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Mark Seem
A.H.A.
Asoc. Hispanoamericana de Acupuntura
Traducción: José Aguado
Producción:
Mandala ediciones, 2005
c/ Tarragona, 23
28045 Madrid (España)
Tel.: +34 914 678 528
www mandalaediciones.com
mandala@libroverde.com
I.S.B.N. 84-96439-34-8
Depósito legal: ……………..
Impresión: Publidisa
en papel ecológico
Prefacio
El control del dolor por medio de la acupuntura debería formar parte del
entrenamiento de todo estudiante de acupuntura y el público, a la larga, estaría
de acuerdo en asumir, como hace, que los acupuntores tienen gran eficacia en el
tratamiento del dolor y diversas disfunciones. La American Medical Association
considera la acupuntura como una terapia adecuada y colateral para el control
del dolor. El tratamiento de dolores crónicos y recurrentes se ha analizado en la
literatura médica como uno de los cuidados sanitarios más urgentes y costosos.
Entonces empecé a ir por los cubículos de tratamiento, uno tras otro, estudiando
a los pacientes. Me di cuenta de que nuestros estudiantes no tenía ninguna idea
de cómo tocar los cuerpos de sus pacientes para comprobar directamente el
estado de su sistema de meridianos. Mientras yo diagnosticaba y trataba,
basándome sobre todo en la palpación de los puntos estratégicos de acupuntura y
meridianos, para determinar dónde se estancaba el qi, estos estudiantes se
limitaban a palpar el curso de la arteria radial, mirar la lengua y hacer preguntas,
sin tocar para nada más el cuerpo de sus pacientes. Me asombré y dediqué un
rato a comprobar que la falta estaba en la TCM, la perspectiva de medicina
interna herbal que nuestro supervisor había traído del PRC, de una forma general
y sin ningún sentido crítico.
Después de varios años de este modo, volví a la facultad clínica con una base
regular y, después de recibir a otros supervisores veteranos preparados en otros
estilos de acupuntura, se me fue pasando la irritación que tenía contra la
acupuntura TCM. En un ambiente menos apasionado, pude continuar realizando
mi análisis de la acupuntura basada en los meridianos y considerando la
diferencia que tenía con la TCM. Seguí estudiando y practicando los sistemas de
acupuntura meridiana francés, vietnamita y japonés, y los integré con la
investigación y la práctica occidentales de los puntos gatillo. De este modo, he
desarrollado mi propio estilo de acupuntura, que da importancia a la liberación
inmediata de zonas de constricción palpable, utilizando una combinación de
puntos distales seleccionada basándose en la teoría meridiana y puntos locales
seleccionados mediante el tacto.
Durante los últimos años, mi misión, tanto para mí mismo como para mi escuela,
ha quedado clara. Quiero demostrar el poder que tiene la acupuntura como
terapia y, especialmente, para situaciones de dolor recurrente y crónico, cuando
se practica desde su propia perspectiva basada en los meridianos. Donde la
acupuntura TCM consideraba al cuerpo palpable y sentido fuera de la
acupuntura, un sistema basado en los meridianos lo pone otra vez en su sitio. En
nuestro ambiente médico moderno, en el que se ha eliminado de la medicina el
tacto y se ha sustituido por pruebas objetivas estériles, pienso que la acupuntura
meridiana puede introducirse y, por tanto, restablecer el tacto igual como
poderosa herramienta de diagnóstico que como metodología terapéutica eficaz y
segura.
Este libro sobre el tratamiento del dolor recurrente y crónico desde una
perspectiva de acupuntura basada en los meridianos ha surgido como
consecuencia de las muchas preguntas que los estudiantes y graduados me han
hecho cuando he presentado demostraciones de mi tratamiento del dolor.
Aunque esas preguntas deberían ser innecesarias para acupuntores bien
preparados, tengo la experiencia de que la posibilidad de tratar con éxito el dolor
crónico no está al alcance de los que no están entrenados en un sistema basado
en los meridianos. El famoso físico Sun Simiao insistía en la necesidad de tratar
los puntos a shi (sensibles) cuando se tratan situaciones de dolor, ya que estos
puntos (y no los de los libros de texto) están donde el qi se ha bloqueado y
estancado.
Cuando me enteré, hace algunos años, del trabajo de seminario sobre puntos
gatillo (sensibles) realizado por la Dra. Janet Travell y empecé a estudiarlo, me
di cuenta de que ella había vuelto a descubrir, desde una perspectiva miofascial
occidental en vez de la meridiana oriental, exactamente lo que quería decir Sun
Simiao. En el texto que viene a continuación quiero transmitir el espíritu de este
redescubrimiento de los puntos sensibles y la importancia crucial que puede
tener la acupuntura en el control del dolor.
MDS
Fire Island, NY
Agosto de 1992
Introducción
El punto de acupuntura
¿Pero esto es, en realidad, tan importante? Creo que sí. Permitid que me remonte
a las fechas en que yo empecé a aprender a poner a los pacientes agujas en los
puntos de acupuntura. Preocupado por la seguridad y deseando tener la mayor
preparación posible en la situación de los puntos de acupuntura y la inserción de
agujas, para lo que mi educación en la filosofía francesa no me preparó nunca,
rogué a otro estudiante, una doctora en medicina, que me ayudase. Le pedí que
sujetase el cuerpo donde yo iba a poner la aguja y me dijese lo que ocurría en
realidad cuando la aguja insertada produjese la característica sensación de
embotamiento, distensión y dolor. Puse la aguja en el punto L.I.4 y noté algo
muy concreto. Pregunté a mi compañera médico qué ocurría en realidad y me
dijo que el músculo había saltado un poco y ahora estaba sujetando la aguja. Por
tanto, yo retuve, a partir de aquel momento, una imagen muscular de lo que yo
hacía cuando ponía agujas en los cuerpos de mis pacientes.
3.– Still, A. T., Osteopathy: Research and Practice, Eastland Press Seattle, 1992,
p. 21.
Yo creo que las agujas de acupuntura llevan el cuerpo a responder con sus
diversos cambios curativos, ya que nosotros, como acupuntores, influimos, en
primer lugar, en el tejido conjuntivo del cuerpo. La irritación que producen las
agujas hace que responda este tejido y, en mi opinión, es esta respuesta la que
produce todo tipo de cambios diferentes, tanto internos como externos. Incluso
cuando uno quiere hacer los cambios internos más profundos como, por ejemplo,
calmar un sistema nervioso o inmunológico mal regulado en un síndrome de
fatiga crónica, en mi opinión, el acupuntor debe mantenerse pendiente de la
superficie del cuerpo del paciente, en los lugares donde se han puesto las agujas.
5.–Seem, Mark Acupuncture Imagin, Healing Arts Press, Rochester, VT, 1990.
Parte I: Principios de tratamiento
A los pocos minutos de entrar en casa de la Dra. Travell, ella se había dado
cuenta de que tengo los antebrazos cortos y de otras consideraciones sobre
músculos y huesos y me llevó a una silla especial que se adaptaba más a mi
cuerpo. Al cabo de un rato, me pidió que me quitase la camisa para indicarnos
cómo observa, trabaja y examina los síndromes de dolor miofascial. Se trataba
de una profesional de primera categoría que intentaba establecer sus puntos “en
mi cuerpo”. La mayor lección que he sacado de mi experiencia con esta notable
mujer fue que la clave del dolor y sus disfunciones complejas no se encuentra en
el conocimiento objetivo y preconcebido del médico, sino, una vez más, en los
propios cuerpos de los pacientes. La Dra. Travell volvió al cuerpo miofascial, el
cuerpo que puede verse, tocarse, palparse y manipularse, al mismo tiempo que
hizo que volviese este cuerpo a un lugar importante de la práctica de la
medicina.
Sin embargo el problema de lo que se podía hacer con estas dolencias llamadas
no médicas y los pacientes que las sufrían seguía sin solucio-narse. Si los habían
despedido con el frívolo argumento de que no había nada médico que funcionase
mal, ¿qué se iban a hacer con su sufrimiento? Si estos signos de distrés no
correspondían a problemas físicos, ¿qué eran y cómo podría arreglárselas el
médico para que estos pacientes dejasen de atestar su sala de espera?
Al principio del siglo XX, todos los médicos estaban preparados en la creencia
de que, sino había lesiones orgánicas o trastornos sistemáticos, el dolor
recurrente o crónico y sus síntomas concomitantes de distrés eran un problema
psicosomático: los que lo sufrían eran hipocondríacos, pamplineros y cuentistas,
si se negaban a reconocer la naturaleza psicológica de sus trastornos e insistían
en volver al médico para recordarles su situación.
1.– Freud, Sigmund y Breuer, Josef, Studies in Hysteria, traducido por James
Strachei, Basic Books, Nueva York, 1987.
La Dra. Travell no quiso seguir con estas creencias y esta metodología. Con su
padre, como ejemplo, un médico de medicina general que estaba familiarizado
con algunas formas de medicina física y manipula-ciones, y con su propia
tendencia clara de tomar completamente en serio todo lo que le decía el paciente,
la Dra. Travell llegó a la conclusión de que su trabajo debía consistir en hacer de
detective médico para montar el “rompecabezas miofascial”, cuyas piezas
estaban hechas de experiencias subjetivas de dolor y molestias.2
Ahora comprendo que una de las cosas más significativas que yo hago es
considerar los síntomas del paciente como reales. Estos síntomas suelen
descubrirse durante el reconocimiento de los puntos sensibles de disparo y la
relajación de estas contracciones físicas da a veces un alivio significativo del
dolor y las dolencias. Yo pensaba que todos los acupuntores trabajaban de un
modo similar y me di cuenta de repente de que muchos acupuntores
occidentales, entrenados según el modelo de la TCM, jamás hacían un
reconocimiento físico de sus pacientes. Es el mismo fenómeno que encontró la
Dra. Travell cuando se juntó por primera vez con prominentes acupuntores
chinos, en los años 1970. Ellos insistían en que conocían exactamente dónde
había que poner las agujas, sin palpar para encontrar el punto, basándose en su
conocimiento anatómico exacto de su situación.
Ahora descubro que mis inquietudes son paralelas a las de la Dra. Travell y me
veo impulsado a insistir ante mis estudiantes y colegas en la necesidad de hacer
que el tacto y la palpación miofascial recuperen el puesto que tenían en la
diagnosis y el tratamiento, si queremos ayudar en el tratamiento del dolor. Creo
que debemos seguir a la Dra. Travell para que el cuerpo del paciente sea de
nuevo el centro. Esa terapia no es superficial o sintomática en tales condiciones,
sino primaria. Estos problemas se resuelven muchas veces relajando las
contracciones miofasciales y enseñando al paciente a evitar contraerse de nuevo.
El sistema de la acupuntura TCM, que asume que la mayoría de los problemas
son internos y que los desequilibrios zang fu requieren un tratamiento directo
con el zang fu como punto primario, según mi experiencia, no es válido en el
caso de dolor crónico y recurrente ni, por la misma razón, en la mayoría de los
casos de distrés visceral no-orgánico.
Por esta razón, voy a dedicar mis esfuerzos en esta década a reconsiderar,
practicar y enseñar la acupuntura, a la luz de la perspectiva de la Dra. Travell. Yo
creo que los acupuntores chinos originales estaban describiendo las mismas
experiencias subjetivas que Travell. Creo que el sistema meridiano chino era un
mapa miofascial primitivo. Es más, pienso que liberar la circulación de qi por los
meridianos equivale a una relajación miofascial que permite que los sistemas
nervioso, arterial, venoso y linfático circulen con más normalidad. Para mí, el
famoso proverbio de la acupuntura clásica que dice “Donde no hay un flujo
libre, hay dolor” es una descripción de algo idéntico a los puntos gatillo de la
Dra. Travell. Por esta razón, yo creo que los puntos sensibles, a shi, son los
puntos primarios del tratamiento del dolor. En ello coincido con Bob Flaws,
cuando dice:
[La] dispersión del punto a shi indica con frecuencia la diferencia que hay entre
el éxito y el fracaso en el tratamiento del dolor con la acupuntura. Los puntos
nombrados numerados están teóricamente donde el qi y la sangre pueden
ajustarse mejor; pero los puntos a shi son la situación real del bloqueo y el
estancamiento.3
3.– Flaws, Bob, Sticking to the Point, Blue Poppy, Boulder, CO, 1989, p. 109.
Yo creo que este principio simple significa que, cuando se buscan puntos locales
que corresponden a los síntomas de dolor y disfunción de un paciente, los
acupuntores tienen que empezar por descubrir cuáles son los circuitos
meridianos afectados. Después, deben sentir a lo largo de estos circuitos, para
encontrar los puntos sensibles contraídos. Cuando el paciente grita ¡“Ay”! ya lo
tienes: es el punto a shi, donde hay que poner la aguja para dispersar el bloqueo
y liberar la circulación en esa zona.
En las discusiones de acupuntura, se oye con frecuencia que tal o cual maestro
dijo que los grandes acupuntores utilizan pocas agujas. Esto se interpreta con
frecuencia como que para hacer el mejor tratamiento basta con una o dos agujas;
pero el gran acupuntor francés-vietmanita, Nguyen Van Nghi interpreta este
principio clásico de un modo diferente.
+Según Van Nghi, ningún buen acupuntor utiliza dos puntos cuando puede
utilizar uno. Con esto quiere decir que, cuando se trata el dolor, en vez de tratar
el punto del libro de texto más cercano al dolor de paciente, así como el
verdadero punto sensible a shi, se debe poner la aguja en el auténtico punto a
shi. También dice Van Nghi que un gran profesional confía en su sentido del
tacto y pone agujas en un solo punto (el punto sensible encontrado por palpación
y confirmado por la respuesta subjetiva del paciente). Sin embargo, en un caso
complejo, puede haber 20 o más de estos puntos sensibles. En cada caso, el buen
profesional utiliza un solo punto para cada lugar y con esto me refiero al punto
sensible a shi, no al del libro de texto.
Puntos a shi
Como hemos dicho antes, un punto a shi, tal como se describe en la acupuntura
china, es cualquier punto donde, al palparlo, el paciente manifiesta dolor y
molestia como respuesta a la presión. Los puntos a shi se tratan tradicionalmente
con técnicas de dispersión con agujas, mosibustión, acupresión profunda,
ventosas o gua sha (frotar con el borde de una cuchara de cerámica).
Kori
Puntos gatillo
Travell enseña que todos los adultos tienen virtualmente muchos puntos gatillo
latentes, esperando su activación. Estas contracciones latentes pueden activarse,
si un músculo se mantiene en una posición corta durante un período prolongado,
como durante el sueño o en una intervención quirúrgica. También pueden
activarse si el tejido donde se encuentran se contrae repetidas veces
manteniéndolo durante largos períodos de tiempo en la misma posición, como
cuando se escribe a máquina o se sujeta un teléfono en un lado.
Es más, también pueden activarse con facilidad cuando se enfrían con una
corriente, aire acondicionado o algo similar, sobre todo si esta persona está
cansada o sometida a la rigidez que sigue al ejercicio. Estos puntos sensibles
latentes pueden activarse también con una enfermedad vírica. Este último caso
ayuda a explicar muchas dolencias y dolores que se sufren con la gripe y con
enfermedades víricas crónicas, como el síndrome crónico de fatiga (CFS) y el
síndrome post-polio.
En cuanto a la relación que hay entre los puntos de acupuntura clásica, tal como
figuran en los libros de texto, y los puntos gatillo, Travell y Simons la aclaran de
este modo:
De todo esto, lo más sorprendente e importante es que Travell lo hizo sin tener
ningún conocimiento de la teoría de la acupuntura china, como el yin y el yang,
las cinco fases o los meridianos. En cambio, descubrió estos fenómenos de los
puntos sensibles, basándose en imágenes de los músculos y fascias de la
medicina occidental. Creo que, si los anatomistas de la TCM hubiesen
seleccionado estas mismas imágenes miofasciales para basar en ellas los puntos
de acupuntura clásicos, hubiesen llegado a diagramas virtualmente idénticos a
los de los textos y artículos de Travell y Simons. También se hubiesen dado
cuenta de que esas situaciones son aproximadas, y no retratos exactos, y sólo
sirven como punto de partida para sentir las contracciones de los tejidos del
cuerpo.
Las descripciones normales TCM de los puntos a shi, que yo conozco bien, no
incluyen, en cambio, ese análisis de tensiones palpables, sino sólo molestias al
presionar.
El Dr. Guo dice que estos tres tipos de puntos se pueden encontrar en estado
agudo de disfunción. En la etapa de revisión, suelen encontrarse puntos
negativos y positivos. Los puntos más comunes para poner la agujas en este
sistema son los distales, benignos, que alivian los síntomas locales, y los
negativos, que alivia los puntos sensibles locales positivos. El Dr. Guo dice que
los puntos efectivos son diferentes de los puntos meridianos; pero insiste en su
importancia para el tratamiento clínico. Su procedimiento es muy parecido a los
estilos japoneses que enseña Kiiko Matsumoto, donde los puntos distales que
alivian contracciones locales concretas y sensibles, están seleccionados muchas
veces entre los propios puntos sensibles locales.
Tenemos que advertir aquí que, lo mismo que en la forma local de tratar los
puntos sensibles, la clave consiste en estar seguro de que las contracciones
locales (el dolor, la tensión, los nudos, es decir el atasco de qi) se desactivan.
Después, se buscan los puntos del lado derecho del cuerpo, que corresponden a
zonas perturbadas del lado izquierdo y viceversa. Esto se basa en la idea de que,
cuando un lado del cuerpo no funciona bien, hay en el lado opuesto una zona de
estancamiento de qi que, al ponerle las agujas, alivia el problema. Por ejemplo,
se puede poner la aguja en un punto sensible, cerca de L.I. 10, en el lado
derecho, para un caso de codo de tenista en el lado izquierdo.
El Dr. Guo interpreta estos cuatro métodos de un modo similar. Busca una
distribución simétrica de la izquierda y la derecha y de la parte de arriba y la de
abajo del cuerpo, una distribución simétrica y cruzada: puntos correspondientes
que están a lo largo de las mismas longitudes, latitudes o correspondencias
hipotéticas cruzadas arriba-izquierda/abajo-derecha. Finalmente, busca su
distribución a lo largo de los meridianos. Espera encontrar puntos en el mismo
meridiano o en el meridiano correspondiente con relación exterior/interior. Por
ejemplo, se pueden encontrar puntos del meridiano del hígado para curar
problemas que están a lo largo del meridiano de la vesícula biliar y viceversa.
También prefiere tratar puntos efectivos que están “cerca de los puntos de
meridiano”.
Una vez más, hay un corolario fascinante sobre el trabajo de Travell. Como los
autores chinos antes mencionados se refieren continuamente a sus
descubrimientos de puntos reactivos y efectivos, considerándolos como nuevos
avances clínicos, uno no puede dejar de preguntarse si acaban de descubrir la
obra de Travell o la literatura japonsa del punto sensible. Aquí está lo que
Travell decía en el volumen uno, que apareció hace unos diez años: “Los que
tienen dificultad para reconocer TPs por palpación, pueden utilizar un
dermómetro o aparato similar para medir la conductividad o la resistencia de la
piel, con el fin de explorar la superficie de la piel y buscar puntos de alta
conductividad (baja resistencia de la piel), que frecuentemente, aunque no
siempre, coinciden con TPs activos”.10
Este análisis de los puntos a shi chinos, kori japoneses y de disparo de Travell
descubre una gran similitud entre los tres conceptos y demuestra que, al menos,
unos pocos clínicos del PRC están volviendo de nuevo a este concepto de
acupuntura basado en el meridiano.
Reforzando la base
Antes he destacado el tratamiento de puntos sensibles o de disparo locales como
el principal fallo metodológico de la acupuntura moderna TCM, tal como se
practica en Occidente. Sin embargo, el tratamiento de esos puntos gatillo, a pesar
de ser la condición sine qua non del tratamiento efectivo, no es completamente
suficiente sin un apoyo adecuado. Yo creo que, como mantiene también Shudo
Denmei, el principio teórico más importante que hay tras la relajación de zonas
locales de estancamiento de qi en la acupuntura basada en los meridianos está en
la frase, muchas veces citada, de Zhu Dan xi. Zhu, conocido también como Zhu
Zhen-heng, fue uno de los cuatro grandes maestros de las dinastías Jin Yuan. Su
famoso proverbio dice: “El yang tiende hacia el exceso; el yin, hacia la
deficiencia”11
Aunque esta deficiencia yin corresponde pocas veces a los síntomas del paciente
y sólo puede captarse mediante el pulso, Shudo Denmei aclara que el exceso de
yang suele corresponder de un modo muy estrecho a las dolencias del cliente.
Las zonas de constricción de qi son, en otras palabras, lo que el paciente siente
por su experiencia subjetiva. Los puntos sensibles tensos que se descubren con la
palpación de un hombro frío son de lo que se queja el paciente.
Por otro lado, Van Nghi ha interpretado este mismo principio únicamente en el
contexto de tratamiento tendinomuscular. Etiqueta a los meridianos
tendinomusculares como yang y a los regulares, como yin. Basándose en este
principio, llega a la conclusión de que si el yang (el meridiano tendinomuscular,
en su interpretación) es excesivo, el yin (en meridiano regular correspondiente)
debe ser deficiente o con tendencia a la deficiencia. Recomienda dispersar los
puntos sensibles locales que haya a lo largo del circuito del meridiano
tendinomuscular correspondiente, con inserción de agujas superficiales, mientras
se tonifica el punto de tonificación del meridiano regular.
Mientras que los tratamientos tendinomusculares de Van Nghi son eficaces para
el dolor agudo, he visto pocas veces que sean suficientes para los dolores y
trastornos recurrentes y crónicos. Debido a su conceptualización, hace el
tratamiento siempre solamente en un circuito meridiano tendinomuscular o los
relacionados con él, sometiendo a tratamiento, por ejemplo, los tres circuitos
yang. En el dolor crónico, hay muchas veces una distribución miotótica mucho
más compleja de los puntos gatillo sensibles, hasta tal punto que una contracción
del omóplato derecho, por ejemplo, puede estar acompañada a veces por dolor y
disfunción de la articulación sacroilíaca y músculos glúteos de las nalgas del
lado derecho o, incluso con más frecuencia, el izquierdo. Los tratamientos
tendinomusculares de Van Nghi no permiten esa compensación miofascial y son,
por tanto, inadecuados algunas veces para el tratamiento del dolor recurrente y
crónico.
1.–Dick Larson “The Role of Connective Tissue as the Physical Medium for the
Conduction of Healing Energy in Acupuncture and Rolfing” en
el American Journal of Acupuncture, 1990, vol.18, No.3, p. 257-259.
Hipótesis de trabajo
En Acupuncture Energetics señalo algo que encuentran repetidas veces, tanto los
estudiantes como los profesionales. Hay varios filtros principales, por medio de
los cuales los acupuntores evalúan los datos que consiguen entrevistando,
tocando y observando a sus pacientes. Los principales son: yin y yang, las cinco
fases, fluidos de qi y sangre y espíritu, el zang fu y los canales y vasos de
conexión. Creo que, en la TCM, los filtros principales son el yin y el yang, el
zang fu y los fluidos de qi y de sangre. Como la TCM está basada en una
perspectiva médica herbal e interna, se centra en las funciones zang fu internas y
en lo que ocurre con ellas. Los cambios patológicos están descritos, por tanto, de
una forma primaria, como una deficiencia de qi o sangre, calor en la sangre,
exceso de humedad debido a deficiencia del bazo, etc.
Tratamiento esencial
El concepto clave del tratamiento esencial es dirigirlo hacia lo que se cree que es
una disfunción o desequilibrio subyacente, que se manifiesta como síntomas
abiertos. Mi experiencia me dice que, en la acupuntura TCM, el meollo o raíz es
virtualmente siempre una disfunción zang fu, como una deficiencia yang del
bazo, aumento de fuego en el hígado, etc. Debe tenerse en cuenta que en la
acupuntura TCM se da a casi todos los pacientes una diagnosis zang fu interna
en cada diagnóstico. Sin embargo, ¿no sería raro que cada paciente que visita a
su médico saliese con un diagnóstico médico interno? En realidad, sólo lo hacen
de un 30 a un 35%, mientras que los demás se aseguran aún más de que no
tienen nada grave.
Según estos profesionales, hay pocas esperanzas de que se corrija por completo
el desequilibrio. Es más, su intención es mantener este desequilibrio raíz dentro
de unos límites funcionales. La escuela de los Cinco Elementos de Worsley
utiliza este concepto al que Worsley llama “factor causativo”. Los europeos
tienen un concepto más constitucional y psicológico de este desequilibrio
primario, que no difiere de los remedios constitucionales homeopáticos. Tanto si
estas interpretaciones están de acuerdo con la teoría de acupuntura clásica china
como sino, representan una fuerte corriente en algunas transiciones de
acupuntura europeas y sus derivadas americanas.
Sin embargo, tanto desde el punto de vista europeo como desde el oriental, la
idea clave del tratamiento raíz es que los síntomas locales que constituyen las
dolencias del paciente son precisamente manifestaciones de un desequilibrio
subyacente. Es en este desequilibrio subyacente donde está la causa raíz de estos
síntomas. La idea, por tanto, es mantener la atención en el desequilibrio raíz y
fijarse en las ramas o síntomas locales solamente cuando sean agudos o
preponderantes. Por ejemplo, en la acupuntura TCM, la raíz es el foco de
tratamiento en condiciones crónicas, mientras que las ramificaciones, los
síntomas locales y las dolencias son lo central en los casos de trastornos agudos.
Tratamiento local
En la acupuntura TCM, el tratamiento de las ramas es, en gran parte, sinónimo
de tratamiento local. El tratamiento de ramas pretende el alivio de los síntomas y
dolencias. Sin embargo, al poner agujas en puntos sensibles en la acupuntura
basada en los meridianos, el tratamiento local es el tratamiento raíz de las
disfunciones de los canales y vasos conectores. Como este tratamiento local
restablece la circulación normal de qi, no sólo puede aliviar el dolor, sino afectar
también a los trastornos internos producidos por la constricción habitual del qi
en el jing-luo. En la acupuntura de puntos sensibles, igual que en el protocolo
tendinomuscular de Van Nghi, se considera que las dolencias de un 65-70% de
pacientes no son trastornos internos, sino la consecuencia de bloqueos
energéticos superficiales que requieren un simple tratamiento local para
desbloquear las zonas o puntos contraídos. En estos casos, la base o raíz de los
trastornos está en la superficie y este tratamiento local se dirige a la raíz.
Estas dolencias representan una gran parte de lo que tratan la mayoría de los
acupuntores: personas a las que han dicho que no tiene nada médicamente
incorrecto ni que pueda tratar la medicina. Yo pienso que la mayoría de estos
pacientes sufren lo que en acupuntura se llama constricción de qi y lo que la
medicina física y la terapia física ven como dolor y disfunción miofasciales. En
mi experiencia clínica, la acupuntura sintomática, local (de puntos sensibles) es
ideal en estos casos.
Si consideramos la terapia de puntos gatillo de Travell como una versión de la
acupuntura local cuando se hace poniendo agujas secas, o sea, sin inyectar
ninguna substancia, es importante tener en cuenta que ella y sus colegas han
hecho tremendos avances en el campo del tratamiento del dolor crónico. Este
trabajo está tan íntimamente relacionado con la acupuntura local que necesita
una investigación profunda y los beneficios de la acupuntura local podrían ser
más fáciles de demostrar e investigar, si se observan desde esa perspectiva
moderna miofascial.
Travell y sus colegas han demostrado su éxito en el tratamiento del dolor y, tanto
mi teoría como mi experiencia, me dicen que la acupuntura local en particular y
la basada en los meridianos, en general, se benefician en gran medida si se ponen
sobre ellas sus imágenes de puntos gatillo miofasciales. En el protocolo que
vamos a analizar en el capítulo 10, se recomienda el tratamiento local como
punto central, combinado con el tratamiento de capas energéticas más profundas
como refuerzo, siguiendo las normas de la acupuntura francesa y japonesa.
Además, Shudo Denmei insiste en que la deficiencia de yin que subyace en ese
exceso de yang superficial debe tonificarse utilizando estrategias de las cinco
fases, mientras que el exceso de yang, sea patógeno o reactivo, debe dispersarse
de un modo local. También destaca la simplicidad de asegurar esta deficiencia de
yin palpando los pulsos radiales de los pulmones, el bazo, los riñones y el
hígado. El corazón y el protector del corazón (el pericardio) no se tratan en este
sistema. El punto de tonificación del órgano más deficiente en Ying se
selecciona, por tanto, como el tratamiento raíz. Tan pronto como se realiza esto,
el foco y grueso del tratamiento se cambia a la dispersión y reactivación del
exceso superficial de yang.
5.–Ibid. , p. 108
Denmei admite que, en Japón, hay una amplia diversidad de opiniones sobre este
punto de vista. Algunos practicantes japoneses de la terapia de meridianos creen
que el tratamiento raíz puede aliviar del 70 al 80% de los síntomas de un
paciente, mientras que otros aseguran que el tratamiento raíz no tiene ningún
efecto particular para aliviar los síntomas locales. Con toda probabilidad, la
mayoría de los profesionales japoneses caen, de algún modo, entre estos dos
extremos. Los acupuntores japoneses modernos, de preparación científica,
aplican tratamiento casi exclusivamente desde un punto de vista local y
sintomático y el libro de Shudo Denmei estaba, en principio dirigido a ellos. Se
limita a plantear que añadan un punto de tonificación para el esquema deficiente
en yin, con lo que no dan de lado al tratamiento raíz. Por otro lado, muchos de
estos acupuntores científicos japoneses acusan a los que practican la terapia de
meridianos de descuidar completamente el tratamiento sintomático y Shudo
Denmei insiste en que nunca debe hacerse así. Sin embargo, algunos
profesionales tratan solamente la raíz durante un rato, esperando ver si esto
alivia los síntomas locales o, en otras palabras, la constricción de qi debida a la
hiperactividad y exceso de yang. De no ser así, hacen también un tratamiento
local.
...el tratamiento raíz puede bastar por sí solo para aliviar los síntomas, en Japón
no cambian de opinión para utilizar pocas agujas. Esto se debe a que la mayoría
de los pacientes japoneses consideran que a mayor número de agujas más
generalizado es el tratamiento.7
Continúa para aclarar y establecer de forma ambigua que prefiere poner agujas
en los puntos reales donde hay diferencias de sensibilidad o textura, en vez de
fiarse de las localizaciones de los libros de texto. Cuando relaciona listas en sus
historias de casos, por ejemplo, S.I. 10, debe entenderse como el punto sensible
o tenso más cercano al verdadero punto del libro de texto. Insiste en que los
puntos reactivos son más eficaces en general y especialmente cuando se realiza
un tratamiento sintomático. También añade que los endurecimientos o
constricciones duras y tensas del tejido indican siempre una reacción más
crónica que cuando se trata de un simple punto sensible. También descubre que
las zonas tensas del abdomen se pueden relajar con más facilidad que una
constricción similar de la espalda, donde resulta más eficaz un tratamiento
repetitivo y la moxibustión directa. Finalmente, rompiendo de nuevo con la
ortodoxia contemporánea japonesa, a no ser que el paciente sea muy frágil o
deficiente, Denmei prefiere dejar las agujas en su lugar de 10 a 15 minutos,
dando al cuerpo más tiempo para responder al estímulo de las agujas.
Baste con decir que, la primera vez que leí el texto de Shudo Denmei, me
encontré como si estuviese en mi casa. Se trataba de un maestro japonés que
exponía de forma clara y realista exactamente los mismos principios y enfoques
que yo había desarrollado durante más de doce años de experiencia. Son,
esencialmente, los mismos principios de tratamiento que yo había desarrollado
por mi cuenta como consecuencia de mi experiencia clínica. Había llegado a
estas mismas conclusiones, trabajando contra las disposiciones de la acupuntura
TCM y lo que yo considero su efecto negativo sobre la práctica de la acupuntura
en Estados Unidos.
Niveles de entendimiento
En mi propia preparación de la acupuntura francesa, tuvo un carácter central una
pregunta clave sacada de las enseñanzas de Chamfrault y Van Nghi. ¿Había
algún problema en el nivel wei, superficial, de protección de energía, en el nivel
ying o de nutrición de energía, de funcionamiento interno, o en el núcleo, jing o
nivel de energía ancestral? He etiquetado de nuevo este concepto de tres niveles
como energías superficiales (nivel wei), energías funcionales (nivel ying) y
energías básicas (nivel jing).
Energías superficiales
Para mí, se llaman energías superficiales las doce regiones cutáneas ( tai yang,
shao yang, etc.), los vasos secundarios, especialmente los meridianos
tendinomusculares, y todo el conjunto de actividades por las que el yang protege
al yin. A este nivel, los problemas suelen estar producidos por un exceso de
trabajo, actividad, vigilancia o lo que los inmunólogos modernos llaman “sobre-
regulación”, con la que el sistema está trabajando demasiado. En esta capa,
vemos los esquemas permanentes del cuerpo o las zonas que se constriñen con
frecuencia y están tensas de los tejidos conjuntivos y musculares, como algo
parecido a lo que Wilhelm Reich llama blindaje del carácter. La relajación de
estos esquemas permanentes es crítica, no sólo porque alivia los dolores,
dolencias y disfunciones asociadas producidas por constricciones locales, sino
también porque libera las energías básicas y psicológicas que se drenan en tales
condiciones. Este drenaje o bloqueo de energía básica y psicológica puede
afectar seriamente tanto a la psiquis como al soma. Aunque la relajación de
constricciones superficiales no cura necesariamente un caso de depresión crónica
en un paciente de dolor crónico, puede mejorar el estado psicológico, liberando
la energía que se ha dedicado hasta entonces a hacer frente a dicho dolor y
disfunción.
Energías funcionales
Llamamos energías básicas al nivel jing formado por las energías prenatales
ancestrales, comparadas por muchos autores franceses con el código energético
que se establece en el momento de la concepción para el futuro desarrollo del
organismo. La acupuntura utilizada para el tratamiento de este nivel básico tiene
estrategias de los ocho vasos extraordinarios y las cinco fases. El tratamiento
efectuado a este nivel raras veces se relaciona directamente con las dolencias del
paciente, sino que suele buscar una armonización más generalizada de naturaleza
tanto preventiva como constitucional.
Chanfrault y Van Nghi han enseñado que el acupuntor debería empezar por
descubrir cuál de los tres niveles de energía (superficial, funcional o básico) está
alterado. Cuando ya se ha descubierto, se debe dirigir el tratamiento a los
meridianos que elevan este nivel de energía. Según Cranfrault y Van Nghi, del
65 al 75% de los problemas que se ven en un ambulatorio de práctica general de
acupuntura afectan al qi superficial o wei y pueden tratarse relajando los puntos
sensibles de la superficie. Esto puede hacerse, bien sea dispersando los
meridianos tendinomusculares implicados y tonificando los meridianos regulares
correspondientes, o por simple dispersión de puntos locales a shi, emparejados
con la estimulación de puntos distales que tienen un fuerte efecto sobre la zona
que estamos tratando. Por ejemplo, podemos poner agujas en el punto distal L.I.
4, para aliviar el dolor de cabeza. Yo creo que las doce regiones cutáneas deben
considerarse también como parte del nivel energético superficial, especialmente
los seis circuitos yang que comprenden el tai yang, el shao yang y el yang ming,
que tienden al exceso externo.
Este protocolo sigue los principios clásicos de acupuntura, tal como los defiende
Shudo Denmei, al mismo tiempo que realza la importancia del tratamiento de los
puntos sensibles para relajación local y alivio de los síntomas. Como ya hemos
dicho antes, creo que esto último es crucial para el tratamiento del dolor
recurrente y crónico. Prestar esta atención al tratamiento local no supone un tipo
inferior de práctica, como sugieren algunos profesionales como Worsley. En el
tratamiento del dolor, la valoración de la experiencia del paciente conseguida por
palpación en busca de puntos sensibles y tensos, es el principal beneficio
terapéutico en sí y por sí. Cuando estos puntos se desactivan además mediante la
acupuntura o lo que la medicina física llama agujas secas, los esquemas del dolor
crónico empiezan a dar rendimiento y aumenta el resultado terapéutico, a veces
de un modo espectacular.
4. Cadenas miofasciales
En su análisis de las cadenas miofasciales de la parte baja de la espalda y las
piernas de las personas que sufren dolor crónico en la parte baja de la espalda, B.
J. Headley extiende el análisis de los puntos gatillo más allá del concepto de la
hiperirritabilidad neural local de esos puntos.1Los terapeutas físicos que tengan
especial interés y preparación en relajación miofascial de puntos gatillo se
sienten frustrados muchas veces por la ardua naturaleza de la compresión
isquémica, el spray and stretch* y otras técnicas similares de liberación de
puntos gatillo de síndromes complejos de dolor miofascial y por la aparición de
los puntos gatillos de otras zonas del cuerpo, después de la liberación de los
puntos localizados en la zona inicial. Lo que se dice de estos pacientes, en
cuando a la acupuntura o inyección de puntos gatillo, ha resultado igual de
frustrante para los fisiatras*. En demasiadas ocasiones, cuando se ha conseguido
la liberación local, se han agravado los problemas en otra parte.
1.– Headley, B. J. “EMG and Miofascial Pain”, Vol. 10, No. 4, julio/agosto
1990, Clinical Menagement, 43-46. Es una versión ampliada de un artículo que
apareció en principio con Stephen Finando, en Advances Magazinepara
terapeutas físicos.
Por otro lado, la mayoría de los acupuntores de Estados Unidos tratan toda la
cadena o meridiano de acupuntura. Sin embargo, en mi opinión, raras veces
descubren o desactivan los verdaderos puntos gatillo de esta cadena. El físico u
osteópata que localiza con gran precisión los puntos gatillo primarios para un
trastorno concreto suele ignorar los secundarios de las cadenas miofasciales
distales correspondientes.
Aunque la meta de Baldry es que se interesen los doctores en medicina por este
sistema de acupuntura/agujas secas, deja de tener en cuenta que muy pocos están
preparados para palpar en busca de puntos gatillo y son muchos menos todavía
los que tienen tiempo y ganas de hacerlo. Incluso los osteópatas, en cuya
preparación general figuran estas técnicas, están abandonando las terapias
palpatorias en favor de técnicas y procedimientos médicos más ortodoxos.
Baldry, pretende, sin duda, que los acupuntores médicos utilicen también esta
técnica miofascial; pero, en mi experiencia, pocos acupuntores, con excepción
de los japoneses, están inclinados o preparados por su formación para hacerlo.
2.– Seem, Mark, Acupuncture Imaging, Healing Arts. Press, Rochester, VT,
1990.
Para mí, está claro que, desde su principio hasta hace relativamente poco, la
acupuntura se ha centrado en la esencia de la acupuntura, es decir, el flujo libre
de qi por el sistema meridiano. Por otro lado, la medicina herbal china se centra
en las funciones de los órganos internos y en los humores o sangre y fluidos que
circulan por dentro. Aunque los profesionales occidentales de la TCM han
adoptado esta última perspectiva herbalizada y suelen combinar la acupuntura
con la prescripción de medicina herbal en su práctica clínica, los acupuntores
franceses y japoneses han tratado de conservar un criterio mucho más clásico
basado en los sistemas de meridianos y en la forma en que se producen en ellos
los bloqueos. Gracias a mi propia preparación en acupuntura francesa y al gran
impacto que ha causado Kiiko Matsumoto en mí y en mi instituto, no ha de
sorprender que yo pueda desarrollar otra perspectiva sobre un estilo diferente de
práctica basada en los meridianos.
Esta pregunta interesante tiene una larga historia también en el análisis médico
occidental. Como hemos visto antes, durante todo el siglo XIX estuvo
debatiéndose en los círculos médicos europeos si los trastornos no lesivos y
orgánicos debían considerarse como parte de la medicina e incluirse en la
educación y la práctica médicas también.4 La mayoría de los médicos e
investigadores importantes se han inclinado por sacar a las personas que tienen
estos trastornos de las atestadas salas de espera del profesional, para que pueda
seguir dedicándose a las cosas propias de la medicina: infecciones, epidemias,
enfermedades orgánicas, vísceras dañadas o defectos de los músculos y el
esqueleto.
Otros argumentaban que estos trastornos no lesivos ni orgánicos, a los que se les
llama, tanto entonces como ahora, funcionales, entraban plenamente dentro de la
medicina y esas dolencias eran precisamente la causa de la mayoría de las
consultas que hacían los clientes al médico.5 Incluso la mínima fatiga crónica,
“orgánica” de este tipo servía como punto central de la educación médica y la
práctica clínica. Estos profesionales asegura-ban que, aunque el trastorno no sea
orgánico ni visceral, el problema sigue siendo somático y requiere una
intervención somática. Recomendaban la hidroterapia y el masaje para mejorar
la circulación y eliminar congestiones de sangre y linfa, una dieta nutritiva y
descanso y relajación, combinados con ejercicios tonificantes, como un alegre
paseo diario.
5.– Fleury, Maurice de, Les Grands Symptomes Neurastheniques, Felix Alcan
editor, París, 1901, en especial el capítulo XI
Por otro lado, la Dra. Travell recomienda tomarse el dolor muy en serio, tan en
serio como para garantizar un reconocimiento físico. En tales casos, la palpación
de los tejidos sensibles revela con frecuencia la presencia de puntos gatillo
excepcionalmente sensibles. Una vez desactivados estos puntos, desaparecen las
dolencias viscerales o se atenúan considerablemente. Esto es lo que Travell y
Simons llaman efectos somatoviscerales y se producen en casos en que el
trastorno miofascial lleva a una perturbación de las vísceras. En tales casos, la
resolución del trastorno miofascial alivia o erradica los síntomas viscerales y no
se necesita tratamiento visceral interno. La Dra. Travell cita algunos ejemplos
fascinantes.
Los que practican en Europa la terapia de cicatriz dicen también que las
perturbaciones viscerales que se producen por toda la zona abdominal y pélvica
tienen su causa en materias que se adhieren a las viejas cicatrices y utilizan una
técnica parecida a la de Travell, inyectando lidocaína por inyección subcutánea
debajo de la misma cicatriz. Yo tuve un paciente así que sufría durante años un
terrible caso de lo que los médicos diagnosticaron como colitis. El tratamiento
de acupuntura no produjo ninguna mejoría. El Dr. Yves Requena, un famoso
médico y acupuntor francés que daba un seminario en nuestro instituto, accedió
a ver a este paciente. Requena descubrió una gran cicatriz debida a una
operación de vesícula que había sufrido hacía cinco años y habló a los presentes
de la terapia alemana de cicatriz. Enseñó a un médico presente a inyectar
lidocaína en la cicatriz y, al cabo de unas pocas inyecciones, como unas dos
semanas, desapareció por completo la colitis del paciente.
Por otro lado, los efectos viscerosomáticos son el resultado de una enfermedad
visceral que produce la formación de puntos gatillo somáticos. Estos puntos
gatillo y el dolor y la disfunción que llevan consigo permanecen con frecuencia
después de resolver la enfermedad visceral. En tales casos, la desactivación de
puntos gatillo da un gran alivio, a veces decisivo, casi de inmediato. La terapia
de puntos sensibles de acupuntura es, por tanto útil en tales casos. Se usa, no
para tratar la enfermedad visceral per se, sino para aliviar las dolencias que lleva
consigo. Sin embargo, hay que advertir a los profesionales que el alivio de la
dolencia no significa necesariamente la erradicación de la enfermedad
visceral. Por consiguiente, esos pacientes deben tratarse con acupuntura,
solamente si están bajo el control de un médico que pueda informar
correctamente del estado de las vísceras.
Del mismo modo, se ha visto que las úlceras duodenales producen puntos gatillo
en los músculos abdominales que hay encima del duodeno. Generalmente, el
dolor producido por estas úlceras responde bastante bien a la medicación, en
principio. Sin embargo, también tienden a perder la respuesta a la medicación,
hasta que se desactivan estos puntos gatillo. Una vez desactivados, la
medicación vuelve a trabajar bien y está bien indicada la combinación de
acupuntura de puntos sensibles y la medicación para estas úlceras crónicas. La
misma situación se produce en el caso de úlceras pépticas, parásitos intestinales,
trauma agudo interno y tensión crónica por trabajo o esfuerzo repetido. Todo
esto puede hacer que se mantengan los puntos gatillo y su liberación suele
producir gran alivio. Sin embargo, hay que tener en cuenta la condición médica
subyacente.
Hay también otros trastornos no orgánicos, de naturaleza crónica, que caen bajo
la categoría viscerosomática. Entre ellos están los puntos gatillo de las cicatrices;
trastornos de estrés que hacen que trabaje demasiado el sistema simpático,
produciendo desórdenes en las funciones del simpático y el parasimpático, junto
con fuerte fatiga; tensión emocional; exposición prolongada al frío, como en el
caso del carnicero que trabaja en una cámara frigorífica; infecciones víricas, mal
aspecto y problemas estructurales similares, como una pierna corta o una
hemipelvis pequeña. Todos estos casos pueden aliviarse con la liberación de
puntos gatillo de las zonas de dolencia y disfunción; pero el alivio no durará
mucho si no se solucionan los problemas internos viscerales, estructurales o de
cualquier otro tipo. Normalmente se necesita el tratamiento médico adecuado o,
por lo menos, supervisión. Por esta razón, yo pido a todos mis pacientes de
dolencias crónicas o recurrentes que consulten a un médico y tengo una red de
médicos de medicina general y especialistas a quienes puedo llamar.
Arriba/abajo
Esto significa que se seleccionan puntos de la parte inferior del cuerpo para
tratar problemas de la superior y viceversa.
Izquierda/derecha
Significa que se seleccionan puntos de la parte izquierda del cuerpo para tratar
problemas de la derecha y viceversa.
Delante/detrás
Quiere decir que se seleccionan puntos de la parte anterior del cuerpo para tratar
problemas de la posterior y viceversa.
Dentro/fuera
Hace una década, tenía dificultades para enseñar acupuntura meridiana francesa,
porque no se disponía de material original en inglés. Las traducciones con que
contábamos de los textos chinos hacían poca o ninguna referencia a los vasos
secundarios u ocho extraordinarios. Cuando empecé a enseñar con mis propias
traducciones de de Morant, Chamfrault, Van Nghi y Schatz, empecé a darme
cuenta de que algunas de las descripciones francesas de la energía de meridianos
están demasiado intelectualizadas y, en mi opinión, son traducciones
interpretativas. Esto no quiere decir que sean erróneas; pero tampoco garantiza
que sean exactas. Como no había nada en inglés sobre lo que yo estaba enseñan-
do de los llamados vasos secundarios, empecé a tener en cuenta estas enseñanzas
francesas, contrarias a mi propia experiencia clínica. En dicho proceso, empecé a
notar que las descripciones francesas de estos vasos secundarios y, en especial,
las de Van Nghi, son demasiado exactas y no coincidían con mi experiencia
clínica. Estaba buscando un cuadro o conjunto de imágenes más amplio y
general del sistema meridiano, para enseñar a mis estudiantes y compartir con
mis pacientes.
Para mí, el principio de la solución de este problema llegó cuando una colega se
tomó muy en serio mi historia de las imágenes de acupuntura y lo que
compartimos en realidad con nuestros clientes. Por entonces, ella estaba
terminando su preparación como terapeuta de arte*. Hizo que sus clientes
pintasen los problemas que sentían en su cuerpo. Después, comentaba sus
imágenes de acupuntura de lo que ella consideraba que tenían de disfuncional, y
les pedía que dibujasen nuevas imágenes de lo que sintiesen después de las
sesiones de acupuntura, a lo largo de la semana, entre tratamientos. Puso croquis
de los 71 meridianos en la pared, encima de su mesa de tratamiento. Estas
imágenes no sólo le ayudaron a descubrir el problema del cliente, sino que
también introduje-ron su vocabulario descriptivo. A sus clientes les resultó fácil
localizar sus problemas en alguna de estas imágenes de acupuntura.
Para sorpresa mía, casi todos los estudiantes decidieron dibujar en acetato
transparente los meridianos que creían que estaban involucrados. Al hacer esto,
colocaron una imagen del meridiano encima de la siguiente y así sucesivamente.
Algunos solían advertir que, cuando hicieron esto, poniendo algunas imágenes
relevantes de meridianos de acupuntura, unas sobre otras, la imagen compuesta
superpuesta que resultaba no tenía sentido. Según mis estudiantes, estaban
desilusionados.
Por otro lado, yo estaba muy contento con estas imágenes. Para demostrar a mis
estudiantes el sentido que tenían, empecé a bromear con ellos, hasta que pude
sacar algunos esquemas generales.
Después de un par de años trabajando con este material, acabé dándome cuenta
de que estas composiciones de acetato representaban sistemas meridianos de
zonas concretas. Por ejemplo, si un estudiante dibujaba los meridianos de la
vesícula biliar y el triple calentador, desde lo tendinomuscular a lo regular, así
como los vasos extraordinarios correspondientes que suben por la parte superior
de la espalda y los lados del cuello en un paciente que sufre fuego creciente en el
hígado con tinitus y migraña, las zonas shao yang estaban representadas de una
forma compuesta. En otras palabras, aparecían todos los circuitos de los
meridianos de la vesícula biliar y del triple calentador, desde los
tendinomusculares, más amplios y difusos, hasta los longitudinales luo, más
precisos, y los meridianos regulares, así como el vaso extraordinario, el yang wei
mai que fluye por esta parte superior del cuello y la cabeza.
Supe, por la experiencia clínica, que la mayoría de los sufrimientos del paciente
siguen estos meridianos mayores ( tai yang, shao yang y yang ming); pero se
echaba de menos una teoría de acupuntura para estas imágenes compuestas.
Entonces, un estudiante me enseñó imágenes de un nuevo libro de texto de
China, que mostraba las doce regiones cutáneas. Estas imágenes aparecen
también en la traducción de Bensky y O’Connor, del Shanghai College de TCM,
Acupuncture, A Compre-hensive Text. En estos dibujos, hay solamente seis zonas
sombreadas, a pesar de que se les llama doce regiones cutáneas. Después de un
examen meticuloso, me di cuenta de que éstas eran las mayores unidades
meridianas pintadas. Ésta era la respuesta. Aquí, en el dibujo de la región
cutánea de shao yang, por ejemplo, había una visión amplia, una imagen en la
que figuraban todos los circuitos de shao yang, desde los tendinomusculares a
los divergentes, los luo y los regulares. Esto era lo que yo había estado buscando
y, finalmente, todo quedó en su sitio.
El protocolo
Si tomamos las regiones cutáneas como las proyecciones superficiales de
representaciones de los circuitos meridianos subyacentes, como la visión más
amplia posible del sistema de meridianos, entonces, al examinar y tratar las
regiones cutáneas, se están tratando también los sistemas meridianos
subyacentes, al menos indirectamente. De este modo, la región cutánea del shao
yang, por ejemplo, es una representación superficial de los meridianos
tendinomusculares, divergentes, luo y regulares del shao yang, es decir de la
vesícula biliar y del triple calentador. Esta región mayor cutánea de meridianos
está atravesada por dos vasos extraordinarios: el dai mai, o vaso cinturón, y el
yang wei mai.
Esta misma teoría es válida para el tai yang (cuando hay que tonificar el shao
yin, al mismo tiempo que se dispersa el exceso de tai yang) y para el yang ming,
cuando hay que reforzar el tai ying. En este protocolo, la unidad yin
correspondiente de la zona yang que tiene exceso se considera el núcleo o raíz
del tratamiento. Si hay también desequilibrios concretos de raíz, como un pulso
del pulmón deficiente, puede tonificarse con los principios de tratamiento raíz
que se prefiera. En realidad, una de las bellezas de este protocolo es que la parte
raíz del tratamiento puede hacerse como se recomienda aquí o por cualquier
medio de tratamiento raíz que consideremos oportuno. La clave está en
concentrarse para dispersar y relajar el exceso de yang ( a shi, kori, puntos
gatillo) de las zonas yang en cuestión. Según esta metodología, espero que el
dolor recurrente y crónico y demás esquemas similares, como constricciones,
reducción de la movilidad, debilidad muscular y alteraciones cutáneas, se
produzcan a lo largo de una de las tres regiones cutáneas yang ( tai yang, shao
yang o yang ming). Estas tres regiones yang constituyen los tres aspectos
principales del cuerpo: dorsal, lateral y ventral. Por tanto, yo he etiquetado así
estas zonas. Tenemos la zona dorsal o tai yang, la lateral o shao yang y la ventral
o yang ming.
En los tres capítulos siguientes, doy normas para atenuar el exceso yang y
reforzar la zona yin correspondiente para cada una de las tres zonas: dorsal
lateral y ventral. Empiezo con la imagen de acupuntura de la zona y los puntos y
meridianos de acupuntura involucrados. Después viene un análisis de los
músculos correspondientes, de los puntos gatillo de Travell más comunes para
esa zona y de las estrategias de tratamiento que me han dado resultado. El
análisis de cada zona concluye con una historia, con lo que se pretende aclarar el
uso de este protocolo en la práctica clínica.
7. La zona dorsal
La circulación por los meridianos regulares sigue un ciclo que empieza en los
pulmones. La primera respiración de la vida introduce en el cuerpo qi cósmico y,
por consiguiente, aire. Por tanto, la circulación del qi mueve la sangre, al mismo
tiempo que la oxigena. Este ciclo termina en el hígado, que controla el
diafragma. El diafragma es esencial para la función respiratoria de los pulmones.
Este ciclo sigue por tres unidades energéticas y la atención a estas tres unidades
es lo que caracteriza la acupuntura meridiana francesa.
Estas tres unidades de circulación de qi son: tai yin/yang ming (pulmones,
intestino grueso, estómago, bazo), shao yin/tai yang (corazón, intestino delgado,
vejiga, riñones) y jue yin/shao yang (pericardio, triple calentador, vesícula biliar,
hígado). Si miramos este ciclo desde una perspectiva de las cinco fases, fluye
esencialmente, en contra del ciclo de generación de los órganos zang fu internos
y los intestinos, de metal a tierra ( tai yin), a fuego, a agua ( shao yin), para
volver a fuego y, después, a madera ( jue yin).
Este orden parece hasta que uno contempla el ciclo de circulación meridiana
desde la perspectiva de los ocho vasos extraordinarios. Estos ocho vasos están
formados desde antes de nacer, antes de la primera respiración de vida que da
inicio al flujo regular de los meridianos desde los pulmones al hígado, como
hemos visto antes. Por eso, algunos autores franceses les llaman codificadores
genéticos. Pueden compararse con el ARN/ADN, ya que codifican las zonas del
cuerpo y establecen las plantillas energéticas para el desarrollo de los órganos e
intestinos. Según este criterio, los ocho vasos extraordinarios se forman en
embrión.
Desde este punto de vista, el ren mai y el chong mai, que suben por el lado
ventral del cuerpo, forman la zona ventral; el du mai y el yang qiao mai, que
suben por la parte posterior del cuerpo, forman la zona dorsal, y el yin qiao mai,
que conecta con su emparejado yang qiao mai, enlaza las energías yang con la
zona dorsal y las yin con la zona ventral y el ren mai, donde empieza todo. Esto
permite que el yin wei mai y el yang wei mai conecten las zonas de desarrollo del
organismo (la superior con la inferior y la derecha con la izquierda), mientras
que el dai mai, que rodea la sección media como un cinturón, mantiene todos los
meridianos longitudinales en su sitio.
Los puntos clave que abren cada uno de estos vasos extraordinarios son, por
orden: Lu.7, Sp. 4, S.I. 3, Bl. 62, Kid. 6, Per. 6, T.H. 5 y G.B. 41. Éste es
exactamente el mismo orden de las tres unidades de circulación de qi por los
meridianos regulares antes descrita: metal, tierra, fuego, agua, fuego y madera.
Por tanto, podemos ver que los ocho vasos extraordinarios prefiguran los doce
meridianos regulares y establecen lo que podríamos llamar base energética de
estos doce meridianos y los doce órganos e intestinos con los que conecta.
Los principales puntos distales de acupuntura de la zona dorsal son: Bl. 67, 64,
62, 60, 59, 58, 57 y 40; S.I. 3, 4, 6, 7 y 8.
Bl. 11-25 y Bl. 41-54, para los músculos paraespinales erector spinae, y los
puntos Hua Tuo jia ji para los músculos multifidi que están a los lados del
erector spinae y, posiblemente también, para los rotatores.
Los puntos yang qiao mai, Bl. 62, para la parte inferior del torso, las piernas y
los pies.
Los principales meridianos que se tratan en la zona dorsal para combatir el dolor
son los de la región cutánea y tendinomusculares del intestino delgado y la
vejiga, el divergente de la vejiga y los regulares del tai yang, por medio de sus
puntos distales, los puntos distales y mu frontal y shu posterior del shao yin
(corazón y riñones), también desde los meridianos regulares, y el par de vasos
extraordinarios del du mai y el yang qiao mai.
Músculos
Lo que viene a continuación es una lista, por zonas del cuerpo, de los músculos
principales de la región dorsal:
Parte baja del brazo y mano: Extensor carpi ulnaris, abductor digiti minimi y
flexor carpi ulnaris.
Parte baja del torso: Latissimus dorsi, quadratus lumborum, base de la pelvis,
gluteus maximus y medius, gluteus minimus, piriformis y abturator externus.
El lector interesado puede consultar a Travell y Simons para conocer los detalles
de las situaciones más comunes de los principales puntos gatillo que hay en estos
músculos de la zona dorsal tai yang.
Puntos gatillo
El gráfico de la página siguiente* nos muestra los puntos gatillo más comunes de
la zona dorsal o tai yang. El lector interesado puede consultar a Travell y Simons
para más detalles sobre puntos gatillo, sus indicaciones y precauciones para
poner agujas.
Estrategias de tratamiento
Más adelante se analizan las estrategias comunes de tratamiento en las que he
llegado a basarme para problemas de dolor miofascial de los diversos grupos de
músculos de la zona dorsal. Las he desarrollado basándome en una combinación
de la terapia de puntos gatillo de Travell y Simons, como indican en su
Myofascial Pain & Dysfunction, y las estrategias del tratamiento de acupuntura
basado en los meridianos. No hay duda de que los lectores tendrán también otras
estrategias de tratamiento o combinaciones de puntos, según su propia
experiencia y el tipo de práctica. Sin embargo, creo que la clave del tratamiento
del dolor con acupuntura está en examinar atentamente los puntos locales de las
zonas que atormentan
Como los dos vasos extraordinarios que atraviesan la zona central le sirven de
plantilla energética, tratarlos es muy eficaz, como primer paso para tratar el
dolor crónico miofascial y la disfunción de esta zona. Sus puntos clave son S.I.
3, que abre el du mai, y Bl. 62, que abre el yang qiao mai. Se pueden poner
agujas en los dos a la vez, para abrir la zona y empezar su relajación miofascial.
Yo suelo poner agujas en estos puntos en lados opuestos: una, a la izquierda, y
otra, a la derecha. Selecciono el lado que voy a tratar y con qué punto,
dependiendo de los síntomas del paciente. Por ejemplo, si el paciente sufre dolor
en los músculos del omóplato izquierdo, pongo una aguja en S.I. 3 izquierdo y
en Bl. 62 derecho. Si el paciente sufre un dolor de tipo ciático que baja por la
parte posterior de los músculos de las corvas de la parte posterior de la rodilla,
pongo una aguja en Bl. 62 izquierdo y, al mismo tiempo, en S.I. 3 derecho.
También se pueden añadir puntos locales, desde el du mai, al nivel del dolor y
disfunción y/o los puntos Hua Tuo jia ji, que corresponden con los multifidi de
la espina toracolumbar.
Pueden ponerse agujas al mismo tiempo y del mismo modo en los músculos
paraespinales erectores spinae del mismo nivel. Esto suele aumentar la
relajación. También se pueden poner agujas en los puntos locales yang qiao,
dependiendo de la sintomatología. Por ejemplo, se pueden poner agujas en G.V.
29, para trastornos de la cadera, el tracto iliotibial y la pierna, o en S.I. 10, para
la parte posterior de la espalda y los omóplatos.
3) Bl. 2
Las manos del profesional deben coger la carne poniendo el pulgar y el índice a
cada lado de la ceja, para coger el punto sensible entre los dedos. Entonces
utilizo una aguja muy fina, de 38 o 40 gauges*, con tubo de inserción, y la clavo
media pulgada en el punto tenso que tengo entre los dedos. La piel que hay
donde se ha puesto la aguja se pone roja algunas veces y hay que dejar las agujas
hasta que disminuye considerablemente esta rojez. Esto tarda de 20 a 25 minutos
en la mayoría de los casos. Es un punto excelente para los pacientes que no
toleran muchas agujas, especialmente cuando se trata de un dolor agudo o
cuando la disfunción paraespinal está asociada con jaquecas frontales. Sin
embargo, debe combinarse con puntos fuertes distales, como Bl. 58 o 59,
poniendo agujas donde estén sensibles o con nudo.*
Yo creo que esta combinación está relacionada con estados de fuerte estrés, en
los que se prolonga la respuesta de luchar o huir. Esto crea un estado crónico de
alarma. Al preguntarles, estos pacientes suelen reconocer un trauma importante
donde no solamente tenían una amenaza física, sino verdadero pánico, bien fuese
en el momento del trauma o mucho después. Es frecuente que este pánico esté
siempre presente y puede provocarse al menor estímulo. Uno de estos estímulos
es, para estos pacientes, la simple palpación de los músculos paraespinales de la
espina toracolumbar. La combinación de Bl. 14-43, poniendo agujas cuando está
tenso y sensible, y el área que rodea Bl. 23, poniendo agujas también cuando
está más sensible, es muy útil en estos pacientes, así como en el tratamiento de la
ansiedad en general.
1.– Gunn, C. Chan,Treating Myofascial Pain, Health Sciences Center for
Educational Resources, University of Washington, SB-56, Seattle WA, 98195, p.
9.
– Dolor en el pie, en la parte baja del pie, debido a constricciones del quadratus
plantae.
– Dolor en la parte superior delantera del cuello, que aparece con frecuencia en
los cantantes, debido a un punto de disparo en el músculo digástrico.
3.– Téngase en cuenta que los puntos shu de la espalda para el zang fu se pueden
tratar con agujas para curar trastornos viscerales, junto con cualquier tratamiento
de la zona dorsal, para el dolor crónico.
Consejos clínicos
Un caso concreto
Durante el contacto inicial y el reconocimiento médico, si un paciente se queja,
por ejemplo, de jaquecas de tensión frecuentes que empiezan en la zona occipital
y pasan a la frente, posibles jaquecas de los senos centradas en las cejas y un
historial de dolor recurrente o crónico en los músculos paraespinales, las nalgas
o la parte posterior de los muslos y las pantorrillas, inmediatamente sospecho
que la zona dorsal es la primaria de la disfunción. El examen médico suele
descubrir, en esos casos, varios puntos sensibles y de disparo concretos en el
flexor hallucis longus (zona Bl. 59), el gastrocnemius o soleus lateral (zona Bl.
58) o en el plantar (zona Bl. 40), especialmente si el problema lleva consigo
dolor miofascial recurrente o crónico y disfunción en los músculos lumbares
paraespinales y/o piriformis, gluteus maximus o gluteus medius. En estos casos,
el músculo quadratus lumborum está muy contraído generalmente, con puntos
gatillo en la zona de Bl. 52-54.
8. La zona lateral
T.H. 3, 4, 5, 8 y 10.
Todos los puntos distales pueden convertirse en locales cuando hay disfunción y
dolor en brazos y manos, pies y piernas. Estos puntos locales reactivos suelen
corresponder a puntos gatillo de Travell y se puede recurrir a sus textos en busca
de información para poner agujas en ellos.
Puntos dai mai G.B. 41, 26, 27 y 28, para los oblicuos externo e interno.
Músculos
A continuación damos una lista, por zonas del cuerpo, de los principales
músculos de la parte lateral. En los textos de Travell y Simons pueden
encontrarse detalles de la mayoría de las localizaciones comunes de los
principales puntos gatillo.
Parte baja del brazo y manos: Extensor digitorum, extensor indicis, extensores
de los dedos medio y anular y el cuarto interóseo dorsal.
Puntos gatillo
El diagrama de la página siguiente* muestra los puntos gatillo más comunes de
la zona lateral zao yang. El lector debe consultar a Travell y Simons para más
detalle.
Estrategias de tratamiento
A continuación se analizan las estrategias de tratamiento comunes que yo utilizo
en los problemas de dolor miofascial de diversos grupos de músculos de la zona
lateral.
2) T.H. 16 y G.B. 22
G.B. 22, el punto de unión de los meridianos divergentes del intestino delgado y
el corazón, es muchas veces un punto sensible de la zona lateral, en el que se
puede aliviar la constricción y el dolor del pecho. Tiene su mejor combinación
con C.V. 17, para la zona del pecho, y con la raíz y nodo del jue yin, Liv. y
C.V.18, para liberar el qi acumulado en el pecho. También puede combinarse con
los puntos jue yin Liv. 3 y 5 y Per. 6 y 4.
Estos puntos son una combinación local muy eficaz para jaqueca de temporal,
jaqueca migraña y síntomas temporales relacionados con TMJ. Estos puntos
abren la región y la preparan para poner agujas en puntos sensibles. Hay que
poner agujas en G.B. 3 y T.H 22 donde esté sensible y contraído, en oposición a
su localización en los libros de texto.
4) G.B. 31
Si se ponen agujas en este punto donde está sensible y contraído, abre la banda
iliotibial y el vastus lateralis y prepara para la relajación de puntos sensibles.
5) G.B. 34
Si se ponen agujas en este punto donde está sensible y contraído, abre los
peroneus longus brevis y tertius y prepara para la relajación de puntos sensibles.
Cualquier punto sensible puede tratarse para curar trastornos de dolor miofascial,
en cualquier músculo de la zona lateral. Una vez más, conviene tener a mano los
textos de Travell y Simons para consulta y demuestran su valiosísima
colaboración para aclarar los puntos gatillo y músculos que deben tenerse en
cuenta para organizar objetivos del tratamiento, para preparar al paciente en la
autoayuda y como referencia de los especialistas médicos, si fuese necesario. En
mi experiencia, se trata mucho mejor el dolor crónico cuando, al poner agujas en
puntos sensibles, el acupuntor trabaja en colaboración con un médico
especializado en medicina física y tratamiento del dolor. Puede ser un fisiatra, un
ortopeda, un osteópada o un neurólogo. Éstos deben iniciar el ejercicio adecuado
y el régimen de terapia física, del que la acupuntura es una parte integral. De esta
forma multidisciplinar, los puntos sensibles de acupuntura pueden ser muy
eficaces en el tratamiento de:
– dolor a un lado de la cadera y dolor que baja por el lado de la pierna (síndrome
de banda iliotibial y ciática) debido a constricción del tensor fasciae latae, tracto
iliotibial y vastus lateralis, con puntos gatillo en la zona de G.B. 29, 31, 32 y 34.
– disfunción y dolor del ligamento colateral (se ponen agujas en G.B. 33, con
G.B. 34 y 32, por encima y debajo del ligamento).
Consejos clínicos
Un caso concreto
La zona lateral viene inmediatamente a la mente, cuando los pacientes presentan
secuelas de latigazo,* esto es, un síndrome doloroso crónico que se produce
muchos meses o incluso años después de la lesión de latigazo*. La zona lateral
está atravesada por el dai mai y el yang wei mai. Estos dos vasos extraordinarios
suelen perturbarse con cualquier lesión en la que haya una rotación grave o
latigazo*.
El paciente siguió también una terapia física normal después de terminar las
series iniciales de los tratamientos de acupuntura. Esto se mantuvo durante
varios meses, con gran alivio del dolor. Se hicieron sesiones de recuerdo a
intervalos de 2, 3 y 4 meses, hasta tal punto que el terapeuta físico, el paciente y
yo comprobamos que se había resuelto esencialmente este problema de dolor
crónico. El terapeuta físico dio instrucciones al paciente para que continuase con
algunos estiramientos del cuello y la parte superior de la espalda, de modo
rutinario.
9. La zona ventral
La zona ventral está formada por la zona cutánea y los
meridianos tendinomusculares, divergentes, luo y regulares del yang ming o
yang de luz solar, o sea, los meridianos * Los meridianos yin del pie
(hígado, bazo y riñones) fluyen por dentro de esta zona y, por tanto, están
protegidos por la zona yang que le sirve de armadura muscular.
La parte frontal del cuerpo está considerada yin, respecto a la posterior, que es
yang. Por tanto, son los vasos extraordinarios yin los que fluyen por esta zona
ventral y la codifican energéticamente. Sin embargo, los músculos principales de
esta zona están situados en la zona yang ming, que comprende los circuitos del
intestino grueso y el estómago.
De este modo, la zona ventral se codifica energéticamente con los cuatro vasos
extraordinarios yin y, en especial, el chong y el ren. He descubierto que el punto
de reunión chong mai (Sp. 4, emparejado con Per. 6 para el yin wei mai
emparejado) es muy efectivo para abrir la zona ventral yang ming. Basta con
utilizar el par meridiano regular, tan común en TCM, St. 36 y L.I. 4, como una
estrategia distal para abrir la zona ventral.
L.I. 4, 6, 10 y 11.
St. 1-2, para el orbicular de los párpados, y L.I. 4, para el primer músculo
interóseo dorsal.
L.I. 14-15, para el deltoide, y L.I. 15, para los músculos coracobraquiales.
Los principales puntos de la zona ventral, desde los vasos extraordinarios yin,
que fluyen por esta zona y la codifican energéticamente son:
St. 30 y Kid. 11-21 del chong mai, para el rectus abdominis (los puntos gatillo
más reactivos suelen producirse entre el canal del riñón, a media pulgada de la
línea alba, y el canal del estómago, a dos pulgadas al lado de la línea central, en
el centro del músculo donde J. R. Worsley sitúa el canal del riñón en sus
enseñanzas).
C.V. 1 del ren mai, para los músculos del suelo pélvico.
Los principales meridianos tratados en la zona ventral para el control del dolor
son el cutáneo y el tendinomuscular del intestino grueso y el estómago; la zona
de encuentro divergente del yang ming y su tai yin emparejado en St. 30; los
meridianos regulares del yang ming para poderosas estrategias de punto distal, y
los vasos extraordinarios de chong mai, ren mai, yin wei mai y yin qiao mai. Uno
puede tratar también los meridianos regulares y tendinomusculares de los tres
meridianos yin de la pierna, tratando la zona ventral. En el tratamiento del dolor,
los meridianos yin más importantes son los regulares, tendinomusculares y
cutáneos del hígado y el bazo. El meridiano de los riñones de la pierna se trata
de forma primaria por medio del chong mai y el yin qiao mai.
Los meridianos yin del brazo, especialmente el de los pulmones y el pericardio,
no pertenecen a ninguna zona yang y son excepciones a la regla. Por tanto,
recomiendo a los lectores que consulten a Travell y Simons para tratar el dolor y
la disfunción de la mano y el brazo en su aspecto interior o superficies palmares.
Músculos
A continuación viene una lista por zonas de los músculos de la zona ventral. Se
debe consultar a Travell y Simons para conocer los detalles de los puntos gatillo
más comunes de cada músculo mencionado.
Pierna, tobillo y pie: tibialis anterior, extensor hallucis longus y brevis, tercero y
segundo interóseos dorsales y músculos asociados del meridiano
tendinomuscular y regular yin; adductor hallucis (zona Kid. 2-4), flexor
digitorum brevis (por debajo de Kid. 2), flexor hallucis brevis (zona Sp. 3),
adductor hallucis (zona Kid. 1-Sp. 3) y el primer interóseo dorsal (Liv. 3).
Puntos gatillo
A continuación, viene un gráfico de los puntos gatillo más comunes de la zona
ventral yang ming. Consultar a Travell y Simons para detalles.
Estrategias de tratamiento
Las estrategias de tratamiento comunes que yo utilizo para problemas de dolor
miofascial de diversos grupos de músculos de la zona ventral se analizan más
adelante.
He descubierto que los puntos de reunión del chong mai y su emparejado yin wei
mai (Sp. 4 y Per. 6) bastan para abrir la zona ventral yang ming en general. Esta
apertura se puede acentuar añadiendo puntos sensibles locales del chong mai,
como Kid. 11-21 (puntos sensibles que están a lo largo del lado de dentro del
rectus abdominis, donde se une con la línea alba) y puntos correspondientes del
aspecto exterior del rectus abdominis del meridiano del estómago, desde St. 30-
19. Yo suelo añadir Kid. 2 y 3, para reforzar el riñón shao yin, ya que el chong
mai y todos los demás vasos extraordinarios salen de los riñones.
Los puntos de reunión (Lu. 7 y Kid. 6), combinados con puntos sensibles
periumbilicales (Kid. 16-15 y C.V. 7 y 9) y también Kid. 27 abren con eficacia la
zona ventral y ayudan mucho en el dolor y molestias de la región umbilical.
Como en todos los tratamientos de la zona ventral que cubre los órganos y los
intestinos, es importante que se valoren y supervisen por un internista o un
médico especializado las molestias del paciente, tanto si son agudas o crónicas,
para descartar trastornos viscerales.
Si aparecen enfermedades viscerales, como colitis, úlcera péptica, hernia de
hiato o asma, la acupuntura puede resultar muy útil para aliviar el dolor y la
molestia. En el proceso de facilitar este alivio, la acupuntura mejora muchas
veces el trastorno visceral, incluso de forma significativa. Sin embargo, es muy
importante que esta acupuntura se realice con prudencia, sin olvidar la
posibilidad de que empeore la enfermedad visceral. El alivio del dolor y la
molestia de la enfermedad visceral puede enmascarar importantes signos de
agravamiento, por lo que se necesita la colaboración de un médico. Si, por otro
lado, el criterio del médico y las pruebas descartan la enfermedad visceral, los
pacientes que tengan síntomas viscerales, como flatulencia, hinchazón, micción
frecuente, dolor de pecho, dolor en el punto de McBurney y disnea, que también
sufren dolores recurrentes o incluso crónicos asociados con estos síntomas,
pueden encontrar su resolución o una mejora espectacular con la acupuntura de
puntos sensibles.
Es una combinación muy poderosa para liberar y abrir la zona ventral yang
ming. Cuando se combina con St. 25 (un punto verdaderamente yang ming, ya
que está localizado en el meridiano del estómago, pero es el punto mu frontal)
para la disfunción del intestino grueso e intestinal en general; C.V. 12, para el
calentador medio, regido por el yang ming, y Liv. 3, tenemos una estrategia muy
eficaz para abrir todo el calentador medio. Esto se debe a que estos puntos, si se
les ponen agujas al mismo tiempo, influyen en el hígado, la vesícula biliar, el
bazo y el estómago o la madera invade la tierra.
Estos puntos pueden combinarse con los distales St. 43-42, St. 40 y otros puntos
distales reactivos del meridiano del estómago. Es una estrategia eficaz para abrir
el calentador superior, especialmente en el caso de molestia de pecho, asociada
con exceso de calor en la parte superior del cuerpo. Esto se nota porque se tiene
la piel roja desde los pezones hacia arriba o se tiene también rojo el cuello y la
cara, especialmente cuando lleva asociado exceso de calor en el estómago y en
pacientes que tienen indicios de úlcera o nervios en el estómago.
6) St. 30 y St. 13
Consejos clínicos
Un caso concreto
Se trata de una cantante de ópera que tenía radiculopatía cervical, síndrome TMJ
y dolor frecuente y síntomas somatoviscerales en la garganta. Se debe a la
tensión repetitiva de algunos grupos de músculos concretos que producen
agitación visceral de las estructuras internas que hay en la zona miofascial que
sufre esta irritación.
La relajación de los puntos gatillo del platysma parecía ser el elemento clave
para resolver la radiculopatía, tal vez relajando indirectamente los scaleni y el
esternocleidomastoideo. Esta paciente sigue viniendo al tratamiento cuando lo
necesita, aproximadamente cada 4 o 6 semanas, y sigue terapia médica con
mucha menos frecuencia que antes, una vez a la semana o menos. Ha podido
seguir su carrera de canto, con mucho menos dolor y disfunción. En una
revisión, tenía dolor de garganta, algo que ocurre habitualmente a los cantantes,
y la palpación del esternocleidomastoideo descubrió un punto de disparo
relacionado con el dolor en el punto exacto donde le dolía la garganta. No está
claro si se trataba de un caso de efecto somatovisceral o viscerosomático, ya que
estaba sometida a tratamiento con el especialista de garganta, y conmigo. En
cualquier caso, he tenido mucho éxito tratando a cantantes, centrándome en la
relajación de los músculos del cuello que hay en la garganta.
10. Acupuntura y agujas secas
Cuando conocí la obra de Travell, me alegré mucho, porque en ella tenía la
confirmación de la acupuntura de puntos sensibles, desde una perspectiva
completamente diferente. La principal desventaja del concepto de inyección de
puntos gatillo de Travell parece ser el rechazo de los médicos a intentar su
técnica. Esto se debe a que no están familiarizados con la situación y aislamiento
de los puntos gatillo para poner las agujas. Algunos amigos médicos que han
leído las descripciones de Travell y Simons de la inyección de puntos gatillo,
incluida la profundidad de la inserción que se requiere algunas veces y el grosor
de la aguja hipodérmica, piensan que, en malas manos, podría ser un
procedimiento peligroso. Algunos colegas de Travell y Simons han criticado el
uso de la cortisona y la Lidocaína por ser perjudicial para los tejidos locales
donde se inyectan. Otros han desarrollado las agujas secas, como un medio de
alcanzar los buenos resultados de la terapia de puntos gatillo, sin tener los
inconvenientes mencionados. Llamamos agujas secas al uso de una aguja sin
inyectar ninguna sustancia. Esto da muy buenos resultados.
...minimizan el trauma que se produce en los nervios y otros tejidos. Estas agujas
finas permiten inserciones múltiples, muy próximas (a veces a distancias de
pocos milímetros) en los fascículos de los músculos. La naturaleza flagelante*
de las agujas finas transmite el carácter del tejido penetrado (tejido fibroso) al
terapeuta. Este procedimiento sirve, por tanto, de diagnóstico, localizando
espasmos y contracciones fibrosas de los músculos profundos, donde no se
pueden detectar por otros medios.1
Cuando empecé a poner agujas en los puntos gatillo de Travell, como parte de
mi protocolo local de inserción de agujas para trastornos de dolor, descubrí que
las agujas encuentran algunas veces una resistencia significativa. Al principio
traté de traspasar esta resistencia, que suele aparecer a la profundidad de media
pulgada aproximadamente; pero muy pronto las agujas que yo suelo usar (34-36
gauges) se doblaban si estaba contraído el músculo durante la inserción. El Dr.
Steven Finando, un colega mío, tuvo el mismo problema y llegamos a descubrir
los dos, cada uno por nuestro lado, que, si poníamos las agujas muy
superficiales, en primer lugar, encima y no dentro del punto de disparo,
sujetándolo con los dedos de la mano izquierda y pinchábamos unas pocas veces
donde había resistencia, el músculo tiraba bruscamente y agarraba la aguja. Si se
seguía pinchando en varias direcciones, levantando hacia la superficie y
volviendo a dirigir la punta de la aguja, con una dirección nueva, hacia la
resistencia, el músculo tiraba varias veces y agarraba la aguja con más fuerza.
Cuando se produce una fasciculación, los pacientes suelen decir que tienen una
sensación de calambre que algunos dicen que es dolorosa, otros que es extraña o
indescriptible. Esta sensación generalmente se alivia pronto y, si se dejan las
agujas en su sitio, pueden bastar de 10 a 20 minutos para que se produzca la
relajación. Gunn dice que la insinuación de la aguja lentamente en el lugar del
espasmo, algo que hace él siempre con pacientes muy sensibles, puede
minimizar el dolor. Creemos que es un método que puede aplicarse en todos los
pacientes, no sólo porque es menos doloroso, sino porque parece producir con
más facilidad la fasciculación del músculo. Esto produce una relajación
miofascial más favorable y más rápida. Esta técnica requiere también tanto una
inserción mucho menos profunda como el uso de agujas mucho más finas que
las que se emplean en la estimulación intramuscular de Gunn o en la inyección
de puntos gatillo de Travell o agujas secas. Cuando Finando y yo nos
encontramos con Travell durante el seminario que dio en nuestro instituto, le
preguntamos atentamente sobre nuestra técnica de inserción de agujas
relativamente superficial. Muchas veces nos daba la impresión de que estábamos
poniendo la aguja por encima de los puntos gatillo y no dentro de ellos. Nos
sugirió que esta técnica es parecida al spray y estiramiento* y que posiblemente
estuviésemos poniendo las agujas en la “representación cutánea” de los puntos
gatillo, en vez de hacerlo directamente en los puntos. La experiencia que tuve
con relajación espectacular del iliopsoas, insertando una aguja de 34 gauges, a
sólo de 1/2 pulgada a 3/4 sobre el punto proximal de disparo del psoas* descrito
por Travell me convenció del efecto de esta “representación cutánea”. Los
protocolos de puntos sensibles de acupuntura que he desarrollado, descritos en
los capítulos 7-9, se basan en este concepto superficial, conocido en acupuntura
como regiones cutáneas. Los textos chinos antiguos hablan de colocar agujas
como una especie de pesca. El de qi está comparado con la paciente espera de la
línea de pesca en el agua, pendiente del movimiento más leve. La inserción
superficial, seguida por una insinuación lenta de la aguja, como se ha descrito
antes, es, en mi opinión, como pescar y da la respuesta deseada. Convendría
decir a los pacientes que pueden sentir molestias o fatiga durante un día
aproximadamente después del tratamiento. Es algo parecido a la molestia e
incomodidad que se siente después de hacer ejercicio. La aplicación de calor en
las zonas tratadas, la noche después del tratamiento, da cierto alivio de esta
molestia y hará que continúe la relajación miofascial. Esto puede hacerse con un
baño caliente de sales Epsom, una botella de agua caliente o una bolsa caliente.
Aunque puedan sentir molestia en los músculos el primer día, muchos pacientes
dicen que van mejorando al cabo de unos minutos u horas del tratamiento. Al
pedirles que lo explicasen, muchos dicen que tienen una relajación de la
contracción y más facilidad para el movimiento. Creo que ésta es la experiencia
subjetiva del estiramiento de sus músculos después de la relajación de los nudos
y bandas musculares contraídos. Además, Travell recomienda el estiramiento,
bien sea spray y estiramiento* o autoestiramiento*, después de retirar las agujas.
Para referencias más rápida, estos estiramientos figuran en su libro de dos
volúmenes, escrito con Simons. En mi experiencia, la combinación de esta
técnica de agujas secas y dejar las agujas quietas de 10 a 20 minutos produce un
alargamiento del músculo contraído y una gran relajación miofascial que no se
obtiene casi nunca por otros medios físicos. Esta fase de retención pasiva es
común para la mayoría de los tratamientos de acupuntura de Estados Unidos,
pero no ha formado parte previamente de la técnica de agujas secas. Permite una
respuesta de relajación generalizada, característica de la acupuntura, relajando
así toda la base somática, dentro de la cual hay constricciones locales como
zonas especialmente tensas.
Por otro lado, el dolor recurrente y crónico tiene problemas mucho más
complejos. Su tratamiento se ha convertido en el punto central de todo un nuevo
grupo de especialistas del tratamiento del dolor. Este grupo está formado por
psiquiatras, ortopedas, neurólogos, osteópatas, terapeutas físicos y, con
frecuencia aunque no siempre con eficacia, acupuntores. Gunn y Tavell y
Simons han escrito amplias explicaciones anatómicas y biológicas, de enfoque
occidental, para el fenómeno del dolor crónico. Estas descripciones y los
principios terapéuticos basados en ellas pueden aplicarse al tratamiento de
acupuntura del dolor recurrente y crónico. Más adelante, hago un resumen de
estos principios y procedimientos. Espero que, como se verá en este resumen, la
acupuntura pueda y deba practicarse según estas teorías y principios detallados,
que son muy normales. La acupuntura practicada desde esta perspectiva es no
sólo muy eficaz para el tratamiento del dolor crónico y recurrente, sino que
permite al acupuntor integrarse en el tratamiento moderno y multidisciplinar del
dolor. Esto se debe a que todos los miembros de ese equipo pueden hablar entre
sí utilizando los mismo conceptos y terminología.
“Por encima de todo, los profesionales deben creer que sus pacientes sufren
tanto y del mismo modo que dicen. Los pacientes están describiendo su
sufrimiento. (Travell) descubrió y catalogó estos esquemas de dolor, creyendo a
sus pacientes, aunque ellos decían que tenían dolor en zonas donde era
inexplicable en principio.2
Yo creo que el protocolo presentado en los capítulos 7-9 de este libro facilita este
mapa miofascial, “acupunturizando” este proceso. Si no me equivoco, las
imágenes de acupuntura llamadas meridianos no son más que mapas primitivos
del dolor y disfunción miofasciales, hechos por acupuntores hace miles de años,
sin contar con la ventaja de la disección y la autopsia. Por esta razón, no tienen
la sofistificación miofascial y anatómica. Sin embargo, al localizar puntos
basándose en el examen físico de puntos sensibles, reactivos y tensos, que están
en resonancia con los problemas del paciente, los acupuntores de los primeros
tiempos estaban siguiendo el mismo procedimiento adoptado y recomendado
después por Travell. Según mi experiencia, los acupuntores modernos TCM no
suelen llegar a tomarse en serio el dolor de sus pacientes, cuando es crónico y
complejo. Es demasiado frecuente que den un diagnóstico zang fu interno,
aparentemente preciso, para un cuidadoso reconocimiento físico de zonas locales
dolorosas o disfuncionales. Un acupuntor de puntos sensibles debe tener en
cuenta a Travell y a los acupuntores clásicos primitivos, sin olvidar que donde
hay dolor suele haber también una constricción palpable. Es más, cuando se
libera esta constricción local, suele desaparecer el dolor.
Quiero insistir en que todos los pacientes de dolor recurrente y crónico deben
consultar a un médico especializado en dolor crónico que conozca tanto la
terapia de puntos gatillo de Travell como la técnica de puntos sensibles. Esto
permite un reconocimiento meticuloso de los factores perpetuantes. También
conviene iniciar la terapia física adecuada para hacer estiramientos, tanto en la
clínica como en casa. He encontrado que un fisiatra (un médico preparado en
medicina física y rehabilitación) es el mejor para esta consulta. Sin embargo,
también se puede recomendar un neurólogo, un osteópata y un ortopeda
entrenado en trabajo miofascial. La clave está en que el médico quiera analizar a
fondo los orígenes del dolor, que antes habían estado olvidados. En mi opinión,
los acupuntores no están bastante preparados en medicina física occidental para
seguir estos reconocimientos. Mis 15 años de experiencia me han demostrado
que, aunque pueda descubrir algunas veces zonas que han pasado desapercibidas
para los médicos que han visto anteriormente al paciente, el diagnóstico de un
fisiatra puede ser muy acertado para concretar el problema. En este caso, mi
acupuntura de puntos sensibles se convierte en una parte de un enfoque
multidisciplinar. Además, los pacientes de dolor crónico necesitan algunas veces
antidepresivos, al menos durante cortos periodos de tiempo. Esto ocurre
especialmente si están orientados hacia el dolor como oposición una orientacíon
a la función. El fisiatra u otro médico especializado en dolor crónico puede
recetar estas medicinas y enviarlos a otros especialistas. Los acupuntores no
deben jugar a los médicos, actuando sin su importantísima ayuda y supervisión.
Yo creo que la terapia física que dan los acupuntores es el trabajo en el que
debemos centrarnos. Los profesionales que trabajen de este modo, tendrán
pronto una lista de médicos que se dedican al tratamiento del dolor, para enviar a
sus clientes. Estos médicos se familiarizarán rápidamente con la eficacia de esta
acupuntura de puntos sensibles. Muchos acupuntores, especialmente los novatos,
que practiquen de este modo, harían muy bien en trabajar con especialistas en
centros de dolor crónico. El instituto que yo dirijo está dedicado a establecer
estas alianzas, cada vez más comunes, para que la acupuntura de puntos
sensibles se convierta en algo rutinario dentro de la corriente principal del
tratamiento multidisclipinar del dolor.
Los acupuntores de puntos sensibles que examinan siempre la zona dorsal de los
pacientes de dolor crónico, al relajar las constricciones miofasciales y
paraespinales, están dirigiendo el centro del tratamiento hacia la clave de Gunn.
Como he dicho antes, Gunn insiste en el alivio de la radiculopatía espondilítica,
siempre que exista, al tratar la musculatura dorsal. Esto restablece el flujo
eferente de los impulsos motores y libera todos los acortamientos de los
músculos involucrados. Según Gunn, el mejor método para conseguir estos
objetivos es la inserción de agujas secas. En esencia, Gunn establece que las
agujas secas son una forma eficacísima de terapia física para dolor y disfunción
recurrentes o crónicos. La estimulación con agujas secas “duran más que
cualquier otra forma de terapia física, posiblemente por la generación de una
corriente de lesión* que puede durar varios días” y también puede “aportar un
beneficio terapéutico único: puede facilitar la curación relajando un factor de
crecimiento”.5
Las posibles lesiones producidas por una aguja cuando se inserta en un músculo
se prolongan más aún en neuropatía, ya que esta zona es, de antemano,
hiperirritable. Esto puede aumentar por estimulación de la aguja hasta que el
músculo se fascicule visiblemente. Esta fasciculación produce la relajación del
espasmo del músculo y su alargamiento normal.
Podemos ver, por tanto, que la comunicación compleja llevada a cabo por los
tejidos conjuntivos que fluyen por todo el sistema miofascial atrvesándolo, está
ayudado claramente en su funcionamiento normal por la relajación miofascial.
Esto lo han conocido muy bien los terapeutas y trabajadores del cuerpo* de
puntos gatillo. Los acupuntores franceses se han dado cuenta de que la
acupuntura, especialmente cuando utiliza la estimulación y relajación energética
básica de los ocho vasos extraordinarios, trata directamente la red de tejido
conjuntivo. Algunos acupuntores japoneses han llegado a llamar a la acupuntura
terapia del tejido conjuntivo.
Esta red de estructuras de tejido conjuntivo sirve como cianotipo que codifica el
resto del crecimiento psicosomático. También sirve como pre-cursor para los
huesos, los órganos y otros sistemas del organismo humano, del mismo modo
que se cree que hacen los vasos extraordinarios. Es posible que esta sea la clave
de lo que Chamfrault y Van Nghi han llamado “energética humana” en su libro
que lleva el mismo nombre.8. Por eso es por lo que yo me inclino a pensar que
reforzar la base o raíz con estrategia de vasos extraordinarios para abrir
cualquiera de las tres zonas es lo más importante del tratamiento, al mismo
tiempo que refuerza la zona yin emparejada. Por ejemplo, cuando se ponen
agujas en el jue yin para tratar una constricción y contracción que afecta al shao
yang, esto refuerza más aún la raíz, mientras que la acupuntura de punto
sensible, aplicada directamente en la zona local, relaja constricciones del
conjunto mente-cuerpo.
7.– Deane, Juhan, Job’s Body: A Handbook For Bodyworkers, Station Hill Press,
Tarrytown, NY, 1987 p. 75-87.
Conclusión
Sin duda, algunos dirán que los protocolos aquí desarrollados se apartan de la
acupuntura china, que occidentalizan en general la acupuntura o *. Permitidme
que responda a estos críticos simplemente que, para mí, una de las bellezas de la
acupuntura clásica y moderna es que hay muchas formas de practicarla. Yo creo
que esta variedad nos ayuda mejor a tratar a nuestros pacientes y su sufrimiento.
Como profesional de Estados Unidos, no me siento, bajo ningún concepto,
obligado a aceptar creencias ideológicas de ninguna otra cultura, sobre la
acupuntura y la forma de practicarla. Pienso que está en marcha una nueva
acupuntura estadounidense, conformada por esta maravillosa multiplicidad de
aportaciones de muchas culturas. Veo esta nueva acupuntura moviéndose por
encima de las ideologías antiguas, basando su mérito y su trabajo en lo que
ayuda a los pacientes que tienen distrés.
Mark Seem fue presidente del National Council of Acupuncture Schools and
Colleges, fundador del Tri-State Institute of Traditional Acupuncture de
Stamford, CT, y antiguo presidente del Examination Committee of the National
Commission for the Certification of Acupuncturists. Con un Ph.D.* en filosofía,
da conferencias frecuentemente en escuelas de acupuntura y en todos los Estados
Unidos y Europa y sigue su práctica privada en Nueva York. El Dr. Seem es el
autor de Bodymind Energetics, Acupuncture Energetics, y Acupuncture
Inmaging.
Mark Seem