Está en la página 1de 3

Oct 11_2022 Dejad los miedos, no

permitáis que satanás os siga desviando,


os siga metiendo miedos, os siga
debilitando, porque si así lo permitís, ya
estaréis vencidos.
25 de octubre del 2022 ML
AddThis Sharing Buttons
Share to Facebook
Share to TwitterShare to ImprimirShare to CorreoShare to GmailShare to Más...

Mensaje – ÚNICO de madrugada

================================

Mensaje de La Santísima Virgen María a J. V.

================================

Habla La Santísima Virgen María

Hijitos Míos, (Lenguas…) Soy vuestra Madre, La Siempre Virgen María. Os quiero
venir a prevenir de la forma en que estáis tomando estos acontecimientos que se os
están anunciando.

Los estáis tomando de una forma incorrecta. Imaginad a David peleando contra Goliat,
saliendo con gran temor, con inseguridad, creyéndose él, prácticamente, vencido,
¿creéis acaso vosotros, que vencería? No, Mis pequeños.

Estáis sobreestimando el poder de satanás contra vosotros, ciertamente, es más poderoso


que vosotros, pero se os ha dicho que si vosotros contáis, plenamente, con Nuestra
ayuda Celestial, él no os podrá hacer daño.

Seis meses antes de que empezara, lo que vosotros llamáis “pandemia”, le avisé a Mi
hijo Javier, que el arma más poderosa de satanás contra vosotros, es el miedo.
Meditad en esto, Mis pequeños, el miedo os ha ido venciendo.

No habéis pensado correctamente y ahora, después de un poco más de dos años, que 
habéis estado en confinamiento, con múltiples problemas familiares, emocionales, de
salud, económicos, seguís con miedo y satanás se ríe de vosotros, porque estáis
vencidos. Os lo digo así, enfáticamente, porque os ha vencido el miedo. Se os avisa,
con manipulación de aquellos que están con satanás, que se acerca otra “pandemia”, y
¿cómo lo estáis enfrentando?, con miedo.

Me duele tanto veros, Mis pequeños, Me duele tanto veros, que no os estáis preparando
espiritualmente. Tantas veces que se os ha dicho que no es vuestro cuerpo el que vale en
vosotros, sino vuestra alma.

¿Cómo os estáis preparando para presentaros contra el enemigo, el enemigo real que
viene, el Anticristo? Estáis temerosos. Un soldado temeroso, es mejor que se retire de la
pelea, porque caerá fácilmente contra el enemigo.

Otros, ¿qué estáis haciendo?, algunos se esconden en bunkers, porque, también, se os


avisa que vienen cosas tremendas de los cielos. Otros llenan sus alacenas, porque os
hablan de hambrunas. Más miedo. Mi Hijo os dijo: “buscad primero el Reino de Dios y
lo demás se os dará por añadidura”. El Reino de Dios es el Bien que debéis tener en
vuestras almas. Es la Gracia Divina que debe vivir en vosotros, y ¿cuántos de vosotros,
realmente, estáis llenándoos de la Gracia Divina?

Mis pequeños, os vuelvo a repetir, la gran mayoría de vosotros ha sido vencido por
satanás. No os estáis preparando para la gran batalla que se acerca, os seguís
llenando nada más de añadidura, y esa añadidura es Promesa de Nuestro Dios y
Señor, que se os da a vosotros por cumplir con la misión a la que habéis sido
asignados, cada uno de vosotros, aquí en la Tierra.

¿Dónde está, realmente, vuestro ser espiritual? También ese está vencido, porque no
vivís en estado de Gracia, no estáis buscando ni lo bueno para vuestra alma, ni lo bueno
para vuestro cuerpo, y satanás se sigue burlando de vosotros.

¿Por qué no entendéis, Mis pequeños? ¿Por qué no acudís a Nuestro Dios o a Mí,
vuestra Madre, para que podáis vencer ese temor que tenéis en vuestro ser? Os
repito: un soldado temeroso, ya está vencido. Y vosotros sois los soldados de este
tiempo los soldados que van a defender la Palabra de Dios, la vida en la Gracia, las
riquezas de la Iglesia y, sobre todo, a vuestra alma.

¿Acaso oráis lo suficiente? ¿Rezáis el Santo Rosario, diario, como se os ha pedido?


¿Vivís en estado de Gracia, y sobre todo, alimentándoos diariamente, del Alimento
Divino, que es la Sagrada Eucaristía? ¡No! La gran mayoría tendrá esa respuesta: No, no
os estáis preparando para la gran pelea, para la gran batalla.

Entended ya, Mis pequeños, apartad de vosotros el miedo, los hijos de Dios no deben
vivir en el miedo, el vivir en el miedo, es no vivir en la Voluntad Divina de Nuestro
Dios y Señor. Aquellos que viven en el Amor, que viven aceptando la Voluntad de
Nuestro Dios y Señor, no tienen miedo, porque saben que todo lo que venga a ellos, sea
bueno o malo, aparentemente, a ojos humanos, de ahí siempre surgirá un Bien, porque
Nuestro Dios y Señor, nunca, nunca va a traicionar el Amor que os tiene, siempre
buscará lo mejor para cada uno de vosotros, para vuestra salvación o para vuestra
vida en la Tierra, en la que podáis gozar de los Bienes creados.

Mis pequeños, acudid a los Sacramentos, poned primero vuestra alma en estado de
Gracia y luego, dejad que Mi Esposo, el Santo Espíritu de Amor, os guíe por el camino
correcto. Aceptad lo que Nuestro Dios tenga para vosotros cada día; aceptad lo que os
pase cada día, con amor, y pedidLe a Mi Santo Espíritu, Mi Esposo, el Amor, que os
dé la Paz y la aceptación de todo lo que venga en vuestra vida.

Ved, en las Sagradas Escrituras, los ejemplos de aquellos que aceptaban la Voluntad de
Dios, a pesar de lo que pasaba en sus vidas, y al final, todo resultaba en un bien, cuando
aceptaban lo que pasaba a su alrededor, en sus bienes, en sus familias, en sus
pertenencias. Nuestro Dios siempre tiene un bien para cada uno de vosotros, pero
vosotros no respondéis, ni como hijos, ni como hermanos, ni como soldados prestos
para la batalla. PedidLe, nuevamente, os digo, a Mi Esposo, El Espíritu Santo, que os
quite ese miedo, aceptando vosotros la Voluntad de Nuestro Padre Dios, para que
podáis ser esos soldados dispuestos a la lucha y a vencer a satanás.

Ya se os ha dicho que, si vosotros aceptáis que Mi Hijo entre en vosotros, y Él actúe en


vuestro bien y en el bien de vuestros hermanos, todo será un bien para todos, y
especialmente, para cada uno de vosotros.

No temáis, Mis pequeños, os ha dicho también Mi Hijo, no temáis, dejadMe a Mí entrar


en vosotros, para que podaMos vencer a satanás. Mientras no entendáis esto y no os
dejéis mover por la acción del Espíritu Santo, aceptando la Presencia Viva de Mi
Hijo en vosotros, y si no queréis aceptar esto, ya estáis vencidos. Mi Hijo os está dando
la Fortaleza, Él luchará con vosotros y por vosotros, dejad ya, todo aquello que os está
llevando a desviaros de vuestra misión, no busquéis la añadidura afanosamente, Él ha
prometido que os alimentará, reproduciendo vuestros alimentos, pero lo que importa
para Él, es el estado de vuestra alma.

Fortaleceos con la oración y con el Alimento de vida, os repito, la Sagrada Eucaristía.


Dejad los miedos, no permitáis que satanás os siga desviando, os siga metiendo
miedos, os siga debilitando, porque si así lo permitís, ya estaréis vencidos.

Gracias, Mis pequeños.

También podría gustarte