Está en la página 1de 5

Historia[editar]

Trompeta de terracota perteneciente a la cultura moche.

Antes del Virreinato del Perú, gran parte del territorio peruano constituyó
el Tahuantinsuyo incaico, que separó varias de las culturas más antiguas
como: chavin, paracas, moche, chimú, nazca y otras veinte menores. Los antiguos
pobladores de la cultura nazca fueron los músicos precolombinos más importantes del
continente, empleando diversas escalas diatónicas y cromáticas en sus antaras de
cerámica, a diferencia de las 5 notas de las melodías incaicas.
Luego del Virreinato, cientos de años de mestizaje cultural han creado un
amplio paisaje musical a lo largo del Perú. Instrumentos típicos usados son, por ejemplo,
la quena y la antara o zampoña, el cajón afroperuano y la guitarra tradicional, que en el
Perú tiene además una variante de menor tamaño, conocida como charango y
la mandolina. Existen miles de danzas de origen prehispánico y mestizo. La sierra centro,
norte y sur de los Andes es famosa por conservar los ritmos tradicionales del huayño y
el pasacalle. Estas representan las diferentes culturas habidas en la sierra de este país y
aquellas vigentes actualmente.

Música, danza y canto durante la época incaica[editar]


Para los Incas, la música, la danza y el canto se definían con el término taki. La música
incaica fue pentatónica, combinando las notas re, fa, sol, la y do para crear composiciones
que podían ser de carácter religioso, guerrero o profano. 1La danza, música y canto
estaban presentes en todas las actividades comunales o rituales, documentándose la
existencia de las siguientes danzas:

 uaricsa arahui o danza del inca.


 llamaya, danza pastoril.
 harahuayo, danza agrícola.
 cashua, danza de galanteo en las parejas.
 aranyani, danza de los enmascarados.
 haylli arahui, danza para celebrar victorias en la guerra.
 puruc aya, danza fúnebre.
Asimismo, los incas utilizaron una gran diversidad de instrumentos musicales,
documentándose algunos como:

 las pomatinyas: tamborcitos fabricados con piel de puma.


 las guayllaquepas: trompetas hechas con strombus
 el pinkillo: instrumento de viento similar a una flauta.
 las antaras: flautas de pan hechas con distintos materiales.
 el huancar o wankara: tambor grande utilizado por los varones.
 la tinya: tambor pequeño utilizado por mujeres.
En el caso de los tambores, generalmente se fabricaban de piel de camélidos pero hubo
algunos hechos con piel humana de líderes rebeldes o enemigos vencidos. También se
documentaron trompetas de metal hechas de oro, plata y cobre, así como instrumentos
hechos con osamentas de venados andinos o de perros. 1
En el canto destacaron las chaiñas, quienes eran mujeres dedicadas al canto en los
templos y que se caracterizaban por agudizar notablemente su voz.

La música durante el Virreinato[editar]


Con la conquista y la posterior época virreinal, el territorio peruano recibe la influencia de la
música europea y posteriormente afroperuana.2
Se documenta que Gonzalo Pizarro ordenó componer cánticos que realzaran su imagen;
posteriormente el virrey Conde de Lemos trajo desde España al compositor Tomás de
Torrejón y Velasco quien estando en la Ciudad de Los Reyes estrenó la musicalización
de La púrpura de la rosa, esta obra orquestada luego recorrería
el Cuzco, Charcas y Guatemala.2
Ya en la época borbónica se pusieron de moda los ritmos italianos. En aquella época
arriba a Los Reyes, Roque Ceruti, del cual en la actualidad se conservan partituras con
preminisencia del violín. Posteriormente el presbítero huachano José de Orejón y Aparicio,
discípulo de Tomás de Torrejón, compone La pasión según san Juan y varias cantatas,
destacando «Ah, del gozo».2
Uno de los primeros en fusionar los ritmos europeos con el folclore de la población de
origen africano es el presbítero Juan Araujo en el villancico Los negritos, incluyendo aquí
el particular estilo del español hablado por las comunidades de negros. 2
En el Cuzco, destacaron Ignacio Quispe y fray Esteban Ponce de León. El primero es
conocido por una cantata de burla titulada Ah señores los del buen gusto y el segundo por
la ópera-serenata Venid deidades.
Destaca también en Cuzco la pieza musical Hanakpachap, obra de Juan Pérez
Bocanegra, con letra en quechua. Esta pieza musical mantiene la pentafonía andina. Su
partitura fue publicada en Lima en 1631. Hanakpachap es la primera obra polifónica coral
de América.2
En cuanto a la danza durante la colonia se distinguen dos periodos según las dinastías
reinantes en la Metrópoli; el primero de influencia de la Casa de Austria (siglos XVI y XVII)
y el segundo de influencia borbónica (siglos XVIII y XIX). En la primera ingresa la música
flamenca, italiana y alemana, mientras que en la segunda ingresan los modelos franceses.
Adjunto al ingreso de estos estilos se inicia una evolución de la música criolla todavía
primitiva y los ritmos africanos.2
A fines del siglo XVI se bailaban en Lima:

 El totarque
 El puertorrico
 La chacona
 La valona
 La churumba
 La gallarda
En el siglo XVII se documentan:

 La pavana
 La alemanda
 La cadeneta
 La zarabanda
 La courante
Y durante el siglo XVIII, con la moda francesa llegan:

 El minuet
 La gavota
 El zapateo andaluz
La diversidad musical fue documentada en los últimos años de la colonia en los códices
de Martínez Compañón, en acuarelas en las que se observan danzas, como La
degollación del Inga o Los diablos; además de verse plasmados gran cantidad de
instrumentos como las zampoñas, clarines, guitarras, marimbas y quijadas. Los ritmos que
estuvieron de moda a fines del siglo XVIII e inicios del XIX fueron los yaravíes,
cascabelillos, cachuas y negritos.3
Tanto en la colonia como durante el inicio de la época republicana, la población no hacía
distinción entre la música sacra y la profana. Esta diferenciación se inicia muy vagamente
hacia 1813, hallándose documentos que hacen diferencia entre la música culta y la música
vulgar.3
Durante el gobierno del virrey Abascal, la ópera italiana tuvo mucha popularidad en Lima,
este virrey además trató de imponer los estilos de Andrés Bolognesi, Cimarosa, Paisiello y
Rossini. Luego de la independencia y posterior a un breve periodo en el cual estuvo de
moda la música local, Rossini volvió a acaparar los gustos de los limeños. 3
Hacia fines del siglo XVIII los profesores de danza eran en su mayoría negros, pero en
1790 se les prohibió esta actividad acusando a los profesores negros de inventar y
modificar los pasos legítimos de las danzas. A causa de esta prohibición empezaron a
proliferar las escuelas de bailes con docentes extranjeros. 3

Época republicana[editar]
A inicios del siglo XIX, en el Perú debió existir mucha música local, pero las partituras que
se han conservado, en su mayoría, son de música española. Las iglesias concentraron
gran parte de la música, tanto religiosa como profana. Las catedrales más importantes
contaron con orquestas propias, otras iglesias contrataban músicos para sus fiestas y
procesiones, en Lima se documenta la Orquesta de Indios del Cercado, con gran
convocatoria sobre los pueblos de Lima. 3
Luego de la independencia, los peruanos mostraron una gran predilección por los ritmos
musicales locales, prefiriendo a los músicos nacionales; durante 1820 y 1830 estuvieron
de moda algunas tonadillas del músico mulato José Bernardo Alcedo (autor del himno
nacional del Perú), tales como Los indios y el corregidor o Los negritos; a su vez las
comedias musicales peruanas tuvieron la predilección de los peruanos, en este periodo
tienen éxito las obras musicales El mágico peruano, La cora y La chicha. Estos gustos
fueron cambiando y las preferencias por los ritmos musicales europeos y las óperas
desplazaron a los ritmos nacionales en las urbes peruanas. 3
Los instrumentos preferidos durante este periodo fueron las guitarras, órganos, clavelines,
salterios, vihuelas, arpas y pianos; el Perú fabricaba estos instrumentos e incluso se
documentan exportaciones hacia Guayaquil y Guatemala, en el caso de las guitarras;
y Santiago de Chile, en el caso de los salterios.3
Los gustos musicales en cuanto a música europea se volcaron hacia Rossini, quien se
convirtió en el compositor preferido durante los años 40 del siglo XIX. Durante este periodo
el público autodenominado «culto» mostró un desprecio hacia la música nacional. Este
apego hacia la música europea no se debió por la ausencia de músicos locales (pues
existieron muchos en las clases populares), sino más bien por una cuestión de prestigio.
Además de Rossini, las obras de Donizetti y Verdi opacaron la música peruana entre las
élites y las clases medias.3
Con la época republicana nace la música criolla influenciada por el afrancesamiento del
minuet, el vals vienés, la mazurca polaca, la jota española y las expresiones mestizas de la
costa central. La producción musical a inicios del siglo XX fue muy intensa y los
compositores fueron en su gran mayoría gente de los barrios que se caracterizaban por
tener un estilo particular por cada barrio. A esta época se la conoce como la Guardia Vieja,
y sus composiciones no tenían partituras por lo cual no fueron registrados y muchos de
sus autores se perdieron en el anonimato. 4
El periodo industrial de la música criolla va acompañado de la masificación del fonógrafo,
esto fue un proceso lento; pero además la llegada del fonógrafo trajo consigo el ingreso al
Perú de ritmos foráneos como el tango y el fox-trot. Estos ritmos extranjeros en algún
momento desplazaron a la música criolla, evidenciándose en las letras de algunos valses
que decían:
ese estilo moderno
no debes aprender
En referencia al tango y al fox-trot, los compositores antiguos se resistían al
cambio y se habían vuelto tradicionalistas; esto se mantuvo hasta la llegada de
nuevos valores en los años 1920 entre los que destacaron Felipe Pinglo, Pablo
Casas, Alcides Carreño, entre otros. Se dice que Pinglo se hizo conocido en sus
inicios musicales como ejecutante de fox-trot, cosa que le dio la facilidad para
luego ingresar en los gustos musicales con la música criolla. Esta nueva
generación de los años 1920 se adaptó a los gustos musicales de entonces
fusionando la música criolla con otros ritmos, pero sin que pierdan su esencia
peruana.4
La industria criolla empezó a evolucionar, se separaron las funciones en los
conjuntos criollos, aparecen los arreglistas y los cantantes ya no son
necesariamente los que componen las canciones. A esto se le aumenta el inicio
de la radiodifusión en el Perú en 1935, con esto la música criolla deja de ser
exclusividad de los sectores populares y surge un sentimiento criollo que se
empieza a ver en Lima como lo nacional. 4
En 1944 se institucionalizó el Día de la Canción Criolla. Años después, el
presidente Odría invitó a los Troveros Criollos al Palacio de Gobierno. Según
Llorens (1983), el trasfondo de esto fue que las clases media y alta buscaron un
punto para legitimar su peruanidad en contraposiciòn de la migración de la zona
andina a la ciudad, estos grupos no aceptaban lo andino como símbolo nacional. 4

Música andina[editar]
Artículo principal: Música andina del Perú

A lo largo de los Andes peruanos, en cada pueblo, existe una gran variedad de
cantos y bailes que, como lo consignan numerosos cronistas, son juzgados de
«infinitos» por su diversidad. En la época incaica, se usaba la palabra taki para
referirse simultáneamente tanto al canto como al baile, pues ambas actividades no
estaban separadas una de la otra. Con la llegada de los españoles se producen
varios procesos de mestizaje musical, desapareciendo algunos takis y
transformándose otros. La música andina actual es toda mestiza, pues no existe
pueblo que no haya sido tocado por dicho proceso. Incluso, la mayoría de
instrumentos de uso en el área andina es mestizo. En Arequipa y los Andes del
Sur se ha difundido grandemente el yaraví, un estilo melancólico de canto, que es
uno de los tipos más difundidos de canto. La canción de origen andino peruano
más conocida es El cóndor pasa, una canción tradicional compuesta por el
compositor peruano Daniel Alomía Robles, quien la incluyó en
una zarzuela homónima, y que fue popularizada en los Estados Unidos por el
dúo Simon & Garfunkel. La composición original consiste en un himno al sol, lento,
seguido de una kashwa y una fuga de huayno.
Por otro lado está el huaylas, un alegre ritmo de los Andes centrales. Este es otro
tipo muy difundido de canto y danza. En Áncash se cultivan los ritmos del huayño,
la chuscada, el pasacalle y la cashua gracias al aporte de músicos prolíficos
como Víctor Cordero Gonzales quien a pesar de haber fallecido en 1949 aún
inspira a los músicos ancashinos del siglo XXI. El [huayno] es el género de música
andina peruana más popular, aunque su origen no se puede rastrear hasta la
época incaica, por lo que parece ser una creación netamente mestiza. Se cultiva
con distintas variantes en toda la serranía peruana. Un género similar es
el tondero de la costa norte peruana.

También podría gustarte