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Área:
4to Gestión Administrativa y Tributaria B
Asignatura:
Operación Administrativa de Compraventa
Presentado a:
Lic. Lourdes Guzmán
Presentado por:
Gerald Luciano Ramírez #14
Conocimiento de embarque
También refleja el importe del flete (coste del transporte por vía marítima), los
recargos del flete (costos asociados al transporte, en inglés surcharges) la moneda
con la cual se ha calculado esta cifra y si el flete se ha abonado en origen (freight
prepaid) o si se trata de un flete pagadero en destino (freight collect).
Modo de transporte a través del cual las mercancías serán transportadas hasta
el puerto de carga.
Método de envío.
Descripción de cada bulto, incluyendo los detalles del tipo de mercancía, tipo de
empaquetado, cantidad por cada bulto y el número de unidades en su medida
más pequeña. También se incluyen en este campo instrucciones de manipulado
de la carga si las hubiera.
Libros de registros
En toda empresa, todas las actividades desarrolladas han de quedar reflejadas en
una serie de documentos, como, por ejemplo, pueden ser los cheques, las letras de
cambio o los albaranes.
Por eso, es necesario contar con un lugar en el que podamos tener una visión
general de todas estas actividades y de la marcha económica del negocio. Y, este
lugar son los denominados libros registro.
Además, existen unas obligaciones impuestas por el Código de Comercio y por las
leyes mercantiles que hacen aún más necesario la llevanza de estos libros.
Los libros registro nos permiten tener una visión general de la situación y la marcha
económica de la empresa.
La necesidad de llevar los correspondientes libros registro nace de dos aspectos:
La exigencia impuesta por el Código de Comercio y por las leyes mercantiles.
La convivencia de llevar un mejor control de la marcha de las empresas.
Su origen proviene del Código de Comercio en su artículo 25, donde impone la
obligatoriedad de su llevanza, y así poder mejorar el control de la marcha de la
empresa en cualquier momento.
Estos libros de registro pueden ser llevados por medios electrónicos o
informáticos en cuyo caso, se exige que se conserve el soporte informático durante
el periodo de prescripción.
Si los libros contables o de registro fiscalmente exigidos se llevan por medios
informáticos, los sujetos pasivos deberán conservar, además, los ficheros y los
documentos siguientes:
Ficheros de datos, tanto históricos como maestros generados por sus
aplicaciones informáticas.
Ficheros de programas fuentes, con los que se procesan los ficheros de datos de
esos programas.
Todos los ficheros, bien magnéticos u ópticos, programas y documentación
necesarios que permitan la reconstrucción total de la ruta de auditoria informática
del sistema de información del sujeto pasivo o contribuyente.
Clasificación:
Podemos clasificar los libros de registro en obligatorios y auxiliares.
Libros obligatorios:
Se establecen como libros indispensables. Son aquellos que corresponden a una
adecuada integración de un sistema de contabilidad y que exige la importancia y la
naturaleza de las actividades a desarrollar.
Entre los diferentes tipos de libros obligatorios, se encuentran los siguientes:
Libro Diario: Registra de forma cronológica todos los movimientos de la actividad
económica de la empresa, se anotarán en asientos contables según vayan generándose,
cada asiento contable deberá contener la siguiente información:
Libros auxiliares:
Los libros auxiliares son aquellos en lo que se registra de forma detallada los
valores y la información que se ha registrado en los libros principales. Como
aspectos más importantes, podemos destacar:
Llevan el registro de las operaciones realizadas cronológicamente.
Dan detalles de las actividades realizadas.
Registran el valor del movimiento de cada subcuenta
Las funciones de un auxiliar contable se basan en el trabajo de soporte de este
profesional en un departamento de contabilidad dentro de una empresa o institución.
Por lo general, las funciones de un auxiliar contable destacan por servir como apoyo
básico a la labor contable de una organización. El auxiliar contable se ocupa de
desarrollar las tareas más elementales del día a día económico y financiero.
Los libros auxiliares también nos permiten dividir el trabajo contable en función a las
necesidades de registro y control. Aunque su número es ilimitado, ya que depende
de las necesidades de cada empresa, podemos decir que los principales libros
auxiliares en contabilidad son:
Libro de caja: lleva el registro de todo el movimiento en efectivo que se realiza
en la empresa y también del saldo de caja. Se anota la fecha, el concepto, él
debe, el haber y el saldo. El total de los cobros menos el total de los pagos debe
ser igual al último saldo.
Libro auxiliar de caja columnado: además de llevar el control de los
movimientos en efectivo, registra cada movimiento en la cuenta que lo ha
originado. Los pagos se anotan en el Haber de caja y los ingresos en él Debe.
Como en la legislación contable española se sigue el criterio de contabilidad por
partida doble, hay que tener en cuenta que cada anotación en él debe de caja se
balancea con una en el haber de la cuenta que la ha originado, y cualquier
anotación en su haber se balancea con una en él debe de la cuenta que la
origina.
Libro de cuentas corrientes bancarias: como su propio nombre indica en él se
anotan todos los movimientos que se hayan producido en la cuenta corriente. Es
decir, en él se anotan todos los ingresos y pagos que se hayan hecho en esa
cuenta. En él debe se anotan los ingresos y en el haber los saldos.
Libro de clientes: se lleva una cuenta para cada cliente que tengamos. En él
debe se anotan las facturas y las notas de cargo que le emitamos. En el haber
las cantidades que recibamos de él, ya sea lo cobrado o las partidas que nos
haya devuelto. Cuando se anota el saldo, que como siempre es la diferencia
entre él debe y el haber, hay que anotar si es deudor o acreedor.
Libro de proveedores: Aquí se anotan los movimientos con nuestros
proveedores. Se anotan las compras realizadas a crédito y los pagos que
realicemos a los proveedores. Igual que en el libro de clientes, al computar cada
saldo se debe determinar si es deudor o acreedor. Un asiento en él debe se
resta del saldo y un asiento en el haber se suma al mismo
Legislación mercantil
La legislación mercantil es una serie de leyes que se ordenan en el derecho
mercantil, que se encarga específicamente de regir las actividades comerciales con
respecto a la actividad empresarial. Por ejemplo, en Venezuela los comerciantes se
rigen del código de comercio que es la primordial ley para la actividad mercantil.
El derecho mercantil está totalmente vinculado con el comercio, con respecto a la
actividad comercial que se fundamenta en una empresa, reglamentando la forma de
que llevar a cabo esta actividad desde el punto de vista jurídico y económico.
La actividad comercial ha originado la producción de empresas las cuales no solo
compensan insuficiencias de la comunidad, sino que también son creadoras de
oportunidades de trabajo, favoreciendo así a aumentar el grado de la colectividad.
Por ello puede determinarse que el desarrollo de un país se sujeta entre otros
agentes, de la ampliación de la actividad comercial y la corporación de industrias.
Los comerciantes son individuos naturales o jurídicos que hacen labores
comerciales constantemente. Estas personas son reguladas por el derecho
mercantil para llevar a cabo de una forma legal esta labor. Existen dos clases de
comerciantes, el ocasional que lo realiza esporádicamente y el habitual que lo
labora siempre.
Contrato de compraventa
Un contrato de compraventa es un acuerdo bilateral y consensual a través del cual
la parte vendedora se obliga a una entrega determinada, en este caso una vivienda,
y la compradora, a pagar por ella un precio acordado, ya sea en dinero o signo que
lo represente.
El contrato de compraventa se trata de la transmisión de la propiedad de un objeto
de este contrato entre varias partes.
Las dos partes que participan en este contrato son:
El vendedor.
El comprador.
El comprador se obliga a pagar un precio (puede ser dinero u otra cosa) por el
objeto y el vendedor se obliga a entregar en propiedad este objeto (que debe ser
determinado) y con ello se traslada la propiedad.
Características
Facturación
La facturación es el proceso de emisión de facturas por parte de un profesional,
autónomo o empresa, regulado por la Agencia Tributaria.
La facturación es una acción que se refiere a todos los actos relacionados con la
elaboración, registro, envío y cobro de las facturas.
Una factura es un documento que refleja los datos de una transacción mercantil
(venta de bienes o servicios) y contiene información como:
Los datos relativos al emisor y receptor de la factura (nombre, NIF, dirección).
La información sobre la transacción realizada (es el concepto de la factura).
El importe facturado y el desglose por cada concepto.
Los impuestos aplicables.
El número de factura, la fecha y el lugar.
El modo y plazo de pago.
Por lo tanto, la facturación es el día a día de cualquier negocio y puede ser la clave
para conocer:
El nivel de liquidez que tiene el negocio.
De dónde provienen los ingresos.
Qué productos o servicios se venden más.
Qué posibilidades de inversión existen.
Qué decisiones estratégicas se pueden tomar.
La facturación es una de las acciones más comunes en el mundo de la empresa
para las operaciones de intercambio de bienes o servicios. Una factura es un
documento donde queda reflejada toda la información de una compraventa: el
detalle del producto o servicio, los datos del vendedor, del comprador, la fecha, y
por supuesto el precio.
Existen diferentes tipos de facturas,
Ordinarias: reflejan el valor de las compras realizadas
Rectificativas: corrigen errores de facturas anteriores
Recapitulativas: son agrupaciones de varias facturas anteriores.
Actualmente es muy común otra modalidad: la factura electrónica, que tiene por
objeto agilizar las operaciones y ahorrar en el uso del papel.
Requisitos legales
Se le llama requisito legal al conjunto de leyes, decretos, resoluciones, normas
oficiales, estatutos, reglamentos, etc. vigentes, de carácter general o particular, que
sean aplicables al proceso desarrollado por cada una de las dependencias, ya sea
por su naturaleza o por la jurisdicción bajo la cual se encuentra la organización.
Unidad 10
De igual modo ocurre cuando hay que resolver un problema con un proceso
(retraso en la entrega de un envío, problemas con la tienda en la línea,
desconocimiento en el uso de la aplicación, por ejemplo): de los representantes
de atención al cliente depende que la solución permita conservar un cliente o
perderlo.
Los datos que se recopilan aquí (como la experiencia que tiene un cliente con la
empresa, las dudas más frecuentes, las mejoras que los usuarios piden una vez
que adquieren un producto o servicio, quiénes son los clientes leales, etc.)
ayudan a nutrir los análisis de mercado, a añadir funciones o características que
optimizarán la oferta, a conocer qué hace mejor la competencia y las razones por
las que una persona se acerca o aleja a tu organización en primer lugar.
Todo eso sirve para entender por qué algunos objetivos se alcanzan y otros no,
qué otras metas es buena idea plantear y cómo beneficiar el resto de los
departamentos para convertirse en líder en una industria.
Unidad 11
El (la) consumidor(a)
El consumidor es una persona u organización que consume bienes o servicios, que
los productores o proveedores ponen a su disposición en el mercado y que sirven
para satisfacer algún tipo de necesidad.
El consumidor es la etapa última del proceso productivo. De este modo, se convierte
en un elemento clave dentro de la cadena de producción, de la que es el
cliente final. Por ende, es un actor vital para el desarrollo de las economías.
El consumidor ofrece sus recursos, generalmente dinero, a cambio de dichos bienes
o servicios. En otras palabras, el consumidor busca obtener una determinada
satisfacción por medio de transacciones.
Por este motivo, no puede entenderse la existencia de consumidores sin la de los
productores que lleguen a ofrecer dichos bienes o servicios. Así, se puede
desarrollar esta relación.
Gracias al exponencial crecimiento y desarrollo de las sociedades de consumo el
concepto de consumidor ha ido cambiando y adaptándose a la definición que
tenemos actualmente.
Por otra parte, la enorme influencia que han tenido las nuevas tecnologías y los
nuevos usos de las mismas en el ámbito económico han afectado obviamente
también a la manera de comportarse de los consumidores y a su naturaleza.
Al mismo tiempo, a lo largo de los últimos años el estudio económico ha tratado de
comprender el comportamiento del consumidor. En general, suele definirse a los
consumidores como individuos que actúan racionalmente y que buscan maximizar
su utilidad con las compras que realizan. Es decir, buscan la mayor satisfacción y
placer posible en base a sus recursos.
No obstante, en ocasiones, y debido al importante papel que juegan la publicidad o
el marketing, puede que un consumidor se llegue a exceder de sus posibilidades y
actúe irracionalmente consumiendo más de lo que debería.
Tipos de consumidor
Impulsivo:
El comportamiento impulsivo es uno de los más comunes entre los consumidores.
Compran lo que creen que los hará vivir mejor y siguen las tendencias, por lo que
prestan atención a las influencias externas.
Sentirán ansiedad antes de elegir un producto y, después de haberlo adquirido,
hasta euforia. Finalmente, quizá les incomode alguna compra que realmente no
necesitaban.
Atrae a este tipo de consumidor con grandes ofertas o promociones que no puedan
dejar pasar. Black Friday es un ejemplo perfecto, pues es una celebración que crece
23.6 % cada año.
Escéptico:
No suelen mostrar entusiasmo a la hora de realizar una compra; muchas veces
pueden mostrarse hasta indiferentes. Son consumidores ocasionales que solo salen
a comprar algo porque realmente lo necesitan, pero antes de adquirir el nuevo
Smartphone harán todo tipo de cuestionamientos hasta convencerse por completo.
Es un consumidor difícil, por lo que atraerlo no es tarea sencilla. Los datos técnicos
son importantes: mientras más información le brindes de tu producto, es mejor.
Optimista:
Son muy analíticos y piensan antes de actuar (comprar). Son curiosos y necesitan
conocer la opinión de otros para tomar la decisión de adquirir un producto o servicio.
Son confiados, saben muy bien lo que quieren.
El precio de lo que adquieran será proporcional a la calidad y el uso que le
encuentren al producto. Son capaces de pagar altos precios si están convencidos
de que lo ofrecido influirá positivamente en su vida.
Para atraerlos puedes brindarles mucha información sobre tu producto, ya que les
es importante saber por qué necesitan lo que vendes.
Tradicional:
Son seguros de sí mismos y no creen en eso de adquirir algo solo porque sí. Al igual
que el consumidor escéptico, debe tener una necesidad para salir y comprar algo.
Son minuciosos cuando tienen que comprar algo y prefieren marcas conocidas, para
evitar pedir información. Si deseas atraerlos es muy importante que tus productos
influyan en su vida.
No son muy fanáticos de las compras, por lo que lo primero que desean al entrar en
un negocio es salir. Atenderlos de forma rápida es la mejor forma de lograr una
venta.
Emocional:
A pesar de que todos los tipos de consumidores están regidos por sus emociones,
el comprador emocional busca satisfacer una necesidad concreta. Quiere sentirse
completamente identificado con el producto que resolverá su necesidad al momento
de hacer la compra.
Su estado de ánimo influye en su decisión de compra. Para atraerlo debes brindarle
un mensaje amigable desde el primer contacto, o sea, en la publicidad. Necesita
sentirse cómodo, así que hazle saber que entiendes sus necesidades.
Práctico:
Es un consumidor con experiencia en las compras online. Para él, lo más importante
es que la página en la que realiza sus compras sea fácil de navegar; que las formas
de pago sean prácticas y que no presente tantas complicaciones.
Lo puedes atraer con cupones de descuento, lo que, además, lo recompensa por su
fidelidad a la marca. Dentro de su proceso de compra, puedes recomendarle otros
productos complementarios. De igual forma, comparte las opiniones positivas de tus
clientes, pues es valioso para este tipo de consumidores saber que están
comprando algo con garantía.
Activo:
Tanto en las compras tradicionales como online, este tipo de consumidor se hace
presente. A él no lo detienen los precios altos, ni que los productos o servicios
tengan descuento.
Al igual que el consumidor práctico, valida una compra leyendo las opiniones de
otras personas. Si ve reseñas positivas, lo compra sin dudar.
Implementa ventas especiales para llamar su atención.
Indeciso:
Navegan por muchas páginas antes de comprar algo. Comparan el precio, el
descuento, el tiempo de envío, las formas de pago, entre otros aspectos. Se dejan
llevar por las reseñas, sobre todo si son negativas, pues inmediatamente abortan su
compra.
Atraerlos es un poco más complicado, pues si encuentran una página más atractiva
que la tuya, se irán con la competencia. Un chatbot instalado en tu página web les
mostrará cuán importante es para ti dar un excelente servicio y podrá guiarlos en el
proceso de decisión.
Buscador de experiencias:
Son consumidores ocasionales, pues solo cuando se les presenta una necesidad
buscan en diferentes páginas. Hacen una búsqueda muy específica ya que tienen
muy claro qué es lo que desean.
Para ellos es importante que desde un inicio la página inspire confianza y seguridad;
lo segundo, que destaque los beneficios y ventajas de comprarte a ti. Si les ofreces
más aspectos de valor, se quedarán contigo.
Buscador de ofertas:
Son muy pacientes y nada impulsivos, en tanto que pueden esperar el tiempo
necesario hasta que el producto deseado esté más barato. Para atraerlos puedes
hacer promociones exclusivas que los motivarán y ayudarán a fidelizarlos.
Consumo público
El consumo público es aquel gasto en el que incurre el Estado a través de sus
diferentes instancias. Esto, con el objetivo de brindar determinados bienes y
servicios a la comunidad.
Es decir, el consumo público permite que el Estado se abastezca de los medios
necesarios para ofrecer, o financiar, una serie de productos y servicios al público.
Esto, de manera gratuita o cobrando un precio mínimo para cubrir principalmente los
costes, pero sin el objetivo de generar ganancias.
Lo anterior se da, por ejemplo, cuando pone a disposición del ciudadano
determinados trámites, como el duplicado del documento de identidad. Para dicha
gestión, se suele efectuar un cobro.
El consumo público forma parte del producto interior bruto (PIB). El PIB puede
desglosarse en consumo (tanto público como privado), inversión (también dividida
en pública y privada), y la resta de las exportaciones menos las importaciones.
No todo consumo público es gasto público. El primero implica un desembolso que
va a satisfacer directamente una necesidad de la población, mientras que el
segundo es más general.
Un caso de gasto público que no es consumo público es el pago de intereses por
préstamos que adeuda el Gobierno. Igualmente, otro ejemplo son las subvenciones
a determinadas empresas o sectores.
se denomina consumo privado al gasto realizado por las unidades familiares, las
empresas privadas y las instituciones privadas sin ánimo de lucro residentes en un
país. En el cálculo se excluyen las compras de tierra y edificios para viviendas, que
se contemplan como una forma de inversión (en bienes inmuebles).
El registro de este indicador se da al momento de realizar la compra y no se refiere
al consumo (uso) que se realiza con el objeto en cuestión.
El consumo privado es una variable especialmente importante en el estudio
macroeconómico y mide el valor total en un periodo de los bienes y servicios que los
hogares, empresas o instituciones privadas adquieren dentro de sus
correspondientes actividades económicas.
Al mismo tiempo, la propia definición de consumo establece que este gasto es
realizado en bienes finales y no en aquellos dirigidos a la producción de otros (lo
que podría considerarse como inversión, por ejemplo).
Junto al consumo público, conforma el gasto total de un país. Dependiendo de la
proporción existente entre el consumo privado y el público, es posible adquirir una
cierta imagen sobre el carácter intervencionista o no de una economía en particular,
siendo mucho más intervencionista cuanto menor sea el consumo privado, y
viceversa.
Dentro de la demanda agregada de una nación, el consumo privado es el
componente o la variable de mayor importancia y tamaño, especialmente, si el país
es considerado como desarrollado o avanzado. Lo podemos ver en la fórmula de
cálculo del producto interior bruto (PIB).
Formula: PIB = C + I + G + X – M
C = El consumo privado.
I = La inversión.
G = El gasto público.
X = Las exportaciones.
M = Las importaciones.
Es necesario hacer una distinción entre el consumo privado interior y el consumo
privado nacional. Así, dependiendo de la procedencia de los bienes o servicios
demandados, nos encontraríamos ante uno u otro.
El consumo interior incluye aquellos bienes producidos en el mismo país (sea cual
sea la nacionalidad del consumidor). En tanto, el consumo nacional es realizado por
los residentes del país, independiente del origen del bien.
Principales componentes del consumo privado
Los principales componentes del consumo privado son:
Renta disponible: Relacionada directamente con el consumo final. Así, cuanto
más altas sean las rentas disponibles, mayores posibilidades de consumo
tendrán las empresas o las familias.
Renta permanente: Es una especie de promedio del gasto o consumo que
realiza un hogar o una sociedad mercantil dentro de un periodo normal de
actividad económica. Es decir, no se tienen en cuenta posibles gastos
imprevistos.
Hipótesis del ciclo vital: Suele considerarse que existe una conducta por la
cual los individuos emprenden acciones de ahorro de cara al futuro. Esto supone
un control en el consumo actual o presente con previsión de realizarlo en el
futuro.
Efecto-riqueza: Indica que la renta obtenida por medio de los salarios en un
periodo de tiempo no es determinante a la hora de consumir. Esto se produce
porque también se tienen en cuenta aquellas riquezas ya poseídas o
conseguidas con anterioridad.
Existen a su vez otras variables que influyen notablemente en el comportamiento de
las personas en lo que se refiere a sus decisiones de consumo. Nos referimos, por
ejemplo, a las previsiones económicas, las expectativas inflacionistas, los datos de
empleo de su país o las posibilidades de financiación a las que puedan acceder
(especialmente si el bien por adquirir es de alto valor). Es decir, la confianza es un
elemento clave para el consumo privado.
Perecederos: los que tienen un uso muy pequeño debido a su naturaleza, como,
por ejemplo, la comida
Servicios: actividades intangibles, como, por ejemplo, la educación
Los consumidores tienen derecho a recibir una información correcta, objetiva, cierta,
eficaz, comprensible y suficiente de todos los productos, bienes y servicios puestos
a su disposición.
Evidentemente, la información que se debe recibir no es la misma cuando se
compra, por ejemplo, un bolígrafo o cuando se adquiere una vivienda. La
información que el vendedor o prestador de servicios nos aporte debe permitirnos
realizar la selección y la elección final que consideremos oportuna basándose en
criterios de racionalidad, seguridad, conservación y protección al medio ambiente.
Las obligaciones concretas de los fabricantes y comerciantes se encuentran en las
normas que regulan el etiquetado – que deberá ser de tal manera que no induzca a
error al consumidor – presentación y publicidad de los diversos productos y
servicios. Así, por ejemplo, es útil conocer que, en relación a los mensajes
publicitarios, existe la Ley General de Publicidad, aplicable a cualquier producto o
servicio puesto a disposición de los consumidores o usuarios.
Los consumidores tienen derecho a que se respeten sus legítimos intereses
recogidos en las normas que los defienden y protegen, en cualquiera de las fases
en que puede dividirse el proceso de compra de un producto o de contratación de
un servicio.
Antes de la compra de un producto o de la contratación de un servicio, procurando
que la oferta, promoción y publicidad de los productos y servicios se ajusten a las
características, condiciones, utilidad y finalidad para la que fueron fabricados o
diseñados, de modo que no se pueda engañar o inducir a engaño. El consumidor
tiene derecho a:
Recibir un presupuesto previo.
Ámbito
El estudio del comportamiento del consumidor se deriva del concepto actual del
marketing que se centra en las necesidades del consumidor. Difícilmente podrán
satisfacerse de forma efectiva las necesidades del cliente, tanto actual como
potencial, sin un conocimiento previo de los bienes y servicios que desea y de las
actividades que realiza para adquirirlos. Por tanto, la tarea del marketing es
comprender, explicar y predecir las acciones relacionadas con el consumo.
El comportamiento del consumidor se refiere al conjunto de actividades que lleva a
cabo una persona o una organización desde que tiene una necesidad hasta el
momento en que efectúa la compra y usa, posteriormente el producto. El estudio de
tal comportamiento incluye también el análisis de todos los factores que influyen en
las acciones realizadas. Las actividades de buscar, comprar, usar y disponer de los
bienes para satisfacer las necesidades y deseos, comprenden tanto procesos
mentales y emocionales como acciones físicas.
La calidad del servicio
La calidad del servicio es muy importante en la actualidad, ya que, los clientes son
cada vez más exigentes y están más informados gracias a la tecnología.
Calidad de Servicio es un concepto que deriva de la propia definición de Calidad,
entendida esta como satisfacción de las necesidades y expectativas del cliente
En primer lugar, es importante, antes de comenzar con los distintos modelos, revisar
los significados que ha ido adquiriendo este término, se podría determinar cuatro
perspectivas básicas en el concepto de calidad, coexistiendo en la actualidad, tales
como:
Calidad como excelencia: De acuerdo al término, las organizaciones de
servicios deben conseguir el mejor de los resultados, en sentido absoluto. Sin
embargo, debido a su subjetividad, es difícil entender qué se considera como
excelente, ya que sería necesario marcar unas directrices claras para conseguir
ese nivel exigido.
Calidad como ajuste a las especificaciones: Tras la necesidad de
estandarizar y especificar las normas de producción se desarrolló esta nueva
perspectiva, desde la que se entiende la calidad como medida para la
consecución de objetivos básicos, tales como, poder evaluar la diferencia
existente entre la calidad obtenida en distintos períodos, para así poder obtener
una base de comparación y determinar las posibles causas halladas bajo su
diferencia, con la dificultad que esta evaluación es desde el punto de vista de la
organización y no del propio usuario o consumidor.
Calidad como valor: En este sentido, las organizaciones consideran una
eficiencia interna y una efectividad externa, es decir, deben analizar los costes
que supone seguir unos criterios de calidad y, al mismo tiempo, satisfacer las
expectativas de los consumidores o usuarios, teniendo en cuenta la dificultad
existente en valorar estos elementos, ya que son dinámicos, varían con el
tiempo. Es difícil identificar qué características son importantes para cada
consumidor.
Calidad como satisfacción de las expectativas de los usuarios o
consumidores: Definir la calidad como el grado en que se atienden o no las
expectativas de los consumidores o usuarios supone incluir factores subjetivos
relacionados con los juicios de las personas que reciben el servicio. Es una
definición basada en la percepción de los clientes y en la satisfacción de las
expectativas, esto es importante para conocer qué necesitan los usuarios y los
consumidores.
Toda organización o departamento, ya produzca bienes o servicios, acompaña la
entrega de unos u otros con un conjunto de prestaciones accesorias agregadas a la
principal. La calidad de servicio supone el ajuste de estas prestaciones accesorias a
las necesidades, expectativas y deseos del cliente.
En cualquier empresa la calidad del servicio también se transmite a través de:
La puntualidad de su funcionamiento.
La imagen que dan, con sus instalaciones y recursos, y con la apariencia de sus
productos y trabajadores.
El servicio de una empresa abarca otros aspectos que dependen de su decisión e
iniciativa individual como son: la higiene y la pulcritud de su personal; su
capacitación profesional, debiendo observar un lenguaje verbal y gestual
adecuados; así como demostrar ante el cliente que posee un conocimiento amplio y
correcto, tanto de la empresa como de los procesos y productos. Y, por último, debe
esmerarse en que la información que vaya a entregarles sea verás y confiable.
La calidad en el servicio al cliente es uno de los puntos primordiales que se deben
cumplir dentro de cada una de las empresas; sin importar el tamaño, estructura y
naturaleza de sus operaciones, deben de demostrar la capacidad que tienen para
desempeñarse en esta área, ya que al ser la primera imagen que se da a los
clientes ayuda a mantenerse en la preferencia de los mismos, y si se llega a alterar
pueden convertirse en una amenaza. Más, sin embargo, en muchas ocasiones
puede llegar a ser empleado por las organizaciones incorrectamente, afectando
tanto al desarrollo y crecimiento de las mismas, por lo cual, principalmente se debe
definir la importancia de dicho servicio al cliente, para poder estructurar
adecuadamente la forma más óptima de llevarlo a cabo.
Para poder familiarizarse con la calidad en el servicio al cliente, es primordial
conocer los conceptos básicos del tema, por ello se mencionan a continuación:
Importancia:
El servicio al cliente ha venido tomando fuerza acorde al aumento de la
competencia, ya que mientras más exista, el cliente tiene mayor oportunidad de
decidir en donde adquirir el producto o servicio que están requiriendo, es aquí donde
radica dicha importancia de irlo perfeccionando y adecuando a las necesidades de
los clientes, ya que estos mismo son quienes tendrán la última palabra para decidir.
Estándares de velocidad:
Esto no es noticia, pero vale la pena repetirlo: un servicio rápido significa comodidad
para los clientes. La velocidad es un factor determinante para la satisfacción del
cliente. Varias métricas para los estándares de velocidad:
Tiempo de respuesta inicial
Tiempo de respuesta
Índice de resolución al primer contacto
Índice de servicio instantáneo / espera
Tiempo de espera haciendo fila
Tiempo de resolución de problemas
Estándares de transparencia:
Podría decirse que la transparencia es difícil de medir. Se espera que la mayoría de
las métricas estén en un extremo de la escala, sin matices cualitativos. De lo
contrario, necesitarías grandes datos o costosos análisis de documentación.
Estándares de accesibilidad:
A un cliente con dificultades en cuanto a un asunto no se le debería poner más
trabas en el proceso de ponerse en contacto. En el mejor de los casos, tu
accesibilidad es tan avanzada que te permite ser proactivo. Estas métricas
comprueban si estás ahí cuando se supone que debes estarlo.
Cumplimiento de promesa:
Significa entregar correcta y oportunamente el servicio acordado. Es decir, que, si
usted prometió entregar un pedido de 30 toneladas de materia prima a su cliente
industrial el viernes de las 8 de la mañana, deberá cumplir con esas dos variables.
Entregar a las 8 de la mañana 20 toneladas es incumplimiento, lo mismo que
entregar las 30 toneladas a las 11 de la mañana del viernes o entregarlas el sábado.
Estándares de empoderamiento:
Tener el control es uno de los principios fundamentales de un buen servicio al
cliente. Aunque es un poco difícil establecer normas para ello.
La cantidad de apariciones de la misma pregunta dividida por el número de todas
las inquietudes de los clientes. Si recibes las mismas preguntas una y otra vez no
significa que tus clientes tengan un punto ciego. Significa que probablemente no los
estas informando lo suficientemente bien. Las preguntas con un cierto número de
repeticiones (digamos, 3% o más) deben encontrar su lugar en tu sección de
preguntas frecuentes o FAQ, tutoriales o sección de ayuda. Tu meta es mantener la
tasa de preguntas individuales por debajo del 3%.
Estándares de eficiencia:
Velocidad y eficiencia son dos fuerzas que tiran en direcciones opuestas. No son
mutuamente excluyentes, pero son difíciles de equilibrar.
Respuestas por ticket: Esta métrica rastrea cuántas respuestas necesita tu
equipo para resolver un asunto. Te informa sobre el potencial de tus
representantes de servicio al cliente y sobre la cantidad de esfuerzo al que
deben enfrentarse.