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CÁLCULO VECTORIAL

TEMA 10
SUPERFICIES PARAMÉTRICAS

En notas anteriores estudiamos un objeto geométrico de una dimensión conocido como


curva paramétrica. Es hora de pasar al estudio de objetos geométricos con una
dimensión más, conocidos como superficies. La idea es hacer un análisis similar al
estudio de curvas, es decir, empezaremos por entender qué significa parametrizar una
superficie. Luego, para cierto tipo de parametrizaciones, veremos cómo construir el
plano tangente a una superficie en un punto. Otro aspecto importante será el mostrar
cómo calcular el área de una superficie no necesariamente plana. Finalmente,
aprenderemos qué significa que una superficie esté orientada.

10.1 Parametrizaciones de superficies


Empecemos definiendo nuestro objeto de estudio en estas notas.

Definición 10.1.1. Una superflcie paraMetrizada es un conjunto de la forma S = X(U ),


donde U es un subconjunto abierto de R2 y X : U ⊆ R2 → R3 es un campo vectorial con-
tinuo, conocido como paraMetrización de S . Cada punto deS se representa como X(u, v) =
(x(u, v), y(u, v), z(u, v)). A las variables u y v se les llama paráMetros.

El concepto de superficie seguramente no parece algo nuevo para el lector. En efecto, ya


se ha tenido un contacto con ejemplos particulares de superficies en el curso anterior de
CDIVV, a saber, las gráficas de funciones de dos variables y las superficies de nivel de
funciones de tres variables. El primero de éstos se trata de una superficie paramétrica,
como detallaremos en breve. Sin embargo, las superficies de nivel no necesariamente
son paramétricas, porque no siempre es posible hallar una función X : U⊆ R2→ R3 que
cubra toda la superficie. Lo bueno es que, bajo ciertas condiciones, se puede
1
parametrizar

2
una superficie de nivel localmente, e ir cubriéndola con varias parametrizaciones. Para
hacer una analogía, es como si se tratase de cartografiar un país, donde tenemos un
mapa para cada región dentro del mismo, y nos hacemos una idea global de su
geografía a partir de un atlas formado por estos mapas.

Ejemplo 10.1.2. Los siguientes son ejemplos de superficies paramétricas:

1. Gráflca de una función de dos variables: Dada una función continua f : V ⊆ R2 → R3,
su gráfica G(f ) ⊆ R3 es una superficie paramétrica, con parametrización X : V → R3 dada
por
X(u, v) = (u, v, f (u, v)), para todo (u, v) ∈ V.

Figura 10.1: Gráfico de una función

2. Hemisferios de una esfera: El campo X : U → R3, con U = {(u, v) ∈ R2 : u2 + v2 < 1},


dado por √
X(u, v) = (u, 1 − u2 − v2)
v,
es una parametrización del hemisferio norte de la esfera S2 (sin incluir el Ecuador).

Figura 10.2: Polo norte

Es claro que no es posible cubrir toda la esfera con la parametrización anterior. Sin
embargo, podemos obtener una descripción completa de la esfera mediante un atlas formado
por varias parametrizaciones que cubren cada hemisferio: norte, sur, oriental, occdidental,
frontal y posterior. Tales parametrizaciones vienen dadas por:

Hemisferio norte: (u, v) ›→ (u, v, 1 − u2 − v2)

Hemisferio sur: (u, v) ›→ (u, v, − 1 − u2 −

v2) Hemisferio oriental: (u, v) ›→ (u, 1 − u2 − v2, v)

Hemisferio occidental: (u, v) ›→ (u, − 1 − u2 − v2,
v) √
Hemisferio frontal: (u, v) ›→ ( 1 − u2 − v2, u, v)

Hemisferio posterior: (u, v) ›→ (− 1 − u2 − v2, u, v)

Figura 10.3: Cartas esféricas para cada hemisfero de S2.

3. Coordenadas esféricas: El campo X : U → R3, con U = (0, 2π) × (0, π/2), dado por

X(u, v) = (cos(u) sin(v), sin(u) sin(v), cos(v))

es una parametrización del polo norte de la esfera S2, que no incluye ni el Ecuador ni el
meridiano 0.

Figura 10.4: Coordenadas esféricas


10.2 Plano tangente
Cuando estudiamos curvas paramétricas en notas anteriores, vimos que no siempre es
posible definir la recta tangente que pasa por un punto dado de la curva. Por ejemplo,
en puntos donde la curva presenta picos, esto no es posible. Es por eso que nos
restringimos a curvas regulares para no tener problemas a la hora de definir la recta
tangente a la curva en cualquiera de sus puntos. Un enfoque similar se presenta a la
hora de estudiar super- ficies paramétricas. El concepto de plano tangente a una
superficie en un punto será el análogo de recta tangente. Acá también puede darse la
imposibilidad de definir el plano tangente en uno o más puntos de la superficie
paramétrica. Es por eso que nos restringire- mos a un tipo especial de
parametrizaciones, que definimos a continuación.

Definición 10.2.1. Sea S una superficie paramétrica, con parametrización X : U ⊆ R2 → R3.


Decimos que X es regular (o suave) si es de clase C1 y la transformación diferencial dXx 0 : R2 →
R3 es inyectiva, para todo punto x0 ∈ U.
1

En términos matriciales, dXx0 está representada la matriz Jacobiana


 
∂x
(x0) ∂x(x0)
∂ ∂

JX(x0) =   , donde X(u, v) = (x(u, v), y(u, v), z(u, v)).


u v
∂y
∂ ∂
∂y
(x0)
u ∂z v (x0)
(x0) ∂z (x0)
∂u ∂v

Entonces, son equivalentes:

(a) dXx0 es inyectiva.

(b) JX(x0) tiene rango 2.

(c) Los vectores∂u ∂X (x0) = ∂u ∂x (x0),∂u ∂y (x0), ∂u∂z (x0) y ∂v∂X (x0) = ∂v∂x (x0), ∂y∂v (x0), ∂z∂v(x0)
son linealmente independientes. Éstos también se denotan como Xu(x0) y Xv(x0).
∂X
(d) ∂X

(x0) × (x )
∂ 0
/= 0.
u v
Ejemplo 10.2.2. Estudiemos la regularidad en las siguientes parametrizaciones para superficies
conocidas:

1. Esfera unitaria S2: Consideremos la parametrización

X(u, v) = (sin(u) cos(v), sin(u) sin(v), cos(u)),

sobre el abierto (0, π) × (0, 2π), que cubre a toda la esfera menos al meridiano 0. Calculemos
1
Se puede permitir que U no sea abierto. En estos casos, pedimos que X sea regular al menos sobre U ◦ , es
decir, que de haber puntos en U donde X no es regular, entonces tales puntos están en ∂U .
dXx ∂X ∂X
y el producto vectorial (x0) × (x0) para x0 = (u, v):
0 ∂u ∂v

cos(u) cos(v) sin(u) sin(v)


−
dXx0 = cos(u) sin(v) sin(u) cos(v) ,
— sin(u) 0

∂X i j k
(x ) × ∂v (x0) = .
cos(u) cos(v) cos(u) sin(v) − sin(u) .
X 0
∂∂u . — sin(u) sin(v) sin(u) cos(v) 0 .

= (sin2(u) cos(v), sin2(u) sin(v), cos(u) sin(u)).


∂X
Notamos que ∂X
(x0) × (x0) = 0 si, y solo si,
∂u ∂v

sin2(u) cos(v) = 0,
2
 sin (u) sin(v) = 0,

cos(u) sin(u) = 0.

Lo anterior implica que cos(u) = 0 o sin(u) = 0. Sin embargo, sin(u)/= 0 ya que u∈ (0,
π), lo cual implica que sin(v) = 0 y cos(v) = 0, y esto es una contradicción. Por lo
tanto,
∂X ∂X
∂ (x0 ) × ∂ (x0 ) =/0, de donde X es regular.
u v

2. Bicono circular: El bicono circular tiene por ecuación z2 = z2 + y2. Su parte con altuna
no negativa (z ≥ 0) acepta la parametrización X : R2 → R3 dada por

X(u, v) = (u, v, u2 + v2).

Figura 10.5: Bicono circular



Notamos que X(R2) es la gráfica de la función f : R2 R dada por f (u, v) = u2 + v2,
la cual no es diferenciable en (0, 0). Por lo tanto, X no→
es una parametrización regular.
De manera más general, si f : U ⊆ R2 → R una función de clase C1, entonces el gráfico de
f tiene parametrización regular X(u, v) = (u, v, f (u, v)). Tenemos que
 
1 0
dXx0 =  0 1 ,
∂f ∂f
(x0) (x0)
∂u ∂v
∂f ∂f
donde (x0) y (x0) existen por ser f ciable. Luego,
∂u ∂v

i j k
∂X ∂f ∂f
(x0) × (x0) = 1 0 ∂f (x0) =
. 0 1 ∂f (x ) . ∂ ∂
∂X ∂ 0 u v
∂ . v
.
− (x0), − (x0), 1 /=

u . ∂u
0.
v .
Volviendo al bicono, consideremos otra parametrización Y : (0, + ) (0, 2π) R3
dada por ∞ ×
Y (u, v) = (u cos(v), u sin(v), u),
que cubre la parte positiva a excepción de la recta x = z e y = 0.

Figura 10.6: Parametrización del cono en coordenadas polares

En este caso, el diferencial dYx0 viene dado por



dYx0 = cos(v) u−ucos(v)
sin(v) sin(v) .
 1 0

Luego,

∂X i j k
(x0) × ∂v (x0) = . cos(v) sin(v) . = (−u cos(v), −u sin(v), u) /= 0.
∂∂u
X . 1 .
−u sin(v) u cos(v)
Por lo tanto, la parametrización Y sí es regular.
3. Superflcie de tangentes a una curva alabeada (no plana): Sea α :→I R3 una curva
alabeada y regular, donde I es un intervalo abierto, parametrizada por longitud de arco y
con curvatura no nula. Consideremos el campo vectorial X : R × I → R3 dado por

X(u, s) = α(s) + ut(s).

Es decir, X asigna a cada par (u, s) la recta tangente a α que pasa por α(s). Al conjunto
X(R × I) ⊆ R3 se le conoce como la superflcie de tangentes a la curva α.

Figura 10.7: Superficie de tangentes

Estudiemos si X es regular. El diferencial dXx0 tiene por columnas los vectores


∂X
(x0) = t(s),
∂u
∂X
(x ) = t(s) + utS(s) = t(s) + (s)n(s).
uk
0 α
∂s
Luego,
∂X ∂X
(x0) × (x0) = uk(s)b(s).
∂u ∂s
Tenemos que∂ ∂X (x0) × ∂∂X (x0) 0 si, y sólo si, u = 0. Para u = 0, se obtienen los puntos
que corresponden
u a la curva
s α. Entonces, la superficie de tangentes no presenta
regularidad en α(I).

4. Tubos alrededor de una curva: Considérese una curva α : → I R3 como en el ejemplo


anterior, y sea{ t(s), n(s), b(s) }el triedro de Frénet-Sêrret en α(s). Para θ (0, 2π), la

combinación cos(θ)n(s) + sin(θ)b(s) representa un punto de la circunferencia de radio
1, centrada en α(s) y contenida en el plano perpendicular a la recta generada por t(s).
Figura 10.8: Circunferencia perpendicular al versor tangente.

La parametrización
X(s, θ) = cos(θ)n(s) + sin(θ)b(s),
con θ (0, 2π) y s I, define un tubo circular de radio 1 alrededor de la curva α,
∈ ∈
excep- tuando el corte correspondiente a θ = 0.

Figura 10.9: Tubo alrededor de α.

Estudiemos la regularidad. El diferencial dXx0 viene dado por:


∂X
S S
(x0 ) = cos(θ)n (s) + sin(θ)b (s)
∂s
= cos(θ)(−k(s)t(s) + τ (s)b(s)) + sin(θ)(−τ (s)n(s)),
= − cos(θ)k(s)t(s) − sin(θ)τ (s)n(s) + cos(θ)τ (s)b(s),
∂X
(x0) = − sin(θ)n(s) + cos(θ)b(s).
∂θ
Luego,
∂X ∂X
(x0) × (x0) = (− cos(θ)k(s)t(s) − sin(θ)τ (s)n(s) + cos(θ)τ (s)b(s))
∂s ∂θ
× (− sin(θ)n(s) + cos(θ)b(s))
= sin(θ) cos(θ)k(s)t(s) × n(s) − cos2(θ)k(s)t(s) × b(s)
— sin(θ) cos(θ)τ (s)n(s) × b(s) − sin(θ) cos(θ)τ (s)b(s) ×
n(s)
2
= sin(θ) cos(θ)k(s)b(s) − cos (θ)k(s)n(s).
Como b(s) y n(s) son linealmente independientes, tenemos que∂ ∂X (x0) × ∂∂X (x0) = 0 si,
y sólo si, sin(θ) cos(θ)k(s) = 0 y cos2(θ)k(s) = 0. Al ser α de curvatura
s no θnula, tenemos
∂X
que ∂ (x0) × ∂ (x0) = 0 si, y solo si, sin(θ) cos(θ) = 0 y cos(θ) = 0, es decir, cos(θ) = 0.
∂X

s tanto, X θno presenta regularidad en los puntos donde θ = π/2, 3π/2.


Por lo

Dada una parametrización regular X : U ⊆ R2 → R3 de una superficie paramétrica S,


fijemos un punto x0 = (u0, v0) ∈ U . Considere los abiertos

Ix 0 = U ∩ {(u, v) ∈ R2 : v = v0} y Jx = U ∩ {(u, v) ∈ R2 : u = u0}.

La curva u ›→ X(u, v0), con u ∈ Ix0 , se conoce como la u-curva que pasa por x0. De manera
similar, v ›→ X(u0, v), con v ∈ Jx0 , se conoce como la v-curva que pasa por x0.

Figura 10.10: u-curvas y v-curvas

Note que la inyectividad de dXx0 implica la independencia lineal del conjunto

∂X
∂X
∂u (x0 ), (x0 ) .
∂v

Note que ∂X∂


(x0) es un vector tangente a la u-curva en el punto X(x0), mientras que
∂X

(x0) es un
u vector tangente a la v-curva en el mismo punto. Entonces, la siguiente
definición cobra sentido.
v

Definición 10.2.3. Sea S una superficie paramétrica y p ∈ S. Sea X : U ⊆ R2 → R3 una


parametrización regular con p = X(x0) para algún x0 ∈ U. El plano tangente a S en p,
denotado por Tp(S), es el espacio afín en el punto p generado por los vectores ∂X (x0) y ∂X (x0),
es ∂v
∂X ∂ X
decir, T ( )S := t (x ) + h (x0
p 0
∂u
∂u

∂v

) + p : (t,
h) ∈ R2
.
Figura 10.11: Plano tangente a S en p.

Proposición 10.2.4. Sea S una superficie paramétrica, con parametrizaciones X y Y . Entonces,


para cada p ∈ S, el plano tangente Tp(S) no depende de X o Y . En otras palabras, para
calcular Tp(S), se puede tomar cualquier parametrización de S.

Definición 10.2.5. Sea X : U ⊆ R2 → R3 una parametrización regular de una superficie S, y


p ∈ S. Un vector tangente a S en p es un vector v ∈ R3 no nulo para el cual existe una curva
regular α : I → X(U ), con I un intervalo abierto, es decir α(t) = X(u(t), v(t)) para todo t ∈ I,
tal que existe un t0 ∈ I con α(t0) = p y αS(t0) = v.

Figura 10.12: Vector tangente a S.

Proposición 10.2.6. Sea S una superficie paramétrica con parametrización regular X : U → R3,
y sea p ∈ S. Todo vector en Tp(S) es un vector tangente a S en p. Recíprocamente, si v ∈ R3 es
un vector tangente a S en p, entonces v ∈ Tp(S).

Demostración: Primero, supongamos ∂X que tenemos un vector v ∈ Tp(S). Luego,


}
∂u (x0), ∂v (x0) , tenemos que existen t0, h0 ∈ R
∂X
Tno
p(S) es el espacio afín generado por
nulos tales que
como
∂X ∂X
v = t0 (x0) + h0 (x0).
∂u ∂v
Por otro lado, sea x0 ∈ U tal que X(x0) = p. Lo anterior sugiere definir β(t) = x0 +
t(t0, h0). A partir de β, construimos la curva

α(t) = X(β(t)) = X(x0 + t(t0, h0)).

Note que α es regular por ser X regular y β(t) una función de clase C1 con βS(t) =
(t0, h0) =/ (0, 0). Por un lado, tenemos que α(0) = X(x0) = p. Por la regla de la cadena
tenemos que:

αS (0) = (X(β(t))J | ) · 0
· t0 ∂X ∂X ht 0
S ), (x0
∂X t=0 = · β (0) = dXx0 h0 = ∂u (x
0 ∂v
dXβ(0)
∂X
= t0 (x0) + h0 (x0) = v.
∂u ∂v
Entonces, tenemos que v es un vector tangente a S en p.

Ahora probemos el recíproco. Supongamos que v es un vector tangente S a en p. Luego,


existe una curva regular α : → I X(U ) tal que p = α(t0) y αS(t0) = v, para algún t0 I.
Como α está contenida en X(U ), podemos escribirla de la forma α(t) = X(u(t), v(t)). Sea
β(t) = (u(t), v(t)) y x0 = (u(t0), v(t0)). Nuevamente, por la regla de la cadena, tenemos:

∂X
v = αS(t ) = dX · βS(t ) = (x ∂X
0 β(t0) 0 0 ), uJ(t0)
∂ ∂ ) ·
u v
(x 0
vJ(h0)
∂X ∂X
= uJ(t ) (x ) + vJ(h ) (x ).
0 0 0 0
∂u ∂v
Entonces, al ser v combinación lineal de∂ ∂X (x0) y ∂
∂X
(x0), tenemos que v ∈ Tp(S).
u v

Ejemplo 10.2.7. Hallemos el plano tangente a cualquier punto del paraboloide circular:

S = {(x, y, z) ∈ R3 : z = x2 + y2}

Consideremos la pamametrización X : R2 → R3 dada por

X(u, v) = (u, v, u2 + v2).


= .
1 0

Al calcular la diferencial para todo punto x0 = (u0, v0) ∈ R2 tenemos dXx 0 0 1
2u0 2v0
Luego,
i j k
∂X ∂X
(x0) × ∂v (x0) = . 12u
0 . = (−2u0, −2v0, 1) /= 0.
. 0 1 2v .
0
∂u
0
Tenemos entonces que X es regular. Luego, el plano tangente a S en X(x0) = (u0, v0, u2 + v2)
0 0
viene dado
por
t(1, 0, 2u0) + h(0, 1, 2v0) + (u0, v0, u20+ v2),0 para todo t, h ∈ R.

Figura 10.13: Paraboloide circular.

10.3 Área de una superficie


Así como ocurrió con la longitud de arco de una curva y el concepto de integral de línea,
es necesario entender primero cómo hallar el área de una superficie antes de
aventurarnos a definir integrales de superficie.

La idea del cálculo del área de una superficie paramétrica es parecida a lo que se hizo
en su momento para calcular la longitud de arco de una curva. Para esto último, apro-
ximábamos la longitud de arco mediante longitudes de segmentos rectangulares, ha-
ciendo una partición en el intervalo de definición de la parametrización de la curva.
Ahora la idea será aproximar el área de una superficie paramétrica a través de áreas de
regiones rectangulares, provenientes de una partición en el dominio de definición de la
parametrización.

Supongamos que tenemos una superficie paraétrica S = X(U ), donde X : U ⊆ R2 → R3


es una parametrización regular e inyectiva, con U = (a, b) × (c, d) un intervalo abierto
y acotado de R2. Sean a = u0 < u1 < · · · < un = b y c = v0 < v1 < · · · < vm = d
particiones de (a, b) y (c, d), respectivamente. Sea Rij el rectángulo de lados ∆ui = ui −ui−1
y ∆vj = vj − vj−1 , y sea (uiJ , vjJ ) un punto cualquiera en el interior de Rij . Consideremos
en dicho punto el vector normal ∂∂ X (uiJ , viJ ) ×∂ ∂ X (uJi , vjJ ) al plano tangente a S que pasa
u v
por
el punto X(uiJ , vjJ ) (el cual se puede definir ya que X es regular). Sobre ese plano
tangente consideramos el paralelogramo de lados ∂ X (uJi , viJ )∆ui y ∂ X (uJi , vjJ )∆vj , al que
llamaremos ∂u ∂v
Tij. Sabemos del curso de GAL 1 que el área de Tij viene dada por

a(T ∂X J J ∂X J J ..
) = .. (u , v ) × (u , v ) ∆u ∆v .
ij .. i ∂v j .. i j
i ∂u

A medida que n y m tienden a infinito (es decir, que las particiones de (a, b) y (c, d) se
hacen cada vez más fina), tenemos que a(Tij) aproxima al área de X(Rij), y por ende
la suma Σ..
ij a(Tij) aproxima al área de S = X(U ). Por otro lado, al ser X regular te-
nemos que .. ∂X ∂u × ∂X .. es una función continua en U , y por lo tanto integrable.
lim
Entonces, )) converge. Por definición de integral múltipe, tenemos que
Σ ∂v
n,m→ ij X( Ri ∂X
a(

= ∫∫ ..
∂v ..
j
Σ Σ
.. ∂X ∂X ..
∂u .. dudv.
lim )) = lim (u , v ) × (u , v ).. ∆u ×
U
a(X(R ∆v ..
n,m→
i
j n,m→
i i

i j
.. i j
∞ i ∞ i ∂u
j j v
2
Por lo tanto, la siguiente definición cobra sentido .

Definición 10.3.1. Sea S una superficie paramétrica, con parametrización regular e inyectiva
X : U ⊆ R2 → R3. Se define el área de S = X(U ) como la integral doble
a(S) = ∫∫ .. ∂X ×
.. dudv.
U .. ∂u ∂v ..
Dentro de la generalidad de la definición anterior, y pensando en las opciones de
S que y X : U
dominio de integración para las integrales dobles, se puede permitir R3
cum- plan que: X es regular o regular a trozos, donde cada trozo está representado
por una parametrización⊆Xi : U
→i R2 R3 continua, tal que Xi es regular en Ui◦ salvo
quizá en un número finito de puntos.

Observación 10.3.2.

1. Así como ocurre con la longitud de arco de una curva, el área de una superficie paramétrica
no depende de la parametrización escogida. Esto lo demostraremos más adelante, como un
corolario de un resultado más general para integrales de superficies.
2
Sabemos que el dominio de una parametrización no tiene por qué ser en general un intervalo abierto. Sin
embargo, lo hemos escogido así para simplificar la explicación del área de una superficie. El argumento
mostrado se puede generalizar sin dificultad al caso donde U es un conjunto acotado y medible Jordan
(Es necesario que el lector recuerde esta última definición del curso de CDIVV. Puede ver por ejemplo las
notas del Prof. Fiori).
2. Si X(u, v) = (x(u, v), y(u, v), z(u, v)), entonces

∫∫ ∫∫
.. i j k .
∂X .. ‚
dudv = .. ,. ∂ ∂y ∂z
a(S) = ∂X .. ∂ dud
u .v
x ∂
∂ ∂ u

∂v.
U v u ∂y ∂z
U ∂ ∂v

×
∂ ..
u
∫∫ ∂z
2 2 2
s ∂y ∂z
= − ∂z ∂y + ∂x − ∂x ∂z ∂x
∂y ∂x
U ∂u ∂v ∂u ∂v ∂u ∂v ∂u ∂v + − dudv.
∂y∂u ∂v ∂u ∂v

Ejemplo 10.3.3. Calcule el área del helicoide H de radio 1 y altura 2π:

X : [0, 1] × [0, 2π] → R3


X(r, θ) = (r cos(θ), r sin(θ), θ).

Figura 10.14: Helicoide.


(Imagen tomada de Marsden & Tromba - Cálculo Vectorial).

La parametrización X es claramente inyectiva. Veamos si es regular. Tenemos que


∂X
= (cos(θ), sin(θ), 0),
∂r
∂X
= (−r sin(θ), r cos(θ), 1),
∂θ
∂X ∂X i j k
=.
∂r ∂θ
×
. cos(θ) sin(θ) = (sin(θ), − cos(θ), r).
. 0 .
−r sin(θ) r cos(θ)
Vemos que ∂X

× ∂X∂ siempre es no nulo, pues no existe ningún ángulo que anule a las funciones
seno y coseno
r al mismo
θ tiempo. Por lo tanto, X es regular. Entonces, el área del helicoide H con
parametrización X viene dada por:
a(H) = ∫∫
.. ∫ ∫
.. ∂X
.. ∂ ×
∂X .. drdθ q2π sin (θ) + cos2(θ) + r2drdθ
2
[0,1]×[0,2π] 0
r = 1
∫ 2π ∫ 1 ∫
0


∂ 1 √ log(r + 1 + r2).1
θ  r √ 1 + r2 +
= 1 + r2drdθ = 2π 2
2 .0
0√ 0
0
√ 1 + r dr = 2π 
= π( 2 + log(1 + 2)). 2
Las superficies de revolución y las gráficas de funciones continuas de dos variables
están entre los ejemplos principales de superficies paramétricas. Probaremos a
continuación fórmulas generales para calcular su área.

Proposición 10.3.4. Sea f : U ⊆R2 → R una función continua en U (acotado y medible Jordan)
y de clase C1 en U ◦ . Entonces,
s
∫∫
∂f
2
∂f 2
a(G(f )) = U + + 1dudv.
∂ ∂v
u
Demostración: Por hipótesis, tenemos la parametrización regular para G(f ) dada por
X(u, v) = (u, v, f (u, v)) para todo (u, v) ∈ U . Luego,
∂X ∂X .. ∂f ∂f
a(G(f )) = ∫∫ .. × dudv = ∫∫ .. − ,− , 1 .. dudv
..
∂u ∂v
∫∫
U .. ∂u∂f 2∂v .. ∂f 2 U ..

s +
∂u ∂v 1dudv.
= +
U

Ejemplo 10.3.5. Halle el área del hemisferio norte de la esfera unitaria S2.

Sabemos que esta superficie en cuestión es la gráfica de la función f (u, v) = 1 − u2 − v2, donde
(u, v) ∈ U = {(u, v) ∈ R2 : u2 + v2 ≤ 1}. Lo interesante acá es que f no es de clase C1 en ∂U.
Para (u, v) ∈ U ◦ , tenemos que
∂f u ∂f v
= −√ = −√ .
∂u 1 − u2 − v2 ∂v 1 − u2 − v 2

y
Por la proposición anterior, tenemos que
∫∫ r ∫ ∫ √
u2 + v2 + 1dudv = 1 1−u
1
a(G(f )) 1 − u2 − v2 1 − u2 − v2 −1 −
√ 1 − u2
— v2 dvdu.
U
= √
1−u2

La integral es impropia, pero se puede



calcular:
√ 1−u
1−u2
∫ 2
√ 1 dv = √ v .
2 arcsin
1 − u 2 .−√1−u2
√ 1−u = arcsin(1) − arcsin(−1) = 2 arcsin(1) = π.
− 1−u2—
v
Entonces, √
∫ 1
∫ 1−u2
∫ 1
−1 − 1
a(G(f )) 1 − u2 πdu = 2π.
— v2 dvdu =
√ −1
=
1−u2

Teorema 10.3.6 (de Pappus). Sea f : [a, b]→ R una función continua (positiva o negativa) en
[a, b] y de clase C1 en (a, b). Considere la superficie de revolución Rf obtenida al girar la gráfica
de f alrededor del eje X. Entonces,

a(Rf ) = 2π ∫ b √
|f 1 + (fJ(x))2dx.
(x)|
a

Figura 10.15: Rotación de la gráfica de f alrededor del Eje X.


(Imagen tomada de Marsden & Tromba - Cálculo Vectorial).

Demostración: La parametrización en este caso viene dada por

X(x, θ) = (x, f (x) cos(θ), f (x) sin(θ))

donde x ∈ [a, b] y 0 ≤ θ ≤ 2π. Acá, θ es el ángulo de rotación respecto al plano XY . Al ser


f continua en [a, b] y de clase C1 en (a, b), tenemos que X es continua en [a, b] × [0, π] y de
clase C1 en (a, b) × (0, 2π). Veamos que X es regular:
∂X
= (1, fJ(x) cos(θ), fJ(x) sin(θ)),
∂X = (0, −f (x) sin(θ), f (x) cos(θ)),

∂x ∂θ
∂X . i j k .
∂X
× = 1 f J (x) cos(θ) f J (x) sin(θ) = (f (x)f J (x), −f (x) cos(θ), −f (x) sin(θ)).
∂x ∂θ . 0 −f (x) sin(θ) f (x) cos(θ) .
∂X
Estudiemos ahora cuando ∂X
× = 0. Vemos que lo anterior ocurre si, y solo si,
∂x ∂θ

f (x)fJ(x) = 0,
 f (x) cos(θ) = 0,

f (x) sin(θ) = 0.

Como f no tiene puntos de corte en [a, b], el sistema anterior nos queda:
 J
f (x) = 0,
 cos(θ) = 0,
 sin(θ) = 0.

No existe solución ya que cos(θ) y sin(θ) no se anulan al mismo tiempo. Por lo tanto, X es
regular. Así, el área de Rf viene dada por:
) = ∫∫
a(Rf .. ∂X × .. dxdθ
.. ∂θ ..
[a,b]×[0,2π]
∂x
= ∫ ∫ (f (x))2(fJ(x))2 + (f (x))2 cos2(θ) + (f (x))2 sin2(θ)dθdx
0

a
∫ b∫q2π b

= 2π |f 1 + (fJ(x))2dθdx = 2π ∫ b |f
1 + (fJ(x))2dθ.
(x)| (x)|
a 0 a

10.4 Orientación de una superficie


En el estudio de integrales de línea, vimos dos tipos: para campos escalares y para

campos vectoriales. Ocurrirá algo similar con las integrales de superficies. Así como
vimos que la integral de línea de un campo vectorial cambia de signo si se cambia la
orientación de la curva sobre la cual se integra, tendremos una propiedad similar para
las integrales de superficie de campos vectoriales en relación al concepto de orientación
de una superficie, que detallaremos a continuación.

Definición 10.4.1. Sea S una superficie que admite una parametrización regular, y p ∈ S. Un
vector n ∈ R3 no nulo es norMal a S en p si ⟨n, v⟩ = 0 para todo v ∈ Tp(S).

Definición 10.4.2. Una orientación sobre una superficie S (como en la definición anterior) es
un campo vectorial continuo N : S → R3 tal que N (p) es un vector normal unitario a S en p, para
todo p ∈ S. Se dice que S es orientable si admite una orientación.
En dos de los ejemplos mostrados más adelante, para ver que una superficieS no es ori-
entable, bastará ver que cierto campo normal p›→ np construido a partir de X : U → R3
(una parametrización regular de S) no es continuo. Esto se debe a que toda superficie
orientable admite únicamente dos orientaciones, como veremos en breve.

Para el siguiente resultado, tenga en cuenta que siS es una superficie paramétrica ori-
entable con parametrización inyectiva X : U→R3, entonces se tiene una orientación dada
por
∂X
∂u
(u, v) × ∂X
∂v
(u, v)
S s p ›→ .. ∂X

∂X
(u, v) × ∂ (u, v)..
u v
donde p = X(u, v) con (u, v) ∈ U único.

Proposición 10.4.3. Sea N : S → R3 una orientación de una superficie paramétrica orientable S,


con parametrización X : U ⊆ R2 → R3 inyectiva y regular con U conexo (y por ende S conexa).
Entonces, existe σ = ±1 tal que
∂X ∂X
∂u (u, v) × ∂v (u, v)
N (p) = σ
.. ∂X
(u, v) × ∂X
(u, v)..
∂ ∂
u v
para todo p = X(u, v) ∈ S. Cuando σ = 1, se dice que X preserva la orientación N , mientras
que cuando σ = −1, se dice que X revierte la orientación de N .

Demostración: Primero probaremos el resultado en U ◦ (descartando de U◦ el número


finito de puntos en los cuales X no es regular, en caso de haberlos). Entonces, sea p
∈ S con p = X(u, v) donde (u, v) ∈ U ◦ es único. Consideremos en el punto p los
.. .
vectores
∂X .
.. ∂X (u, v) × ∂X (u, v)... Al ser estos vectores
N (p) = N (X(u, v)) y ∂X ∂u (u, v) × ∂ (u, v)/ ∂ ∂
normales y unitarios, se tiene v u v

que ∂X
(u, v) × ∂X (u, v) ∂X
(u, v) × ∂X (u, v)
N (X(u, v)) = ∂X ∂u ∂v .. ∂u ∂v
.. ∂ (u, v) × o
∂X
N (X(u, v)) = − .. ∂X .
v)..
∂ (u, (u, v) × ∂X (u, v)
u v ∂ ∂
u v

La idea es probar que se cumple únicamente una de estas dos igualdades para
cualquiera que sea el punto escogido p, es decir, no puede ocurrir la igualdad con signo
positivo para un punto p1, y la otra con signo negativo para otro punto p2. Para esto,
consideremos el campo escalar f : U ◦ → [0, +∞) dado por
X
..
∂∂u
× ∂∂vX ..
.. .. ∂ ∂
...
f (u, v) = .×N (X(u, v)) ± ∂Xu v
∂X
.
Este campo es claramente continuo. Entonces, f (u, v) = 0 o f (u, v) = 2 para todo (u, v) ∈
U ◦ , debido a la continuidad de f y por ser U conexo. Supongamos que se da el primer
caso. Entonces,
∂X ∂X
(u, v) × (u, v)
∂u ∂v
N (p) = .. ∂X

(u, v) × ∂X

(u, v)..
u v
para todo (u, v) ∈ U ◦ . El caso f ≡ 2 se trabaja de forma análoga.

Ahora supongamos que el campo p ›→∂ ∂X (u, v) ×∂ ∂X (u, v)/ ..∂ ∂X (u, v) ×∂∂X (u, v)..
también
está definido para (u, v) ∈ ∂U . El ucampo anterior,
v juntou con ›→
p Nv (X(u, v)) son

funciones continuas sobre U que coinciden en U . Por propiedades de continuidad para
campos vectoriales, se tiene que estos dos campos coinciden también en U = U ∩ ∂U (por
lo cual también coinciden en ∂U ). Queda entonces demostrado en resultado.
Gracias al resultado anterior, podemos definir orientación positiva y negativa para una
superficie orientable.

Definición 10.4.4. Sea S una superficie paramétrica orientable, con parametrización regular in-
yectiva X : U → R3. El campo
∂X
(u, v) × ∂X (u, v)
p ›→ .. ∂u
∂X ∂v
(u, v) × ∂X (u, v)..
∂ ∂
u v
define la orientación exterior o positiva de S, mientras que
∂X
(u, v) × ∂X (u, v)
p ›→ − ..∂u∂X (u, ∂v
∂X
v) × ∂v (u,
v)..
∂u

define la orientación interior o negativa de S.

En términos coloquiales, una superficie es orientable si tiene dos lados, a saber, un lado
indicado por la orientación exterior, y el otro indicado por la orientación interior.

El siguiente resultado es consecuencia de la proposición anterior, y su demostración se


deja como ejercicio.

Corolario 10.4.5. Sean N1 y N2 orientaciones de una superficie paramétrica conexa S, que


ad- mite una parametrización inyectiva y regular. Entonces, o N1 = N2 o N1 = −N2.

Ejemplo 10.4.6 (Superficie orientable). Consideremos la esfera unitaria S2 con la


parametrización de coordenada esféricas X : (0, 2π) × (0, π) → S2 dada por

X(u, v) = (sin(v) cos(u), sin(v) sin(u), cos(v)).


Para esta parametrización, tenemos el campo normal unitario
∂X ∂X
× ∂v (sin2(v) cos(u), sin2(v) sin(u), cos(v) sin(v))
∂u
N (X(u, v)) = .. ∂X ∂X ..=

× ∂ ||(sin2(v) cos(u), sin2(v) sin(u), cos(v)
(sin (v) cos(u), sin2(v) sin(u), cos(v) sin(v))
2
sin(v))||
u v
=
sin(v)
= (cos(u) sin(v), sin(u) sin(v), cos(v)).

Al ser continuo el campo vectorial X(u, v) ›→ (cos(u) sin(v), sin(u) sin(v), cos(v)), tenemos que
S2 es orientable.

Ejemplo 10.4.7 (Superficies no orientables).

1. Cinta de Möbius: La cinta de Möbius se define considerando un segmento de recta AB de


longitud menor que 2, perpendicular al plano XY y con centro en el punto (0, 2, 0). Luego,
movemos el centro de este segmento a lo largo de la curva determinada por la
circunferencia x2 + y2 = 4 en el plano XY . Al mismo tiempo, hacemos rotar el segmento
AB sobre su centro. Este movimiento se hace de tal manera que, cuando el centro haya
barrido un ángulo de u radianes, el segmento barre u/2 radianes al rotar alrededor de su
centro.

Figura 10.16: Movimientos de rotación de AB.

Cuando el segmento regrese a su posición inicial, es decir, con centro en (0, 2, 0), la
superficie resultante se conoce como cinta de Mob¨ ius.

Figura 10.17: Cinta de Moëbius.


Teniendo en cuenta lo anterior, podemos dar una parametrización X : [0, 2π]× [− 1, 1] → R3
mediante

X(u, v) = (sin(u)(2 − v sin(u/2)), cos(u)(2 − v sin(u/2)), v cos(u/2)).

Figura 10.18: Parámetros en la cinta de Moëbius.

Estudiemos esta parametrización:

∂X u v u
= 2 cos(u) − v cos(u) sin − sin(u) cos ,
∂ 2 2 2
u u v u v u
−2 sin(u) + v sin(u) sin − cos(u) cos , − sin ,
2 2 2 2 2
∂X u u u
= − sin(u) sin , − cos(u) sin , cos .
∂ 2 2 2
v
Calcular el campo normal X(u, v) ›→ ∂∂X × ∂X ∂
/ .. ∂X

× ∂X

.. puede resultar tedioso.
Sin
embargo, tengamos en cuenta que el objetivo
u ves probar
u quev la cinta de Möbius no es ori-
entable, es decir, que el campo anterior no es continuo. Entonces, se suficiente probar la
no continuidad dentro de cualquier camino en el dominio del campo normal. Escojamos un
camino sencillo de trabajar, como por ejemplo, la curva sobre la cinta de Möbius
determinada por v = 0. Llamemos a esta curva C.

Figura 10.19: Camino v = 0.


(Imagen tomada de Marsden & Tromba - Cálculo Vectorial).
Sea p = X(u, 0) ∈ C. Tenemos entonces
∂X
(u, 0) = (2 cos(u), −2 sin(u), 0),
∂u
∂X
(u, 0) = (− sin(u) sin(u/2), − cos(u) sin(u/2), cos(u/2)),
∂v
∂X ∂X i j k
(u, 0) . 2 cos(u) −2 sin(u) 0 .
(u, 0) × =
∂u ∂v . — sin(u) sin(u/2) − cos(u) sin(u/2) cos(u/2) .
= −2(sin(u) cos(u/2), cos(u) cos(u/2), sin(u/2)),
.. ∂X (u, 0) × ∂X (u, 0).. = 2qsin2(u) cos2(u/2) + cos2(u) cos2(u/2) + sin2(u/2) =
.. ∂u ∂v ..
2.
Tenemos sobre C el campo normal

N |C : p = X(u, 0) ›→ −(sin(u) cos(u/2), cos(u) cos(u/2), sin(u/2)).

Veamos que N |C no es continuo en (0, 2, 0). Supongamos lo contrario. Note que (0, 2, 0) =
X(0, 0) = X(2π, 0), por lo que si N |C es continuo en (0, 2, 0), se tiene que cumplir que

lim N (X(u, 0)) = lim N |C(p) = lim N (X(u, 0)).


u 0,
→ →(0,2,0) u→2π,
v=0
p
v=0

Sin embargo, el límite de la izquierda vale (0, −1, 0), y el de la derecha vale (0, 1, 0). Por lo
tanto, N |C no es continuo en (0, 2, 0).

Figura 10.20: Hormigas caminando sobre una cinta de Möbius.


Pintura “Möbius strip II”, por M. C. Escher (1963).
(Imagen tomada de Marsden & Tromba - Cálculo Vectorial).

Intuitivamente, podemos pensar en el hecho de que la cinta de Möbius no es orientable


de la siguiente manera. Supongamos que vamos a caminar sobre una cinta de Möbius
gigante hecha de un material transparente, y se nos da un disco pintado por ambas caras
con colores
diferentes (digamos rojo y azul) para marcar nuestro punto de partida. Colocamos el disco
sobre el “suelo” con el lado rojo apuntando hacia nosotros, y empezamos a caminar recto y
a velocidad constante. Eventualmente llegaremos a nuestro punto de partida, el disco, pero
al llegar veremos su cara azul.

2. Botella de Klein: Consideremos la curva ocho α : [0, 2π] → R2 dada por

α(t) = (sin(t), sin(t) cos(t)).

Figura 10.21: Curva ocho.

La superficie conocida como botella de Klein se genera al rotar una curva ocho centrada
en un punto (0, a, 0), de forma parecida a como se hizo en el ejemplo anterior, a lo largo de
la circunferencia x2 + y2 = a2 en el plano Z = 0, para algún a > 0.

Figura 10.22: Movimiento que genera la botella de Klein.

Al movimiento descrito se le puede dar la siguiente parametrización:

X(u, v) = (((a + cos(u/2)) sin(v) − sin(u/2) sin(2v)) cos(u),


((a + cos(u/2)) sin(v) − sin(u/2) sin(2v)) sin(u),
sin(u/2) sin(v) + cos(u/2) sin(2v)).

Como ejercicio, compruebe que esta superficie no es orientable.


Figura 10.23: Botella de Klein.

Cerraremos estas notas explicando qué significa que el borde de una superficie
orientable esté orientado. Para empezar, aunque ya tenemos cierta idea, debemos
especificar qué significa que una superficie tenga borde.

Definición 10.4.8. Sea S una superficie paramétrica con parametrización inyectiva y regular (a
trozos) X : U ⊆ R2 → R3 tal que:

1. U es acotado.

2. ∂U es una curva regular (a trozos) de R2 cerrada simple.

3. X se puede extender a U de tal manera que X|∂U es inyectiva, de clase C1, y dXx 0 es in-
yectiva para todo x0 ∈ ∂U.

Al conjunto X(∂U ), que denotaremos como ∂S, se le conoce como borde de S.

Note que ∂Ses una curva simple en R3, ya que X ∂U es inyectiva. ¿Qué hay de su regular-
|
idad? Consideremos b] R2.
una parametrización simple y regular de ∂U , digamos β : [a, →
Entonces, α := X β◦ es una parametrización de ∂ .SEs claro que α es inyectiva. Por otro
lado, se tiene por la regla de la cadena que

αS (t) = dXβ(t) (β S (t)) /= 0.

Lo anterior se debe a que dXβ(t) es una transformación lineal inyectiva, y a que βS(t) /=
0.Por lo tanto, ∂S es una curva cerrada simple y regular.

Ahora, si Ses una superficie orientable con borde, ¿qué significa que el borde esté orien-
tado? Esto lo especificaremos a continuación.
Definición 10.4.9. Sea S una superficie paramétrica con borde, con parametrización X : U ⊆
R2 → R3 que cumple las condiciones de la definición anterior. Supongamos que S es orientable,
.. ..
con orientación dada por el campo normal (u, v) ›→ ∂∂X × ∂∂X / .. ∂∂X × ∂X

.. . Diremos que la
cerrada
curva ∂S está orientada positiva Mente si ∂U admite
u una
v parametrización
u v β : [a, b] → R2 tal
que la orientación de α := X ◦ β sea coherente con la de S, es decir,
∂X ∂X
(β(t)) × (β(t))
∂u ∂v
nα(t) = ..
(β(t))..
∂X ∂X .
∂ (β(t)) × ∂
u v
Intuitivamente, que ∂U tenga orientación positiva coherente con la orientación de S sig-
nifica, informalmente hablando, que al recorrer el borde de la superficie, con el vector
normal siempre apuntando “hacia arriba”, la la superficie siempre queda “a la
izquierda”.

Figura 10.24: Superficie orientable con borde.

Escrito en LATEX por Marco A. Pérez.

Material consultado:
• Geometría Diferencial de Curvas y Superficies, notas de M. A. Pérez.
• Cálculo Vectorial, de Jerrold E. Marsden y Anthony J. Tromba.
• Cálculo Vectorial, notas de A. González.
Última actualización: 28 de Octubre de 2020.

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