Está en la página 1de 9

See discussions, stats, and author profiles for this publication at: https://www.researchgate.

net/publication/337654216

La Tragedia de los (bienes) Comunes Garrett Hardin (1968)

Article · September 2019

CITATIONS READS

0 8,046

1 author:

Carmen Zamora-Muñoz
University of Granada
104 PUBLICATIONS   2,085 CITATIONS   

SEE PROFILE

Some of the authors of this publication are also working on these related projects:

Aquatic insects from Pantepui biogeographical region View project

Biodiversity of caddisflies in Andalusia (Spain) View project

All content following this page was uploaded by Carmen Zamora-Muñoz on 30 November 2019.

The user has requested enhancement of the downloaded file.


VOLVIENDO A LOS CLÁSICOS 57

La Tragedia de los (bienes) Comunes


Garrett Hardin (1968)
Carmen Zamora–Muñoz
Dpto. Zoología, Facultad de Ciencias, Universidad de Granada, 18071 Granada, España.

E–mail: czamora@ugr.es

Resumen

La Tragedia de los (bienes) comunes es un ensayo científico publicado en 1968 que no ha dejado
de estar de actualidad. El autor, utilizando argumentos de optimización de beneficios económicos
o biológicos a distintos niveles de organización (individuo vs población), llegó a la conclusión de
que los bienes comunes en las sociedades humanas se extinguirán en un futuro próximo. Predijo
la pérdida, destrucción, deterioro y/o desaparición de muchos de los recursos naturales, y, aunque
propuso una serie de medidas que podrían paliar o retrasar la tragedia, su efecto en las políticas
gubernamentales ha sido muy reducido. En este artículo explico brevemente las bases del mensa-
je de este clásico que no debería ser obviado. Si queremos encontrar solución a gran parte de los
problemas medioambientales que actualmente alarman a la sociedad, ni los políticos ni técnicos
con responsabilidad sobre los bienes comunes, ni los investigadores en biología de la conserva-
ción, deberían olvidar el mensaje de la tragedia.

Hardin escribió su ensayo en 1968, The números especiales, revisiones o co-


Tragedy of the Commons, para descri- mentarios en revistas tan prestigiosas
bir el dilema por el cual los individuos, como Science o BioScience (p. ej.,
de forma independiente y motivados Boyd et al., 2018). Aunque existe un
por las ventajas individuales, llegan a cierto consenso científico en la veraci-
agotar o destruir un recurso común. La dad y contundencia de sus argumentos
publicación del mismo provocó un am- y conclusiones, y ha sido el trabajo más
plio debate sobre el comportamiento citado en economía ecológica (Costan-
humano y sus implicaciones en áreas za et al., 2004), su mensaje no ha sido
tan diversas como ecología de pobla- incorporado de forma general a políti-
ciones, medioambiente, biología de la cas gubernamentales. Quizás por esta
conservación, salud, economía, de- razón, las sociedades humanas están
recho, ciencias políticas, filosofía, éti- hoy mucho más cerca de la “tragedia”
ca, geografía, psicología y sociología que hace 50 años.
(Hardin, 1998; Lant et al., 2008; Boyd Para el título de su ensayo utilizó de
et al., 2018). Este trabajo lleva acumu- forma metafórica las palabras tragedy
ladas actualmente más de 10.000 citas con el sentido de que (con esa acción)
(abril 2019: 10.107 en Web of Science, ocurren acontecimientos inevitables y
12.900 en Scopus) y, cada aniversa- commons para referirse a bienes comu-
rio desde su publicación, es objeto de nes. Precisamente tuvo que matizar, no

Etologuía, 25
Etologuía, 25 (2019):
(2019), 57–64, ISSN: 1135–6588
ISSN: 1135–6588

ETOLOGUIA vol 25-final.indd 57 16/09/2019 16:27:25


58 Carmen Zamora–Muñoz

sin sorna, el significado de este último che, y unos costes de pastoreo (pvv).
término 25 años más tarde por las críti- Los beneficios netos irán aumentando
cas recibidas. Tuvo que aclarar que no conforme aumenta el número de vacas
se refería a los manage commons, que que se llevan a pastar. Sin embargo, los
los textos socialistas utilizan para refe- beneficios no crecerán de forma lineal,
rirse a la gestión común de un recurso, sino de forma asintótica. Una vez que
o en la privatización de empresas, sino el consumo sobrepase la producción de
a bienes comunes “no administrados” pastos (pvv’’, i.e. pastos no sostenibles),
(Hardin, 1998). Hardin consideraba que los beneficios por cabeza de ganado
su pensamiento era contrario al del eco- irán disminuyendo conforme aumente
nomista Adam Smith quien, en el siglo el rebaño. Si el dueño del ganado y del
XVIII, sentó las bases del capitalismo pasto fuera el mismo, optimizaría las
moderno e inspiró a los defensores del ganancias netas maximizando el núme-
mercado libre con su idea de la “mano ro de vacas que permitieran la sosteni-
invisible”. Es decir, un individuo (un car- bilidad del pasto (en la Figura 1, sería
nicero o un panadero, p. ej.) “buscando el número de vacas que maximizan la
solamente su propio beneficio” logra distancia entre la curva de beneficios
“dejarse llevar por una mano invisible y la de costos, v’). Sin embargo, si el
que promueve… el interés público” (al pasto es comunal, y todos los ganade-
procurarnos nuestro sustento; Smith, ros llevaran allí sus vacas, el óptimo
1776). Sin embargo, el punto crucial de de explotación para cada una de ellos
la idea de Hardin, es que las decisiones sería llevar tantas vacas como pudie-
tomadas de forma individual sobre bie- ran mientras que el coste de pastoreo
nes de la comunidad no son las óptimas fuera menor que las ganancias (punto
para la sociedad en su conjunto. Dicho de corte en la Figura 1, v”). Por tanto,
de otra forma y usando un lenguaje la optimización desde el punto de vis-
más ecológico, los óptimos de explota- ta individual llevaría inevitablemente al
ción de los recursos comunes difieren agotamiento de los recursos comunes.
para los individuos y las comunidades. En nuestro ejemplo, cada pastor obser-
La idea desarrollada en “La trage- va que, a pesar de ese uso que hace,
dia de los comunes” partió de la lectura queda suficiente pasto no consumido
de la publicación en 1833 de una con- como para pensar que podría alimentar
ferencia impartida por William Forster aún a más cabezas de ganado, obte-
Lloyd, profesor de economía política, niendo así una mayor rentabilidad in-
sobre el uso excesivo de un bien co- dividual (los pastos son comunes pero
mún por parte de los plebeyos (com- los beneficios son individuales). Conse-
moners; aquellos con derechos de uso cuentemente, uno tras otro, cada pas-
y acceso a él) que afectaría necesaria- tor podría ir aumentando el número de
mente a la sostenibilidad del mismo. vacas (v’’). Para cada pastor llevar una
Podemos ilustrar el conflicto de intere- vaca más a pastar produce un beneficio
ses individuales vs. comunes y la sos- económico positivo y seguirá añadien-
tenibilidad o no de un recurso con un do más vacas al campo comunal hasta
ejemplo. Imaginemos un pastizal cuyo que el beneficio de llevar una vaca más
uso es compartido por varios pastores. sea cero (f(v)/v – pv = 0). Durante este
Supongamos que el llevar el ganado proceso, cada uno de los pastores ha
a pastar implica unos beneficios (f(v)) ido optimizando su economía utilizando
en términos de producción total de le- un recurso común, llegando a un con-

Etologuía, 25 (2019), ISSN: 1135–6588

ETOLOGUIA vol 25-final.indd 58 16/09/2019 16:27:25


Volviendo a los Clásicos: La Tragedia de los Comunes 59

Producción de leche

f(v’)

v’ v’’
Número de vacas pastando

Figura 1. Representación del conflicto de intereses individual vs. común y la sobre-


explotación de un recurso (dibujos: Cristina Soler Zamora). Abreviaturas: f(v) bene-
ficios individuales en términos de producción total de leche por vaca; pvv, costes de
pastoreo por vaca; v’, número de vacas que maximiza la distancia entre la curva de
beneficios y la de costos; v’’, número de vacas que iguala los beneficios y costos.

flicto individual de intereses y, si esto costos de la contaminación se reparten


ocurre sin tener en cuenta el óptimo de entre los miembros de la comunidad,
explotación del recurso (sostenibilidad mientras que los beneficios de la pro-
del recurso), éste se agotará irremedia- ducción asociada son privados. Como
blemente. Consecuentemente, todos en el caso de la sobreexplotación de
los animales pueden perecer debido al un recurso, el problema de la contami-
agotamiento o sobreexplotación del re- nación es una consecuencia de la den-
curso. Según Hardin, la libertad de uso sidad de la población. Cuando un solo
de los recursos comunes resulta en la individuo, o unos pocos, contaminan o
“ruina para todos”. aprovechan un recurso común, los pro-
Esta idea de que la sobreexplotación cesos naturales regeneran ese recurso
de los recursos comunes (ganaderos, de manera más o menos rápida pero, si
pesqueros, etc.) como consecuencia la densidad poblacional es elevada, el
de la libre explotación individual produ- recurso colapsa o se agota. Un ejemplo
ce la ruina para todos puede extender- esclarecedor es el, hasta hace pocas
se a la generación de problemas por décadas, erróneo pensamiento de los in-
contaminación del aire, del agua o el agotables recursos de los océanos, que
suelo, y finalmente al cambio global. Es actualmente está llevando cerca de la
fácil argumentar que verter desechos extinción a diferentes especies de peces
propios en el medio ambiente común y ballenas y al deterioro de forma irre-
es menos costoso para el que los pro- versible del conjunto de la vida marina.
duce que depurarlos o reciclarlos; los La explicación de que la causa del ago-

Etologuía, 25 (2019), ISSN: 1135–6588

ETOLOGUIA vol 25-final.indd 59 16/09/2019 16:27:25


60 Carmen Zamora–Muñoz

tamiento de recursos se encuentre en en verano excedía de 300 ovejas. Las


la superpoblación (tanto humana como ovejas y la vegetación de Hirta están
de cualquier otro ser vivo) parte del co- en un equilibrio estable producto de la
nocido Essay on Population de Malthus interacción dinámica de los animales y
(1798). Malthus expuso que, mientras las plantas, en la que la productividad y
que la producción de alimentos aumen- la composición de la vegetación deter-
ta de manera aritmética, el número de minan la densidad de población media
organismos lo hace exponencialmente, de la oveja de Soay (Clutton–Brock and
llegándose a producir el agotamiento de Pemberton, 2004). Para evitar dicha
los recursos; lo que se conoce como ca- catástrofe malthusiana en humanos,
tástrofe malthusiana (Fig. 2). Hardin planteó la posibilidad de limitar
Hardin llamaba la atención sobre la la natalidad (consideraba “intolerable”
posibilidad de que la catástrofe malthu- la libertad de reproducción en los hu-
siana y la tragedia de los bienes comu- manos). Con ello se podría lograr una
nes estuvieran relacionadas estrecha- población óptima ya que, “en un mundo
mente. La superpoblación en sí misma finito, la población que puede albergar
podría ser interpretada en escenarios debe ser también finita” y se manten-
de explotación de bienes comunes que, dría una explotación de los recursos
según Malthus, provocarían el agota- constante, cercana a la que permitiera
miento de los recursos en un proceso la sostenibilidad de los mismos. Sin em-
de la tragedia de los comunes muy bargo, este “comportamiento conscien-
similar al ejemplificado con las vacas te” de restringir la natalidad sólo fun-
y los pastos. La tasa de reproducción cionaría si no existiera un sesgo en el
óptima para el individuo es mayor que comportamiento reproductor que maxi-
la tasa de reproducción óptima para la mizara la reproducción individual. Con
población y, en algunos sistemas, tiene una argumentación claramente darwi-
efectos negativos para la población, niana, Charles Galton Darwin, nieto de
que puede verse drásticamente reduci- Charles Darwin, concluía que los indivi-
da como consecuencia del agotamiento duos que no atendieran a los llamamien-
de los recursos y ser determinante en tos de limitar la reproducción (a los que
la dinámica poblacional. Por ejemplo, denominaba Homo progenitivus) ten-
en la oveja de Soay en la isla de Hirta, drían más hijos que los más conscientes
un modelo ideal de estudio en la diná- del problema (llamados Homo contra-
mica planta–herbívoro, pues no hay de- cipiens), que tendrían una paternidad
predadores de gran tamaño ni compe- responsable, y que las diferencias en
tidores por el alimento, la disminución esas estrategias se acentuarían con
de recursos en invierno es la causa el tiempo (Tax, 1960). Ese “comporta-
principal de la elevada mortalidad de miento consciente” implicaría producir
las ovejas. Las estimas realizadas en un número reducido de hijos. Si ahora
una subpoblación de la isla, en base a imaginamos que no se expresara en to-
los requerimientos energéticos de las dos los individuos de la población con
ovejas y de los cambios en la bioma- la misma fuerza y que se heredara de
sa de plantas observada, sugería que padres a hijos, la limitación del número
la disponibilidad de vegetación por indi- de descendientes a nivel poblacional,
viduo en invierno era insuficiente para limitando el número de habitantes, no
cubrir los requerimientos de los ani- resolvería el problema, solo lo atrasa-
males cuando el número de hembras ría. En ese caso, la proporción de hijos

Etologuía, 25 (2019), ISSN: 1135–6588

ETOLOGUIA vol 25-final.indd 60 16/09/2019 16:27:25


Volviendo a los Clásicos: La Tragedia de los Comunes 61

de Homo progenitivus iría aumentando Población

Cantidad
exponencialmente de generación a ge-
neración en relación a las de individuos
con el carácter “comportamiento cons-
ciente” hasta que estos desaparecieran Catástrofe
y, con ellos, la estrategia de limitar el malthusiana Producción
de alimentos
número de habitantes. Es decir, el tener
consciencia de estas tragedias, implica-
ría la autoelimización de los individuos
con este carácter (Conscience is self– Tiempo
eliminating) ya que los procesos evolu-
Figura 2. Representación de la forma
tivos seleccionarían un comportamiento
de crecimiento de los alimentos y de
egoísta, no solidario en relación con la la población según Malthus (1798). La
reproducción. ley de Malthus predecía la ocurrencia
La relación entre natalidad y trage- en el futuro de la llamada catástrofe
dia de los bienes comunes ocurre más malthusiana en la que los recursos
raramente en poblaciones naturales ya alimentarios serían insostenibles para
que tienen más difícil explotar los re- mantener la población mundial (dibu-
cursos hasta su agotamiento y existen jo: Cristina Soler Zamora).
mecanismos de ajuste de la natalidad
a los recursos disponibles para cada
individuo. Por ejemplo, en aves, se ha
seleccionado un tamaño de puesta óp- el problema demográfico producido
timo para cada especie ya que puestas por la libertad de reproducción de los
demasiado grandes conducirían a una humanos, su argumentación es válida
menor supervivencia de la descenden- para cualquier situación en la que la
cia, por los costos que conlleva cui- sociedad inste a un individuo que ex-
darlos adecuadamente a todos (Lack, plota los recursos comunes a que, por
1954). Sin embargo, en nuestra socie- conciencia social y por el bien gene-
dad, comprometida con el estado de ral, deje de hacerlo. “El individualismo
bienestar, no se permite que la repro- es apreciado porque produce libertad,
ducción excesiva castigue a los padres pero el don es condicional: cuanto más
no previsores dejando morir de hambre supera la población la capacidad de
a los hijos que no pudieran alimentar, carga del medio ambiente, más liberta-
ya que iría en contra de la Declaración des deben ser abandonadas” (Hardin,
Universal de los Derechos Humanos 1998). De ahí que otras soluciones es-
por las Naciones Unidas de 1967, que grimidas por Hardin para mantener una
ve en la familia la unidad fundamental explotación de recursos constantes,
de la sociedad y en su derecho de deci- cercanos a la sostenibilidad se basan
dir el tamaño familiar. Hardin se pregun- en el control gubernamental. Mediante
taba cómo debería tratarse a cualquier la imposición de leyes coercitivas (de
grupo (familia, religión, raza…) que uti- coerción mutua entre los implicados) o
lizara la sobre–reproducción como nor- de mecanismos fiscales que protejan
ma para asegurar su expansión aprove- los recursos comunes se podría conse-
chando los bienes comunes. guir la sostenibilidad de los bienes co-
Aunque, a lo largo del texto origi- munes. Los ejemplos que Hardin utiliza
nal, el autor incide varias veces sobre son fácilmente entendibles y a menudo

Etologuía, 25 (2019), ISSN: 1135–6588

ETOLOGUIA vol 25-final.indd 61 16/09/2019 16:27:25


62 Carmen Zamora–Muñoz

son aplicados con nuestro beneplácito. consenso en que, en sociedades de pe-


A muchos ciudadanos les gustaría ro- queño tamaño y cuando los problemas
bar bancos, pero no están dispuestos colectivos son locales, las normas que
a permitir que otros lo hagan. Así, la benefician a la comunidad se expanden
mayoría de nosotros, actuando juntos, y se mantienen entre los individuos que
aprobamos leyes que coartan la liber- las componen. Los problemas más di-
tad del individuo para robar bancos. fíciles de solucionar son aquellos que,
También se utiliza el cobro de impues- como el cambio global, se extienden a
tos como medio coercitivo para mode- muchas comunidades diferentes y re-
rar el uso de un recurso común. En el quieren que las poblaciones que com-
centro de las ciudades se usan parquí- parten pocas normas o instituciones po-
metros que cobran el estacionamiento líticas creen nuevas para solucionarlos
para periodos cortos, pero se ponen (Barrett, 2018; Boyd et al., 2018).
multas para evitar que el periodo sea La metáfora de Hardin puso de ma-
excesivamente largo. No se prohíbe nifiesto los problemas y consecuencias
sino que se persuade (o coarta) al ciu- que la superpoblación y la explotación
dadano para que no abuse del recurso. incontrolada de los recursos podrían
A lo largo de estos 50 años desde la llegar a tener hace ya más de 50 años.
publicación de The tragedy of the Com- Desde entonces, “tragedias”, ya detec-
mons, el ensaño ha influido en las dis- tadas entonces, se han ido agravando
cusiones de distintas disciplinas, pero tal y como se predecían. Ejemplos de
no sin albergar críticas. Las críticas prin- ello son la sobre–explotación de algu-
cipales partieron de la politóloga Elinor nos importantes recursos comunes,
Ostrom, quien cuestionó las soluciones como el colapso de la pesca del baca-
achacadas a Hardin para proteger los lao en el Atlántico Norte y la emisión ex-
recursos comunes: either socialism or cesiva de contaminantes, tanto a nivel
the privatism of free enterprise (Ostrom global (p. ej., gases de efecto inverna-
et al., 1999). Sin embargo, ni la lectu- dero) como a niveles regional o local (p.
ra de su artículo de 1968 ni el de 1998 ej., vertidos de fertilizantes y desechos
dejan claro que esas sean las únicas urbanos a los cursos de agua) (Lant et
soluciones que propone. Simplemente al., 2008; Boyd et al., 2018). Así, las
Hardin argumentaba que las soluciones principales amenazas de la pérdida de
podrían ser cualquiera que limitaran el un recurso común, como es la biodi-
libre uso para evitar la destrucción del versidad (destrucción, fragmentación y
recurso común. Ostrom estudió a lo lar- degradación de hábitats, sobrexplota-
go de su carrera numerosos casos que ción, especies invasoras, transmisión
mostraban cómo gestionar y disponer de enfermedades y cambio climático),
colectivamente de recursos escasos y son todas causadas por un continuo
ha sido la primera (y única) mujer en incremento del uso de los recursos na-
recibir el Nobel de Economía en 2009. turales del planeta, como resultado de
Fue elegida por “proporcionar eviden- las actividades y expansión de las po-
cias sobre las reglas y mecanismos blaciones humanas (Primack, 2014).
de ejecución que rigen la explotación Hemos olvidado, o poco se ha tenido en
de los recursos compartidos” (https:// cuenta, lo que se nos explicaba en este
www.nobelprize.org/uploads/2018/06/ artículo clásico, en el que se llamaba
popular–economicsciences2009.pdf). la atención sobre la urgencia para las
A pesar de las críticas, hay bastante sociedades humanas de poner a punto

Etologuía, 25 (2019), ISSN: 1135–6588

ETOLOGUIA vol 25-final.indd 62 16/09/2019 16:27:25


Volviendo a los Clásicos: La Tragedia de los Comunes 63

mecanismos que permitan aproximar sentes y futuros que se pueden asignar


los óptimos de uso de los recursos co- a un recurso sin que se vean destruidos
munes por parte de los individuos y de o aprovechados durante su uso. El va-
las comunidades hasta que coincidan. lor de estos bienes públicos es enor-
¿Qué papel jugamos los científicos me y los cálculos económicos de sus
(ecólogos, etólogos, biólogos de la con- valores de uso indirecto son cada vez
servación, etc.) en buscar y encontrar más precisamente ajustados por los
una solución real a esa pérdida o sobre- economistas. Pero, volviendo de nuevo
explotación de los recursos comunes? al ensayo de Hardin, el mismo tipo de
Debemos partir del problema de que soluciones, coercitivas y fiscales, que
los recursos naturales están a menudo él esgrimía en su ensayo, son los que
infravalorados por la sociedad moder- están aplicando actualmente muchos
na. Y que, en una sociedad capitalista gobiernos para evitar la degradación
como la nuestra, los gobiernos y agen- y destrucción de dichos servicios eco-
cias oficiales centran sus decisiones sistémicos: tasas por contaminación
políticas sobre estimaciones económi- del aire mediante combustibles fósiles;
cas, principalmente. De ahí que, para cargos por uso del agua y vertidos de
poder conservar los recursos comunes, aguas residuales; compensación del
se vea como necesario dar un giro en el uso de un terreno con otro sin cultivar;
pensamiento político y social para que pagos por daños causados por insecti-
se reconozca la verdadera importancia cidas, herbicidas y fertilizantes vertidos
de los recursos comunes y su papel al medioambiente, etc. (Bateman et al.,
para la humanidad. En una sociedad 2013). Parece que incluir los servicios
de libre mercado, y como consecuencia ecosistémicos en las ecuaciones de
de las actividades económicas huma- costos beneficios de distintas activida-
nas, se pasan a menudo por alto costes des económicas es una solución mo-
ocultos (denominados externalidades) derna a problemas de conservación,
que producen efectos medioambien- pero en realidad no es más que un mé-
tales negativos sobre los recursos de todo que permite repartir los costos de
acceso común. El desarrollo de dos uso de un recurso común en función del
áreas de investigación relativamente uso individual. Es importante no olvidar-
recientes y estrechamente relaciona- nos de los clásicos para no creer que
das (economía ambiental y economía esta es una solución definitiva ya que,
ecológica) ayudan a incluir análisis de por ejemplo, los servicios ecosistémi-
costes económicos en la pérdida de los cos y las tasas medioambientales no se
recursos comunes con el argumento pagan en la misma moneda (recursos
de que, como a menudo las causas úl- biológicos vs. recursos monetarios).
timas de un daño medioambiental son Si lo que se pretende es disuadir de la
económicas, la solución debe incorpo- sobreexplotación, la solución no puede
rar principios económicos (Kubiszewski plantearse solo en términos monetarios
et al., 2013). Además del valor directo de compensación económica, sino que
que un recurso ofrece a un individuo o ésta debe de considerarse en términos
a la comunidad que lo explota, los valo- de restitución de los recursos comunes
res de uso indirecto deben ser tenidos sostenibles. Hasta que no se consiga,
cada vez más en cuenta. Son los llama- la “tragedia de los comunes” seguirá vi-
dos servicios ecosistémicos (Primack, gente. Las tendencias actuales sobre el
2014) que consieran qué valores pre- deterioro de distintos tipos de recursos

Etologuía, 25 (2019), ISSN: 1135–6588

ETOLOGUIA vol 25-final.indd 63 16/09/2019 16:27:25


64 Carmen Zamora–Muñoz

comunes no nos hacen ser optimistas. Costanza, R., Stern, D., Fisher, B., He, L.,
Es importante volver a los clásicos para Ma, C., 2004. Influential publications in
no olvidar la naturaleza del problema y ecological economics: A citation analy-
de las soluciones. sis. Ecological Economics, 50: 261–292.
Clutton–Brock, T., Pemberton, J., 2004.
Garrett Hardin y su esposa practica-
Soay Sheep. Dinamics and selection in
ban lo que predicaban, recolectaban an Island population. Cambridge Univer-
agua de lluvia para beber, reciclaban, sity Press, Cambridge.
compostaban, y evitaban a los periodis- Hardin, G., 1968. The tragedy of the com-
tas porque malgastaban el papel de pe- mons. Science, 162 (3859): 1243–1248,
riódico. Se suicidaron en 2003 a la edad Doi: 10.1126/science.162.3859.1243.
de 88 y 81 años, respectivamente, en su – 1998. Extensions of “The trage-
casa (Holden, 2003). The Garrett Har- dy of the commons”. Science, 280
din Society (http://www.garretthardinso- (5364): 682–683, Doi: 10.1126/sci-
ence.280.5364.682.
ciety.org/index.html) está dedicada a la
Holden, C., 2003. ‘Tragedy of the Com-
preservación de los escritos e ideas de mons’ author dies. Science, 302 (5642),
Garrett James Hardin. Una de las frases 32, Doi: 10.1126/science.302.5642.32b.
que se recogen en dicha página web ex- Kubiszewski, I., Costanza, R., Franco,
presa su clara preocupación por el futuro C., Lawn, P., Talberth, J., Jackson, T.,
de la humanidad: That’s what I am trying Aylmer, C., 2013. Analysis Beyond
to do: shake people up so that our gran- GDP: Measuring and achieving global
dchildren will live in a better world. genuine progress. Ecological Econom-
ics, 93: 57–68, Doi: 10.1016/j.ecole-
con.2013.04.019.
Bibliografía Lack, D., 1954. The Natural Regulation of An-
imal Numbers. Clarendon Press, Oxford.
Barrett, S., 2018. Choices in the climate Lant, C. L., Ruhl, J. B., Kraft, S. E., 2008.
commons. Science, 362(6420): 1217, The Tragedy of Ecosystem Services.
Doi: 10.1126/science.aaw2116. BioScience, 58(10): 969–974.
Bateman, I. J., Harwood, A. R., Mace, G. Lloyd, W. F., 1833. Two Lectures on the
M., Watson, R. T., Abson, D. J., An- Checks to Population. Oxford University
drews, B., Binner, A., Crowe, A., Day, Press, Oxford.
B. H., Dugdale, S., Fezzi, C., Foden, J., Malthus, T. R., 1798. An Essay on the Princi-
Hadley, D., Haines–Young, R., Hulme, ple of Population. John Murray, London.
M., Kontoleon, A., Lovett, A. A., Munday, Ostrom, E., Burger, J., Field, C. F., Norga-
P., Pascual, U., Paterson, J., Perino, G., ard R. B., Policansky, D., 1999. Revisi-
Sen, A., Siriwardena, G., van Soest, D., ting the commons: Local lessons, global
Termansen, M., 2013. Bringing Ecosys- challenges. Science, 284: 278–282.
tem Services into Economic Decision– Primack, R. B., 2014. Essentials of Con-
Making: Land Use in the United King- servation Biology. Sinauer Associates,
dom. Science, 341: 45–50. Incorporated.
Boyd, R., Richerson, P. J., Meinzen–Dick, Smith, A., 1776. An Inquiry into the Nature
R., De Moor, T., Jackson, M. O., Gjerde, and Causes of the Wealth of Nations.
K. M., Harden–Davies, H., Frischmann, William Strahan & Thomas Cadell, Lon-
B. M., Madison, M. J., Strandburg, K. J., don. https://en.wikisource.org/wiki/The_
McLean, A. R., Dye, C., 2018. Tragedy Wealth_of_Nations.
revisited. Science, 362(6420): 1236– Tax, S. (Ed.), 1960. Evolution after Darwin. Vol.
1241, Doi: 10.1126/science.aaw0911. 2. University of Chicago Press, Chicago.

Etologuía, 25 (2019), ISSN: 1135–6588

ETOLOGUIA vol 25-final.indd


View publication stats 64 16/09/2019 16:27:25

También podría gustarte