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-Etiología

Rara vez se conoce la etiología (Rosin y Harvey, 1985; Fossum, 1999; Merck, 2000; Bright,
2004). Ocasionalmente se encuentran como posibles causales cuerpos extraños, el trauma
romo causado por huesos o varillas mordidas por el paciente o por los collares de ahorque
(pues cualquiera de estos puede aplastar la glándula contra la mandíbula), sialolitos (Rosin y
Harvey, 1985; Fossum, 1999; Bright, 2004), o cualquier elemento que cause disrupción del
sistema de conductos y acumulación de mucus (Rosin y Harvey, 1985).

- Técnica quirúrgica: por favor vean todo y luego sacan sus conclusiones, el
video es el más explícito y se asemeja muchisimo mas al procedimiento realizado
ESCISIÓN DE LA GLÁNDULA SALIVAL MANDIBULAR O
sialoadenectomia de la glándula mandibular

La resección de la glándula sublingual sin incluir la mandibular no es practicable debido a su


cercanía. El tratamiento en estos casos es, casi siempre, la remoción del complejo glandular
mandibular-sublingual (Rosin y Harvey, 1985; Bright, 2004).

Las glándulas salivales mandibular y sublingual se extraen juntas porque la segunda guarda
relaciones íntimas con el conducto de la mandibular. La remoción de una traumatizaría a la
otra glándula. La extracción de las glándulas sobre el lado afectado es todo lo necesario para
la resolución del mucocele, sin embargo, ambos pares de glándulas mandibulares y
sublinguales pueden resecarse sin riesgo de xerostomía. Si persisten las dudas sobre el lado
de origen del mucocele, efectuar una incisopunción sobre la tumefacción y palpar
digitalmente el lumen. El lado sano es redondeado y liso. El lado afectado tiene un tracto o
túnel hacia el sitio del derrame. Colocar al paciente en decúbito lateral. Debajo de su cuello
colocar un cojín para rotar la zona ventral dorsalmente y fijarlo en posición extendida.
Localizar la glándula salival mandibular entre las venas linguofacial y maxilar donde se unen
a la vena yugular externa. Incidir la piel, tejido subcutáneo y músculo cutáneo del cuello
desde el ángulo de la mandíbula caudalmente hasta la vena yugular externa, para exponer la
cápsula fibrosa de la glándula mandibular. Evitar la rama de 2º nervio cervical que atraviesa
la cápsula, incidirla y disecarla de las glándulas. 5 Ligar la arteria (rama de la arteria auricular
grande) y vena donde se encuentran sobre la zona dorsomedial de la glándula. Continuar
disecando hacia craneal siendo el conducto mandibular, conducto sublingual y glándulas
sublinguales polistomáticas hacia la boca. Incidir la fascia entre los músculos masetero y
digástrico. Exponer todo el complejo salival mandibular y sublingual mediante la retracción
del músculo digástrico y aplicación de tracción caudal sobre la glándula mandibular. Si
resulta necesario, realizar la miotomía o tunelizar el complejo ductal glandular sublingual
caudal bajo el músculo digástrico para mejorar la visualización. Disecar (forma roma y
aguda) rostralmente hasta identificar la rama lingual del nervio trigémino y dejando solo los
conductos en el complejo. Evitar el traumatismo de los nervios lingual o hipogloso. Tratar de
identificar el defecto glándula/conducto que ocasiona el mucocele, porque en el caso opuesto
la lesión se origina a partir del complejo glándula/conducto contralateral. Ligar y transectar el
complejo glándula/conducto sublingual mandibular casi en caudal al nervio lingual. La
atracción sobre el complejo puede inducir desgarro ductal. Si se produce cerca del punto de
transección deseado o sobre la zona bucal del defecto glándula/conducto no se requiere
disección adicional. No obstante, si el desgarro se produce antes del defecto
glándula/conducto o cuando este no se identifica y el tejido glandular se encuentra en oral del
desgarro se recomienda la resección adicional del tejido glandular para prevenir la
recurrencia. Lavar el campo operatorio antes de proceder a la síntesis. Afrontar el músculo
digástrico si ha sido incidido con puntos en “X” o en “U” horizontal. Cerrar el espacio
muerto con unos cuantos puntos en la cápsula y tejidos profundos. Hacer la aposición
rutinaria de los músculos superficiales, subcutáneo y tegumento.

TÉCNICA #2
La técnica quirúrgica descrita por varios autores'' consiste tras el afeitado y preparación del
campo quirúrgico y con el perro en decúbito lateral, en incidir la piel sobre la glándula
mandibular que puede palparse por detrás de la mandíbula. Tras seccionar el músculo
platysma identificamos las dos ramas de la yugular, la más dorsal es la vena maxilar interna y
la ventral, la vena linguofacial. Entre las venas mencionadas se encuentra la glándula
mandibular, a la cual accedemos después de seccionar su cápsula, que identificamos por su
color plateado. La glándula aparece como un tejido rosado y lobulado. Procedemos a su
disección en sentido craneal, observando su paso a través de los músculos masetero y
digástrico, lugar donde procedemos a su ligadura y resección. Si se requiere una mayor
exposición, puede seccionarse el músculo digástrico teniendo en cuenta que hay que
preservar el nervio lingual, que se encuentra en la zona dorsal de la glándula. A continuación,
drenamos el mucocele por la parte ventral del cuello, por medio de un penrose. El cierre
quirúrgico de los planos operatorios lo realizamos de la forma habitual.

TECNICA#3

Se colocó al paciente en decúbito lateral derecho, con la cabeza en una ligera posición
dorsolateral y con el cuello extendido y levemente elevado. Como referencia anatómica
principal se tomó la vena yugular externa, puesto que la glándula mandibular se encuentra
delimitada por la bifurcación de la misma, es decir, por la rama linguofacial y maxilar. Se
incidió piel, tejido subcutáneo y músculo cutáneo del cuello desde rostral a la vena yugular
externa, hasta sobrepasar el ángulo de la mandíbula y localizar la glándula mandibular (Fig.
3A). Se seccionó la cápsula fibrosa de la glándula mandibular, para disecarla junto con la
porción monostomática de la sublingual. La arteria y vena se encontraron en dorsomedial
durante la extracción del tejido glandular (Fig. 3B). Se ligaron con una sutura monofilamento
reabsorbible de gliconato 3/0 (Monosyn® B Braun, Tuttlingen, Alemania). Adyacente al
conducto salival y libre en el tejido subcutáneo, se extrajo una estructura de 13 mm de forma
ovalada, superficie lisa, coloración parda clara, consistencia media y estructura cérea, que se
identificó como un sialolito (Fig. 4A). El conducto se encontraba roto y fibrosado. Se realizó,
con la misma sutura, una ligadura de dicho conducto a la altura de la porción más caudal de
la parte poliestomática de la glándula sublingual (Fig. 4B). A continuación, se procedió al
lavado de la zona quirúrgica con Ringer lactato atemperado para eliminación de detritus y
restos de saliva acumulados. Además, para facilitar la salida de exudados inflamatorios, se
colocó un drenaje Penrose en la zona más declive del sialocele. Para el cierre de la herida
quirúrgica se procedió a la aposición con un patrón de sutura continuo, primero del músculo
cutáneo del tronco y segundo del tejido subcutáneo. Se empleó sutura monofilamento
absorbible de gliconato 3/0 (Monosyn®, B Braun, Tuttlingen, Alemania). La piel se
aproximó con puntos en U vertical con sutura monofilamento no absorbible

Les dejo un video genial, que explica muy bien y esta el procedimiento
https://www.youtube.com/watch?v=gawRB3zBODI creo que con él se puede hacer la
tecnica quirurgic, complementando con el texto

al final se le puso un drenaje de Penrose que se le sujeto con un punto simple y se sacó
en por una incisión en la parte inferior a la cirugia logrando asi el efecto de la
gravedad

- Significado del procedimiento


sialoadenectomia: incisión de la glándula salivar
sialo: saliva
adeno: Glándula
tomía; Incisión

- Anatomía quirúrgica, (dibujo de anatomía o del procedimiento.)

1.8.1.3 Glándula mandibular (glandulae mandibularis)


Usualmente es mayor en tamaño que la parótida, siendo más larga, compacta, redondeada y
amarillenta que esta última (Rosin y Harvey, 1985) (Ilustración 1.3). En perros de gran talla
mide cerca de 5 centímetros de longitud y 3 centímetros o más de ancho. Su contorno es
redondeado, su color amarillento pálido y está encerrada en una cápsula fibrosa compartida
con parte de la glándula sublingual monostomática (Rosin y Harvey, 1985; Evans y de
Lahunta, 2010). Su parte superior está cubierta por la parótida (Sisson, 2005), pero las
porciones restantes son superficiales y pueden palparse en el ángulo de unión de las venas
linguofacial y maxilar (Done et al., 1997). Sin embargo sus lóbulos son menos diferenciables
que los de las otras glándulas debido a la escasa cantidad de tejido conectivo dentro del
cuerpo de la glándula. Se aloja entre las venas maxilar y linguofacial en el perro, mientras
que en el gato estas venas se unen sobre su superficie lateral (Rosin y Harvey, 1985). Se
extiende desde la fosa atlantoidea al hueso basihioideo, siendo también parcialmente
cubierta por la mandíbula (Sisson, 2005). Es una glándula tubuloacinar compuesta (Hib,
2001), usualmente mucosa en perros y gatos (Banks, 1993), mixta en humanos (Banks, 1993;
Hib, 2001). Al revés de la parótida, posee conductos intercalares cortos y estriados largos
(Hib, 2001). El conducto mandibular está formado por la unión de pequeñas radículas que
emergen a lo largo del borde cóncavo (Sisson, 2005) o superficie rostromedial, para luego
ingresar al espacio entre los músculos masétero y digástrico. Luego se dirigen rostralmente a
lo largo del frenillo lingual (Evans y de Lahunta, 2010), siendo gradualmente más medial
mientras corre por dentro de la quijada (Rosin y Harvey, 1985). Luego se abre paso 49
mediante una papila poco manifiesta lateral al borde rostral del frenillo de la lengua (Cattaneo
y Flores, 2010; Budras et al., 2007; Rosin y Harvey, 1985), llamada carúncula sublingual
(Budras et al., 2007; Evans y de Lahunta, 2010). Esta es una abertura rojiza pequeña de 1
milímetro de largo, regularmente escondida parcialmente por encontrarse en un pliegue de la
mucosa (el frenillo lingual) (Rosin y Harvey, 1985). Su irrigación viene dada por las arterias
occipital, carótida y maxilar externa, mientras que se encuentra inervada por la cuerda del
tímpano (VII nervio craneal) y nervios simpáticos (Budras et al., 2007).

- Indicaciones
Se indica la extracción de la glándula o glándulas salivales relacionadas con el mucocele
como el único tratamiento satisfactorio

La aspiración es otro tratamiento, pero no eliminará permanentemente el problema.


Ocasionalmente, resolverá el problema durante semanas o incluso meses, pero la mayoría
reaparecerá

- Complicaciones
Las complicaciones postoperatorias son poco frecuentes si el procedimiento lo realiza un
cirujano con la formación adecuada. Ocasionalmente, puede desarrollarse una bolsa de
líquido (seroma) en la zona donde estaba el mucocele. Esta puede drenarse o puede dejarse
que se resuelva por sí misma. Las infecciones son posibles pero poco frecuentes. Si la
extracción de tejido glandular es inadecuada, es posible que reaparezca el mucocele.
- historia clínica

- protocolo de anestesia
premedicacion:
Midazolam; 0,2 mg/kg Dosis total: o,52 IV: 11:08 y Tramadol (analgesico)
Induccion
Propofol: 3mg/kg Dosis total;3,96 IV 11:18
Mantenimiento: Isoflurano
- Análisis de los exámenes pre quirúrgicos deben ser incluidos
Cuadro Hematico
ALT
BUN
Creatinina
Albúmina
RX cervical
Informe Ecográfico
- Reporte las anormalidades y analice sus posibles causas.
no se reportaron
-postquirúrgicos
como medicamentos se utilizó intraoperatorios, de manejo de dolor post quirúrgico además se
uso un antibiotico
Meloxicam0,2mg/kg DT o,13 IV
Ceftriaxone 30mg/kg DT 3,96 IV
Fentanilo: 2mg/kg DT 0,52 IV

Signología clínica
Es generalmente una masa cervical blanda, móvil, no inflamada, fría e indolora, que ha
crecido lentamente. En algunos casos podría haber dolor sublingual aislado o conjuntamente
con tumefacción de la zona cervical. Esto último llevará a dificultad masticatoria,
funcionalidad afectada de la lengua, lamido excesivo, y dolor o sangramiento en caso de que
se lesione con los dientes (Bright, 2004).
información adicional

La injuria de las glándulas o conductos salivales puede resultar en estenosis o desviación del
flujo salival hacia una nueva apertura, sin consecuencias clínicas al largo plazo. Las posibles
consecuencias de los daños en las glándulas o sus conductos son la formación de sialocele
(también llamado mucocele, quiste salival o quiste de miel) o fístula (Rosin y Harvey, 1985).
El mucocele salival constituye la condición patológica más común de las glándulas salivales.
Es una colección de saliva mucoide que se ha filtrado de una glándula salival dañada (Rosin y
Harvey, 1985; Cattaneo y Flores, 2010; Fossum, 1999; Merck, 2000; Bright, 2004) y está
circundada por tejido de granulación (Fossum, 1999; Bright, 2004). Si existe predisposición
racial o no es controversial (Rosin y Harvey, 1985; Fossum, 1999). Merck (2000)

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