Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Historia:
48%
37%
Factores Protectores
Multiparidad
Lactancia Materna
Exposición a nicotina: se desconoce aún su mecanismo de acción,
pero se cree que reduce los niveles de estradiol
Incremento del IMC e índice cintura-cadera: la irregularidad de los
Factores de Riesgo
ciclos es más frecuentes. pero aún no hay suficiente información
Menarquia Temprana: se asocia a menstruaciones más cortas o duraderas y dolor
Ejercicio intenso: Disminuye los niveles de estradiol
menstrual, lo que favorece el reflujo de sangre a la cavidad peritoneal.
Dieta rica en frutas y verduras
Hipermenorrea
Nuliparidad: Estimulación permanente de las hormonas cíclicas ováricas no
interrumpidas por las gestaciones.
Anomalías Müllerianas: Favorecen la menstruación retrógrada, producción de
metaplasia peritoneal
Peso al nacer <3.18kg
Embarazo gemelar o de alto orden fetal
Estatura alta: las mujeres presentan mayores niveles de estradiol.
Dieta rica en grasas y carnes rojas
Endometriosis en un familiar de primer grado: Tipo poligénico o multifactorial de
herencia
Mutaciones genéticas y polimorfismos: Gen EMX2, codifica un factor de
transcripción necesario para el desarrollo del aparato reproductor.
Gen PTEN: una secuencia supresora de tumores participa en la transformación
maligna de la endometriosis ovárica.
Toxinas ambientales: TCDD: Activa al receptor del hidrocarburo de arilo, que es un
factor básico para la transcripción, y genera diversos genes de la familia de
proteínas receptoras de hormonas esteroides.
Etiología:
Se desconoce la causa definitiva, por lo que se han propuesto varias teorías para
explicar el origen de esta entidad. Se pueden señalar dos formas de
endometriosis, que si bien están asociadas, se diferencian debido a las
manifestaciones clínicas y su etiopatogenia en:
Teorías Patogénicas.
Adenomiosis
b) Metaplasia.
La teoría indica que los focos endometriales se producen por la metaplasia del
tejido muscular o bien, del tejido conjuntivo.
Endometriosis
Propuesta por el Dr. John Sampson, la cual se basa en que la endometriosis está
provocada por la implantación de las células endometriales hacia la cavidad
peritoneal mediante la regurgitación transtubárica durante la menstruación, por lo
que estos fragmentos endometriales se adhieren al mesotelio peritoneal y
desarrollarán su propia irrigación lo que les permitirá su sobrevivencia y
crecimiento.
Esta teoría es de las más aceptadas ya
que hay datos clínicos y
experimentales que la sostienen (ya
que la menstruación retrógrada
aparece en el 70-90% de las mujeres, y
se han localizado células endometriales
en líquido peritoneal y en el dializado
de mujeres en este tratamiento durante
la menstruación) aunque su desventaja
es que no puede explicar la génesis de
la endometriosis alejada de la cavidad peritoneal. Otro punto es que la
endometriosis suele predominar en las porciones más declives de la pelvis y en
conjunto con la combinación de la corriente del flujo peritoneal (que fluye en el
sentido de las agujas del reloj) explica la implantación de focos extra
endometriales del lado izquierdo de la pelvis; mientras que la endometriosis
diafragmática se localiza principalmente del lado derecho.
Sustenta que los implantes pueden ubicarse en lugares inusuales como periné o
región inguinal, por lo que, si no se identifican las implantaciones peritoneales,
pero sí lesiones retroperitoneales, provocará diseminación linfática debido a que la
región retroperitoneal posee una circulación linfática muy abundante. Se trata de
una teoría con pocos estudios que la respaldan, pero al haber evidencia de la
diseminación del adenocarcinoma endometrial por esta vía es más fácil la
demostración de que el endometrio puede ser transportado de la misma forma.
c) Metaplasia Celómica.
Descrita inicialmente por Iwanoff y Meyer, esta teoría sugiere que el peritoneo
parietal (pluripotencial) puede sufrir transformación metaplásica en respuesta a
procesos inflamatorios o influencias hormonales, al grado de ser un tejido
histológicamente igual al endometrio normal, ya que el epitelio celómico da origen
a ovarios y conductos de Müller los cuales son precursores del endometrio,
explicando así la endometriosis ovárica y endometriosis en ausencia de
menstruación (mujeres premenárquicas o posmenopáusicas) o en varones que
reciben estrógenos y han sido sometidos a orquidectomía (por carcinoma
prostático).
d) Inducción.
Fisiopatogenia:
a) Dependencia hormonal:
b) Sistema inmunitario:
Ubicación Anatómica:
Aspecto microscópico:
Su patología es más sencilla ya que el criterio diagnóstico es la presencia de
glándulas endometriales y estroma. Su aspecto funcional es variable pudiendo
experimentar cambios cíclicos semejantes al endometrio normal. Otras veces el
epitelio que reviste las glándulas sufre alteraciones provocando que sea más difícil
su identificación.
Clasificación:
Mínima (Fase I) 1-5 pts. Los implantes son aislados, no tienes adherencias
Leve (Fase II) 6-15 pts. Los implantes son superficiales <5cm en total y se
encuentran repartidos en el peritoneo y ovarios, no hay
adherencias importantes
Moderada (Fase III) 16-40 Hay múltiples implantes, tanto superficiales como
pts. profundos y adherencias peritubáricas y periováricas
Grave (Fase IV) >40pts. múltiples implantes superficiales y profundos, existe
compromiso ovárico y las adherencias son firme y
densas, así como endometriomas.
Ginecológicas No ginecológicas
Endometriosis Urológicas: Tumores vesicales, cistitis
Tumores malignos ginecológicos intersticial, cistitis por radiación
Síndrome de congestión pélvica Gastrointestinales: CA de cólon,
Enfermedad inflamatoria pélvica constipación, enf. Inflamatoria intestinal,
Tuberculosis y salpingitis síndrome de colon irritable
Muscoloesqueléticas: Dolor abdominal
miofascial, fibromialgia, neuralgias
Métodos diagnósticos:
a) Exploración física:
Las mujeres con endometriosis pueden cursar con un examen pélvico normal ya
que, en su mayoría es una enfermedad en la que están involucrados los órganos
pélvicos, por lo que es difícil detectar anormalidad durante la inspección visual, a
excepción de localizar formas simples de endometriosis en vulva, perineo,
cicatrices u ombligo en forma de nódulos de color azul, en caso de que éstos
nódulos se ulceren o biopsen, se observará salida de sangre obscura.
Se recomienda que el examen físico sea durante la menstruación e incluya una
exploración bimanual, ya que de esta forma la evaluación es más completa para la
identificación de nódulos y datos clínicos de endometriosis. Se debe determinar la
posición, tamaño y movilidad del útero ya que un útero fijo en retroversión es
sugestivo de enfermedad adherencial severa.
La presencia de nódulos en los ligamentos útero sacro e hipersensibilidad indican
una endometriosis activa o cicatrices a lo largo del ligamento; La presencia de un
tumor quístico en los anexos, representa en ocasiones un endometrioma ovárico,
éste puede ser móvil o estar adherido a otras estructuras pélvicas.
La exploración de vagina y cuello uterino con espejo, tampoco suele revelar signos
de endometriosis, hay ocasiones en las que se observan lesiones violáceas o
rojizas y éstas pueden ser en el cuello uterino o el fondo de saco posterior de la
vagina y al contacto serán doloras y sangrarán.
Si en la exploración recto vaginal se palpan nódulos en el saco de Douglas o en el
ligamento utero sacro, se puede considerar endometriosis uretral.
Es importante recordar que el diagnóstico definitivo será hasta que se haya
realizado la evaluación histológica de las lesiones.
b) Ecografía transvaginal:
c) Ecografía Doppler:
e) Laparoscopía diagnóstica:
f) Marcadores biológicos:
-En la fase inicial se deberá solicitar una biometría hemática completa, medición
de gonadotropina coriónica humana en suero y orina, análisis y cultivos de orina,
además de cultivo de material vaginal y cervical para descartar infecciones o
complicaciones gravídicas.
Tratamiento:
a) Conservador:
b) Quirúrgico:
c) Esterilidad
.
El tratamiento de la esterilidad asociada a la endometriosis, dependerá de la edad,
duración de ésta, etapa de la endometriosis, participación de los ovarios, trompas
o ambos en dicho proceso, tratamientos previos y síntomas dolorosos asociados a
las prioridades de la paciente. Es importante tener en cuenta la actitud de la
paciente frente a la enfermedad, coste del tratamiento, medios económicos y
resultados esperados.
En etapas avanzadas de la
enfermedad y endometriomas
>4cm, el dolor y la edad
conducirán de forma
independiente a una
intervención quirúrgica.
Si el endometrioma o dolor
no son problemas en las
mujeres mayores, se
recomienda un abordaje
agresivo como inducción ovárica o inseminación intrauterina sin intervención
quirúrgica inicial.
En mujeres jóvenes sin otros factores de infertilidad, la cirugía inicial puede
considerarse una alternativa frente a la fertilización in vitro.
d) Adolescentes.
Recidivas.
Bibliografía.