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República Bolivariana de Venezuela

Ministerio del Poder Popular para la Educación Universitaria


Universidad Bicentenaria de Aragua
Núcleo CREATEC
Escuela de Psicología

Curso: Psicología del desarrollo I

TEORÍA PSICOANALÍTICA DE
SIGMUND FREUD

Facilitador: Participantes:

Yunay Arreaza Celeste Silva Del Corral C.I.: 26.393.799

Sección J5

San Juan de los Morros, octubre – 2019


Introducción
El ser humano, desde la fecundación hasta el deceso –e incluso después de
éste–, atraviesa distintas etapas de desarrollo. El desarrollo no solamente se
fundamente en aspecto anatómico, también transciende desde lo psicológico hasta lo
social. Por ende, el desarrollo comprende el aspecto biológico –con la evolución
física, corporal y cerebral–, el cognitivo –con la evolución de las capacidades y los
procesos de la mente– y el psicosocial –con los vínculos que el sujeto establece con el
entorno–.

Anteriormente, con se tenía la concepción que el ser humano estaba limitado a


una única función: la reproducción; por ende, la raza humana no se definía
exactamente como seres sociales, sin embargo, con el evolucionar del tiempo, el ser
humano objetó por reconocerse como un ser hipersocial y comenzar a cuestionar todo
lo conocido hasta la época. Asimismo, dentro de los grandes hallazgos,
investigaciones y descubrimientos, resalta el nombre del científico Sigmund Freud.

Sigmund Freud es conocido por ser el científico más polémico en el Siglo XX,
contribuyendo al estudio y base científica de la incipiente psicología. Freud es
conocido, a grandes rasgos, como el padre del psicoanálisis. El título corresponde a
un sinfín de teorías que él desarrolló y estudió, destacando la teoría del psicoanálisis –
con la figuración de la mente como la preconsciencia (punta del iceberg) y la
inconsciente (represión) –; los estadios del aparato psíquico con el ELLO, EL YO y el
SUPER-YO; y, cabe destacar, su teoría que levantó polémica en la época: la teoría
del desarrollo psicosexual, con las etapas oral, anal, fálica, latencia y genital.

Asimismo, cada una de sus teorías supuso un hito y marcó una pauta para el
desarrollo y el estudio del inconsciente, inspirando a célebres autores como Carl
Gustav Jung, entre otros. Es indispensable conocer y manejar las teorías de Sigmund
Freud para comprender los distintos estadios del inconsciente, lo que en psicoanálisis
se conoce como agenda oculta y todo aquel conflicto que documente una raíz interna
e inexplicable. Es por ésta razón, que se describirán cada uno de los descubrimientos
de Freud, tanto su biografía, definición de conceptos y teorías.
Teoría psicoanalítica de Sigmund Freud
Sigmund Freud

Sigismund Freud, que a los veintidós años habría de cambiar ese nombre por
el de Sigmund, nació en Freiberg, en la antigua Moravia (hoy Príbor, República
Checa), el 6 de mayo de 1856. Su padre fue un comerciante en lanas que, en el
momento de nacer él, tenía ya cuarenta y un años y dos hijos habidos en un
matrimonio anterior; el mayor de ellos tenía aproximadamente la misma edad que la
madre de Freud -veinte años más joven que su esposo- y era, a su vez, padre de un
niño de un año. En su edad madura, Freud hubo de comentar que la impresión que le
causó esta situación familiar un tanto enredada tuvo como consecuencia la de
despertar su curiosidad y aguzar su inteligencia.

En 1859, la crisis económica dio al traste con el comercio paterno, y al año


siguiente la familia se trasladó a Viena, en donde vivió largos años de dificultades y
estrecheces, siendo muy frecuentes las temporadas en las que, durante el resto de su
larga vida (falleció en octubre de 1896), el padre se encontraría sin trabajo. Aunque
siempre detestó Viena, Sigmund Freud residiría en esta ciudad hasta un año antes de
su muerte: pese a la intercesión de Roosevelt y Mussolini, en junio de 1938 se vería
obligado por su condición de judío (sus obras habían sido quemadas en Berlín en
1933) a emprender el camino del exilio hacia Londres como consecuencia
del Anschluss, la anexión de Austria al proyecto pangermanista de la Gran Alemania,
preparada por los nazis con ayuda del canciller austriaco Arthur Seyss-Inquart y sus
prosélitos.

En 1873, el joven Freud finalizó sus estudios secundarios con excelentes


calificaciones. Después de considerar la posibilidad de cursar estudios de derecho, se
decidió por la medicina, aunque no con el deseo de ejercerla, sino movido por una
cierta intención de estudiar la condición humana con rigor científico. A mitad de la
carrera tomó la determinación de dedicarse a la investigación biológica, y de 1876 a
1882 trabajó en el laboratorio del fisiólogo Ernst von Brücke, interesándose en
algunas estructuras nerviosas de los animales y en la anatomía del cerebro humano.
De esa época data su amistad con el médico vienés Josef Breuer, catorce años mayor
que él, quien hubo de prestarle ayuda, tanto moral como material. En 1882 conoció a
Martha Bernays, su futura esposa, hija de una familia de intelectuales judíos; el deseo
de contraer matrimonio, sus escasos recursos económicos y las pocas perspectivas de
mejorar su situación trabajando con Von Brücke hicieron que desistiese de su carrera
de investigador y decidiera ganarse la vida como médico, título que había obtenido en
1881, con tres años de retraso.

Su amistad con Josef Breuer cristalizó, por entonces, en una colaboración más
estrecha, que fructificaría finalmente en la creación del psicoanálisis, aunque al precio
de que la relación entre ambos se rompiera. Entre 1880 y 1882, Breuer había tratado
un caso de histeria (el de la paciente que luego sería mencionada como «Anna O.»);
al interrumpir el tratamiento, habló a Freud de cómo los síntomas de la enferma
(parálisis intermitente de las extremidades, así como trastornos del habla y la vista)
desaparecían cuando ésta encontraba por sí misma, en estado hipnótico, el origen o la
explicación. En 1886, luego de haber comprobado en París la operatividad de la
hipnosis, Freud obligó a Breuer a hablarle de nuevo del caso y, venciendo su
resistencia inicial, a consentir en la elaboración conjunta de un libro sobre la histeria.

Durante la gestación de esta obra (aparecida en 1895 con el título Estudios


sobre la histeria), Freud esbozó sus primeras ideas sobre el psicoanálisis. Breuer
participó hasta cierto punto en el desarrollo, aunque frenando el alcance de las
especulaciones más tarde características de la doctrina freudiana y rehusando,
finalmente, subscribir la creciente convicción de Freud acerca del papel desempeñado
por la sexualidad en la etiología de los trastornos psíquicos. En 1896, después de
romper con Breuer de forma un tanto violenta, Freud empezó a transformar la
metodología terapéutica que aquél había calificado de «catártica», basada en la
hipnosis, en lo que él mismo denominó el método de «libre asociación». Trabajando
solo, víctima del desprecio de los demás médicos, el tratamiento de sus pacientes le
llevó a forjar los elementos esenciales de los conceptos psicoanalíticos de
«inconsciente», «represión» y «transferencia».

En 1923 le fue diagnosticado un cáncer de mandíbula y hubo de someterse a


la primera de una serie de intervenciones. Desde entonces y hasta su muerte en
Londres el 23 de septiembre de 1939, estuvo siempre enfermo, aunque no decayó su
enérgica actividad. Sus grandes contribuciones al diagnóstico del estado de la
civilización datan de ese período: El porvenir de una ilusión (1927), El malestar en la
cultura (1930), Moisés y el monoteísmo (1939). Ya con anterioridad, a través de
obras entre las que destaca Tótem y tabú (1913), inspirada en el evolucionismo
biológico de Charles Darwin y el evolucionismo antropológico y social de James
George Frazer, había dado testimonio de hasta qué punto consideró que la
importancia primordial del psicoanálisis, más allá de una eficacia terapéutica que
siempre juzgó restringida, residía en su condición de instrumento para investigar los
factores determinantes en el pensamiento y el comportamiento de los hombres.

Sigmund Freud y el psicoanálisis

Freud es el padre del psicoanálisis, un método que tiene como objetivo el


tratamiento de enfermedades mentales. El psicoanálisis freudiano es una teoría que
intenta explicar el comportamiento de los seres humanos y se basa en el análisis de
los conflictos sexuales inconscientes que se originan en la niñez. Esta teoría sostiene
que los impulsos instintivos que son reprimidos por la conciencia permanecen en el
inconsciente y afectan al sujeto. El inconsciente no es observable por el paciente: el
psicoanalista es quien debe volver accesibles dichos conflictos inconscientes a través
de la interpretación de los sueños, los actos fallidos y la asociación libre. El concepto
llamado “asociación libre”, trata de una técnica que busca que el paciente exprese,
durante las sesiones de terapia, todas sus ideas, emociones, pensamientos e imágenes
tal y como se le presentan, sin restricciones ni ordenamientos. Tras esta apertura, el
psicoanalista debe determinar qué factores, dentro de esas manifestaciones, reflejan
un conflicto inconsciente.

La mente inconsciente
Sigmund Freud desarrolló un mapa topográfico de la mente en el que
describió las características de la estructura y el funcionamiento de la mente. En este
modelo, la mente consciente es solo la punta del iceberg. En la mente inconsciente
descansan muchos de nuestros impulsos y deseos primitivos que están mediados por
la preconciencia.

Freud descubrió que algunos eventos y deseos causaban tanto miedo y dolor a
sus pacientes, que permanecían guardados en el oscuro subconsciente, afectando a la
conducta de manera negativa. Esto sucedía debido al proceso que llamó “represión”.
En su teoría da mucha importancia a la mente inconsciente, ya que el objetivo del
psicoanálisis es hacer consciente lo que está molestando en el inconsciente.

Aparato psíquico
Más tarde, Freud desarrolló un modelo de la mente que estaba compuesto por
el ELLO, el YO y el SUPER-YO, y lo llamó el “aparato psíquico”. Tanto el ELLO,
el YO y SUPER-YO no son áreas físicas, sino conceptualizaciones hipotéticas de
funciones mentales importantes.

 El ELLO opera en el nivel inconsciente. Responde al principio del placer y


está compuesto de dos tipos de instintos biológicos o impulsos a los que
llamó Eros y Thanatos. El Eros, o instinto de vida, ayuda a los individuos a
sobrevivir; dirige las actividades que sustentan la vida como la respiración, la
comida o el sexo. La energía creada por los impulsos de vida se conoce como
libido. En contraste, el Thanatos o instinto de muerte, son una serie de fuerzas
destructivas que están presentes en todos los seres vivos. Cuando la energía se
dirige hacia otros, se expresa en agresiones y violencia. Freud pensaba que el
Eros tiene es más poder que el Thanatos, puesto que facilita que la gente
sobreviva en vez de autodestruirse.
  YO (o ego) se desarrolla durante la infancia. Su objetivo es satisfacer las
demandas del ELLO dentro de la aceptación social. En contraste con el
ELLO, el YO sigue el principio de realidad y opera en el consciente y el
subconsciente.
 El SUPER-YO (o superego) es el responsable de asegurar que se siguen unos
estándares morales, por lo que actúa con el principio de moralidad y nos
motiva a actuar con un comportamiento socialmente aceptable y responsable.
El SUPER-YO puede hacer a una persona sentirse culpable por no seguir las
normas. Cuando hay un conflicto entre objetivos del ELLO y el SUPER-YO,
el YO actúa como mediador. El YO posee mecanismos de defensa para
prevenir la ansiedad de estos conflictos. Estos niveles o las instancias se
superponen, es decir se integran y de este modo funciona el psiquismo
humano. Este es un proceso que se va desde el momento en que una persona
nace.

Teoría del desarrollo psicosexual


La época en la que el autor de la teoría psicosexual vivió, y en la que era
habitual la fuerte represión de los deseos sexuales, sobretodo en el sexo
femenino, Sigmund Freud entendió que existía una relación entre la neurosis y la
represión sexual. Por lo tanto, era posible entender la naturaleza y la variedad de la
enfermedad al conocer la historia sexual del paciente. Freud consideraba que los
niños nacen con un deseo sexual que deben satisfacer, y que existen una serie de
estadios, durante los cuales el niño busca placer de diferentes objetos. Esto es lo que
llevo a la parte más polémica de su teoría: la teoría del desarrollo psicosexual.
 Etapa oral:

Comienza con el nacimiento y continúa durante los primeros 18 meses de vida.


Esta etapa se centran en el placer en la boca, esa es la zona erógena. El niño chupa
todo lo que encuentra porque eso le resulta placentero y así conoce su entorno. Por lo
tanto, en esta fase el niño ya experimenta con su sexualidad. Si el adulto, por ejemplo,
le prohíbe que se chupe el dedo, la mano, etc. le está obstruyendo la posibilidad de
explorarse y explorar su alrededor. Lo cual puede traer problemas futuros para el
niño.

 Etapa anal

La fase anal del desarrollo se produce entre los 18 meses y los tres años de edad.
En esta etapa la preocupación del niño y sus padres gira alrededor del ano, es la etapa
del control de esfínteres. El goce sexual para el niño está en la defecación. Él siente
que entrega así, una producción de su cuerpo, una parte de sí mismo y por ello es tan
importante para él. Es una etapa de gran importancia y es fundamental que el control
de esfínteres se haga progresivamente, sin presiones. Manejar mal esta etapa va a
repercutir negativamente en comportamientos futuros.

 Etapa fálica

La fase fálica de la teoría de Sigmund Freud comienza a los tres años y se


extiende hasta los seis años. En esta etapa los genitales son el objeto de placer y
aparece el interés por las diferencias sexuales y los genitales, por lo que es muy
importante no reprimir y manejar debidamente este estadio, ya que se podría obstruir
la capacidad de investigación, conocimiento y aprendizaje general. Freud asegura que
los varones comienzan a experimentar sentimientos sexuales hacia sus madres y ven a
sus padres como competidores, por lo que temen ser castrados, proceso que resulta en
el Complejo de Edipo. Más tarde los niños se identifican con sus padres y reprimen
los sentimientos hacia sus madres para dejar atrás esta fase.

 Etapa de latencia

La fase de latencia de Freud se desarrolla entre los seis años y el inicio de la


pubertad. Coincide con la etapa escolar y durante mucho tiempo se creyó,
equivocadamente, que la sexualidad quedaba adormecida, latente. Lo que sucede es
que durante este período el interés del niño se centra en conocer, aprender e
investigar. Un buen manejo de las etapas anteriores, contribuye muy favorablemente
al éxito escolar.

 Etapa genital

Esta fase se da en la pubertad, y una vez más, el centro de atención recae en los
genitales. Los individuos muestran curiosidad por la sexualidad genital y es básico
que encuentren en sus padres y en el mundo adulto la apertura y disponibilidad para
hablar de sexo y para aclarar y responder a sus dudas.
Conclusión

Sigmund Freud, con base en todos los experimentos y posteriores hallazgos,


permitió definir una variante del conflicto. El conflicto, para el psicoanálisis, se
define como la disyuntiva presente entre una idea del inconsciente que opone
manifestarse al ámbito consciente, es por ello que se inicia la lucha interna que
desencadena mecanismos de represión, resistencia y transferencia para contrarrestar
la idea conflictiva.

Por tanto, el inconsciente juega un papel fundamental en el desarrollo y


evolución del ser humano. No obstante, el psicoanálisis freudiano también expone su
teoría en el ámbito sexual: define el constructo de la personalidad en base a la
represión y/o manifestación irreprimible de los deseos sexuales. Define las etapas de
la niñez como la adaptación del ser humano para satisfacer los deseos sexuales,
siempre y cuando exista un método que aclame la aprobación social. En el mismo
orden de ideas, el aparato psíquico funciona como control y vigilante de la conducta:
el ELLO se manifiesta con los deseos más primitivos en favor de su saciedad, el
ELLO coacciona como un mediador entre los impulsos sexuales y la aceptación
social y, por último, el SUPER-YO se expone con el código ético y moral; cuando el
ELLO y el SUPER-YO presentan conflicto, el YO se manifiesta como mediador entre
ambos.

Es así como Freud expone el carácter sexual, los impulsos y la adaptación


social en una teoría que explica que la conducta del ser humano va a estar
influenciada por la aparición de las vivencias plasmadas en el inconsciente y su
manifestación a la vida cotidiana, desencadenando mecanismos de adaptación o
represión, siempre y cuando con la necesidad de acallar al ELLO y e inclinar la
conducta a un producto satisfaciente para el SUPER-YO.
Referencias

Biografiasyvidas.com (s.f.). Sigmund Freud. Disponible en:


https://www.biografiasyvidas.com/monografia/freud/ [Consulta 2019 octubre 28,
6:23 p.m.]

García-Allen, J (s.f.). Sigmund Freud: Vida y obra del célebre psicoanalista.


PsicologíayMente. Disponible en: https://psicologiaymente.com/biografias/sigmund-
freud-vida-obra-psicoanalista [Consulta 2019 octubre 28, 6:49 p.m.]

Pérez, J. Merino, M (2012). Definición de psicología del desarrollo. Definicion.de.


Disponible en: https://definicion.de/psicologia-del-desarrollo/ [Consulta 2019 octubre 28,
7:26 p.m.]

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