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LA ÉTICA DEL RECICLAJE: UNA RESPONSABILIDAD EMPRESARIAL

Para hablar de ética es necesario precisar que esta, como concepto, si bien no ha
permeado aun, como se sabe, en todas las esferas de la sociedad de la época actual, sí ha
adquirido mayor relevancia en las últimas décadas dentro de las preocupaciones que atañen
al sector empresarial, lo que conlleva a referirnos a este fenómeno como ética empresarial.
Este interés se debe al aumento progresivo de empresas a nivel mundial y, por ende, al
impacto o la incidencia que su creación y su posterior permanencia acarrean, no solo para la
empresa y los individuos que le dan vida y la conforman, sino para los demás integrantes de
la sociedad.

La ética puede ser entendida como aquel orden que se empeña en: «analizar las
acciones humanas desde la perspectiva de cómo a través de esas acciones los seres
humanos nos hacemos mejores o peores y contribuimos a hacer mejores o peores a los
demás» (Fontrodona; Argandoña, 2011, p; 14). Dicho esto, surgió la necesidad por parte
del ente empresarial de asumir una conciencia de su papel dentro de la comunidad y dentro
del orden mundial. Esta concientización se materializó en concepto y es lo que en los
últimos años ha tomado impulso y renombre y que se conoce bajo la consigna de
Responsabilidad social empresarial. Dicho esto, uno de los primeros y mayores retos que
enfrentan las empresas radica en incorporar la temática de la ética dentro de la lógica que
maneja dicho sector, que es la lógica de la ganancia, así mismo esta conlleva a su
sostenibilidad, es decir, la sostenibilidad y la responsabilidad dependen la una de la otra y
debe avanzar de la mano.

Un estudio más pormenorizado del tema que se está llevando adelante en el presente
trabajo, demuestra que la ausencia de ética hace parte de una problemática que se origina
por la falta de sensibilidad en estas cuestiones por parte de los individuos. Esto quiere decir
que algunas empresas se dedican al desarrollo en aras de la productividad y las ganancias y
omiten la importancia de ser responsables con su entorno. Se considera que la manera más
eficaz de que esto se haga efectivo es por medio de una pedagogía de la ética empresarial,
es decir, concientizar a los empleados de una empresa de la importancia que esto tiene en el
desarrollo de la misma. Un ejemplo importante se llevó a cabo en Cuba, cuando la alta
dirección del Ministerio del transporte desarrolló cursos de ética para este sector, lo cual
conllevó a un amplio conocimiento del tema pues se observa la confluencia entre el punto
de vista de la cotidianidad y el desempeño académico, es decir, de aprendizaje de la ética.
En este punto se demuestra

Estos cursos han tenido una gran aceptación ya que el conocimiento sobre ética propicia en
las personas la formación de nuevas convicciones y creencias sobre la realidad, así como el
aprendizaje de nuevos valores, normas, actitudes y conductas que reflejan un resultado social
esperado (2007, p; 23)

Es por esto que con más frecuencia las empresas deben adoptar las disposiciones
necesarias para garantizar las nuevas normativas de la ética. Debe generarse un diálogo
entre sostenibilidad y responsabilidad, como se ha venido resaltando hasta el momento.

Ahora bien, debemos tener en cuenta que en la actualidad la humanidad pasa por uno
de los momentos más críticos que sin duda alguna marcarán un antes y un después como lo
es la propagación del virus covid-19 que mantiene en confinamiento a gran parte de la
población mundial. A raíz de esto, los niveles de contaminación han bajado
considerablemente, ha disminuido el daño a los ecosistemas y, se espera, que esto despierte
una nueva conciencia por parte de los seres humanos. Por eso, países europeos han entrado
a considerar cambios en sus políticas económicas, sociales y ambientales como lo
demuestra en una reciente investigación la revista Semana:

Mostraron su disposición de adelantar una recuperación económica acorde con lo estipulado


en el Pacto Verde Europeo (European Green Deal), que señala una hoja de ruta para dotar a la Unión
Europea de una economía sostenible, la cual exige una serie de transformaciones de los retos
climáticos y medioambientales, en oportunidades en todos los ámbitos (2020, p; 1)

Este panorama nos permitió entonces crear un proyecto de emprendimiento basado


en estos nuevos retos que le sobrevienen a la humanidad y, por consiguiente, a Colombia.
Por eso, la idea se concentró en la creación de una empresa de recolección, cuyo objetivo es
convertir residuos de nuevo en materia prima para volver a utilizarlos, lo que comúnmente
conocemos como reciclaje: ERR: Empresa recuperadora de residuos.

Esta empresa se está construyendo con las bases que acá se han venido
desarrollando respecto de la responsabilidad social. Como primera medida es menester
resaltar dos aspectos importantes en los cuales nos estamos apoyando para su desarrollo. El
primero se refiere a la construcción de empresa que proporciona el Manual de empresa
responsable y sostenible que aportó las luces para este emprendimiento afirmando que: «La
empresa es, sin duda, una de las instituciones sociales más importantes y con un mayor
poder de influir, positiva o no tan positivamente, en el sistema económico, natural y social»
(Olcese, 2008, p; 2). Ya que la empresa, además de ser amable con la naturaleza y
contribuir a su desarrollo, también está comprometida a contribuir con la disminución de la
pobreza en la comunidad. Estamos generando empleos, es decir, contratando a personal
perteneciente a la población de estratos uno y dos, en cuanto a los puestos de recolección.
No se puede desconocer que esta población es la que más se ha dedicado a este tipo de
actividades para subsistir, en este caso, a estos trabajadores la empresa les proporciona
equipos de seguridad, capacitaciones, etc. La ERR contribuye al desarrollo social. Las
capacitaciones que se imparten entre los empleados están encaminadas a instruirlos de la
mejor manera en cuanto al desempeño que deben ejercer, pero inculcando como se
ejemplificó anteriormente, una pedagogía de la importancia del cuidado del medio
ambiente.

El segundo aspecto es de una importancia capital, hace referencia a la cultura del


reciclaje en nuestra sociedad. Por eso, la ERR junto con entidades estatales estamos
educando por medio de campañas pedagógicas sobre la importancia del reciclaje. Se trata
aquí de conciencia ciudadana, cultura y educación. Por ello, para que esta tarea tenga una
efectividad mayor se están instauraron políticas estatales que buscan promover esta práctica
en los habitantes de la sociedad. El Manual de empresa responsable y sostenible de nuevo
indica lo siguiente: «Aproximadamente el 60% (15-24) de los servicios que prestan los
ecosistemas están siendo degradados o usados de forma insostenible» (Olcese, 2008, p; 2)
Estos datos, bastante preocupantes hacen más urgente la necesidad de implementar
campañas pedagógicas sobre la práctica del reciclaje en la sociedad, ya que gran parte de
las personas desconoce estas cifras alarmantes y, como se había mencionado
anteriormente, las empresas pueden incidir positivamente en la sociedad. A nuestro modo
de ver, el éxito de esta empresa a largo plazo se centra en la efectividad de una campaña
educativa, también una implementación de marketing y una difusión por parte de los
medios masivos de comunicación sobre cómo y para qué se debe reciclar. Acompañado, a
su vez, de leyes más severas que sancionen y ejerzan, como es lógico con las leyes, una
presión en la ciudadanía para lograr con éxito que cada vez el número de personas que
reciclen sea mayor.

Finalmente y a modo de conclusión es importante resaltar que los valores que se


pretenden promover con la implementación de la responsabilidad empresarial es una era
donde lo que prevalece es la supervivencia de las personas y del medio ambiente por
encima del dinero y de las ganancias. Tras la devastadora época que atraviesa la humanidad
es importante hacer un alto en nuestras vidas, darle un respiro al planeta y replantear las
bases de la sociedad consumista y predadora que hemos forjado, ya que el mundo no nos
pertenece. Tenemos la responsabilidad, no solo empresarial, sino moral de dejar un mundo
habitable a las generaciones venideras.
REFERENCIAS

Fontrodona, J; Argandoña, A (2011). Una visión panorámica de la ética empresarial


Universia Business Review, núm. 30, pp. 12-21.

Oceguera, O; Vega, M (2007). La ética, una herramienta importante para el desempeño


empresarial Revista Transporte, Desarrollo y Medio Ambiente Vol. 27, pp. 21-24.

Olcese, A. (2008). Manual de la Empresa Responsable y Sostenible. McGrawHill


Interamericana de España, S.A.U. — Universidad. Disponible en la base de datos
online de la EAN, pp 1-13.

Semana sostenible (11 de abril de 2020. Europa le apuesta a salir de la pandemia para
emprender una economía amigable con el ambiente. Recuperado el 12 de abril de
2020 de https://sostenibilidad.semana.com/medio-ambiente/articulo/paises-
europeos-le-apuestan-a-una-recuperacion-economica-amigable-con-el-
ambiente/49846

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