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1.- Bases normativas del modelo de relaciones exteriores venezolanas.

El marco normativo más amplio de reconocimiento de los Derechos Humanos se


encuentra en el Derecho Internacional, el cual comprende principios, normas, órganos y
mecanismos de protección de estos derechos. La normativa del Derecho Internacional
comprende las normas jurídicas en tratados o convenciones internacionales; y
las normas consuetudinarias provenientes de prácticas que la comunidad internacional
considera obligatorias como parte del derecho para fortalecer la protección de las
personas en toda circunstancia que lo amerite.
Todas las personas son titulares directos de los derechos humanos con capacidad
para hacerlos valer en instancias internacionales. Asimismo, las normas
internacionales de derechos humanos son vinculantes para la totalidad de los
Estados con base en:
 La condición universal de los derechos humanos.

 Sus deberes como miembros de organismos intergubernamentales en los que han


adoptado compromisos con los derechos humanos.

 Las obligaciones jurídicas contraídas en tratados o convenciones internacionales.

El Derecho Internacional está compuesto por diferentes ramas que comparten principios,


son complementarias entre sí y pueden ser aplicadas en forma simultánea según las
circunstancias.
En cada rama existen sistemas de protección que supervisan el cumplimiento de las
obligaciones de los Estados, dictan recomendaciones y decisiones que éstos deben
implementar, y evalúan la disposición de los gobiernos a cooperar en la medida que
rinden cuentas y responden por sus acciones, fallas u omisiones. Estas ramas son:
Derecho Humanitario Internacional (DHI): Incluye restricciones sobre el uso de la fuerza
y la conducta de las partes en el conflicto; el tratamiento de los combatientes (heridos,
náufragos y prisioneros de guerra); la protección de la población civil y de las personas
que no participan o han dejado de participar en el conflicto y la investigación sobre las
personas desaparecidas o fallecidas. El DHI se basa en los convenios y protocolos de
Ginebra; las conferencias de paz y el Reglamento de La Haya (Países Bajos) y los
tratados internacionales que limitan el uso de determinadas armas.
Derecho Internacional de los Refugiados (DIR): Protege los derechos humanos de
todas las personas en condición de refugiados por ser víctimas de persecución, violencia
generalizada y otras circunstancias de grave peligro para la seguridad humana, que las
han forzado al desplazamiento internacional. El DIR se basa en la Convención sobre el
Estatuto de los Refugiados de 1951 y el Protocolo sobre el Estatuto de los Refugiados de
1967; los mandatos de protección del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los
Refugiados (ACNUR) y otros instrumentos regionales como la Convención de la
Organización de la Unidad Africana (OUA) y la Declaración de Cartagena sobre los
Refugiados de 1984 para los países de América Latina, que amplían la condición de
refugiado.
Derecho Internacional de los Derechos Humanos (DIDH): desarrollado en la década
de los 60, protege los derechos humanos de todas las personas en todo momento y lugar
donde se encuentren. El DIDH se basa en obligaciones que deben cumplir los gobiernos
de los Estados en materia de derechos humanos y libertades fundamentales. Dentro de
sus obligaciones los Estados deben incorporar las disposiciones del DIDH en los marcos
jurídicos, instituciones y políticas nacionales, tomar todas las medidas necesarias para
garantizar los derechos, y rendir cuentas ante los órganos de protección de forma
periódica, incluyendo recibir asistencia de su parte y aceptar solicitudes de visita, a fin de
verificar la situación de los derechos en el terreno.
Derecho Penal Internacional (DPI): es la rama más reciente, en la cual se prohíben
delitos o crímenes graves de trascendencia internacional y regula los procesos para su
investigación, enjuiciamiento y castigo en las jurisdicciones nacionales, extraterritoriales y
universal. Dentro de esta rama, los Estados tienen obligaciones con la prevención de
violaciones de derechos humanos que puedan desencadenar en estos delitos; la
prohibición, enjuiciamiento, castigo y no prescripción de estos delitos; la extradición o
entrega de los culpables a otros Estados y órganos judiciales internacionales; y la
asistencia y cooperación para la administración de la justicia internacional, en particular, la
asistencia y protección de víctimas y testigos. Comprende también la actuación de
órganos judiciales internacionales para juzgar a las personas responsables de cometer
esos delitos, cuando los Estados no pueden o no quieren hacerlo, con base en el Estatuto
de la Corte Penal Internacional (CPI).

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