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1.

- QUE TAN PELIGROSO ES EL ABUSO DE SUSTANCIAS EN PACIENTES CON


SALUD MENTAL INADECUADA.
A veces coexisten los problemas de salud mental y los trastornos de uso de sustancias.
Esto se debe a que:
Ciertas drogas ilegales pueden causar una adicción en personas que
experimentan uno o más síntomas de un problema de salud mental
Los problemas de salud mental a veces conducen al consumo de drogas o
alcohol, ya que algunas personas con un problema de salud mental pueden
abusar de estas sustancias como una forma de automedicación
Los trastornos mentales y del uso de sustancias comparten algunas causas
subyacentes, como los cambios en la composición del cerebro, las
vulnerabilidades genéticas y el contacto temprano con el estrés o el trauma
Cambios en el comportamiento, por ejemplo:
Disminuir la asistencia y el rendimiento en la escuela
Meterse en problemas con frecuencia (peleas, accidentes, actividades
ilegales)
Usar sustancias en situaciones que representan un peligro físico, por
ejemplo mientras conduce u opera una máquina
Actuar a escondidas o de manera sospechosa
Manifestar cambios en el apetito o los patrones de sueño
Exhibir cambios sin explicación en la personalidad o la actitud
Demostrar cambios en el estado de ánimo, irritabilidad o estallidos de ira
Pasar por períodos inusuales de hiperactividad, agitación o aturdimiento
No tener motivación
Mostrarse temeroso, ansioso o paranoico, sin razón alguna
Cambios físicos, por ejemplo:
Ojos inyectados de sangre y pupilas de tamaño anormal
Pérdida o incremento de peso repentinos
Deterioro del aspecto físico
Olores inusuales en el aliento, el cuerpo o la ropa
Temblores, habla inarticulada o coordinación atrofiada
Cambios sociales, por ejemplo:

Cambio repentino de amigos, lugares favoritos de reunión y pasatiempos


Problemas legales vinculados con el uso de sustancias
Necesidad de dinero sin explicar o problemas financieros
Uso de sustancias incluso a pesar de que generan problemas en las
relaciones
2.- ¿QUE PLAN DE INTERVENCIÓN REALIZARIAS EN ESTOS PACIENTES?
1. Elabora un plan. Un familiar o un amigo propone una intervención y forma un
grupo de planificación. Es mejor consultar a un consejero profesional calificado, un
profesional especializado en adicciones, un psicólogo, a un asesor de salud
mental, un trabajador social o un intervencionista para que te ayude a organizar
una intervención eficaz. Una intervención es una situación con una alta carga
emocional y con el potencial de generar ira, resentimiento o una sensación de
traición.
2. Infórmate. Los miembros del grupo se informan sobre la dimensión del problema
de tu ser querido e investigan sobre la afección y los programas de tratamiento. El
grupo puede comenzar con arreglos para inscribir a tu ser querido en un programa
de tratamiento específico.
3. Forma el equipo de intervención. El grupo de planificación forma el equipo que
participará personalmente en la intervención. Los miembros del equipo fijan una
fecha y un lugar, y trabajan juntos para presentar un mensaje coherente y
ensayado, así como un plan estructurado. Por lo general, los miembros del equipo
que no son familiares ayudan a que la discusión se mantenga enfocada en los
hechos del problema y en las soluciones compartidas en lugar de en respuestas
emocionales intensas. No dejes que tu ser querido sepa lo que están haciendo
hasta el día de la intervención.
4. Decide las consecuencias específicas. Si tu ser querido no acepta el
tratamiento, cada persona del equipo debe decidir qué medida tomará. Por
ejemplo, puedes decidir pedirle a tu ser querido que se mude de tu casa.
5. Haz notas sobre lo que dirás. Cada miembro del equipo describe incidentes
específicos en los que la adicción causó inconvenientes, como problemas
emocionales o económicos. Analiza el daño que causó el comportamiento de tu
ser querido al mismo tiempo que expresas preocupación y expectativas respecto
al hecho de que puede cambiar. Tu ser querido no puede discutir sobre hechos ni
sobre tu respuesta emocional ante el problema. Por ejemplo, comienza diciendo lo
siguiente: «Me molestó y me hizo daño que bebieras...».
6. Haz la reunión de intervención. Se le pide a tu ser querido con una adicción que
vaya al sitio de la intervención sin decirle el motivo. Luego, los miembros del
equipo se turnan para expresar sus preocupaciones y sentimientos. Se le presenta
una opción de tratamiento a tu ser querido y se le pide que la acepte en ese
momento. Cada miembro del equipo dirá qué cambios específicos hará si tu ser
querido no acepta el plan. No amenaces con una consecuencia, a menos que
estés listo para llevarla a cabo.
7. Haz un seguimiento. Involucrar al cónyuge, a los familiares o a otros es
fundamental para ayudar a alguien que tiene una adicción a seguir el tratamiento y
a evitar recaídas. Esto puede comprender cambiar patrones de la vida diaria para
que sea más fácil evitar los comportamientos destructivos, ofrecerse a participar
en la terapia de tu ser querido, buscar tu propio terapeuta y tu propio apoyo de
recuperación, y saber qué hacer en caso de una recaída.
Una intervención exitosa debe estar planeada cuidadosamente para que tenga los efectos
previstos. Una intervención mal planificada puede empeorar la situación: tu ser querido
puede sentirse atacado y puede aislarse o volverse más reticente al tratamiento.

Link bibliográfico:
https://espanol.mentalhealth.gov/sintomas/abuso-de-sustancias
https://www.mayoclinic.org/es-es/diseases-conditions/mental-illness/in-
depth/intervention/art-20047451

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