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Discurso de Motivación Reflexiva N° 117

LIMA, LIMEÑOS Y LIMEÑISMO

Por Reynaldo Charres Vargas

Señoras y Señores:

No podría guardar silencio ni expresar mi tristeza al saber que más de

185,000 peruanos hayan muerto por la pandemia Covid, ocurridos por
negligencia y las equivocadas medidas del gobierno de turno, en alianza con
los medios de información limeños que sembraron miedo y terror en la
población. En adelante, tiene que haber una comisión de investigación para
conocer la verdad, y sancionar a los responsables para que no vuelvan a
ocurrir.

2 Soy peruano nacido en los Andes, conozco bien la capital peruana, así como
la mayoría de provincias peruanas, tengo amigos limeños, y con esas
credenciales hoy escribo este discurso reflexivo dedicado a la gran capital
peruana Lima, a los limeños y al limeñismo, y lo hago con un sentido
constructivo para que las relaciones entre los pueblos peruanos sean
unitarios y fortalecidos pues así lo demanda la grandiosidad del Perú.

La campaña electoral atípica, con pandemia Covid y una feroz guerra sucia,
que hemos vivido y que acabará con la designación de un nuevo presidente
que gobernará por cinco años sucesivos, hoy me motivan a dar una mirada
rápida a la ciudad capital Lima y a sus habitantes. No hay duda que Lima es el
centro de las decisiones gubernamentales y de la vida empresarial y
financiera en el Perú, y el centralismo asfixiante es un factor que la
caracteriza desde la post colonia.

Esta enorme ciudad, en el pasado fue cuna de la colonización y el virreinato

español, y allí se instaló la primera burguesía mejor dicho una clase social
oligárquica quizás la más egoísta, racista y sumisa a los modelos de la vieja
 España. Francisco Pizarro y sus huestes invasoras establecieron sus leyes, así
como los modos y pensamientos anti nacionalistas, ya que despreciaban a
los nativos a quienes los trataban como indígenas, y nunca como pobladores
originarios o autóctonos.

Ese espíritu oligárquico de una minoría que desprecia y maltrata a las

poblaciones mayoritarias oriundas se ha extendido a lo largo de vida
republicana y aún pervive pero cada vez más debilitada por la misma fuerza
del empuje y valentía de las poblaciones nativas que siguen defendiendo sus
raíces, su propiedad y el derecho natural a vivir y convivir en su tierra con
respeto, autonomía, libertad y progreso.

A pesar del tiempo pasado, Lima, sigue siendo una ciudad autoritaria
compleja y acomplejada, poseedora de una idiosincrasia confusa por la
mezclas de razas y culturas foráneas, es decir por migrantes que no logran
identificación comunitaria. En Lima estaba el centro del poder republicano
3 copado por inmigrantes y luego por sus descendientes, y así alcanzó a ser el
núcleo del poder político, económico, social, comercial y cultural del país, y
su éxito se basó en políticas de expoliación, mejor dicho en modos y
procedimientos de apropiación forzada y legalizada del territorio y de sus
riquezas naturales. De esa manera se perpetuaron la ambición y el despojo
de los derechos naturales de las poblaciones originarias.

Lima es una geografía costeña dentro una campiña asentada en la cuenca

del río Rímac, y como valle era agrícola. Ahora se ha urbanizado con la
proliferación de viviendas, industrias grandes, medianas y pequeñas de
ensamblaje y transformación manufacturera, del comercio y la prestación de
servicios; ellos son las fuentes de su sobrevivencia. La provisión alimentaria
principal de los limeños proviene del mar, las tierras productivas de las
regiones, provincias, distritos y comunidades del país, y recientemente con
productos fabricados artificialmente.

En efecto, y a lo largo de la vida republicana el poder político y económico

estaba en pocas manos (oligarquía) que crearon una infraestructura jurídica
para facilitar una apropiación sectaria, fácil, rápida y despiadada en
 desmedro de las poblaciones nativas, que nunca supieron lo que estaba
ocurriendo en su país. Ese pensamiento oligárquico y de acción colonizadora
con despojo y remates de los recursos naturales para bien de clases
privilegiadas hizo posible que Lima y los limeños subsistan como ciudad
capital. Por eso hoy, siguen pensando, hablando y defendiendo las ventas de
materias primas, las exportaciones, el libre mercado, el entreguismo vía
concesiones, tratados con privilegios, así como la aceptación de bienes e
insumos importados sin mayores controles.

Los limeños dominantes tienen cerebros encasillados en paradigmas

foráneos que les impide pensar en otras alternativas propias de desarrollo
nacional. La dependencia es parte de su estructura genética orgánica, mental
y espiritual, por eso los grupos y familias acostumbradas a los privilegios se
oponen a cualquier postura de cambio, independencia y justicia social.

Hoy, año 2021, Lima es figurativamente un monstruo devorador

4 transformado en un aparato maltratador y egoísta, con operadores que no
comprenden otras realidades del país, y lo peor desconocen los valores de las
herencias milenarias, como: sabiduría popular, unión, fraternidad,
solidaridad, cooperación y honestidad. En el interior de su psicología hay un
extremismo y radicalismo soterrado que no permite el desarrollo ni el
progreso de otras ciudades.

Esta lógica perversa impide la prosperidad horizontal del país, y los

gobernantes y legisladores de turno se convierten en operadores y serviles
de grupos y familias privilegiadas, por tanto gobiernan en función de
intereses particulares, olvidando y traicionando a la población mayoritaria.
De hecho se ejerce un peculiar modelo de dictadura civil-militar-prensa con
una careta de democracia, por eso cualquier decisión gubernamental va
acompañada de las fuerzas armadas. Lo hemos visto en la reciente pandemia
Covid cuando el gobernante de turno dictamina un confinamiento obligatorio
con el apoyo de tanques, soldados, policías y licenciados, y nominó
comandos Covid integrado por generales, y no con profesionales de la
medicina, y desde luego en alianza con los medios informativos previos pagos
 publicitarios para sembrar amenazas, miedo y terror además de detenciones,
imposición de multas y acusaciones de sedición o terrorismo a ciudadanos
indignados que protestan.

Los limeños de la vieja clase política y económica aún están ilusionados en

seguir cultivando aquellos modos colonialistas de sojuzgamiento y de
humillación de las poblaciones originarias distribuidas en 24 regiones del
extenso territorio peruano. Felizmente y para la alegría de esta grandiosa
nación se vislumbra un renacer peruanista, y ya las nuevas generaciones de
mujeres y hombres van tomando conciencia real sobre los daños, las
falencias, los olvidos, las imposiciones de los malos gobiernos que juegan
sucio en desmedro del progreso natural, equitativo y justo de la patria.

En la actualidad, la defensa civil-comunitaria del territorio peruano, es una

necesidad para el desarrollo y la prosperidad de cara al futuro. Las reglas de
juego deben cambiarse para superar la miseria generalizada. Las poblaciones
5 originarias van creciendo grandemente, ahora son más de 28 millones de
habitantes, descontando a la mínima clase de privilegiados, y ellos ya asumen
el deber de recuperar el país para los peruanos y por los peruanos. La
peruanidad y el ser peruanista van en aumento todos los años, pues poco a
poco crece la identificación con las propiedades ancestrales, con los valores
comunitarios, con la cultura de la prosperidad, con las grandezas de la
sabiduría popular y con la libertad de decidir su destino. Perú a diferencia de
otras naciones, vecinas y de otros continentes, es una patria auténtica, noble,
con historia, con valores y con habilidades milenarias y no necesita copiar ni
imitar a nadie.

Frente a los desafíos del futuro crecen los movimientos regionales de

reivindicación, por tanto Lima y los limeños, están obligados a superar sus
traumas y herencias colonialistas y oligárquicas; eso pasa por fortalecer sus
conocimientos sobre el Perú, que hoy la no la tienen. Pues siguen viviendo
encerrados en cuatro paredes de sus edificios y playas, haciendo
elucubraciones y fantasías frívolas en su zona de confort, algo similar a la
frialdad de su clima invernal. Los limeños tienen que superar ese grado de
 ignorancia, respeto a las grandezas y aspiraciones peruanas. En efecto, la
ahora convertida metrópoli sobrepoblada con más de 10 millones de
habitantes, dividida en 10% de clase social privilegiada heredera del pasado
colonial y un 90% de peruanos y peruanas provenientes de las regiones y
provincias nativas, por fuerza de la historia moderna y futurista tienen que
asimilar los sentimiento de liberación e independencia para volver a
integrarse al Perú y no seguir viviendo como una isla caduca.

Formación, Pensamiento y Acción de los Limeños

Los limeños que pertenecen a la clase social privilegiada, buscan y adquieren

una formación académica en función de sus objetivos e intereses personales
para la continuación de una vida de confort banal y cultura frívola. En sus
cerebros se instalan conexiones neuronales post colonialistas por eso
siempre anhelan realidades foráneas, sueñan con importaciones y casi nada
de auto valoración de las realidades nacionales.
6 Por la formación ambivalente que buscan y reciben tanto en el hogar como
en los estudios, poseen el estigma de una ideología dominante a la vez de
dependencia y otras veces de ostentación y de picardía. Desde la cuna
anhelan lograr los privilegios gubernamentales, especialmente para sus
intereses, negocios y empresas. Este modus vivendi fue línea común a lo
largo de la historia republicana. Siempre han recibido los favores del Estado y
aún siguen recibiendo gangas esta vez con procedimientos más sofisticados,
es decir con un marco jurídico a su favor y una institucionalidad comprada y
sometida. Esto explica del porque los grupos empresariales rondan el palacio
de gobierno, el congreso y el poder judicial para así lograr perpetuar sus
privilegios.

Como se sabe este juego y pugna por la obtención de privilegios estatales,

vía influencias o con sobornos clandestinos tiene larga data y que ahora se
llama la gran corrupción política, económica y social. Tales conductas lo han
estudiado notables peruanos como Carlos Malpica en su libro titulado Los
Dueños del Perú (1970), Agustín Vargas Haya en su obra Democracia y
Corrupción (1994) y recientemente Alfonso Quiroz en su libro Historia de la
 Corrupción en el Perú (2017). Todos coinciden en señalar cuán perjudicial ha
sido y sigue siendo aquel juego sucio de la perversión con apropiación ilícita
de los bienes de la nación, lo que sin duda es anti-patriótica, anti-
democrático y anti-desarrollista. Según informes oficiales de la Contraloría,
un promedio de 23 mil millones de Soles anuales (4% PBI) van a los bolsillos
de particulares, por eso seguimos siendo un país tercermundista que se
debate entre fracasos tras fracasos y con abandono real de las regiones,
provincias, distritos y comunidades nativas.

Empero, es necesario distinguir la conducta del gran cinturón social de Lima

poblado por migrantes provincianos, una masa de trabajadores dependientes
y otros pequeños emprendedores autónomos que buscan la autorealización
para sobrevivir ante los rigores de una urbanidad exigente. Ellos no toman
decisiones de gobierno ni buscan privilegios del Estado. La mayoría de estos
ciudadanos tratan de mimetizarse en la dinámica citadina, por eso muchos
debilitados y angustiados optan por renunciar a sus raíces para luego
7 transformarse en los nuevos limeños de la periferia y que de alguna manera
son contagiados por las costumbres de la gran capital peruana.

Política, Democracia y Libertad

Para escribir esta parte de mi comentario, también volví a leer varios libros,
entre ellos : Peruanicemos el Perú de José Carlo Mariátegui; Lima la Horrible
de Sebastián Salazar Bondy, publicado el año 1967, así como Peruanidad de
Víctor Andrés Belaunde, y la obra del historiador Jorge Basadre titulado Perú,
Problema y Posibilidad editado el año 1994. Igualmente di un repaso a los
importantes textos de José Gálvez, Riva Agüero, Ciro Alegría, José María
Arguedas y César Vallejo, y no podría dejar de valorar el heroísmo de Túpac
Amaru, Miguel Grau y Andrés Avelino Cáceres que lucharon por la
independencia del Perú.

Pero, mi mayor fuente de alimentación informativa, siempre será mi

percepción actualizada y de comprobación de los hechos y reflejos ocurridos
en el año 2021, tiempos de pandemia Covid y de una singular campaña
electoral con personas portando tapabocas, y con la participación de una
 veintena de mini partidos muchos de ellos con soporte de familias y algunos
advenedizos como aportantes de dinero clandestino.

Como observador he visto y conocido el pensamiento actualizado de los

limeños, varios de ellos pertenecientes a la vieja clase política y empresarial
del Perú, y me ha sorprendido los conceptos teóricos y prácticos que
manejan y que están referidos a tres definiciones como son: política,
democracia y libertad.

Por ejemplo, los denominados personajes visibles de 22 micro-partidos

registrados en las planillas de la ONPE, eran grupos improvisados sin vida
partidaria conocida, algo así como organizaciones sorpresivas, efímera o
coyunturales que se unen para un determinado evento, mejor dicho cuasi
organizaciones de fachada, sin preceptos ni coherencia a los valores,
principios y prácticas democráticas, por tanto eran estructuras políticas
débiles. Jamás dijeron que las democracias se sostienen en la actuación de
8 partidos sólidos con vida partidaria real que es un tiempo de preparación
para gobernar una sociedad con solvencia y fidelidad.

Recordemos que la política, es arte y ciencia de gobernar, y como arte y

ciencia es obra humana que requiere de valores, principios, propiedades y
beneficios. Es acción creativa organizada para resolver problemas y
necesidades dentro una doctrina por el bien común.

Al no existir las esencias de una democracia, los limeños imaginan y

defienden una democracia fofa, vacía, y popularmente calificada como
“bamba” con operadores con doble moral, sin ética además libertinos. Esa
veintena de micro partidos ahora tienen representación en el Congreso de la
República, y espero que su actuación sea acertada y no se convierta en una
olla de grillos tal ya ha ocurrido en los años de legislación precedentes.

De otra parte, los autodenominados demócratas o líderes confunden

libertinaje con libertad, y en sus manifestaciones y actuaciones dejan aflorar
esa transgresión y so pretexto ser defensores de las libertades consagradas
en las leyes, dicen y hacen lo contrario. Por ejemplo; defienden la
 monopolización de la mediática informativa, cuyos dueños y operadores
recurren a las más despiadadas formas de vulneración y pillaje de la dignidad
y los derechos humanos, veamos algunos casos: hay un hostigamiento
permanente de la prensa a la intimidad de las personas; hay una grosera
manipulación de contenidos; hay un embuste y agresión a los hogares
ofreciendo contenidos y mensajes denigrantes como la apología a la
delincuencia, o sembrando miedo y terror previo soborno con dinero formal
e informal tal como ocurrió con la pandemia Covid y la campaña electoral.

Despersonalización y Antiperuanidad

Si los limeños castizos con genes oligárquicos no auto-modifican o auto-

evolucionen en sus conductas y percepciones centralistas y de ceguera que
les impide ver la inmensidad y complejidad del Perú, es poco probable que
florezca un verdadero sentimiento de amor, respecto, cuidado y defensa de
la peruanidad, les costará demasiado ser peruanistas. Hoy las bellas palabras
9 peruanidad y peruanista aún no están presentes en los corazones ni mentes,
a pesar de que notables historiadores, analistas, políticos y escritores, hace
muchos años atrás, nos proponían la necesidad de afirmar nuestra
autenticidad como nación soberana, especial y única en América Latina.

No los hemos escuchado, no lo aceptamos ni sentimos que es una necesidad

SER PERUANO CON PERUANIDAD, y peruanidad en más que tener una
nacionalidad, es un compromiso de fidelidad, mejor dicho modo de sentir y
vivir con dignidad, con legalidad, con autonomía, y con valentía para
defender lo propio ante cualquier influencia o infiltración foránea. La
sumisión, la dependencia y la imitación son formas de opresión que impiden
el desarrollo autónomo y pleno, es des personalizadora y nos aparta de las
raíces naturales.

Como ya señale párrafos arriba, los limeños, claro está con excepciones,
perciben una peruanidad atípica, frívola, de espectáculo, solo de forma, o de
protocolo, mejor dicho de cascaron porque en su intimidad anhelan otras
realidades. Son despersonalizados y a veces anti peruanos porque
precisamente sus raíces están afuera no en el interior del país.
 Seguramente, en los años venideros, la nueva generación de limeños tendrá
percepciones superadas a la de sus padres y abuelos, y descubrirán lo
maravilloso y grandioso que ésta bendita nación llamada Perú.

Ciertamente, debemos agradecer a las poblaciones nativas, que desde la

sencillez y la humildad de sus vidas, se esfuerzan por conservar el legado de
nuestros antecesores que supieron dejarnos proezas en creatividad y
sabiduría, allí está el majestuoso Machupicchu diciéndonos en silencio que el
Perú y los peruanos puede lograr grandes obras que causen admiración de
propios y extraños.

Lima Conglomerado de Migrantes

Desde la colonia, el Perú ha sido una puerta abierta a las migraciones, en

particular la ciudad de Lima, ahora de incontrolable crecimiento en todas sus
áreas, y tal realidad es resultado de dos grandes corrientes o flujos
migratorios: un foráneo y otro interno. En efecto, los migrantes del exterior
10 provienen de una multiplicidad de naciones europeas, asiáticas, africanas y
americanas, y de otro lado, los migrantes internos provienes de una
multiplicidad de provincias, distritos y comunidades del país.

Son estas grandes corrientes humanas que se han posicionado de la actual

capital peruana, y como es una mezcla de diversas sangres y pensamientos,
es lógico que nazca y exista una tercera fusión fruto de las pugnas internas
con diversos matices que dan lugar a expresiones culturales, con creencias y
costumbres dispares y atípicas.

Los migrantes del exterior, desde la era colonial y virreinal aún conservan
unas mínimas herencias, rasgos y genes propios de aquella estructura social
y orgánica, claro está cada más debilitada por el proceso histórico de fusión o
mestizaje de la era republicana. Esta gran ciudad ahora hace esfuerzos por
encontrar identificación con la nacionalidad peruana, sin embargo aún
prevalecen los rostros de una nacionalidad “alimeñizada” que cree que Lima
es el Perú.
 Las familias migrantes del exterior por efectos de sobrevivencia se ha
mimetizado establecido nuevos feudos y enlaces y también han copado
muchos espacios sociales en las esferas del poder político, académico, social,
económico, empresarial, comercial, militar, judicial, religioso y medios de
información masiva. Y con la acogida benévola del suelo patrio, usufructúan
de las bondades del Perú, y aunque muchos todavía asumen posturas fácticas
pretenciosas, es posible que se auto examinen para corregir sus equivocados
criterios.

En todos los procesos o flujos migratorios las personas pierden parte de su

identidad paternal originaria, y adoptarán una identificación mixta o dual, es
decir una ideología extranjerizante y copiadora que añora sus raíces. Por eso,
los migrantes que viven en Lima siempre elogian, miran y viajan a otras
urbes. Gran tiempo de sus razonamientos, conductas, vivencias e intereses
están enfocadas en sus ancestros lo cual les impide encontrar identificación
plena con la peruanidad y la conciencia peruanista verdadera.
11 Una muestra que no admite dudas, se refleja en la administración
gubernamental, y uno de los principales instrumentos de gobierno son las
constituciones políticas, que es la madre de las leyes y de la vida
democrática. Todas ellas sin excepción hay sido redactadas por una elite de
políticos e intelectuales limeños y como bien sabemos dichos autores
tuvieron una visión oligárquica cerrada al resto del país, en cambio
privilegiaron la copia y la imitación de otras realidades.

Aquella generación de limeños con limeñismo en su mente, mantuvieron

una percepción centralista, no pudieron comprender la magnitud ni la
grandiosidad de una nación plural tan rico en recursos, herencias ancestrales,
biodiversa y multiétnica porque la desconocen o se informan por teorías en
sus escritorios, y lo peor ni siquiera leen libros básicos de geopolítica.
Conversaba hace poco con un limeño, de un barrio alto, y cuando le sugerí
hablar del Perú y sus grandezas trató de desviar la conversación y llevarme a
comentar sobre el futbol y algunos personajes de la farándula. Es visible un
desconocimiento de la geopolítica peruana tan compleja como inmensa.
 La tecnocracia limeña concibe un desarrollismo urbanista y mercantilista sin
saber que la ruralidad es la fuente de la riqueza que nos distingue como
nación porque siempre hemos sido un pueblo agrícola y amazónico. Los
planificadores citadinos se dejan llevar por un egoísmo de confort y la
banalidad urbana, expresada en negocios fríos, industrias contaminantes,
construcciones materiales, edificios, avenidas, futbol, publicidad y
consumismo. Esta afirmación tiene comprobación en la misma realidad,
pues basta transitar por las calles limeñas congestionadas y contaminadas
para entender esa mentalidad precaria que conduce al caos social, a la crisis
cultural, y a los conflictos humanos.

Los capitalinos creen que el país puede venderse como una bien artificial, y
por eso auspician en los fueros gubernamentales políticas y leyes de subasta
y entreguismo de los recursos naturales, a cualquier postor foráneo, un
ejemplo es la fijación en la minería, los hidrocarburos, los bosques
amazónicos y la riqueza ictiológica los mismos que se entregan mediante
12 concesiones algo así como como panfletos, con el aval de los poderes
estatales.

En cualquier país digno con soberanía real, no ocurriría lo que estamos

viendo todos los días, sin que ninguna institución defienda la propiedad de
todos los peruanos, porque el territorio nacional es uno, no puede ser
fragmentado ni repartido como una torta. Sin duda, hay un sabotaje y pillaje
soterrado y legalizado que debe acabar, por eso es importante que las
nuevas generaciones, los niños y jóvenes tengan un espíritu peruanista y
conciencia de peruanidad, y ambos son signos de autenticidad y fortaleza, y
cuando el Perú recupere esta cualidad tendrá distinción, prosperidad común
y honor en el contexto mundial.

Las concepciones mercantilistas limeñas, hechas en gabinetes, nos están

conduciendo a una deshumanización atroz y a un error catastrófico de cara al
futuro porque son una peligrosa desviación del derecho humano a progresar
con justicia, equidad y responsabilidad social. El bienestar de la mayoría, es
el objetivo de toda democracia. Veamos y comparemos del cómo otras
 naciones con mujeres y hombres nacionalistas nos han superado
tremendamente, pues ahora son países sin miseria ni desigualdad.

Una vez más hago la distinción con los migrantes internos, provenientes de
provincias, distritos y comunidades nativas que llegan a capital forzados por
las circunstancias sociales, y en su mayoría ubicados en la periferia urbana,
ellos no son quienes toman decisiones ni están en las altas esferas del poder,
en cambio tratan de sumergirse entre los recovecos del limeñismo,
desempeñando un sinnúmero de ocupaciones que les permita subsistir en
una ciudad tan compleja y difícil. Más bien, son conminados a cumplir las
políticas y las leyes, mejor dicho son objetos de un sometimiento implacable
como si fueran seres ajenos, infiltrados, pordioseros, invasores o forasteros.

Dictadura de Grupos Económicos

Otro signo que caracteriza a los limeños que rodean al poder político y que
tiene como aliado a los medios de información, de comienzos del Siglo XXI,
13 sin duda es la existencia de una dictadura de grupos económicos, integrado
por monopolios, oligopolios y transnacionales que usan el poder del dinero
para imponer sus reglas por encima de las leyes comunes para así obtener
beneficios, concesiones, contratos, exoneraciones y privilegios. Este sistema
económico engañoso y fraudulento ejerce su poder sin limitaciones
legislativas y de esa forma preservan la acumulación de fortuna material y
monetaria. Sin duda, la pervivencia de este modelo necesita del gobierno, de
leyes del Congreso, de la justicia, de las fuerzas armadas y de la santificación
de las iglesias, los mismos que unen para garantizar la vigencia de los
privilegios.

Desde el año 1993 existe la dictadura de los grupos económicos, una

organización fáctica y antidemocrática ahora diversificada y modernizada en
sus estrategias de expoliación al Estado y de la sociedad que es mayormente
consumidora.

Las conductas de los grupos económicos limeños, son distintos a otros grupos
de otras naciones como EE.UU o Europa donde hay una mayor
 responsabilidad social, ambiental, honestidad y gestos de solidaridad con la
sociedad, y allí un 70% de grandes empresas son fieles contribuyentes y
comparten sus ganancias a través de programas de asistencia social vía
fundaciones sin fines de lucro.

La reciente pandemia por Covid, que ha causado la muerte de más de

185,000 peruanos por equivocadas medidas de contención y una
precarización de los servicios de salud pública preventiva y curativa. Esta
dolorosa realidad ha desnudado con claridad la conducta inmoral, inhumana,
brutal y antidemocrática de los grupos económicos. Soy testigo del dolor
desesperante de muchas familias sufrientes que tuvieron que rematar sus
escasas propiedades y bienes para pagar los altísimos costos por servicios
médicos y medicinas. No importo para nada el estado de emergencia
sanitaria que dictó el gobierno, ellos establecieron sus reglas propias.

Como el mal ejemplo se multiplica, del mismo modo otras medianas y

14 pequeñas empresas asumieron iguales conductas que los grandes, y allí
también se manifestó un desprecio a la vida humana, y por contagio
concentraron sus apetitos mercantilistas para hacer un festín en diversas
áreas de las finanzas y el comercio.

Televisión Limeña Intrusa

Aquel aparato doméstico, que desde el año 1960 ingresa a los hogares
peruanos sin permiso explícito, ha ido evolucionado como muchos otros
inventos puestas al servicio de la humanidad. Hoy la televisión doméstica es
mucho más sofisticada y con diversas aplicaciones digitales. Sin embargo, y
con el paso de los años, en el Perú, se ha convertido en un transmisor
farsante con grandes falencias y errores en su manejo.

No es mi interés hacer un diagnóstico sobre el tema, pero me centraré a las

conductas mediáticas dominantes de la televisión de transmisión abierta de
los recientes 20 años. Y mi primera apreciación está referida a los programas,
contenidos y a los animadores que son los productos visibles que llegan a la
población, y en ellos observo una banalidad exagerada, copadas por
 personas sin credenciales honestos, con doble moral y con varios
afeminados como protagonistas.

Muchos técnicos y profesionales de la comunicación principalmente los que

asumen roles de directores, comentaristas, reporteros y periodistas crean y
recrean un universo audiovisual de mala calidad, comparable a desechos
culturales propias de sociedades infrahumanas. En efecto, publicidad
engañosa, apología a las perversiones humanas, delincuencia callejera,
narcotráfico, novelería y chismografía con anti valores están presentes en las
primeras planas de las pantallas. Nada de cultura peruana, nada de
educación civil ni democrática, nada de autenticidad, nada de peruanidad.

La Televisión limeña es reflejo del pensamiento y acción de un limeñismo

exacerbado y corroído, que por desgracia es transmitido a usuarios, mejor
dicho exportado a las familias que no merecen recibir mensajes y contenidos
de esa línea. Es una agresión irrespetuosa, que los hogares debieran rechazar
15 apagando el aparato. No se pueden aceptar modelos o paradigmas que
destruyen, embrutecen o generan sometimiento a criterios ajenos.

Las familias provincias, distritales y de comunidades nativas, tienen otros

paradigmas por tanto, merecen otros contenidos y mensajes en el manejo de
la producción audiovisual, y ojalá en poco tiempo y con el apoyo
gubernamental se impulsen la creación y existencia de cadenas regionales de
comunicación e información audiovisual que sean representativas de sus
propias aspiraciones y necesidades de desarrollo comunitario.

Apreciados amigos, no me quiero extender en este discurso, prometo hacerlo

en otra oportunidad para seguir desmitificando algunos paradigmas y
criterios erróneos que subsisten en nuestra sociedad. Y quienes observamos
con realismo las ocurrencias, tenemos la obligación de expresar nuestros
puntos de vista, y compartirlos con otros, que pueden coincidir o tener
pareceres distintos.

También, espero que los limeños sepan comprender y tener una visión de
integración del país en su conjunto, sólo así podremos mejorar y superar
 aquellas viejas percepciones, barreras, costumbres y decisiones que frenan el
progreso de nuestra patria. Unos y otros tenemos que mejorar nuestras
relaciones, hacer auto exámenes, valorar nuestras capacidades y habilidades,
y sobretodo tener coraje para modificar errores. Si ello ocurriera, no tengo
duda que el Perú, sería una nación líder en América del Sur, y ejemplo de
vida democrática, con mayor educación, con mejores valores civiles, sin
pobreza ni conflictos menos con crisis recurrentes cada cierto período.

Lo importante es que unos y otros compartamos experiencias y vivencias que

contribuyan al mejoramiento de nuestra cultura ciudadana, y que las nuevas
generaciones las incrementen con sus saberes. Los conocimientos siempre
avanzan y la cultura crecerá en forma ilimitada mientras exista vida y
convivencia, y cuán deseable es que alguna vez seamos productores de
conocimientos antes que sólo consumidores.

MUCHAS GRACIAS.
16 Reynaldo Charres Vargas

Motivador cultural y predicador de la vida sencilla.

Perú, 12 Junio 2021

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PD. Cualquier error tipográfico, debe ser entendido pues el autor afronta
una acelerada pérdida visual. Gracias.