del Sefior, en que ya no se dird: “Vive el Senor, que s0c6 at los israclitas de Lgipto’, sino que se dint: Vive el Sef, que sac6 ut los israelitas det pats d novte y de todos fos paises por donde los habia disperss- Go! Yo Tos haré volver de mucvo a la tert que habia Gado a sus antepasacios” (Jr 16,1415; ef, 29,7-8).a8 INVIERNO 2011 + N® 72 iz MESOPOTAMIA Y LA BIBLIA Seer eae eC eee ag Poe EN IPA cece aE RAC ne tes na Peres Koldo ESTEBAN Sor CLO na Reno Laer ee Tee ny Bree eee Co Juan Carlos GARCIA editorial verbo divino -4Asirios y babilonios en el libro de Jeremias» Pedro Ignacio FRAILE YECORA Bon Seed COMER IOC soa er WU OS Ben NEN ele) See Rene ec Jestis GARCIA RECIO Say )MENE ‘Avda. de Pampiona, 41 - Apdo, 24 + 31200 ESTELLA (Naver'a)

También podría gustarte