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Noras Históncas y Geogr'áficas.

Nos -§-6

AMERICA IATINA TJN DESAFIO


DEt §IGLO )§([.
ALESSANDRO MONTEVERDE SANCHEZ
Unive¡sidad cle Plava Ancha

Dentro cle los ciesafíos del siglo XXI, que debemos plantcarnos los
:abitantes de América Latina, encontramos la irnperiosa necesiclacl de
::solver problernas básicos, como son los síguientes: ¿Qrré políticrs
)ociíries, económicas, aCministrativas, culturaies, debernos adoptirr,
-cmplementar. definir,...? ¿Qué actitud clebemos tenerr frenie a la
:obtez,a, al racismo. a la decadencia, al terrorismo ,v- a la traición...?
.'lómo cofi)portarnos frente a la juventud, \a drogacliccrón, la
r:líncuencia...? Estas preguntas no son ajenas a la preocupación dc toda
- ersona que l-iabita, y trabaia diariamente en cada país de nlrestro
. -rntinente.
La clrferencia radica en la forma de encarar y cnfrentar los
:.con\¡enientes que cacla nación tiene y cómo ésta usa sus inst¡r-rn'tentos
- -ira resolrrer cada uno de esos problernas. No todos piensan Io mrsuo
menos aún, llegan a soluciones parecidas. Los criterios rle gravedad-
:: los problemas- dependen ciel interés, cie la actitud y-por qtré no
-:cirlo-, no tanto de 1a legaliclad r.,igente, sino de la preclisposit--rón cie
.rscar soluciones, para saivar inconvenientes y mcjorar la situitción
-,perante en cada una de las naciones.
Pero cabe hacer notar que, a pesar de las estructuras políticas,
¡iales y económicas que cada país tiene; formas, modos y tríItantie ntos
,.srintos de encontrar soluciones, salvar o cambiar actítucles, v entre
. .:s la que \¡amos abordar, está la Originaiidad, fornta o el nrodo cle ser
.::ginal, sin repetir o imitar. Siendo y mantenienclo inalterable sr-rs
:rceptos básicos, únicos, indivisibles e irrepetibles.
Si analizamos el rrocablo Original encontramos que es "aplicado a
.-::sonas o cosas de la vida real, singular, extraño, contrario a 1o
-,¡stumbrado, general o común,,1 o también "dícese igualtnente cle lo

I :ccionario de la Lengua Española Real Academia Española. Vigésima prirnerx edición. Españe
'i))

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que en letra y arte no denota e.studio de imit:rción, -v se clistingue clc lt'


r..ulgar o conocicio por cierto carácter 11e novedad fn¡to cle ia ':reaci<-tr,
espontánea." Y entonces la Originalidad resulta ser "cualiciad cle original
Actitud, cornportamiento o acción originales, F)oco c()rrie nies. -
Apiicando, io antes señalado podenros mencionar que ia originalidacl er.
Arnérica Latina la encontramos en 1a asimilación de ios valores. ,v nrás
¿rún, en tcdo aqilei tra-spasa cultural que entanó desrie ia mctrí>poiis
ibera.
Encontranlos origin;rlidad en la fbrrna de aceptar. apreciar l'ntotlificar
aiterar nuestras ccrsiu mbres.
Originalidad en ei cómo hemos ido captando, Iomando, moclif icandc,
mezclando, v habiando el idioma qLle nos impi-rsieron los descubriclore.
y conquistadores españoies. El Castellano, gue se ha l]tantcnidrJ s1:'.
r,:rrizrcione:s, sin grancies diferencias locales ni regionales, en Améric-.
Latina no ha si<lo motivo y menos ha provocado divisjones al intcriol d¡
un nismo pzrís, como se ha produciclo en otrrs partes: por (ienlplo el prÍ,
\/asco, y España...
Por otra parte, relacionado con los aspectos geográficos, podernc.
señalar, que estos solamente nos dividen, sino que aclernás nc.,-
proporcionan propios, únicos v auténticos qLle, más qr-re SepílmrnoS, rrc:
unen. Nos separan en 1o general, pero en 1o particular nos uncn.
Algunos autores señalan que la Llnidad de América Latinl se origu .

cle l¿r acción civilizadora realtzadapor España. Esta nos habría "i-rnificaci,:
r¡n muchos aspectos. Y que la unidad proviene de ia civilizacic:'
-occidental europeizante-, señalando corno uno de los cjemplc,
característicos, aquel qlre -se clesprende de los rasgos cLrilurel.,
econón-licos irnpuestos a partir del mercantilismo y del neomercantilisnt,
;\hora, otro aspecto significativo, de lo geográfico es que n.-
permite volvernos hacia afuera más que hacia adentro,.v no es pore-,:
sólo lo geográfico nos obliga. sino porque, producto del sisten-.
n-ietropolitano colonial, nos impusieron ser abiertamente .hacia afr-rer,.
y mínimamente "hacia adentro,, fenómeno que se repite en la épo.-
colonial hasta nuestros días.
También hablamos de originaiidad cuando venlos en nuestra socieci..
valores que han sido trspasados clesde épocas y rnomentos lnnlemori:ti. a1.

C
2 Diccionario de la Lengua Española Real Academia Española. Vigésima primera eclición. Esp
199 2.
ciei pasado-más distante-, como cle aquelra época más cercurn:i o
presente.
Las influencias tanto nativas colrlo europeas que se van conftrncliend6
\¡ empapanco en nuestra forma cie ser, acto,¿f y pensar, que muchas
veces vemos ntr-rltiplicadas en los diferentes países cle América Laiinzl.
También encontramos, estas formas de actuar. en rcgione-c nlllv
inarcadas de España. Aigunas de ellas son: contemplar, observar, h:rblar
con complacencizi y quictud: son actitudes qrie hemos zrclquiriclo en el
transcurso del riempo. Nos hemos impregnado de barbarismo y civiliclaci,
de ielurisnlo y materiahsmo, de animismo y catolicismo-cristiani._"mo,
iuteranisnro, evangelismo,... -de pureza y sobrieciad, de cobre -y irierro
v carbón...Pero ambos se han compenetrado en nriestro ser con- r,ive
1,
vive, dejando lia -ser- a cada uno de ellos sin irnpedir por nacla y naclie,
no zrciuar, dentro del Iibre espacio soñado por los occiclenrales que aquí
en América Latine es realidad,no es utopía, es verdad visión y espacio
v pasión.
Lo exterior se plasma en 1a visión de lo humano. provecta paslon
clivina, se percibe el Paraíso palpable, tangibie, real a la piel, sentir y
al placer.
Nace haciendo realidad, la imaginación de los hecl-ios cotidi.,rnos,
que una vez prestó de su inocencia y que en esta fecuncla tierra puede
germinar dobleganclo las trabas cle la enemistad, sobrepasanclo lo
iclílico. Se concretiza en valles sagrados, quiméricos, oníricos Iograclos
luego r1e gruesos errores- batallas, luchas, guerras- pero qlre
generosamente luego de sanar por la cura dei tiernpo, rrendrán a
representar su esencia de lo natural y de 1o que no se pr-recle erracliczlr
nlrnca janiás. se ha apegado a nuestra y también a la epidernis r-ucstre;
..!
rfri r la piel mesriza, cobriza, negruzca...

if, Ilemos aclquirido para -sí- nosotros lo mejor de un pasado épico;


ill
'r$l raliente, libre y contemplativo; tai vez es el carácter o quizás sea nuestra
ldiosincracia.
rl Sin embargo, hay algunos elementos que hemos perdiclos y otros
t.
que no los hemos podido -voluntaria o involuntariamente asimilar.
Somos por cierto, el resultado de centenares de ideas, apreciacrones.
diálogos y observ'aciones. ¿Quiénes más que nosotros hemos tornaclo cic
toclo el mundo aspectos y defectos?
TaI vez para bien o para mal, es así la realidad. pero reafirmamos NO
sorrlos un canlpo de prueba, ni ntenos un laboratorio, ni una prr-;liet:t
En cambio, -sí -contos el sueño, anheio ciei pasado v dei f,.tiuro
Estamos presente en cacia plan, ployecto, modelo, form:I, causÍ-i . res'.iitedr,
cle quienes piensan -sr-ieñan- de -nuevo- ccnquisiar o re -octlpar ntlestrl-
,suelo promisotio. No es pcii nada qlle nuestro idiorna. lan antictirtio, titr:
criticado, lnaltratado, ltumillado. ¿rtrasado, impernte:rble, -ert s1i.
estructllra,s- se está conviriiendo, en un iclioma itnportanie e inflr.rYentt
cn la tierla.
Y no por ser sóio ntiiiones los que lo habiamos. Sino por(llle itentcr.
clemostrado con creces que a pesar de no e'r,olucionar ccn l()s iienlpos
como lra siicedido en ia península lbérica, Io hemos enriquecicio ccr.
nruc}iísimas paiabras autóctonas de los habitantes, cie los AnCes, cie i-"
Sierra, de la Costa, de ia Selva...
A pesar de que no nos entiendan con nuestro hablar cantaditc
crirtacio. chillón. duizón. tropicai, eso nos hace diferentcs. , c¡r-tienc'
impusieron el icliorna, a cluiene-s 1o exponen en forma acaclét'nica desci.
las aulas altirras, lejanas y postreras.
Nuestro sello también pasa por allí, está presente en lnttcha..
aigunas, tocias- ias manifestaciones artísticas daclas, regalad:rs o en.señacl::,
clesde o hacia nosotros. Pero no descartamos la posibilidad <1c cleja rn, -
influir. por ios verbos apaciLries y cuerdos. No poclernos cles -oir.,.
pa.sado -cercáno- presenle- aquí y allá ahora y ayer qrle nos dejó r"rr-..
mrrca duradera e inr.isible. tenue in- borrable de1 ser o no ser uniclc,
nllestro propósito, sin que se2rnros actores y público de nuestro fr-rtur'.
apiauso, silbiclo, seña, molh, ira, pasión.
Sin ernbargo, reconocemos baiiar a ritmos A- veces, sin teclrr-n( l
rllrestro sentir, pero que nos deja una impresión, válida y aceriada p'-i:
el entendimiento y la in- comprensión <1e Io aberrante del peligrc .
perclemos nuestros lalores, contradicciones, contradicciont-.
personaliclad, regionalidad, antagonisnlo, separación; sin qr-re toclo .
anterior signifique en un flromento dado ruptrtra, quiebre, 'Jspereza-(.
divisiones.
que nosotros sorrlos cliferentes, dentro de un mundo tll1et?z21ol:
Es
pero esa diférencia más que des-unirnos, nos une en armonía. cornunir :'
pasión, y realidad. Somos todos distintos, únicos, en L¡n paisaie rutilan::
pa,radíaco, brillante, que nos proteje y esconde. Con 1o cual el zriller2Zur-. :
tarde y más temprano que tarde se une a este espesor fecunclc¡ de bellc:

l0?
v se con\¡ierte en uno y se oh,ida se humamiza en fornia r)atural, al iuodo
del nativo- del homltre nacido,/vivo naturai, bueno malo-niño- itonrbre,/
mu jer.

No existen barreras al pensamiento ní a la creación llumana en


.A.niérica Letina. Tocio se \¡e como está donde va. Lo enterlazante pasx
como las nubes; lo nuevo es permanente. introduce en el tiempo sin n'iá.s
que lieganao y parándose allí, doncle se depositó. Se transfbrma en
lonna rnás qtre en objeto. Deja su inmateriaiidaci y adqriierc alma, no
¡ercr'De io idr:al pero se las arregla para proponer camino.s nue\-()s
'jifícrles, pedregoscts, zigzagueanies, cilrvos y contradictc)tios. Lo cierto
:e opone a lo corrtraric. No vcmos lo verdadero, ¿lpltntemos al cálculo
:elestlal -ancestral- confiamos en el buen sentido del olfato,,, ia tinczr .,
. ia pereza.Aprendemos que lcs mejores caminos son los curvos, colt-Io
-:eación rotula¡ de unión y protección. Hemos sido presentac'los para no
-rgnifrcar nucho a quienes ni nos quieren recibir; pero de a poco vamos
.:nponiéndonos, y ya nos cuesta cadavez más creer-les-a :lquellos que
-.cs-dicen vengan y caminen así. Hemos salidos de períoclos/etapas
.:rrgados,/condecorados de eslabones de hierro, que aunque peseban no
::ar.itaron, pero si se rompieron y se transformaron en lo-s cnemigos de
=,
enemigos.
Somos nuevos frente a mundos viejos, gastaclos, añejos, y perfbrados
-,r: pasiones, envidias y odios. Nuestras quejas son menores )¡ nlresiro
:'..r'enir es máyor.
Desafiamos la gravedad y la relatividad. XIo \¡emos el pehgro en Io
.:-'.rario, si esto se abre al revés y nos deja salir entrando cle espalda a
- ..'erdaderanente-occidentai-real, cierto y claro. Logr;rmos nuestro
:::pósito si 1o creemos, lo pensamos, 1o escribimos.
Nc¡s hemos ganado un puesto en la Humaniclacl y clel,remo.s
-:,:fundizarlo en cada paso que demos. Original-originaliclad-crear-
-:ando, rasgos únicos e invariables de pueblos nllevos, emenos,
:-contaminados. Fuera de letargos venidos de ambiciones uñosrs,
::icundas, sordas, y peresozas.
Paisajes célebres, paisajes desamparados, visiones desespemdas.
.,-fombras de terciopelo de color t:erray lana de alpaca, llzrma, r,icuña,
-ranaco. Que son fieies testigos de grandezas monurnentalcs sin-
:-:aginable-parangón. Alegres testigos de ia armonía natur:rl, ciel pas:rclo
:,oz clel cambio, de la apertura general ), el arrepentinriento único y

?c) 1
r

exclusivo de unos cuantos que iloraron al cotnpás cie un culrrúrm bajo


ia sombra de un canelo e} largo crecer.
Ha-cer cle nuestra tierra la llegacla de los fines coricebi<,-ios clentro clc
las palabras anunciadas. no es cosa muy fácil, ni asunto que prreclzi
aceptarse, ni perder rasgos colrunes de presencra...
Es decir, aceptando pero dr:izindc en ciaro que lo entertor csti
formaCo v es lo primordral 1'lo prii:te¡¿r, y 1o que se a-nida-a-i-torit, es
po.sterlor a lo segundo, como algo obsen able; pensárrclose. eniLriciánclost.
',t ta7 vez aceptándose. No oecando de ilusos, cotrlo si no intbiel'eillos
tcnido tiempo -ni- reiojes-p2¡¡i-vet testimonios, con lo que nos ílcus:ri
y nos sofocan en el hoy de América tuttina.
Taive'z la cxperiencia no nos enseñe nada, al vez e1 pasado no re iicj.,
lo que somos. Pero hoy día percibimos que estamos-no por lo rttaterial... -
por rrrÍba de los tauros. leones, tigres, y otros, sino r:t:e. rlirrt'ctnlos c.
horizonte con una brecha esperanzadora, plasmada en la neccsicjad de
la ar:eptación, comprensión y de la inteligencia. No de Ia incornprensiór
y de la intransingencia.
Somos tierra, agua y pureza. Creación, verdad y forma. C.alartlc¡:
profundo hacia e1 contorno del perfil cobrizo, platero, auclaz, alegre. Nc
teriemos prisa, ni anhelamos tiempo robado de las máquines. para r.-
hacer-se-nuestres metas y valias. Vamos deslizándonos fue rtes v calmos
ági1es y ásperos, secos, fríos, cálidos, y irúmedos. Podemos tnostrar l-.
inultivariedad a nuestros semejantes.
Hent,c¡s sirlo, sctmos .y serentos.
Rec o.f irnr.ts, tiramos .y arroi aruos.
Nos aleiamos, uótmo:; .y- eslórmos.

Creemos que nuestro a-porte-a 1o aciual- en su contexto, es claro'.'


confuso, lejano, pero está-aquí-acá-aliá-presente donde lo busquien.
Somos verdad/real/mctralipiedad, dentro de un bosque espesc
verde y con una fuerte luz de salida que señala caminos, vías, senda.
continuas, rotas, e inadecuaclas.
Las opiniones deben -y - debemos dejar -las- a los que r-ienen.
tomarias, como así nosotros sabemos qué hacer. Lo confuso es 1o qr-r.
nosotros sabemos. Lo afirmativo y seguro es lo que nos quiercn inrpon.-
y que al parecer ha fracasado y a pesar de todo 1o expuesto, 1o expresr:
y presentzn.

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vr

Pero lo confuso para nosotros rro es lo que tiene de enreclaclo o


inteligibie. Sino 1o experimental dentro de nuestras socieclades.
Variedad, alternativa, irracionalidad, propio, uniciacl. des -orden. T'al
\,ez a la r.ista de ios cie afuera -extÍa muros-no latilrcl¿rnrcrrctnJ,
incomprc-nsii:ie y confuso.
Pero la temática ciudadana, campesina, obrera. hogareñir. costcra,
corciillerana, se presenta de este modo. Blanca, pura \¡ rel.rreita, -
antotadiza-caprichosa-irracible-altanera- de frente a 1os hontbrcs y a
todos ellos.
¡Confusos ,:;í, no,s ilirmaron, ,v nos llaman! Nosotros rcsponrlemo*";
forma parte de nuestro tan largo modo de presentarnos. originales -
ú nico.s-y-solos.

Difícilrrrente nos hemos preparado dentro cle las fonlas más


ortodcxas, acadé¡nicas, intelectuales o de otro tipo, para querer ser
como somos.
Pero nue.stro propósito no es confundir, ni desordcnar ios esqlleiltas
irrrpuestos. Sino que mostrarnos tal -o quízás- tratanclo de que nos
xcepten así como sonros. No necesitamos seguir profundizancio nuestro
saber en base a esquemas antiguos- aunque váiidos y no por eso únicos-
sin hasta ahora anteponer, nuestros valiosos, apreciados y probaclos
( onocimientos de nosolros misrnos.

De esto último, parte el todo y el resto de nuestro pensar-ser original.


Ratificandc qlle somo-§ parte y no formamos alguna parte de rilgo. Hemos
superaclo nuestro horizonte )/ esramos en la certeza y segllriclad cle
manifestar proposiciones, ideas, anheios. creencias, i., clesignros,
paradigmas,.. .

Superación más superarnos, nos llerra a lograr en nosotr()s nlisllos,


la consoiiclación de una forma de vida, nrreva. Nueva, bella. hernrose y
de nrucho que entregar aún. Plena de sabiduria,alegría,, Llaile, r'erdacl v
claridad.
Toclo se plasma en la comprensión de un pasado rcgr-rlado-filtraclor'
colado- dentro de la experiencia, la alquimia y la bondad. Lo rnejor
sobrepasa Ia prueba, io regular y lo malo se olvida.
Superadas estas fónnulas -qué no son las únicas- surgen originalnrente,
los mecanismos propios de nosotros hombres mundos con la r.isión
arnplia de enfientar a los más y más, fuertes y débiles -enemigos feroces-
de un mundo c]^ue permanenternente nos exige,nos acos¿1; \i xhora l.
demostramos con las pruebas. qrle permanentemenie nos li:ln exigido
Somos originales en todo lo porque así lo sentimo:
gr,re hacemos.
1<l l,emos, lo palpitamos, lo oímos. Con ello tampoco terminl nuestr,
quc ser, sí comielrza.
Dentro de una visión, c1e un¿r nueva perspectiva, cie r-rn nLrevi
cle.safío...

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