Está en la página 1de 25

Debates

pa Bt Coloniales:
Una dicas
a los Estudios de
la Subalternidad
Compilación de
P Silvia Rivera Cusicanqui
Rossana Barragán a

Traducciones de
Raquel Gutiérrez, Alison Spedding,
Ana Rebeca Prada y Silvia Rivera Cusicanqui

ADEIT 5 EPHIS Aruwiyiri

O HISTORIA
e - 50

ON THE MiSTORY
OF DEVELOPMENT
nues
ANDINA
246 e AENA

v subalternos”, En el nivel abstracto, por sopuesto, se podría argumentar que


un sistema binario representa un plegamiento consciente de sistemas más
diferenciados -teraarios. cuaternarios. ete.- con el propósito de realizar un análisis
particular. Se lo hace frecuentemente en las ciencias sociales, y no bay naca
de simplista en este método. Los historiadores nacionalistas, de manera muy Estudios de la Subalternidad:
Deconstruyendo la Historiografía”
legítima en ciertos contextos, repliegan todas las diferencias de clase para dar
lugar a la categoría denominada "pueblo", opuesta luego a algo como "el impe-
df rialismo". Los antropólogos que escriben sobre el sistema de castas y vara de
la India han puesto en relieve, frecuentemente, algunas de las estructuras binarias
que les son inherentes. En segundo lugar, hablar de "clases de élite” y "clases
subalternas”, como lo hace Gramsci en sus Cuademos de la Cárcel, es aún hablar Gayatri Chakravorty Spivak
en términos de clase.
Pero piensó que la palabra "subalterno" en Subaltem Studies representa algo
más que eso. Se refiere a la naturaleza específica de las relaciones de clase en
la India, donde en casi todos los niveles, las relaciones de clase están su»sumidas Cambio y crisis
en relaciones de dominación y subordinación, entre miembros de la élitey de El trabajo del grupo. de Estudios de la Subalternidad nos ofrece una teoría
las clases subalternas. Para retornar a una metáfora usada anteriormente, el del cambio. Generalmente, se define la Inserción de la India en el colonialismo
lenguaje de clase en la India se superpone al lenguaje de la política ciudadana como el cambio de una sujeción semifeudal a una sujeción capitalista. Tal
sólo en una minoría de casos. En la mayor parte de nuestra experiencia cctidiana. definición teoriza el cambio dentro de la gran narrativa de los modos de pro-
las relaciones de clase se expresan en ese otro.lenguaje de la política, que es li ducción y, por precaria implicación, dentro de la narrativa de la transición del
política de una nación sin "ciudadanos". Es en este ámbito que se hacen realidad feudalismo al capitalismo. En lorma coincidente, se percibe este cambio como
las nociones de jerarquía, dominación y subordinación, así como las tradiciones elimomenteo ina ural de la politización del colonizado: Se percibe que el sujeto
de resistencia a la dominación y ala deferencia Inde alos dominadores, La de esas fracciones de la élite indígena que llegan « ser vagamente

| We subulternidad” —esi cu'tura compuesta. que resisto y a la vez acepta la comi JH]a
nación y la jerarquía= es caracteristica de las reluciones de clase de nuestra Mé MA
descritas como “nacionalistas burguesas".
Subaltemidad
El grupo de los Estudios de la
está, a mi entender, revisando esta definición general y su
sociedad, donde el barniz de la igualdad burguesa apenas enmascara la violenta dos cosas:
correspondiente teorización, al proponer por los menos en primer
naturaleza feudal de gran parte de nuestro sistema de poder y autoridad, lugar, que el/los momento/s de cambio sean pluralizados y tramados como
No podría explicarse la persistencia de estas relaciones en el mundo de la confrontaciones, antes que como transición (de esta manera serían percibidos
indlustrialización y el capitalismo, apelando a una teoría que busca sentirse segura en relación a las historias de dominación y explotación, en lugar de ser inscritas
en la primacía de la "infraestructura económica" Al poner el lente sobre estas en la gran narrativa de los modos de producción) y, en segundo lugar, que tales
relaciones, el grupo de Estudios de la Subalternidad abre una vez más la espinosa cambios estén señalados o marcados por un cambio funcional en los sistemas
cuestión de la "conciencia" y de cómo los marxistas podrían estudiarla, Para los de signos. El cambio funcional más importante es el que va de lo religioso a lo
historiadores marxistas de la India, la tarea actual no es la de repetir las ortodoxias militante. En los volúmenes de Subaltem Studies se señalan, sin embargo, muchos
aceptadas del marxismo, sino la de restaurar al pensamiento de Marx sus tensiones otros cambios funcionales en los sistemas de signos: los que van del crimen a
originales. Sólo acentuando estas tensiones podremos ensanchar la problemática la insurrección, del siervo al obrero, etc. E
marxista para alcanzar a comprender los problemas peculiares que emanan de El resultado más significativo de esta revisión o cambio de perspectiva es
nuestra experiencia del capitalismo”. que la iniciativa para tal cambio se sitúa en el insurgente o "subalterno". á

+ Traducción de Ana Rebeca Prada y Si via Rivera Cusicanqui del artículo “Subaltern Studies: —Deconstructing
Historiography”. En: Subaltern Studies IV: Weritings on South Asian History and Socisty, Ranajit Guha, editor.
Delhi: Oxford University Press, 1985, pp. 330-363, . :
4 Para escribir estonio ta me hn silo mis Oltiles Les conversaciones con Sally Hone, Sanjay Seth y Julte Stephens,
249
Mee my Encn0 1 AI tor graba

248 ae
les impide enfatizar
una sobriedad ¿eneral de tono
s de función en los sistenas indicarían fuerza!. En efecto, mismos esta rían emp ujando ala histo
(En realidad, su preocupación por los cambio suficien temente el hecho de que ellos mit nto
de
algo más corta=se extien describir el funciona
de signos la frase “desplazamientos discursivos” es crisis. Estolos conduce a
de un articulo. riografía hegemónica a una le lógica especulativa de
más allá del terreno dela actividad insurgente O subalterna. En más tariedad como la inex orab
discurso autoconscientemente clandestino de la suplemen a si mismos, ya Que, como
Dipesh Chakrabarty aborda la manera en que "el parece que se perjudican
0 No,
a está, se quiera la dialéctica, En esto me viej os entre espontaneidad
socialista" del sector de izquierda de la élite indígen dialécticos declarados, se
exponen a debates más
que está, como argumenrtaré
,
autori dad feudal e imouirle nuevas fun- historia. Su práctica real,
intentando desplazar al discurso de la y conciencia O estructura e teorí a del
rjee muestr a a Gandhi "aprop iándos e politicamente de ón, cuestionaría estas OPos icio nes. Una
ciones!, Partha Chatte (3.156). La des- más cerca de la deconstrucci entre sistemas de signos
nuevo estado indio" lazamiento de funciones
lo popular en las formas cambiantes del cio del desp ido
teoría la lectura en el sent
<que estaba cambio como espa de
nte docum entad a del surgim ierto de Gandhi en ellos- €s una
cripción meticulosame -que es lo que 1n8 obligan a leer de la función de
lejos de ser un "subalterno”-- como Un significante
político dentro del texto social,
te del térm ino. El espacio de desplazamiento
s de las tres colecciones, es uno de los general más fuer ura como transacc ión acti va entre pasad)
desarrollada a lo largo de varios ensayo ón de lect
los signos equivale a una noci de) acción, aún en su
Ingros más asombrosos de estos estudios.)
, tran sacc ional como da posibilidad
violento. Aún cuando y futuro. Esta lectura quería decir con ela-
Un cambio funcional en un sistema de signos es un hecho vez lo que Antonio Gramsci
el retroceso", punto más dinámico, es tal o de esta manera, el trabajo del
sea percibido como "gradual", "fracasado" 0, incluso
como "en con dificultad”. Vist
boración", e-laborare, lograr reitefadamente com-
por la fuerza de una crisis. Lo lternidad nos posibilita
cambio mismo sólo puede ser puesto en marcha grupo de los Estudios de la Suba n de la vida
que Paul de Man escribe sobre la crítica puede
extenderse a una subalternidad -con cept o de "texto social” no es la reducció
de crisis, 0.en prender que la metáfora ción teór ica es un mode sto intento de
períod os que no son Mi interven
real a la página de un libro.
está ponien do el mundo "al revés": "En
que :
puede haber todo tipo
individuos inclinados a evitar la crisis a cualquier costo, hacer que recordemos esto, por lo menos
de acerca miento s a (lo social, G.5.),.. pero no puede haher (insurrección, Sy upone que todo el socius,
trabajo pres
adición) Puede proponerse que su una fortgeselzte
Sin embargo, si el espacio para un cambio (neces
ariamente también una
to de su estu dio, es lo que Nietzsche llamaría
sistema de signos, la crisis no en tanto obje posi bili dad de la acción reside
allí en la funció n previa del ignos continua". La
no hubiera estado
-de funció n-significación suplementa la Zeichenkelte: una""cadena-de-s la ruptura y ,sestabonami
ento
hubiera podido provocarlo, El cambio ización de este objeto, en
n agrega algo... pero esta enla dinámica de desorgan la conc ienc ia al saciu s, sino
ente, "El movim iento de signif icació mental no contrapone
iunción preced
ta, a suplem entar una carencia por dela cadena. Esta línea argu (y en) una cade na semi ótica. Se
adición... viene a cumplir una función indirec constituido como
ernidad comenta que ve en ella misma a algo a de la naturaleza de
parte del significado"?. El.colectivo-de los Estudios de la Subalt trata ento nces de un inst rume nto de estudio que particip
ra es situar al historiador
esernpulosamente sobre este doble movimiento, su ohjeto de estudio, Percibir
la conciencia de esta mane
es debidoa esta doble
En general, ellos perciben su tarea como la de
elpborar una teoría dela o irreductible. Creo que
en una posición de compromis de Nietzsche que
antes que elabor ar especí ficamente una teoría del dese ntra ñar la observacion aforística
conciencia.o de la cultura
aunque nunca se aleja de su ligazón que €s posible con referencia. este dobl e nexo: "Todo
cambio. Por esta razón, creo, la fuerza de la crisis, na-designos
dibuja la imagen dela cade un proceso completo,
argumento, No es enfati zada sistem áticam ente en su trabajo , y se alude a ella, conc luido (fasst sich zusammen)
nación ”, "quedar atrapado concepto en el que está lo que no tiene historia es
definible"”.
", "combi a la definición; sólo
aveces ingenuamente, como "interferencia se resiste (sich entziehd) estrictamente hablando,
con
"circun st ancias para la unifica ción", "razon es para el cambio”, iciones no armonizan,
en la ola general", En todo caso, estas pres
upos
lter no) en un esta do
"llama r la atenci ón sobre"; aún cuando iencia (en este caso, la del suba
"ambigiedad”, “malestar”, “tránsito”, el deseo de encontrar una conc esta discrepancia.
también se la descri be como "encen derse" , "prend erse en llamas” y, en general,
ensa yo tamb ién tratará de desarrollar
ras-conceptos críticos que positivo y puro. Mi
como "poner cabeza wbajo": siendo todas ellas metáfo

tare Aspects of Peasant Insurg ency in Colonial


; $3.21 21. También en Ranajii Gubi. Klemen de ahora en adelante será citado en mi
texto como
1983), pp. 88. 226, 30, 318
Asicin History tod Soctety (Delhi: Oxford Univ. Press, oOxford Univ. Press. Pr
1 Manajit Gua, ed, Subalrern Sulies 1: Weitinga en SenelhShedies serán citados en ini lexto como | 3 y 3 seguidos Inici (Delhi:
cias de página, Text, and the Critic
1994), p, 451, En adelante, los les volúmenes de Subalteen EAP. seguido de las referen d W. Said, Th e World, the
l ración" de Gramsci en Edwar
de lay referencias de págin £ Ver ol travambento de la "elabo pp. 1702,
2 Paul de bon, Htimedmesa anal Insights Essays ln ie Rhermrie 07 Contemporary Criticiónm (Minneapolis Liniv (Cambridge: Harvard University
Press, 1983),
Home, 40. Wnlterd, Kuufman
(New ile Vintage
E logy of Morals and Ectf
ol Minnesota Press, 1983), p. $ 6 Friedrich Mietzsche, On the Genca ;
cago: Univ. of Chicago Press, 1982), p, 289. Todas 77,30.
FJ uues Derridi, Writinma enel Difference. e Alan Bus (Ch Looks, 1969), pp.
las tralueetonts dan sico tod cados cusvido ee lo hu creído necesario.
250 Goyo Chokicwess, Ebc Desoosiruyendo la Histanogye a 251

-4 mi modo de ver, correctamente- entre traspiés deliberades y no deliberados,


El fracaso cognoscitivo es irreductible Hardiman apunta al persistente (des)conocimiento de los nacionalistas del 1

Todas las relaciones que nos brinda el grupo sobre intentos de desplazamiento desplazamiento del campo discursivo por parte del subalterno como una marca
de la Sanseritización” (3.214). El autor busca en los análisis contemporáneos -
discursivo, son relaciones de fracasos. En el caso de los desplazamientos del
subalterno, la razón que más frecuentemente se da para este fracaso es el muy
como el estudio de Paul Brass sobre el faccionalismo-los síntomas de lo que
Edward Said llamara "orfentalismo” (1.227). Se sugiere correcte mente que el
superior alcance, organización y fuerza de las autoridades coloniales. En el caso
del movimiento nacionalista por la independencia, se señala claramente que el
sulisticado vocabulario de gran parte de la historiografía contemporánea es exitoso
rechazo "interesado" de la burguesía a reconocer la importancia de (y la necesidad al encubrir este fracaso cognoscitivo y que este éxito-en-el-fracaso, esta ignorancia
de aliarse con) un campesinado politizado, da cuenta del fracaso del desplaza- . sancionada, es inseparable de la dominación colonial. Das muestra en funcio-
namiento la teoría de las expectativas racionales —ese pilar hegemónico aunque
miento discursivo que puse en marcha la politización de los campesinos, Sin
embargo, hay también aquí un incipiente evolucionismo que, quizás intentando
difunto (fracaso cognoscitivo exitoso una vez más) del neocolonialismo-, en la
evitar una vulgar glorificación marxista del campesinado, le echa la culpa al "nivel idea de una "Revolución Verde para Ataperti una Revolución Roja", [lena moderno
existente de la conciencia campesina" por el hecho de que "la solidaridad y el
de la India] (2.198-9).
poder campesinos fueron rara vez suficientes o suficientemente sostenidos" (3.52, Dentro de este rastreo del fracaso cognoscitivo exitoso, la maniobra más
3.115). Esto contradice la política general del grupo, que ve el acceso hegemónico interesante consiste en examinar la producción de la "evidencia", piedra angular
de la élite a la "conciencia" como un constructo interpretable, del edificio de la verdad histórica (3.231-70), y diseccionar así la mecánica de
construcción del Otro que consolida al Sí mismo: el insurgente y la insurrección,
Para examinar esta-contradicción debemos anotar primero que los despla-
En esta parte del proyecto, Guha parece radicalizar la historiogralía de la India
zamientos discursivos que se manejan, a sabiendas o no, desde arriba, son también
colonia! mediante una combinación del análisis semiótico soviético con el bar-
fracasos, Chakrabarty, Das y Chandra diagraman los fracasos del socialismo
thesiano. Se revela así la discursividad (el fracaso cognoscitivo) de la
sindical, del empresarialismo funcionalista y del comunismo agrario en su intento
historiografía desinteresada (exitosa y, por lo tanto, verdadera). Se muestra a
de desplazar un discurso semifeudal hacia un discurso “moderno”. Chatterjes
la musa de la a ia y a la contrainsurgencia como cómplices (2,1-42£ £AP [Ver
muestra cómo la (inámica transacción inicial de Gandhi con el campo discursivo
tambiér pp. 33-72. eneste volumen])).
del imaginario re:igioso hindú tuvo que ser travestizado para que su ética de
resistencia pudiera ser desplazada hácla el sistema de signos de la pólítica Estoy sugiriendo, por supuesto, que un conjunto de presupuestos implici-
burguesa”. (No cabe duda. si una entidad” como la "política burguesa” fuera tamente evolucionistas O progresistas destinados a medir el fracaso o el éxito
a exponerse al anális s discursivo, emergería la misma micro-dinámica de des- en términos del nivel de conciencia resultaría demasiado simple para la práctica
del grupo. Si observamos las variedades de actividad que ellos abordan: la
plazamientos), Lo que trato de decir es, simplemente, que los fracasos o éxitos
parciales en el desplazamiento del campo discursivo no necesariamente se subalterna, la insurgente, la colonialista y la historiográfica, nos hallamos frente
relacionan, siguiendo una escala progresista, con el nivel de conciencia” de una a un campo general de fracasos. De hecho, el trabajo del colectivo está haciendo
que la distinción entre éxito y fracaso resulte indeterminada, ya que revela que
clase,
aún el registro histórico más exitoso estará entrecruzado por el fracaso cog-
Procedamos ahora a anotar que lo que ha sido en apariencia algo perfectamente
exitoso, a saber, la historiografía de élite -de derecha o de izquierda, nacionalista noscitivo, Dado que en el caso de! subalterno toman encuenta a la conciencia
(por “negativa” que sea) y a la cultura (por determinante que sea); y, en el caso
o colonialista=, está en sí misma, según el análiss de este grupo, constituida por
fracasos cognoscitivos, de la élite, a la cultura y a la manipulación, resulta que el subalterno también está
De hecho, si la teoría del cambio como lugar de des-
plazamiento de un campo discursivo es su argumento más generalizado, el anterior obrando en el teatro de la "cognición". Sea como fuere, ¿ dónde comienza y dónde
argumento le sigue muy de cerca. Aquí tampoco se hace ninguna distinción termina la cognición? Consideraré más adelante los posibles problemas que
conllevan tales percepciones compartimentalizadas de la conciencia. Baste decir
aquí que, según las normas habituales de coherencia, y en términos de su propia

7 Uso la palabra "imaginario" aproximadamente en el sentido que le da Jacques Lacan. Para una breve definición.
Tecala Ens y 4.10. Pontalis, The Language of Psycho-Analvsis, tr. David Nicholson-Smith (New York: Norton, * NE. Se conoce como sanseritización al proceso de incorporación ce los rupos tribales a los escalones bajos
1973), p. 210, del sistema de castas de la religión hindú, aLloptando su tradición clásica escrita en sanscrito,
Decensimuyenes la Halonogiala 253
25% A A

ipción del concepto


metocoloyía, la posibilidad del fracaso no puede derivarse de ningún externo trama de "Iracasos”, a través de la generalización y reinscr
lo he sugerid o anterio rmente. Esto subvier te el inevitable
ce éxito, amenos que este último sea una ficción teórica”. de fracaso, como
, desarroll a una crítica al
Lo. que aquí se señala viene a ser un comentaro sobre la “alienación”, tal como vansguardismo de una teoría que. en olros sentidos
teoría. Esta es la razón por la cual espero alinearlo : con la
2 corciben los miembros de este grupo, entendiendo por ella un fracaso de vaneuardis mo de la
el interior, extraye ndo le la
toevenición”: : deconstrucción:
0 "Obrando necesariamente desde
rsos estratég icos y económi cos de la subversi ón,
antigua estructura todos los.“ecu
ndoselo s estructu ralmente , vale decir sin poder aislar en ellos elementos
Sobreestimar.. (la) lucidez o profundidad (de la conciencia rel suba. terno) seria... extrayé
cierto modo presa
desatinado... Esta expresión característica de una conciencia negativa de parte y átomos, la empresa de deconstrucción siempre resulta en
lel insurgente es equiparable a otro de sus síntomas, es decir, la autoalienación.
de su propio trabejo”!!,
el estaba aún embarcado en una visión de su próxima guerra con el Raj como si ar la autoridad
fuera el proyecto de una voluntad independiente de sí mismo, y veía su propio Esta esla virtud más grande de la deconstrucción: cuestion
a sin paraliza rlo; transfo rmando persist entemente las
papel en ella como algo únicamente instrumental... (En su propia proclamación) del sujeto que investig
Busque mos las impliciciones
parwane.... los autores no reconocieron ni siquiera su propia voz, sino tan sólo condiciones de imposibilidad en posibilidad”, ,
escucharon la voz de Dios (£AP 28). de ello para nuestro caso particul ar.
fracasos en el intento
El grupo, como hemos visto, sigue la huella de estos
Como para confirmarlo, dentro de esta taxonomía narrativa progresista, Hegel desplaza r los. campos discursi vos. Un acercam iento deconstructivo centraría
de
etidos en el intento
nescribe la marcha de la historia en términos de una disminución en la autoa- la atención en el hecho de que ellos misinos están comprom
ienación del denominado agente histórico mundial. Kojéve y sus seguidores r los campos discursi vos; que ellos misinos "fracasan " (en el sentido
de desplaza
en Francia distinguieron entre este Hegel, narrador de (una) historia, y el Hegel cas" como las que aducen para los agentes
general), por razones tan "históri
espe-ulativo que perfiló un sistema de lógica?, En el interior de este sistema, la éneos que estudian ; e intentarí a forjar una práctica que tomara esto en
heterog
alienación es irreductible en cualquier acto de conciencia. A menos que el sujeto a reconocer las impli-
consideración. De otro modo, quiérase 0 no, al negarse
se separe de sí mismo para comprender al objeto, no hay engnición; de hecho, propia línea de trabajo, por ser politica mente incorrectas, ellos
caciones de su
no hav pensamiento, no hay juicio. El Ser y la Idea Absoluta, la primera y última al subalte rno (2.262), controlándolo
terminarían "objetivando insidiosamente”
s=""ciones de La Ciencia de la Lógica —dos consideraciones sobre la simple iento, aún si al mismo tiempo le restaur an versiones de
mediante el conocim
'*catienabilidad—, no son accesibles a la concienciaindividual o personal. Por lo su deseo de totalida d ( por
causalidad y autodeterminación (2,30); en fin, en
santo, desde el punto de vista astrictamente filosófico, tanto (a) la historiografía se harían cómplic es con una "ley (que) asign(a)
lo tanto, de totalización) (3.317),
vc élite, como (hb) la explicac ón burguesa nacionalista, y (e) la reinscripción nombre (propio) indifere nciado" (EAP 159) al "subalte rno como tal”.
un
de parte del grupo de Estudios de la Subalternidad, estaríán funcionando por
obra de la alienación —Verfrermdung tanto como Entáv Berung. Las lecturas que al humanismo
Los Estudios de la Subalternidad y la crítica europea
hace Derrida de Hegel, como en Glas, cuestionarían el argumento de la inalie-
orientales) el
nabilidad aún de la Necesidad Absoluta y del Conocimiento Absoluto, aunque Un “lenguaje religioso les dio a los montañeses (de los Ghats
des y buscarle s solucione s” (1.140-1).
aquí no necesitamos ir tan lejos. Debemos formular la pregunta contraria, ¿Cómo marco para conceptualizar sus dificulta
debemos abordar la sugerencia de Marx de que el hombre debe procurar la de las recientes teorías interpre tativas europea s parece otorgar un
El lenguaje
autodeterminación y la práctica desalienada, y la de Gramsci de que "las clases marco similar a este colectivo. Como lo ¿1e ¿uyerido anteriormente, al trabajar
las nociones de
bajas” deben "lograr la autoconciencia mediante una serle de negaciones 21% su desplazamiento, están expandiendo el alcance semántico de
destacan en su
Forinular una respuesta a estas preguntas puede tonducira electos prácticos "lectura" y "texto", palabras que, dicho sea de paso, no se
favorablemente
de gran alcance, si se uvopta el riesgo dle irreductibilivad del "fracaso" cognoscitivo vocabulario. Ésta es una transacción audaz y puede compararse
s similares realizad os por historia dores en los Estados
y dela "allenación”. La propia práctica del grupo puede asf ser graficada en esta con algunos esfuerzo

[N, de
X Como siegipre, el ejemplo proferido heción tuórica sigue siendo el proceso primario de Freud The Complete j ology, tr. Spivak (Baltimore: “he Johns Hopkins University Press, 1976), p. 24. Dela
Piyelirtagieal Weeks, 0, darmes Nirnchey el al, (London: Mogorh Press, 1961), “ol, 5, y, 598%, A ei A obli lntraducción castellana de Oscar del Barco y Conrado Cereti.
Y Para cun cedente yatarmente de esto, ver Judi Burler, “Ge istizelo French hmerpretations ol Hegels Absolute”, Grumarnlogía, (México: S glo XXI, 1986) pp. 29.30.)
e espect fico fver pp. 13-43), hu utilizado
Hepkxhi Hivio e (Verimo, LOAN; qm PIERO), ! 12 Dado que, en el trabajo del colectivo, el historiador es ggnóricament
lo Antotio Ciranser citado AAJEDA. consistentemente el masculino,
=
|
254 Hr er E
. Deconsirujendo la Historiogtata 255

|
Unicos!”, Está Jebidamente marcada porel mento de hallar paralelos locales
puede ser tuvelado. Esto es tanto más significativo en el caso de la recuperación
como en el concepto de atidesa en el trabajo de Guha-., y de insertar lo local de la conciencia, dado que para la tradición post-lustración de la que participa
en lo general, como en las generalizadas referencias a la insurrección inglesa,
el colectivo como historiadores intervencionistas, la conciencia deviene en el
francesa, alemana y, ocasionalmente, italiana en £4P, así como en la invocación
terreno cue hace posibles todas las revelaciones,
a la antropo/ogía del Alrica en el trabajo de Partha Chatterjee sobre los modos
Y por cierto, el grupo es susceptible a tal interpretación, Se presupone aquí
de poder.
la existencia de cierta reflexión unívoca o teoría de la significación, a partir de
Es la fuerza de una crisis la que produce desplazamientos funcionales en los la cual "la acción campesina, tanto en tiempo de hambre como de rebeldía", se
campos discursivos. En mi lectura de los volúmenes de Subaltern Studies, esta supone que refleja ”...una sola conciencia subyacente" (3.112); y la "solidaridad"
fuerza crítica o este provocar-la-crisis pueden localizarse en su enérgico cues-
es vista como un "significante de la conciencia", donde significación equivale a
tionamiento al humanismo del sector post-nietzschiano del estructuralismo representación, figuración, propiación (rigurosa de-limitación dentro de un perfil
europeo occidental; es decir, para nuestro grupo, Michel Foucault, Roland Barthes
único y autoadecuado) e imprasión (EAP 169). :
y un cierto Lévi-Strauss. Estos estructuralistis cuestionan el humanismo des-
enmascarando/a su héroe: el sujeto soberano como autor, el sujeto de la autoridad,
Sin embargo, aún si la "conciencia" fuera considerada como un significado
o fundamento indivisible, autoinminente, estaría obrando aquí una fuerza que
de la legitimidad, del poder. Hay una afinidad entre el sujeto imperialista y
el pondría en tela de juicio tal metafísica; puesto que aquí la conciencia no es una
sujeto del humanismo. Sin embargo, la crisis del antihumanismo -como todas
conclencia-en-general, sino una forma política e historizada de la misma, es decir,
las crisis- no conmueve "plenamente" 4 nuestro colectivo. Así, la ruptura
la conciencia subalterna, En un pasaje en que la palabra “transcendental" se usa
demuestra también ser una repetición. Retroceden al apoyarse en nociones como
como "transcendente, porque moldea una narrativa hegemónica", más que en
totalidad, conciencia-como-agente, y hasta en un cierto culturalismo, que los
un sentido estrictamente filosófico, Guha lo expresa admirablemente: "Toda vez.
divorcian de la crítica del humanismo. Parecen no percatarse cie la procedencia
que una rebelión campesina ha sido asimilada Ala trayectoria del Raj, de la Nación
histórico-política de sus diversos "colaboradores" occidentales. Para ellos.
o del Pueblo, se vuelve fácil abdicar de la responsabilidad que tiene el historiador
Vygotsky y Lotman, Victor Turner y LéviStrauss, Evans-Pritchard, y Hindess y
de explorar y describir la conciencia específica de cada rebelión y contentarse
Hirst pueden alimentar el mismo fuego que Foucauht y Barthes: Dado que no se con atribuirle tna conciencia trascendental... representándolos como simples
puede acusar « este grupo de un eclecticismo de consumidor de supermercad
o, instrumentos de otra voluntad” (2,58),
se debería percibir en su práctica no sólo una repetición sino también una ruptura
Debidoa esta atribución de especificidad históricaa la conciencia en el sentido
del predicamento colonial. La calidad transaccional de las fuentes metropolitanas,
estrecho -aunque en sentido amplio ésta obre como un presupuesto rietodológico
conilictivas entre sí, elude con frecuencia al intelectual (post)colonial.
metafísico, en el trabajo del grupo se da siempre la interpretación contrapuesta:
Cabe recordar al lector que, según 11 punto de vista, tales “Iracasos cog-
que la conciencia del subalterno está sujeta a la catexis de la élite, que nunca
noscitivos” son irreductibles. Dado que mi propósito es reflexionar sobre el lugar
es completamente recuperable, que siempre es oblicua respecto a sus significantes
de “conciencia” en los trabajos del grupo Estudios de Ja Subalter tidad, no es
aceptados, que de hecho se la borra incluso cuando se la revela y que es irre-
mi intención sugerir una fórmula para lanzar jugadas cognoscitivas correctas.
ductiblemente discursiva. En los ensayos más teóricos, por ejemplo, se trata
principalmente de un asunto de "conciencia negativa". ' Aunque la "conciencia
El problema de la conciencia del subalterno negativa” se concibe aquí como una etapa histórica peculiar de los grupos
He intentado leer el trabajo del grupo a contrapelo de su autorepresentación subalternos, no hay razón lógica por la cual, dado que este argumento está
teórica. Su figuración de la conciencia del campesino o subalterno hace que tal inevitablemente historizado, tal perspectiva "negativa"
—en lugar de la visión
lectura resulte particularmente productiva. positiva fundante de la conciencia- no pueda ser generalizada como presupuesto
Investigar, descubrir y establecer lá conciencia campesina 0 subalterna parece metodológico del grupo. Una interpretación de la "conciencia negativa", por
ser a primera vista un proyecto positivista: un proyecto que —de ser llevado a ejemplo, la percibe como conciencia, no del ser de los subalternos, sino del de
a
cabo adecuadamente- conduciría supuestamente a terreno firme, a algo que sus opresores (£AP cap. 2, 3.183). En vagos trazos hegelianos, aquí puede hallarse
una posición anti-humanista y anti-positivista, según la cual es siempre el deseo
por/de (el poder del Otro) lo que produce una imagen del sí mismo. Si esto se
13 El ejemplo más imponate es Domunck LoCapra, Rerlunkiny inteticciual History (laca:
generaliza, como en mi lectura del argumento del "fracaso cognoscitivo”, es el
Comell Univ, Press.
108). e Histor and Orion Olea: Cornell Univ. Press, 1984). a subalterno quien brinda el modelo para una teoría general de la conciencia. Y
256 a ea E 2 orion ka Hidónaira 257

sin embargo. dado que el "subalterno" no puede aparecer sin el pensamiento representan la diferencia demográfica entre la población india total y todos aquellos”
de la "élite", la generalización sería incompleta por definición: o para ponerlo que hemos descri'o como 'élite"" (1.8; énfasis del autor). Remito al lector a un:
en lenguaje filosófico, sería "no-originaria" o, como en la versión más temprana ensayo anterior, conde comento extensamente sobre esta ambigúedad específica.
del “unurspriinglich", no primordial. Esta "huella instituida en el origen” es una entre el manifiesto lenguaje de la cuantificación la diferencia demográfici-que:
representación de la crítica deconstructiva a los orígenes simples. Hablaré más es positivista, y el discurso de una diferencia definitiva -la diferencia demográ-'
adelante sobre las consecuencias prácticas que traería consigo la identificación fica- que abre la puerta a gestos deconstructivos'*,
de los rastros de tal estrategia en el trabajo del grupo. En consecuencia, me inclinaría cada vez más a leer la recuperación de la
Un punto adicional en la deconstrucción en contrapunto de la metafísica de conciencia del subalterno como un diagrama de lo que en el lenguaje
la conciencia en estos textos, se revela en el hecho reiterado de que sólo los textos post-estructuralista se denominaría el efecto-de-sujeto de la subalternidad!S,
de contra-insurgencia, o la documentación de élite, nos permiten saber algo sobre Un efecto-de-sujeto puede ser brevemente esbozado como sigue: aquello que
la conciencia de los subalternos. "Probablemente la visión campesina de lá lucha parece obrar como sujeto puede ser parte de una inmensa red discontinua ('texto"
nunca sea recuperada, y todo lo que se diga de ella en esta etapa será obliga- en sentido general) de hebras que pueden llamarse política, ideología, economía,
damente tentativo” (1,150 [en este volumen, p. 80]); "En vista de los problemas historia, sexualicad, lenguaje, etc. (Si se aisla cada una de estas hebras, se la
que implica el documentar la conciencia de los trabajadores de las hilanderías puede también percibir como un tejido de varios hilos.) Los diferentes anuda-
de yute, su voluntad de resistir y cuestionar la autoridad de sus empleadores mientos y configuraciones de estas hebras, definidos através de determinaciones
puede interpretarse sólo en términos de la sensación de crisis que produjo entre heterogéneas -que a su vez dependen de una miríada de circufistancias-, producen
la gente de autoridad” (3.121 [en este volumen, p. 161]); "Debería ser posible ... el efecto de un sujeto actuante. Sin embargo, una conciencia deliberativa con-
leer la presencia de una conciencia rebelde como un elemento necesario y tinuista y homogeneizante requiere sintomáticamente de una causa continua
omnipresente dentro de ese.cuerpo de evidencia” (EAP 15). Con seguridad, se y homogénea para ese efecto y por lo tanto postula la existencia de un sujeto
trata del vocabulario de "esta etapa", la "voluntad de resistir" y la "presencia", soberano y determinante. Este último sería entonces el efecto de un efecto, y
Sin embargo, este lenguaje parece también esforzarse en reconocer que la su postulado una metalepsis, o sea, la sustitución de un efecto por una causa.
perspectiva, la voluntad y la presencia del subalterno, no pueden ser sino una Así es como, en la siguiente descripción, los textos de la contra-insurgencia
ficción teórica que habilita el proyecto de'lectura. No puede ser recuperada, identifican uná "voluntad" como causa soberana, cuando no es más que un efecto
"probablemente nunca sea recuperada”. En el registro más o menos esotérico del efectodessujeto subalterno, que se produce como tal por obra de coyunturas
del lenguaje postestructuralista francés, esto podría expresarse así: "(El) pen- particulares, las que a su vez salen a la luz en las crisis meticulosamente descritas
samiento (en este caso, el pensamiento acerca de la conciencia del subalterno, por los diversos autores de Subaltern Studies:
G.5,) es aquí, para nosotros, un normbré perfectamente neutro, un blanco textual,
el índice necesariamente indeterminado de una futura época de la diferencial”, Es por supuesto cierto que los informes, despachos, minutas, juicios, leyes, cartes,
Una vez más, en el trabajo de este grupo, loque parecía ser la dificultad etc, en los que policías, soldados, burócratas, terratenientes, Usureros y otros
elementos hostiles a la insurrección registran sus sentimientos, sona la vez
histórica del subalterno colonjal puede convertirse en una alegoría de la dificultad portadores de su voluntad. Pero estos documentos no adquieren su contenido
de todo pensamiento y de toda conciencia deliberativa, aunque la élite piense lo tan sólo de esta voluntad, ya que ésta se funda a su vez en otra voluntad: la del
contrario. Esto podría parecer absurdo a primera vista, y amerita una recon- insurgente. Devería ser posible, por lo tanto, leer la presencia de una conciencia
sideración. Es lo que haré para cerrar esta sección de mi ensayo. rebelde como un elemento necesario y omnipresente dentro de ese cuerpo de
evidencia (EAP 15), ,
La accesibilidad definitiva de la conciencia del subalterno queda también en
entredicho cuando se la localiza.como diferencia y no como identidad: "Los
Leyendo el trabajo de los Estudios de la Subalternidad desde adentro, pero
términos 'pueblo' y 'clases subalternas' han sido utilizados como sinónimos a
lo largo de esta nota”, Los gruposy elementos soctales incluidos er. esta categoría a contrapelo, sugeriría q 18 existen elementos en su texto que justifican la lectura

Llteruture
14 Derrida, Of Grammenolegy, p. 99, “Ya qué mi Intención aquí es simplemente ofrecer un momento de lranseo- 19 Spivak, "Can the Subaltern Speuk?", en Larry Groskberg y Cary Nelson, eds, Marxist interpretations of
diflención: no he emprendido la "explicación" de este pariije derricieano, [1y, de T. En lo citado traducción castellano ¿me Cultures Limits, Frontiers. Boundaries (Urbana: Univ, of llinois Press, en prensa).
de Del Barco y Cerctri (De la Grametología, México, 1586), esta referer.cja figura en la p. 126]. 16 El má: espectacular tal vez excesivo-- despliegue deseste argumento está en Gilles Deleuze 3 Felix Guattari,
* Verel "Prefacio a los Estudios de la Subalternidad”, de Guha, en este volumen, p. 32. Anti-Oedipus: Capitalism and Schizophrenia, tr. Robert Hurley el. al. (Now York; Viking Press, 1977).
258 Gayar

de su proyecto de recuperación de la conciencia de los subalternos como un luerza" [sweens ata], y suprime” febolishes] se=
intento de desmontar esta metalepsis historiográfica masiva y “situar” al efecto "Aufheben” tiene aquí un dnble significado: por: *
del sujeto como subalterno, Habria que leerlo, entonces, como un uso estratégico mantener, pero también significa ocasionar el
del esencialismo positivista en aras de un interés político escrupulosamente definiciones de "auiheben" pueden buscarse €:
visible. Esto los alinearía con el Marx que identifica la fetichización como ficados de esta palabra?”. En la misma vena de.
determinación ideológica de lo "concreto” y la enlaza con la narrativa del des- en el pasaje citado de EAP, reescribiríamos
arrollo de la forma-dinero; con el Nietzsche que nos ofrece una genealogía en lugar "desplazamiento”.
de una historiografía, con el Foucault que diagrama la construcción de una "con- Es entonces en el marco de este interés est::.
tra-memoria", con el Barthes de la semiotropía y con el Derrida de la alienante de desplazamiento que se opera en y E:
"deconstrucción afirmativa", Á su vez, esto les permitiría usar la fuerza crítica que puede introducirse el tema de la autodete.
del anti-humanismo y compartir al mismo tiempo su paradoja constitutiva, a saber, desalienada. En las definiciones de "conciencia" *
que el momento esencializador, el objeto de su crítica, es irreductible, de la Subalternidad, hay abundantes señas de £
Tal estrategia resulta sumamente útil cuando el termino "conciencia" está noes la conciencia en general, sino la concit *
siendo utilizado en sentido estrecho, es decir como autoconciencia. Cuando se estrecho.
usa "conciencia" de esta manera, la noción marxista de una práctica desalienada La conciencia del subalterno, como una suert
o la noción gramsciana de una "filosofía espontánea de la multitud", "ideológi- habita "todo el ámbito del pensamiento, la cor;
camente coherente”, resultan plausibles y poderosas!”. Es así que la pendientes, de parte del campesinado" (1.188 Py
conciencia-de-clase no compromete el nivel básico de la conciencia, la conciencia ofrece "prueba clara de una interpretación distin:
en general. La "clase" no es, después de todo, una descripción inalienable de (de Gandhi)" (3.7), la que anima los "debates er.
una realidad humana, En el nivel descriptivo, la conciencia-de-clase como tal es con seriedad los factores en pro y en contra de
una comprensión unificante artificial y estratégica que, en el nivel transformatito (2.) [Ver aquí Guha, p. [):la que efectivamente y
husca destruirla mecánica que construye €l perfil de la propia clase en ía cual ata voluntad de los subalternos,
s= ha desarrollado shuecionalmente una conciencia colectiva, "Cualquier miembro La conciencia del subalterno como concier
de la comunidad insurgente" -Guha destina un capitulo entero a mostrar cómo delos temas principales de estos libros. Entre l
se desarrolla esta conciencia colectiva de comunidad- "que opta por continuar citarse me referiré a dos: "lo que se expresa, fuer:
en condición subordinada, es considerado hostil al proceso de reversión que del diario de Abdul Majid (un tejedor) es una £-
inaugura la lucha y por ende, como si estuviera de parte del enemigo” (£AP 202). comunidad, Sin embargo, tal conciencia de+
« a tarea de la “conciencia” de clase o de colectividad, en el interior de un campo ambieúa, que cabalgaba entre la fraternidad
social de explotac ón y dominación es así necesariamente autoalienante. La mohalla"”" (3.269). "La conciencia de sí misma
tradición inglesa en las traducciones de Marx frecuentemente borra este hecho, insurgentes era de este modo indistinguible del :-
Considérese, por ejemplo, el siguiente conocido pasaje del Manifiesto Comunista: (EAP 286). El grupo contrasta firmemente estat:
“ICthe proletariat in struggle fim Kampfe] ageinst the bourgeoisie is compelled del subalterno con aquella tendencia del mer
to unite itself in a class ¡sich notwendins zum Klasse vereint], and, by meansof conciencia-de-clase al subalterno pre-capitalista, - *
arevolution, it makes itselí the ruling class, and, as such sweeps away by force
the old conditions ol production, it thus sweeps away the conditions of class
oppositions [Klassengegensalz] and of classes generally, and abolishes its own
lordship [Herrschaft) as a class"!*. Las frases traducidas como "suprime por la contra la burguesía el proletariado se constituye indefectiblemente ct:
si mediante la revolución se convierte en clase dominante y, en cuz >
viejas relaciones de producción, suprime, al mismo tiempo que estas
la existencia del antagonismo de clase [Kilos sengegensate] y de las.chas-
[Herrschaft] como clase”.]
17 Gramsct, Prison Notebooks, 11 Quintin Hoare y Geoffrey Noel-Smith (New York, International Publishers, 1971),
19 Georg Friedrich Wilhelm Hegel, The Science af Logic, lr. AN."
p 421,
p. 107
189 Karl Marx y Friedrich Engels, "The Manifesto of the Communist Party”, en Selected Works (Moscow: Foreign y -
Languages Publishing House, 1051), p.51. [N.E- Para la presente vers ón hemos consultado la traducción castellana * NE, Pequeño pueblo: centro administrativo, manufacturero
de Editorial Progreso 1%, Mine, E. ingels. Obras Escogidas, Moscú. E. p. 50). que dice: "Si.en la lucha fim Kampfej e NE, Barria, cuadrao distrito de un poblado,
260 AE Desonstruyendo la Het ala 261

del Imperialismo, Su gesto confronta así la noción de El. 1lobsbarwo de lo por alinearse con las pautas de conducta de los propios subalternos, ce una
"pre-pol tico”. tanto como los argumentos funcionalistas queventa reciprucidad ir in el
visión progresista, que diagnostica al subalterno como
y economía moral” entre "jornaleros" y “propietarios cermpesinos”,
como un percibirá tal alineamiento como carente de valor intervencionista. :n electo,
intento de negar la relevancia de las identidades de clase vdelbenmalicto E pa
de clase es en su propia insistencia sobre el subalterno como sujeto de la
para las relaciones agrarias en Asia hasta fecha muy reciente” (3.78).
El análisis el grupo lleva a:cabo tal retraducción, como estrategia intervencionista sólo
de Chakrabarty en torno a lo históricamente errónea que resultaría
la simple ialmente inconsciente,
inversión de este gesto, al intentar imponer una conciencia marxista de
trabajadora sobre el proletariado urbano en contextos coloniales y por
clase e abrazara como estrategia, el énfasis sobre a soberanía... panstaleadia
como muestra Guha-, sobre el subalterno rural, halla así un espació
implicación y... lógica" de "la conciencia rebelde" (EAP 13) podría percibirse entorices cnmo

a
en el interior "deconstrucción afirmativa”. Pero al percatarse de que tal énfasis es ae
de esta confrontación,
inviable, el historiador termina por romper su teoría en aras de un mn po A
Para los lectores que advierten los puntos de contacto entre
el grupo de escrupulosamente delineado?. Si, por otra parte, el historiador parci et a
Estudios de la Subalternidad y la crítica a] humanismo representada por

E
Barthes restauración al subalterno de una posición-de-sujeto en la historia sa ea
y Foucault, la confusión emana de los usos de la palabra conciencia”,
que nos establecer una verdad inalienable y final de las cosas, entonces cualquier énfasis

A
remiten inevitablemente a una cuestión postfenomenológica
y post-psicoanalítica en la soberanía, la consistencia y la lógica, como he sugerido más arriba, objetivará
en dichos autores. No es mi intención aclarar esta confusión
revelando analí- inevitablemente al subalterno y quedará atrapado en el juego del eseclmiento
ticamente que el grupo de Estudios de la Subalternidad
no considera en absóluto como poder. Aún si la discursividad de la historia es percibida como un forigesetzte
a la "conciencia" dentro de esa configuración y que más bien trabaja
exclusi- Zeichenkelte, no puede emprenderse una genealogía restaurativa sin la > po
vamente con la conciencia colectiva de segundo hivel que ll
podemos hallar en estratégica que terminará por enredar al genealogista en la cadena. Vien
Marx y en la tradición marxista clásica, Antes bien, propongo boletín
que, aunque el en 1971 Foucault recomendó el uso del "sentido histórico ya la manera del
grupo no se comprometa a sabiendas en una comprensión
postestructuralista diario relteradamente revisado por el locutor de televisión, para evitar la arro-
de la "conciencia", nuestra propía lectura transaccional de su
si percibimos que se adhieren estratégicamente a una noción
trabajo se justifica gancia de una genealogía exitosa?!, Es en esa vena que leo a los Estudios eso
esencialista de Subalternidad, a contrapelo de sí mismos, proponiendo que su propia subal-
conciencia -que sería vulnerable a la crítica antihumanista-.
pero desde una ternidad, al alegar una posición-de-sujeto positiva para el subalterno, podría
Práctica historiográfica que extrae muchas de sus virmides de
esa misina re-inscribirse como una estrategia para nuestros tiempos.
entica, :
¿Qué bondades tendría tal reinscripción? La de reconocer que el tarreno
del persistente impulso del subalterno hacia la hegemonía, permanecerá a
La historiografía como estrategia: or e
y por definición heterogéneo con respecto a los esfuerzos del co
¿Puede una estrategia ser inconsciente? Por supuesto que 19 completa ciplinario. El historlador debe persistir en sus esfuerzos por eat cm .
mente,
Sin embargo, tomemos afirmaciones como las siguientes: “existe
necesariamente que el subalterno es necesariamente el limite absoluto del espacio en el cual la
(una) discrepancia en algunas etapas de la lucha de clases entre el
nivel de su historia se narrativiza como lógica, Ésta es una lección dificil de aprender, pero
articulación objetiva y el de la conciencia de sus sujetos”: “a pesar
de todo su no aprenderla equivaldría simplemente a formular saluciones elegantes para u sl
compromiso práctico con una rebelión, las masas podían aún ser virtual práctica teórica correcta. ¡Alguna vez la historia ha desmentido que la
inducidas por
una falsa conciencia a confiar en las facultades mágicas de héroes
guerreros..." práctica normaa li: teoría, como en este caso la práctica del retail
O incluso, "el rebelde campesino de la India colonial sólo podía hacerlo
(aprender ala historiografía oficial? Si este supuesto, más que la disonante tesis qe E
su primera lección de poder, G.S.) si la volvía a traducir al
lenguaje semifeudal infantilidad del subalterno, fuera acogido por los Estudios de la SubalterniCad,
Ce la política en-el que había nacido" (£AP 178,270, 76). Una teoría
que admite
una falla parcial de ajuste en la construcción de cualquier estrategia no puede
considerarse inmune a su propio sistema; pues tiene que quedar atrapada
en la
posibilidad de que esa disyuntiva se aplique a su propio caso.
Si el historiador de E "interés" . es orquestada por Derrida
erri en Spurs, tr, Bar bara Harlow : (Chicago:
4 Univ.
E of
de la subalternidad, al volver a traductr fragmentos de la teoría del ellscueno y E (IET nacio de “deconstrueción afirmativa", lo que equivaldría a reconocer que ningún ejemplo
de lacrítica al humanismo al lenguaje de una historiografía esencialis de deconstrucción puede equipararse a su discurso. E .
ta, acaba 21 Michel Foucault, Languege, ComterMemory, Practico, 11. Donald F. Bouchard y Sherry Simon (Ithaca, Comell
Univ. Presa, 197).'pp. 156. 154,
262 He A de Dercrstyendo: lo Histonogralíc: 263

entonces su proyecto v:taría en concordancia consigo mismo, al reconocer que enseñanza-de-dachistoria sobre el estilo francés de enseñanza-de-la-!ilosolía?”.
nunca puede estar en plena concordancia con "la conciencia del subalterno”: Cualquiera que seu la posición que tomemos en la vieja pelea entre historia y
que nunca puede gozar de continuidad con respecto a la entrada desigual y filosofía, es forzoso que nos demos cuenta que, como disciplinas, ambas deben
situacional del subalterno al campo de la hegemonía política (y no meramente seguir siendo heterogéneas, así como discontinuas, respecto a la práctica social
disciplinaria, como es el caso del colectivo), como sucede con el contenido de subalterna, Reconocer esto no significa dar lugar a una abdicación funcionalista,
una descripción post facto. He aquí la relación siempre asimétrica entre inter- En la trayectoria de Foucault, es un hecho curioso que, en cierta fase de su
pretación y transformación del mundo, que Marx recalca en la onceava tesis sobre influyente último período, llevara a cabo algo así como una abdicación, negándose
Feuerbach. Allí se da un contraste entre las palabras haben interpretiert (participio a "representar" (como si tal negativa fuera posible) y privilegiando al sujeto
presente una acción culminada- de interpretierea, el verbo romance que enfatiza oprimido, que supuestamente podía hablar por sí mismo**. El grupo de Estudios
el establecimiento de un significado proporcional al fenómeno por la vía de una de la Subalternidad. que busca metódicamente las huellas de la representación,
metáfora referida al justo intercambio de precios) y zu verándem (infinitivo - no puede seguir por el mismo camino. Luego de "situar" la semiología, Barthes
-siempre abierto al futuro— del verbo alemán que "significa", estrictamente se volcó en gran medida a la autoviografíay a la celebración del fragmento. El
hablando, "hacer otro"). Esta última expresión no se equipara a haben interpretiert grupo de Estudios de la Subalternidad no puede seguir
a Barthes en esto, no sólo
ni en su carga filosófica derivada del latín, ni en su significado de idoneidad y por ser devotos de la semiótica, sino también porque tratan de er.samblar una
completitud, como lo hubiera hecho fransformieren. A pesar de no ser una palabra bio-grafía histórica de aquéllos cuyas vidas activas sólo pueden revelarse mediante
inusual, no es la más cornún para la noción de "cambio", venvandeln, en alemán. un registro deliberadamente fragmentario producido en algún otro lugar, Deben
En la versión más abierta "hacer otro" -veránderung- a partir de lo idóneamente seguir comprometidos con el subalterno como sujeto de su historia, pues mientras
autoidéntico -aCecuadamente, interpretiert— subyace una alegoría acerca de la continúen fieles a esta estrategia, nos revelarán los límites de la crítica al
relación del teórico con su tema. (No hay espacio aquí para comentar sobre la humanismo, tal como se practica en Occidente, |
riqueza de "es kom darauf an”, la frase sintáctica que une las dos partes de la El/la intelectual radical en Occidente se halla, ya sea. atrapado/a en una
Onceava Vesish. No sólo la “mala” teoría, sino toda teoría es susceptible a esta deliberada opción por la subalternidad, otorgando al oprimido la misma sub-
apertura, jetividad expresiva que critica, o 5ien en la posición de una total
Las descripciones teúricas ny pueden producir universales. Tan sólo pueden ierepiracartabtiana. La negación lógica de esta posición se da en el discurso del
producir generalizaciones provisionales, en la misma medida en que el teórico postmodernismo, donde "a masa es sólo masa porque su energía social ya se
se da cuenta de la importancia decisiva de su reiterada producción. De lo ha congelado, Es una reserva fría, capaz de absorber y neutralizar cualquier
contrario, dado que tal vez sus autores desean alegar que existe alguna fuerza energía caliente, Se parece a esos sistemas medio muertos en los que se inyecta
no especilicada que interviene directamente en la práctica subalterna, las con- más energía de la que se extrae, esos depósitos exorbitantemente mantenidos
clusiones de estos ensayos se tornan abruptas, no concluyentes, casí como una en un estado de explotación artificial”. Esta negación conduce a un vaciamiento
serie de postergaciones en algún proyecto empírico. Un ejemplo sorprendente de la posición-de-sujeto: “No es llegar al punto en el que ya no se dice yo, sino
de este deseo bloqueado de antemano lo ofrece Das, en un ensayo de ctra manera al punto en el que deja de ser importante qne se diga o no se diga yo"?, A pesar
brillante, al repudiar la formalización como frustrante para la práctica, mientras de que algunos intelectuales occidentales expresan una genuina preocupación
deplora la falta de suficiente generalización, que habría permitido el florecimiento por los estragos del neocolonialismo contemporáneo en sus propios estados-.
de la práctica subalterna (2.227). naciones, no están muy bien informados sobre la historia del imperialismo, sobre
Louis Althusser habló de la siguiente manera acerca de los límites a la pro- la violencia epistémica que constituyó/borró a un sujeto, obligándolo a ocupar
ducción teórica disciplinaria: "(Una) nueva práctica de la filosofía puede (en respuesta a un deseo) el espacio del otro autoconsolidante del imperialismo.
transformar la filosofía. Pero además, en esa medida puede ayuda: [aider á sa
mesure]a la transformación del mundo. Tan sólo ayudar..."2. En su crítica
trivializadora de Althusser, E.P. Thompson privilegia el estilo británico de 23 Trato brevemente lo mecánica de la crítica de Thompson en "Explanation and Culture: Marginalia", Humanities
E

in Society, 2.3 (Summer, 1979), p. 220, n 14


24 Puede encontrarse una exposición ejer:plar de esto. en "Intellectuals and Power”, en Empresa Counter-Memory,
Practice.
25 Jean Baudrillard, 1 the Shadow of the Silent Majorisies or the End of the Social And Other Essays, tr. Paul Foss,
FT.

o Alihusser, Lenia od Poilosaplos nd Oíher Essays, tr. Ben Fowkes (New York etal, (New York; Semiotext(e); 1983), p. 26; y Deleuze y Guattari, On the tna . John Johnston (New York:
Monthly Review Press. Semiotext(e), 1983), p. l.
dp. 68,
PAE
Leconsrujendo de mislonegrata
264 1 Chokra+orty Spreak
:
Á veces parece que lamisma de
lucidez
mientotemporalización del proyecto imperial.
Es casi como si la fuerza generada por su crisis estuviera separada de su campo Foucaul t sobre siglos de imperial i smo europe o produjera una versión
del análisis de
propio por obra de la ignorancia sancionada de esn historia. del espacio, pere por doctores;
en miniatura de ese lenómeno heterogéneo: manejo
Sostengo que si el grupo de Estudios de la Subalternidad fuera capaz de ver es, pero en asilos; consid eraciones de la periferia,
desarrollo de administracion
niños. La clínica, el asilo, la prisión,
su propto trabajo de restauración-del-sujetc como decisivamente estratégico, pero en términos de los dementes, prisioneros y
an de antemano una lectura
no pasaría por alto este vacio sintomático en el anti-humanismo occidental la universidad, parecen alegorías de pantalla que clausur
contemporáneo. En su innovador ensavo sobre los modos de poder, Partha de las narrativas más amplias del imperialismo”.
Chatterjee cita a Foucault y a su trabajo sobre el siglo XVII, y escribe: rno debe habitar la
Así, el discurso de la conciencia unificada del subalte
así como el discurso del sujeto micrologizado
+ Foucault ha buscado demostrar las complejidades de este nuevo régimen de poder estrategia de estos historiadores,
" debe marcar el de los anti-hu manista s al otro lado de la división
en sus estudios sobre la historia de la enfermedad mental, de la práctica clínica, o "situado
de Ranaji: Guha y
de la prisión, de la sexualidad y del surgimiento de las ciencias humanas. Cuando internacional del trabajo. Las dos siguientes aseveraciones
uno observa los regímenes de póder en los llamados países atrasados en el mundo r pueden ser entonce s percibid as, no como señal de una con-
Louis Althusse
de hoy, no sólo el dominto de los modos de ejercicio de poder caracteristicamente de niveles filosóficos,
“modernos” parece limitado y cuestionado por la persistencia de modos más tradicción, sino como la fractura de una discontinuidad
a estratég ica: "Sin embargo propone mos", escribe Guha
antiguos, sino que debido a su combinación en un estado y formación particulares, astcomo de una asimetrí
concienc ia como nuestro tema central,
parece abrir al mismo tiempo uña gama completamente nueva de posibilidades en los años ochenta, "concentramos en esta
explicar la experien cia de la insurrec ción simplem ente como
para las clases gobernantes en el ejercicio de su dominación (3.548-9). porque no es posible
de sujeto” (4.11). Precisa mente, “no
una historia de acontecimientos carentes
He dicho antes que la fuerza de la crisis no se enfatiza sistemáticamente en es posible" . En tanto Althusse r escribe en 1967:
el trabajo del grupo. El ejemplo foucaultiano que aquí consideramos, puede, por
El Capital lo demuestra-
ejemplo, ser percibido en el sentido de que marca una crisis dentro de la conciencia Innegablemente, ya que ha sido admitido en su obra -y
aún tanto
europea. Pocos meses antes de leerel ensayo de Chattarjee, puse sobre el papel Marx le debe a Hege! la decisiva categoría filosófica de proceso, Le debe
el concepto de proceso
más, que el propio Feuerbach no lo sospechaba, Le debe
opiniones extrañamente parecidas a las suyas, en torno al mismo pasaje de origen, indis pensable para la naturale za keleológi ca del proceso...
sin sujeto... El
Foucault. Soy consciente de que escribo en un contexto laboral comprometido debe ser negado desde el principio , de múdo que el proceso d alienación pueda
Origen alirmado-negado:
con la producción ideológica del nsocolonialismo, incluso a través de la influencia ser un proceso sin sujeto... La lógica de Hevel es la del
reflexión filosófica,
de pensadores cómo Foucault, No-es pues, necesariamente, señal de extraor- la primera forma de un concepto que Derrida ha introducido a la
dinaria perspicacia que lo que aquí llamo crisis de la conciencia europea se ponga la borradura?”.
en relieve más nítidamente en mi párrafo, al que me tomo la libertad de citar.
que la lógica
Sostengo (ue la relación entre el postinarxismo enti-humanista del primer mundo Como ha remarcado correctamente Chakrabarty, "Marx pensaba
podía ser descifrad a mejor sólo en una sociedad donde la no-ión de
y la historia del imperialismo no es simplemente una cuestión de "ampliar la gama del capital
popular 12.263).
d> posibilidades”, como Chatterjee sugiere sobriamente en el texto citado. igualdad humana hubiera ya adquirido el arraigo de un prejuicio
popular se confunde
La primera lección de ideología consiste en que un "prejuicio
La his-
A pesar de que Foucault es un pensador brillante del poder-en-el-espaciamiento, con la "naturaleza humana", esa lengua materna ori ginal de la historia.
una historia
la conciencia de la reinscripción topográfica del imperialismo no moldea sus toriografía marxista puede quedar atrapada en la lengua materna de
grupos
presupuestos. Se ve engañado por la versión restringida de Occidente producida
y una cultura que han coronado en el individualismo burgués. Mientras
por esa reinscripción y ayuda así a consolidar sus ejectos. Nótese, por ejemplo, los textos de
en el siguiente pasaje; la omisión del hecho de que «:l nuevo mecanismo de poder como el colectivo de Estudios de la Subalternidad intenten abrir
ionalismo
en los siglos XVII y XVII! (la extracción de plusvalía sin coerción extra-económica Marx más allá de su procedencia europea, más allá de un internac
miento persisten te de la heterog e aeidad,
es su descripción marxista) se asegura por medio del imperialismo territorial la homogéneo, en la vía de un reconoci
o" —die ¡Am
"lerra y sus productos» "en otra parte”, La representación de la soberanía es el propósito mismo de "olvidar su lenguaje original (o "enraizad
decisiva en tales escenarlos: "En los siglos XVI! y XVII tenemos la producción de
un importante fenómeno; la emergencia, o más bien, la invención de un nuevo
mecanismo de poder poseedor de técnicas procedimentales altamente específicas.
lo aus es tambián, ereo, absolutamente incompatible con las relaciones de 36 Spivak, "Can the Subaltem Speak?"
soberanía..." Estoy proponiendo que aceptar una versión auto-contenida de d'Hondt (Paris: Presses
27 Alihusser, "Sur le rapport de Marx h Hege 1", en Hegel el la pensée moverme, ed, Jacques
Occidente es ignorar sintomáticamente su producción por el espacia- universitaires, 1970), pp. 108-9.
266 Davor Chakrovor" Spivas Deconsiruyendo la Historiogralia 257

angestammte Sprache) mientras se usa el nuevo” tiene que ser reinserito*. Un a esta acusación. Aquí quiero señalar su común fonocentrismo, la convicción
reconocimiento reiterado de la complicidad de lo nuevo con lo "original" está de que el habla es una representación directa € inmediata
de la concienciade-
a la orden dal día. He tratado de indicar esto deconstruyendo, por un lado, la voz y de que la escritura es una transcripción indirecta del habla. Como dice
oposición entre el colectivo y su objeto Ce investigación —el subalterno—; y por Guha, citando a Vygotsky, "La velocidad dei discurso oral es desfavorable a un
otro, deconstruyendo la aparente continuidad entre ellos y sus modelos proceso complicado de formulación; no deja tiempo para la deliberación y la
anti-humanistas, Desde este punto de vista, sería interesante si, en lugar de hallar elección. El diálogo implica la expresión inmediata no premeditada” (EAP 261).
su único internacionalismo en la historia europea y la antropología africana (un Según esta consideración, la historia de la escritura es coincidente con la
desglose disciplinario interesante), encontrasen también líneas de contacto, por inauguración y desarrollo de la explotación. Ahora, no hay razón para cuestionar
ejemplo, con la economía política del movimiento ranesina independiente de este recuento bien documentado de lo que podría denominarse escritura en el
México”, sentido "estrecho" o "restringido", Sin embargo, frente a este modelo restringido
Sólo es posible leer a contrapelo si existen ciertos desajustes en el texto, que de escritura, no debiera erigirse un modelo de habla al que se le asignara una
nos señalen el camino. (Se los llama a veces "momentos de transgresión”) Me autoidentidad total basada en un modelo psicológico tan tosco que implicara
gustaría redondear el conjunto de mi argumento analizando dos de estos que el espacio de "premeditación" está confinado a la conciencia deliberativa,
momentos en el trabajo de este grupo. En primer término, su tratamiento del basándose en "evidencia" empírica tan impresionista como "la velocidad del
rumor; y en segundo, el lugar de la mujer en su argumento. discurso oral",
En contraposición, las teorías post-estructuralistas de la conciencia y del
El rumor lenguaje sugieren que toda posihilidad de expresión, hablada o escrita, comparte
un distanciamiento común respecto a un sí mismo, para que el significado pueda
El tratamiento más extenso del rumor, que puede hallarse en EAP, no forma
surgir: pero no sólo el significado para los otros; también el significado:de sí
parte, estrictamente hablando! del trabajo del grupo. Sin embargo, creo estar mismo y para sí mismo. He adelantado esta idea en mi análisis de la "alienación".
en lo correcto al sostener que las páginas de Guha explicitan un conjunto implícito Además, estas teorías sugieren que el "si mismo" [self] es en si mismo, siempre
de supuestos sobre la naturaleza de los medios de comunicación del subalterno,
p"oducción más que fundamento, idea que he abordado en mi tratamiento del
tales como el rumor, y sobre su papel en la movilización de la insurgencia, que
"electo-de-sujeto", Si se percibe la escritura en términos de su aserción histórica,
están presentes en el trabajo de todo el grupo, Esto también pone en relieve la la producción de nuestro sentido del sí nismo como fundamento parecería estar
contradicción inherente a la práctica general del grupo —que se inclina hacia el
estructurada como la escritura:
postestructuralismo-, y a su adhesión a la primera época semiológica de Barthes.
Levi-Strauss y Greimas y a los estructuralistas taxonómicos como Vygotsky, Los predicados esenciales en una mínima determinación. del concepto clásico de
Lotman y Propp. escritura... (son que) un signo escrito... es una marca que queda (reste),... (que)
Steven Ungar delinea la trayectoria de Barthes de la semiología a la semio ropía, leva consivo una fuerza que rompe con su contexto... (y que) esta fuerza de ruptura
a través de la semioclastia, en Roland Barthes: the Professor of Desire". Cualquier está ligada al espaciamiento... lo que lo separa de otros elementos de la cadena *
contextual interna... ¿Están estos tres predicados, junto con todo el sistema que
uso del Barthes de la primera época tendría que refutar, así.sea brevemente, la implican, estrictamente limitados, como frecuentemente secree, a la comunicación
propia refutación y recbazo que hace Barthes de sus posiciones tempranas. "escrita" en el sen ido estrecho de la palabra? ¿No puede hallárselos en todo el
Una de las empresas cuestionadas por la crítica del sujeto de conocimiento lenguaje, en el lensuaje hablado, por ejemplo, y por último, en la totalidad de la
identificada con el anti-humanismo post-estructuralista, es el deseo de producir "experiencia" en cuanto que es inseparable de este campo de la huella, vale decir,
de la red de obliteración y de diferencia, de unidades de iterabilidad, que son
taxonomías exhaustivas, de "asignarle nombres mediante una operación meta-
separables de su contexto interno y externo, así como de sí mismos, puesto que
lingúística" (2.10 [Ver aquí Guha, p. 42]). Ya he tratado extensamente esta cuestión la misma iterabilidad que constituía su identidad no les permite ser una unidad
en otra parte de mi ensayo. Todos los autores arriba citados serían susceptibles de autoidentidad”” s

28 Karl Marx, "The Eighteenth bn maire of Lovis Bonaparte”, en Survevs fm Exile, ed, David Fernbach “Nueva
York; Vintage Books, 1974), p. 147.
29 Para una obra histórica relacionada a su lucha contemporánea, ver John Womack, Zapata and the Mexican
Revolution (Nueva York, Knopf; 1969). 31 Derrida, "Signature Event Context”, en Margins of Philosoplzy, te. Alan Bass on Univ. of Chicago Press,
30 Steven Ungar, Roland Barthes: the Professor of Desire (Lincoln: the Univ. of Nebraska Press, 1983). : 1982), p. 17-18,
Se mruyendo lo Histonagrofíe 269
268 Sc .oti Cookiovary Speak,

Debemos volver a "Signature Event Context" de Derrida, de donde se tomó El rumor eyoca la camaradería porque pertenece a cada "lector" o "transmisor".
el extenso pasaje citado, para lo que hace a una consideración más amplia de Nadie es su origen o fuente. De esta manera, el rumor no es error, sinc pri-
cómo las exigencias de la teoría prohiben la manipulación ideológica del psi- mordialmente (originariamente) errante, siempre en circulación, sin una fuente
cologisino y empirismo ingenuos, Baste decir aquí que esta línea de pensamiento asignable. Esta ilegitimidad lo hace accesible a la insurgencia. Su "transitividad
podría armonizarse con el argumento de que lo abstracto determina lo "con- absoluta" (diríamos "indefinida", dado que "puede atribuírsele fuente (5) ficticias”),
creto"*, Tal argumento no se asienta en una prioridad cronológica, sino en una que se desmorona en el origen y en el final (clara imagen de la escritura), puede
prioridad lógica. Y es lamentable que, gracias a los nobles esfuerzos de Engels describirse como el modelo recibido de habla, en el sentido estrecho ("la cola-
por hacer accesible a Marx, su idea de la "determinación" haya sido frecuente teralidad de palabra y hecho brotan de una voluntad común"), tan sólo bajo la
mente reducida a la "causalidad"; No puedo elaborar sobre esta situación histórica influencia del fonocentrismo. De hecho, quince páginas más adelante, el autor
aquí. Baste decir además que, según esta línea:de:argumentación, no sólo mismo se acerca a esta posición cuando se percata que los insurgentes -pilenes
parecería que "describir el habla como la expresión inmediata del ser” marca también están bajo la influencia del fonocentrismo- restringen la verbalidad «bierta
el lugar de un deseo que está obligado a pasar por.alto la complejidad de la del rumor a través de un horizonte apocalíptico. El subalterno, la autoridad de
producción de (un) sentido(s) del ser, Según. esto; también habría que reconocer élite y el crítico de la historiografía se hacen cómplices aquí. Sin embargo, la
que ningún habla, ningún "lenguaje natural” (un oximorón inconsciente), ni siquiera descripción del rumor en sus "rasgos distintivos [de]... anonimato y transitividad"
un "lenguaje" gestual, puede significar, indicar.o expresar sin la mediación de (EAP 260) señala una contradicción que nos permite leer a contrapelo el texto
un código pre-existente. Además, habría que; comenzar asospechar que las ' de Subaltern Studies. A
. manifestaciones más autoritarias y potencialmente más explotadoras de la: El extraño maridaje entre el estructuralismo soviético y el anti-hurnanismo
escritura en el sentido estrecho: los códigos de | ley> obran bajo un fonocen- francés produce a veces un efecto engañoso. Por ejemplo, la aplicabilidad al rumor
“trismo implícito, el presupue: que cesión, inmediata del? de la sugerencia barthesiana de que la atribución de autoría cierra del todo. la
simismo. —- a 3 e escritura, debería alertarnos sobre el carácter escritural (scriptible) del rumor,
Considero más apropiado pensar que el poder del rumor en el contexto en lugar de obligarnos a desplazar al habla la aseveración de Barthes via Vygotsky.
subalterno deriva de su participación en la estructura de la escritura ilegítima El diálogo, según Vygotsky, es el ejemplo privilegiado de la denominada comu-
más que de la escritura autoritaria-de la ley, la misma que es confirmada por el nicación de verbalidad directa entre dos “autores” o fuentes inmediatamente
modelo fonocéntrico del espíritu de la ley. "La escritura, el proscrito, el hijo autopresentes, 5e supone que el diálogo es "impremeditado” (a pesar de que las
perdido. Debe recordarse aquí que Platón siempre asocia habla y ley, logos y teorías del etecto-de-sujeto o de la determinación abstracta de lo concreto
nomos. Las leyes hablan. En la personificación de Cra las leyes le hablan a considerarían dudoso este alegato). El rumor es un relevo de algo siempre
Sócrates directamente"*, asumido como pre+xistente. En efecto, las autoridades coloniales se equivocaron
al tomar el nimor como habla, al imponer los requerimientos del habla, en el
Consideremos ahora las páginas 259-64 de EAFP, donde: se lleva a cabo el análisis
sentido estrecho, a algo que extrae su fuerza de su participación en la escri ura,
del rumor. (Estas páginas se citan en 3.112,n. 157.) Recordemos también que
en el sentido amplio.
el marco mental de los campesinos está tan afectado por el fonocentrismo de
una tradición en la que srutí —lo que se oye- tiene la mayor autoridad, como el El grupo de los Estudios de la Subalternidad nos ha conducido aquí a un tema
marco mental del historiador por el fonocentrismo de la lingúística occidental. de gran riqueza, El entrecruzamiento de las posibilidades revolucionarias no
Nuevamente, es más una cuestión de complicidad que de distancia de posesivas en la estructura de la escritura en general y su control por el fono-
conocimiento, centrismo del subalterno nos da acceso a una micrología, o funcionamiento en
Si, entonces, "el rumor es expresión hablada par excellence" (EAP 256), es escala diminuta, del mundo filosófico del subalterno. El asunto del "papel en
preciso ver que su "inmediatez funcional” reside en su no pertenencia auna blanco que cae del cielo" o el uso de material aparentemente "fortuito" "para...
conciencia-de-=voz única, € ae lector/a puede "llenarla” con su "conciencia". transmitir... la propia orden del Thakur por escrito" (EAP 248-9), por ejemplo,
nos podría proporcionar un texto muy complejo para el uso de la estructura de
la escritura en la fábula de la "conciencia del insurgente", El tema del papel de
"la lectura de los periódicos en voz alta” en la construcción de Gandhi como
32 Para otra transformación conlimcrtss de este noción, ver Antóno Negrl, Marx Bi La Mark: Lasisons on
the Grundisse, 15. Harry Cleaver et al, (Soutb: Hadley: Begin and Garvey,1 4), pp. 4!- significante, se, deja de lado quizás muy rápidamente como Instancia de
O "Plato's ca ma: tr, Barbara Johnson (Chicago: Univ. E Chicrgo Press, 1981), dependencia respecto al "lenguaje hablado", cuando lo que demuestra tal acto
P
270 Gaya Chokrovony Spivak
Deconsimyendo la Historiografía z71
es que "una historia adquiere autentificación de su tema y del nombre de su lugar
estratégico puede revelar la asimetría entre los tres grupos mencionados arriba. a
de origen más que de la autoridad del corresponsal" (3.48-9). Me he detenido
No obstante, como "na lectura a contrapelo" tiene que permanecer estratégica
tanto en este punto que ahora sólo me resta decir que el periódico es escritura
explotadora en el sentido estrecho, que "el lenguaje hablado" es un concepto siempre, nunca podrá alegar que ha establecido la verdad autoritaria de un texto,
deberá seguir siendo siempre dependiente respecto a las exigencias prácticas
fonocéntrico en el que se supone que la autoridad emana directaménte de la
conciencia-de-voz del hablante autopresente, y que la lectura en voz alta de un
y nunca conducir legítimamente a una ortodoxia teórica. En el caso del grupo
texto ajeno, como lo hace "un actor en escena”, no es otra cosa que la puesta de Estudios de la Subalternidad, tal lectura le evitaría la peligrosa trampa de alegar
que se ha establecido el conocimiento verdadero sobre el subalterno y su
en marcha de la escritura en el sentido genera:, Para corroborar esto, puede verse
conciencia,
ebeontraste que se establece entre hablante y rétor en la tradición occidental, .

desde el Sócrates platónico, pasando por Hobbes y Rousseau hasta J.L. Austin*.
Cuando los periódicos empiezan a publicar rumores (3.88), la gama de posibi- La mujer RS: ES , a
lidades especulativas se vuelve aún'más seductora. La propia:investigadora cesa «El grupo es9 estrupulóso en su consideración hacia das mujeres. En variós'
tentada por el'circuito de "absoluta transitividad". —:/* lugares. registran momentos en que hombres y mujeres participan conjuntamente.
¿Sin £edera' esta; seducción puede formularse la siguiente pr egunta: ¿de ce dd . en la lucha (1.178, EAP 130) y donde: sus condiciones de trabajo o educación sufren
“ sirvereparar en el desajuste entre la estructura sugerida de laescritura-en-general de discriminación genérica o de clase (2.71, 2.241, 243,257, ¡275):, Empero; creo
y el interés declarado en el fonocentrismo? ¿De qué sirve señalar que un fono: que pasan por.alto cuán importante es la metáfora:concepto, Mujer para el
.centrismo común une al subalterno, a la autoridad de élite y al historiador funcionamiento de su discurso. Con esta consideración llevaré a término el'
-Críticodisciplinaiio, y. queisólo uña lecturaa contrapelo podría revelarnos la conjunto de miargumento. . 27 es E a
a, , yn aj

¿adhesión a la ¡legitimidad pe parte: del e: ys el toro? Dicho ee


d otro en 7 -, En cierta lectura, la figura de la mujerees lo instrumental al cambio
* citando a Terry Eagleton:.. de función de los:sistemas, discursivos;:como. es:el éaso en la movilización
insurgente. Nuestro grupo rara vez se plantea los problemas ce la mecánica de
Marx es un metafísico, como lo es Schopenhauer y como lo es Ronald Reagan. ¿Se esta instrumentalidad. Para los insurgentes, en su mayoría masculinos, la
ha ganado algo con esta maniobra? ¿Si es verdadera, es esclarecedora? ¿Qué está
"femineidad" es un campo discursivo tan importante como la "religión". Así,
en juego ideológicamente en tal homogeneización? ¿Qué diferencias materializa
para suprimir? ¿Incomodaría o deprimiría a Reagan? Silo que está en juego para cuando la protección a las varas se convierte en un significado volátil para la
el deconstruccionismo es el discurso metalisico, y si éste es completamente reinscripción de la posición social de varios tipos de grupos subalternos,
generalizado, entonces, y un sentido en que al leer a contrapelo estamos:sub- semisubalternos y de élite indígena, la vaca se transforma en una figura femenina
virtiéndolo toco y nada?5 de uno u otro tipo. Considerando que en el siglo XIX británico el acceso femenino
al individualismo posesivo” es una Ce las fuerzas sociales más importantes, ¿qué
No todos los modos de comprender el mundo y de actuar sobre el son significa sugerir que la "femineidad" tiene el mismo sentido y fuerza discursivos
igualmente metafísicos o fonocéntricos. Por otra parte, si hay algo compartido para todos los grupos heterogéneos meticulosamente documentados por Pandey?
por la élite (Reagan), la autoridad colonial, el subalterno y el mediador Chakrabarty realiza una investigación análoga sobre la figura del AO
(Eagleton/Estudios de la Subalternidad) que preferiríamos no reconocer, cualquier No hay tal suerte para la "mujer",
solución elegante que formulemos por medio de tal negación no pasaría de ser
En el nivel más "antiguo e indígena" de lo religioso, un nivel que "tal vez dio
la marca de un sitio del deseo, Lo óptimo sería entonces el intento de forjar una
(al montañés rebelde) una potencia extra (sic) en tiempos de desgracia colectiva
práctica capaz de cargar con el peso de tal reconocimiento, Al usar el funcio- y opresión externa" (1.98), todas las deidades son diosas devoradoras de hombres.
namiento enterrado de la estructura de la escritura como palanca, el lector
A medida que este nivel de colectividad pre-insurgente se va transformando
gradualmente en revuelta, continúan cfreciéndose más sacrificios a las diosas
que a los dioses. Así, incluso cuando este nivel de revuelta liderizada por gente
subalterna se compara con las "luchas de élite del período anterior" (1.124),
34 El tratamiento de la autoridad que realiza Hobbes en el Leviathan y el tratamiento del genio e realiza Kant
en The Critique uf Judgement son dos de los muchos loci classici, Existen extensos tratamientos de esta temática, notamos que en ese período, las luchas comenzaron en dos ocasiones porque
«como puede encomrarsela en el Sócrates platónico, en Rousseau y en J.L. Austín-, en "Plato's Pharmacy", en Of los hombres no aceptaban el liderazgo femenino:
Grammatologx, y eo "Signature Event Context” de Derrida, respectivamente,
35 Terry Eagleton, Walter Menjomin: cr TowardsA Revolutionary Criticism (London: Verso Press, 1981), p. 140,
272 Goyalri Chokravory Spivak Deconstruyendo la Historiografía 273
e
3
1

2. Con la destitución de Ananta Bhupati en 1836, 17avo Zamindar de Colgonda, el


No era inusual que un Patidar* "superior" gastara su dinero de dote y devolviera
Recaudador de Vishkhapataam colocó a Jamma Devamma, viuda del l5avo la.esposa a su padre, para poder casarse otra vez y obtener otra dote, Entre patidars,
diego Zamindar, en su lugar. Esta era una afrenta a los muttadars* y mokhasadars”* de se consideraba muy vergonzoso tener que recibir a una hija devuelta [1]... Se
Gudern, a quienes no se consultó... y que protestarón en sentido de que nunca habían formaban gols** para Impedir desastrosos matrimonios hipergámicos con linajes
sido gobernados por una mujer... En Rampa, después de la muerte del Mansabdar patidar "superlores”... Por lo tanto, descubrimos aquí una forma fuerte de orga-
12 +. Ram Bhupati Dev.en marzo de 1835, vino.una revuelta de muttadars contra la hija nización subalterna dentro de la casta patidar, que permitía
un control respecto
q e había sido designada como sucesora (1,102), al poder de la élite patidar....Ni Mahatma Gandhi pudo romperla solidaridad 38.
gol patidar de A a ; ACES
-En término de suna 'semiosis social, ¿cuál
es la'diferencia entre diosas
devoradoras de hombres, objetos de r erencia y generadoras de solidaridad, No veo cómo puede pasarse por alto aquí la decisiv.
A por un lado-y por otro, hijasy viudas seculares; inaceptables como líderes? mujer como objeto de intercambio simbólico. Sin embar
“7: Con'motlvo del "cultivo de la caña de azúcar”
en UP oriental; Shahid Amin habla “conclusión; "la:solidaridad de los
de la no coincidencia deliberada que'se'creó entre la inscri oción natural (como - : (12202, 203, 207). La condición
de le
. en seript guión de teatro) del calendarió dela coséc cripc artificial *
a inscripción la condición del insurgente bajo el poder colonial;
del circuitd'del capital monopólico colónlal:*Por supitesto; sería muy interesante + diferencia? El subalterno masculino y el historiador result ant
preguntarse cómo'se hubléra desarrollado la Composición del campesinadoy , supuesto común de cue el sexo procreativó es una es pes dee rnpa,

tlerraj'sise hubléta: pérmitido que ¡imbas inscripciones coin:


. cidieran.' Sid embargo; también
| acaso- se considera parte de la sociedad civil. 2 .
ftírse qué
la: dote es la demanda sócial* > En el contexto
de la Ind contemporánea, estas cues Hones recen d
invariablemente mencionada, que permit fa que las demandas de la naturáleza - importancia. Así como los ulgulan [rebeliones] de 1899-1901 des-hegemonizaron -
devastaran el campesino por medio de las demandas del imperio, ¿Deberíamos el cristianismo milenarista en el contexto indio, también los adivasis parecen
preocuparnos por la constitución del subalterno como sujeto (sexuado), cuando haberle sacado el jugo a las posibilidades emergentes de una religión centrada
la explotación-de la diferencia sexual párece tener un papel tan decisivo en tantos en deidades femeninas en el movimiento Devi de 1922-23, un movimiento que
frentes? ¿Deberíamos tomar nota de que el proverbio mencionado «n 1,53%", impugnó activamente la re- nscripción de la tierra como propiedad privada, “4
es recitado por una hija joven, que se niega a las demandas de su amante para En el actual contexto indio, ni la religión ni la femineidad muestran un potencial j
preservar los sembradíos de su padre? ¿Deberíamos prestar atención a esa emergente de este tipo,
división metafórica de la sexualidad (en el caso de la mujer, el sexo es, por
He dejado para el final dos amplias áreas en las que la instrumentalidad de
supuesto, idéntico a su ser o a su conciencia) que la equipara con una heredad,
la mujer adopta su forma más impresionante: las nociones de territorialidad y
que se transfiere o no, del padre al amante? Realmente, en un colectivo que presta modo com. mal de poder.
tanta atención a la subjetividad o posicionamiento-de-sujéto del subalterno, resulta E 8
sorprendente encontrar tal indiferencia por la subjetividad e incluso por la
indispensable presencia, de la mujer como instrumento decisivo. Estas cuatro
Metáforas-concepto de territorialidad y de mujer
oraciones podrían servir para ilustrar mi argumento: El concepto de territorialidad está implícito en la mayoría de los ensayos de
los tres volúmenes de Subaltern Studies. Nuevamente, la exposición teórica
explícita se encuentra en este caso en EAR. La territorialidad es la "atracción
combinada de los lazos primordiales de parentesco y de comunidad" que forma
parte "de la mecánica real de... la movilización autónoma" (EAP 118). En el nivel
*" N,de T, Multa - Gran heredad, que usualmente comprendía varias aldeas en Andhra: Por lo tanto, «dar: tenedor más simple posible, es evidente que las noclones de parentesco resultan enc.ades
de una multa. j . +
** N. de T, Mokhasadar - Tenedor de una tenencia mokha:a de aldea o tierra asignada a un individuo sea
gratuitamente, sea u cambio de una pequeña renta fija con la condición deprestar servicios en la región Telugu,
cw9* NE, Sevefere al proverbio "Aunque amor mío tu eres muy querido para mí, ¿por qué me pides toda la rama?
No estoy dlapuesta a llegar siquiara con media rima, porque es de mango (y porlo tanto, muy valiosa)", analizado * N, E. Casta dominante de Gujarat. .
Shahid Amin, "Small Pensant Commodity Production and Rural Indebtedness; the Culture ** N,E, Círculo matrimonial Patidar,
Y.P..c. 1880-1920", En: Subaltern Studies1 Ranajit Guha (ed,) 1996 (1982). ol Sugarcane in Eastern !
36 Ver Hardiman, "Adivasi Assertion in Sou:h Gujarat: the Devi Movement of 1922-3", en 3, +
274 Gayoti Chokravorty Eprak Deconstruyendo la Historiografía 275

y consolidadas por medio del intercambio de mujeres, Esta consolidación, según un concep'o de "nación”. Hoy. después de la computarización
de la economía
Guha, rebasa la división religiosa entre lo hindú y lo musulmán. "En Tamil Nada... global, los conceptos mismos de nación se están volviendo problemáticos de .
con las cuatro (subdivisiones de la comunidad musulmana, G.5.), la endogamia manera específica:
ayuda a reforzar sus identidades diferenciadas tanto en términos de parentesco
como de territorio” (EAP 299). En "Allahabad... los Mewati... realizaron una El modo de integración de los países subdesarrollados a la economía internacional '
ha cambiado, de una base exclusivamente ligada a la explotación de materias primas
movilización masiva de sus aldeas exógamas densamente emparentadas entre y mano de obra, a otra en que la manufactura ha ganado preponderancia. Este
sí" (FAP 316). En todos estos ejemplos, la mujeres el sintagma olvidado en la movimiento ha ocurrido paralelamente a la proliferación de zonas de procesamiento: -;*
semiosis de la subalternidad de la insurrección. - ps de exportaciones (ZPEs) en todo el mundo. Más que ún' concepto uniformemente
Alo largo de estas páginas, mi propósito ha sido el de mostrar lá complicidad defínido o geográficamente delimitado, la zona: de procesamiento. de exportaciones ,....
provee una serie de incentivos y laxas restricciones para las corporaciones mu
entre sujeto y objeto de investigación; es decir, entre el grupo de Estudios de la tinacionales de parte de los países en desárrollo en su. esfuerzo por atraer Inversió
Subalternidad y la subalternidad. UEtambién, la tendencia de los historiadores, extranjera a la manufactura orientada a la exportación: Esto ha dado lugar a nuevas:
Ideas sobre el desarrollo que frecuentemente cuestionan las nociones preexistentes.
¡sde iO ación"

rán
f consanguinidad y co-
4 EE
residencia.' “Como: en el caso dels srutales 'costúmbi es atrimonlalés delos
tu patidars, aquí. elhistoriador menciona la simple, exclusión dEde
“sujeto femenino (séxuado), sin detenerseá reflexionar $0
de estas (aldeas rebeldes), c: ón, 6 : yel capitalismo internacional, la mujer. riada
adquiridas por matrimonio, alegába ser descendiente de'ún patrilinajé común, digmático de la configuración actual de. la División Internacional del Trabajodé%
consanguíneo o mítico, y se consideraba como miembro del mismo clan o gotra, Conforme investigamos las pautas de resistencia entre estas "eventuales per-
Esta creencia en un ancestro compartido hizo que la aldea se afirmara positi- manentes”, los problemas de constitución-de-sujeto en la mujer subalterna ven
vamente al actuar como una unidad de solidaridad y negativamente al poner en adquiriendo importancia,
marcha un elaborado código de discriminación contra los extraños" (EAP 314;
énfasis mío). El modo comunal de poder y el concepto de mujer
A pesar de que todos aceptaron sín gran énfasis y trivialmente que la mujer, A pesar de que el concepto de modo comunal de poder de Partha Chatterjee-
carente de una identidad propia, era quien hacía funcionar este patrilináje no está implícito de modo tan generalizado en todo el trabajo del grupo, se trata
consanguíneoo mítico; y a pesar de que, en opinión del historiaclor, "estos lazos de un argumento importante y sustantivo para el proyecto de los Estudios de la
primordiales con base aldeana eran el medio principal de movilización rebelde, Subalternidad. Aquí se muestra que la Importancia de las estructuras de poder
de mauza a mauza, por todo el norte y el centro de India en 1857" (EAP 315), parece comunales, basadas en gran parte en la familia y en el clan, abarcan partes extensas
que no podemos dejar de investigar la privación-de-sujeto de la mujer en el del mundo pre-capitalista, Nuevamente, la importancia definitoria decisiva,
funcionamiento de esta movilización y esta solidaridad. Me parece claro que, sintagmática y micrológicamente anterior, de la diferencia sexual en el despliegue
si la cuestión de la conciencia subalterna femenina, cuya instrumentalidad es tan de tal poder es excluida de antemano, de modo que se percibe a la sexualidad
frecuentemente percibida como decisiva, es una pista falsa”, la cuestión de la sólo como un elemento entre los muchos que impulsan esta "organización social
conciencia del subalterno como tal debe juzgarse también como una pote de la producción” (2.322). La tarea de hacer visible la figura de la mujer no es,
falsa. quizás, una tarea que se pueda pedir con justicia al grupo. A esta lectora le parece,
"La territorlalidad actuaba en grado nada despreciable para frenar la resistencia sin embargo, que una historiadora feminista de la subalternidad tendría que
contra la soberanía británica" (EAP 33D). Lo que esta resistencia requería era plantearse el problema de la mujer como un asunto estructural más que marginal

37 June Nash y María Pabricia Fernández Kelley, eds, Women, dla end de iniemational Division of Labor (Albany:
Suny Press, 19:13), p. vitl.
* NE. En el original, red herring, lit, "arenque rojo", expresión intraducible que indica algo que hace desviar la 38 Trato este asunto en "The Polities of 'Feminist Culture! *, en prensa en Praxis International.
Deconsiruyendo la Histonogialio 277
276 Gayali Tiaraunr, Sowak
subalterno como para el historiador,
en cada uno de los muy diferentes tipos y culturas que Chattarjee invoca en "Más de la comunidad o de la historia, tanto para el
por encima (prete ndo una metáfo ra copulativa, filosófica y sexual-
sobre los modos de poder y el campesinado". se produce
discon tinuid ad, por encima del repetido
mente) del encubrimiento de su
Si en la explicación de la territorialidad yo noto una tensión entre las des- mento.
vaciamiento de su significado como instru
cripciones consanguíneas y espaciales que comparten el subalterno y el cia recorrida entre el alto
en el caso del "modo comunal de poder", se nos muestra un choque Si aquí parezco intransigente, quizás la discan
historiador,
anti- human ismo puede ser medida, de mejor manera,
entre las explicaciones que ernanan de percepciones "políticas" y aquellas que estructuralismo y el actual
famoso s, Primero, un ejemplo
surgen del parentesco. Esta es otra versión de la misma batalla: la aparente a partir de dos célebres pasajes de dos hombres la constitu-
en
la representación
neutralización genérica del mundo, que se explica finalmente mediante la razón, de olímpica destitución, que ignora el papel de
ción-del-sujeto:' as
negando y subsumiendo la sociedad: doméstica en la sociedad civil. .. + Pa

+:
:

término mediante una


PE

El antagonismo entre parentesco y política es uno de los argumentos prin-


;

Toda lá demostración... ha podido ser llevada a buen


sistemas de parentesco como
cipales de Chatterjee. ¿Qué papel juega aquí la figura de la mujer? En la dispersión condición: considerar las reglas de matririonto
y los
del campo de poder, la división sexual del trabajo se defire progresivamente el mensaje (message, G.53) esté aquí
una especie de lenguaje...+ El hecho de «ue de *
desde arriba como participación compartida en el poder. Ese relato es la parte constituido por las mujeres del grupo que circulan entrelos clanes, líne:s
mente dicho, por las
subyacente dela taxonomía de poder que Chatterjee expone. - descendencia o familias (y no como en el lenguaje propia en absoluto la identidad .
* palabra s del grupo que circula n entre individ uos) no altera
Así, puede que haya otros modos de sustentar la propuesta de que "la equivoco (entre valores y signos,
del fenómeno considerado en ambos casos. Este ha sido a veces dirigida a las.
estructura de la autoridad comunal debe localizarse fundamentalmente en la flesta diver tidam ente en una crítica que
G.5.) semani
libro “antide minista ”, han dicho algunos, porque **
ideología". Nuestra explicación tomaría en cuenta las estructuras especificamente Structures élémentaires de la parenté :
...: (Pero; G.5.)a diferencia de las.
en él las mujeres son tratadas,com o objetos
patriarcales que produce el cámpo discursivo de la unidad de la "comunidad en mujere s son produc toras de signos al misma,
su conjunto": "La fuente de todA' autoridad es la comunidad en su conjunto, donde mujeres, las palabras no hablan, Las pueden reducirse'al estado de simbolos 2 ,
tiempo que los signos, como tales, no
de poderes delegadas” (2.341). 5i se lee la
nadie es depositario permanente fichas?
narrativa de "la institucionalización.de la autoridad comunal" (2.323) con esto
en mente, puede hacerse que la taxonomía de los modos de poder interactúe un límite:
Y el segundo, que es el reconocimiento de
con la historia de la sexualidad, r
Chatterjee cita a Victor Turner, quien propone que el resurgimiento de los que aparentemente están en juego, y
Las significaciones o valores conceptuales
heanos sobre la diferencia sexual, la
modos comunales de poder frecuentemencrea te formas de combatir a las son los medios, en todos los análisis nietzsc
mortal entre los sexos”, el "amor", el
estructuras leudales: "la resistencia o revuelta frecuentemente adopta la forma "incesante guerra entre los sexos", el "odio
lo que puede denominarse el proceso
de... communitas” (2,339). Este aserto es particularmente desaiiante en el caso erotismo, etc., están todos en el vector de n, don e intercambio,
posesió
de propiación (apropiación, expropiación, tomar, tomar
de la desheyemonización de la monarquía. Er. esta fábula de ritmo rápido sobre dominio, servidu mbre, etc.). Mediante numerosos análisis, que
no puedo proseguir
el progreso de los modos de poder, puede verse que la idea de un tipo de rey formalizado, algunas veces la
aquí. parece ser que, en virtud de la ley que hemos
sí misma, mientra s que el hombre toma, posee,
puede haber suplido una brecha inherente a la ideología de la comunidad-en- mujer es mujer al dar, al darse a
la mujer al darse asi misma, se-
su-<onjunto: "un nuevo tipo dejele a quien Tacitus denomina 'rey' (rex) que fue toma posesión, y algunas veces, por contraste,
sí misma el dominio posesivo...
elegido dentro del 'clan real” (2.323), :La figura de la mujer intercambiada todavía da-a-sí-misma-como, y así simula y asegura para
más poderosa, por indecidible, que
Como una operación sexual, la propiac ión es
produce la unidad cohesiva de un "clan", aún si lo que de ello emerge es un "rey". n del velo de la verdad o el
la cuestión de li esti (qué es, G.S.), que la cuestió
Y así, cuando la comunidad insurgente invoca al monarca contra la autoridad nto no es ni secundario ni suple-
significado del Ser. Tanto más —y este argume
a la totalidad del proceso del
feudal, la explicación de que ellos están re-infundiendo en el rey -o re-llenándolo mentario- porque el proceso de proplación organiz
incluyendo, entonces el de todos
con- la vieja ideología patriarcal de la consanguinidad, que nunca está lejos de lenguaje y del intercambio simbólico en general,
la metáfora del Rey como Padre, parece aún menos sorprendente (3,344). los enunciados (énoncés) ontológicos%,
Mi argumento es, por supuesto, que a través de todos estos heterogéneos
ejemplos de territorialidad y del modo comunal de poder, la figura de la mujer, (Garden City:
h s LAnihropology, tr. Claire Jacobson y Brooke Grundfest Schoepf d Eliseo Verón,
trasladándose de clan a clan, de familia a'familla, como hlja/hermana y Ot hor Books, 1967),
A p.
po00 60. [N.E.
INE Para
E la presen
E te versión ión
1 se ha consuliado la traducción de
pp. 56-57.] Énfasis adicional.
. esposa/madre, realiza la sintaxis dé la continuldad patriarcal, aún st-ella misma e oagte od, Editorial Universitaria de Buenos Ares, 1968,
resulta así vaciada de una identidad propia. En este área particular, la continuidad 40 Derrida, Spurs, pp, 109-11.
y 0
278 Gayata Chgirsuary Sprak

Cito estos pasajes, de Lévi-Strauss y Derrida, separados por 20 años, como


un signo de los :iempos. Pero no necesito agregar que, en el último caso, la
cuestión del ser y el enunciado ontológico se relacionarían a la lenomenalidad
de la conciencia subalterna como tal,

Envio
La Subalternidad como Perspectiva'
_. Enestas páginas, he puesto énfasis reiteradamente en la complicidad entre
el sujeto y el objeto de la Investigación. Como sujeto de la investigación, mi papel
en este ensayo ha sido enteramente parasitario, ya que mi único objeto han sido " Veena Das
los mismos Subalt2m Studies. Sin embargo, también yo misma soy parte de su
objeto. Situada deatro del actual escenario académico del imperialismo cultural,
con una cierta carte d'entrée a los talleres teóricos de élite en Francia, traigo Los cinco volúmenes de Subaltern Studies representan una formidable con-
noticias de las lineas-le-poder desde dentro del palacio, Nada puede funcionar tribución al saber historiográfico. Son'u tación a repensar lla relación entre
sin. nosotros, pero la parte que nos toca =s por lo menos históricamente historia y antropología, desde un punto' de vista qué desplaza de la posición central: >
irónica. : al antropólogo o historiador europeo, como sujeto de un discurso: cuyo objeto ;
¿Qué queda de la suterencia post-estructuralista acerca de que todo trabajo es la sociedad india. Esto no significa rechazar las categorías. occidentales; antes
es parasitario, ligeramente a un lado de lo que se desea cubrir adecuadamente; bien, es señal de que se ha iniciado una relación hueva y más autónoma con ellas.
a'saber; que el crítico (historiador) y el texto (subalterno) están siempre Como muchas veces lo ha señalado Cayatri Spivak; el negar que escribimos como...
"fuera/al lado de sí mismos"? 'La cadena de complicidades no se detiene con el gente cuya conciencia ha sido formáda cómic sujetos del colon ialismo, equiv
cierre de un ensayo, anegar? nuestra historia. Sin embargo, esta conciencia de nosotros mismos como
sujetos” coloniales, se ve transformada a su vez por nuestra experlencia, y por
la relación que establecemos con nuestras propias tradiciones intelectuales,
Permítaseme comenzar con algunas preocupaciones que se "dan por sentadas"
en la antropología, las que debieran ser interrogadas en el esfuerzo de crear una.
historia de la subalternidad. Gran parte del arsenal teórico de la antropología
consiste en conceptos que pueden hacer inteligibles a otras sociedades, en
términos de "leyes", "reglas" y [formas de autoridad. Esto es cierto tanto para
el caso de fenómenos culturales que pertenecen al dominio público, como las
fiestas aldeanas, pero también para aquellos intensamente privados, como el tabú
del incesto. En cada caso, los artropólogos se han interesado por saber cómo
se crea el orden a partir del caos -por ejemplo, cómo ebtabú del incesto crea
relaciones perdurables entre hombres-, pero no cómo es violado este orden para
crear estructuras de poder dentro de la familia. En otras palabras, todo el campo
de las transgresiones, el desorden y la violencia, queda fuera de los dominios
privilegiados de investigación del/a antropólogo/a. Este orden se crea al eliminar
el caos que podría introducir la noción de sujeto. Es éste el aspecto al que se

* Traducción de Silvia Rivera Cusicangui del artículo "Subaltern as Perspective". En: Subaltern Studies VI Writings
on Sourh Asian History and Society, Renazt Guha, editor, Delhi: Oxford University Press, 1989, pp, 310-324.
** N, de T. En inglés, la palabra subject ene el doble significado, imposible de traducir al castellano, de sujeto
y súbito.
yea
lo Suboltermidod como Perspectiva 281
280 Yeeno Das
alerta sobre
a de Ricoeur, quien lo había individuo es el actor de un sistema capitalista, que ejercita un control
refiere Lévi Strauss al ratificarse fren:e ala crític sí mismo, La categoría de significado es reducida a la categoría
de motivación,
de catego rizaci ones desconectado de un Sujeto
acusado de proponer un sistema te y
y el individuo racionalmente controlado, que ejercita uh control permanen
pensante. En sus propias palabras:. atento sobre sí mismo en el interés de transform ar el mundo, se vuelve la medida
un vacío, vemos en ella la de todas las cosas. Todas las otras formas del ser social -la mujer occidental,
Pero lejos de que la restricción nos parezca denunciar
consecuencia inevitable, en el plano filosófico, de la elección
de una perspectiva tanto como la gente no-occidental- son comprendidas en términos de una carencia,
s puesto a buscar las condiciones a
etnográf ica que hicimos, ya que, por haberno una desviación con respecto a la acción típico-ideal representada por el paradigm
en virtud de las cuales se vuelven mutuamente converti
bles sistemas de verdades : '
recibibl es para varlos sujetos, el conjunto de de la acción racional”,
e
En este contexto, la cuestión no consiste en si podemos obliterar comple-
y pueden así ser simultá neament
e el carácter de objeto dotado de una realidad propia
esas condiciones adquier todo, si
e independiente de todo sujeto... Creemos que nada mejor que la mitología permite tamente el carácter objetivado de las instituciones sociales, sino'ante
ilustrar y demostrar empíricamente la realidad
de este pensamiento es posible establecer una relación de autenticidad hacia dichas instituciones.
por recuperar
objetivado!. : Después de toda, aún el trabajo de Gofiman y Foucault, preocupado
de la
simultá- «+ al sujeto cognoscente, ha mostrado cómo el poder cosificado y alienador
En mi opinión, el énfasis e _un pensamiento objetivado, aceptable obra de .' sociedad fluye a través de sus más minúsculas ramificaciones capilares.*
¿Cómo
deja de ser nto,
neamente para varios sujetos diferentes -y que por lo tanto “es que la clausura representacional que se presenta a sí misma como pensamie
iert al salvaje eninteligible, de fórma tal. * otras
to pensante particular”;
un sujeto. puede mostrarse como resultado de la actividad de sujetos pensantes? En
que su subjetividad llegaa ser,com nte. egada. Estos productos termi . palabras, ¿existen dispositivos de reflexión que pueden actuar como "correcciones"
nados dela conciencia colectiva s ipre se percibn como representacionalmente o "interrogaciones! en relación a una sociedad dada? +*0i0 ya E de
ad. como sistemas de depensami ento, rara vez" i
E ARA

de la Subaltern aci
completos;O.
¡Al mostrar s 4.1310 13 + En este sentido, las contribuciones de losEstudios
las contribuciones
+ en establecer l4'centralidad del momento histórico de la rebelión, para la tóm-
2 a
se toma en cuentael proceso.6t lormu' ón. Á pesar
en clave diferente, los temas del
- formidables del estructuralismo, éste repite, prensión de los grupos y clases subalternas como sujetos de sus propias historias.
funcionalistas clásicos.
orden a partir del caos, que eran típicos de los enfoques Aunque existen también ensayos de carácter tipológico como por ejemplo,
el
el
intento de Chatterjee de crear una tipología del poder?, u otros que estudian
difícil reconocer
Pero, sl el excesivo énfasis en el orden y la represión hace pensamiento como un sistema objetivado de representaciones-, estos trabajos
le 5 teorías de la acción el momento
al sujeto en las teorías de la estructura social, ¿es que acaso constituyen la excepción. Todos los demás ensayos se concentran en
la característica
social lo hacen mejor? En su formulación weberiana elásica, precisamen te, el momento plural en la vida
histórico de la contestación. Este es,
sociológ ica -advierte la
de la acción social es que sea signific ativa. La explicac ión de la sociedad india, en que el orden representacional entra en conflicto por
del actor individual. llamó
Weber.- debe ser capaz de tomar en cuenta la subjetividad emergencia de un nuevo orden. Tenemos, en tal caso, lo que Castoriadis
, un examen más atento de la teoría de la acción social de Weber, de significado s?, porque la clausura represent acional que surge del
Sin embargo un magma
racional. La acción que
nos muestra que su paradigma de acción social es la acción de
pensamiento objetivado, se romp» ahora violentamente. Vemos en cambio
la medida en que es capaz ce esta
afectiva, por ejemplo, sólo se toma en cuenta en este orden está siendo interrogado. ¿Cuál es, entonces, la naturaleza
definida . Todos los ejemplos de
desviar el curso de una acción racional bien interrogación?
a emocion es negativas como
acción afectiva que ofrece Weber, corresp onden La primera pregunta que podríamos hacernos es: ¿cómo se constituyen los
declarada de tratar
la ira, 10s celos o el deseo de venganza. A pesar de su intención momentos de rebelión? Lo que surge con meridiana claridad en todas las con-
subjetiv a, existe una sobrede termina ción del hombre en
toda acción como acción
categoría residual tribuciones a estos volúmenes, es que el historiador no está embarcado aquí
se conviert e en una
- como ser racional.. Luego, la acción afectiva do según el una comprensión de la familia, el grupo de parentesco o la tribu
en su vida
se busca encasill ar todo aquello que no puede ser explica
en la que de Weber, el
paradigma de la. acción racional , En la teoría de la acción social
Munshi (ed..) Marx and Weber: Modern
2 Veena Das, "Force as a residual category in Max Weber”, en Surendra
Society on the Drawingboard (de próxima aparición).
en Ranajit Guha (ed.) Subcalter ¿iu dies IT Writines
3 Partha Chatlerjes, "More on modes of power and the pessaniry",
p. 11. [N, de T, Para la presente
1 Ver Clauda Lóvi=Straus a. The Raw and the Cooked (Harper and Row, 1973),
y lo lo, Fondo de Cultura Económica, on South Asian History and Sociery (Delhi: Oxford University Pruss, 1983),
versión se ha consultadola traducción de Juán Almela, Mitolgicas, Lo E crudo 4 Comelius Catoriadis, L'institution imaginaire.de la societe (Paris: Editions de Sevil, 1975).
México, 1972, pp. 20-21.)
i
EA
282 Veenoa Dos
lo Subullemidad como Perspectiva 283
cotidiana. Antes bie:
la naturaleza la que resulta destruida con la promulgación
han sido obligados ¡1 + de nuevas leyes que
favorec=n el uso comercial de los bosques en lugar de
alas estructuras de la su conservación como ,
habitat de las tribus. Los rastros del pasado que sirven como
accidental (Arnold), fuente al historiador
son, en los hechos, generados por el "contrato" opresivo
En otras palabras, cuás que la tribu, casta o
aldea es compelida a realizar con las instituciones modernas
en los volúmenes de .: de la dominación,
Estos rastros toman la forma de inforines burocráticos o policiale
las cortes judiciales, c< nuevas s, o expedientes
de las cortes de justicia. En ocasiones también se análiza
formas de dominación otro tipo de rastros,
como por ejemplo en el notable trabajo de Pandey sobre los
vista, la elección prox modos de escribir
di dosalío
la historia que son propios de cada culture, Sin embargo, como el propio
muy serio a algunas de eno actropológica lo señala, "(a historia de la India colonial se ha escrito generalmente Pandey.
acerca delas tribus o * «base de
sobre
la
los archivos coloniales oficiales; por la simple razón de
quelas fuen s +
no oficiales no son, ni abundantes,
ni tan fácilmente accesibles!? Aunque mé
las que se consideran + reservo el comentario sobre la supuesta "inaccesibilidad!.de.
con un pasado feudal, : E
oficiales, yo estaría de acuerdo con:la fina apreciación. nd
"frías!y sociedades"e de que lo que convertía en acontecimiento algún s
entre diacronía y sincr. estaba centrado en cuestiones de-' y orden*is
ley :rubtlifa oc
entre naturaleza.e
hist: lo tanto, construir el momento del desalí )
occidentales y cristíari dominación racional-legal.. Lo,Import 6
se definen:como. frías, sourales: Poder:no sean tratados como entes pasivo mas.bi
mientras que la transic' soe a das leyes en el momento en que tratan de desafiar este poder alienado.
intemas de otro tipo de 5. Como lo mismo hecho de que este momento está encapsulado en la forma de
puso en evidencia el di: snente, la
un informe
burocrático o los expedientes de una corte judicial (es asf
naturaleza relleja la su: tomo se vuelve accesible
ala investigación), implicaría que el momento de la rebelió
registro del desafío hu: n es también un
momento de fracaso 0 derrota. Es posible que, de cara a las sólidas
El primer acto er estructuras
institucionales de la dominación burocrática, las rebelion
Subalternidad llevaa e: es de los subalternos
sólo nos brinden "una noche de amor", para usar la evocado
ra frase del filósofo
grupos, es el de restau: griego Castoriadis, que no puede translormarsen e un amor para toda la vida,
seguir pensando, por £, Asi y todo. quizás al capturar este desafío, el historiador nos
montañosas, y que están esté proporcionando
los medios para construir a los objetos.de ese poder como
como habitantes de ur: sujetos. En vista de
la abundante evidencia de rebeliones y actos de resistencia
que se han presentado
meticulosamente en estos volúmenes, el antropólogo nunca más
podrá justificar
su mirada sobre las formas sociales de la tribu o estructu
ra de linaje, "como si"
5 La palabra "contrato" se usa ax; llevaran una existencia natural. El alcance total de estas
una narrativa. instituciones debe ser
estudiado con el fin de comprenderlas como entidade
6 Shahid Amin, "Approver's testi. s históricas. Me gustaría
death”, en Guha (1985), 55 V (De desarrollar con más detalle las implicaciones de este
volumen, pp. 119-156] aserto, tal como están
7 David Amold, "Touching thei
formuladas en los escritos de Subalter Studies,
OUP). Una vez que asumimos que los rastros de la rebelión se
8 David Hardiman, "From custos: hallan subsumidos
en la forma de un registro documental, que se produce en
(1985) 55 IV (Delhi: DP), el marco del ejercicio
9 David Arnold "Bureancratic reci de la dominación burocrático-legal-, hay que acepter el hecho
de que, al hacerse
en Guha (1985), 55 /Y,
10 ), Baudrillard,
Le miroir de iu >
11 Ramachandra Guha, "Forestr.
55 IV (Delhi, OUP). 12 Gyanendra Pandev, "Encounters and Calamities: The history
en Ranajit Guha (1984), 55 11. ofa North Indian Qasba in the Ninetcenth Century”,
Sy
=N

lo Subolemidad como Perspeciive 285


284 la="a Das
promisorias lineas de
legal en todas las esferas de la vida. Un avance én estas
accesible a la investigación, le voz de los subalternos ya ha sido APropiada por atenció n a ladisyu pción entre los
análisis, empero, requerirá prestar mayor
estas formas superiores de autoridad. Este aspecto de la función del registro ones de una verdad referencial
diversos discursos que se producen como alirmaci
judicial o. policial, ha sido enfatizado repetidas veces por Guha. En el caso de la n en tiempo pasado, como
en el presente indicativo, y aquellos que aparece
muerte de Chandra, que él analiza, podemos ver que esta voz le es literalmente ares que están siendo examinados. Por ejemplo,
referencia a los eventos particul
arrancada a la persona: "Yo administré la medicina creyendo que podría inte- a lo que cualquie r muched umbre debiera haber
en este caso, el juez se refirió
rrumpir su embarazo, sin darme cuenta de que la mataría”, dice Brinda, la hermana la muchedumbre en
de la difunta Chandra. Pero ella dice esto en el contexto de un juicio en el cual, hecho, y luego comparó esta imagen con la conducta de
a encarnar una verdad
cuestión, En el primer caso, en la medida en que aparent
parausar las palabras de Cuha, la muerte se convierte en asesinato, una hermana cómo lo natural se constitu ye en el discurso
intemporal, la alocución nos muestra
solidaria en asesina, y los participantes de la tragedia en testigos de destarg la forma de dominación
judicial,y la relación que guarda esta construcción con
en manos delas instituciones respons ables del disciplinamiento
que se establece
en las alocuciones refe-
y el castigo. Me parece que, además de poner énfasis
lis alocuci ones Imperativas,* que
renciales, debiera prestarse atención a
del discurso judicial, tanto a nivel de la legislación.
constituyen la marca distintiva
A E
como de la práctica jurídica. 2000 0
figuran promine ntement e en muchos de los...
Si bien las instituciones penales
os autores hublese n pre sta do
más atenció n a la
ensayos, sería deseabl e:que.l
;¡en contraposición,
“manera en la cual esta legalidad se establece Como legítima nte
ularme
Ehablá d (recta no es aquí evidencia'd la: mayor proxim dad alas legalid ades-alternativas de la gentes Este aspecto:es partic
que seve cómpe importante para la comprensió los modelos médicos de dominación; así como. .:
der:
“respecto asu propio discurso, sino más bien de lá distancia u-
derecho consuet
a establecer con todos los demás que participaron con él en la misma "trans- de los modelos legales a través de los cuales se erosionó el
han realizado
gresión” al orden, con el fin de implicarse en los sucesos, en la esperanza de ser dinario de la gente sobre la naturaleza. Aunque Arnold y Guha
uciones a esta gama de problem as'S, en realida d nunca se
perdonado, El hecho de que este procedimiento no está libre de riesgos puede importantes contrib
Enfermedades Epidémicas
verse en el destino que corrió el otro testigo de cargo, en este caso, Ramrup Barai, menciona, por ejemplo, cómo fue formulada la Ley de
-que estableció nuevos derecho s estatale s sobre los cuerpos de la gente—; 0 el
que fue sentenciado por asesinatoy colgado, precisamente por haberse implicado s de la gente a sus
a sí mismo con la esperanza de recibir clemencia. La notable contribución de papel de la Ley dp Bosques, que permitió eliminar los derecho n
burguesía. Se estudia
Amin, al analizar el testimonio del testigo de cargo en el contexto de la distribución propios bosques, en favor delos intereses de una nueva
de la cual su
de papeles en la corte (papeles q11e pueden verse como teatrales), es que consigue estas leyes en sus consecuencias, pero no €n la forma a través
mostrar cómce el orden de la narración —-el surgimiento del lenguaje directo ys, autoridad resultó siendo establecida.
indirecto, así como la relación entre la producción de la verdad penal y las formas s
del discurso- crea una red semiótica dentro de la cual puede comprenderse el La construcción de los/as subalternos/as como persona
discurso judicial, Resulta particulamente importante en el enfoque de Amin, el que en las teorías de la acción
En la primera sección de este trabajo, señalé
que interprete el veredicto final del juicio como un meta discurso que se contiene por Weber y otros sociólo gos bajo su influjo, encontramos
social formuladas
a sí mismo y es internamente consistente, pero que debe analizarse en el contexto una sobredeterminación del hombre como actor racional , de modo que todas
de los procesos de construcción dela verdad penal, En términos metodológicos, de acción toman un carácter residual . Á mi parecer, algunos
las otras formas
esto debería abrir nuevas posibilidades a la lectura de la documentación legal, Studies no logran
de los ensayos en los volúmenes camentados de Subaltern
no sólo como evidencia de los desórdenes que se dan en el interior de la sociedad, desplazar este punto de vista por completo. Así, Hardima
sobre
n, en su ensayo
sino también como evidencia de las lormas de consolidación de la dominación que conllev a el tratar a los campesinos como
los Bhils!é, apunta a los problemas

.
-13 Ranajit Guho "Chandra's death”, en Guha (1997),
SS Y. 15 Para Arnold, vernota 6, y para Guha, ver nota 11,
V (1987),
+ 16 Hardiman, "The Bhils and Sahukars of Enstern Gujarat", en 55
14 Shahld Amin, ver nota 6, [Ver también, en este volumen, pp. 119 - 156]
286 seno Dos lo Subollernidad ¿omo Perspectiva 287

agentes racionales, como lo hace la economía neoclásica, pero luego prosigue colonial, tales palabras objetivan una ética social y retienen su anterlor función — «
señalando que las limitaciones sociales y creencias religiosas impedían a las de describir a otras culturas bajo formas enajenadas e incluso degradadas. Se
poblaciones tribales hacer cálculos económicos racionales. Esto parece conducirlo debería intentar, en cada caso, restaurar el contenido experiencial de lo que es
a alirmar que el comportamiento normativo es aquél que realiza el agente racional, objetivado sociológicamente. ;
del cual las conductas de la gente tribal se desviarian debido a sus limitaciones A través de su movimiento, Jitu Santal intentó establecer una legalidad
sociales. Aunque Hardiman intenta comprender la práctica social de los Bhils alternativa, tal como lo muestran claramente las descripciones de Tanika Sarkar.
en términos de su propia lógica, señalando hasta qué punto las prácticas de las Jitu S5antal afirmó reiteradamente que los bichar juicios de las cortes británi-
poblaciones tribales son vistas bajo el prisma de la moralidad brahmánica, no cas-, eran malos e injustos. Intentaba:así apoyarse en-los procesos de .
puede resistir la tentación de decir que la borrachera era excesiva sólo en enjuiciamiento que eran propios de los Santal.. Sin embargo, no logra ofrecernos:
ocasiones «ceremoniales; o bien que la bebida satisfacia también necesidades una descripción del tipo de autoridad que Jitu Santal estaba intentando construir.
nutricionales. Por. consiguiente, lejos de ver al modo de vida tribal como una: como más justa y representativa para su gente; en contraposición a la autoridad
crítica a la sobredeterminación del ser humano racional, las conductas tribales foránea de los británicos, En el análisis de Taniká Sarkar, esta forma alternativ
frente a la,bebida terminan: siendo enplicadas por una:eeuerie do FOrIonaanRS se asimila fácilmente 1 categorías de. autoridad burocrática como "hacedor di
oculta: Aa leyes” o "dador de leyes", Además, muchos aspectos de su movimiento. se discuten
_ +: Este énfasis en la racionalidad se habs bambi evidóntea enel erisayo de Tañika : más en relación al concepto de sanscritizac ión, ¿que en términos de sus objetivos
- Sarkar acérca del móvimiento de Jitu Santal'”.. Se trata de un recuento meticuloso de establecer legalidades alternativas.: En el pr
proceso, la autora critica el concepto
detallado de:un movimiento que intentó establecer lo que Upendra Baxi llamara : de sanscritización, afirmando que:elAre: Dol que formó: «Jitue Santal, asumió
"legalidad áalterna va”, entre los Santal: Sin embargo, la imagen de los Santal
¿se construye principalmente én el lenguaj= con que fueron aproplados por el E
discurso burocrático. For ejemplo, se señala que la principal distinción entre: a la sociedad de castas y al dominio británice externo. .La crítica se ubica fir
santales e hindúes se debe a la orientación al- placer de los primeros, siendo la * ¡ memente en el marco de la sociedad de castas y la sanscritización, en lugar de *
deidad más prominente en el culto de los segundos, la diosa Kali, a la que se referirse a su potencia! de transformarse en un nuevo símbolo a través del cual
describe sin vacilaciones como "maligna". Asimismo, se sugiere que no existía pudiera articularse la oposición al Raj británico.
en la cultura Santal una figura benevolente todopoderosa. La autoridad para la En la descripción de Tanika Sarkar, se discute el acto final de Jitu Santal, que
última afirmación es Hunter, quien había señalado: "El Santal no concibe a un consistió en parapetarse en las barricadas de una mezquita junto con sus acólitos,
Dios supremo y b:nefactor... Perseguido y echado de país en país por una raza Al verse rodeado por la policía, proclamó que las balas de las fuerzas británicas
superior, el Santal no puede comprender cómo podría existir un Ser más poderoso Í no erán capaces de herirlo, ni a él ni a sus seguidores, Esto se muestra con una
que sí mismo, sin que: a la vez resulte dañino para él"!%, Toda esta formulación ; aureola mágica e irracional, basada en creencias acerca de la transformación
presupone una dicotomía entre salvaje y civilizado, en la cual se basó tanto la mágica del mundo. Además, Sarkar señala que fuerzas políticas más amplias
misión civilizatori1 del estado colonial como la de los misioneros. La pregunta lograron inliltrarse a través de la lógica y las necesidades tribales. Sin embargo,
subyacente que podría plantearse, es sobre quién resulta más reveladora este me pregunto si es Jitu Santal o Tanika Sarkar, quien muestra una mejor com:-
[rase, si sobre los Santal v sobre el propio Hunter. prensión sobre estas fuerzas políticas más amplias. ¿Qué muerte podría haber
En lugar de una aceptación sin más de tales categorías, quizás habría sido escogido Jitu, si se hubiera entregado a la policía y a la justicia británicas, en las
más apropiado emprender una deconstrucción cuidadosa de cómo fueron que desconfiaba prolundamente? Seguramente, habría terminado como Shikari,
constituidos los Santal en el interior de este discurso, El problema con el uso convertido en un testigo de cargo en base a cuyo testimonio otros fueran colgados,
de descripciones adjetivadas tales como la "orientación al placer" de los Santal, o habría sido visto como traidor y se le habrían inflingido castigos como los
o la "malignidad" de la diosa Kali descripciones que se consideran autorizadas descritos por Gautam Bhadra!”, sirviendo en última instancia, tan sólo como una
sobre ambos- es precisamente que, habiendo sido acuñadas en el discurso demostración evidente de la futilidad de la rebelión y la protesta.

* NE. Se conoce como senserilización al proceso de incorporación de los grupos tribales a los escalones bajos
17 Tanika Sarkar, “Jitu Santal's movement in Malda, 1924-1952: A study in tribal protest", en Guha (1985), 85 IV. del sistema de castas de la religión hindú, adoptando st tradición clásica escrita en sánscrito,
18 Citado en Tanika Sarkar, ibid, 19 Gautam Bbadra, "Four rebels of Eighteen-Fifty-Seven”, en Guba (1985), 55 1V,
la Suboltemidad como Perspec! +0 289
288 Veenz Las

Ciertamente, nada muestra con mayor claridad que la discusión de Bhadra del panchayattribal o de casta, en el rechazo a una legalidad ilegítima. Por lo tanto,
sobre los cuatro rebeldes de 1857, que los castigos repartidos por los británicos es la naturaleza del conflicto en cuyo interior se visualizan la casta o la tribu, lo
no tenían solamente la intención de mostrar el poder y el "imperio de la ley", sino quenos muestra las características de ese momento histórico particular, Asumir
la de llevar 4 cabo muertes rituales. Uno de ellos, el maulavi, un musulmán, fue que podemos conocer a priori las mentalidades de las castas o comunidades,
quemado, y con ello privado de su cuerpo como testigo más importante de sus es caér en una perspectiva esencialista, que la propia evidencia que nos ofrecen
hechos en la vida, en el día del juicio. El segundo fue Shah Mal, cuya cabeza se los volúmenes de Subaltern Studies pone en entredicho,
levantó en una espada para que todos vean el destino que esperaba a los rebeldes La mayoría de participantes en estos volúmenes muestran la importancia del
por desafiar a la autoridad británica. En profunda violación de los códigos morales" liderazgo carismático en la rebelión de los subalternos,,en sentido de cue los
de su sociedad, los cuerpos de los muertos no fueron entregados a sus familiares. líderes no serían portadores de formas de autoridad tradicional'o raciona' legal,
* Así si Jitu Santal escogió una muerte ritual;a la postre éstaino fue diferente a las. "para usar la terminología weberlana. Como Sumit Sarkar sugiere, antes que
muertes prescritas por los británicos para los cuatro rebeldes, +;41:1:%8 caracterizar esto como evidencia de una mentalidad que coloca el énfasis en la -
"Ello nos lleva á preguntarn os y'désc
¿cómo' “Cicaracterizar "describir la: conciencia transformación mágica, podría ser mejor sistematizar la naturaleza de! liderazgo
subalterna?: Esta pregunta fue planteada explícitamente por Sumit Sarkar?”, El carismático, así como de la comunidad que se forma en torno a este tipo de líder:
autor argumenta que coexisten,'en compleja. interace! órr diferentes tipos de El trabajo de Sarkar suglere que sería posible pensar en tres momentos dife-
conciencia; p.ej. de casta, clase; región o nación: Tomando cómo punto de partida renciados en el surgimiento de un líder carismático. Primeramente se daría su
. metodológico la posición de Gramsci de qUe en la: formación objetiva de los grupos reconocimiento como avatar”, un ser con poderes extraordinarios. En segundo
sociales subalternos se ve la huella delos grupos soctaleg preexistentes; cuyas, término, sería visto como capaz de conferir inmunidad a sus seguidores. En un
mentalidades) Ideologías y'objétivos máhtiener portar tiérpo; Sarkar define as '+tércer momento, llamaría ala transformación total del mundo. Sarkar considera
* la conciencia subalterna como portadora de dimensiónes positivasy negativasá 4 Gandhi como uno de estos líderes y atribuye su éxito al hecho de que la fe
Así, la participación en las huelgas ferroviarias es vista como 'ún ejemplo del religiosa era capaz de proporcionar una explicación intrínseca del fracaso, Este
conciencia positiva, mientras que los movimientos en favor de la protección de análisis resulta decepcionante, puesto que parecería más apropiado vuscar la
las vacas son vistos como evidencias de conciencia negativa. Sin embargo, siendo comprensión de su liderazgo, no en las generalidades de la fe religiosa, sino en
un historiador cuidadoso, Sarkar también señala que hay formas recurrentes las particularidades del momento histórico analizado,
de este período, sea que se trate de examinar
y similares en las protestas militantes Lo que encontramos, en el caso del liderazgo carismático, es el caructer
la participación de masas en torno a una demanda nacionalista, regional, o un extraordinariamente abierto de su mensaje. El análisis que hace Amin sobre los
movimiento de tipo comunalista' ode casta. Me parece que, en vista de tales rumores que corrían sobre Gandhi en Gorakhpur, muestra que hay una con-
similaridades, puede ponerse en duda la utilidad de la distinción entre las vergencia de motivos por la que, en la conciencia popular, se percibe a Gandhi
dimensiones positiva y negativa de la conciencia de los subalternos, En primer como un personaje a la yez perteneciente y ajeno a su mundo”, El destinateur”*
lugar, es importante reconocer que el repertorio de acciones colectivas en de la comunicación no es un seguidor sino un testigo, mientras que el destinitario
cualquier período histórico particular es limitado, y que los grupos tan sólo pueden es aquel que no cree, o que cree sólo parcialmente en la divinidad de Gandhi,
innovar en los márgenes, como lo sugirió Tilly??. En segundo lugar, no es fácil a quien se busca persuadir. Por más importante que sea el estudio de los por-
caracterizar la conciencia étnica o de casta como "negativa", como si tuviera una tadores de símbolos, sería aún más interesante examinar la coherencia, las formas
cualidad esencial propla, porque también depende del contexto de interacciones objetivadas y la haturaleza de la comunicación que se establece en aquellos
en el cual se articula este tipo de conciencia, Los casos que se estudian en estos momentos históricos volátiles, en torno a la figura del líder carismático,
volúmenes, nos muestran que las formas organizacionales de casta pueden usarse Lamentablemente, a pesar de haber discutido extensamente esos .omentos
para articular la rebelión contra el poder estatal o para dar forma a la Justicia históricos extraordinarios, ninguno de los colaboradores ha examinado la
naturaleza de las multitudes, que parecen haber sido tan cruciales como medios

20 Sumit Sarkar, "The Conditions and Nature of Subaltern Militancy: Bengal from Swadeshi to Non-co-operation,
€. 1905-22", en Guha (1984), 95 11, :
* N. de T. Se conoce como comunalismo a las movilizaciones faccionales en términos religiosos y de casta, que * N.de T. Reencamación periódica de las principales deidades del panteón hindó,
fragmentaron el campo de las luchos enticoloninles campesinas en la India, de Ñ
22 Shahid Amin, "Gandhi as Mahatma: Gorakhpur district, Eastern UP, 1921-2", en Guha (1984) 55 1V.
Sn Eo id The Contentious French: Four Centuries of Popular Struggle (Cembrilge: Harvare University
ness, » : *e NeT, en francés en el original, Destinatano.
290 Weana Dias io Solwllemidod como Perspectiva 291

de protesta. El ensayo de Bhadra nos muestra la importancia de las relaciones a la realidad las diversas categorías ni qué modelo de imperativos fue usado en
preexistentes, así como de las formas de c -omunicación de los mensajes, para la este proceso. Arnold lanza la fascinante sugerencia de que esta oportunidad fue
comprensión de la organización de la protesta? Del mismo modo, Hardiman utilizada para golpear la militancia del Tilak y también para reorganizar los
arguye que las protestas violentas de los Bhils contra los prestamistas, se llevaron concejos municipales. De este modo, el contexto colonial en el cual se inscribió
a cabo en el marco de una "economía moral"? Este punto de vista sobre las el modelo médico, le otorgó una tonalidad distinta a la que describe Foucault.
multitudes muestra la fuerte influencia del trabajo de E.P. Thompson. En la La relación entre los objetos sobre los que se ejerce el poder y el momento
literatura de ciencias sociales, sin embargo, tenemos también un punto de vista histórico en el cual estos modelos son formulados, seguramente merecerá una
opuesto sobre las multitudes, que las pinta como caprichosas, emocionales y atención más cuidadosa en volúmenes futuros de: Subaltern Studies,
volátiles. Es una lástima que los colaboradores de estos volúmenes no hayan La cuestión del género en la constitución de la subalternidad, há estado en
emprendido seriamente el análisis de la naturaleza de las multitudes como medios gran medida ausente del alcance de los estudios que aquí se mencionan, Una
de protesta. Asimismo, sería interesante evaluar lo que ofrece la evidencia excepción es el trabajo de Guha sobre la muerte de Chandra”, en el que analiza
histórica como,pt a.estos dos purtos de vista divergentes sobre las co un documento histórico sobre un caso de, aborto en 1849, Una viuda desarrolló
Ss E A A una relación amorosa con un hombré y se vio embarazada; El hombre renegó
de toda responsabilidad, y amenazó a la madre de la viuda con poner a Chandra
un bhel? de Vaishnava. Las mujeres de la familia intentaron concertar un aborto,
EE poder y A cuempo
pero en el proceso, Chandra murió. Esta historia, de modo alguno excepcional,
se convierte en un medio para examinar la naturaleza de la subordinación femenina -
ha sid ) establecida por la obra de Foucault. Un trabajo de Arnold sabre:E en el interior de las estructuras patriarcales dela familia, la religión y laley, y
los modos coloniales: de mane p de plagas epidémicas, nos brinda una perceptiva Cuha es capaz de formular una notable temática narrativa. en torio al discurso
descripción de este proceso”, Arnold analiza cómo la enfermedad se convirtió de los testigos. El discurso judicial “señála'- es un discú rso reduccionista que
en un medio para reorganizar el habital físico, asaltar los cuerpos y violar los transforma el acto de amor de las parientes femeninas eri n crimen, pero no se
espacios privados especialmente los hogares- de las comunidades. Pero no pronuncia sobre la actitud del amante en todoel proceso de fijar las responsa-
ve como entes pasivos a los objetos sobre los que este poder seimpone. Muestra bilidades por la muerte de Chandra. El lenguaje de los procedimientos judiciales
cómo se organiza ls protesta en torno a imperativos tales como la prescripción es referencial, pero existe también una ruptura delo referencial, aún dentro del
acerca del modo de dij»oner de los cadáveres, el desarraigo de los pacientes modo relerencial, Así por ejemplo, cuando la madre cita las palabras del amante,
hospitalizados con respecto a sus familias y especialmente, la resistencia a la no se escucha ni la más remota memoria sobre el deseo sexual que podría haber.
captura de mujeres para su internación en hospitales. Aquí, la protesta no puede dado vida a la relación. El análisis del dominio masculino que realiza Guha es
ser vista como expresión de supersticiones contra la racionalidad científica. El notable: el amante toma el cuerpo de su amada con pasión, pero cuando hay el
entramado de rumores que Arnold examina en este período, nos muestra que riesgo de oprobio social, se convierte en el emisor de la ley. Yo llevaría aún más
la conciencia popular enfatiza el menosprecio de los gobernantes británicos para lejos este argumento, señalando que no sólo es aplicable al caso del amante
con los sentimientos, vidas y cuerpos de los súbditos indios. Esta es una con- ilegítimo, sino a toda la estructura del patriarcado, en el interior de la cual se
tribución importante en la via de restaurar el contenido experiencial de categorías articula el deseo sexual. El amante nocturno (sea marido o amante adúltero) se
tales como la superstición o la racionalidad, en torno a las que suele organizarse convierte al día siguiente en un dador de leyes, y aquí reside la naturaleza opresiva
este tipo de discusiones. Sin embargo, habría sido útil examinar las formas a través del deseo heterosexual. No estoy segura de coincidir con Guha en el hecho de
de las cuales el modelo médico y el modelo legal se vincularon entre sí en el que el ingreso de Chandra en un bhek de Vaishnava habría simplemente sustituido
ejercicio del poder colonial. Si bien se menciona la Ley de Enfermedades una forma de dominio por otra. Los materiales descritos por Obeyesekere en
Epidémicas, no se analiza su lenguaje, para mostrar como éste buscaba constituir torno a la mujer ascética, apuntan en'una dirección divergente, dond. el ascetismo
a la naturaleza humana. Ciertamente, tampoco se nos muestra cómo surgieron

26 Guha, ver la nota 13, Sinembargo, existe un análisis interesante de esta cuestión, tal como ocurre en un texto
literario, por parte de Gayatri Spivak (en el mismo volumen), que no me es posible analizar aquí.
23 Gautam Bhadra, vernota 19, * N.de T. Bhekesel hábito que usan las personas pertenecientes a la secta Boishnob (Vaishnava), movimiento
24 Hardiman, ver nota 14, E a del hinduísmo muy popular entre las castas bajas y los intocables, Ver Guha, "Chandra's death", en
25 David Arnold: "Tnuching (he Body: Perspectives on the Indian Plague”, en Guha (1987), 85 V. p
a
292 veena Das

puede ser visto como un medio de transformar las demandas opresivas de la


heterosexualidad, en un poder curativo?”,

Lo cotidiano y lo histórico
Los estudios de la subalternidad
En estas notas finales, quisiera retornar a la pregunta formulada inicialmente, como crítica post-colonial ”
sobre la relación entre lo antropológico y lo histórico. Guha esboza un plante-
amiento sobre la relación entre la vida cotidiana y los momentos históricos, que
merecería ser conceptualizado más profundamente, En este intento, es asimismo
necesaria una conceptualización seriay profunda de la institución del tiempo. Gyan Prakash
¿-« : Muchos de los colaboradores en los volúmene de s Subálfern Studies parecen

Sa
: contentarse con la oposición entre sincroníay diacronía, o entre la búsqueda
de lá secuencia
y la búsqueda
de leyes estáticas movimiento, Estos '
y/ el ción

Ai
A
Prestar atención al fermento creado por los Estudios de la Subalternidad en
nceptos del tiempo terminan espacializando lo temporal, y con ello limitan disciplinas tan.diversas como la historia, la antropología y la literatura es re-

apa
se
, 1sión de lo socio-histórico, aa conocer la fuerza de la crítica postcolonial reciente. Esta crítica ha obligado a

E
ncepto de sincronía repensar radicalmente el conocimiento y las identidades sociales autorizadas
la temporalidad, sino
¿que niega. y creadas por el colonialismo y el dominio Occidental. Por supuesto que el

=s
. te ser constituido como un presente espectral, : colonialismo y su legado han enfrentado desafíos anteriormente. Basta pensar
presente caracterizado y nítido,
e
No es que las secuencias no : en las rebeliones nacionalistas contra el dominio imperialista y en la implacable
:'"«séan importantes para el antropólogo, sino más bien que.éstas tiendena ser: + crítica del marxismo al capitalismo y al colonialismo, Pero ni el nacionalismo
+ de la realidad como
absorbidas en el concepto de repetición. La construcción ni el marxismo han roto amarras con los discursos eurocéntricos?, Así, al revertir
un fenómeno intersubjetivo, requiere que veamos al sí mismo como simultá- el pensamiento orientalista y atribuirle iniciativa [agency]”" e historicidad a la
2 neamenle el sí mismo y su opuesto, o sea el otro. Ello lleva a privilegiar la nación sometida, el nacionalismo sólo consiguió aventurar sus demandas en el
simultaneidad por encima de la sucesión en la descripción de la vida cotidiana. orden de la Razón y del Progreso instituidos por el colonialismo. Cuando los
marxistas comenzaron a vislumbrar la explotación colonial, sus críticas se
De otro lado, para el historiador, lo que parece adquirir mayor relevancia es enmarcaron en un esquema histórico que universalizaba la experiencia histórica
ml el origen de la novedad. Las descripciones más interesantes de los volumenes europea, En contraste con ello, la emergente crítica postcolonial busca revertir
de Suballem Studies nos muestran precisamente el surgimiento de esta novedad, el eurocentrismo que ha traído consigo la institución de la trayectoria de Occidente
E Es de esperar que el intento de relaciónar esto con la vida cotidiana de las clases y su apropiación del otro como Historia. Lo hace empero, dándose perfecta cuenta
ee o grupos subalternos, sea asumido como la próxima tarea teórica de este grupo
de investigadores. La subalternidad, en mi opinión, no alude a categorías
d morfológicas, sino que representa una perspectiva, en el sentido que Nietzsche * NE, Traducción de Raquel Gutiérrez y Alison Spedding, corregida por Silvia Rivera, del artículo:
“Subaltern
y le dio a este término, El desarrollo dé esta perspectiva, espero, implicará también Studies as Posteolonial Criticisa". En: The American Historical Review, vol. 99, No. 5. December 1994, pp.
una nueva relación con los cronistas de las culturas que se estudian. El tipo de 1475-1490.
poa N.E. Como ya se señaló, Subaltern Studies se ha traducido corno Estudios de la Subalternidad para hacer referencia
esfuerzo que realiza Pandey, al relacionar la historia colonial con las historias tanto al grupo de trabajo como a la publicación que editó; sin embargo, en los casos explícitos de referencia a la
localmente producidas, contribuirá'a ampliar las posibilidades de escritura de Revista, se ha mantenido el nombre en inglés de Subaltern Studies.
1 Agradezco a Frederick Cooper y Florencia Mallon por sus comentarios y sugerencias, Pese a que no en todos
=> la história en la sociedad India?8, No:és que las fuentes no oficiales sean escasas los corzos ha seguido qus ee su lectura cuidadosa y crítica me fue de gran ayuda a la hora de repensar y reascribir
o de difícil acceso: antes bien, la propia legitimidad de quienes producen esos este ensayo. [N.E. Esta nota leva asterisco en el original, La hernos numerado para distinguirla de nuestras propias
notas editoriales y de traducción, que también llevan asteriscos, Esto introducirá cambios de número con respecto
materlales debe también ser reconocida por lá historia oficial, olas notas del original].
2 Al llamar eurocéntricos a estos acontecimientos, no quiero decir que siguen las directivas de autores » pensadores
Occidentales. La eurocentricidad se refiere aquí al hiatoriciómo que proyecto al Occidente como Histuria,
*sN.E, El concepto inglés de agency, si bien ha sido traducido como Iniciativa, iniciativa histórica, hue referencia
a

27 “er Gananath Obeyesekere, Medusa's Hair (Princeton Universily Press, 1984). a un campo más vasto de significados, referidos al desplieguesde la capacidad y creatividad de un sujeto que asume
28, Ver Pandey, nota 12. , pa Sa el papel de actor,

También podría gustarte