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ANEXO 2

Residuos sólidos
(Ficha informativa para docentes)

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Fuente: Guía de capacitación a recicladores para su inserción en los programas de formalización municipal. MINAM (2010).
2
Reciclaje de residuos orgánicos domiciliarios

¿Por qué reciclar? Porque haciéndolo nos sentimos responsables de nuestros actos como
consumidores y consumidoras y ejecutamos un acto de amor hacia nuestro planeta.

¿Para qué reciclar? Para contribuir a mantener nuestro pueblo más limpio y una calidad de vida
digna para sus habitantes.
Primero debemos tener en cuenta que para poder aprovechar nuestros residuos tendremos que
separarlos usando un recipiente para los orgánicos y otro para los inorgánicos.
Los residuos orgánicos que generamos en nuestro domicilio son una fuente de nutrientes muy
buena para enriquecer el suelo, si tenemos una huerta o un jardín. Si vivimos en el campo o en la
ciudad, podemos utilizar estos residuos como abono que se puede obtener a través de un cajón de
compost.

¿Y los residuos inorgánicos?


En general, nuestros residuos inorgánicos domiciliarios están compuestos por papel y cartón,
plásticos, metales, elementos de control sanitario (pañales, toallas higiénicas, algodones, etc.),
vidrios y otros (madera, trapos, cuero, goma, pilas).
Como consumidores responsables, podemos reducir la cantidad de residuos domiciliarios
mediante dos sencillas acciones:
- Evitando comprar artículos innecesarios.
- Evitando la compra de artículos que tengan muchos envoltorios y envases desechables o
no reutilizables (bandejas de tecnopor, bolsas plásticas, etc.)
Cuando vayamos de compras, podemos hacernos las siguientes preguntas: ¿Realmente necesito
este artículo? ¿Puedo comprar el mismo artículo sin tanto envoltorio? ¿Qué utilidad puedo dar al
envase que lo contiene?
Este sencillo ejercicio nos hace más consientes y responsables como consumidores.

La importancia de considerar las 5 R


La regla de las 5 R, también es conocida como las 5 R de la ecología o simplemente 5 R, es una
propuesta sobre hábitos de consumo popularizada por la organización ecologista Greenpeace, que
pretende desarrollar hábitos generales responsables, como el consumo responsable. Este
concepto hace referencia a estrategias para el manejo de residuos que buscan ser más

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sustentables con el ambiente y específicamente dar prioridad a la reducción en el volumen de
residuos generados. Las 5 R son:

Reducir. Si reducimos el problema, disminuimos su impacto en el ambiente. Los problemas de


concientización los solucionaríamos con esta R. La reducción puede realizarse en dos niveles:
reducción del consumo de bienes o reducción de consumo de energía. De hecho, actualmente la
producción de energía genera numerosos desechos (nucleares, dióxido de carbono, etc.). El
objetivo sería:
- Reducir o eliminar la cantidad de materiales destinados a un uso único (por ejemplo, los
embalajes).
- Adaptar los aparatos en función de las necesidades (por ejemplo, usar las lavadoras llenas y
no con media carga).
- Reducir las pérdidas energéticas o de recursos: agua, desconectar aparatos eléctricos,
desconectar transformadores, etc.

Reutilizar. Segunda R en importancia, igualmente debido a que reduce indirectamente el impacto


en el ambiente. Esta R se basa en reutilizar un objeto para darle una segunda vida útil. Todos los
materiales o bienes pueden tener más de una vida útil, bien sea reparándolos para un mismo uso
o usándolos con imaginación de una forma diferente.
Ejemplos: utilizar la otra cara de las hojas impresas, rellenar botellas.

Reciclar: Esta es una de las R más populares debido a que el sistema de consumo actual prefiere
usar envases de materiales reciclables (plásticos sobre todo), pero no biodegradables. De esta
forma se necesita el empleo de personal y de energía en el proceso.
Ejemplo: el vidrio y la mayoría de plásticos se pueden reciclar calentándolos hasta que se funden y
se les da una nueva forma. Es como utilizar algo nuevo, aunque la eficiencia no es de 100% en
general. En el caso del vidrio, sí es completamente reciclable: de una botella se puede obtener
otra botella.

Rechazar: Esta R se refiere a no comprar productos que dañen al ambiente (aerosoles, esterofam,
poliestireno mal llamado “tecnopor”, pilas descartables o productos que no se pueden reciclar);
también rechazar demasiados empaques y alimentos y bebidas no saludables (como gaseosas en
general, bebidas alcohólicas, artificiales o de dudosa procedencia o calidad).

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Responsabilidad: Se trata de asumir el rol de contribuir al buen ornato de la institución educativa
y de la ciudad, sensibilizar a las personas sobre el manejo apropiado de los residuos, asumir el
compromiso de minimizar la generación de residuos sólidos y sumarse a la campaña “Residuo 0”

Tener en cuenta la Guía ciudadanía ambiental. Educación en ecoeficiencia MINAM (2012, págs. 44-47).

Fuente: Guía ciudadanía ambiental. Educación en ecoeficiencia. MINAM (2012).

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