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MIÉRCOLES 2 DE MAYO DE 2007

5 vias de Santo Tomás


Nancy Espinosa de los Monteros
 
Las 5 vías de la existencia de Dios.
 
1ra vía “Por el movimiento”
Existe el movimiento; todo lo que se mueve es movido por otro motor; si este motor se
mueve, necesitará a su vez otro, y así hasta el infinito; esto es imposible, porque no habría
ningún motor si no hay un primero, y este es Dios.
 
La primera vía es la prueba cosmológica, y por lo tanto es física; deducida de la Física y la
Metafísica de Aristóteles. Parte del principio de que “todo lo que se mueve es movido por
otro”. Ahora bien, si aquello que lo mueve se mueve a su vez, es preciso que también el sea
movido por otro, y así sucesivamente. Pero es imposible seguir así hasta el infinito, porque
entonces no habría un primer motor ni los otros moverían, como, por ejemplo, el bastón no
se mueve sino es movido por la mano. Por consiguiente es necesario llegar a un primer
motor que no sea movido por nada; y todos consideren que ese motor es Dios.
 
2da vía “Por la causa eficiente”
Hay una serie de causas eficientes: tiene que haber una primera causa, porque si no, no
habría ningún efecto, y esa causa prima es Dios.
 
La segunda vía es la prueba causal; y por lo tanto es metafísica. En la serie de causas
eficientes no podemos remontarnos hasta el infinito, porque entonces no habría una causa
primera y, por consiguiente, tampoco una causa ultima ni causas intermedias: por lo tanto,
debe haber una causa eficiente primera, que es Dios. Esta prueba esta tomada de Aristóteles
(Met., II, 2)
 
3ra vía “Por lo posible y lo necesario”
La generación y la corrupción muestran que hay entes que pueden ser o no ser; estos entes,
alguna vez no han sido, y habría habido un tiempo en que no hubiera nada, y nada hubiera
llegado a ser; tiene que haber un ente necesario por si mismo, y se llama Dios.
 
La tercera vía se deduce de la relación entre lo posible y lo necesario; por lo tanto es
metafísica. Las cosas posibles solo existen en virtud de las cosas necesarias: estas tienen las
causas de su necesidad o en sí o en otro. Si tienen la causa en otro, remiten a este otro, y
como no se puede suponer una cadena de causas hasta el infinito, es preciso llegar a algo
que sean necesario por otro: y tal es Dios.
Esta prueba esta tomada de la Met. II , 1, 2. y 3 de Avicena: “Si una cosa no es necesaria
con relación a sí misma, dice, es preciso que sea posible con relación a si misma, pero
necesaria con relación a otra distinta” “La propiedad esencial de lo posible es precisamente
esta: que necesite ineludiblemente otra cosa que la haga existir en acto. Lo que es posible
sigue siendo siempre posible con relación a sí mismo, pero puede corresponderle ser de
modo necesario en virtud de una cosa distinta de sí mismo”.
 
4ta vía “Por los grados de la perfección”
Hay diversos grados de todas las perfecciones, que se aproximan mas o menos a las
perfecciones absolutas, y por eso son grados de ellas; hay, pues, un ente que es sumamente
perfecto, y es el ente sumo; este ente es causa de toda perfección y de todo ser, y se llama
Dios.
 
La cuarta vía es metafísica, ya que los grados de perfección se refieren a la idea platónica
del mundo de las ideas perfectas (topus uranus) que Aristóteles desarrollo posteriormente.
En las cosas hay mas o menos verdad, mas o menos bien y mas o menos de todas las demás
perfecciones; por consiguiente, también debe haber un grado máximo de dichas
perfecciones, que será la causa de los grados menores, como el fuego, que es el máximo
calor, es la causa de todas las cosas calientes. Luego, la causa del ser y de la bondad, y de
toda perfección es Dios.
 
5ta vía “por el gobierno del mundo”
Los entes inteligentes tienden a un fin y un orden, no por azar, sino por la inteligencia que
los dirige; hay un ente inteligente que ordena la naturaleza y la impulsa a su fin, y ese ente
es Dios.
 
La quinta vía es una prueba metafísica-ontológica que se infiere del gobierno de las cosas.
Las cosas naturales, privadas de inteligencia, están sin embargo, dirigidas a un fin: esto no
seria posible si no estuvieran gobernadas por un Ser dotado de inteligencia, como la flecha
no puede dirigirse hacia el blanco sino es por obra del arquero. Luego, hay un ser
inteligente que ordena todas las cosas naturales a un fin: y este ser es Dios.

Las cinco vías de Tomás de Aquino para


la demostración de la existencia de Dios
Prof. Lic. Andrés A. Luetich
14 de diciembre de 2003

En la Summa Theologiæ (obra escrita para quienes se inician en el estudio de la Teología),


El Aquinate presenta cinco vías para demostrar la existencia de Dios. Cada una de ellas es
independiente de las demás, de modo que bastaría con que una sola fuese correcta para que la
tesis quedara demostrada.

No se le debe conceder al número cinco una importancia crucial. El propio Tomás, en su


Summa Contra Gentiles, reduce las vías a cuatro, y en su Compendium Theologiæ a sólo una.

Más importante que el número de las vías es la estructura que todas ellas comparten.
Descubrirla permite comprender cuál es el camino que Tomás consideraba debe seguirse para
demostrar la existencia de Dios.

El siguiente cuadro presenta en forma esquemática las cinco vías de Tomás y su estructura
común. Debajo del mismo se explican brevemente cada uno de los elementos que lo
componen.
1er paso: Todas las vías tienen un punto de partida empírico, algo que se descubre
observando la Naturaleza. En un sentido material, este punto de partida es siempre el mismo:
el ente sensible, compuesto de potencia y acto, objeto propio del entendimiento humano.
Desde el punto de vista formal, el punto de partida de cada una de las vía es distinto: cada
una toma al ser finito bajo una modalidad específicamente diversa (así, por ejemplo, la
primera vía no toma al ente en cuanto ente sino al ente en cuanto móvil). Tomás parte de un
dato conocido empíricamente porque considera que sólo de una existencia real dada puede
deducirse una existencia no dada empíricamente. Éste es el motivo por el cual rechaza el
argumento ontológico anselmiano, que "salta" de la idea de Dios a la afirmación de su
existencia.
2do paso: Aplicación del Principio de Causalidad con el fin de buscar la causa que dé razón
de la existencia del efecto observado empíricamente. La causalidad le permite a Tomás,
partiendo de la experiencia, remontarse más allá de la experiencia. Sin la aplicación de este
principio las cinco vías se tornarían intransitables. Este segundo paso es, por lo tanto, el paso
del efecto a la causa.
3er paso: Si la causa a la que se ha accedido en el segundo paso no tiene en sí la razón de su
existencia, deberemos remontarnos entonces a su causa. Este tercer paso es, por tanto, el paso
de la causa a la serie de causas. Tomás no considera imposible una serie infinita de causas
subordinadas accidentalmente en el pasado (como las piezas de dominó que caen al ser
golpeada cada una por la inmediata anterior), pero sí considera imposible un proceso al
infinito en la serie de causas esencial y actualmente subordinadas en el ser y en el obrar. El
plano en el que se mueve la reflexión, y por tanto el plano en el que se aplica aquí el
Principio de Causalidad, es el metafísico y no el físico (Tomás afirma, como filósofo, que no
hay modo de dirimir la discusión respecto de si el universo tuvo o no un comienzo, bien
podría ser eterno —en cuanto teólogo, y basado en los relatos de las Sagradas Escrituras,
sostiene que es mejor afirmar lo primero—).
-: La quinta vía pasa directamente del segundo al cuarto paso. Al respecto, Gilson dice que
tal vez lo hace “en gracia a la brevedad, y más probablemente  porque, puesto que el punto
de partida de la demostración es la presencia de regularidad, orden e intencionalidad en los
seres irracionales en general, la necesidad de poner últimamente una providencia para todo
el mundo es una evidencia inmediata”.
4to paso: Cada una de las vías concluye afirmando la existencia de la Causa Primera del
efecto tomado como punto de partida. Esta afirmación constituye la premisa mayor de un
silogismo cuya conclusión es que "Dios existe". La premisa menor es el significado del
nombre "Dios" (y no su esencia). Por ejemplo, tomando como premisa mayor el punto de
llegada de la primera vía, se puede construir el siguiente silogismo:
Existe un Primer Motor premisa mayor
El Primer Motor es lo que llamamos Dios premisa menor
Dios existe conclusión
 
BIBLIOGRAFÍA

 GILSON, É. 1981 Elementos de Filosofía Cristiana


Madrid: Rialp
 GONZÁLEZ ÁLVAREZ, Á. 1961 Tratado de Metafísica, tomo II
Madrid: Gredos

LAS CINCO VÍAS

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Por la los grados universo y la
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movimien ón delas perfeccion interna de
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seres
eficientes seres seresnatural
  es
 
Punto de partida
los sentidos
la experiencia encontramos en la naturaleza hay cosas que no
nos muestran
muestra que en que las cosas hay una tienen
que en el
el mundo pueden existir o jerarquía de conocimiento y sin
mundo hay
sensible hay no existir (son valores o embargo obran por
cosas que
causas eficientes contingentes) perfecciones un fin
cambian

 lo perfecto no
los seres los cosas que
puede tener su
todo lo que se contingentes no carecen de
no hay nada que origen en lo
Principio mueve es tienen el conocimiento solo
sea causa de sí imperfecto sino
metafísico movido por
mismo
principio de su
sólo en algo
puede tender a un
otro existencia en sí fin si alguien que
aún más
mismos entiende las dirige
perfecto

en la serie de no es posible la
Imposibilidad de motores no se
en las causas
serie indefinida
eficientes no es
las series hasta puede seguir
posible proceder
de seres    
indefinidament relativamente
el infinito indefinidamente
e necesarios

Debe haber un Debe existir un Debe existir un Ser


Debe existir una Debe existir un
Primer Motor Ser Inteligente que
Término no movido por
Causa Eficiente
absolutamente
Ser
dirija a todas las
Primera Perfectísimo
nadie Necesario cosas naturales

DIOSEXISTE
CONCLUSIÓN

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