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MONSANTO LA EMPRESA MÁS ODIADO DEL MUNDO

Monsanto nace ya con ese nombre en 1901. John F. Queeny, un químico que trabajaba
en farmacéuticas, invirtió 1.500 dólares de su propio dinero y 3.500 que le
presentaron para producir sacarina en Estados Unidos. Hasta ellos, solo Alemania se
dedicaba a ese negocio. Pronto amplió a la cafeína y en 1905 ya logró beneficios. Para
1915 y gracias a que uno de sus clientes era Coca-Cola, ganó su primer millón de
dólares.

Durante la Primera Guerra Mundial, Monsanto siguió su expansión y en 1917


comenzó a producir aspirina en Estados Unidos. También vieron una ventana de
oportunidad en los plásticos y otros químicos. En 1928, Edgar M. Queeny, hijo del
fundador, tomó el control de la empresa hasta 1960 y la transformó en el gigante que
conocemos ahora. Fue en estos años cuando comenzó a fabricar insecticida DDT para
combatir a los mosquitos que transmitían la malaria, prohibido unos años después por el
Gobierno de Estados Unidos por sus efectos poco agradables en la vida en general.

Luego, en la década de los 70, tuvo su primera gran entrada en la Historia de la


Infamia. Bajo encargo del Gobierno de Estados Unidos, Monsanto y otras ocho
empresas desarrollaron el llamado Agente Naranja. Este era un herbicida ultrapotente
que servía para destruir la selva vietnamita y hacer salir a Charlie. Sus efectos quedaron
inmortalizados en varias fotos, algunas películas y el cáncer que le dio los militares
estadounidenses y sigue matando a los vietnamientas.

El motivo era la dioxina, un compuesto químico altamente canceroso y por el que


cientos de veteranos de guerra denunciaron a Monsanto y las otras productoras. Estas
finalmente aceptaron pagar 180 millones de dólares como reparación. La propia
empresa dedica un apartado en su web a este producto sin referirse un solo segundo al
asuntillo del cáncer y destacando que ahora están orgullosos de “ayudar a producir
alimentos nutritivos para millones de familias alrededor del mundo”.

Las semillas transgénicas


En 1981, la empresa vislumbró un futuro en la biotecnología y dedicaron una década a
investigación y desarrollo. Fue en los 90 cuando Monsanto compró varias empresas de
biotecnología como Calgene Inc. o Dekalb Genetics, lo que le permitió convertirse en la
**compañía líder de semillas genéticamente modificadas. **

Finalmente, en 1994, se lanzó al mercado su primer producto biotecnológico que


lograría pasar el filtro de las autoridades sanitarias y poco a poco fueron mandando al
mercado más semillas transgénicas. Soja, algodón, colza. Manipuladas por los
ingenieros genéticos de Monsanto, para que fueran resistentes a un
herbicida producido por ellos mismos. La idea era que así los agricultores podrían usarlo
sin miedo en sus campos, ya que los herbicidas suelen acabar con todo lo que pillan por
delante, sin distinguir entre buenas y malas hierbas.
Desde entonces, Monsanto se ha convertido en la empresa que más semillas
transgénicas vende en todo el mercado, lo que ya mandó su reputación al fondo del
retrete. Los motivos pueden leerse en varias publicaciones de Greenpeace, la ONG
ambientalista que ha hecho de Monsanto su bestia negra.

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