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“Año de la lucha contra la corrupción e impunidad”

UNIVERSIDAD LAS AMERICAS

FACULTAD DE DERECHO

CURSO : CONTRATACIONES DEL ESTADO

PROFESORA: JACQUELINE CARBONELL INFANTE

FORO CALIFICADO

ESTUDIANTE: MORENO QUISPE, Yolanda

CICLO : XI

PERU - 2019
PARA LA APLICACIÓN DE LA LEY DE CONTRATACIONES ESTABLEZCA
LAS DIFERENCIAS ENTRE CONFLICTO DE INTERESES Y GRUPO
ECONÓMICO, Y SU RELACIÓN CON LOS PROCESOS DE SELECCIÓN
QUE EJECUTAN LAS ENTIDADES DEL ESTADO.
La reforma de la normativa de contrataciones del Estado, articula al sector
público y al sector privado en torno de un objetivo común: la repercusión
positiva de los contratos que suscriben ambas partes en las condiciones de
vida de la ciudadanía. De esta manera, se logra que el sector privado se
involucre en la finalidad pública que es inminente a la actuación del Estado y, al
mismo tiempo, se consigue que el estado sea un agente que contribuya a la
dinamización de la economía. En efecto, los motivos de la Ley, sus
disposiciones normativas responden a la necesidad de contar con un régimen
de contratación pública eficiente y orientado hacia la gestión por resultados,
que además de promover y dinamizar las inversiones y la economía, permita
que el presupuesto aportado por los ciudadanos se convierta en bienes,
servicios y obras para la comunidad; ello sin perjuicio que se logren otros
objetivos orientados a la sostenibilidad ambiental y social.
En consecuencia, la regulación que este texto normativo propone permite que
el Estado gestione las operaciones de las contrataciones en base a la
ejecución de mecanismos cuyo fin último no es el cumplimiento estricto de
formalidades y plazos sino el abastecimiento u obtención de bienes, servicios y
obras que el Estado requiere para realizar sus funciones. En concordancia con
ello, se contemplan márgenes para la acción discrecional de parte del operador
logístico, quien según cada situación específica y atendiendo a las
características particulares de la contratación, puede adoptar decisiones
operativas y de gestión bajo el parámetro de los principios de contratación
pública recogidos en el artículo 2 de la Ley. Ahora bien, cabe señalar que para
que la acción discrecional del operador logístico tenga el impacto debido, se ha
indicado la necesidad impostergable que la Contraloría General de la República
conozca y comparta el nuevo enfoque de la Ley, de tal manera que las
acciones de control que se realicen sobre los procesos de contratación que se
ejecuten bajo los términos de la nueva Ley ya sea directamente o a través de
los órganos de control interno de las Entidades dejen de lado el control estricto
del procedimiento para dar lugar al control de la discrecionalidad conforme al
enfoque que impone la gestión por resultados.
La regulación del conflicto de interés implica una ponderación de valores
constitucionales: por un lado, el deber predominante de los servidores públicos
de ejercer sus funciones al servicio de la nación y el ejercicio, por el otro, sus
libertades de empresa, de trabajo y de ejercicio de la profesión, etcétera. Es el
legislador quien aplicando criterios de razonabilidad y proporcionalidad
establece que situaciones se consideran como conflicto de intereses y la
medida preventiva y/o represiva aplicable a cada caso, restringiendo en diversa
medida las antedichas libertades. Por ello, todo tratamiento jurídico a los
conflictos de interés (medidas preventivas y represivas) debe tener en cuenta la
necesidad de alcanzar un equilibrio y eficacia en su diseño para evitar la ilusión
del perfeccionismo conductista a través de las normas puramente
aspiracionales y el riesgo de incorporar ineficiencia a la gestión pública
mediante sobre regulación, negar la posibilidad de captar personal
especializado o promover la fuga de capital humano competente al sector
privado.
Toda contratación pública debe responder a una necesidad pública, ya sea
propia de la organización o vinculada directamente a la satisfacción de los
derechos fundamentales del ciudadano. Este dato que parece ser evidente, o
por lo menos debiera ser un presupuesto de todo contrato de esa naturaleza,
no siempre es tenido en cuenta por quienes tienen las responsabilidades de
diseñar e implementar las políticas públicas de un país. Confluyen allí varios
submundos que se entrelazan y van constituyendo una red de decisiones,
procedimientos y actos en el que intereses, públicos y privados pueden
coordinarse para bien o para mal en sentido ético. La importancia de las
contrataciones públicas en la economía de los países, los artilugios
evidenciados en la conformación de empresas privadas a fin de eludir controles
y los altos índices de corrupción que la tramitación de aquellas presenta
generando diversas Organizaciones Internacionales que pongan especial
atención en las situaciones de conflicto de intereses.
En la actualidad el análisis de los grupos de interés es relevante pues permite
esbozar posibles surgimientos de conflictos de interés, los cuales se vinculan
con la corrupción en el sector público, pues de acuerdo con la Organisation for
Economic Cooperation and Development (OECD), pueden ser tomados como
un indicador, precursor o resultado de la corrupción.
Ahora bien, aunque se carece de una definición universal para los COI, si hay
consenso en que se originan cuando el interés público se ve comprometido
por los intereses privados del funcionariado público. En este punto es vital el
conocimiento de la teoría relativa tanto a los COI como a los grupos de
interés , influencia y poder , para tener un marco conceptual amplia que
permita comprender los aspectos que pueden vincular entre sí a personas,
empresas y cualquier otro tipo de organización. Lo anterior debido a grupos
de interés , influencia y poder comprenden colectividades en defensa de una
posición , para lo cual emplean diferentes medios con tal de influir en la
ciudadanía y en la toma de decisiones políticas a favor de sus intereses ,
cuyos motivos incluyen aspectos políticos, religiosos, morales o económicos.
Estos grupos poseen múltiples manifestaciones, entre ellas los grupos de
interés económico que muchas veces no solamente influyen en la economía
de un país , sino también en los ámbitos políticos y públicos generando
situaciones de alto riesgo para la corrupción , tales como en nombramiento de
funcionarios en altos cargos del Estado que tengan relación directa o
indirecta con grupos de interés económico y cuyos intereses propios influyen
en la toma de decisiones públicas.
Ante este panorama resulta necesario que los estados posean regulaciones
rigurosas y metodológicas para detectar influencias de grupos de interés
económico en aquellos funcionarios públicos con poder determinante para
tomar decisiones que puedan beneficiar a un grupo en detraimiento de los
intereses públicos.
La presencia de conflictos de intereses afecta negativamente- a la buena
Administración Pública, como principio, obligación o derecho fundamental.
Tanto la propia organización estatal no solo administrativa como los
ciudadanos resultan perjudicados por las consecuencias negativas que acarrea
la configuración de aquella. Sin embargo, una mirada objetiva del tema nos
obliga a reconocer que no estamos ante desconocidos supuestos de
comportamientos irregulares por parte de los servidores públicos, en realidad
las formas que actualmente adquieren la falta de ética, de probidad, de
imparcialidad o de transparencia se han ido perfeccionando, y formando
verdaderos cotos de ocultamiento, con diseños resistentes al control y el
castigo. Por ello, es posible confirmar la necesidad de implementar políticas
públicas efectivas destinadas a prevenir, solucionar y en su caso sancionar los
conflictos de intereses, que no se limiten al dictado de normas legales pues
resulta imprescindible contemplar diversas herramientas eficientes.
En definitiva, no existen modelos perfectos ni soluciones completas, pero un
análisis integral de la función pública permite que la letra de la ley no constituya
una utopía

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