Tarea 10: Oráculo de Plantas.

¿Y ahora que tengo mi mazo qué?

Es posible que hayas a esta altura diseñado gran parte
o todo tu oráculo, lleva dedicación y tiempo, dibujar (si
es que elegiste el formato cartas), tallar (si escogiste
madera), etc, pero realmente el esfuerzo da sus frutos
y tendremos una guía oracular de por vida.

Ya hemos hablado de la cuestión más energética del

trabajo con las hierbas, les he estado pasando
ejercicios de meditación, respiración, etc que pueden
aplicarlos a la hora de abrir las consultas para otras
personas.
Ahora bien, pasemos a la parte más práctica.
¿Cómo trabajo con el oráculo?
Al adquirir un oráculo vamos a ver que cada uno viene
con un librito, donde se especifican las características
del elemento que se utiliza como guía del mismo. En
este caso, nuestro librito, va a contarle a la persona lo
que la hierba que escogió trae a su vida.
¿Cómo le insto a la persona a elegir las cartas,
piedritas, runas, etc?
Este es otro ítem que vamos a encontrar en los
manuales de oráculos. Cada oráculo, por lo general,
contiene sus tiradas propias. Las modalidades de las
tiradas sirven para definir la forma en la que el objeto
oracular será dispuesto, establecen un orden y un
sentido.
La tirada más común, aunque cuestionable y sujeta a
reinterpretaciones, es la de “Pasado, presente y futuro”
donde la persona elige tres cartas, cada una
representando lo antedicho. En esta tirada se intenta
trazar una línea gruesa del proceso que la persona está
vivenciando, posiblemente localizar sus causas en el
pasado, o la energía que las genera, la sensación o
postura actual presente del/la consultante respecto a
esta situación y su evolución, y por último, sellado en el
futuro, posibles desenlaces o aprendizajes que dejará la
vivencia que se representa en la carta del presente.
Las cartas u objeto oracular en cuestión, tienden a
representar energías arquetípicas, situaciones y
conductas que tod@s a las que tod@s podemos
acceder o se nos proponen universalmente como parte
de una vivencia de la existencia. Por ejemplo, en lo que
es el tarot, que es bastante universal y en cada mazo
solo suele tener algunas variantes sin salirse de la
estructura arquetípica general, encontramos el arcano
“ermitaño” que pone de manifiesto estas situaciones
donde es necesario un repliegue para ir en búsqueda de
una verdad más profunda, algo que solamente
podemos atravesar desde la soledad.
Ahora bien, en muchas ocasiones, las personas que
gestionan los oráculos suelen elegir una dinámica
particular que es la de positivo-negativo. Esto hace
referencia a que, dependiendo de la forma que saques
la carta o el símbolo (al derecho o al revés) el mensaje
se verá alterado, sigamos con el ejemplo del
“ermitaño”.

En este caso, tenemos la misma carta, una está al

derecho y otra al revés. La interpretación que se suele
adjudicar al sacar la carta al revés es que la energía
que propone el arcano en cuestión se encuentra
distorsionada o mal encausada. Por ejemplo, en el caso
del ermitaño al revés, se puede interpretar que la
persona no está sabiendo estar sola o no puede
disfrutar de la soledad, que le teme... o en un caso
extremo, que no puede salir de un proceso de soledad,
aislamiento y sensación de estar sol@ en su mundo. Yo
intento ver esto, un poco más allá de la distorsión y
poner el eje en el aprendizaje. Una energía oracular a
la inversa, simboliza a mi entender, según los años de
prácticas oraculares, un aprendizaje mayor, cosa que,
en las cartas al derecho, no sucede. Por lo que una
carta a la inversa, me parece sumamente provechosa
para la persona que la escoge.
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Toda esta información la voy escribiendo para que
intenten dilucidar el misterio de cómo trabajar de
forma práctica con sus oráculos de plantas.
Cada hierba propone también, una energía y un
proceso particular. Una planta a la inversa puede
significar que hay que prestar más atención a ella y a
su propiedad energética/medicinal.
Así como existe la tirada de tres cartas, hay quienes
usan los oráculos solamente para sacar mensajes
diarios, es decir, se concentran en cómo se encuentran
ese día integralmente y escogen el objeto oracular, el
mismo les otorga la respuesta a la vivencia que
atravesarán ese día o cuál es la mejor forma de
sobrellevarlo.
Podés diseñar la forma de tirada que quieras, en un
oráculo Celta que tengo, una de las tiradas sugeridas es
en cruz. Cada carta se acomoda de una forma
específica. A continuación, les dejo un ejemplo.
En este caso es una especie de cruz por la simbología
celta, se me ocurre, pueden realizar el ejercicio de viaje
de tambor para pedirle a las hierbas de sus oráculos
que les sugieran una forma esquemática pasa sus
tiradas que tenga relación con la suma de las energías
de todas ellas y la suya, que será un canal para sus
expresiones.

Bien, cada carta va a simbolizar algo, por ejemplo: La

carta número uno podría poner de manifiesto la
situación actual del/la consultante, la carta número
dos, la actitud de la persona ante esa situación, la 3 las
influencias externas, la cuatro el deseo, etc.

Diviértanse creando el esquema de tirada más

apropiado a la energía de su oráculo personal.

¿Cómo elijo las cartas?

Hablo de cartas porque suelen representar la
hegemonía de los oráculos, pero hablar de cartas
quiero que se entienda que estoy hablando de
cualquier objeto que hayan elegido para oracular.
Antes de la sesión de consulta, se suelen hacer algunas
respiraciones, intentar que la persona ya sea un@
mism@ o un otr@ esté cómoda y en, al menos, una
leve confianza. Los elementos que rodearán la
situación de la consulta son muy personales, hay
quienes encienden sahúmos, otras velas o disponen de
cierta manera los muebles del lugar, eso es a gusto y a
resonancia propia.
Lo que se estila, es contarle la generalidad del
propósito de la tirada a la persona u ofrecerle varias
modalidades y que el/la consultante pueda elegir el
esquema de la misma según sus inquietudes. Una vez
que esto está claro, la persona que va a recibir los
mensajes, cierra los ojos y se concentra en ese primer
ítem. Por ejemplo, si estamos trabajando con la tirada
de tres cartas (pasado, presente y futuro) aquella
deberá poner su atención en ello, posteriormente, con
los ojos abiertos o aún cerrados, pasar la mano sobre
las cartas (o revolver la bolsita de piedritas)
suavemente con la intención de detectar alguna
anomalía perceptual que indique que se está ante la
carta indicada.

Anterior a esto, para que la persona que consulta se

sienta más cómoda con la energía de nuestro oráculo,
podemos hacer que nos ayude a cortar el mazo luego
de haberlo mezclado unas cuantas veces, allí es donde
las energías se intercambian y programan.

Uno a uno, le vamos dando los mensajes y aquí

elegirán si las meditaciones que acompañan a las
hierbas se las harán practicar en el momento o se las
sugerirán para trabajar en casa.

Espero que les haya sido clarificante, en la próxima

tarea hablaremos de cómo consagrar y limpiar la
energía del oráculo.