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TRASTORNOS DE INICIO EN LA INFANCIA


Mercedes Ugalde Apalategui

I-CONCEPTO Y GENERALIDADES
A lo largo de los períodos evolutivos que corresponden a la infancia y
adolescencia, se produce el proceso de crecimiento y desarrollo normales, de las
funciones intelectuales y psico-sociales en general, que culminan con su
maduración en la edad adulta.
Debido a la trascendental importancia de estas etapas iniciales en la vida del
ser humano, buen número de autores han profundizado en su estudio, realizando
contribuciones significativas al conocimiento científico de estos ciclos vitales,
infancia y adolescencia. Como fruto de sus investigaciones podemos explicar
actualmente las denominadas Teorías del Desarrollo.
TEORÍAS DEL DESARROLLO
Vamos únicamente a nombrar las más importantes a modo de resumen
recordatorio.
FREUD, centró su atención en el estudio del desarrollo psicosexual,
describiendo las fases:
* Oral (el primer a o).
* Anal (1/3 a os).
* Genital (3/5 a os).
Expuso y definió conceptos nuevos, entre ellos el de la sexualidad infantil,
hasta entonces desconocida y su influencia en la edad adulta. Advirtió sobre la
existencia de la LIBIDO (impulso hacia la satisfacción sexual) en la infancia y dónde
se centra el logro de la satisfacción en cada una de las distintas etapas.
ERIKSON, se fijó principalmente en el estudio de las denominadas etapas
psicosociales, describiendo las siguientes:
* Oral y sensorial (el primer a o).
* Muscular y anal (1/3 a os).
* Locomotriz y genital (3/6 a os).
Su concepción sobre el desarrollo, nos ayuda a comprender los aspectos que
influyen, factores familiares, sociales y culturales y la importancia que cada uno de
ellos tiene en las distintas etapas.
PIAGET considera que el desarrollo se produce normalmente siguiendo estas
cuatro etapas:
* Sensorio-motora (del nacimiento a los 16/24 meses).
* Pensamiento pre-operacional (2/6 a os).
* Operaciones concretas (6/12 a os).
* Operaciones formales (a partir de 12 a os).
Describe la teoría sobre el desarrollo cognoscitivo, en donde las funciones
intelectuales, se convierten en el centro para la formación de la personalidad, a la
par que coordinan el desarrollo de todos los demás aspectos.
Los patrones de desarrollo que consideraremos dentro de la normalidad, se
fijarán en los conceptos que describen estas teorías, ya que abordan desde
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diferentes perspectivas el proceso de desarrollo humano y a nuestro entender


resultan complementarias y no excluyentes.
Así pues, los criterios de normalidad, se centrarán en valorar la progresión y
los logros propios de cada una de las fases y el grado de maduración alcanzado.
Se puede considerar que aparece un Trastorno de Inicio en la Infancia en los
casos que no se alcanza a conseguir los resultados previsibles a la etapa
correspondiente.
Los Trastornos de lnicio en la Infancia, consisten en una alteración en el
aprendizaje de las habilidades cognitivas, verbales, motoras o sociales. La
alteración puede implicar un retraso general, como en el retraso mental, o bien un
retraso o un fracaso en el aprendizaje de una habilidad específica. Suelen aparecer
antes de los 18 a os, el curso es crónico, tienen una duración indefinida y ocasionan
deterioros o incapacidades persistentes y estables.
En este capitulo, trataremos en particular del Retraso Mental (Trastorno por
Déficit Intelectual) y del Trastorno Autista (Autismo Infantil), dado que se trata de los
más significativos.

RETRASO MENTAL
Este trastorno del desarrollo, se caracteriza por un déficit intelectual,
observable por la medición del CI (coeficiente intelectual). Basándose en esta
prueba de inteligencia, las clasificaciones internacionales, delimitan los distintos
grados de retraso como:
* Retraso mental leve (CI 50/69)
* Retraso mental moderado (CI 35/49)
* Retraso mental grave (20/34)
* Retraso mental profundo (0/20)
Interesa retener ésta gradación, ya que la puntuación lograda por el ni o en la
medición del CI y su adscripción a uno u otro grupo, será indicativo para el futuro, de
las posibilidades reales de progreso y establecer su capacidad de aprendizaje.
Tomaremos como definición del Retraso Mental, la que nos proporciona el
ICD-10 de la O.M.S. “Estado de desarrollo mental incompleto o detenido
caracterizado especialmente por un deterioro de las capacidades que se manifiestan
durante la fase de desarrollo, capacidades que contribuyen al nivel global de
inteligencia, por ejemplo las funciones cognoscitivas, el lenguaje y las habilidades
motrices o sociales. El retraso puede tener lugar con o sin otra alteración mental o
física."

AUTISMO INFANTIL
El Trastorno Autista conocido también como Autismo Infantil, fue descrito
inicialmente por KANNER en 1943, quién lo diferenció como síndrome, del resto de
psicosis infantiles; lo definió como "La incapacidad por parte del ni o de relacionarse,
desde el principio de la vida, con personas y situaciones del modo habitual". Durante
a os, se mantuvo la opinión de que el origen del trastorno era la privación del afecto
de los padres durante el primer a o de vida.
El ICD-10 de la O.M.S., define el Autismo en la ni ez como "Un tipo de
trastorno generalizado del desarrollo que se define por: a) la presencia de un
desarrollo anormal o deteriorado que se manifiesta antes de los 3 a os de edad, b)
el tipo característico de funcionamiento anormal en las tres áreas de la
psicopatología: interacción social recíproca; comunicación, y comportamiento
restringido, estereotipado y repetitivo. Además de esas características diagnósticas
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específicas, es frecuente una variedad de otros problemas no específicos tales


como fobias, trastornos del sue o y de la ingestión de alimentos, rabietas y
agresiones o autoagresiones.”
Actualmente, se mantiene la incógnita sobre la causa concreta de este
trastorno, sin embargo últimas investigaciones, orientan sobre criterios biológicos ya
que en la base del trastorno, debe hallarse algún tipo de alteración neurológica.
Vamos a tratar a continuación de describir las manifestaciones de
dependencia que se producen en las Necesidades Fundamentales de los ni os que
padecen alguno de los trastornos que hemos rese ado, Retraso Mental y Autismo
Infantil.

II FORMAS CLÍNICAS DE LOS TRASTORNOS DE INICIO EN LA INFANCIA

RETRASO MENTAL
F70.9 Retraso mental leve
F71.9 Retraso mental moderado
F72.9 Retraso mental grave
F73.9 Retraso mental profundo
F79.9 Retraso mental de gravedad no especificada

TRASTORNOS DEL APRENDIZAJE


F81.0 Trastorno de la lectura
F81.2 Trastornos del cálculo
F81.8 Trastornos de la expresión escrita
F81.9 Trastornos del aprendizaje no especificado

TRASTORNOS DE LAS HABILIDADES MOTORAS


F82 Trastorno del desarrollo de la coordinación

TRASTORNOS DE LA COMUNICACIÓN
F80.1 Trastorno del lenguaje expresivo
F80.2 Trastorno mixto del lenguaje receptivo-expresivo
F80.0 Trastorno fonológico
F98.5 Tartamudeo
F80.9 Trastorno de la comunicación no especificado

TRASTORNOS GENERALIZADOS DEL DESARROLLO


F84.0 Trastorno autista
F84.2 Trastorno de Rett
F84.3 Trastorno desintegrativo infantil
F84.5 Trastorno de Asperger
F84.9 Trastorno generalizado del desarrollo no especificado

III - VALORACIÓN DE NECESIDADES BÁSICAS, FOCALIZACIÓN DE DATOS

RETRASO MENTAL
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1- RESPIRACION
Manifestaciones de dependencia
Hallaremos quizás que la alteración de esta necesidad ha podido ser la causa
del trastorno, puede ocurrir que la anoxia perinatal produzca lesiones cerebrales
irreversibles, origen del retraso.
Las alteraciones que acaecen en relación a esta necesidad, están en
conexión directa con el grado de importancia del retraso. En los casos de retraso
profundo, en que aparecen incluso malformaciones físicas, éstas pueden afectar a
la caja torácica o a distintos órganos del aparato respiratorio, comprometiendo la
adecuada oxigenación.
Resulta común hallar que los ni os con retraso mental severo, presenten
incontinencia salival o dificultades para la deglución de la misma, con lo cual
deberemos tener permanentemente presente el riesgo de aspiración. También en
estos casos interesa evaluar la presencia e intensidad del reflejo tusígeno.
Por otro lado, pueden existir pobres defensas fisiológicas que representan, en
estos casos, un evidente riesgo de infección respiratoria.

2- ALIMENTACION E HIDRATACION
Manifestaciones de dependencia
También en este caso, podemos decir que existe una relación directa entre la
alteración de esta necesidad y la deficiencia mental, ya que estudios realizados en
distintos países, han se alado que una intensa desnutrición al inicio de la vida, que
habitualmente va unido a otros factores deficitarios, influye negativamente en el
posterior desarrollo intelectual.
Para ésta necesidad, el nivel de dependencia en principio de la madre o
progenitores, será total. Posteriormente, a medida que el ni o se va desarrollando,
suele ocurrir que el retraso mental le impide lograr el grado de autonomía usual para
cada edad, requiriendo de la ayuda de los demás tanto para escoger o prepararse
adecuadamente los alimentos, como en muchas ocasiones, incluso para tomarlos.
Pueden aparecer alteraciones en cuanto a la cantidad y en cuanto a la
calidad, en la elección de los alimentos, apreciandose en ocasiones la aparición de
conductas alimentarias extra as, en que el ni o ingiere sustancias u objetos que no
se pueden considerar alimentos.
ALTERACIONES CUANTITATIVAS
ANOREXIA o falta de apetito, por ausencia de estímulos psico-sensoriales los
cuales están directamente influidos a su vez por factores socio-culturales y al existir
un déficit intelectual, estos factores resultan insuficientes.
HIPERFAGIA o ingesta excesiva de alimentos por falta de control de la
conducta alimentaria.
POTOMANIA, ingesta excesiva de líquidos.
ALTERACIONES CUALITATIVAS
RUMIACION, también llamado mericismo, trastorno propio de la lactancia,
que también se presenta en retrasados mentales. Consiste en la regurgitación de
los alimentos, éstos pueden escupirse o deglutirse nuevamente.
PICA, así se denomina a la ingestión de sustancias que no se consideran
alimentos, algunas denominaciones específicas, son las siguientes:
. Geofagia, ingestión de tierra.
. Tricofagia, ingestión de pelos.
. Litofagia, ingestión de piedras.
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. Pagofagia, ingestión de grandes cantidades de hielo.


. Coprofagia, ingestión de heces.
. Urolagnia, bebida de orines.
Todas estas alteraciones de la conducta alimentaria, son indicativas de la
falta de maduración, de las dificultades para el aprendizaje y de la desadaptación
social características que definíamos como las propias de los ni os que presentan
retraso mental severo.

3- ELIMINACION
Manifestaciones de dependencia
Esta necesidad puede hallarse alterada por un lado en relación a la anterior
necesidad, es decir, si el ni o se alimenta inadecuadamente, o toma sustancias extra
as, éstas pueden afectar al aparato digestivo, produciendo trastornos en la
eliminación, por ejemplo, la ingesta de piedras o cabellos, puede producir hasta
oclusión intestinal.
Por otro lado, si se produce una insuficiente maduración o un deficiente
aprendizaje en el control esfinteriano, aparecerá incontinencia fecal o vesical.
Es bastante común en ni os retrasados, la persistencia de enuresis y
encopresis (orinarse o defecar en la cama, estando dormido) hasta edades muy
avanzadas o incluso durante toda la vida.
En otro sentido, no resulta extra o encontrar conductas inapropiadas, como la
manipulación o el juego con los excrementos, que si bien no altera directamente la
eliminación,
le proporciona un significado diferente para el ni o retrasado, en muchos casos
lúdico, lo que deberemos tener en cuenta para prevenir posibles complicaciones
posteriores.

4- MOVILIZACION
Manifestaciones de dependencia
La capacidad de movilización, la psicomotricidad en los retrasados mentales,
guarda estrecha relación con el grado de desarrollo motor alcanzado.
La existencia de trastornos neurológicos concomitantes, agravará y
multiplicará la presencia de manifestaciones de insuficiencia o alteraciones en esta
necesidad.
Pueden aparecer trastornos para la actividad motora en sus dos vertientes,
por exceso o por defecto:
EXCESO
HIPERACTIVIDAD, característica movilidad incesante de los ni os que
presentan inquietud psicomotriz. Las actividades que realizan resultan poco
productivas, dado que al ser incapaces de fijar la atención el tiempo suficiente, es
prácticamente imposible que finalicen alguna tarea.
MOVIMIENTOS HIPERTONICOS, debido a la espasticidad de ciertos grupos
musculares, aparece una incapacidad para realizar de forma armónica algunos
movimientos voluntarios, se observa una brusquedad motora que afecta a las
actividades de la vida cotidiana.
TICS, movimientos continuos, rápidos y repetitivos que no son voluntarios y
resultan de imposible contención.
ESTEREOTIPIAS, repetición abusiva e inútil de actos como incorporar el
torso estando sentado.
DEFECTO
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HIPOTONÍA, debilidad del tono muscular, que produce flaccidez y dificultades


para la movilización y pasividad e impide la realización de actividades normales por
el ni o, como por ejemplo el caminar.
COORDINACIÓN DEFICIENTE, el ni o carece de una adecuada organización
y correlación psicomotriz en el proceso del movimiento, que repercute en la
incapacidad para realizar de manera efectiva, completa y correctamente algunos
movimientos complejos.
PARÁLISIS, en los casos que el retraso mental es producido por causas
orgánicas conocidas, como lesiones neurológicas centrales, es habitual encontrar
también este tipo de secuelas, como parálisis motoras.

5- REPOSO Y SUE O
Manifestaciones de dependencia
Las alteraciones de ésta necesidad, pueden ser producidas por la inquietud
psicomotriz, que imposibilita al ni o mantenerse acostado para conciliar el sue o.
O bien debido a inseguridad o miedo producidos por la oscuridad o la soledad
nocturnas, en estos casos, se pueden producir accesos de terror nocturno, con
agitación psicomotriz y gritos. También presentan pesadillas y despertar repentino.
Recordemos en este apartado, la enuresis y encopresis, ya citadas
anteriormente como alteración en la necesidad de eliminación, una de cuyas
características, es la nocturnidad y que en muchos tratados, se describe en los
capítulos dedicados al sue o.
En otros casos, que el nivel de activación neurofuncional (arousal) es
excesivamente bajo, pueden aparecen cuadros similares a la hipersomnia.

6- VESTIRSE
Manifestaciones de dependencia
Escoger las prendas de vestir que concuerdan con la propia edad, el clima, la
temperatura o el momento social y tener además la habilidad suficiente para
colocarlas correctamente, significa poseer la capacidad intelectual de integrar todos
estos parámetros con competencia, para tomar la decisión ajustada a cada ocasión.
La capacidad del ni o retraso mental, para asumir su autonomía e
independencia en las decisiones que se requieren para
elegir una vestimenta correcta, así como la habilidad manual y el
grado de coordinación psicomotora suficientes, para realizar las actividades
necesarias para vestirse correctamente, ocurre que habitualmente suelen estar
comprometidas, por lo que requerirá de ayuda en mayor o menor medida.
Por tanto, esta necesidad puede resultar preeminentemente indicativa para
observar el grado de desarrollo madurativo alcanzado por el ni o, así como sus
posibilidades de rehabilitación y los progresos que se van produciendo en su
proceso educativo.

7- MANTENER LA TEMPERATURA
Manifestaciones de dependencia
Esta necesidad, directamente ligada con la anterior, puede estar alterada a
causa de que el retrasado mental sea incapaz de elegir o colocarse de manera
independiente, las ropas que necesita para protegerse de unas temperaturas
extremas.
En ciertos casos, se presenta una aparente anestesia sensorial, en la que
parecen ignorar las sensaciones de frío o calor.
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8- HIGIENE Y PROTECIÓN DE LA PIEL


Manifestaciones de dependencia
El grado de desarrollo madurativo motriz e intelectual, es evidente que influirá
en la capacidad para el auto-cuidado que posea el ni o.
En cuanto a los hábitos higiénicos, presuponen la capacidad de un cierto
grado de aprendizaje y adaptación social, así como de coordinación psicomotriz
para realizar los complejos movimientos que requieren las actividades para la auto-
higiene.
Por lo común los ni os retrasados no son independientes para satisfacer de
manera total esta necesidad y precisan de guía y apoyo constantes, hasta que
logran integrar las actividades higiénicas en su rutina cotidiana.
Debido al déficit intelectual, el ni o retrasado puede no entender la
importancia de su higiene personal, por lo que requerirá de un programa educativo
permanente, que se vaya adaptando a sus necesidades individuales y le refuerce
positivamente, orientándole para alcanzar cada vez metas de mayor autonomía.
En los casos de retraso profundo, puede ser incapaz de adquirir los mínimos
conocimientos necesarios para realizar su auto-higiene.
Así como un problema a adido, que aumenta las manifestaciones de la
alteración de esta necesidad, lo suponen las incontinencias de esfínteres, que
complican el cuidado higiénico, en cuyo caso, será necesario previamente intentar la
re-educación en la continencia esfinteriana.

9- SEGURIDAD
Manifestaciones de dependencia
Tomaremos en consideración al respecto de esta necesidad, que el paso
previo para acceder a su satisfacción, depende sobremanera de la respuesta social.
Las medidas que la sociedad adopta para proporcionar el mayor grado de seguridad
a sus miembros más débiles, en este caso los retrasados mentales, marcará la
pauta del nivel que es posible alcanzar en su completa consecución.
En primer lugar, los derechos del ni o retrasado mental, que suelen ser
conculcados en ocasiones por el contexto social, que los rechaza y margina,
aislándolos o apartándolos de su entorno y de la vida de la sociedad, impidiendo el
desarrollo pleno de todas sus capacidades y sumergiendolos en un medio hostil.
En este sentido, puede resultar ilustrativo recordar lo que al respecto nos dice
el Comité de Expertos de la O.M.S. "Todo ni o tiene derecho a desarrollar al máximo
sus capacidades. Por ello debe asegurarse a todos los ni os, estén o no afectos de
una deficiencia mental o física, la mejor asistencia posible en materia de
diagnóstico, tratamiento médico y para-médico,
cuidados de enfermería, protección social, ense anza, formación profesional y
obtención de un empleo. Ha de procurarse que el ni o pueda satisfacer por completo
las necesidades del desarrollo de su personalidad y llegue a ser en lo posible un
miembro útil e independiente de la colectividad".
Así pues, si tenemos en cuenta que el propio trastorno da lugar a deficits en
la capacidad adaptativa, la socialización puede estar dificultada, por lo cual la
sociedad "sana" debería tratar de ayudar a suplir o subsanar estos deficits en la
medida que le compete, colaborando en la aceptación de la diferencia, tolerando la
cercanía y asumiendo en fin, que su plena integración social depende también de la
postura que adoptamos cada uno ante la negación de estos derechos.
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En este sentido, en los ni os retrasados aparece una mayor incidencia en el


padecimiento de maltrato físico o crueldad por parte de los demás, lo que dadas sus
características produce aún una mayor vulnerabilidad. Tenemos el ejemplo del típico
tonto del pueblo, quién es objeto de escarnio y burla, cuando no de violencia física,
para casi todos, produciendose una situación de desamparo que conculca los
derechos más fundamentales de toda persona humana.
Tampoco resulta raro en estos casos, que el retrasado ya incluso una vez
adulto, sea víctima inocente de la desaprensión de compa eros y patrones que en el
medio laboral, se aprovechan de su ignorancia o buena fe, para adjudicarle los
trabajos más pesados o una remuneración inferior a lo que le correspondería por su
trabajo.
También se han descrito en ambientes sociales muy cerrados o culturalm__te
bajos, casos de abusos sexuales, que resultan favorecidos por la pasividad y
dependencia características del retrasado mental.
En otras ocasiones, es el propio retrasado, quién puede presentar crisis de
pérdida de control de los impulsos o conductas agresivas, que comprometen su
propia seguridad y la de los demás. También se alar el caso peculiar del Síndrome
de Lesch-Nyhan, en que aparece asociado al trastorno orgánico, una conducta auto-
mutilante.
Por otro lado, la necesidad de seguridad puede estar alterada por la falta de
conocimiento de los objetos del entorno que representan un riesgo físico para las
personas, lo que puede ser ocasión de accidentes o traumatismos, como por
ejemplo los incendios o quemaduras producidos por la manipulación deficiente de
fuentes de calor, como estufas o cocinas.
10 - C O M U N I C A C I O N
Manifestaciones de dependencia
Esta necesidad suele hallarse alterada en mayor o menor medida, según el
grado del déficit intelectual o la existencia de trastornos orgánicos asociados, que
afecten a los órganos visuales, táctiles, de fonación o audición del ni o.
El principal medio de comunicación entre los seres humanos, es el verbal, el
lenguaje hablado. Si tenemos en cuenta, que éste se aprende, comprenderemos
que dependerá de la capacidad del ni o para adquirir conocimientos, que llegue a
utilizar el léxico adecuado para comunicarse en cada situación.
En este sentido, hemos de tener en cuenta que el lenguaje hablado, es el
vehículo que utilizamos para verbalizar o expresar el fruto de nuestra producción
intelectual y si como es el caso, ésta se halla afectada por un déficit, lo que se
exprese resultará en igual medida afectado.
Además pueden aparecer variados trastornos o deficits de lenguaje, desde
dificultades para vocalizar correctamente ciertas palabras, hasta emisión de sonidos
guturales o extra os, repetición automática de palabras o imposibilidad de utilizar el
tono y la cadencia adecuados a la conversación.
De igual manera, influirá su capacidad de adaptación en las relaciones que
establezca el ni o, tanto con las personas como con el entorno. El medio socio-
cultural y familiar, contribuyen de manera decisiva a paliar o acentuar estas
dificultades en los casos de deficits leves.
Establecer comunicación con los demás, comunicarse, requiere coordinación
no tan sólo del lenguaje o la audición, sino también de la existencia de una
concordancia entre la comunicación verbal y la no verbal, gestos, miradas, posturas.
En los ni os retrasados, que presentan alteraciones de la psicomotricidad, este
segundo aspecto puede plantear dificultades adicionales al hecho comunicativo.
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Es típico como ejemplo, que estos ni os suelen incapaces prácticamente de


fijar la mirada. Esta parece huidiza y cuando se les dirige la palabra, pocas veces
miran de frente al interlocutor, lo que puede inducirnos al error de creer que no nos
escuchan ni prestan atención.

11 - VALORES Y CREENCIAS
Manifestaciones de dependencia
Los parámetros para evaluar la cobertura de esta necesidad, son complejos,
ya que cada ni o puede presentar un nivel de entendimiento propio y peculiar, que
resulte de difícil valoración.
Toda religión comporta la creencia en un "dios" o ser superior. El concepto de
Dios, presupone la capacidad para realizar la función intelectual del pensamiento
abstracto, lo que puede resultar inalcanzable para un retrasado mental, que
integrará la idea de acuerdo con sus posibilidades, con lo cual puede estar apartado
de toda norma conocida habitualmente para cubrir esta necesidad.
Sin embargo, cuando existe cierta capacidad para entender el hecho religioso
y a pesar de que presente grados de interpretación peculiares e individuales, que
nos resulten de difícil comprensión, hemos de tomar muy en consideración la
satisfacción de esta necesidad, ya que un fallo en este sentido supone colaborar
directamente para aumentar las dificultades de socialización del ni o retrasado.
También puede ocurrir que el ni o no entienda en lo absoluto el aspecto
trascendente de la vida, por lo tanto, no presentará inquietud alguna en lo que
respecta a la satisfacción de esta necesidad.

12 - T R A B A J A R Y R E A L I Z A R S E
Manifestaciones de dependencia
Esta necesidad, sus alteraciones y logros, estarán directamente ligadas con
las dos necesidades que a continuación trataremos y que se fijan en los aspectos
lúdicos y de aprendizaje del ni o.
Dado que el trabajo, desde nuestra cultura y sociedad, es una actividad
propia de la persona adulta y no del ni o, se entiende que hablaremos con cierta
propiedad en ocasiones, del retrasado adulto.
Queda pues rese ada esta realidad de la íntima conexión entre el
aprendizaje, el juego y el trabajo, en este caso, con lo cual, a partir de aquí,
centraremos la atención de manera exclusiva en la necesidad de trabajar y
realizarse.
Lo primero que advertimos es que la satisfacción plena de esta necesidad, se
basa fundamentalmente en dos aspectos:
. La propia capacidad del sujeto.
. El entorno social.
En cuanto a la capacidad del sujeto, se deberá tomar en cuenta que sus
posibilidades de actividad laboral, estarán indefectiblemente mediatizadas por las
facultades intelectuales, manuales, de adaptación y aprendizaje.
Unido a todo lo anterior, habrán de tenerse en cuenta también otros aspectos,
a la hora de evaluar las posibilidades reales de adaptación social y laboral, ya que
influirán en cierto grado, la responsabilidad personal, la capacidad para adquirir
habilidades que le ayuden a resolver problemas y mantener la independencia
personal y la auto-suficiencia para las actividades de la vida cotidiana, así la eficacia
en determinadas áreas del comportamiento.
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En cuanto al entorno social, se viene insistiendo sobremanera en la


importancia fundamental de que estos sujetos afectos de un retraso mental, posean
oportunidades laborales. En este sentido recogemos la Recomendación 99 de la
Organización Internacional del Trabajo que en 1955, estableció las condiciones y las
normas de rehabilitación vocacional de las personas disminuidas, el texto entre
otras cosas dice: "Considerando que son muchos y variados los problemas
concernientes a quienes sufren una disminución, y considerando que la
rehabilitación de tales personas es esencial en orden a que han de ser recuperadas
al máximo posible de su potencial físico, mental, social, vocacional y de la utilidad
económica de que sean capaces ..... para las necesidades de empleo de la persona
disminuida y el uso de los resortes del poder para su beneficio, es necesario
desarrollar y rehabilitar su habilidad laboral, combinando de manera continua y
coordinada los procesos médicos, psicológicos, sociales, educacionales, de
orientación profesional, con los servicios de colocación, incluyendo el de
continuidad. Los servicios de rehabilitación vocacional deben ser accesibles a todas
las personas disminuidas, cualquiera que sea el origen y naturaleza de su
deficiencia, y cualquiera que sea su edad, y pueden ser preparadas para unas
perspectivas razonables de tener y conservar un empleo adecuado".
Pero no nos enga emos, la realidad dista mucho de estos buenos propósitos,
las insuficiencias sociales, como por ejemplo el nivel de desempleo, reducen y en
ocasiones convierten en pura utopía las recomendaciones. Las oportunidades
laborales para un retrasado mental están directamente ligadas a la situación
económica y laboral del país, cuando éste atraviesa una crisis, el ambiente le resulta
ciertamente conflictivo, si no desfavorable, con lo cual las dificultades para encontrar
un trabajo adecuado para el retrasado, se acrecientan.
En cuanto al sentimiento de realización, dependerá más de la percepción
subjetiva sobre sus propios deficits y la influencia que suponga esta toma de
conciencia.
En cierto sentido, realizarse también dependerá de las posibilidades laborales
y del ambiente social, la percepción de rechazo u hostilidad crea por otro lado,
acumulos de experiencias negativas o fracasos, que favorecerán la aparición de
sentimientos de inutilidad o minusvalía, mayor nivel de dependencia de los demás y
un grado de angustia, que ponen en peligro tanto el precario equilibrio personal
como la integración social efectiva.
Existe cierta tendencia general, a asumir que los retrasados mentales están
incapacitados para desenvolverse plenamente en la vida como el resto de los seres
humanos. Esto puede ser exacto en ciertos casos, en los que el retraso produce
deficits importantes, pero no lo es en todos, así vemos que personas con un
desarrollo intelectual mínimo, se encuentran en ocasiones plenamente integradas
en la vida social de su medio ambiente, sobre todo cuando éste ha propiciado su
integración o al menos ha impedido su segregación.
Nuestra sociedad considera que alcanzamos la plenitud del desarrollo
humano en la vida adulta, cuando logramos percibir nuestra identidad individual y
conseguimos independencia y seguridad en nosotros mismos. El retrasado mental
parte de una situación de handicap, pero recordemos que a pesar de ello, tiene
derecho a que se le permita la realización plena de todas sus potencialidades.
La igualdad de oportunidades es un derecho constitucional, apartar o
marginar de estas oportunidades al retrasado, supone una vulneración de su
dignidad humana.
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Saber y poder trabajar infundirán respeto a los demás y a uno mismo dada la
actual escala de valores sociales.
Por otro lado, no podemos olvidar el aspecto de la vida sexual, el cual posee
además ciertas peculiaridades, ya que por una parte, en el retrasado mental se
suele producir un desarrollo madurativo sexual normal, pero sin embargo en
ocasiones carece del desarrollo del conocimiento suficiente para entender las
normas sociales que rigen en este sentido. Así podemos encontrar que algunos
sujetos poseen hábitos que la sociedad rechaza, como el de masturbarse o mostrar
los órganos genitales en público. Estas situaciones pueden ser fuente de conflictos
por lo que conviene que conozcan eso que denominamos sentido del pudor, que no
son sino normas aprendidas por la educación.
En otras ocasiones, son los propios retrasados las víctimas de abusos
sexuales, lo que puede ocurrir también por desconocimiento.
No podemos pasar por alto unos temas, que a pesar de ser controvertidos,
nos vemos en la obligación siquiera de reflejar. Como por ejemplo Tiene derecho
un retrasado mental a casarse y a crear una familia? o el conflictivo tema de las
esterilizaciones para evitar la descendencia. Nos parecen temas complejos, en los
que resulta difícil extraer conclusiones unánimes, posiblemente cada persona,
retrasado o no tiene derecho a vivir una vida plena en la que el goce del amor y del
placer sexual tienen un papel preponderante. Compatibilizar estos derechos con
medidas preventivas, conduce a plantearse no tan sólo problemas sanitarios o
legales, sino también éticos y morales.
Creemos que en estos casos se debe estudiar particularmente cada caso,
pues no parece prudente efectuar afirmaciones generales.

13 - A C T I V I D A D E S L U D I C A S
Manifestaciones de dependencia
Esta necesidad indudablemente estará alterada en función de las
capacidades individuales.
Lo recreativo ocupa un lugar preponderante en la educación y desarrollo de
todos los ni os. Al tratarse de ni os retrasados, el juego va a adquirir un papel
protagonista como elemento motivador, ya que mediante estas actividades lúdicas,
podremos incitar al ni o, por un lado a adquirir nuevos conocimientos, a descubrir las
cosas y el mundo circundante y también por otro lado, a tomar conciencia de la
existencia de los demás y a relacionarse con ellos.
Aparecerán dificultades a la hora de organizar sus actividades lúdicas, si el ni
o retrasado tiene deficits de comunicación, atención o presenta hiperactividad o en
su caso, algún tipo de lesión en los órganos de los sentidos. También las
estereotipias y otros tipos de deficits concretos, obstaculizarán la realización plena
de ésta necesidad.
En cierta manera, el juego debe suponer para el ni o retrasado, además de
un entretenimiento, el entrenamiento para la vida del adulto, ambos aspectos deber
estar unidos en aras de la mayor efectividad. Así la alegría y placer que sienta con
el juego, además de motivarle a trabajar y progresar, le estimula a realizar lo lúdico
como entrenamiento en habilidades sociales y personales.

14 - A D Q U I R I R C O N O C I M I E N T O S
Manifestaciones de dependencia
Esta necesidad, se hallará alterada originariamente en todos los casos, pero
el grado de amplitud, variará en cada uno.
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Por regla general, todos los ni os necesitan de estímulos continuados para


que se desarrolle su capacidad intelectual, las carencias en este sentido, pueden
incluso en ocasiones ser el origen de un retraso mental.
El medio natural en que se producen los estímulos para la adquisición de
conocimientos por parte del ni o, es en primer lugar la familia y posteriormente, la
escuela, donde además recibe la formación que le posibilitará en el futuro
desarrollar plenamente su vida social.
Se trata en este caso sin embargo, de ni os que precisamente tienen alterada
su capacidad intelectual en mayor o menor medida y por esta causa, presentan
serias dificultades para adquirir conocimientos. Es comprensible que en estas
condiciones, su necesidad de atención, estímulo y formación sea mucho mayor que
la de los demás ni os.
Por lo tanto, debemos entender que la escolarización del ni o retrasado,
resulta tanto o más imprescindible que la del que no posee ninguna deficiencia.
Su necesidad primordial estribará en el aprendizaje del manejo de asuntos
prácticos, prepararle para las actividades de la vida cotidiana, dejando de lado
asuntos que en estos casos pueden resultar superfluos o excesivos, como por
ejemplo el ense arle a leer o escribir. En todo caso, se ha de observar que el
rendimiento concuerde con la edad y también con el medio cultural en que se
desenvuelve.
Hemos de distinguir dos tipos de alteraciones del aprendizaje, dificultades
mecánicas que le impedirán resolución de actividades para las que se requiere de
coordinación motriz como la adquisición de habilidades para el trabajo o también
para conseguir cierto grado de suficiencia en el auto-cuidado. Y las dificultades para
el aprendizaje intelectual, cuyas posibilidades estarán en justa correspondencia con
su coeficiente de inteligencia (CI).
Los indices de CI, se relacionan de la siguiente manera con las posibilidades
de aprendizaje:
* Inteligencia límite.-
La capacidad de aprendizaje es suficiente, pueden precisar esfuerzo
suplementario para adquirir ciertos conocimientos complejos. Suelen tener pocas
dificultades cuando se trata de aprendizajes memorísticos, que no requiere de
elaboraciones intelectuales complicadas o de razonamientos sofisticados. Por tanto
su adaptación social y en el futuro al mundo laboral es normalmente correcta.
* Retraso Mental leve.-
Son ni os educables, si presentan dificultades de adaptación o retraso en el
medio escolar general, puede ser conveniente su adscripción a alguno de los
programas de educación especial. Resulta posible alcanzar un buen nivel de
aprendizaje, siendo susceptibles de lograr cierto grado de autonomía.
* Retraso Mental moderado.-
Se trata de ni os parcialmente educables, que sujetos a un programa de
educación especial, pueden aprender algunas habilidades y desarrollar ciertas
capacidades que les permitan desenvolverse en su medio.
* Retraso Mental grave.-
En algunos casos pueden ser capacitables, pero requieren de apoyo y
orientación constantes, incluso para aprender a realizar las actividades de la vida
cotidiana. Resulta difícil su adaptación social.
* Retraso Mental profundo.-
Difícilmente instruibles, apenas pueden aprender a realizar las tareas simples
y rutinarias de su propio cuidado. Suelen estar apartados del medio social.
13

TRASTORNO AUTISTA

1- RESPIRACION
Manifestaciones de dependencia
No es una necesidad que se halle específicamente alterada en este caso.
Únicamente influirán los trastornos respiratorios típicos, propios de las
enfermedades de la infancia, cuando aparecen.

2- ALIMENTACION E HIDRATACION
Manifestaciones de dependencia
En esta necesidad van a detectarse alteraciones en la infancia más precoz,
desde la lactancia, cuando se observa que los ni os autistas tienen como
característica que al mamar, no establecen una relación afectiva con la madre. El
bebe, tiene dificultades para mamar, llora, se muestra indiferente a los brazos de la
madre, no posee la tendencia natural de abrazarla y no colabora en la succión.
Por regla general, tienen dificultades para tolerar los alimentos ásperos al
tacto, también en ciertos casos, pueden aparecer vómitos e inapetencia.
Con posterioridad, hay tendencia a presentar variadas dificultades en la
conducta alimentaria, que suelen ser particulares para cada ni o.
Así pues, no existe una uniformidad en la aparición de alteraciones de esta
necesidad, que se habrá de valorar de manera individual, no siendo sorprendente
hallar graves alteraciones de la misma.

3- ELIMINACION
Manifestaciones de dependencia
En esta necesidad no suelen aparecer excesivas alteraciones, si
exceptuamos los casos en que existe cierto grado de retraso en el control de
esfínteres.
Por otro lado, la lentitud que el ni o puede presentar en el proceso de
aprendizaje de las costumbres sociales, sobre la eliminación adecuada de los
residuos corporales, también puede influir en esta necesidad.

4- MOVILIZACION
Manifestaciones de dependencia
La necesidad de movilización presenta unas alteraciones que resultan
características para los ni os autistas.
Es común la presencia de conductas rituales, que comportan movimientos
repetitivos y estereotipados, sobre todo de las manos y de los dedos, que el ni o
mira moverse absorto durante horas, actúa prácticamente como si se tratara de
elementos ajenos a él mismo.
14

Los actos que realiza, por lo general adolecen de un tono monótono. También
en ocasiones, aparece ausencia de actividad espontánea, permaneciendo durante
largos períodos de tiempo absortos o ensimismados.
O en su caso, aparece un interés desmedido por los objetos que presentan
movimiento, les atrae sobre manera girar objetos y emitir sonidos, presentando en
este sentido una conducta ritual, de repetición interminable.
De manera constante pueden estar efectuando movimientos corporales
rítmicos, como balanceos o giros, lo que al parecer les proporciona las sensaciones
y percepciones sobre su propio cuerpo, pues se entiende que la ejecución de estos
movimientos rítmicos y constantes, carecen de otro sentido o utilidad conocida.
Pueden pasar gran parte de su tiempo dedicados a este tipo de conductas,
absorbidos por las actividades repetitivas y monótonas.
Rechazan cualquier tipo de cambio y cuando se trata de forzarles a realizar
algún cambio en su actividad, pueden oponerse de manera violenta, ya que su
tendencia natural es reiterar y conservar la conducta ritual.

5- REPOSO Y SUE O
Manifestaciones de dependencia
Por lo general, no acostumbran a aparecer alteraciones especialmente
significativas de esta necesidad.
Sin embargo, en casos particulares, el ni o puede presentar algún tipo de
trastornos del sue o no especificados, insomnio, despertar precoz, llanto, enuresis,
etc... que pueden producir severos impedimentos para la óptima consecución de
esta necesidad.

6- VESTIRSE
Manifestaciones de dependencia
Para la consecución plena de esta necesidad, acaecen habitualmente en el ni
o autista variados impedimentos, resulta común entre ellos, la incapacidad para
elegir las prendas adecuadas o para vestirse él solo, de manera independiente. En
los casos que existe un déficit conductual o un inadecuado comportamiento social,
se agudizan estos impedimentos.
Por regla general, le desagrada la ropa áspera o poco suave y también
toleran difícilmente los cambios en la indumentaria, ya que como es se alado en
estos casos, siempre tienen miedo de los cambio y de lo nuevo.
Una vez que han adoptado una determinada vestimenta, la incorporan
obsesivamente, insistiendo en esta uniformidad hasta llegar a formar parte de su
reducido conjunto de actividades rituales.
También se puede resaltar, la incorporación de objetos peculiares consigo,
normalmente son inanimados, como por ejemplo un trozo de papel, un cordel o una
piedra. Estos objetos que son incluidos en su vida y forman parte de sus conductas
rituales, al parecer poseen un alto grado de significación para el ni o y resulta por
tanto inútil, e incluso contraproducente intentar separarlos.

7- MANTENER LA TEMPERATURA
Manifestaciones de dependencia
En lo referente a esta necesidad, se aprecian alteraciones específicas dado
que al parecer, existe una especial sensibilidad hacia las temperaturas extremas,
por lo que se produce una extraordinaria disminución del umbral doloroso, lo que se
denomina termoalgesia.
15

Se habrá de tener en cuenta esta característica, habida cuenta de las


dificultades de comunicación del ni o, ya que en este caso, puede ser incapaz de
expresar correctamente las causas de su malestar o dolor.

8- HIGIENE Y PROTECIÓN DE LA PIEL


Manifestaciones de dependencia
Las alteraciones que pueden aparecer de esta necesidad, tendrán como
punto de referencia, por un lado a los trastornos conductuales del ni o autista, sus
rituales, sus hábitos para las actividades de la vida cotidiana y por otro, su
capacidad de aprendizaje y de adaptación.
Si el ni o hace gala de una conducta desadaptada, posiblemente esto, afecte
a sus actividades para la higiene, de igual manera, los hábitos higiénicos se
adquieren mediante aprendizaje en edades tempranas, un déficit para la adquisición
de estas habilidades, sea cual sea la causa, alterará su higiene y cuidado general.

9- SEGURIDAD
Manifestaciones de dependencia
La necesidad de seguridad en los ni os autistas, suele hallarse muy alterada,
principalmente en dos aspectos.
Por un lado en lo que se refiere al propio temor, al miedo que siente el ni o
por determinadas cuestiones peculiares, pero bastante comunes a todos ellos, como
por ejemplo puede sentir un temor exagerado hacia los objetos que se desplazan.
También poseen un alto nivel de sensibilidad a ciertas percepciones auditivas
o visuales, por lo que resulta habitual que les asusten los ruidos, lo que manifiesta
tapándose los oídos y de igual manera, los cambios de luces bruscos o en
ambientes que le son desconocidos o poco familiares.
Uno de los temores, más característico en este sentido, es que el ni o se
espante si pierde la estabilidad. Ante juegos muy comunes en la primera infancia,
como hecharle al aire, pueden aparecer auténticos ataques de pánico.
Posteriormente este temor, se produce en lugares comunes o situaciones en que
existe cierto grado de inestabilidad aerodinámica, como pueden ser los ascensores.
Por otro lado, no siempre advierten los peligros circundantes, ni son
conscientes de ellos, y como riesgo a adido, acostumbran a explorar todo lo externo
mediante el tacto con el consiguiente riesgo de lesiones, además con frecuencia
existe falta de respuesta a los estímulos exteriores, con lo que aparece una falta de
reacción casi absoluta, ante los golpes o las caídas de objetos.
Capitulo aparte merece en la necesidad de seguridad, cuanto se refiere a la
cuestión de las autoagresiones, ciertamente de vital importancia, dada la frecuencia
con que esta circunstancia se presenta en los ni os autistas y también debido al
riesgo que se ocasiona de producirse lesiones, así como a la gravedad que las
mismas suelen plantear.
Con cierta frecuencia, el ni o autista, se manifiesta irritable y entonces
sobrevienen descargas agudas de mal humor o rabietas. Esta circunstancia, se
puede producir tras cualquier tipo de modificación ambiental o cambio y también tras
algún tipo de contrariedad que le ocasione una sensación de frustración, lo que le
pueden ocasionar graves perturbaciones en su estabilidad personal o emocional y
es entonces cuando realizan los actos de auto-lesiones.
La conducta auto-destructiva, es muy difícil de controlar, se manifiesta de
diferentes maneras: El ni o puede golpearse la cara con los pu os, produciendose
heridas o contusiones. Si se golpea los pabellones auriculares, pueden aparecer
16

severas lesiones timpánicas. En otras ocasiones, se muerde las manos o mu ecas


hasta hacerse sangre o producirse auto-mutilaciones o se golpea contra paredes o
muebles produciendose heridas o traumatismos de consideración.
Conviene sobremanera evitar la aparición de este tipo de conductas, para lo
cual la educación continuada y la prevención serán los medios idóneos para evitar
que se desencadenen. En todo caso, debe imponerse algún tipo de restricción o
remedio de inmediato.

10 - C O M U N I C A C I O N
Manifestaciones de dependencia
El trastorno de comunicación subyace como base del autismo infantil, por lo
tanto, aparecerán alteraciones de esta necesidad de manera importante.
Ya desde el comienzo de su vida, con anterioridad a los 30 meses, se detecta
que el ni o autista carece de capacidad para establecer una relación afectiva con los
padres, no contesta cuando tratan de llamar su atención, apenas se produce
respuesta al contacto físico y su reacción es nula ante el lenguaje hablado, por lo
que suele ser habitual que en principio se sospeche que se trata de un ni o sordo.
A medida que el ni o crece, se hace más evidente su fracaso para desarrollar
un contacto social. Aparecen entonces situaciones donde se demuestra su
incapacidad para relacionarse con las demás personas, observandose por el
contrario, que establece mejor relación con los objetos.
Una de las actitudes que caracteriza al ni o autista, es que el contacto
personal significativo, es prácticamente imposible de establecer, porque evita de
manera ostentosa cualquier tipo de interacción que se pretenda en que la palabra o
el gesto tengan un significado. Rehuye ser tocado o mirar directamente a los ojos de
su interlocutor, apenas sonríe y su actitud es la de estar como ausente.
De modo habitual ignoran los sonidos, a pesar de que poseen por lo general
un alto nivel de audición, la mirada queda fijada en detalles mínimos, que parecen
captar todo su interés, así se desentienden de cualquier intento comunicativo.
La ausencia o retraso en el desarrollo del lenguaje, es típico, es incapaz de
utilizar el lenguaje hablado con el fin de comunicarse, presenta además deficits de
comprensión y otros trastornos del lenguaje, como ecolalia (repetición de las
palabras o las frases que oye) y una peculiar inversión de los pronombres
personales.
El grado de deficiencia que aparece en el desarrollo del lenguaje, resultará un
predictor muy importante para evaluar la evolución y posibilidades de desarrollo
ulterior.

11 - VALORES Y CREENCIAS
Manifestaciones de dependencia
No se aprecian alteraciones específicas de esta necesidad.

12 - T R A B A J A R Y R E A L I Z A R S E
Manifestaciones de dependencia
En lo referente a las posibilidades de actividad laboral en el futuro del ni o
autista, existirán diferencias en cuanto a si es posible el desarrollo y adquisición del
lenguaje hablado o no, si al ni o le resulta imposible utilizar la palabra como medio
de comunicación, el pronóstico en este sentido, es desfavorable, no tan solo para
trabajar, sino también para sus posibilidades de adaptación social.
17

Cuando se ha logrado desarrollar siquiera sea un mínimo la comunicación


verbal y las habilidades sociales, las oportunidades laborales deben ser factibles.
Tendremos en cuenta también las posibilidades de aprendizaje, en este sentido, les
suele agradar más trabajar con objetos y en algunos casos poseen cierto grado de
habilidad para manejarse con los números.
Es común que tiendan a buscar ocupaciones solitarias, que no requieran
excesivo contacto con personas ni dotes especiales de facilidad de palabra.
En cuanto a su necesidad de sentirse realizados, resulta difícil su
consecución, al encontrarse aislado, inmerso en su propio mundo, con las
dificultades de comunicación que hemos descrito y sin el apoyo de los demás.
Normalmente suele ocurrir que al ser conscientes de su inhabilidad para las
relaciones interpersonales, tienden a alejarse de todo contacto humano, lo cual
agudiza el problema, existiendo el riesgo de que hagan aparición sentimientos de
soledad y minusvalía, que fortalecen la instauración del cuadro
de aislamiento y favorecen la ausencia de vinculaciones emocionales que propician
una permanente tendencia a evitar todo contacto social e imposibilitan el
sentimiento de realización personal plena.
La maduración sexual infantil suele ser normal, pero la imposibilidad de
romper su aislamiento y establecer vínculos afectivos, complica y en ocasiones
anula el desarrollo de la sexualidad adulta.

13 - A C T I V I D A D E S L U D I C A S
Manifestaciones de dependencia
La necesidad de jugar, en los ni os autistas presenta algunas características
que hemos de tener en consideración para su adecuada atención.
Acostumbran a realizar juegos solitarios, pueden estar entretenidos durante
horas por sonidos o movimientos que ellos mismos emiten.

Para los juegos, carecen de imaginación, esto se observa porque aparecen


rígidos y limitados si se trata de variar de actividad lúdica.
Se sienten particularmente atraídos por los objetos giratorios, en los que al
parecer buscan y encuentran sensaciones agradables.
Los juegos monótonos y repetitivos, como alinear o agrupar objetos, poseen
un interés particular para el ni o autista. Si se produce algún cambio imprevisto en la
disposición de los objetos o juguetes, éste puede ser el origen de alguno de sus
característicos ataques de irritabilidad, pudiendo aparecer la conducta
autodestructiva si no se restituye de inmediato el objeto a su lugar anterior.
Carecen de capacidad para adaptarse a los juegos en grupo debido a sus
manifiestas dificultades de comunicación, lo que les imposibilita percibir las
respuestas de los demás y establecer la relación necesaria para el juego
cooperativo.

14 - A D Q U I R I R C O N O C I M I E N T O S
Manifestaciones de dependencia
Esta necesidad suele hallarse alterada en mayor o menor grado debido
principalmente a las dificultades de socialización y comunicación del ni o autista,
más que por lo que se refiere a la capacidad intelectual, que en muchos casos,
suele estar suficientemente desarrollada.
18

Por otro lado, hemos de tener en cuenta que evaluar la capacidad intelectual
del ni o autista, resulta tremendamente complejo, por lo que es fácil que se
adjudiquen erróneamente sus dificultades para adquirir conocimientos, a un déficit
intelectual.
Así pues, valorar el C.I., será el paso imprescindible como punto de partida
para evaluar las capacidades de aprendizaje del ni o.
Si la capacidad intelectual se halla completamente conservada y el C.I. es
normal o en algunos casos incluso superior a la media, las características
dificultades de adaptación y de aprendizaje del lenguaje hablado, suelen ser
superables.
Para todos los casos, las dificultades de adquirir conocimientos se hallan
ligadas a su capacidad de adaptación al medio, de socialización, por lo tanto, la
instauración más temprana posible de un programa de educación específico, que
tenga en cuenta estos aspectos y su adscripción a la escolarización especial,
posibilitará el desarrollo óptimo de todas sus potencialidades. En este sentido, la
actitud de la familia ante la enfermedad del ni o, también será de gran importancia.
El aprendizaje que requiere aptitudes mecánicas y memorísticas, produce en
estos ni os, los mejores resultados. Las actividades que precisan de gran atención o
contacto social, presentan peor pronóstico.

IV - PRINCIPALES DIAGNÓSTICOS (NANDA) E INTERVENCIONES DE


ENFERMERÍA (NIC), ASOCIADOS A TRASTORNOS DE INICIO EN LA INFANCIA

3.1.1 DETERIORO DE LA INTERACCION SOCIAL


5100 Reforzar la socialización
5880 Técnica tranquilizar

6.3.1.1 DÉFICIT DE ACTIVIDADES RECREATIVAS


4430 Terapia de juegos
5360 Terapia de entretenimiento

8.1.1 DEFICITS DE CONOCIMIENTOS


5520 Facilitar el aprendizaje
5620 Ense ar: Habilidades psicomotoras

V - PLANIFICACIÓN DE CUIDADOS DE ENFERMERÍA

3.1.1 DETERIORO DE LA INTERACCION SOCIAL

R/C Déficit de habilidades o conocimientos y dificultades de comunicación

M/P
- Observación de malestar en situaciones sociales
19

- Dificultades para comunicar sentimientos


- Interacciones disfuncionales

Objetivo
Desarrollar una interacción efectiva en las relaciones sociales

Intervenciones sugeridas

5100 Mejora de la socialización (NIC)


Definición:
Facilitar la habilidad de otra persona, para interaccionar con otros

Actividades:
1. Fomentar la mejora del compromiso en relaciones ya establecidas
2. Fomentar la paciencia en desarrollar relaciones
3. Fomentar relaciones con ni os u otras personas que tienen intereses y objetivos
comunes
4. Fomentar actividades sociales y comunitarias
5. Fomentar el compartir problemas comunes con otros
6. Fomentar la honestidad al presentarse a otros
7. Fomentar implicación en intereses totalmente nuevos
8. Fomentar el respeto por los derechos de otros
9. Permitir el poner a prueba los límites interpersonales
10.Dar retroalimentación acerca de la mejora en el cuidado de la apariencia
personal y otros actividades
11.Ayudar al ni o a aumentar su conciencia de zonas fuertes y limitaciones al
comunicarse con los demás
12.Utilizar juegos de rol para practicar las habilidades y técnicas de comunicación
que ha mejorado
13.Proporcionar modelos de rol que expresen ira u otros sentimientos
apropiadamente
14.Pedir y esperar comunicación verbal
15.Dar retroalimentación positiva cuando el ni o se acerque a los demás
16.Fomentar que el ni o cambie de entorno o de actividad si se cansa o aburre
17.Facilitar la participación y planificación del ni o en actividades futuras
18.Fomentar la planificación en grupo peque o para actividades especiales

5880 Técnica Tranquilizar (NIC)


Definición:
Reducir la ansiedad en un enfermo que experimenta distrés (angustia) agudo

Actividades:
1. Coger y confortar al lactante o ni o
2. Mecer al lactante o ni o si es apropiado
3. Hablar suavemente o cantarle al lactante o ni o
4. Ofrecer un chupete al lactante, si es apropiado
5. Mantener contacto visual con el ni o
6. Proporcionar un descanso en la habitación, si es apropiado
20

7. Mantener una actitud intencionadamente tranquila


8. Sentarse y hablar con el ni o
9. Fomentar la respiración lenta y profunda
10.Facilitar la expresión de ira del ni o en forma constructiva
11.Frotar la frente, si es apropiado
12.Eliminar estímulos que crean miedo o ansiedad
13.Identificar personas significativas, cuya presencia pueda ayudar al ni o
14.Tranquilizar al ni o, darle seguridad y protección personal
15.Permanecer con el ni o
16.Utilizar distracción, si es apropiado
17.Ofrecer bebidas o leche caliente
18.Ofrecer frotar la espalda, si es apropiado
19.Ofrecer ba o o ducha caliente
20.Proporcionar medicaciones ansiolíticas, si está prescrito
21.Instruir al ni o en métodos para reducir la ansiedad
22.Instruir a los cuidadores en técnicas a utilizar para calmar a un lactante que llora
(p.ej. hablarle, poner la mano sobre la tripa, sujetar los brazos, cogerlo, abrazarlo y
mecerlo)

Criterios de resultado
Desarrolla unas relaciones sociales que resultan eficaces

6.3.1.1 DÉFICIT DE ACTIVIDADES RECREATIVAS

R/C Insuficientes conocimientos o falta de habilidades

M/P
- Verbalización de aburrimiento
- Inquietud por no tener nada que hacer
- Apatía, desinterés por algunas actividades

Objetivo
Participar en actividades recreativas que le produzcan satisfacción
Intervenciones sugeridas

4430 Terapia por el Juego (NIC)


Definición:
Uso intencionado de juguetes u otro material, para ayudar al ni o a comunicar su
percepción del mundo y ayudarle a dominar el entorno.
Actividades:
1. Proporcionar equipo de juego apropiado al estadío del desarrollo
2. Proporcionar material de juego seguro
3. Proporcionar material que estimule el juego creativo y expresivo
4. Proporcionar material que estimule el juego de rol
5. Proporcionar material que estimule el juego agresivo o regresivo, según sea
apropiado
6. Proporcionar material hospitalario real o simulado, que fomente la expresión de
conocimiento y sentimientos acerca de la hospitalización, tratamiento o enfermedad
21

7. Proporcionar un entorno tranquilo libre de interrupciones


8. Comunicar aceptación de sentimientos, positivos o negativos, expresados a
través del juego
9. Marcar limites para sesión de juego terapeútico
10.Comunicar propósito de la sesión de juego
11.Supervisar sesiones de terapia de juego
12.Discutir las actividades de juego con la familia
13.Fomentar que el ni o comparta sentimientos, conocimientos y percepciones
14.Observar el uso que hace el ni o del material de juego
15.Registrar las observaciones hechas durante la sesión de juego
16.Estructurar la sesión para facilitar el resultado deseado
17.Permitir que el ni o manipule el material de juego
18.Validar los sentimientos del ni o, expresados durante la sesión
19.Comparar los datos recogidos de las observaciones de conducta durante la
sesión, con datos obtenidos del historial
20.Continuar las sesiones de juego en base regular, para establecer confianza y
reducir miedos de materiales o tratamientos poco familiares
21.Determinar las ideas erróneas del ni o a través de comentarios hechos durante
las sesiones de rol hospitalarias
22.Determinar los patrones de interacción familiar a través de juego de rol de mu
ecos, si es apropiado

5360 Terapia de entretenimiento (NIC)


Definición:
Uso premeditado de la recreación para promover relajación y mejora de las
habilidades sociales

Actividades:
1. Ayudar al ni o/familia a identificar deficits en movilidad
2. Ayudar a explorar el significado personal de las actividades recreativas favoritas
3. Supervisar las capacidades físicas y mentales para participar en actividades
recreativas
4. Incluir al ni o en planificación de actividades recreativas
5. Ayudar al ni o a elegir actividades recreativas que estés de acuerdo con sus
capacidades físicas, psicológicas y sociales
6. Ayudar a obtener los recursos necesarios para la actividad recreativa
7. Ayudar al ni o a identificar actividades recreativas significativas
8. Describir los beneficios de la estimulación para una variedad de modalidades
sensoriales
9. Proporcionar material recreativo seguro
10.Observar precauciones de seguridad
11.Supervisar sesiones recreativas, si es apropiado
12.Proporcionar nuevas actividades recreativas que son apropiadas a la edad y
habilidad
13.Proporcionar actividades recreativas dirigidas a reducir la ansiedad
14.Ayudar a obtener transporte para las actividades recreativas
15.Proporcionar refuerzo positivo por la participación en las actividades
22

16.Hacer un seguimiento de la respuesta emocional, física y social a la actividad


recreativa

Criterios de resultado
Expresa satisfacción por las actividades recreativas que realiza

8.1.1 DÉFICIT DE CONOCIMIENTOS

R/C Falta de interés y motivación

M/P
- Seguimiento inexacto de instrucciones
- Realización inexacta de una actividad
- Conductas inapropiadas

Objetivo
Colaborar en las actividades para mantener su salud

Intervenciones sugeridas

5520 Facilitar el aprendizaje (NIC)


Definición:
Promover la habilidad para procesar y comprender información.

Actividades:
1. Empezar la instrucción sólo después de que el ni o demuestre que está dispuesto
a aprender
2. Marcar objetivos mutuos y realistas con el ni o y la familia
3. Identificar objetivos de aprendizaje en términos claramente observables/medibles
4. Ajustar la instrucción al nivel de conocimiento y comprensión del ni o
5. Ajustar el contenido a las habilidades/capacidades: Cognitivas, psicomotoras y/o
afectivas
6. Proporcionar información apropiada al nivel de desarrollo
7. Proporcionar un entorno conducente al aprendizaje
8. Organizar la información en una secuencia lógica
9. Organizar la información de simple a compleja, de conocida a desconocida, o
concreta a abstracta, si es apropiado
10.Diferenciar contenidos “críticos” de contenidos “deseables”
11.Adaptar la información siguiendo el estilo/rutina de vida del ni o
12.Relacionar la información con los deseos/necesidades personales del ni o
13.Proporcionar información consistente con los valores/creencias del ni o
14.Proporcionar información que sea compatible con el locus de control del ni o
15.Asegurar que el material es actual y al día
23

16.Proporcionar materiales educativos que ilustren información importante y/o


compleja
17.Utilizar modalidades de ense anza múltiples, si es apropiado
18.Utilizar lenguaje familiar
19.Definir terminología poco familiar
20.Relacionar contenidos nuevos a conocimientos previos, si es apropiado
21.Presentar la información en forma estimulante
22.Presentar al ni o a otros ni os que hayan pasado experiencias similares
23.Animar la participación activa del ni o
24.Utilizar instrucciones autorreguladas, cuando sea posible
25.Evitar marcar límites de tiempo
26.Proporcionar el tiempo adecuado para dominio del contenido, si es apropiado
27.Mantener las sesiones de ense anza cortas, si es apropiado
28.Simplificar instrucciones, si es apropiado
29.Repetir información importante
30.Proporcionar sugerencias/recordatorios verbales, si es apropiado
31.Proporcionar ayudas a la memoria, si es apropiado
32.Evitar peticiones de pensamiento abstracto, si el ni o puede pensar únicamente
en términos concretos
33.Asegurarse de que se está proporcionando información consistente por parte de
todos los miembros del equipo de salud
34.Utilizar la demostración y repetición, si es apropiado
35.Proporcionar oportunidades para practicar, si es apropiado
36.Proporcionar retroalimentación frecuente, acerca del progreso del aprendizaje
37.Corregir malas interpretaciones de la información, si es apropiado
38.Reforzar conducta, según sea apropiado
39.Proporcionar tiempo para que el ni o pregunte y discuta preocupaciones
40.Responder a las preguntas en forma clara y concisa

5620 Ense ar habilidades psicomotoras (NIC)


Definición:
Preparar a un enfermo para llevar a cabo una habilidad psicomotora

Actividades:
1. Demostrar al ni o la habilidad
2. Dar directrices claras, paso a paso
3. Instruir al ni o para llevar a cabo la habilidad, sólo un paso cada vez
4. Informar al ni o del razonamiento tras llevar a cabo la habilidad en una forma
específica
5. Guiar el cuerpo del ni o para que pueda experimentar las sensaciones físicas que
acompa an los movimientos correctos, si es apropiado
6. Proporcionar información escrita/diagramas, si es apropiado
7. Proporcionar sesiones prácticas (espaciadas para evitar fatiga, pero
suficientemente frecuentes para prevenir el olvido excesivo), si es apropiado
8. Proporcionar tiempo adecuado para el dominio de la tarea
9. Observar que el ni o vuelve a demostrar la habilidad
10.Proporcionar retroalimentación frecuente, sobre lo que están haciendo correcta e
incorrectamente, para que no se formen malos hábitos
24

11.Proporcionar información sobre artilugios disponibles de ayuda, que puedan ser


utilizados para facilitar el llevar a cabo la habilidad requerida, si es apropiado
12.Instruir al ni o en cómo montar, utilizar y mantener los aparatos de ayuda, si es
apropiado
13.Incluir la familia/allegados, si es apropiado

Criterios de resultado
Participa en las actividades que permiten mantener su salud
25

VI - T R A T A M I E N T O S
La prevención en estos casos es la línea terapéutica más indicada, los
avances sobre diagnóstico genético fetal, los actuales progresos en las técnicas de
detección precoz de las anomalías fetales por ecografías o las amniocentésis para
las anomalías metabólicas, son pruebas neonatales específicas, que permiten en
muchos casos detectar y corregir Trastornos del Desarrollo.
La información y consejo prenatales es una práctica corriente en la
actualidad.
Conviene detectar los casos de trastornos del desarrollo con la mayor
precocidad, ya que éste es el único medio que puede garantizar un desarrollo
temprano óptimo.
En muchos casos, el tratamiento de las causas cuando éstas se conocen y
siempre que sea posible, como las dietas especiales para los ni os con
fenilcetonuria, galactosemia o la vacunación preventiva y la antibioterapia adecuada
para las causas infecciosas, serán medidas terapeúticas prácticamente definitivas.
Se habrán de tener en cuenta diferentes aspectos, a la hora de instaurar el
tratamiento una vez detectada la enfermedad , la edad del sujeto, el grado de
trastorno, el nivel de deterioro, la situación familiar y del entorno social.
Resultan especialmente indicados en estos casos, la inclusión del ni o en
programas educativos especiales, que propicien el aprendizaje y faciliten el
desarrollo de todas sus potencialidades, el entrenamiento en habilidades sociales y
de comunicación, los talleres protegidos, que capaciten al joven para una actividad
laboral e integración social acorde con sus posibilidades.
Dado que la influencia ambiental para la mejora de estos trastornos es
significativa, conviene que el entorno social esté muy estructurado. Se debe contar
en todo caso, con un apoyo familiar constante y cuando esta circunstancia no se
produce, o existe abandono familiar o rechazo social, disponer de los medios
asistenciales adecuados, como la existencia de familias sustitutas o pisos
protegidos, donde sea posible la formación de hogares en grupo. Medidas que,
siempre que sean factibles y necesarias, resultarán de elección, ya que son una
solución más adecuada y aceptable para prevenir el deterioro, que el internamiento
en instituciones cerradas.
Las medidas terapeúticas más habituales, utilizan diferentes enfoques, la
inserción escolar y social, la ludoterapia, la estimulación precoz, el contacto
corporal, diferentes métodos de psicoterapia, los psicofármacos, la musicoterapia,
las técnicas de modificación de conducta etc... Si bien en todos los casos, se
requiere de una estrecha cooperación entre padres y profesionales.
Los ni os que presentan alteraciones motoras asociadas, requieren a menudo
de fisioterapia rehabilitadora, aparatos ortopédicos o incluso cirugía correctora si las
lesiones son permanentes y muy incapacitantes.
Para el autismo infantil, de manera específica, se han ensayado múltiples
métodos terapeúticos y se puede decir que en realidad con escasos resultados. La
psicoterapia individual y conjuntamente con la madre, el condicionamiento operante,
la estimulación sensorial, la administración de vitaminas en cantidades masivas, los
métodos de modificación de conducta, las técnicas aversivas, etc...
La educación especial, de forma primordial y en último extremo, la
institucionalización, bien en unidades de día o centros especiales, suelen ser los
recursos terapeúticos más utilizados.
Finalmente decir que los esfuerzos dedicados a la asistencia y tratamiento
son necesariamente prolongados.
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En cuanto a la psicofarmacología, cabe advertir que se utiliza principalmente


con finalidad sintomática, es decir para mejorar los trastornos de conducta u otros
síntomas asociados, los fármacos más habitualmente prescritos son:
- Ansiolíticos
Utilizados ocasionalmente y a dosis adecuadas, que no produzcan excesiva
sedación, ni otros efectos indeseables, pueden propiciar la instauración de otros
tipos de terapias y sobre todo, ayudar al ni o en su integración progresiva a los
programas de educación especial, favoreciendo su mejor adaptación y tolerancia a
las situaciones de tensión o cambio.
- Neurolépticos
Principalmente se utilizan como sustancias sedativas, para los casos que
presentan importantes trastornos de conducta, como inquietud psicomotriz,
episodios de irritabilidad o crisis de agresividad.
Siempre que se utilicen, deberan tenerse en cuenta los posibles efectos
secundarios, tanto para ajustar las dosis como para evaluar la necesidad de a adir al
tratamiento la medicación preventiva de los mismos.
- Estimulantes del tipo de la anfetamina
Poseen lo que se denomina acción paradójica, ya que en ni os que presentan
graves trastornos de conducta como hiperactividad o inquietud psicomotriz,
producen un importante efecto sedativo y regulador del comportamiento.
Por el contrario, en estos casos, los barbitúricos, producen mayor irritabilidad,
aumentan la inquietud y la tensión agravandose las manifestaciones del trastorno
conductual, por lo que están contraindicados.
Si bien la utilidad de los psicofármacos como tratamiento sintomático, es
indudable, su eficacia como tratamiento etiológico es muy discutible y no se deben
crear falsas expectativas a la familia en este sentido.
Los psicofármacos deben ser utilizados como una parte del programa
terapeútico general, combinándolos con las diferentes medidas terapeúticas
posibles, ya que permiten una mejor respuesta al tratamiento y por tanto se lograrán
los más óptimos resultados.

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