HISTORIA DE TEJIDO JACQUARD

DIBUJO MEDIANTE MANDO POR CARTONES PERFORADOS: LA IDEA DE JOSEPH

MARIE JACQUARD, 1805

Las viviendas infantiles determinaron el destino de Joseph Marie

Jacquard, nadito en 1752 y que, como hijo de un maestro tejedor,
desde muy pequeño de hubo de dedicarse a la pesada tarea de obrero
tiralazos. Su padre le hizo aprender el oficio de encuadernador. Pero
no por eso le abandono el recuerdo de la triste suerte de los
tejedores. Cuando murió el padre, el joven de 20 años heredó la casa y
el taller, dio de lado la encuadernación, se caso y, con el idealismo de
la juventud, continuo sus esfuerzos en pos de simplificar los telares
para géneros con dibujo.

Los inventores son fanáticos

El joven esposo invirtió en la materialización de sus ideas los escasos

recursos heredados, perdiéndolos completamente, porque nadie quería
saber algo de sus primeros perfeccionamiento. Para ganarse el
sustento, trabajó en una cantera. En 1789, participó en
las jornadas revolucionarias en Lyon, donde se caracterizó por su
valentía, pero abandonó el servicio militar cuando perdió a su hijo de 16
años, en uno de los combates.

Vuelta a empezar

Desprovisto en absoluto de medios, en 1796 regreso a Lyon y los

mecenas dispuestos a apoyar económicamente. En tres años concluyo la
construcción de la maquina, que podía ser manejada por el propio
tejedor, suprimiendo la intervención de los muchachos tiralazos. Esta
máquina alcanzo a Jacquard de instruir a los tejedores en su manejo. A
este primer resultado la siguió, en 1804, una máquina para tejer de
redes de pesca, que le aporto un premio de 3000 francos y un empleo
en el Conservatorio de Artes y Oficios. En el conservatorio tuvo

conocimiento de la máquina inventada por Falcón, que ya en 1728, había

conseguido formar caladas simples con un perforado. También encontró
depositada en piezas desarmadas, la complicada maquina de salto de
Vaucanson, que nunca había llegado a ser utilizada, pese a que no
contenía ya todos los elementos para mando de la formación del dibujo
tejido.
La cuadratura del círculo

Jacquard estudio los componentes detenidamente y el paso genial dada

a continuación nos parece hoy casi de pura lógica: El pesado cilindro, en
el que Vaucanson había practicado los agujeros del dibujo, lo sustituyo
por un estrecho prisma, con hileras de agujeros uniformes. En estas
condiciones, solamente necesito cubrir las superficies del prisma con los
cartones de dibujo de Falcón y hacer que, a cada giro, solamente
fueran empujadas las púas cuyo agujero estaba cubierto en el prisma
del cartón. El círculo representado por el cilindro se había convertido
en el cuadrado del prisma, que utilizaba, en cada una de sus caras,
varias hileras de púas simultáneamente. En 1805, presento al
conocimiento público el aparato que todavía hoy lleva su nombre y ya en
1806, un decreto de Napoleón I., autorizo a la ciudad de Lyon a
adquirir la patente de Jacquard, a cambio de una renta vitalicia de
3000 francos anuales.

El motín de los tejedores de Lyon

Pronto cundió el rumor de que la nueva máquina ponía en peligro la
continuidad de los puestos de trabajo. Algunos envidiosos, que acusaron
a Jacquard de plagio, estimulaban la exhibición, llegando a amotinarse
los tejedores, que tirotean el taller de Jacquard. Lyon le retiro la
renta que le había concebido, si bien, y cuando ya había cumplido 67
años el inventor, fue rehabilitado de nuevo. Modesto y desinteresado,
mantuvo su fidelidad a la ciudad natal: - Me basta con haber podido
ser útil a mis conciudadanos. – Cuando murió, la discusión concluyo con
la confirmación de que – su invento no debía ser considerado como una
copia, ya que la transición de que- su invento no debía ser considerado
como una copia , ya que la transición de lo desconocido , que él había
hecho , era de tal magnitud, que todo lo anterior aparecía solamente
como un embrión muerto , mientras que su invento había venido al
mundo como adolescente pletórico de vida.

Jacquard y los géneros de punto

Tras su éxito en la rama de los tejidos, ignoramos cuando y donde

inicio el nuevo invento sus coquetos con los géneros de punto, pero es
un hecho comprobado por todos que las maquinas Jacquard se
encuentran, con muchas variaciones, en tricotosas y telares de punto
por urdimbre, en tricotosas rectilíneas y circulares. Ello se realiza sin
alteración del principio original: jacks, alambres, platinos, que sirven
como órganos de transmisión, solamente reciben movimiento cuando el
agujero existe en el prisma o en el cilindro se halla cubierto por el; en
cambio, cuando coincide agujero sobre agujero, el elemento de
trasmisión en el taladro tan profundamente que no se produce
movimiento alguno.
Desde que, en 1876, sustituyo Lobel, en Limbach, el mecanismo
automático de un telar de punto por urdimbre colocando en su lugar una
maquina Jacquard, esta variedad de ando se ha utilizado profundamente
en la técnica de los géneros de punto y la calcetería, haciéndola objeto
de modificaciones y de perfeccionamiento técnico.

GENEROS JACQUARD

En la industria del genero de punto se aplica el concepto de Jacquard

cundo existe una selección individual superior a 4 agujas. Así, pues la
menos anchura de muestra posible en un tejido Jacquard será, en
consecuencia, de cinco mallas.

Entre los tejidos Jacquard actuales figuran los: Jacquard a colores, el

más utilizado en tejidos de circulares; en relieve; de malla cargada; de
tubular cruzado y de transferencia.

Jacquard a colores

En las maquinas Jacquard, cada juego solo puede llevar un hilo de un

color determinado. El mecanismo Jacquard se encarga de seleccionar
las agujas que deben formar malla con dicho color.

El siguiente juego teje las mallas con un hilo de diferente color en las
agujas que previamente ha seleccionado su mecanismo de Jacquard. En
un dibujo de Jacquard a dos colores, por ejemplo, las selecciones
efectuadas en dos juegos sucesivos, son complementarias. Todas las
agujas pasadas forman malla, ya sea en el primer o en el segundo
juego.

De forma análoga, en Jacquard de 3 colores, las pasadas de los 3

juegos son complementarias entre sí.