Mar 25_2021 No podéis estar ya

dudosos sobre si creer o no creer, si

amar o no amar, si mostraros como
hijos de Dios o sentir vergüenza por
ello. O estáis con Nuestro Dios o
estáis en contra de Él.
1 de mayo del 2021 ML

Rosario matutino – Mensaje ÚNICO

=================================
Mensaje de la Santísima Virgen María a J. V.
=================================
.

Tercer Misterio. Habla la Santísima Virgen María.

(Lenguas…) Hijitos Míos, Soy vuestra Madre, la siempre Virgen María. Yo os

acompaño siempre que estáis unidos orando, alabando, agradeciendo, y
cuando tenéis algún problema, siempre estoy presurosa a ayudaros.

Mis pequeños, sabéis, porque así os lo ha dado a conocer Mi Esposo, el Santo

Espíritu de Amor, que estáis viviendo momentos de tribulación, ataques muy
fuertes de satanás, pruebas muy fuertes que está viviendo esta humanidad
porque se ha alejado de Mi Señor y Mi Dios.

Me duele tanto, Mis pequeños, y estoy ante Mi Señor, arrodillada y con la

cabeza baja, pidiendo perdón por vuestros pecados. Sois Mis hijos y una
madre vela por todo lo que los hijos hacen, cosas buenas y cosas malas, pero
esta humanidad se ha descarriado fuertemente.

Cuánto Me duele veros, Mis pequeños, cometiendo tantos errores, permitiendo

que la maldad habite no solamente en vuestros hogares, sino en vosotros
mismos. No habéis hecho gran cosa para tratar de vencer a las fuerzas de
satanás, para que no os molesten y no os desvíen de vuestra misión para la
cual fuisteis enviados a la Tierra.

Os pregunto: ¿Quién es vuestro Creador? La respuesta la sabéis: Él es

todo Amor y no os puede mandar a hacer cosas malas. Vuestra misión es
de Amor, Mis pequeños. Meditad lo que habéis hecho durante vuestra
existencia ¿Qué tanto amor habéis producido a vuestro alrededor? ¿Con qué
tanto amor habéis amado a Nuestro Dios y Señor, vuestro Creador? ¿Con qué
tanto amor y agradecimiento habéis amado a Mi Hijo que se dio por vosotros?
¿Con qué tanto agradecimiento y amor os dirigís a Mi Esposo, el Santo Espíritu
de Amor?

Todo es Amor a vuestro alrededor y debiera ser mantenido en vosotros y

a través de vosotros, así es en el Cielo, y Mi Hijo os trajo la forma de vivir
el Cielo en la Tierra y era así, meditando lo que os acabo de decir, quién
es vuestro Creador y que la misión que tenéis es simplemente de Amor,
porque Él no os puede mandar a hacer cosas diferentes a lo que es Él
mismo: Amor. Si estáis obrando de otra forma, no estáis llevando a cabo
vuestra misión Divina; si vuestros actos no son de amor, si no estáis viviendo el
amor, si no lo estáis transmitiendo a vuestros hermanos, es satanás el que vive
en vosotros y es el que os obliga a actuar en el mal.

Mis pequeños, Mi Hijo se dio por todos vosotros, tenéis a vuestro favor la
Redención, Su Sangre Preciosísima y Salvadora, Sus Enseñanzas Divinas, Su
ejemplo del Cielo puesto aquí en la Tierra. Vosotros no debéis actuar de otra
forma más que en el Amor, porque para eso vinisteis, para ir destruyendo
la maldad de satanás con vuestros actos de amor.

Ciertamente sois débiles, ciertamente os dejáis mover fácilmente hacia las

cosas del mundo porque os falta Fe, porque preferís lo tangible a lo espiritual,
se os hace más fácil vivir y creer en lo que veis y tocáis que en lo que debierais
gozar al saber que viviMos en vosotros. Eso os debiera llevar a una gran
alegría espiritual.

Así era el vivir de Adán y Eva antes del Pecado Original, ellos eran su Paraíso,
ya os lo heMos explicado, ellos eran el Paraíso Terrenal. Mi Señor y Mi Dios
entraba en ellos y se gozaba en ellos por su Pureza, por su Amor hacia Él y
hacia todo lo Creado, por su Alegría Santa.

Ciertamente, satanás se ha encargado de quitaros ese amor hacia Nuestro

Dios y Señor, os ha hecho olvidar el agradecimiento que debierais tener hacia
Él en todo momento de vuestra existencia. Los ataques de satanás son
continuos hacia vosotros, hacia vuestra vida, hacia vuestros pensamientos,
hacia vuestros actos, pero Nuestro Dios y Señor os protege para que no os
desviéis, para que no caigáis en el error y eso no lo meditáis, no lo
agradecéis y seguís viviendo en el error, en la maldad.
Tenéis todo para vivir en una Alegría Santa y Divina, pero la despreciáis por el
“qué dirán” o por vuestras conveniencias personales. No os habéis atrevido ya
a mostrar lo que queréis; si queréis ser hijos de Dios, debéis tener la valentía
de mostraros como Se mostró Mi Hijo cuando estuvo en la Tierra. Ciertamente,
por un lado fue aceptado, por otro lado repudiado, pero vino con esa valentía
de decir: “Soy Hijo de Dios y aquí estoy para mostrar lo que se vive en el Cielo
y os lo vengo a enseñar”. Esa es la valentía que debéis tener vosotros si
realmente creéis y amáis a vuestro Dios y Señor.

A veces os avergonzáis de mostrar amor, el amor que debierais gozar. El amor

pleno en vosotros debe ser un gozo continuo y, ciertamente, satanás os ataca
porque, cuando vivís en ese gozo continuo, no os puede hacer nada y eso es
dejar que Mi Hijo viva en vosotros, ser los Cristos que van a luchar contra
satanás en estos tiempos. No podéis estar ya dudosos sobre si creer o no
creer, si amar o no amar, si mostraros como hijos de Dios o sentir
vergüenza por ello. O estáis con Nuestro Dios o estáis en contra de Él.

Habéis sido escogidos para vivir estos momentos de Amor y de gran lucha
contra satanás, porque él os quiere arrebatar el Amor, el verdadero Amor. En
vosotros está el defender con valentía la Presencia de Mi Hijo en vosotros
y, si no lo hacéis, fácilmente seréis vencidos por vuestra duda, porque no
estáis conformes con la Verdad que os vino a enseñar Mi Hijo. O estáis
con Él o estáis en contra de Él, y si sois tibios, vuestro destino también
será el repudio de Nuestro Dios y Señor.

Sois hijos de Dios. Vuestros hermanos, los Santos, los que se han ganado un
lugar especial en la historia, tenían esa valentía, murieron defendiendo esa
valentía, no fueron tibios, fueron valientes y defendieron lo que creían. Ya no
es tiempo para dudar, Mis pequeños, son tiempos de enfrentarse a las
fuerzas satánicas, pero no os enfrentaréis solos, Mi Dios y Señor, a través
del Santo Espíritu, Mi Esposo, estará con vosotros, pero deberéis mostrar
valentía y decisión fuerte de luchar contra las fuerzas de satanás que
pronto se soltarán contra todos vosotros, los que amáis a Nuestro Dios y
Señor. La humanidad todavía no conoce su maldad en pleno y si estáis
dudando del Amor de Nuestro Dios, que es el que os protege contra las fuerzas
de satanás, la pasaréis muy mal y quizá hasta seréis vencidos por las fuerzas
de satanás.

Ya no es tiempo de dudar, es tiempo de actuar en la Verdad y en el Amor,

con una valentía que os debe de sobrepasar y que, ciertamente, ésta os la
dará Mi Esposo, el Santo Espíritu de Amor. Dejad, pues, que Él tome todo
vuestro ser, que Mi Hijo os dé esa Fuerza y Valentía con la que Se dio para
redimiros, y mostrad, mostrad a Nuestro Dios y Creador que sí sois los hijos
que Él pensó, cuando os dio el Don de la vida, que Le iban a dar grandes
alegrías para transformar a este mundo de maldad en el mundo de Amor que
Él creó en el Principio.

Sed valientes, el Cielo entero está con vosotros.

Gracias, Mis pequeños.