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I.- La temática.
No hay después de Sócrates un filósofo más controvertido que Baruch
Spinoza. Expulsado y maldecido por la comunidad judía de Amsterdam a la
que pertenecía, pudo ser acusado de ateo y panteísta al mismo tiempo y
prohibida la publicación de sus libros.
Spinoza es un pensador moderno no antropocéntrico en lucha permanente
contra las diversas formas de coacción interna y externa, la tiranía, así como de
toda forma de fundamentalismo religioso y político.
Desde su perspectiva la libertad no es el libre arbitrio, es al mismo tiempo un
proceso y un estado ( ver libro V de la Etica ). Un proceso de liberación del
estado de servidumbre ( ver Libro IV de la Etica ) . Se trata de un proceso
animado por nuestro conatus, es decir nuestra pulsión vital. O, dicho de otra
manera, por nuestro deseo de ser y nuestro esfuerzo por existir. La
comprensión de este complejo proceso abarca una antropología en la que
cuerpo y alma son inseparables, una psicología de las emociones como
modificaciones del cuerpo, una ontología de la naturaleza como natura
naturans y natura naturata y una filosofía política centrada en la importancia de
la concordia, la libertad de pensamiento y la separación del Estado de las
religiones institucionalizadas.
La liberación abarca la creación de aquellas condiciones, subjetivas e
institucionales, que la hacen posible. Spinoza inició tanto en el Tratado
teológico político (TTP) como en su Tratado político (TP) el esbozo de dichas
condiciones, es decir, de una democracia hecha a la medida de las
posibilidades de la condición humana.
La hipótesis que intentaremos demostrar en el presente Seminario es
que el TTP y el TP son – en la comprensión de la libertad como proceso-
una prolongación de la Etica. A tal punto que no se pueden comprender
sin ella.
En el Tratado teológico-político TTP) y en el Tratado Político (TP) Spinoza
desarrolla una filosofía política que ni idealiza ni sataniza la naturaleza humana.
El estado natural de la convivencia humana es – sostiene Spinoza - el estado
de servidumbre. En dicho estado la razón se halla al servicio de las pasiones
que nos gobiernan, tales como la envidia, la ira o el miedo. Este es y debe ser
el punto de partida de una propuesta ético-política realista y viable al mismo
tiempo. Por ello , dice Spinoza, “cuando dirigí mi atención hacia la política,
no me propuse exponer algo nuevo o inaudito, sino demostrar de forma
2
1
Spinoza Tratado Político. Madrid, . Alianza Editorial, 2004.p.85.
2
Spinoza Tratado Político. Madrid, . Alianza Editorial, 2004.pp 81-2.
3
Spinoza Tratado Político. Madrid, . Alianza Editorial, 2004. P 88.
3
Sistema de evaluación.-
50 % Participación en los debates y exposiciones
50 % Monografía.
Bibliografía
Textos de Spinoza.-
- Hart, A., Spinoza's Ethics, Part I and II: A Platonic Commentary, Brill
Academic Pull, 1984
-
- Martínes Francisco José. Spinoza en su siglo.. Mdrid, Editorial Biblioteca
Nueva, 2012.