Está en la página 1de 87

Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

§ 7. DERECHO ADMINISTRATIVO DE BOSQUES

I. EL BOSQUE COMO HECHO JURÍDICO.


Al igual que otras ramas del Derecho Administrativo Económico, el Derecho Forestal
es una disciplina relativamente nueva dentro del mundo jurídico, que carece en Chile de un
desarrollo doctrinario específico. Para ubicar al Derecho Forestal hay que ir primero a sus
fuentes y a partir de ese marco legal, unido a valores y otros factores, podremos comprender
mejor su valorización y su importancia.
Su estudio también debe incluir las instituciones más importantes, responsables de la
formulación e implementación del Derecho Forestal en nuestro país. Dentro de esta rama del
Derecho tanto las políticas económicas como las ambientales tienen gran injerencia para el
éxito en la aplicación de las leyes, por lo que cabe hacer una mención a su relación con el
Derecho del Medio Ambiente.
El bosque fue definido primeramente por el DL Nº2.565, de 1979, como aquel “sitio
poblado con formaciones vegetales en las que predominan árboles y que ocupa una superficie
de por lo menos 5.000 metros cuadrados, con un ancho mínimo de 40 metros, con cobertura
de copa arbórea que supere el 10% de dicha superficie total en condiciones áridas y semiáridas
y el 25% en circunstancias más favorables”; concepto que fue reproducido en forma textual
por la reciente Ley Nº20.283, de Bosque Nativo, de 2008.
Chile es un país rico en especies arbóreas, situadas a lo largo del país acorde a las
distintas condiciones geográficas, lo que unido al desarrollo económico de la industria forestal
ha hecho que el sector deba ser regulado especialmente, en orden a lograr un equilibrio entre la
dimensión ecológica de los árboles y el desarrollo de actividades forestales destinadas a
satisfacer las necesidades actuales de la sociedad.
II. MARCO REGULATORIO DEL DERECHO FORESTAL EN CHILE.
Está constituido por los siguientes cuerpos legales:
1. Decreto Supremo Nº4.363, de 1931. Ley de bosques (LB). El primer cuerpo normativo que
se refirió al tema forestal en nuestro país fue la Ley de Bosques (LB), que tuvo como fin
regular por primera vez los terrenos forestales en nuestro país, constituyendo la primera
expresión de esta rama del ordenamiento.
Esta norma constituye la primera disposición del Derecho Forestal en que se define que
se entiende por terrenos de aptitud preferentemente forestal.
Para el correcto funcionamiento de la industria, consagra los planes de manejo que
deben ser aprobados por CONAF (art.2) y propone incentivos económicos para premiar a
quienes planten bosques en terrenos forestales (art.7).
2. Decreto Ley Nº2.565 de 1979. Ley de fomento Forestal (LFF). Años más tarde, en 1974, se
dicta el Decreto Ley Nº701 de Fomento Forestal, reemplazado en 1979 por el Decreto Ley
Nº2.565, cuyo texto fue modificado por la Ley Nº19.561, de 1998. Así, el DL Nº2.565 (LFF)
es el cuerpo normativo que regula actualmente la actividad sobre terrenos de aptitud forestal
fomentando el desarrollo del sector.

1
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

Tal como lo dice expresamente su art.1, el objetivo de esta ley es regular la actividad
forestal en suelos de aptitud preferentemente forestal y en suelos degradados e incentivar la
forestación, en especial, por parte de los pequeños propietarios forestales y aquella necesaria
para la prevención de la degradación, protección y recuperación de los suelos del territorio
nacional.
3. Ley Nº20.283, de 2008. Regulación del bosque nativo (LBN). Por otra parte, en julio de
2008, se publicó la Ley Nº20.283, sobre Recuperación del Bosque Nativo y Fomento Forestal,
en adelante LBN. Esta Ley regula específicamente el Bosque Nativo, y vio la luz luego de una
larga tramitación que llevaba muchos años de discusión en el Congreso Nacional y que
pretende un equilibrio entre el aporte económico, social y ambiental del recurso forestal.
Esta ley, según su art.1, tiene como objetivos la protección, la recuperación y el
mejoramiento de los bosques nativos, con el fin de asegurar la sustentabilidad forestal y la
política ambiental.
4. Ley Nº18.362, de 1984. Ley del SNASPE. Con el fin de conservar las áreas naturales
ubicadas dentro del territorio nacional, en 1984 se creó el Sistema Nacional de Áreas Silvestres
Protegidas del Estado (SNASPE) por medio de la dictación de la Ley Nº18.362.
Cabe hacer referencia a esta Ley Nº18.362, de 1984, que crea el Sistema Nacional de
Áreas Silvestres Protegidas del Estado, pues si bien aún no entra en vigencia, es relevante para
comprender la importancia del recurso forestal y su especial resguardo en aquellas zonas.
Las instituciones y procedimientos administrativos contenidos en estas leyes se estudian
más adelante.
III. PRINCIPIOS JURÍDICOS DEL DERECHO FORESTAL.
1. Fomento de la actividad forestal. Se promueve la participación de privados permitiéndose
el acceso a la actividad forestal a cualquier interesado, estableciendo mecanismos de incentivo
como, por ejemplo, el sometimiento a beneficios tributarios o bonificaciones económicas.
2. Planificación Previa. La intervención, o explotación, de un terreno forestal prevé la
aprobación de un plan de manejo previo, instrumento consagrado para la sustentabilidad de la
actividad sobre los bosques, y cuya aprobación está a cargo de CONAF.
3. Resguardo del Bosque Nativo. El Bosque Nativo se halla, como se expuso, protegido
especialmente por la reciente Ley Nº20.283, de 2008, que establece una serie de limitaciones a
su explotación, pero que en ningún caso consagra prohibiciones absolutas en cuanto a la
utilización del recurso forestal.
4. Protección del Medio Ambiente. De acuerdo a lo establecido por la Ley Nº19.300, de Bases
Generales del Medio Ambiente, cualquier proyecto o actividad susceptible de causar impacto
ambiental, en cualquiera de sus fases, debe someterse al Sistema de Evaluación de Impacto
Ambiental (SEIA).
Al SEIA se puede ingresar mediante una Declaración (DIA) o Estudio (EIA),
dependiendo de la significancia que tengan los efectos del proyecto en el medio ambiente.
No obstante lo anterior, cualquiera sea la vía de ingreso del proyecto, en ambos casos
Sistema de Evaluación Ambiental podrá pedir informe de organismos con competencia
ambiental, entre los que se encuentra la CONAF.

2
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

Un informe desfavorable por parte de algunas de las autoridades, puede desembocar en


el rechazo o solicitud de modificación del proyecto.
Esta relación entre el Derecho Forestal y el Medio Ambiente, está contemplada, a su vez,
en la Ley de Bosque Nativo, que en su Título III, “De las normas de protección ambiental”, que
establece normas de protección del Medio Ambiente, sin perjuicio que expresamente hace
referencia a que deben respetarse además las disposiciones contenidas en la LBGMA.
De esta forma, en el art.16 LBN se dispone que todo plan de manejo requerirá medidas a
adoptarse con los objetivos de proteger los suelos, la calidad y cantidad de los caudales de los
cursos de agua y la conservación de la diversidad biológica y de las medidas de prevención y
combate de incendios forestales.
Además, en el art.17 LBN hace alusión a que se reglamentará la protección de suelos,
cuerpos y cursos naturales de agua, bajo distintos criterios enumerados en la misma norma,
agregando que el mismo reglamento determinará la normativa aplicable a los humedales
especialmente protegidos declarados Sitios Prioritarios de Conservación por la CONAMA, o
sitios Ramsar.
Por lo tanto, el objeto del Derecho Forestal está íntimamente ligado al Medio Ambiente,
en orden a, tal como lo dice el objetivo de la LBN, asegurar la sustentabilidad forestal y la
política ambiental de nuestro país.
IV. INSTITUCIONALIDAD ORGÁNICA FORESTAL.
Tanto en la LFF como en la LBN, se hacen repetidas alusiones a la Corporación,
especificando ambos en sus respectivos art.2 que por tal se entiende la Corporación Nacional
Forestal (CONAF).
Estas disposiciones legales dan ciertas atribuciones a la CONAF como por ejemplo:
a) Podrá elaborar normas de manejo de aplicación general para determinadas especies o
tipos forestales, a las cuales podrán adherirse los interesados.
b) Podrá prestar colaboración a pequeños propietarios.
c) Aprobará y fiscalizará el cumplimiento de los planes de manejo.
Por esto, parece indispensable referirse a este órgano, analizando su naturaleza y
potestades.
1. Naturaleza jurídica de la CONAF. Es una entidad de derecho privado dependiente del
Ministerio de Agricultura, cuyo objeto es contribuir a la conservación, incremento, manejo y
aprovechamiento de los recursos forestales del país1. La referida Corporación se rige por sus
propios Estatutos, sin perjuicio de las atribuciones que se le confieren mediante ciertas leyes
especiales.
Ésta fue creada mediante escrituras públicas en 1970 en las que se establecieron los
Estatutos de la ex Corporación de Reforestación, que luego fueron aprobados por decreto
Nº728, de 1970, del Ministerio de Justicia2.

1
Título Primero, art.3 de los Estatutos de la Corporación Nacional Forestal.
2
Luego, nuevamente por escritura pública se modificaron dichos estatutos, aprobándose la correspondiente
modificación mediante decreto Nº455, de 1973, del Ministerio de Justicia.

3
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

Así, el art.1 de sus Estatutos, señala: “Constitúyese por el Servicio Agrícola Ganadero, el
Instituto de Desarrollo Agropecuario, la Corporación de Fomento de la Producción y la
Corporación de la Reforma Agraria una corporación de Derecho privado que se denominará
CORPORACIÓN NACIONAL FORESTAL, de duración indefinida, que se regirá en su
formación, funcionamiento, financiamiento y extinción por el presente Estatuto, y en el
silencio de él, por las disposiciones del título Trigésimo Tercero del Libro Primero del Código
Civil y por el Decreto 1540 de 20 de mayo de 1966 del Ministerio de Justicia sobre concesión
de personalidad jurídica”.
La referida Corporación se rige por sus propios Estatutos sin perjuicio de las
atribuciones que se le confieren mediante ciertas leyes especiales.
El objeto de la CONAF, se encuentra establecido en el art.3 de sus Estatutos de la
siguiente manera:
“(...) contribuir a la conservación, incremento, manejo y aprovechamiento de los recursos forestales del
país, y, especialmente:
a) Elaborar o participar en la elaboración de los planes nacionales o regionales de desarrollo forestal
que se propongan;
b) Ejecutar o participar en la ejecución de los planes nacionales o regionales de desarrollo forestal que
se propongan;
c) Participar o colaborar en la administración y el desarrollo del patrimonio forestal del Estado,
formado por los Parques Nacionales, Reservas Forestales y Bosque Fiscales;
d) Procurar el adecuado manejo y aprovechamiento de los bosques que se establezcan por acción
directa o indirecta de la Corporación, y de aquellos cuya administración le corresponda, velando por la eficiente
comercialización de los productos que se obtengan;
e) Organizar y ejecutar las labores de reforestación y viveros que se programen, financiando la
repoblación forestal en terrenos de particulares y entidades públicas y privadas;
f) Elaborar y ejecutar planes nacionales y regionales de protección y conservación de los recursos
forestales del país, especialmente en cuanto se refiere a la prevención y combate de incendios, control de plagas,
corrección de torrentes y otros;
g) Procurar el mejoramiento genético de los bosques, y recomendar y aplicar las medidas necesarias
para evitar la introducción al país y la propagación dentro del territorio nacional de plagas que afecten al
patrimonio forestal, combatir las existentes y fomentar y controlar la producción, comercialización, distribución y
aplicación de los elementos y productos químicos y biológicos destinados a prevenirlas y extirparlas;
h) Colaborar con los organismos pertinentes en el control del cumplimiento de las disposiciones legales
que reglamentan la actividad forestal del país y proponer a las autoridades competentes la implantación de
normas reguladoras de la actividad forestal;
i) Prestar asistencia técnica y financiera y servicios gratuitos y onerosos a personas naturales o
jurídicas para la formulación y ejecución de planes de trabajo relativos a protección y conservación de recursos
forestales, forestación y reforestación, manejo, explotación y aprovechamiento de los recursos forestales;
j) Capacitar a sus trabajadores en las materias y actividades necesarias para el desarrollo social de los
mismos y otorgar las facilidades necesarias para su organización colaborando con ellos en la creación de sus
estructuras propias o en su participación en las ya existentes, actuando conjuntamente con los organismos
oficiales de representación de los trabajadores;

4
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

k) Capacitar a los trabajadores forestales del país en las técnicas necesarias para el buen desempeño
de su función;
l) Crear o participar en la creación de la infraestructura social y material necesarias para el buen
desarrollo forestal, colaborando con los organismos oficiales de representación de los trabajadores;
m) Crear o participar en personas jurídicas que colaboren en el cumplimiento de las finalidades
anteriores;
n) Ejecutar toda clase de actos y celebrar toda clase de convenciones o contratos tendientes a la
consecución o relacionados con sus fines, con personas naturales o jurídicas, nacionales o extranjeras, de derecho
público o privado, incluso con sus propios socios.”
2. Juridicidad de las atribuciones de la CONAF. Como señalamos en el punto anterior, la
CONAF es un organismo de derecho privado dependiente del Ministerio de Agricultura. No
obstante, ciertas facultades que la CONAF se atribuye, tienen el carácter de públicas, por ello,
en este punto analizamos el marco de juridicidad de las funciones de carácter público de esta
entidad.
En un sentido orgánico, la Administración del Estado, tal como lo precisa el art.1, inc.2º,
de la Ley Nº18.575, Orgánica Constitucional de Bases Generales de la Administración del
Estado (LOCBGAE), “estará constituida por los Ministerios, las Intendencias, las
Gobernaciones y los órganos y servicios públicos creados para el cumplimiento de la función
administrativa, incluidos la Contraloría General de la República, el Banco Central, las Fuerzas
Armadas y las Fuerzas de Orden y Seguridad Pública, las Municipalidades y las empresas
públicas creadas por ley”3.
Aparte de las entidades creadas por ley para el cumplimiento de la función
administrativa, el Estado, según lo autoriza el art.6 inc.1° LOCBGAE, “podrá participar y
tener representación en entidades que no formen parte de su Administración sólo en virtud de
una ley que lo autorice, la que deberá ser de quórum calificado si esas entidades desarrollan
actividades empresariales”, pero esas entidades, de acuerdo con lo que indica el art.6 inc.2º
LOCBGAE, “no podrán, en caso alguno, ejercer potestades públicas”.
Además, existe para los servicios públicos la posibilidad que contempla el art.34
LOCBGAE, en virtud del cual “podrán encomendar la ejecución de acciones y entregar la
administración de establecimientos o bienes de su propiedad, a las Municipalidades o a
entidades de derecho privado, previa autorización otorgada por ley y mediante la celebración

3
De acuerdo con el principio de legalidad, que es una de las piezas claves del Estado de Derecho, las entidades de
la Administración del Estado que no hayan sido creadas directamente por la Constitución, deben serlo por ley. Así
se desprende de los art.6º, inc.1º, que establece que: “Los órganos del Estado deben someter su acción a la Constitución y a
las normas dictadas conforme a ella”; art.7, incs.1º y 2º, que establecen que los órganos del Estado actúan validamente
si sus integrantes han sido investidos regularmente, lo hacen dentro de su competencia y en la forma prescrita por
ley, y no ejercen otra autoridad o derechos que los expresamente conferidos; 38º, inc.1º, que entrega a una ley
orgánica constitucional la determinación de “la organización básica de la Administración Pública”, y 62º, inc.4º, Nº2, en
relación con el 60 Nº14, que incluye dentro de las materias de ley de iniciativa exclusiva del Presidente de la
República, la creación de nuevos servicios públicos y la determinación de sus funciones y atribuciones. Estos
servicios, de acuerdo con lo establecido en la Ley Nº18.575 que es, precisamente, la ley complementaria a que se
refiere el art.38º, inc1º CPR, han sido definidos y caracterizados por ella, de modo que para existir y actuar
validamente deben enmarcarse dentro de sus preceptos.

5
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

de contratos, en los cuales deberá asegurarse el cumplimiento de los objetivos del servicio y el
debido resguardo del patrimonio del Estado”.
Es inequívoco que las acciones que se pueden encomendar en su ejecución no pueden
significar el traspaso de potestades públicas.
La CONAF, no ha sido declarada directa y explícitamente por una Ley vigente como un
servicio público con las características que estos, necesariamente, deben presentar de acuerdo
con la LOCBGAE. Debido a que la Ley Nº18.348, que crea la Corporación Nacional Forestal
y de Protección de Recursos Naturales Renovables, que podrá usar como denominación
abreviada la expresión “CONAF”, y la configura como institución autónoma del Estado o
servicio público descentralizado (art.1), no ha entrado todavía en vigencia ya que ello ocurrirá
según el art.19 de la citada ley “el día en que se publique en el Diario Oficial el decreto en cuya virtud el
Presidente de la República disuelva la corporación de derecho privado denominada Corporación Nacional
Forestal”, lo que no se ha efectuado hasta la hecha.
Pues, además de ser necesaria la cobertura legal previa para poder ejercer una potestad
pública, éstas siempre deben ejercerse en función del interés público, de una finalidad pública,
las que sólo pueden estar previamente consignadas y autorizadas en un texto legal. Su
condición de «persona jurídica de derecho privado» no le priva de tal sujeción al principio de
legalidad, pues, en cuanto CONAF cumple funciones administrativas, en sentido funcional o
material integraría la Administración del Estado.
Por tanto, CONAF está igualmente sujeta al control de la legalidad de sus actos, ya que
sus atribuciones sólo son creadas por ley. Está investido de ellas para el cumplimiento de sus
funciones y esas atribuciones las tiene en virtud de una única administrativa de estructuración.
Entonces, en un sentido orgánico, la CONAF puede considerarse integrante de la
Administración del Estado, y no puede en caso alguno ejercer potestades públicas que no estén
expresamente establecidas en la Ley.
Sin perjuicio de lo anterior, una corporación privada puede ser formada por órganos del
Estado y colaborar con la Administración si se le encomienda la ejecución de ciertas acciones y
la administración de bienes o establecimientos, siempre que esté legalmente autorizada y en la
medida que la ley lo establezca.
Si bien la doctrina administrativa chilena anterior a la LOCBGAE, admitía la posibilidad
de que existiesen entidades privadas a las que el legislador asignara parte de la actividad
administrativa, después de la entrada en vigencia de esta ley, las entidades privadas a las que
legalmente se había dotado de atribuciones administrativas, sólo conservan aquellas que no
implican el ejercicio de potestades públicas.
Así, los órganos o entidades de la administración material, esto es, todos aquellos que
ostentan funciones o cometidos públicos, están sujetos al principio de legalidad, y ninguna
actuación de ellos está válidamente encaminada si no cuenta con un texto legal expreso que
cree y delimite alguna atribución.
En consecuencia, la CONAF, en la medida que realiza funciones de carácter público,
sólo puede actuar válidamente si cuenta con facultades previa y legalmente establecidas.
Al respecto, cabe señalar que el Tribunal Constitucional en boletín Nº669-01, declaró, al
conocer la LBN, que “esta Magistratura hace presente a los Poderes Colegisladores la inconveniencia de la
mantención de situaciones constitucionalmente anómalas como las aludidas y, especialmente en el presente caso,

6
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

exhorta a S.E. la Presidenta de la República para que regularice la naturaleza jurídica de CONAF,
procediendo a la dictación del Decreto Supremo a que se refiere el artículo 19 de la Ley Nº18.348, publicada el
año 1984, o empleando otro medio constitucionalmente idóneo que el Gobierno estime adecuado”.
V. INSTITUCIONES Y PROCEDIMIENTOS.
Existen una serie de instituciones y procedimientos contenidas en las leyes ya
enumeradas en el marco regulatorio, las que se analizan más adelante. Las principales
instituciones son las siguientes:
1. Planes de manejo. Conforme a lo dispuesto por el art.2 Nº18 LBN, un “plan de manejo”
es aquel instrumento que, reuniendo los requisitos establecidos en la misma LBN, planifica la
gestión del patrimonio ecológico o el aprovechamiento sustentable de los recursos forestales
de un terreno, resguardando la calidad de las aguas y evitando el deterioro de los suelos.
Este instrumento es de amplia utilización en el derecho forestal, y ya existe desde 1931
en la Ley de Bosques; luego en el DL Nº701, sobre Fomento Forestal, y retomado en la LBN.
Dogmáticamente es una especie de autorización administrativa.
2. Otras autorizaciones. Las autorizaciones de este sector están ligadas a las potestades de
CONAF en atención a la explotación de los bosques por parte de la industria forestal.
Así, en el art.19º LBN, se consagra la posibilidad que CONAF autorice
excepcionalmente la intervención o alteración de los hábitats de los individuos de las especies
consideradas “en peligro de extinción”, “vulnerables”, “raras”, “insuficientemente conocidas”
o “fuera de peligro”, autorización que se hará efectiva por medio de una resolución fundada,
por motivos estrictamente necesarios.
Otras autorizaciones se refieren a la corta de bosque nativo, la que en la generalidad de
los casos necesitará de la aprobación de un plan de manejo por la CONAF, salvo en los casos
enmarcados dentro del art.57 LBN cuando se trate de una cantidad reducida de árboles y se
adopten las mejoras prediales respectivas.
3. Concesiones. El art.14 LB prescribe que “las concesiones para explotar bosques fiscales,
cualesquiera que ellos sean, se otorgarán por el SAG, conforme a las normas y en las
condiciones que, en cada caso, establezca su Consejo…”, estableciendo así un procedimiento
concesional para la explotación por parte de los particulares de los bosques que pertenezcan al
Fisco de Chile.
Los planes de manejo, y las demás autorizaciones y concesiones, constituyen actos
administrativos, cuyo procedimiento y dictación se rige por sus normas especiales, y en
subsidio por la Ley Nº19.880. Tales normas especiales se revisan a continuación.
A/ PLANES DE MANEJO Y CONCESIONES EN LA LEY DE BOSQUES (LB).
La Ley de bosques, de 1931, definió lo que se entiende por terrenos de aptitud
preferentemente forestal. Además, para el correcto funcionamiento de la industria, consagra
los planes de manejo que deben ser aprobados por CONAF (art.2 LB) y propone incentivos
económicos para premiar a quienes planten bosques en terrenos forestales (art.7 LB).
En sus arts.6 y 14 establece la concesión, como medio en virtud del cual los particulares
podrán explotar bosques fiscales, la que se otorgará administrativamente por medio del
Servicio Agrícola y Ganadero (SAG).

7
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

La explotación estará sujeta a las prohibiciones establecidas en el art.5 LB, las que no son
absolutas, en la medida que hayan causas justificadas y que previamente se apruebe el plan de
manejo respectivo. Asimismo, la ley establece sanciones administrativas y penales respecto de
quienes contravengan lo dispuesto por ella (arts.18 y 21 LB).
La LB, se ve complementada en esta materia por la LFF, que reemplazó al DL Nº 701,
de 1974, y que se detalla a continuación.
B/ INSTITUCIONES EN LA LEY DE FOMENTO FORESTAL (LFF).
Tal como lo dice expresamente su art.1 LFF, el objetivo de esta ley es regular la actividad
forestal en suelos de aptitud preferentemente forestal y en suelos degradados e incentivar la
forestación, en especial, por parte de los pequeños propietarios forestales y aquella necesaria
para la prevención de la degradación, protección y recuperación de los suelos del territorio
nacional.
En el art.2 define los conceptos básicos que tienen relevancia en el área forestal: i)
Terrenos de aptitud preferentemente forestal; ii) Forestación; iii) Reforestación; iv) Plan de
manejo; v) Corporación; vi) Bosque; vi) Corta no autorizada; vii) Desertificación; viii) Pequeño
propietario forestal; ix) Suelos degradados; x) Suelos frágiles; xi) Terrenos calificados de aptitud
preferentemente forestal; xii) Erosión moderada; xiii) Erosión severa.
1. De la calificación de terrenos forestales. El art.2, antes citado, define como terrenos de
aptitud preferentemente forestal “todos aquellos terrenos que por las condiciones de clima y
suelo no deban ararse en forma permanente, estén cubiertos o no de vegetación, excluyendo
los que sin sufrir degradación puedan ser utilizados en agricultura, fruticultura o ganadería
intensiva”. Para que un terreno sea calificado como forestal debe seguirse el procedimiento
establecido en el art.3 y ss. LFF.
El propietario del terreno debe presentar una solicitud ante la CONAF, la que debe ir
acompañada de la superficie sujeta a forestación y de un estudio técnico del terreno elaborado
por un ingeniero forestal o agrónomo que debe contener la proposición calificatoria, las
actividades que se ejecutarán y las medidas de preservación y protección que se adoptarán.
La CONAF tendrá 60 días (prorrogables por razones geográficas hasta un máximo de
120) para pronunciarse sobre la solicitud, de lo contrario se entenderá aprobada. Emitirá un
certificado con el que el propietario acreditará la calidad del terreno cada vez que se le exija.
Si la resolución denegare en todo o parte la solicitud, el requirente tendrá 30 días, desde
la fecha de expedición de la carta certificada por la cual la CONAF lo notifica del rechazo, para
reclamar ante el juez de letras en lo civil del territorio jurisdiccional que corresponda según la
ubicación del terreno. Este reclamo se tramitará por vía incidental y deberá fallarse en 60 días
contados desde la interposición del mismo.
A su vez, la CONAF podrá, a petición del interesado y por motivos fundados, autorizar
la desafectación de la calidad forestal de un terreno (art.7 LFF).
2. De los planes de manejo. De acuerdo al art.2, un plan de manejo es un “instrumento que,
reuniendo los requisitos que se establecen en este cuerpo legal, regula el uso y
aprovechamiento racional de los recursos naturales renovables de un terreno determinado, con
el fin de obtener el máximo beneficio de ellos, asegurando al mismo tiempo la preservación,
conservación, mejoramiento y acrecentamiento de dichos recursos y su ecosistema”.

8
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

Estos planes están establecidos para el caso de que se realicen cortas no autorizadas,
donde quien realizare tal acción tendrá 60 días, contados desde la denuncia, para presentar un
plan de manejo de reforestación o de corrección, según corresponda, elaborado por un
especialista. Dicho plan deberá comprender la ejecución de todos los trabajos de reforestación
en un plazo que no exceda los 2 años. La CONAF tendrá 120 días, contados desde la
presentación, para pronunciarse sobre el plan de lo contrario se entenderá aprobado. Si fuera
denegado, el requirente podrá reclamar de aquella en los mismos términos ya vistos a partir de
la denegación de la solicitud de calificación del terreno.
3. De los incentivos a la actividad forestal. Esta ley, en su calidad de norma tendiente a
fomentar la actividad forestal del país, a partir del art.12 y ss., establece una serie de medidas
para incentivar la actividad forestal en Chile. Entre otras:
a) El Estado bonificará, por una sola vez por cada superficie, un porcentaje de los costos netos de las
siguientes actividades realizadas en terrenos ya calificados como forestales:
i) La forestación en suelos frágiles, en ñadis o en áreas en proceso de desertificación.
ii) La forestación en suelos degradados y las actividades de recuperación de dichos suelos o de
estabilización de dunas.
iii) El establecimiento de cortinas cortavientos, en suelos de cualquier clase, que se encuentren degradados
o con serio peligro de erosión por efecto de la acción eólica.
iv) La forestación que efectúen los pequeños propietarios forestales en suelos de aptitud preferentemente
forestal o en suelos degradados de cualquier clase, incluidas aquellas plantaciones con baja densidad
para fines de uso silvopastoral.
v) La primera poda y el raleo de la masa proveniente de las forestaciones realizadas por los pequeños
propietarios forestales, siempre que se hagan dentro de los plazos que establece el reglamento.
vi) Las forestaciones en suelos degradados con pendientes superiores al 100%.
Para los efectos de estas bonificaciones, la CONAF fijará, previa aprobación de los
Ministerios de Agricultura y Hacienda, el valor de los costos de las actividades bonificables, los
que se reajustarán de acuerdo a la variación del IPC. Si la CONAF no fijare dichos costos se
estará a los valores contenidos en la última tabla4 de costos fijada conforme a lo dicho
anteriormente. El pago de estas bonificaciones las efectuará la Tesorería General de la
República (art.15 LFF).
Según el art.16 LFF, el beneficiario de éstas podrá transferirlas mediante instrumento
público o privado, suscrito ante un notario público. Estas bonificaciones podrán ser cobradas y
percibidas por personas distintas del propietario, siempre que acompañen el documento en que
conste su transferencia.
b) Estarán exentos del impuesto territorial que grava los terrenos agrícolas, los siguientes:
i) Los terrenos calificados de aptitud preferentemente forestal que cuenten con plantaciones bonificadas y
los bosques nativos.
ii) Los terrenos cubiertos con bosques de protección, que son aquellos ubicados en suelos frágiles
con pendientes iguales o superiores a 45% y los próximos a fuentes, cursos o masas de agua
destinados al resguardo de tales recursos hídricos.

4 El 29 de Octubre 2009 se tomó razón del último Decreto que modificó dicha tabla de valores.

9
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

c) Las utilidades derivadas de la explotación de bosques naturales o artificiales obtenidas por personas
naturales o jurídicas estarán afectas al impuesto general de la Ley sobre Impuesto a la Renta (LIR).
Sin embargo, las personas que exploten bosques por los cuales no se encuentren
acogidas a los beneficios establecidos en este decreto ley, deberán declarar la renta efectiva o
presunta para los efectos de la LIR de acuerdo a lo previsto en el art.20, Nº1, letra b), de dicha
ley (art.14 LFF).
4. De las sanciones. En un título dedicado especialmente a ello, la ley decreta sanciones
ante determinadas conductas.
El incumplimiento del plan de manejo por causas imputables al propietario o al
forestador se sanciona, de acuerdo a su gravedad, con una multa de 5 a 15 UTM por hectárea
(art.17 LFF).
La corta o explotación de plantaciones existentes en terrenos de aptitud preferentemente
forestal deberán hacerse previo plan de manejo aprobado por la CONAF. Esta norma será
más flexible si se trata de terrenos ubicados en las zonas enumeradas en el art.21 inc.2º. La
contravención a esta norma acarreará para el propietario del terreno o para quien efectúe la
corta o explotación no autorizada, una multa que será igual al doble del valor comercial de los
productos, los que a su vez podrán caer en comiso. La CONAF podrá, además, enajenar los
productos y ordenar la paralización de las faenas en el terreno pudiendo para tal efecto recurrir
a la fuerza pública (art.21 LFF).
La corta o explotación de bosques en terrenos calificados como forestales obligará a su
propietario a reforestar una superficie de igual extensión (pudiendo ser otro terreno si la
CONAF lo autorizare) de acuerdo al plan de manejo. Si la acción se desarrolla en un bosque
nativo no se exigirá esta obligación si ésta tuvo como objetivo la recuperación de terrenos para
fines agrícolas según se haya consultado en el respectivo plan de manejo. La contravención a
estas disposiciones tendrán como sanción las multas del art.17 citadas anteriormente pero
aumentadas en un 100% (art.22 LFF).
El art.23 señala que toda acción de corta o explotación de bosques que se realice en
zonas fronterizas, deberá ser autorizada por la Dirección de Fronteras y Límites del Estado, y
cuando recaiga sobre zonas aledañas al límite necesitará además del pronunciamiento del
Ministerio de Defensa Nacional. Lo dispuesto por estos órganos no será susceptible de
reclamo alguno.
Las sanciones mencionadas anteriormente serán determinadas por el juez de policía local
que sea abogado, con competencia en el lugar de la infracción, el que conocerá en primera
instancia de las denuncias de la CONAF o Carabineros; salvo cuando se trate de multas
superiores a 5.000 UTM o cuando la acción se cometa en una comuna donde no hay juez de
policía local abogado, casos en los que resolverá el juez que tenga su asiento en la capital
provincial (art.24 LFF).
Ante cada infracción a esta ley o a su reglamento, los funcionarios de la CONAF
deberán levantar un acta con los hechos constitutivos de la infracción y con los datos para su
acertada inteligencia (día, lugar, hora de la inspección, individualización infractor, etc.). Con
copia del acta deberá efectuarse la denuncia ante el tribunal competente. Para las diligencias
inspectivas los funcionarios requieren de la autorización del dueño del predio, o del juez en
subsidio.

10
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

Se tomará como atenuante la conducta irreprochable anterior, la ignorancia excusable o


la buena fe comprobada. Por otra parte, según el art.32 LFF, las acciones destinadas a
perseguir las infracciones de este cuerpo legal prescribirán en el plazo de 2 años, contado desde
la fecha de contravención.
Así, esta norma, dictada en 1979, ha tenido como objetivo regular la actividad forestal en
suelos de aptitud preferentemente forestal y en suelos degradados e incentivar la forestación,
en especial, por parte de los pequeños propietarios forestales y aquella necesaria para la
prevención de la degradación, protección y recuperación de los suelos del territorio nacional.
El régimen jurídico forestal se mantuvo amparado por esta ley hasta julio de 2008, fecha
en que se dictó la Ley de Bosque Nativo, que regula específicamente los terrenos forestales que
ostentan la característica de ser bosques nativos.
C/ INSTITUCIONES EN LA LEY DE BOSQUE NATIVO (LBN).
Después de una larga tramitación, el 30 de julio de 2008 fue publicada en el Diario
Oficial la Ley Nº20.283, sobre Recuperación del Bosque Nativo y Fomento Forestal, en
adelante LBN.
Esta ley, según su art.1, tiene como objetivos la protección, la recuperación y el
mejoramiento de los bosques nativos, con el fin de asegurar la sustentabilidad forestal y la
política ambiental.
1. Definición de conceptos:
a) Bosque. La LBN, en su art.2, entrega una serie de conceptos, entre ellos el de “bosque”,
al que define como aquel “sitio poblado con formaciones vegetales en las que predominan
árboles y que ocupa una superficie de por lo menos 5.000 metros cuadrados, con un ancho
mínimo de 40 metros, con cobertura de copa arbórea que supere el 10% de dicha superficie
total en condiciones áridas y semiáridas y el 25% en circunstancias más favorables”.
b) Bosque Nativo. A su vez, en el art.2 Nº 3 define “bosque nativo” como aquel “bosque
formado por especies autóctonas, provenientes de generación natural, regeneración natural, o
plantación bajo dosel con las mismas especies existentes en el área de distribución original, que
pueden tener presencia accidental de especies exóticas distribuidas al azar”.
Luego, realiza una interesante clasificación entre: bosque nativo de preservación; bosque
nativo de conservación y protección; y, bosque nativo de uso múltiple, clasificación que se ve a
continuación.
i) Bosque nativo de preservación:
1) Concepto: De acuerdo al art.2 Nº4 LBN, el bosque nativo de preservación lo será en
cuanto constituya un hábitat de especies vegetales protegidas legalmente o que haya sido
clasificado en las siguientes categorías: a) Peligro de extinción; b) Vulnerables; c) Raras; d)
Insuficientemente conocidas; y, e) Fuera de peligro.
El problema se encuentra cómo saber si nos hallamos ante un bosque de este tipo, la
LBN le entrega a un reglamento la tarea de determinar las especies que se encuentran dentro
de cada una de estas categorías, pero este aún no ha sido dictado, de manera que conforme al
art.2 transitorio LBN, en esta materia debemos atenernos a lo establecido en el “Libro Rojo”
de la CONAF.

11
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

2) Prohibición que establece la Ley de Bosque Nativo. El art.19 LBN, en tanto, prohíbe la corta,
eliminación, destrucción y descepado del bosque nativo de preservación. Así, la única forma de
realizarse una explotación minera dentro de un bosque nativo de preservación sería si se
catalogara el proyecto como de interés nacional.
3) Determinación del bosque nativo de preservación. Para determinar si un terreno específico es
bosque nativo de preservación, hay que determinar si las especies arbóreas que se encuentran
en su interior fueron clasificadas dentro de las categorías ya señaladas.
4) Clasificación de las especies arbóreas. El art.37 LBGMA, prescribe que “el reglamento fijará
el procedimiento para clasificar las especies de flora y fauna silvestres, sobre la base de
antecedentes científico-técnicos, y según su estado de conservación, en las siguientes
categorías: extinguidas, en peligro de extinción, vulnerables, raras, insuficientemente conocidas
y fuera de peligro”. Es decir, la ley le encarga a un reglamento la referida clasificación.
Esto es, el actualmente vigente Decreto Nº75, del Ministerio Secretaría General de la
Presidencia, publicado el 11 de mayo de 2005. Ahora bien, no obstante ello, cabe señalar que
éste para la Clasificación de Especies Silvestres, al que hace mención el art.37 LBGMA,
establece el procedimiento, pero no clasifica las especies arbóreas dentro de una categoría
específica.
En su art.28 del Decreto Nº75 señala que la clasificación de especies dentro de una
categoría determinada, será aprobada por medio de la dictación de un Decreto Supremo. Y
sólo en la medida que se haya dictado éste decreto se podría aplicar la restricción del art.19
LBN, ya citada, lo que no ha sucedido hasta el momento.
5) Situación actual. Dicho lo anterior, hay que ser claro que la clasificación de las especies
arbóreas dentro de una categoría determinada no ha sido decretada hasta el momento, razón
por la que los únicos bosques nativos de preservación que existen actualmente son aquellos
que constituyan actualmente un hábitat de especies vegetales protegidas legalmente.
En otras palabras, mientras no se dicte el Decreto contemplado en el art.28 del
Reglamento para la Clasificación de Especies Silvestres, no es posible determinar qué especies
están sujetas al régimen de los bosques nativos de preservación.
Por tanto, la prohibición del art.19 LBN sólo se aplica a los bosques nativos de
preservación que existen actualmente, estos son aquellos que constituyan actualmente un
hábitat de especies vegetales protegidas por una ley en especial.
ii) Bosque nativo de conservación y protección. Este tipo, según el art.2 Nº5, es aquel, cualquiera
sea su superficie, que se encuentre ubicado en pendientes iguales o superiores a 45%, en suelos
frágiles, o a menos de 200 metros de manantiales, cuerpos o cursos de aguas naturales,
destinados al resguardo de tales suelos y recursos hídricos. Es decir, se refiere principalmente a
aquellos bosques destinados al resguardo del suelo y recursos hídricos.
iii) Bosque nativo de uso múltiple. Según lo previsto en el art.2 Nº6, éste se refiere a aquél
cuyos terrenos y formaciones vegetales no corresponden a las categorías de preservación o de
conservación y protección, y que está destinado preferentemente a la obtención de bienes y
servicios maderables y no maderables.
2. Tipos forestales. En el art.2 Nº26, se define “tipo forestal” como aquella agrupación
arbórea caracterizada por las especies predominantes en los estratos superiores del bosque. En

12
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

otras palabras, es una clasificación basada en la especie que predomina dentro de un área
determinada.
Por ejemplo, si en un área de nuestro país conviven araucarias, lengas, canelos, ñirres y
robles, predominando la presencia de araucarias, el tipo forestal de esa zona debiera clasificarse
como de araucarias.
El Título I de la LBN, trata los tipos forestales encargándole la tarea al Ministerio de
Agricultura de que, mediante Decreto Supremo, establezca los tipos forestales a que
pertenecen los bosques nativos del país, con sus respectivos métodos de regeneración.
A su vez, la LBN establece que CONAF deberá llevar un Catastro que identifique los
tipos forestales de cada región del país, poniendo atención especial en aquellos de interés para
la preservación o conservación, y que será actualizado cada 10 años teniendo un carácter
público.
3. Planes de manejo. Conforme a lo dispuesto por el art.2 Nº18 LBN, según se adelantó, un
“plan de manejo” es aquel instrumento que, reuniendo los requisitos establecidos en la misma
LBN, planifica la gestión del patrimonio ecológico o el aprovechamiento sustentable de los
recursos forestales de un terreno, resguardando la calidad de las aguas y evitando el deterioro
de los suelos.
Es decir, se trata de un instrumento de gestión ambiental de intervención en un bosque
nativo, tendiente a resguardar el uso sustentable del bosque, protegiendo así el ecosistema que
envuelve.
El plan de manejo debe ser realizado por un profesional idóneo, calificado especialmente
en el manejo sustentable de bosques, como por ejemplo un ingeniero forestal, en recursos
naturales, o agrónomo.
a) Clasificación de los planes de manejo. Según el mismo artículo, los planes de manejo se
clasifican en:
i) Plan de manejo de preservación: Aquel que tiene como objetivo fundamental resguardar la
diversidad biológica, asegurando la mantención de las condiciones que hacen posible la
evolución y el desarrollo de las especies y ecosistemas contenidos en el área de su acción.
ii) Plan de manejo forestal: Aquel que tiene como objetivo el aprovechamiento del bosque
nativo para la obtención de bienes madereros y no madereros, considerando la
multifuncionalidad de los bosques y la diversidad biológica.
Conforme a esta clasificación, un plan de manejo contempla tanto la posibilidad de
preservación de un bosque nativo como la de su explotación, apareciendo como relevante el
concepto de desarrollo sustentable, que a grandes rasgos, se refiere a la satisfacción de las
necesidades presentes sin menoscabar a las generaciones futuras.
b) Explotación de bosques nativos. Conforme a lo anterior, los bosques sometidos a la
aplicación de la LBN, incluyen bosques destinados a la preservación, a la conservación y
protección, como también aquellos de uso múltiple.
Para la explotación de estos bosques, es necesario un plan de manejo forestal según lo
previsto en el art.7 LBN.
Esta norma es clara en establecer que los bosques nativos están afectos a concesiones
mineras y a las servidumbres que conllevan, para lo cual el concesionario o titular de la

13
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

servidumbre deberá presentar un plan de manejo forestal que deberá cumplir a cabalidad. Así,
por medio del plan respectivo, el bosque nativo puede estar afecto a la construcción de
caminos, servicios eléctricos, ductos, entre otras obras.
Según la referida disposición el plan de manejo “deberá ser presentado por el respectivo
concesionario o titular de la servidumbre, según los casos, quien será responsable del
cumplimiento de todas las obligaciones contenidas en él”.
De este modo, acorde al art.5 LBN, cualquier acción de corta o explotación de bosque
nativo deberá hacerse previo plan de manejo aprobado por CONAF. En caso de contravenir
esta disposición, el infractor deberá pagar una multa y CONAF podrá ordenar la inmediata
paralización de las faenas con auxilio de la fuerza pública. Ahora bien, como ya se vio, el art.7
LBN establece que cuando el plan de manejo considere la corta o explotación de bosque que
tenga por objeto el ejercicio de servidumbres mineras, la solicitud de aprobación de dicho plan
debe ser suscrita por el titular de la servidumbre, quien será responsable del cumplimiento de
todas las obligaciones contenidas en él. Lo anterior, es sin perjuicio del cumplimiento de las
normas ambientales de la LBGMA.
Como se enunció al clasificar el bosque nativo, en este acápite cabe recordar la
prohibición del art.19 LBN, que prohíbe la corta, eliminación, destrucción o descepado del
bosque nativo de preservación, no así respecto de los otros bosques. Pero esta norma tiene una
contra excepción en su inc.2°, la cual establece que el bosque nativo de preservación se puede
intervenir en caso de que exista una autorización al respecto otorgada por la CONAF mediante
resolución fundada, siempre que las actividades no representen una amenaza para la
continuidad de la especie en cuestión, que estas actividades sean imprescindibles, y que sean de
carácter científico, sanitario u obras de desarrollo calificadas de “interés nacional”.
c) Acreditadores forestales. Una introducción novedosa en la LBN, es la presencia de
acreditadores forestales contemplados en el Título V, quienes sin perjuicio de las facultades de
CONAF, estarán habilitados para certificar:
i) Que los datos de los planes de manejo correspondan a la realidad;
ii) La correcta ejecución de las actividades comprometidas en el plan de manejo para obtener las
bonificaciones contempladas en el Fondo, respecto del cual nos referiremos a continuación.
4. Fondo de conservación, recuperación y manejo sustentable del bosque nativo. Conforme al art.22 y
ss. LBN, existirá un fondo concursable destinado a la conservación, recuperación o manejo
sustentable del bosque nativo, a través del cual se otorgará una bonificación destinada a
solventar el costo de determinadas actividades como por ejemplo i) aquellas tendientes a
favorecer la regeneración, recuperación o protección de formaciones xerófitas de alto valor
ecológico, ii) silvicultura dirigida a la obtención de productos no madereros, o destinada a
manejar y recuperar bosques nativos con fines madereros.
Asimismo, cabe hacer referencia al art.42 LBN que establece, respecto de los recursos
para la investigación en el bosque nativo, que la Ley de Presupuestos un fondo anual especial
destinado a la investigación, cuya finalidad será promover e incrementar los conocimientos de
los ecosistemas forestales nativos, sin perjuicio de los aportes privados que puedan
complementarlo.
5. Delitos y sanciones.

14
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

a) La LBN contempla los siguientes delitos, cuyo conocimiento será sometido a los Jueces
de Garantía o de los Tribunales de Juicio Oral, según corresponda, con competencia en el lugar
donde se realizó el hecho punible:
i) El acreditador que certificare un hecho falso o inexistente (art.40 LBN);
ii) El que presentare o elaborare un plan de manejo basado en certificados falsos o que acrediten un
hecho inexistente, a sabiendas de tales circunstancias (art.49 LBN);
iii) El que, con el propósito de acogerse a las bonificaciones establecidas en la LBN, hubiere presentado a
sabiendas, un plan de manejo basado en antecedentes falsos, distintos de los señalados en el art.49 citado
(art.50 LBN).
b) Infracciones, todas las demás serán conocidas por los jueces de policía local, previa
denuncia de los funcionarios de CONAF o de Carabineros de Chile.
6. Conclusiones relevantes.
a) La LBN clasifica el bosque nativo en: de preservación, conservación y protección; o
de uso múltiple.
b) La explotación de los bosques está permitida previa aprobación del plan de manejo
forestal respectivo.
c) Lo anterior, sin perjuicio que está prohibida toda explotación que contemple la corta,
eliminación, destrucción o descepado del bosque nativo calificado de preservación (art.19
LBN).
D/ LEY Nº 18.362, DE 1984. LEY DEL SNASPE.
1. Antecedentes generales y objetivos. Con el fin de conservar las áreas naturales ubicadas
dentro del territorio nacional, en 1984 se creó el Sistema Nacional de Áreas Silvestres
Protegidas del Estado (SNASPE) por medio de la dictación de la Ley Nº18.362.
Según el art.1º de la referida Ley, el SNASPE tiene los siguientes objetivos de
conservación:
a) Mantener áreas de carácter único o representativas de la diversidad ecológica natural del país o
lugares con comunidades animales o vegetales, paisajes o formaciones geológicas naturales, a
fin de posibilitar la educación e investigación y de asegurar la continuidad de los procesos
evolutivos, las migraciones animales, los patrones de flujo genético y la regulación del medio
ambiente.
b) Mantener y mejorar recursos de la flora y la fauna silvestre y racionalizar su utilización.
c) Mantener la capacidad productiva de los suelos y restaurar aquellos que se encuentren en peligro o en
estado de erosión.
d) Mantener y mejorar los sistemas hidrológicos naturales.
e) Preservar y mejorar los recursos escénicos naturales y los elementos culturales ligados a un ambiente
natural.
Cabe señalar, desde un punto de vista legal e institucional, que la Ley Nº18.362, que
constituye el SNASPE, no se encuentra vigente, ya que ésta depende de la entrada en vigencia
de otra ley, la Nº18.348, que aún no rige, que establece la institucionalidad pública encargada
de su administración. La actual Corporación Nacional Forestal, CONAF, si bien es el

15
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

organismo de administrar el SNASPE, es una corporación de derecho privado con


atribuciones propias de un organismo público, por tanto, no se trata de un órgano público
propiamente tal, como se verá detalladamente en el siguiente capítulo.
2. Categorías de manejo del SNASPE. La siguiente clasificación del SNASPE, en categorías
de manejo, responde a las actividades que se pueden realizar dentro de ellas:
a) Reserva de Región Virgen. Se trata de un área donde existen condiciones primitivas
naturales de flora, fauna, vivienda y comunicaciones, con ausencia de caminos para el tráfico
de vehículos motorizados y vedada a toda explotación comercial. Su objetivo es mantener
dichas reservas inviolables, excepto para la investigación científica debidamente autorizada y
para la inspección por parte de CONAF, o para otros fines acorde al objetivo de la creación de
la respectiva reserva.
b) Parque Nacional. Generalmente es un área extensa donde existen ambientes únicos o
representativos de la diversidad ecológica natural del país, que no se encuentran alterados
significativamente por la acción humana, capaces de auto-perpetuarse, y donde la flora, la
fauna y las formaciones geológicas son de especial interés educativo, científico o recreativo. Su
objetivo es la preservación de dichos ambientes, y de los rasgos culturales y escénicos
asociados a ellos, permitiéndose la realización de actividades mientras sea compatible con
dichos fines.
c) Monumento Natural. Se trata de un área reducida, caracterizada por la presencia de
especies nativas de flora y fauna o por la existencia de sitios geológicos relevantes desde el
punto de vista escénico, cultural, educativo y científico. El objetivo de los monumentos es el
mismo de los parques nacionales, diferenciándose sólo en cuanto a la extensión de terreno que
abarcan.
d) Reserva Nacional. Son áreas en las cuales es necesario conservar los recursos naturales y
utilizarlos con especial cuidado por la susceptibilidad de estos a sufrir degradación o por su
importancia para el resguardo de la autoridad. El objetivo es la conservación y protección del
suelo y de las especies amenazadas de fauna y flora silvestres, la mantención o mejoramiento
de la producción hídrica y el desarrollo y aplicación de tecnologías de aprovechamiento
racional de la flora y la fauna.
3. Rol de la CONAF en el SNASPE: Desarrolla un papel de tuición respecto al patrimonio
forestal, por lo que debe participar o colaborar en la administración y desarrollo de Parques
Nacionales, Reservas Forestales y Bosques Fiscales.
VI. CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO ESPECIAL
1. Reclamación. Si la CONAF denegare en todo o en parte el Plan de Manejo para la
explotación de bosques nativos, el particular podrá reclamar de aquélla ante el juez de letras en
lo civil del territorio jurisdiccional en que estuviere situado el inmueble. Si el predio se
encontrare ubicado en más de un territorio jurisdiccional, será competente el juez de cualquiera
de ellos. El reclamo deberá interponerse dentro del plazo de 30 días contado desde la fecha de
expedición de la carta certificada mediante la cual la Corporación notifique el rechazo. Se
tendrá para todos los efectos como domicilio del afectado aquél indicado en la solicitud. El
tribunal conocerá del reclamo en conformidad a las reglas del procedimiento incidental, en
única instancia y sin ulterior recurso, oyendo a las partes afectadas. Podrá exigir un peritaje
técnico, cuando lo estime necesario. La sentencia deberá pronunciarse, en todo caso, dentro
del plazo de 60 días, contado desde la interposición del reclamo (Decreto Ley 701/1974).

16
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

BIBLIOGRAFÍA
Referencias bibliográficas
BARRERA GARCÍA, Genaro (1942): “La concesión forestal”. Tesis. México. 63 pp.
BERTELSEN REPETTO, Raúl:”Informe en derecho: facultades de Conaf y contaminación de aguas de un
lago”. En Revista Chilena de Derecho. Vol. 19 Nº 3. Pp. 549-573.
COMITÉ NACIONAL PRO DEFENSA DE LA FLORA Y LA FAUNA (1999): “Las Áreas silvestres
protegidas privadas en Chile. Una herramienta para la conservación”. 101 pp.
CURTZE PINNINGHOFF, Gracia (1995): “Legislación sobre fomento forestal”. Tesis. Santiago, Chile.
181pp.
CHAIN SAID, Fuad A. (1955): “Los organismos del estado y su coordinación frente al desarrollo de las
industrias forestales”.
GARRIDO PAULET, Rolando (1962): “Reforma económica y jurídica para el desarrollo de la producción
forestal”. Tesis. Santiago, Chile. 179 pp.
HONORATO DUMAY, Max (1982): “Objetivos de la legislación forestal en el derecho comparado”. Tesis.
Santiago, Chile. 223 pp.
LÓPEZ RAMÓN, Fernando (1995): “Régimen jurídico de los espacios naturales protegidos”. Zaragoza,
Editorial Kronos. 232 pp.
MOLINA BUSTOS, Adrián (1939): “Política y legislación forestal”. Concepción, Chile, Imprenta
Valparaíso.87 pp.
SHEPPARD, Hale E.: “Certificación forestal: un mecanismo de mercado para la protección de los bosques
chilenos. En Revista Chilena de Derecho. Vol. 27 Nº 1 pp. 103-133.
WELDT B., Víctor R. (1958): “Legislación forestal chilena”. Tesis. Santiago Chile. 76 pp.
Normas citadas
Ley Nº4.363, Ley de bosques. Diario Oficial 31 julio 1931.
Decreto Ley Nº2565. Sustituye el Decreto Ley Nº701, de 1974, que somete terrenos forestales
a las disposiciones que señala. Diario Oficial 3 abril 1979.
Ley Nº18.362. Crea un sistema nacional de áreas silvestres protegidas del Estado. Diario Oficial
27 diciembre 1984.
Ley Nº20.283. Ley sobre recuperación del bosque nativo y fomento forestal. Diario Oficial 30
julio 2008.
Reglamento General ley sobre recuperación del bosque nativo y fomento forestal. Diario Oficial
26 noviembre 2008.
Reglamento del fondo de conservación, recuperación y manejo sustentable del Bosque nativo.
Diario Oficial 26 noviembre 2008.
Reglamenta los recursos destinados a la investigación del bosque nativo. Diario Oficial 26
noviembre 2008.
Referencias de Jurisprudencia

17
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

Corporación Nacional Forestal con Gastón Mujica Mujica (1987): Corte Suprema 5 de enero de 1987.
Rol 3851.Legal Publishing. Nº 10051.
Sociedad Comercial Malleco S.A. con Corporación Nacional Forestal CONAF (1988): Corte Suprema 9
de agosto de 1988. Rol 12930-1988. Legal Publishing. Nº 21809.
Matías Sánchez Molina con Jefe provincial de la Corporación Nacional Forestal VII Región; Corporación
Nacional Forestal (1990): Corte Suprema 10 de abril de 1990. Rol 44371-1990. Legal
Publishing. Nº 21833.
Corporación Nacional Forestal con Jovina Riquelme Burdiles (1992): Corte Suprema 29 de abril de
1992. Rol 4009. Legal Publishing Nº 11841.
Sociedad Agrícola Ganadera y Forestal La Cruces Limitada con Corporación Nacional Forestal (1993):
Corte Suprema 2 de septiembre de 1993. Rol 21519. Legal Publishing Nº 12519.
Mario Arnoldo García Sabugal con Jefe Provincial de la Corporación Nacional Forestal de Temuco (1994):
Corte Suprema 8 de septiembre de 1994. Rol 22327-1994. Legal Publishing Nº 22763.
Echavarri Peña. José Antonio con (1995): Corte Suprema 18 de enero de 1995. Rol 31049. Legal
Publishing Nº 13342.
Gisela Alejandra Bugman Burzio con Jefe Provincial Osorno de la Corporación Nacional Forestal (1995):
Corte Suprema 25 de marzo de 1995. Rol 2452. Legal Publishing. Nº 13384.
Cecilia Alejandra Navarro Agüero con Director Regional de Corporación Nacional Forestal de la Región de
Aysén (1998): Corte Suprema 27 de mayo de 1998. Rol 994-1998. Legal Publishing Nº
15249.
Juan Chiguay Haro con Corporación Nacional Forestal (2001): Corte Suprema 26 de abril de 2001.
Rol 1371-2001. Legal Publishing Nº 18445.
Corporación Nacional Forestal CONAF con Salazar Marchant Juan (2001): Corte Suprema 23 de
mayo de 2001. Rol 4939-2000. Legal Publishing Nº 18746.
Manuel Roberto Díaz Valdés con Servicio de Impuestos Internos (2003): Corte Suprema 12 de junio de
2003. Rol 511-2003. Legal Publishing Nº 26452.
Corporación Nacional Forestal con Irma Macarena Comas Barra; Patricio Barra Olivares (2004): Corte de
Apelaciones de Valparaíso. Rol 18953-2001. Legal Publishing. Nº 29905.

18
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

§ 8. DERECHO ADMINISTRATIVO DEL MEDIO AMBIENTE.

I. EL HECHO JURÍDICO.
Si bien, en primer término, podemos ubicar al derecho del Medio Ambiente o Derecho
Ambiental, integrando el Derecho Administrativo Económico, este no es fácil de caracterizar
por diversos motivos. En primer lugar, al ser una disciplina relativamente nueva dentro del
mundo del Derecho y cuyo desarrollo ha ido de la mano de contingencias políticas y
especialmente movimientos sociales y culturales, carece, a lo menos en Chile, de un desarrollo
doctrinario que permitan definir con precisión sus fronteras, independizándola. Sin embargo, la
tarea ya se ha iniciado, especialmente a partir de la publicación y entrada en vigencia de la Ley
N°19.300 de Bases Generales del Medio Ambiente (LBGMA) que constituye un marco general
para la regulación vinculada con este sector.
En un primer acercamiento, se debe advertir que el derecho a vivir en un medio
ambiente libre de contaminación pertenece a los llamados derechos humanos de tercera
generación, que son aquellos que la doctrina identifica como los que el hombre posee por el
hecho de vivir en sociedad. Pero, esta categoría tomada del derecho constitucional, no resulta
del todo adecuada para caracterizar su contenido administrativo y, por lo demás, aunque este
derecho está garantizado en la Constitución (art.19 Nº8 CPR) su contenido sustantivo
tampoco es fácil de definir.
Nos referimos aquí al bien jurídico medio ambiente libre de contaminación y no a
calidad de vida. La intervención administrativa en esta materia, hay que limitarla entonces a la
regulación de las conductas que puedan afectar significativamente al medio ambiente y no a
cualquier actividad que produzca un malestar. Conforme a Eduardo Astorga, el Derecho
Ambiental es “un Derecho Administrativo Especial, cuyo objeto de regulación es el resguardo
de las funciones ambientales de los componentes ambientales, respecto de acciones humanas
que los puedan degradar significativamente”5.
Se trata de una disciplina que, además, cruza a buena parte de la actividad económica. De
allí que gran parte de las materias de medio ambiente se encuentran en conexión con otras
disciplinas del Derecho Administrativo Económico, como el Derecho de Aguas, Minas,
Bosques, etc. y en donde tienen presencia otras facultades regulatorias e incluso sancionatorias,
propias de la Administración.
La ley de Bases Generales del Medio Ambiente (LBGMA) vino a concretizar la garantía
fundamental consagrada en el art.19 Nº8 CPR, garantizada además mediante el recurso de
protección (art.20 inc.2º CPR). Esta ley ofrece un marco para el Derecho Ambiental
estableciendo una institucionalidad determinada, dotando al ordenamiento de herramientas de
gestión y dándole un contenido normativo a los conceptos técnico-científicos tan propios de
las materias ambientales.
Lo último es una característica muy propia al derecho ambiental: la ineludible necesidad
de esta disciplina de apropiarse de conceptos pertenecientes a las ciencias naturales, como
serían por ejemplo el de medio ambiente, ecosistema, contaminación etc., dándoles un
contenido normativo. Así el medio ambiente libre de contaminación, no será el químicamente
puro sino el que se ajusta, en materia de cantidad de contaminantes, a la norma legal. Para

5
ASTORGA (2006) p.2.

19
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

dotar de un contenido jurídico a estos conceptos es necesario además adecuarlos a la realidad


ecológica, de modo que resulte de ello en una verdadera protección al medio ambiente y no
meras declaraciones de intención o normas programáticas. No hay que olvidar que son las
relaciones del hombre con la naturaleza las que debe y puede reglar el Derecho; el medio
ambiente en sí mismo es objeto de las ciencias naturales y no de la ciencia derecho.
II. MARCO REGULATORIO: FUENTES DEL DERECHO AMBIENTAL EN
CHILE.
1. Constitución Política de la República (CPR): Su art.19 señala “La Constitución asegura a
todas las personas: Nº 8. El derecho a vivir en un medio ambiente libre de contaminación. Es
deber del estado velar para que este derecho no sea afectado y tutelar la preservación de la
naturaleza.
La ley podrá establecer restricciones específicas al ejercicio de determinados derechos o
libertades para proteger el medio ambiente.”
A su vez, el art.20 inc.2º CPR, que consagra el recurso de protección, señala que
“Procederá, también, el recurso de protección en el caso del Nº 8º del artículo 19, cuando el
derecho a vivir en un medio ambiente libre de contaminación sea afectado por un acto u
omisión ilegal imputable a una autoridad o persona determinada”.
2. Legislación sectorial ambiental:
a) Ley de Bases Generales del Medio Ambiente 19.300 de marzo del año 1994 (LBGMA). Esta
norma constituye el primer y único intento por dotar a nuestro sistema jurídico de una
legislación sectorial integral. Su gestación obedeció por un lado a la necesidad de dotar al país
de una legislación ambiental suficiente para afrontar el desarrollo económico experimentado
durante la segunda mitad del siglo XX, dándole sustento normativo a la garantía constitucional
del art.19 Nº8 CPR, y por otro lado a la implementación de variados tratados internacionales
relativos al medio ambiente, que habían sido suscritos por nuestro país, en particular a la
declaración de Rio (1992).
Cabe mencionar que la LBGMA sufrió su primera gran modificación a principios del
año 2010, con la dictación de la ley 20.417 que vino a modificarla en gran parte, en particular lo
que respecta a la institucionalidad ambiental. Así esta nueva ley da origen al Ministerio del
Medio Ambiente sustituyendo a la Comisión Nacional del Medio Ambiente (CONAMA) y al
Servicio de Evaluación Ambiental quien asume como la encargada de administrar el Sistema de
Evaluación de Impacto Ambiental, reemplazando en este rol a las Comisiones Regionales del
Medio Ambiente (COREMAS).
Objetivos de la ley de bases:
i) Dar contenido concreto a la garantía constitucional del derecho a vivir en un medio ambiente libre de
contaminación.
ii) Crear una institucionalidad ambiental.
iii) Crear instrumentos eficientes de gestión ambiental.
iv) Servir de referente a la legislación ambiental posterior.
b) Reglamento del Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental, DS Nº95 del Ministerio Secretaría
General de la Presidencia, del 2001(RSEIA). Es fundamental para la vigencia y aplicación del
Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental.

20
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

c) Ley 20.417 de 26 de Enero de 2010, artículo segundo: LOC de la Superintendencia de


Medioambiente (LOCSMA). Además de las modificaciones realizadas a la LBGMA que ya
mencionamos y profundizaremos al analizar la institucionalidad ambiental, esta ley crea la
Superintendencia de Medio Ambiente.
3. Normas ambientales dispersas en otros cuerpos normativos, tales como el Código de Minería
(Ej. art.17), Aguas (Ej. art.129 bis 1) y Sanitario (Ej. art.67).
III. PRINCIPIOS JURÍDICOS DEL DERECHO MEDIOAMBIENTAL.
1. Generalidades: Nuevos Aportes LBGMA, La LBGMA sólo en sus primeros artículos
establece algunos cánones generales atinentes a la regulación medioambiental, ya que buena
parte de ella, está dedicada al procedimiento de aplicación del instrumento con el que persigue
prevenir el daño al medio ambiente, esto es, el SEIA.
a) El Art. N°1 establece el marco genérico sobre el cual la Ley rige:
i) Derecho a vivir en un ambiente libre de contaminación.
ii) Protección del Medio Ambiente.
iii) Preservación de la Naturaleza.
iv) Conservación del Patrimonio Ambiental.
La consecución de estos objetivos, hasta antes de la dictación de la Ley, se encontraba en
manos de distintos órganos sectoriales con competencias dispersas y hasta encontradas. La
entrada en vigencia de la LGBMA abrió una ventana de esperanza de solución para esta
regulación caótica. Sin embargo, al no derogarse las potestades contenidas en la legislación
sectorial, éstas permanecieron vigentes, agregándose una nueva regulación y no disminuyendo
ni coordinando efectivamente la existente. Ha sido en el proceso de aplicación de la LBGMA
que se han ido medianamente coordinando algunas materias y en la que aún se lamenta un
importante trabajo de sistematización y coordinación.
b) El Art. N°2 entrega una serie de conceptos generales y técnicos. Estos términos
también han sido criticados por la doctrina, ya que en la mayoría de los casos se trata de
conceptos jurídicos indeterminados que, aunque complementados con el RSEIA, no ofrece la
claridad suficiente, dejándose a la interpretación de la autoridad y del juez su definición.
c) El Art. N°3 señala que el que culposa o dolosamente cause daño al Medio Ambiente,
estará obligado a reparar a su costo y además a indemnizar. Este artículo consagra el principio
de Responsabilidad, o sea el que causa el daño debe responder, pero esta responsabilidad tiene
dos expresiones:
i) El que está contaminando debe asumir los costos técnicos de no contaminar (Principio Contaminador
Pagador).
ii) Si ha causado daño, debe repararlo.
d) El Art. N°4 se recoge el principio de la Participación, y además se establecen dos
instrumentos de gestión ambiental de gran importancia:
i) Participación ciudadana.
ii) Educación ambiental.

21
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

Asimismo, la LOCSMA modificó este art.4 LBGMA, incorporando el deber de los


órganos del Estado de propender, a través de la protección ambiental y los instrumentos de
gestión ambiental, a la conservación, desarrollo y fortalecimiento de los pueblos originarios y
sus manifestaciones sociales y culturales.
e) El Art. N°5 señala que la autoridad no puede establecer diferencias arbitrarias al
momento de proteger el medio ambiente. Se trata de un principio general que informa la
Administración, que aquí se traduce en que la protección al medio ambiente no puede ser
excusa de el empleo de potestades discrecionales en forma injusta e irrazonables.
2. Principios Doctrinarios (que informan la Ley de Bases Generales del Medio Ambiente).
a) Principio Preventivo (art.10 LBGMA y Principio 15 Declaración de Rio). Este principio
se construye en torno a una realidad, y es que el conocimiento científico disponible y la
complejidad de los sistemas ecológicos, impiden tener una certeza absoluta respecto de la
evolución futura de los riesgos ambientales. En este entendido se asume que los instrumentos
de gestión ambiental más idóneos son los que se aplican anticipadamente.
Son manifestaciones de este principio los siguientes instrumentos: SEIA (Sistema de
evaluación de impacto ambiental); Evaluación Ambiental Estratégica; Planes de prevención
para zonas latentes; Planes de descontaminación para zonas saturadas; Responsabilidad por
daño ambiental y la educación ambiental.
b) Principio Participativo (art.4, 7 ter, 14, 26, 29, 30 bis, 31, 70 y 81 LBGMA). Este principio
está contenido en el Mensaje del Proyecto de la LGBMA, señalándose que “…es de vital
importancia en el tema ambiental, puesto que para lograr una adecuada protección del medio
ambiente se requiere la concurrencia de todos los afectados en la problemática ambiental”. Se
consagra en los Instrumentos Internacionales que persiguen que la ciudadanía participe en
todos los niveles de los diversos procesos ambientales en el país. Tiene también aplicación
práctica a propósito del Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental, ya que, según veremos
más adelante, la ciudadanía tiene participación directa en la tramitación de aquellos proyectos
sometidos al SEIA.
La idea es que sea la comunidad tanto local, regional como nacional, la que pueda
aportar ideas o plantear reclamos en los diversos procedimientos, llamando la atención de
posibles riesgos de variada gravedad y extensión. Ello lleva aparejado un deber de información
a los particulares a fin de que tengan acceso a las resoluciones que se dicten en los respectivos
expedientes.
c) Principio de la Eficiencia (art.2 m bis y 45 LBGMA). Consiste en racionalizar los costos y
efectividad de las medidas que puedan adoptarse en materia medioambiental, de tal modo, que
éstas resulten efectivas al menor costo posible, empleando las herramientas técnicamente más
adecuadas.
d) Principio “El Que Contamina Paga” (art.45 LBGMA y Principio 16 Declaración de Rio).
Este principio busca que no sea la sociedad la que pague los costos de las actividades
particulares que provocan daño al medioambiente, sino que sean los particulares lo que
incorporaren dentro de sus costos de producción todas las inversiones necesarias para evitar la
contaminación.
No significa que puedo pagar para contaminar, sino que se internalicen los costos de
prevención en la actividad para evitar el daño medioambiental. Así, la inversión tecnología
sustentable o limpia es absorbida por el agente contaminador y no por la ciudadanía.

22
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

Instrumentos: Amplias potestades fiscalizadoras, hoy en manos de la Superintendencia


del Medio Ambiente, Planes de prevención y de descontaminación soportados por los
responsables de contaminar.
e) Principio de la Responsabilidad (art.3, Título III LBGMA). Conforme al Mensaje del
Proyecto de la LGBMA, “…se pretende que los responsables por los daños ambientales
reparen a sus víctimas de todo daño. Además, se busca reparar materialmente el daño causado
al medio ambiente, obligando al causante del daño a restaurar el paisaje deteriorado”.
Es decir, se busca, en la medida de lo posible reparar el daño ambiental efectivamente
causado; e indemnizar los perjuicios que ese daño pudo haber provocado en las personas. Este
principio se manifiesta también en el deber de la autoridad de prevención y de
descontaminación por la vía de la regulación. Además, se expresa en el deber de
responsabilidad de la ciudadanía en materia medioambiental lo que se traduce en una
presunción de culpabilidad de quienes contaminan con infracción a la normativa legal o
reglamentaria del sector.
Instrumentos: Acción ambiental, Acción indemnizatoria civil y Sanciones
administrativas.
III. CONCEPTOS BÁSICOS EN MATERIA AMBIENTAL.
El art.2º LBGMA, ha venido a definir (jurídicamente) una serie de conceptos claves en
materia medioambiental. Entre estos conceptos encontramos los siguientes:
1. Contaminación (concepto normativo). “Presencia en el ambiente de sustancias, elementos,
energía o combinación de ellos, en concentraciones y permanencia superiores o inferiores,
según corresponda a las establecidas en la legislación vigente” (art.2 c) LBGMA).
2. Impacto Ambiental. “La alteración del medio ambiente provocada directa o
indirectamente por un proyecto o actividad en un área determinada” (art.2 k) LBGMA).
3. Daño Ambiental. “Toda pérdida, disminución, detrimento o menoscabo significativo
inferido al medio ambiente o a uno o más de sus componentes” (art.2 e) LBGMA).
4. Evaluación Ambiental Estratégica. “El procedimiento realizado por el Ministerio sectorial
respectivo, para que se incorporen las consideraciones ambientales del desarrollo sustentable,
al proceso de formulación de las políticas y planes de carácter normativo general, que tengan
impacto sobre el medio ambiente o la sustentabilidad, de manera que ellas sean integradas en la
dictación de la respectiva política y plan y sus modificaciones sustanciales” (art.2 i bis)
LBGMA).
5. Evaluación de Impacto Ambiental. “El procedimiento a cargo del Servicio de Evaluación
Ambiental, que, en base a un Estudio o Declaración de impacto Ambiental, determina si el
impacto ambiental de una actividad o proyecto se ajusta a las normas vigentes” (art.2 j)
LBGMA).
6. Medio ambiente (concepto normativo). “Sistema Global constituido por elementos naturales
y artificiales de naturaleza física química o biológica, socioculturales y sus interacciones, en
permanente modificación por la acción humana o natural y que rige y condiciona la existencia y
desarrollo de la vida en sus múltiples manifestaciones” (art.2 ll) LBGMA).
7. Medio Ambiente libre de contaminación (concepto normativo). “Aquel en el que los
contaminantes se encuentran en concentraciones y periodos inferiores a aquellos susceptibles

23
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

de constituir un riesgo a la salud de las personas, a la calidad de vida de la población, a la


preservación de la naturaleza, o a la conservación del patrimonio ambiental” (art.2 m)
LBGMA).
8. Normas de calidad ambiental. Establecen los valores de concentraciones permisibles de
elementos cuya presencia o carencia en el ambiente, pueda constituir un riesgo para la vida o
salud de la población (primarias) o para la protección o conservación del medio ambiente
(secundarias) (art.2 n) y ñ) LBGMA).
9. Normas de Emisión. Son “las que establecen la cantidad máxima permitida para un
contaminante, medida en el efluente de la fuente emisora” (art.2 o) LBGMA).
IV. INSTITUCIONALIDAD AMBIENTAL.
Con anterioridad a la reforma del año 2010, la cabeza de la institucionalidad ambiental en
nuestro país estaba constituida por la Comisión Nacional del Medio Ambiente (CONAMA),
que estaba compuesta a su vez por una serie de órganos, a saber:
1. El Consejo Directivo.
2. El Ministro Presidente de la CONAMA.
3. La Dirección Ejecutiva.
4. Las Comisiones Regionales del Medio Ambiente.
5. El Consejo Consultivo Nacional.
6. El Consejo Consultivo Regional.
7. El Comité Técnico.
La principal función desempeñada por la CONAMA era la administración del SEIA, sin
perjuicio de lo cual la ley le asignaba otras tareas como la proposición de política ambientales al
Presidente de la República y el mantenimiento de un sistema de nacional de información
nacional.
La entrada en vigencia de la LOCSMA, vino a modificar el escenario institucional en
materia de medio ambiente, creándose 4 órganos encargados de la gestión ambiental en Chile:
el Ministerio del Medio Ambiente, el Consejo de Ministros para la Sustentabilidad, el Servicio
de Evaluación Ambiental y la Superintendencia del Medio Ambiente. A los ya mencionados,
deben sumarse también los Tribunales Ambientales, respecto del cual existen referencias tanto
en la LBGMA como en la LOCSMA, pero que todavía no ha sido creado por ley6.
Entonces, con la entrada en vigencia de la nueva ley, las competencias en materia
ambiental quedaron repartidas como lo muestra el siguiente esquema:
REGULACIÓN  MINISTERIO M.A.
GESTIÓN  SERVICIO DE EVALUACIÓN AMBIENTAL.
FISCALIZACIÓN  SUPERINTENDENCIA M.A.
De esta forma, las atribuciones que anteriormente eran conferidas por la LBGMA a la
CONAMA, luego de la reforma, se reparten y perfeccionan entre estas 4 nuevas instituciones y

6
El proyecto de ley que crea el tribunal ambiental ingreso para su discusión el 3 de noviembre de 2009 y
actualmente se encuentra en tramitación. (Boletín Nº6747-12).

24
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

sus órganos dependientes. Cabe señalar que el Ministerio del Medio Ambiente y el Servicio de
Evaluación Ambiental son los sucesores legales de la CONAMA en las materias de su
competencia, y las menciones que se realicen en la legislación general a ella, deben ser
entendidas como hechas a una de las dos primeras según corresponda (art.3 LOCSMA).
A continuación ofrecemos una breve descripción de la conformación y potestades de
cada uno de los órganos que mencionamos anteriormente.
1. Ministerio del Medio Ambiente (art.69, 70, 74 y 75 LBGMA). Según lo establece el art.69
LBGMA, su principal función es “colaborar con el Presidente de la República en el diseño y
aplicación de políticas, planes y programas en materia ambiental, así como en la protección y
conservación de la diversidad biológica y de los recursos naturales renovables e hídricos,
promoviendo el desarrollo sustentable, la integridad de la política ambiental y su regulación
normativa”.
a) Funciones en particular. Aparte de la anterior, el art.70 LBGMA detalla una serie de
facultades atribuidas a dicho ministerio. De ellas destacamos las siguientes:
i) Proponer las políticas ambientales e informar periódicamente sobre sus avances y
cumplimientos (art.70 a) LBGMA).
ii) Velar por el cumplimiento de las convenciones internacionales, en que Chile sea parte en materia
ambiental. El Ministerio ejercerá como contraparte técnica, científica o administrativa en
materia de tratados o convenios (art.70 d) LBGMA).
iii) Colaborar con las autoridades competentes a nivel nacional, regional y local en la preparación,
aprobación y desarrollo de programas de educación, promoción y difusión ambiental, orientados a la
creación de una conciencia nacional, y también promover la participación ciudadana en estas
materias (art.70 m) LBGMA).
iv) Coordinar el proceso de generación de las normas de calidad ambiental, de emisión y de planes de
prevención y/o descontaminación (art.70 n) LBGMA).
v) Interpretar administrativamente las normas de calidad ambiental y de emisión, los planes de
prevención y/o de descontaminación. El Ministerio podrá, además, uniformar los criterios de
aplicación y aclarará el sentido y alcance de las normas de calidad ambiental y de emisión,
cuando observe discrepancias o errores de interpretación (art.70 o) LBGMA). Debe hacerse la
prevención de que esta facultad no incluye la interpretación de las Resoluciones de Calificación
Ambiental (RCA), dicha labor está encomendada específicamente al Servicio de Evaluación
Ambiental.
vi) Fomentar y facilitar la participación ciudadana en la formulación de políticas y planes,
normas de calidad y de emisión, en el proceso de evaluación ambiental estratégica de las
políticas y planes de los ministerios sectoriales (art.70 y) LBGMA).
b) Composición del Ministerio: (art.74 LBGMA).
i) Ministro del Medio Ambiente.
ii) Subsecretario.
iii) Divisiones. Su distribución temática es entregada a un reglamento, pero la ley señala 6
materias mínimas en que se dividirá el Ministerio.
iv) SEREMIS del Medio Ambiente.

25
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

v) Consejo Consultivo Nacional y Consejos Regionales.


1) El Consejo Consultivo Nacional. Está regulado en los arts.76 y ss. LBGMA y tanto éste
Consejo como los Consejos Consultivos Regionales ya existían con anterioridad a la reforma
del año 2010.
Con este órgano se ha pretendido crear un mecanismo de participación de la comunidad
en el tema ambiental, con la participación de profesionales, representantes de los trabajadores,
del empresariado y de ONGs, entre otros. Sus integrantes son nombrados por el Presidente de
la República.
El art.77 LBGMA establece que “corresponderá al Consejo Consultivo absolver las
consultas que le formule el Ministerio del Medio Ambiente y el Consejo de Ministros para la
Sustentabilidad, emitir opiniones sobre los anteproyectos de ley y decretos supremos que fijen
normas de calidad ambiental, de preservación de la naturaleza y conservación del patrimonio
ambiental, planes de prevención y de descontaminación, regulaciones especiales de emisiones y
normas de emisión que les sean sometidos a su conocimiento. Asimismo, podrá pronunciarse,
de oficio, sobre temas ambientales de interés general...”.
2) Los Consejos Consultivos Regionales. Se encuentra regulado en el art.78, el nombramiento
de sus integrantes corresponde al Intendente, a proposición de la respectiva organización.
La función de estos consejos es absolver las consultas que le formulen el Intendente, el
Gobierno Regional y el Secretario Regional Ministerial del Medio Ambiente. Asimismo,
podrán pronunciarse, de oficio, sobre temas ambientales de interés general y ejercer todas las
demás funciones que les encomienden el Ministerio y la ley (art.78 inc. final).
2. Consejo de Ministros para la Sustentabilidad (art.71 a 73 LBGMA). Este órgano fue obra de
la reforma a la LBGMA, y está integrado por los ministros de las siguientes carteras: Medio
Ambiente, quien preside el consejo; Agricultura; Hacienda; Salud; Economía; Fomento y
Reconstrucción; Energía, OO.PP.; Vivienda y Urbanismo; Transportes y Telecomunicaciones;
Minería y Planificación.
Se trata esencialmente de un organismo de deliberación de la política pública y regulación
ambiental. Sus funciones están detalladas en el art.71 LBGMA, destacándose las siguientes:
a) Proponer políticas para el manejo y aprovechamiento sustentable de recursos naturales no renovables, y
la adopción de criterios de sustentabilidad para ser incorporados en la planificación de los ministerios
y servicios asociados (art.71 a) y b) LBGMA)
b) Pronunciarse sobre los criterios y mecanismos en virtud de los cuales se deberá efectuar la participación
ciudadana en los procedimientos de resguardo ambiental (art.71 e) LBGMA).
c) Emitir pronunciamientos respecto de proyectos de ley o de actos administrativos que se presenten al
Presidente y que contengan normas de carácter ambiental (art.71 f) LBGMA).
Este consejo de ministros está obligado a sesionar a lo menos 2 veces al año (art.72
LBGMA) y si bien es orgánicamente independiente del Ministerio del Medio Ambiente, podrá
sesionar en dependencias del éste (art.73 LBGMA), quien debe proporcionar los medios
materiales necesarios para su adecuado funcionamiento. Asimismo, las resoluciones
pronunciadas por este consejo, adoptarán la forma de actos administrativos expedidos a través
del Ministerio de Medio Ambiente (art.73 inc.2 LBGMA). Por lo tanto vemos que en la
práctica existe una dependencia funcional del consejo para con el Ministerio.

26
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

Finalmente cabe señalar que la ley establece una disposición trascendental para el
funcionamiento práctico de este consejo, estableciendo el art.73 LBGMA que “los acuerdos
del Consejo de Ministros para la Sustentabilidad serán obligatorios para los organismos de la
Administración del Estado al cual estén dirigidos, incurriendo en responsabilidad
administrativa los funcionarios que no den cumplimiento a los mismos.” Con ello se le da una
real operatividad a dicho consejo, ya que no se consagra como un mero órgano consultivo,
sino que es un órgano de deliberación vinculante para el resto de la Administración del Estado.
3. Servicio de Evaluación Ambiental (art.80 a 88 LBGMA). Una de las principales críticas a la
regulación e institucionalidad ambiental, con anterioridad a la dictación de la LOCSMA (que
corresponde al art.2º de la ley Nº20.417), era la problemática generada por la multiplicidad de
permisos requeridos para la obtención de una autorización (Resolución de Calificación
Ambiental) a través del SEIA. Sucedía en la práctica que, aún cuando el SEIA fue ideado como
un sistema de “ventanilla única”, la obtención de permisos ante los más diversos órganos
sectoriales, muchas veces duplicados, suponía un gran obstáculo que dilataba largamente las
evaluaciones, retrasando innumerables proyectos con la consecuente pérdida económica y falta
de certeza jurídica que ello suponía.
Teniendo lo anterior en mente, es que se crea el Servicio de Evaluación Ambiental, con
el objetivo concreto de simplificar la “permisología” ambiental y de administrar el SEIA. Con
la creación de este servicio se persigue lograr una mayor eficiencia, separando la labor
regulatoria y de definición de políticas, que queda en manos del Ministerio, de la decisión sobre
la viabilidad ambiental de proyectos determinados.
Se trata de un servicio público funcionalmente descentralizado, con personalidad jurídica
y patrimonio propio, afecto al sistema de Alta Dirección Pública, y sometido a la
supervigilancia del Presidente de la República a través del Ministerio del M.A. (art.80
LBGMA). El servicio estará a cargo de un Director Ejecutivo y se desconcentra
territorialmente a través de las Direcciones Regionales de Evaluación Ambiental.
a) Competencias del Servicio. El art.81 LBGMA las establece y de entre ellas destacamos:
i) Administrar el SEIA (art.81 a) LBGMA).
ii) Uniformar criterios, requisitos, exigencias técnicas y procedimientos de carácter ambiental que
establezcan los ministerios u otros organismos del Estado, mediante el establecimiento de
guías trámites (art.81 d) LBGMA).
iii) Interpretar administrativamente las RCA (art.81 g) LBGMA).
iv) Fomentar y facilitar la participación ciudadana en la evaluación de proyectos (art.81 h) LBGMA).
4. Superintendencia del Medio Ambiente (art.2 Ley 20.417: LOC de la Superintendencia del
Medio Ambiente). Se trata de un órgano autónomo, servicio público, funcionalmente
descentralizado, con personalidad jurídica y patrimonio propio, que se relaciona con el
Presidente de la República por intermedio del Ministerio del Medio Ambiente (art.1
LOCSMA).
El objeto de la superintendencia es el de administrar un sistema integrado de
fiscalización ambiental (art.2 LOCSMA).
a) Instrumentos que fiscaliza. La superintendencia fiscalizara única y exclusivamente la
aplicación y cumplimiento de los siguientes instrumentos de gestión ambiental:

27
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

i) Resoluciones de calificación ambiental (RCA) (art.3 a) LOCSMA).


ii) Planes de descontaminación y prevención (art.3º b) LOCSMA).
iii) Normas de calidad y emisión (art.3º c) LOCSMA).
iv) Planes de manejo (art.3º c) LOCSMA).
Uno de los mayores problemas, anteriores al rediseño de la institucionalidad ambiental
era la multiplicidad de organismos con competencia en materias fiscalizadoras, lo que se
traducía en una excesiva carga para los particulares, quienes muchas veces se veían sometidos a
múltiples procedimientos fiscalizadores/sancionatorios por un mismo hecho, con lo que se
vulneraba constantemente los principios que rigen el derecho administrativo sancionatorio.
Por esta razón, la ley 20.417 concentró en la Superintendencia la potestad fiscalizadora
en materia ambiental, señalando expresamente que los organismos sectoriales con competencia
fiscalizadora en materia ambiental, conservarán dichas facultades respecto de aquellas que no
sean competencia de la Superintendencia. Adicionalmente, se establece que estos organismos
deberán obligatoriamente ceñirse a los criterios de fiscalización establecidos por la
superintendencia (art.2 inc.3 LOCSMA).
b) Sistemas de fiscalización. El nuevo modelo de fiscalización encabezado por la
Superintendencia, contempla tres sistemas diversos a través de los cuales se puede llevar a cabo
esta fiscalización:
i) Directo: Realizada por los funcionarios de la propia Superintendencia.
ii) Sectorial: Realizada por los organismos sectoriales que conserven potestades
fiscalizadores, siempre en conformidad con los programas de fiscalización definidos en
conjunto con la superintendencia (art.16 y 22 LOCSMA).
iii) Privada: Mediante la certificación realizada por privados debidamente acreditados, el
sistema de acreditación es manejado por la Superintendencia (art.3 c) y p) LOCSMA).
c) Sanciones que puede impartir la Superintendencia, facultad establecida en el art.3º o)
LOCSMA y se regulan en el Título III párrafo 2º de la misma ley, estas son (art.38 LOCSMA):
i) Amonestación por escrito.
ii) Multa de 1 a 10.000 UTA.
iii) Clausura temporal o definitiva.
iv) Revocación de la RCA.
Estas sanciones variarán según se trata de una infracción leve, grave, o gravísima en los
términos establecidos en el art.39 LOCSMA.
d) Recursos. Las sanciones impuestas por la superintendencia, deben ser resultado del
procedimiento sancionatorio establecido en los arts.47 y ss. LOCSMA, y son susceptibles de
reclamación por los siguientes recursos (Título III, párrafo 4º LOCSMA):
i) Recurso de Reposición, en sede administrativa, interpuesto ante la misma superintendencia
dentro de 5 días desde la notificación de la resolución (art.55 LOCSMA).
ii) Recurso de Reclamación, en sede Judicial, ante el Tribunal Ambiental correspondiente en
un plazo de 15 días (art.56 LOCSMA).

28
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

Finalmente, cabe tener presente que las facultades fiscalizadoras y sancionatorias de la


Superintendencia, sólo tendrán aplicación una vez que se haya dictado la ley que crea los
Tribunales Ambientales (art. Noveno transitorio Ley 20.417).
V. INSTRUMENTOS DE GESTIÓN AMBIENTAL.
La LBGMA establece una serie de herramientas sean normativas o procedimentales para
poder cumplir con sus objetivos, mencionados en el art.1 de la misma. Dentro de estos
instrumentos encontramos los siguientes:
A/ NORMAS DE CALIDAD AMBIENTAL.
Conocidas también como “estándares ambientales”, su función es fijar parámetros que
limiten en términos objetivos la calidad de un determinado medio receptor de emisiones, para
esto se fijan cantidades máximas de contaminantes admisibles, en una cuenca atmosférica, en
un determinado cuerpo o corriente de agua o cualquier otro tipo de sumidero receptor de
emisiones contaminantes.
Las normas de calidad se clasifican en primarias o secundarias según su objeto. Las
primeras están destinadas a proteger la vida o salud de la población, en cambio las segundas
velan por la protección y conservación del medioambiente.
Otra diferencia es que, atendido al objeto que tutelan, las normas primarias de calidad
tienen aplicación en todo el territorio nacional, puesto que atentaría contra una serie de
garantías constitucionales, entre ellos: art.1 inc.3, 19 Nº2, Nº8 y Nº9 CPR. A su turno las
normas secundarias pueden tener aplicación en un territorio determinado o bien en todo el
país.
Ambas normas se dictan mediante decreto supremo. Las primarias deberán contar con la
firma del ministerio de Salud, en tanto las secundarias contarán con la firma del ministro
sectorial respectivo. Estas normas serán revisadas por el Ministerio del Medio Ambiente cada 5
años (art.32 LBGMA).
1. Declaración de zona Saturada Latente y Saturada. A propósito de las normas de emisión y
relacionado con los planes de prevención y descontaminación, que se verán más adelante, la
autoridad está facultada para declarar mediante D.S. una determinada zona geográfica como:
a) Zona Latente: Aquella en que la medición de la concentración de contaminantes en el
aire, agua o suelo se sitúa entre el 80% y el 100% del valor de la respectiva norma de calidad
ambiental (art.2 t) LBGMA).
b) Zona Saturada: Aquella en que una o más normas de calidad ambiental se encuentran
sobrepasadas (art.2 u) LBGMA).
B/ NORMAS DE EMISIÓN.
Su objeto es fijar parámetros objetivos relativos a las emisiones permitidas para una
determinada fuente emisora. Operan como complemento a las normas de calidad, en cuanto
estas últimas fijan parámetros macro relativos a los medios receptores, y a su turno las normas
de calidad limitan el descargo de contaminantes de cada fuente, permitiendo llevar a cabo los
objetivos planteados por las primeras.
Las normas de emisión se enmarcan dentro de lo que se denomina doctrinariamente
como herramienta de regulación directa, ya que actúan directamente sobre la actividad o fuente

29
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

contaminante, en contraposición a herramientas de regulación indirectas como los ecotributos


o exenciones tributarias.
Las normas de emisión tienen aplicación en todo o parte del territorio nacional. Serán
obligatorias para todos aquellos agentes emisores que se emplacen dentro del territorio
señalado por la misma, por lo tanto quienes infrinjan las normas de emisión se exponen a la
fiscalización y sanciones que aplique la autoridad correspondiente.
En cuanto a su dictación se someterá al mismo procedimiento aplicable a las normas de
calidad ambiental (art.40 LBGMA).
C/ SISTEMA DE EVALUACIÓN DE IMPACTO AMBIENTAL (SEIA).
La LGBMA sólo en sus primeros artículos establece algunos cánones generales atinentes
a la regulación medioambiental, ya que buena parte de ella está dedicada al procedimiento de
aplicación del instrumento con el que persigue prevenir el daño al medio ambiente, esto es, el
SEIA.
El objetivo de la Evaluación de Impacto Ambiental, que se aplica tanto a proyectos o
actividades del sector público como privado, es asegurar que el desarrollo de sus actividades
sea sustentable desde el punto de vista del medio ambiente.
La LBGMA contempla que ciertos proyectos o actividades, susceptibles de causar
impacto ambiental, deberán someterse a un Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental. En
función de sus efectos, características o circunstancias, deberán presentar una Declaración de
Impacto Ambiental o un Estudio de Impacto Ambiental.
El SEIA debe entenderse como el conjunto de procedimientos que tienen por objeto
identificar y evaluar los impactos ambientales que un determinado proyecto o actividad
generará o presentará; permitiendo diseñar medidas que reduzcan los impactos negativos y
fortalezca los impactos positivos. Parte importante de estos procedimientos se sustenta en la
participación de los órganos de la Administración del Estado con competencia ambiental y/o
que otorgan permisos ambientales sectoriales vinculados con el proyecto o actividad.
La LBGMA radica en el Servicio de Evaluación Ambiental la responsabilidad de
implementar y administrar el Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental. En este esquema
institucional, corresponde al Director Ejecutivo del Sistema de Evaluación de Impacto
Ambiental, o a la Comisión Evaluadora, según corresponda (art.9 LBGMA), coordinar el
proceso de calificación de los Estudios de Impacto Ambiental (EIA) y revisión de las
Declaraciones de Impacto Ambiental (DIA), contando para ello con la activa participación de
los diversos órganos de la Administración del Estado con competencia ambiental.
Evaluación de Impacto Ambiental: “El procedimiento, a cargo del Servicio de Evaluación
Ambiental, que, en base a un Estudio o Declaración de Impacto Ambiental, determina si el
impacto ambiental de una actividad o proyecto se ajusta a las normas vigentes.” (art.2 j)
LBGMA)
1. Características generales del procedimiento administrativo del SEIA:
a) No discriminatorio, porque se aplica en iguales términos a los proyectos del sector
público y del sector privado (art.22 LBGMA y art.19 Nº21 CPR).
b) Transparente y público, porque se publica un extracto del proyecto en el Diario Oficial,
en un diario de circulación nacional o en un diario de circulación local (art.28 LBGMA).

30
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

c) Participativo, porque la regla general es que los procedimientos sean públicos (excepción
en el art.27 LBGMA). Además, tanto respecto de los estudios como respecto de las
declaraciones de impacto ambiental, se contemplan normas tendientes a asegurar la debida
participación de los ciudadanos que puedan resultar afectados por los proyectos que entran al
sistema (arts.26 a 31 LBGMA).
d) El procedimiento de Evaluación de Impacto Ambiental termina por una resolución de
carácter imperativo, la resolución de calificación ambiental (RCA) determina cuáles son los
derechos y cuáles son las obligaciones a las que debe someterse el titular del proyecto en la
ejecución de la misma. Jurídicamente la RCA es una autorización, en tanto remueve un
obstáculo para el ejercicio de un derecho que el particular posee con anterioridad (libre
ejercicio de actividades económicas), y en virtud de los organismos públicos correspondientes
están obligados a otorgar las autorizaciones pertinentes (art. 24 LBGMA).
e) Se busca un sistema de ventanilla única porque todos los permisos sectoriales que son
necesarios para llevar a cabo el proyecto se obtienen a través del SEIA con la resolución de
calificación ambiental favorable (art.8 inc.2 LBGMA).
2. Iniciación del procedimiento: Puede ser:
a) Obligatoria: cuando la actividad o proyecto que deseo desarrollar se encuentra en el
listado que nos da el art.10 LBGMA y el art.3 RSEIA. También las modificaciones que haga a
los proyectos que se encuentren en dichos artículos (art.11 ter LBGMA).
b) Voluntaria: cuando la actividad o proyecto no figura en el art. 10 LBGMA. Por el
hecho de ingresar voluntariamente, en forma automática se hacen aplicables todas las
disposiciones y normas del sistema.
Las tramitaciones, recursos y procedimientos en ambos casos son iguales.
3. Estudio o Declaración:
a) Se elabora un estudio de impacto ambiental cuando la actividad o proyecto puede causar
alguno de los efectos, características o circunstancias establecidos en el art.11 LBGMA.
Algunos ejemplos son:
i) Riesgo para la salud de la población, debido a la cantidad y calidad de efluentes, emisiones o
residuos (art.11 a) LBGMA).
ii) Efectos adversos significativos sobre la cantidad y calidad de los recursos naturales renovables,
incluidos el suelo, agua y aire (art.11 b) LBGMA).
iii) Reasentamiento de comunidades humanas, o alteración significativa de los sistemas de vida y
costumbres de grupos humanos (art.11 c) LBGMA).
iv) Alteración de monumentos, sitios con valor antropológico, arqueológico, histórico y, en general, los
pertenecientes al patrimonio cultural (art.11 f) LBGMA).
b) Se elabora una declaración de impacto ambiental cuando la actividad o proyecto no produce
ninguno de los efectos, características o circunstancias del art.11 LBGMA.
4. Organismo ante el que se presenta: El interesado es el que determina si en su proyecto va a
desarrollar un Estudio o Declaración de Impacto Ambiental la que se debe presentar (art.9
LBGMA).

31
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

a) En el evento que una actividad o proyecto produzca o genere impacto ambiental en dos o más regiones,
quien conocerá de la tramitación será la Director Ejecutivo del Servicio de Evaluación
Ambiental.
b) Cuando la actividad o proyecto genera impacto ambiental en una sola región y además en esa
misma región tiene establecidas sus obras materiales, conocerá la Comisión de Evaluación
respectiva.
c) En el evento que existan dudas sobre si debo presentar ante la Comisión Evaluadora o ante
o el Director Ejecutivo del Servicio de evaluación Ambiental, quien resolverá es el Director del
Servicio de Evaluación ambiental (art.9 inc.3 LBGMA).
5. Estudio de Impacto Ambiental. “El documento que describe pormenorizadamente las
características de un proyecto o actividad que se pretenda llevar a cabo o su modificación.
Debe proporcionar antecedentes fundados para la predicción, identificación e interpretación
de su impacto ambiental y describir la o las acciones que ejecutará para impedir o minimizar
sus efectos significativamente adversos” (art.2 i) LBGMA).
a) Tramitación. Se debe presentar ante la autoridad competente y al momento de
presentarse el estudio se debe presentar lo siguiente:
i) El estudio propiamente tal.
ii) Acompañar tantas copias como órganos del Estado con competencia ambiental deban pronunciarse.
iii) Acompañar un extracto del estudio.
Si la autoridad acepta la tramitación del estudio, la autoridad ordenará, junto con
notificarle la aceptación, la publicación del extracto (art.28 LBGMA).
El extracto debe estar visado por la autoridad y deberá publicarse a costo del solicitante
en el diario oficial y en un diario de circulación regional o nacional, según corresponda, dentro
de los 10 días siguientes a la fecha de presentación.
b) Plazo. El plazo de tramitación según la LBGMA es de 120 días hábiles, susceptibles de
ser prorrogado por una sola vez por 60 días. Este plazo se puede suspender, cuando la
autoridad le solicita al titular del proyecto una aclaración o rectificación del estudio.
El plazo va a estar suspendido hasta que el titular dé respuesta a lo pedido por la
autoridad y cuando lo haga sigue corriendo el plazo y este documento por el que se da
respuesta se llama Addendum (Agregado).
c) Publicidad y Participación. Desde la fecha de publicación del extracto y en un plazo de 60
días opera lo que se llama Participación ciudadana (art.29 LBGMA), que consiste en que
cualquier organización ciudadana con personalidad jurídica o las personas derechamente
afectadas por el proyecto podrán intervenir en la tramitación del estudio y realizar las
observaciones al proyecto.
Para asegurar que la población esté adecuadamente informada, el nuevo art.30 ter
LBGMA, establece la obligación para el titular del proyecto, para anunciar a su costa, la
presentación del Estudio y el lugar en donde las personas pueden acceder a información sobre
el proyecto.

32
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

Las observaciones se hacen por escrito, deben ser fundadas y estas observaciones no son
vinculantes para la autoridad, pero la autoridad debe hacerse cargo de ellas, pronunciándose
fundadamente sobre todas ellas.
Si quien efectuó la observación estima que no ha sido considerada, en este caso se puede
interponer un recurso de reclamación en un plazo de 15 días ante el superior jerárquico,
contados desde la notificación de la resolución final (art.30 bis en relación al art.20 LBGMA)
Cabe mencionar que mientras el estudio está en tramitación, la actividad o proyecto no
puede funcionar ni realizar ninguna actividad, pues no tiene permisos. Sin embargo, el art.107
RSEIA le permite al titular que presente la póliza de un de seguro que cubra el riesgo por daño
al medio ambiente, obtener una autorización provisoria para iniciar el proyecto o actividad,
bajo su propia responsabilidad, sin perjuicio de lo que la autoridad resuelva en definitiva.
Llegado el día 120, la autoridad antes de dictar la resolución, debe verificar que todos los
organismos del Estado hayan evacuado el informe, pronunciándose en relación a los permisos
que deben otorgar.
Si no se han recibido los instrumentos, la autoridad dará 30 días plazo para que el órgano
del Estado se pronuncie.
Si transcurren los 30 días y no hay respuesta de la autoridad, se tendrá por otorgado el
permiso ambiental pertinente (art.15 inc.3 LBGMA).
d) Pronunciamiento de la Autoridad. Lo hace por medio de la “Resolución Final”. Esta
resolución final será de dos tipos:
i) Rechaza el Estudio: se hace por medio de una resolución fundada, que será notificada
por carta certificada al titular del proyecto y se deberá indicar en ella los motivos del rechazo y
las exigencias que se deberían cumplir para su aprobación.
ii) Aprueba el Estudio: “Resolución de Calificación Ambiental” esta resolución que
aprueba tiene tres características:
1) Califica ambientalmente el proyecto.
2) Certifica que el proyecto cumple con las exigencias ambientales vigentes.
3) Lleva acompañada todos los permisos ambientales requeridos para el funcionamiento del proyecto.
e) Recursos. Cuando la resolución final aprueba un estudio, genera como consecuencia que
ningún organismo del Estado podrá negar las autorizaciones ambientales que correspondan.
Sin perjuicio de ello, la RCA puede establecer ciertas condiciones o exigencias ambientales que
el titular del proyecto deberá cumplir.
i) Reclamación por el rechazo del Estudio de Impacto Ambiental. El titular del proyecto puede
reclamar por estas condiciones y el plazo para hacerlo es de 30 días contados desde la
notificación de la resolución (art.20 LBGMA). Si transcurren los 30 días y no la contestan o no
reclama, se tienen por aprobadas las condiciones.
Cuando el estudio es rechazado, el titular del proyecto puede:
- Presentar un nuevo Estudio (art. 21 LBGMA).
- Interponer un recurso de reclamación en sede administrativa (art. 20 LBGMA).

33
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

Dentro del plazo de 30 días desde la notificación del rechazo, el titular del proyecto
puede reclamar ante un comité integrado por los Ministros del Medio Ambiente, que lo
presidirá, y los Ministros de Salud; de Economía, Fomento y Reconstrucción; de Agricultura;
de Energía, y de Minería.
ii) Reclamación por el rechazo del recurso de reclamación (art.20 inc.4º LBGMA). El recurso de
reclamación debe resolverse dentro de 60, previo informe de todos los organismos sectoriales
que participaron en la evaluación, mediante una resolución fundada y en caso de que la
respuesta sea desfavorable, se presentan dos alternativas:
- Presentar un nuevo estudio (art.21 LBGMA).
- Presentar un recurso de reclamación ante el Tribunal Ambiental (art.20 en relación al
art.60 LBGMA), Hay un plazo de 30 días para presentarlo.
6. Declaración de Impacto Ambiental. “El documento descriptivo de una actividad o
proyecto que se pretende realizar, o de las modificaciones que se le introducirán, otorgado bajo
juramento por el respectivo titular, cuyo contenido permite al organismo competente evaluar si
su impacto ambiental se ajusta a las normas ambientales vigentes” (art.2 f) LBGMA).
a) Procedencia. Se debe elaborar una Declaración de Impacto Ambiental en los casos
establecidos en el art.10 LBGMA, y en tanto no se produzcan algunos de los efectos descritos
en el art.11 LBGMA.
b) Plazo de Tramitación de una declaración. Será un plazo de 60 días susceptibles de
prorrogarse por 30 días más.
Al igual que en el Estudio de Impacto Ambiental, es posible que en la Declaración de
Impacto Ambiental se suspenda y el estudio es igual al correspondiente a un Estudio.
El plazo estará suspendido mientras el titular no responda y si responde seguirá
corriendo.
En la Declaración a diferencia del Estudio no procede el seguro ambiental ni la
autorización provisoria a la que se refieren el art.107 RSEIA.
c) La Resolución Final: Resolución de Calificación Ambiental (RCA). Al igual que en el estudio,
la resolución final puede ser de dos tipos:
- Podrá Aprobar la solicitud.
- Podrá Rechazar la solicitud.
En el primer caso lo que la autoridad hace es evaluar que el proyecto cumple con las
exigencias ambientales y por lo tanto el impacto al medio ambiente será el permitido por la
norma.
Al aprobarse se acompaña con esta resolución los permisos ambientales sectoriales
respectivos.
En el segundo caso hay dos alternativas
- Volver a presentar la declaración (art.21 LBGMA).
- Interponer un recurso de reclamación de carácter administrativo (art.20 inc.1º
LBGMA).

34
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

d) Recursos. Frente al rechazo de una declaración se cuenta con dos recursos, los cuales,
uno de ellos es administrativo y ante un nuevo resultado negativo se puede recurrir ante los
tribunales.
i) Recurso de Reclamación por rechazo de la Declaración de Impacto Ambiental. Este recurso se
presenta en sede administrativa, ante el Director Ejecutivo del Servicio de Evaluación
Ambiental, para presentarlo se tiene un plazo de 30 días desde la fecha de la notificación de la
resolución final y la autoridad cuenta con un plazo fatal de 30 días para resolver y si esa
resolución consiste en ratificar el rechazo, el titular tendrá dos alternativas:
- Presentar una nueva declaración (art.21 LBGMA).
- Interponer un nuevo recurso de reclamación ante los Tribunales Ambientales (art.20
inc.4º LBGMA).
ii) Reclamación por rechazo del recurso de reclamación. Este segundo recurso se presenta en sede
judicial ante los tribunales ambientales, cuando comiencen a funcionar. El plazo para presentar
este nuevo recurso es de 30 días desde la notificación de la ratificación del rechazo, y el
tribunal competente está en el art.60 LBGMA y el procedimiento es breve y sumario.
e) Publicidad y participación. Al igual que en el caso de los Estudios de Impacto Ambiental,
la legislación ambiental busca asegurar que la población esté adecuadamente informada de los
procedimientos ambientales que estén siendo tramitados, dando cumplimiento al principio
participativo.
De esta forma se establece la obligación de publicar, en este caso, no un extracto, sino
que un listado con todas las declaraciones que se han presentado a tramitación durante el mes
anterior, en el diario oficial o diario regional según el caso (art.30 LBGMA), a diferencia del
Estudio, el costo de esta publicación es asumido por la autoridad. Además tiene aplicación el
art.30 ter LBGMA, que obliga a anunciar radialmente la presentación de la declaración.
Con la reforma de enero de 2010 (Ley 20.417), se incorpora la participación ciudadana
para efectos de la Declaraciones de Impacto Ambiental. De esta manera las Direcciones
regionales o el Director Ejecutivo del Servicio de Evaluación de Impacto Ambiental podrán
decretar la realización de un proceso de participación ciudadana por un plazo de 20 días,
respecto de los proyectos que se presenten a Evaluación de Impacto Ambiental a través de una
Declaración y que generen cargas ambientales.
El concepto de carga ambiental se aplica a aquellos proyectos que si bien generan
externalidades ambientales negativas en las localidades próximas, generan a la vez, beneficios
sociales.
Finalmente, cabe señalar, que si bien este proceso de participación ciudadana es eventual
en el caso de las declaraciones, si éste se realiza, la autoridad encargada se encuentra obligada a
pronunciarse fundadamente sobre las observaciones realizadas, y en caso de no hacerlo, las
personas afectadas tendrán derecho a interponer un recurso de reclamación de conformidad a
lo establecido en el art.20 LBGMA.
7. Principales diferencias entre el Estudio y la Declaración de Impacto Ambiental.
a) Plazo de tramitación: el Estudio 120 días más 60 días y la Declaración 60 días más 30
días.

35
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

b) Contenido: en el Estudio es un documento formal con un contenido fundado y extenso


y en la Declaración es un documento que es una declaración jurada.
c) Autoridad ante quien se presentan los recursos: en el Estudio ante el Comité de Ministros,
que se señaló anteriormente, y en la Declaración ante la Dirección Ejecutiva.
d) Publicaciones: en el Estudio se publica un extracto, a costa del titular o interesado, y en
la Declaración se publica el listado, a costo de la autoridad.
e) Participación Ciudadana: En el caso del Estudio esta es necesaria, para el caso de las
Declaraciones esta es eventual.
D/ PLANES DE MANEJO, PREVENCIÓN Y DESCONTAMINACIÓN.
Se encuentran regulados en los arts.41 a 48 LBGMA.
1. Planes de Manejo. El art.41 LBGMA señala que “el uso y aprovechamiento de los
recursos naturales se efectuará asegurando su capacidad de regeneración y la diversidad
biológica asociada a ellos...” En virtud de este mandato legal, es que la autoridad está facultada
para exigir a los particulares que deseen explotar recursos naturales, la presentación y
cumplimiento de planes de manejo, con la finalidad de asegurar la conservación de los mismos.
Estos planes deben obedecer a una serie de parámetros ambientales, a modo de ejemplo
el art.42 LBGMA menciona algunos de ellos:
a) Mantención de caudales de aguas y conservación de suelos.
b) Mantención del valor paisajístico.
c) Protección de especies en peligro de extinción, vulnerables, raras o insuficientemente conocidas.
Cabe mencionar que estos Planes de Manejo no tendrán aplicación en los casos que una
determinada actividad productiva se haya sometido al SEIA y se haya aprobado la
correspondiente Declaración o Estudio de Impacto Ambiental.
2. Planes de prevención y descontaminación. Los primeros tienen aplicación cuando una
determinada zona ha sido declarada como “zona latente” de acuerdo a los parámetros fijados
por las normas de emisión, en tanto los segundos son aplicados cuando la calificación de la
zona pasa a ser de “zona saturada” (art.43 LBGMA) Asimismo aplicación se restringe
exclusivamente a aquellas zonas objeto de tales declaraciones.
El objetivo de estos planes es limitar o impedir las emisión de sustancias contaminantes
con la finalidad de que no se sobrepase la norma (prevención) o bien se vuelva a los niveles
permitidos una vez que estos se han sobrepasado (descontaminación). En aquellas áreas donde
se estén aplicando los planes respectivos, sólo podrán desarrollarse las actividades que cumplan
con los requisitos establecidos. El cumplimiento de dichos planes, será fiscalizado por la
Superintendencia del Medio Ambiente (art.46 LBGMA).
Estos planes son elaborados por el Ministerio del Medio Ambiente y deberán llevar la
firma del ministerio sectorial correspondiente. El plan será establecido mediante decreto
supremo.
Finalmente el art.47 LBGMA señala una serie de instrumentos de regulación directos o
indirectos (económicos), de los que puede valerse el plan respectivo, entre ellos:
a) Normas de emisión.

36
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

b) Permisos de emisión transables.


c) Impuestos a las emisiones o tarifas de los usuarios (ecotributos).
d) Otros instrumentos de estímulo.

VI. RESPONSABILIDAD POR DAÑO AMBIENTAL (ART.51 A 63 LBGMA).


1. Definiciones básicas:
a) Daño Ambiental: “Es toda pérdida, detrimento o menoscabo al medio ambiente o a uno
o más de sus componentes” (art.2 e) LBGMA).
b) Reparación: “Es la acción por la cual se busca reponer el medio ambiente o uno o más
de sus componentes a un estado similar al que se tenía antes de causarse el daño o si esto no es
posible, reponer a lo menos sus cualidades básicas” (art.2 s) LBGMA).
2. Tipos de responsabilidad. Primeramente cabe señalar que estamos frente a una
responsabilidad de tipo civil. La regla general que establece la ley es adoptar la llamada
responsabilidad subjetiva, llamada también responsabilidad por culpa. El legislador ambiental
ha optado también por este tipo de responsabilidad, que consiste en que quien causa daño,
debe necesariamente haber actuado con dolo o culpa (art.51 LBGMA).
Como excepción a la regla general, en algunos casos la legislación ambiental admite los
que se conoce como responsabilidad objetiva llamada también responsabilidad por el riesgo
creado, que está presente en el art.51 inc.2 LBGMA. (Ej. Responsabilidad en caso de accidente
nucleares, o por uso de plaguicidas).
3. Acciones que otorga la LBGMA. Hay dos tipos de acciones que reconoce: Acción de
Reparación y Acción Indemnizatoria (art.53 LBGMA).
a) Características de estas acciones.
i) Requisitos: Ambas acciones tienen los mismos requisitos, estos son:
1) Existencia de un daño.
2) Hecho culpable: acción u omisión, culposa o dolosa del agente.
3) Capacidad del autor del daño.
4) Nexo causal.
ii) Prescripción: Ambas acciones prescriben en el plazo de 5 años desde la manifestación
evidente del daño (art.63 LBGMA).
iii) Tribunal competente: Con anterioridad a la dictación de la ley 20.417, estas causas eran
conocidas por el Juez de Letras en lo civil del lugar donde originó el hecho o del domicilio del
afectado, a elección de este último, en conformidad a las normas del juicio sumario.
Luego de la dictación de la referida ley, las acciones de responsabilidad ambiental deben
ser conocidas por los Tribunales Ambientales (una vez que sean creados), de conformidad al
procedimiento establecido en la ley que los crea (art.60 LBGMA).
b) Acción Ambiental. Es una innovación en nuestro derecho, antes de esta ley no existía.
Tiene por objeto reparar el daño causado al medio ambiente.

37
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

Con relación a esto debemos ver el art.55 LBGMA, que limita el ejercicio de la acción
ambiental en el siguiente sentido: Cuando un responsable de una fuente emisora que está sujeta
a un plan de prevención o descontaminación acredita que está dando cumplimiento a lo
estipulado en esos planes o regulaciones, sólo permitirá el ejercicio de la acción indemnizatoria.
i) Titulares de la acción ambiental (art.54 LBGMA).
1) Personas Naturales o Jurídicas, Públicas o Privadas, que hayan sufrido el daño o perjuicio.
2) Las Municipalidades por los hechos ocurridos dentro de su territorio.
3) El Estado por medio del Consejo de Defensa del Estado.
Si alguno de estos titulares ejerce la acción, inhibe la posibilidad que los demás titulares la
puedan ejercer, sin embargo la ley permite que intervengan en el juicio en calidad de terceros,
presumiéndose que tiene un interés actual en el juicio.
ii) Presunciones de responsabilidad por daño ambiental (art.52 LBGMA). Establecida como una
forma de atenuar la inexistencia de responsabilidad objetiva en nuestro sistema de protección
medio ambiental, para los casos en que el autor del daño ha cometido infracción a las normas
ambientales y regulaciones especiales establecidas en disposiciones legales o reglamentarias.
Esta presunción de responsabilidad que sólo da derecho a una indemnización si se acredita la
relación de causa a efecto entre la infracción y el daño producido (es decir, sólo exime de la
prueba de la culpa o dolo en el actuar del autor).
iii) Solidaridad Municipal (art.54 inc. final LBGMA). Consiste que cualquier persona puede
solicitar a su municipalidad que le represente en el ejercicio de la acción ambiental por daños
ocurridos en su territorio, debiendo acompañar los documentos que fundan su petición.
La municipalidad tiene 45 días para resolver, transcurrido este plazo deberá informar por
carta certificada su decisión al interesado. Sin embargo fuera de rechazar o aceptar, existe otra
más que puede ocurrir que la municipalidad no de respuesta dentro del plazo, en ese caso la ley
establece que el municipio se hace solidariamente responsable de los perjuicios que el hecho le
cause el afectado.
c) Acción indemnizatoria. Es aquella que persigue el resarcimiento económico de los
perjuicios derivados del daño ambiental.
i) Titular de la acción indemnizatoria (art.53 LBGMA). Sólo está facultado para ejercer la
acción indemnizatoria, aquella persona que resulte directamente perjudicado por el daño
ambiental.
Ahora, en cuanto la titularidad pasiva, esta acción puede ser dirigida en contra de
cualquier persona, natural o jurídica, pública o privada (art.3 LBGMA)
Finalmente, respecto de los daños indemnizables, tiene plena aplicación en art.2329 del
Código Civil, en el sentido de que se debe indemnizar “todo daño”, en cuanto sea cierto
(acreditable).

38
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

§ 9. OBRAS E INFRAESTRUCTURAS PÚBLICAS.

I. HECHO JURÍDICO.
La Administración, desde el siglo XIX, ha llevado adelante con fondos fiscales la
planificación, construcción y operación de obras de interés público, en especial aquellas
destinadas a posibilitar las comunicaciones terrestres, marítimas y aéreas, construyendo ya
sea caminos, puertos y aeropuertos. De ahí ha surgido el concepto de obra pública, tanto por
el origen de su financiamiento como por los fines que cumplen.
Hoy, tal concepto se ha ampliado al de infraestructura, por la complejidad de tales
construcciones, y ante la nueva realidad de amplia participación de la inversión de
particulares, tales grandes obras si bien suelen ser planificadas por órganos de la
Administración, ahora se ejecutan o construyen, se financian y se administran por largos
años por los particulares.
La realidad ha cambiado:
i) Antiguamente los particulares, por la vía de un contrato de construcción, cuyos
costos pagaba el Fisco, sólo optaban a la construcción de tales obras, entregándoselas a la
Administración para su ulterior administración.
ii) Hoy, los particulares, por la vía de una vinculación más compleja (de un contrato
de construcción, al que se le adjunta una concesión de bienes y servicio público) no sólo
construyen, sino financian y administran el servicio público respectivo, resarciéndose sus
gastos mediante el cobro de una tarifa.
La obra pública o la infraestructura como suele denominarse en la doctrina
comparada de los últimos años, constituyen el soporte (tanto estructural como funcional)
necesario para el desarrollo de las actividades de producción, comercialización y
distribución de bienes y servicios de utilidad general. La existencia de infraestructuras
adecuadas es un factor determinante en el desarrollo económico y social de cualquier país.
En este trabajo nos avocaremos a analizar el caso de estas obras de infraestructura
(ej. Caminos, aeropuertos, obras de riego) puesto que ellas han proliferado en los últimos
años, potenciadas por el régimen concesional que ha permitido la participación activa del
mundo privado.
II. MARCO REGULATORIO.
La regulación en materia de obra pública en Chile, en particular respecto del régimen
concesional es relativamente reciente.
Hacia las década del 60 ya existía la ley Nº15.840 Orgánica del Ministerio de Obras
Públicas (1964) y por otro lado el DFL Nº206 Ley de Caminos (1960), las cuales hoy en día
están contenidas en el DFL Nº850 de 1997. Estas normas contemplaban la posibilidad de
que las obras públicas se ejecutaran, repararan o mantuvieran por contrato adjudicado en
licitación pública a cambio de la concesión temporal de su explotación.
Para poder llevar a efecto esta disposición, recién en 1982 se dictó el DFL Nº591 del
Ministerio de Obras Públicas, que fijó normas de ejecución, reparación y mantención de
obras públicas por concesión. Esta ley, sin embargo, no tuvo aplicación sino hasta 1991,
año en que se iniciaron una serie de estudios tendientes a establecer la factibilidad de
desarrollar obras públicas por la vía concesional. Ese mismo año se envió un proyecto de
ley para dotar de mayor eficacia al régimen legal de concesiones, aprobándose la ley
Nº19.068. Dicho proyecto facultó al ejecutivo para dictar el texto refundido de la Ley de
Concesiones, lo que desembocó en la dictación del DFL Nº164 del MOP de 1991.

39
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

Posteriormente en el año 1994, se introdujeron nuevas modificaciones mediante la


ley Nº19.460 de 1996. Finalmente ese mismo año se dictó el DS MOP Nº900, que fijó el
texto refundido, coordinado y sistematizado del DFL Nº 164, lo que hoy se mantiene
vigente como Ley de Concesiones.
A partir de lo recientemente expuesto, la normativa vigente relativa a obra pública en
Chile es la siguiente:
1. DFL Nº 850 Ley Orgánica Constitucional del MOP (LOCMOP): Regula la organización
y funciones del ministerio. Entre ellas se contemplan: expropiación de bienes para las obras
que se ejecuten (art.3 a)), pronunciarse sobre planes y proyectos de ejecución de obras
(art.4) y dictar normas para la coordinación de los servicios que dependen de él (art.4),
entre los que se encuentran la DGA, Dirección de Vialidad y la Dirección de Obras
Portuarias, entre otras funciones que detallada esta ley.
2. Decreto Nº75 de 2004, Reglamento para contratos de obras públicas (RCOP): Cumple un
rol fundamental ya que de acuerdo a su art.1, se entiende que el reglamento forma parte
integrante de todos los contratos de obra pública que se celebren por el MOP, sus servicios
dependientes o las instituciones que se relacionen con el Estado por su intermedio.
3. Decreto Supremo MOP Nº900 de 1996, Ley de Concesiones (LCo): Regula las bases
mínimas para las licitaciones, los requisitos de perfeccionamiento del contrato concesional,
los derechos y obligaciones mínimos del concesionario, así como la suspensión y extinción
de la concesión. Se regula también la situación de expropiaciones y servidumbres necesarias
para llevar a efecto la obra.
4. Decreto Supremo MOP Nº956 de 1997, Reglamento de la ley de Concesiones de Obras
Públicas (RLCo): Esta norma viene a complementar la ley de concesiones y al igual que en el
caso del reglamento para contratos de obras públicas, este reglamento cumple un rol
fundamental ya que se entiende incorporado a todos los contratos concesionales celebrados
por el MOP.
III. PRINCIPIOS JURIDICOS DE TODA OBRA PÚBLICA.
La realización de una obra pública, ya sea a través de un contrato o un contrato de
concesión de obra pública, se rigen por ciertos principios, jurídicos y económicos que son
propios del desarrollo de esta actividad.
1. Principio de planificación previa. Este principio es de vital importancia para la
realización de una obra pública. “En consecuencia con ello, puede afirmarse que sin plan
no hay obra”7. El art.2 RCOP señala que “para contratar cualquier obra deberá existir
previamente (…) planos (…) con el visto bueno de la misma autoridad que adjudicará el
contrato. Quedarán incluidas en el contrato todas las obras contempladas en las
especificaciones técnicas y en los planos correspondientes”.
2. Autorización presupuestaria previa. Dice el Reglamento de contratación de obra
pública en su art.2° que “para contratar un obra pública deberá existir previamente
autorización de fondos (…)”. Únicamente se permite que se ejecuten obras sin tal requisito
cuando las obras son de mera reparación o de reconocida urgencia.
3. Especificaciones técnicas aprobadas. Esta regla pretende verificar la corrección técnica
de la obra que se pretende construir. Dice el art.17 LCo “la puesta en servicio de la obra
será autorizada por el Ministerio de Obras Públicas previa comprobación de su ajuste a los
proyectos y demás especificaciones técnicas aprobadas”.

7
Paloma Herranz Embid, p.712.

40
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

4. Fijación de prevención de riesgos y efectos medioambientales. Esta es una de las novedades


del régimen de ejecución de obras públicas, el requisito de incorporar, en las bases
administrativas de la licitación, el análisis o prevención de riesgo, las estadísticas de
accidentabilidad de las obras así como sus efectos medioambientales (art.2 RCOP).
5. Necesidad de licitación pública. Este es el principio al que más importancia se le ha
dado en ambos regímenes jurídicos. La adjudicación del contrato o de la concesión gira
alrededor del requisito de la licitación pública.
Esto se ve claramente en el art.3 LCo, el cual señala que: “La adjudicación del
contrato y el otorgamiento de la o la concesión correspondiente, sería precedidas de las
siguientes actuaciones, sin perjuicio de lo dispuesto en la Ley N°15.840: a) aprobación, por
el Ministerio de Obras Públicas, de las bases de licitación, y b) selección del adjudicatario de
la licitación por los mecanismos previstos en la ley y sus normas complementarias”.
Lo mismo se puede apreciar en el art.69 RCOP, el cual señala que las bases
administrativas indicarán las especialidades requeridas para licitar, y sus respectivas
categorías, lo cual se complementa con el art.4 N°25 RCOP que establece: “la licitación es
el procedimiento mediante el cual se solicitan a proponentes inscritos en el Registro de
contratistas del MOP, o precalificados si es el caso, cotizaciones para la ejecución de una
obra pública”.
Es la licitación pública el procedimiento para la selección de contratistas o
inversionista de una obra pública. Con el cual se pretende garantizar tanto la igualdad de los
particulares así como la obtención por la Administración de las condiciones más ventajosas
y menos onerosas para los particulares.
Este procedimiento deberá cumplir con los estándares fijados en la LBPA, Ley
N°19.880.
6. Ius variandi. De acuerdo con este principio, se le permitiría a la Administración
modificar el contrato en el cualquier momento, después de suscrito por ambas partes.
Recogido en el art.19 inc.3° LCo, el cual señala que “El Ministerio de Obras Públicas podrá
modificar las características de las obras y servicios contratados a objeto de incrementar los
niveles de servicio y estándares técnicos establecidos en las bases de licitación, o por otras
razones de interés público debidamente fundadas. Como consecuencia de ello, deberá
compensar económicamente al concesionario cuando corresponda, por los costos
adicionales en que éste incurriere por tal concepto”.
7. Principio de equilibrio económico financiero. Con este principio se persigue asegurar el
derecho del contratista al mantenimiento del equilibrio económico del contrato, en tanto
pueda rembolsar los nuevos costos que puedan derivarse de las modificaciones del contrato
inicialmente pactado. La Administración para el ejercicio de ciertas facultades exorbitantes
(terminación o modificación unilateral del contrato), tendrá que asegurar la debida
protección de los intereses económicos del contratista, otorgándole el derecho a la
indemnización y el derecho de conservar las condiciones económicas inicialmente pactadas.
IV. ORGANIZACIÓN ADMINISTRATIVA EN MATERIA DE OBRA
PÚBLICA.
Las autoridades competentes en Chile para la planificación y ejecución de una obra
pública son:
1. Ministerio de Obras Públicas. Se en carga de la administración central, el art.1
LOCMOP establece: “El Ministerio de Obras Públicas es la Secretaría de Estado encargada
del planeamiento, estudio, proyección, construcción, ampliación, reparación, conservación
y explotación de las obras públicas fiscales y el organismo coordinador de los planes de

41
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

ejecución de las obras que realicen los Servicios que lo constituyen y de las demás entidades
a que se refieren los artículos 2º y 3º de esta Ley”.
En efecto, si bien el MOP puede gestionar el desarrollo de obras públicas por sí sólo,
también opera como coordinador y ejecutor de obras de otros Ministerios, instituciones o
empresas del Estado o aquellas en que tenga participación y las Municipalidades, todos
quienes pueden encomendar al MOP dicha labor. (art.2 LOCMOP).
La misma ley, crea la Dirección General de Obras Públicas y consagra una serie de
servicios dependientes de ella. Éstos son los siguientes:
- Dirección de Planeamiento.
- Dirección de Arquitectura.
- Dirección de Riego.
- Dirección de Vialidad.
- Dirección de Obras Portuarias.
- Dirección de Aeropuertos.
- Dirección de Contabilidad y Finanzas.
De todas estas, una de las más relevantes es la Dirección de Vialidad. El art.18
LOCMOP señala que su función es “la realización del estudio, proyección, construcción,
mejoramiento, defensa, reparación, conservación y señalización de los caminos, puentes
rurales y sus obras complementarias que se ejecuten con fondos fiscales o con aporte del
Estado... La conservación y reparación de las obras entregadas en concesión serán de cargo
de los concesionarios.”
Adicionalmente la misma ley crea la Dirección General de Aguas, organismo también
dependiente del MOP, pero cuya regulación se encuentra en un cuerpo normativo distinto
como lo es el Código de Aguas y su regulación complementaria.
2. Los Servicios de Vivienda y Urbanismo. El SERVIU está encargado de adquirir
terrenos, efectuar subdivisiones prediales, formar loteos, proyectar y ejecutar
urbanizaciones, proyectar y llevar a cabo remodelaciones, construir viviendas individuales,
poblaciones, conjuntos habitacionales y barrios, obras de equipamiento comunitario,
formación de áreas verdes y parques industriales, vías y obras de infraestructura y, en
general, cumplir toda otra función de preparación o ejecución que permita materializar las
políticas de vivienda y urbanismo y los planes y programas aprobados por el Ministerio.
3. Las Municipalidades. Estas están facultadas para efectuar directamente, dentro del
territorio de la comuna, obras de pavimentación de calles, avenidas, plazas y aceras, con
recursos propios (Ley General de Urbanismo y Construcción, art.80 b)). No obstante, sólo
pueden ejecutar estas obras si cuentan con la aprobación previa del respectivo SERVIU,
según lo previsto en la Ley N°8.946 (sobre pavimentación comunal) que prevé las formas y
potestades para la construcción de calles, plazas, calzadas y aceras.
V. INSTITUCIONES JURÍDICAS DE OBRA PÚBLICA.
A/ INTRODUCCIÓN.
1. Dos fases en la obra pública. La obra pública como institución jurídica (normativa y
dogmáticamente) nace de la práctica legislativa. Es la regulación, en lo esencial, la que ha
determinado los contornos de esta institución, a partir precisamente de las formas en las
que se planifica y ejecuta una obra pública. El desarrollo en la doctrina es tardío, no
obstante nadie discute en la actualidad su identidad en el Derecho Administrativo.

42
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

Lo esencial de esta particularidad o identidad alcanzada por la institución de obra


pública tiene que ver con los modos de ejecución de las obras, que le imprimen un sello
original al típico contrato administrativo, precisamente por el régimen económico y jurídico
al que están sometidos. Así como la conjugación de prerrogativas exorbitantes de la
Administración y la responsabilidad a la que está sometida por razones de equidad.
Cabe distinguir la fase de construcción de la obra pública de la fase de administración
de la obra terminada, pues se delimitan regímenes diferenciados de competencias y
actividades de la Administración.
a) Las fases de planificación, construcción y en su caso explotación de la obra es el escenario en
el que se desenvuelve esta institución, pues una vez terminada la obra, la calificación de
“obra pública” pareciera ser irrelevante frente al destino para el que se ha construido.
b) La fase de explotación o uso público, o fiscal, en su caso, es algo ulterior. En el caso de un
camino o el edificio de un servicio público, una vez terminada la obra pasan a ser bienes
nacionales de uso público o bien de propiedad fiscal respectivamente. Lo cual prueba que
la calificación de obra pública, por lo menos en el derecho chileno, no modifica la
naturaleza ni el régimen jurídico de los bienes; sólo indica que estos bienes han sido
planificados, construidos y explotados bajo el régimen del derecho público, por gestión
directa de la Administración o por mandato a los particulares, lo cual implica que tendrá
que someterse a ciertos principios propios de la actividad pública (fiscalización, sanción,
tarifas, responsabilidad, cobro de peajes, etc.).
2. Licitación y contrato de obra pública más concesiones de bien y servicio público. Obra pública
es un concepto que dice relación tanto con una acción (planificación, ejecución y
construcción de una obra, que se califica de pública) como con un objeto (la obra misma,
en sentido físico). De ahí que sea necesario distinguir estos dos aspectos en relación a las
obras públicas:
a) La fase de ejecución y construcción de una obra, relacionada con la planificación, licitación
y contratación de su construcción. Esta fase está dominada por una relación «contractual»
entre la Administración y el constructor de la obra. La institución jurídica que opera en este
caso es el «contrato administrativo», precedido de la «licitación pública».
b) La fase de administración de la obra, una vez construida, en que debe cumplir sus fines
de carácter público. Al respecto, cabe recordar que:
- La naturaleza de la obra misma, usualmente es de un bien público.
- La administración de este bien público (la obra o infraestructura pública una vez
construida) es un servicio público.
Por lo tanto, a raíz de lo anterior, cabe distinguir nuevamente:
- Si en esta fase participa sólo un órgano de la Administración, se estará al frente sólo
de un contrato administrativo de construcción.
- Si en esta fase participa también un particular (por haber financiado ese particular la
obra y por quedar habilitado para cobrar un peaje), esta fase estará dominada por una
relación «concesional» entre la Administración y el particular. Las instituciones jurídicas que
operan en este caso es la concesión, tanto de bien público como de servicio público: la
Administración ha delegado tal servicio.
3. ¿Concesión de obra pública? Respecto del modelo de obras públicas concesionadas,
usualmente se acostumbra distinguir entre concesión de obra pública y concesión de
servicio público. Como ya hemos expuesto la concesión de servicios públicos es una
herramienta mediante la cual la Administración delega en particulares la realización de

43
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

determinadas actividades previamente publificadas en atención a la relevancia social de las


mismas, mediante la creación de derechos ex novo en favor ellos. Este derecho es el título
que habilita al concesionario a prestar dicho servicio público y a cobrar una tarifa por la
prestación realizada (vid. capítulo 1).
En el caso de las obras públicas concesionadas cabe precisar los términos que utiliza
regularmente la legislación, que se refiere a “concesión de obra pública”. Si bien existe
también aquí un título concesional que crea derechos en favor del concesionario, pues lo
habilita a prestar un servicio público (como proveer de vías de transporte en el caso de las
carreteras concesionadas) y a cobrar una tarifa por él, sin embargo está condicionada a que
el concesionario haya previamente ejecutado una obra determinada (una carretera en este
caso), obra que no es de su propiedad, y que sólo se le permite administrar como una
manera de recuperar los montos invertidos en la ejecución de la obra. Esto es, antes de ser
concesionario, el particular fue contratista de la Administración; y una vez construida la
obra pública, será en verdad un concesionario del “servicio público” que soporta la obra
pública ya construida.
De lo expuesto se desprende que en el caso de las obras públicas concesionadas, una
vez que ellas han sido planificadas y ejecutadas, la calificación misma de obra pública pasa a
ser irrelevante, frente a la nueva realidad de servicio público que presta el concesionario,
adquiriendo el inmueble la naturaleza jurídica de bien nacional de uso público. Como lo
señala Rufián, “no puede significar más que el Estado ha dejado permanentemente de
proveer el servicio que prestaban las obras concesionadas y que el concesionario sustituye
al Estado en este rol. La concesión no aparece ya como una forma de financiar la ejecución
de la obra pública, sentido originario que se estableció en la ley Nº15.840, sino como un
intercambio en la persona que presta el servicio público concedido”8.
4. Obra pública y expropiación. Un aspecto muy relevante relativo al desarrollo de obras
públicas es la estrecha relación que estas presentan respecto de la potestad expropiatoria de
la Administración. En efecto, un elemento esencial de la obra pública, es que esta se
desarrolla sobre bienes inmuebles, por lo tanto, en todos aquellos casos en que se
planifique el desarrollo de una obra pública sobre terrenos que no sean de propiedad fiscal,
se requerirá hacer uso de la potestad expropiatoria para ejecutar la obra, cuidando siempre
la debida indemnización del particular afectado por dicha medida.
5. Diversas obras públicas y regímenes. Ahora bien, en la práctica en nuestro país existen
diversas posibilidades de gestión y ejecución de obras públicas. El elemento común es que
un órgano de la Administración lleva a cabo dichas tareas y la diferencia es la finalidad
específica de cada obra, sin perjuicio que desde un punto de vista amplio, toda obra pública
cumple una finalidad colectiva o pública.
En Chile, una obra pública puede gestionarse (planificarse, licitarse y delegar su
construcción) por medio de diversos órganos de la Administración, como el Servicio de
Vivienda y Urbanismo (SERVIU); las Municipalidades; en fin, el Ministerio de Obras
Públicas (MOP).
Si bien en todos los casos nos encontraremos frente a una obra pública, cada una de
ellas tiene diversos regímenes jurídicos, y particularidades en sus distintas fases, como en el
financiamiento, en la construcción o ejecución, en la administración o bien en cuanto a la
titularidad final de la obra.
Estas diferencias son bastante marcadas en la realidad: podemos notar la clara
diferencia que existe entre la construcción de un conjunto de viviendas sociales y una

8
Rufián Lizana (1999). p. 22.

44
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

carretera que une dos ciudades. En ambos casos estamos frente a obras públicas, sin
embargo su planificación, financiamiento, ejecución o construcción y administración difiere
sustancialmente.
Denominamos también obra pública a la construcción de «viviendas sociales», pues
en su origen deriva directamente de la gestión de la administración, quien utiliza un bien
fiscal (el inmueble) para propender a satisfacer una necesidad pública como es dotar de
vivienda a los miembros de la sociedad que no pueden procurársela por sí mismos. Para
cumplir con este objetivo contratará a un privado quién, a cambio de una contraprestación
monetaria establecida de antemano, ejecutará la obra, la cual una vez realizada pasará a
manos un particular determinado, pasando en ese momento a ser un bien privado.
Distinto es el caso de la «carretera». Existe al igual que en el caso anterior una
necesidad pública que se requiere satisfacer, pero será un particular quien financiará y
ejecutará íntegramente la obra, pero a modo de contraprestación se le entregará la
administración del bien público una vez construido (esto es, el particular prestará el servicio
público de vialidad), y tendrá derecho a cobrar un tarifa a aquellos que utilicen el servicio.
Respecto al bien mismo, una vez terminado este deja de ser una obra pública y se
constituye como un bien nacional de uso público.
Es la obra pública entonces un concepto amplio y que como vimos presenta distintas
modalidades. Sin lugar a dudas la que más ha tomado fuerza es la obra pública ejecutada
mediante complejos contratos y concesiones, pues esta modalidad permite realizar
proyectos de infraestructura que no implican necesariamente un desembolso de recursos
estatales y genera incentivo a los privados, aumentando la eficiencia en el desarrollo de
dichas obras.
Se estudia en seguida la fase principal de toda obra pública: su construcción,
explicando los regímenes jurídicos vigentes, precedido de un análisis del concepto.
B/ CONCEPTO DE OBRA PÚBLICA.
No existe en la regulación vigente en Chile un concepto unitario de obra pública. A
partir de la normativa que regula los contratos y concesiones de obra pública, se pueden
extraer ciertos criterios distintivos de ésta, pero que no son suficientes para determinar ese
núcleo que las define a partir del cual configurar un régimen común y general.
En el art.4 N°14 RCOP se recoge la siguiente definición: “Cualquier inmueble,
propiedad del Estado, construido, reparado o conservado por éste en forma directa o por
encargo a un tercero cuya finalidad es propender al bien público”.
Por su parte, el art.39 LCo dice que “(…) se entenderá por obra pública fiscal a
cualquier bien inmueble construido, reparado o conservado a cambio de la concesión
temporal de su explotación o sobre bienes nacionales de uso público o fiscales destinados a
desarrollar áreas de servicios”.
Estas definiciones resultan claramente insuficientes desde el punto de vista jurídico,
para identificar la esencia o naturaleza jurídica de una obra pública. Si analizamos el
primero de los conceptos podemos percatarnos que la obra pública «es cualquier inmueble
propiedad del Estado que se haya construido o reparado por su gestión o por gestión de los
particulares», por lo tanto quedan excluidos los bienes que no sean propiedad del Estado
como el caso de los bienes nacionales de uso público. La definición limita a los bienes
propiedad del Estado la condición de obra pública.
En el caso de la ley de concesiones, sería «cualquier inmueble construido, reparado o
conservado sobre bienes nacionales de uso público o fiscales». Esta definición amplía su
ámbito e incluye dentro de las obras públicas aquellas construidas en los bienes nacionales

45
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

de uso público. Y excluye claramente las obras realizadas por particulares por su libre
espontaneidad.
1. Caracterización de la obra pública en Chile de acuerdo a la normativa vigente. Al no haber un
concepto unitario general de obra pública en la regulación vigente, de ésta sólo podemos
extraer ciertas características que nos permitan identificar en los hechos cuando estamos en
presencia de una obra pública.
a) Es un bien inmueble ya construido o reparado. Es decir se refiere a la obra física
construida y no a los trabajos o las formas de aprovechamiento o uso
b) Están destinados a una finalidad pública. Así que no es obra pública la construcción de
una casa de un funcionario público.
c) Están construidas sobre los bienes nacionales de uso público y bienes fiscales.
d) Pueden estar financiadas y administradas por la Administración como por los particulares.
2. El concepto en la doctrina y la jurisprudencia. La institución de la obra pública ha tenido
un escaso desarrollo en la doctrina administrativa chilena, no así en la jurisprudencia. La
jurisprudencia ha tenido un papel activo en el desarrollo de ésta institución jurídica, en
especial la jurisprudencia de la Contraloría General de la República.
a) En la doctrina. De la doctrina nacional podemos citar a Eduardo Cordero, para éste
la obra pública “son aquellos bienes inmuebles que tienen una finalidad pública, ya sea que
estén destinado al uso y aprovechamiento común (bienes nacionales de uso público) o al
uso de un servicio público (bienes fiscales o de entidades descentralizadas), planificado y
ejecutado por una entidad pública”.
En la doctrina extranjera se ha definido como, “todo edificio construido o
acondicionado por cuenta de una administración pública para un uso público o un servicio
público tiene el carácter de obra pública”9. También la definen como “La obra pública es
un inmueble acondicionado afectado a un función de interés general”10, y como “Las obras
públicas son las obras de general uso y aprovechamiento, y las construcciones destinadas a
servicios que se hallen a cargo del Estado, de las provincias y de los pueblos”11.
b) En la jurisprudencia. La Contraloría General de la República ha definido a la obra
pública, “como la obra inmueble construida por el Estado con finalidad pública. Finalidad
pública implica satisfacción inmediata y directa con intereses de la colectividad o que la
obra preste utilidad general”12.
“(…) Son obras públicas todas aquellas de naturaleza inmueble construidas o
financiadas por el Estado y destinadas a cumplir una finalidad pública. Las obras indicadas
son inmuebles y su objeto es atender necesidades públicas, por lo que presenta dos de las
características señaladas. No obstante su ejecución se inserta en la actividad de prestación
de servicios sanitarios, la que conforme al DFL 382/88 obras públicas art/4, solas puede
ejercerse por concesionarios sujetos al régimen de ese texto, que se les aplica cualquier sea
su naturaleza jurídica, sean de propiedad pública o privada (…)”13.
C/ TIPOS O FORMAS DE EJECUCIÓN DE LA OBRA PÚBLICA.

9
M. Hauriou, p. 907
10
Philippe Godfrin, p.242
11
Javier Bermúdez, p. 17.
12
Dictamen CGR, 38839 de 1976.
13
Dictamen CGR, 2016 de 1996.

46
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

Las formas de ejecución de una obra pública en el régimen jurídico chileno son: por
ejecución directa, contrato de obra pública y concesión o “contrato” de concesión de obra
pública. Que desarrollaremos a continuación.
1. Ejecución directa. Es la forma de original de la construcción de obras públicas,
aquélla que lleva adelante la propia Administración con sus recursos y personal. Como es el
caso de las obras desarrolladas por la Dirección de Obras Portuarias u Obras Hidráulicas
del Ministerio de Obras Públicas. Así lo establece, por ejemplo el art.19 inc.2° LOCMOP,
“(…) la Dirección de obras portuarias podrá efectuar el estudio, proyección, construcción y
ampliación de obras fundamentales y complementarias de los puertos, muelles y malecones,
obras fluviales y lacustre que se construyan por el Estado o con su aporte”.
2. Contrato de ejecución de obra pública. El contrato de obras es aquel que tiene por objeto
la construcción, reparación o conservación de un bien inmueble de obras públicas por
cuenta de la Administración a cambio de un precio. La naturaleza de este acto es la de un
contrato administrativo. Según el art.4° N°15 RCOP esto es “un acto por el cual el
Ministro encarga a un tercero la ejecución, reparación o conservación de una obra pública,
la cual debe efectuarse conforme a lo que determinen los antecedentes de la adjudicación
incluyendo la restauración de edificios patrimoniales”.
La doctrina chilena lo ha definido, como aquel contrato “por el cual la
Administración encomienda a un particular la construcción de una obra de naturaleza
inmueble con el fin de cumplir una finalidad pública”14.
Esta finalidad pública es la que dota al contrato de una naturaleza distinta,
administrativa. Lo cual implica que se rija por un régimen distinto que admite la
desigualdad contractual a través del principio del ius variandi a cambio de respetar el
equilibrio económico del contrato, situación que está expresamente regulada en el art.19
LCo.
a) Características del contrato de ejecución de obra pública. El contrato de ejecución de obra
pública es un contrato administrativo, que se basa en el principio de riesgo y ventura, lo
cual quiere decir que el constructor que ha de entregar la obra concluida a cambio de un
precio, asume la mayor o menor onerosidad que pueda significar para él la obtención de ese
resultado.
Los contratos se adjudicarán por licitación pública, en las cuales podrán participar los
contratistas inscritos en los registros del Ministerio que se determine en las bases
administrativas. Mediante el mecanismo de la licitación pública se busca asegurar los
principios de transparencia, igualdad, libre concurrencia y publicidad. Sin embargo, podrá
adjudicarse por trato directo (art.86 LOCMOP), a particulares inscritos también en el
Registro de contratistas.
El contrato de obra pública queda perfeccionado desde la fecha de la resolución o
decreto que aceptó la propuesta de adjudicación del contrato.
Los precios que serán empleados para el pago del valor del contrato, serán los que
estén estipulados en la propuesta del contratista técnicamente aceptado, que presente la
oferta económica más conveniente.
b) Las partes del contrato son:
i) La Administración: En este caso el Ministerio de Obra Pública, sus dependencias o servicios.

14
SILVA CIMMA, Enrique (1995) p. 183.

47
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

ii) El contratista: persona natural o jurídica que, en virtud del contrato, contrae la
obligación de ejecutar una obra material, por algunos de los procedimientos contemplados
en el Reglamento de contrato de Obra Pública.
3. La concesión de obra pública. Esta figura jurídica ha sido el centro del debate en la
doctrina administrativa chilena; debate que ha estado mayormente dirigido a explicar su
naturaleza jurídica, es decir, si es un contrato administrativo, un acto administrativo o
simplemente un contrato regido por el derecho civil.
La LCo reconoce en más de un artículo el carácter contractual de la concesión de
obra pública.
Art.1: “La ejecución, reparación o conservación de obras públicas fiscales (…) se
regirán por las normas establecidas (…) en el presente decreto con fuerza de ley, su
reglamento y las bases de licitación de cada contrato en particular (…)”.
Art.3: “La adjudicación del contrato y el otorgamiento de la o las concesiones
correspondientes (…)”.
Art.8: “La adjudicación del contrato a que se refiere el Artículo 1ro se resolverá por
Decreto Supremo del Ministerio de Obras Públicas (…). El contrato se perfeccionará una
vez publicado en el diario oficial el decreto supremo de adjudicación”.
Art.10: “En el contrato de concesión se dejará constancia de otros beneficios”.
No obstante ha sido un tema ampliamente debatido no sólo en la doctrina nacional,
donde todavía ofrece dudas por esa extraña denominación de “contrato de concesión de
obra pública”; sino también en la comparada.
La noción de concesión de obra pública ha tenido una clara influencia doctrinal de la
concesión de servicio público, cuestión que ha apuntado la doctrina repetidamente. La
concesión se asocia dogmáticas y jurídicamente al desarrollo de una actividad catalogada de
servicio público (electricidad, sanitario, telecomunicaciones, transporte, etc.). Bajo este
criterio parte de la doctrina ha considerado, que cuando la Administración entrega a los
particulares una concesión de obra pública, lo hace precisamente para delegar en el
particular la prestación de determinado servicio. Y el ejemplo más claro es el de las
carreteras concesionadas. No obstante se suelen distinguir ambos tipos de concesiones
(servicio público propiamente tal), estudiando por separado el régimen de concesiones de
obra pública.
La concesión de obra pública es concebida hoy por los textos normativos vigentes
no solamente como una forma de ejecución y financiamiento de una obra pública, sino
además como una forma distinta de gestionar los servicios de infraestructura pública.
Claramente la concesión de obra pública, en especial las de carreteras concesionadas,
tienen una peculiaridad que la distingue de las formas tradicionales de construcción de una
obra pública. Pues aquí se conjugan el uso público, la utilidad pública con una actividad
económica (la explotación), que puede por ciertos rasgos comunes asociarse a la idea de
servicio público.
“En Chile, la doctrina ha asumido la existencia de la concesión de obra pública
como categoría autónoma, estableciendo como característica esencial el hecho que
mediante esta figura se permite la construcción, conservación y explotación de toda obra
pública (aunque hasta ahora se ha utilizado solamente en caminos públicos y aeropuertos),
y radicando la diferencia con la figura de servicio público en que en esta última lo esencial
consiste en que un particular realiza la explotación de tal servicio público por cuenta y a
nombre de la Administración. En cambio, en la concesión de obra pública lo esencial es la

48
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

ejecución o construcción de la misma, siendo su explotación sólo un procedimiento para


remunerar al particular o sociedad que se encarga de construirla”15.
Por lo tanto, sería un contrato adjudicado por propuesta pública para la ejecución de
una obra pública en el que se le entrega al que ha financiado la construcción la concesión
de la explotación de un bien nacional de uso público.
a) Régimen jurídico de la concesión de obra pública. La adjudicación del contrato de
concesión de obra pública implica que el concesionario está sometido a un estricto régimen
de Derecho Público impuesto por ley.
i) La adjudicación del contrato (art.8 LCo). Se resolverá por Decreto Supremo del
Ministerio de Obras Públicas, que deberá llevar, además, la firma del Ministro de Hacienda.
El contrato se perfeccionará una vez publicado en el Diario oficial el Decreto Supremo de
adjudicación.
ii) Expropiaciones y adquisición de bienes (art.15 LCo). Los bienes y derechos que adquiera
el concesionario a cualquier título y que queden afectos a la concesión, no podrán ser
enajenados separadamente de ésta, ni hipotecados o sometidos a gravámenes, sin el
consentimiento del Ministerio de Obra pública y pasaran al dominio fiscal al extinguirse la
concesión.
En el caso de requerirse la expropiación de bienes y derechos necesarios para la
construcción de las obras y sus servicios complementarios, ésta se llevará a efecto en virtud
de la declaración de utilidad pública establecida en el Art.105º del DS 290 MOP. Todos los
desembolsos, gastos, en virtud de la expropiación corren, por regla general, a cuenta del
concesionario.
iii) Derecho y obligaciones del concesionario (art.21 y ss. LCo). El concesionario cumplirá las
obligaciones suscritas en el contrato de concesión con arreglo por una parte; a las normas
de derecho público, especialmente en lo referente a sus relaciones con el Ministerio, a las
regulaciones sobre los regímenes de construcción y explotación de la obra y al cobro de
tarifas, su sistema de reajuste y las contraprestaciones con el fisco. Y por otra, se regirá por
las normas del derecho privado en sus relaciones económicas con los terceros, podrá
realizar a estos efectos cualquier operación lícita sin necesidad de mediar autorización del
MOP.
El concesionario podrá prendar el contrato o dar en prenda los flujos e ingresos
futuros de la concesión para garantizar obligaciones derivadas de dicha concesión.
Podrá transferir la concesión o los derechos de la sociedad concesionaria. La cesión
voluntaria o forzosa deberá ser total, comprendiendo todos los derechos y obligaciones de
dicho contrato y sólo podrá hacerse a una persona natural o jurídica.
iv) Tarifas. El concesionario percibirá como única compensación por los servicios que
preste, el precio, tarifa o subsidios convenidos y los otros beneficios adicionales
expresamente estipulados.
El concesionario no estará obligado a establecer exenciones a favor de usuario
alguno.
Las bases de licitación establecerán la forma y plazo en que el concesionario podrá
solicitar la revisión del Sistema tarifario y de su fórmula de reajustes (las bases incluyen un
reajuste anual de 3,5% aprox.) o del plazo de la concesión, por causas sobrevinientes que
así lo justifiquen.

15
SILVA CIMMA, Enrique (1995) pp. 223-224.

49
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

La modificación de las bases se harán mediante DS fundado expedido por el


Ministerio de Obras Públicas, el que deberá llevar, además, la firma del Ministro de
Hacienda.
v) Duración definida, Suspensión y Extinción. Esta materia se encuentra regulada en los
arts.25 y ss. LCo. De acuerdo a ella, las concesiones tendrán la duración que señale el
respectivo decreto de adjudicación, sin perjuicio de lo cual, dicho plazo no podrá exceder
de 50 años.
Se señala además que una vez terminado el plazo de duración de la concesión el
MOP deberá entregar nuevamente en concesión la obra, salvo que por razones técnicas
resulte inconveniente o perjudicial para el Estado de Chile concesionarla nuevamente, en
tal caso podrá el Presidente de la República eximir al MOP de tal obligación mediante
decreto fundado.
Finalmente la ley contempla determinadas causales de suspensión y extinción de la
concesión. Ejemplos de estas últimas son el incumplimiento grave de obligaciones del
concesionario y el cumplimiento del plazo de duración estipulado, entre otras.
D/ FASES EN LA EJECUCIÓN DE LA OBRA PÚBLICA.
Para efectos de estudiar las fases en la ejecución de la obra pública, debemos
distinguir entre los contratos de ejecución de obra pública y los contratos de concesión de
obra pública.
1. Las etapas del contrato de construcción de obra pública. El contrato de construcción de
obra pública es un contrato administrativo que se perfecciona y cumple en distintas etapas,
cada una de las cuales tiene una finalidad diferente, sin embargo todas ellas están regidas
por los principios básicos de transparencia, publicidad, igualdad, y libre concurrencia. A
continuación las describiremos someramente:
a) Licitación. La regla general en materia de contratos de ejecución de obra pública es
la licitación o concurso público, sólo excepcionalmente podrán adjudicarse por trato
directo o cotización privada, en los casos establecidos en la ley (art.1 RCOP, en relación al
art.86 LOCMOP).
Sólo podrán participar de las licitaciones aquellos contratistas inscritos en el
respectivo registro de contratista llevados por el ministerio y que se determine en las bases
de la licitación. Cada contratista presentará sus propuestas dentro del término que señala el
reglamento (varía según el monto de la obra), dichas propuestas constan de dos partes, la
propuesta técnica y la propuesta económica.
Presentadas las propuestas, se procede a su apertura ante una “Comisión de
apertura”, integrada por las personas y en la oportunidad señalada en las bases. Una vez
iniciado el acto de apertura no se admiten nuevas propuestas (art.81 RCOP).
b) Adjudicación. Una vez realizada la apertura de las propuestas estas son evaluadas por
una “comisión de evaluación”, integrada por al menos tres profesionales definidos en las
bases. Primeramente se evalúan las ofertas técnicas, debiendo rechazarse fundadamente las
ofertas que no cumplan con las exigencias técnicas del proyecto (art.84 Nº2 RCOP). A
continuación sólo se abrirán las ofertas económicas de aquellos participantes a quienes se
les hayan aprobado las propuestas técnicas.
Habiéndose examinado todas las propuestas, la adjudicación se realizará mediante
resolución de la autoridad que corresponda. Si la resolución se dicta después de 60 días (o
del plazo fijado en las bases) desde la apertura de las propuestas, los proponentes tendrán

50
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

derecho a desistirse de las mismas, sin embargo una vez dictada la resolución no existe
posibilidad de desistimiento.
El contrato de obra pública se entiende perfecto una vez que la resolución o el
decreto que adjudicó el contrato haya sido aprobado por la Contraloría General de la
República y haya ingresado a la oficina de partes del ministerio o la dirección que proceda
(arts.89 y 90 RCOP).
Posteriormente deberá protocolizarse dicho decreto o resolución y además el
contratista deberá presentar un Boleta de garantía por el 3% o 5% del valor de la obra,
según el tipo de obra de que se trate.
c) Ejecución. Una vez adjudicada la obra, la dirección correspondiente comunicará por
escrito el día en que tendrá lugar la entrega del terreno y del trazado de la obra, además de
toda la información necesaria para que el contratista ejecute la obra (art.137 RCOP).
De acuerdo al art.142 RCOP, el contratista deberá ejecutar los trabajos con arreglo a
lo señalado en las bases administrativas, especificaciones técnicas, y planes generales del
proyecto.
El plazo de ejecución de la obra será fijado en las bases administrativas y el
contratista estará obligado a cumplir, durante la ejecución de la obra, con los plazos
parciales estipulados en el programa oficial.
Durante la ejecución de la obra, el contratista recibirá pagos parciales mediante el
sistema de estados de pagos quincenales o mensuales según lo establecido en las bases
(art.153 RCOP).
d) Término. Una vez terminados los trabajos el contratista solicitará por escrito la
recepción de la obra al inspector fiscal. Para estos efectos se constituirá una comisión de
recepción. Se entiende como día de término de las obras, el día en que el contratista
terminó de construir el 100% de las obras contratadas.
Existe también la posibilidad de que la Administración ponga término anticipado al
contrato u ordenar la paralización de la obra cuando no haya fondos disponibles para
llevarla adelante, o cuando así lo aconsejen sus necesidades. En caso de paralización de
faenas ordenada por la dirección, se indemnizará al contratista (art.148 RCOP).
Finalmente, el art.151 RCOP contempla también algunas causales objetivas de
terminación del contrato, como por ejemplo:
i) El caso de que el contratista o uno de los socios que conforman la empresa contratista sea
condenado por un delito que merezca pena aflictiva.
ii) Si por error en la ejecución de los trabajos la obra quedara con defectos graves que no pudieran ser
reparados y ellos comprometieran su seguridad o fueren sustanciales al proyecto, otras causales.
iii) Si el contratista fuera declarado en quiebra.
2. Las etapas del contrato de concesión de obra pública. El contrato de concesión de obra
pública, es un contrato administrativo por el cual el Ministerio de Obras Públicas entrega a
un particular la construcción, mantenimiento y explotación de una obra pública, bajo un
sistema de concesión por un plazo determinado.
En el contrato de concesión pueden distinguirse dos etapas separadas por la puesta
en servicio de la obra. La primera, la fase de construcción, que a su vez se divide en dos
fases: a) la de diseño de la obra y b) la construcción efectiva de la misma. La segunda etapa
es la de explotación.
a) Fase de construcción:

51
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

i) Diseño de la obra pública. Cabe distinguir solicitud y propuesta; licitación y


adjudicación.
1) Solicitud y propuesta. La solicitud con la propuesta de la idea o proyecto, se presenta
ante el Ministerio de Obras Públicas, el cual tiene un plazo de 30 días para resolver si
acepta o rechaza dicho proyecto. En caso de rechazo, el inversionista privado cuenta con
un plazo de 90 días, prorrogable a 100 para presentar una nueva proposición, la cual es
estudiada por el Ministerio y puede ser aceptada o rechazada.
En caso que se apruebe el proyecto o la proposición, el Ministerio cuenta con un
plazo de un año para llamar a licitación, en la cual el inversionista privado presenta su
oferta.
2) Licitación. Luego del llamado a licitación y la elaboración de las bases, el
inversionista puede realizar consultas al Ministerio, las cuales pueden realizarse hasta 20
días antes de la apertura de las ofertas, y deben ser resueltas por el Ministerio hasta 10 días
antes de dicha apertura. En esta etapa el Ministerio está en poder de todas las ofertas, y está
capacitado para evaluar las ofertas técnica y económicamente.
3) Adjudicación. El Ministerio dicta un decreto de adjudicación que debe ir con la
firma del Ministro de Hacienda. Luego es publicado en el diario oficial.
ii) Construcción efectiva de la obra. Esta etapa comienza con los estudios de ingeniería y
con el inicio de la ejecución de las obras de acuerdo con lo estipulado en el contrato de
concesión y finalizará con la puesta en servicio provisoria de la obra. Previsto en el art.49
RLCo.
La construcción de la obra deberá realizarse en los plazos indicados en el contrato de
concesión corriendo el concesionario con los riesgos en que puedan ocurrir en esta etapa.
El plazo de construcción es un elemento esencial en el contrato de concesión puesto
que el plazo de la concesión empieza a contar desde el inicio del contrato. En esta etapa el
concesionario debe constituir una garantía correspondiente a la construcción, cuyo monto y
forma está determinado en las bases de licitación.
b) Fase de explotación y caducidad. La explotación implica la apertura al uso público de las
carreteras y con ellos el cobro de los peajes respectivos, previamente aprobados en las
bases de licitación, los cuales son el principal beneficio que recibe el concesionario.
La principal obligación del concesionario es mantener la obra en buenas condiciones,
prestar el servicio de forma regular, normal e ininterrumpida. Además debe aplicar las
normas y reglamentos sobre aplicación y uso de las obras que le fueron concedidas.
La caducidad de la concesión se produce por las causales establecidas en el art.27
LCo:
i) El cumplimiento del plazo.
ii) Mutuo acuerdo de las partes, es decir entre el Ministerio de Obras Públicas y el
concesionario.
iii) Incumplimiento grave de las bases por parte del concesionario.
iv) Otras causales contempladas en las bases de licitación.

VI. CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN MATERIA DE OBRA


PÚBLICA

52
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

1. En los casos de concesión de obra pública. Estos casos están expresamente regulados en
el art.36 LCo.
En virtud de este artículo se establece que cualquier controversia o reclamación
surgida con motivo de la interpretación o aplicación del contrato de concesión o a que de
lugar su ejecución, será conocida por una “comisión conciliadora” especialmente designada
al efecto compuesta por tres miembros, todos ellos profesionales universitarios, quienes
deberán ser nombrados al inicio de la respectiva concesión.
Cualquiera de las partes podrá solicitar la intervención de la comisión, quien deberá
instar por que se produzca una conciliación entre las partes (no sería una conciliación en
sentido procesal estricto, sino más bien una transacción). Cabe señalar que aun cuando esta
comisión, en una primera etapa, no tiene la calidad de tribunal, y por tanto no ejerce
funciones jurisdiccionales, está facultado por la misma norma para suspender los efectos de
las resoluciones del MOP que hayan sido objeto de reclamación (inc.5°)
Si dentro del plazo de 30 días no se produce acuerdo entre las partes, el
concesionario podrá solicitar a la misma comisión que se constituya como tribunal arbitral
o recurrir ante la Corte de apelaciones de Santiago, en ambos casos dentro del plazo de 5
días.
A pesar de que se establece este procedimiento contencioso especial, el mismo art.36
LCo señala que lo dispuesto en él, es sin perjuicio de las atribuciones del poder Judicial y de
la Contraloría General de la República, con lo cual deja a salvo la posibilidad del particular
concesionario de accionar por vía ordinaria o vía recurso de protección ante los tribunales
de justicia, y asimismo la facultad de la Contraloría para controlar la legalidad de las
actuaciones del MOP en cuanto ejerce potestades administrativas.
2. En los casos de contratos de ejecución de obra pública. De acuerdo al art.189 RCOP,
cualquier recurso intentado contra la Dirección General de Obras Públicas durante la
licitación o vigencia del contrato de obra pública se someterá a las normas del título IV
LBPA.

BIBLIOGRAFÍA.
RUFIAN LIZANA, Dolores (1999): Manual de Concesiones de Obras Públicas (Santiago, Fondo de
Cultura Económica Chile) 359 pp.
GARCÍA MORALES, Pedro (1988): “Marco legal de las concesiones de infraestructura de uso
público”, en Revista Chilena de Derecho, Vol. 25 Nº1.
SILVA CIMMA, Enrique (1995): “Derecho administrativo Chileno y comparado. El servicio público”
(Santiago, Editorial Jurídica de Chile)
VARGAS FRITZ, José Fernando (1997): La concesión de obras públicas (Santiago, La ley) 327
pp.

53
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

§ 10. DERECHO URBANÍSTICO.

I. EL HECHO JURÍDICO.
La regulación de los espacios urbanos es un tema que, con el crecimiento acelerado
de las ciudades, ha debido ser abordado por el derecho a través de una rama especial del
mismo denominada Derecho Urbanístico.
El contenido esencial de este Derecho Urbanístico es la ordenación del suelo, tema
de alto impacto público, pues de la forma de ordenación y configuración de las ciudades (y
los límites de éstas) se van adquiriendo derechos y configurando limitaciones para los
propietarios urbanos o rurales. Dependerá del sector donde se ubique, de acuerdo a la
calificación del suelo en el Plan, la facultad o prohibición del propietario de instalar locales
comerciales, industriales, edificar o simplemente no edificar. Tiene, entonces, la ordenación
del suelo dos efectos directos, uno, que dice relación con la planificación de las ciudades y
las posibilidades de edificación y urbanización de las mismas y otro que dice relación con la
delimitación y contenido del Derecho de propiedad.
De la ordenación del suelo depende la forma de convivencia y relación de las
personas en las sociedades contemporáneas. Las ciudades se han convertido en el hábitat
típico del hombre actual, más del 60 % de la población mundial vive en núcleos urbanos.
Esta cifra nos indica la dimensión del problema que conlleva la ordenación urbana, en la
que se deberán conciliar, mediante una regulación racional e igualitaria, los intereses
privados (extensión, límites de las edificaciones) y los intereses públicos (espacios públicos,
equipamiento, infraestructura sanitaria, etc.).
Los problemas a los que dan lugar las ciudades son disímiles de acuerdo a cada
realidad nacional: la concentración de usos, la densificación de actividades, abusos
constructivos, escasa constructubilidad de espacios públicos o el exceso de ellos,
planificación ineficiente de edificios que lleva a la congestión de las calles al ser utilizadas
como estacionamiento, las actividades sobre un terreno escaso, etc., son problemas -y lo
corrobora la observación y la práctica cotidiana, de alto impacto público (social,
medioambiental, económico, político, etc.). Esto hace que la actividad urbanística sea
configurada como una «función pública», lo cual significa o se traduce en que las decisiones
relacionadas con la calificación del suelo en rústico o urbano, la transformación del suelo
rústico en urbano, la localización de bienes públicos y equipamientos, la zonificación, la
determinación del límite urbano, los permisos para edificar, entre otras, corresponden a la
Administración. Ahora, toda la actividad urbanística en Chile no está «publificada», pues
como veremos el Derecho Urbanístico implica un fenómeno mucho más amplio.
Desde los orígenes históricos han surgido técnicas urbanísticas que implican
necesariamente ciertas decisiones radicadas en el poder público, originariamente los
municipios; como la técnica de las alineaciones, de las limitaciones a la propiedad, de las
relaciones de vecindad y de las servidumbres urbanas. Sin embargo, estas actuaciones
públicas no resultaban ser sino el encauzamiento de unas facultades privadas, que
resultaban ser sustantivas en el proceso urbanizador, en específico nos estamos refiriendo a
las facultades privadas que arrancan del derecho de propiedad del suelo de los propietarios
privados, por ende cada una de las facultades indicadas eran efectivas sólo en la medida que
el propietario privado las respetase. Hoy este es un sistema radicalmente superado. Las
decisiones básicas del urbanismo han quedado disociadas del derecho de propiedad privada
del suelo y atribuidas a un centro que no se legitima ya como propietario, sino como titular
del poder público responsable del orden colectivo, esto es la Administración.

54
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

En rigor, esto es la esencia del Derecho Urbanístico contemporáneo, lo que los


juristas anglosajones han denominado “development rights” y lo que conforme a un
latinismo romano tendemos a llamar el “ius edificandi”, es decir, la facultad de poner algo
sobre el suelo que tenga una trascendencia urbanística, transformándose así el uso del suelo
en una facultad que se ha separado definitivamente de la titularidad dominical para pasar a
ser el contenido de una función pública.
Con la ordenación urbana se pretenden regular tres realidades o fenómenos
asociados a la actividad urbanística: a) el uso del suelo, b) la urbanización y c) la edificación.
Mientras que en el caso de la «calificación del suelo y sus usos» es una potestad
administrativa, la «edificación» y la «urbanización» son actividades, esencialmente, llevadas
adelante por los particulares aunque reguladas por la Administración. Prima el principio de
subsidiariedad que, para algunos, se desprende del texto constitucional a pesar de no estar
reconocido expresamente. Por el cual, la urbanización y edificación se dan por regla
general16 por iniciativa de los particulares, pero deberán cumplir con ciertos requisitos para
su ejercicio, desde obtener la autorización (o permiso) para la urbanización o construcción,
hasta que ésta cumpla con ciertos estándares establecidos.
No obstante, respecto del carácter «privado» de la urbanización y edificación, se debe
tener en cuenta que el proceso urbanístico es un sistema que: a) se inicia con la
planificación, b) pasa por la urbanización y c) termina con la edificación. Ninguna de estas
acciones pueden o debieran estar desligadas unas de otras; pues el requerimiento de que el
urbanismo sea ordenado, implica y justifica, su carácter público, así como la intervención
administrativa. Parece entonces que, el problema no es de titularidades de derechos, ni de
atribuciones de gestiones, ni de atribución de una naturaleza pública o privada a cada una
de las acciones urbanísticas, sino de “integración de derechos y gestiones en un quehacer
común o público”17 en este caso referido a la construcción de las ciudades.
Desde la práctica o la manifestación en los hechos de la realidad urbanística, con
todos los problemas que conlleva y que hemos enunciado, el urbanismo tiene
características de una actividad que origina actitudes legislativas y regulatorias importantes.
El hecho jurídico regulado tiene que ver, entonces, con:
1. Ser la actividad urbanística una actividad de interés público y una función pública: A pesar de
no estar declarada en la legislación chilena el carácter público del urbanismo o de las
acciones urbanísticas, como sucede por ejemplo en España (que la vigente Ley del Suelo
declara en su art.3 que: “la ordenación territorial y la urbanística son funciones públicas
(…)”), es la actividad urbanística una actividad de alto interés público y a su vez una
función pública. Es una «función pública» en cuanto esta actividad tiene como objetivo
primero, conciliar los intereses públicos y privados en el uso y aprovechamiento del
territorio y segundo, debe propender a garantizar un orden o planificación de las ciudades
que ofrezca una calidad de vida a los ciudadanos (estacionamientos para la descongestión
del tráfico y las ciudades, espacios públicos, redes sanitarias y eléctricas, regular que las
actividades peligrosas se realicen alejadas de las ciudades, etc.).
2. Ser un modo de limitación del derecho de propiedad: Ello porque, en función de lo que
dispongan los distintos planes en donde se encuentre un determinado inmueble, será lícito
o ilícito, construir determinadas edificaciones en ese inmueble.
3. Y una necesidad para la vida en sociedad: La realidad jurídica urbanística depende,
entonces, de la necesidad de vivir en sociedad, en este caso, de manera ordenada en el

16
Sólo excepcionalmente se emprenden acciones urbanísticas por parte del SERVIU para la producción de
suelo edificable para viviendas sociales de bajo costo.
17
LARIOS TABUENCA (1975) p. 69.

55
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

espacio que es el territorio, ya sea urbano o rural; ordenación que basada en parámetros
técnicos, sociales, medioambientales, económicos, permite conciliar los intereses privados y
públicos de las sociedades contemporáneas.
II. MARCO REGULATORIO.
Existe una gran cantidad de normas jurídicas que configuran y delimitan el Derecho
urbanístico en Chile. A saber, las más importantes son:
1. Con respecto a la Planificación Territorial, Urbanización y Construcción.
a) Ley General de Urbanismo y Construcciones, DFL Nº458 de 1976 del Ministerio de
Vivienda y Urbanismo (LGUyC). Esta ley fue dictada en conformidad al DL Nº602, que
entrega facultades “al Ministerio de la Vivienda y Urbanismo para fijar los textos definitivos
de las leyes relativas a construcciones y urbanización”.
Es la norma más importante en materia urbanística en Chile, sistematizando todas las
instituciones más relevantes de esta área del derecho. Ha sido objeto de numerosas
modificaciones (para ser más precisos, 11 modificaciones en los últimos 16 años).
De acuerdo al art.2 LGUyC contiene “los principios, atribuciones, potestades,
facultades, responsabilidades, derechos, sanciones y demás normas que rigen a los
organismos, funcionarios, profesionales y particulares, en las acciones de planificación
urbana, urbanización y construcción”.
b) Ordenanza General de Urbanismo y Construcciones, DS Nº47 de 1992 del Ministerio de
Vivienda y Urbanismo (OGUyC). Esta norma reglamentaria se dictó a instancias del art.168
LGUyC, el que ordena al Ministerio de Vivienda y Urbanismo fijar, “por Decreto Supremo,
el nuevo texto de la Ordenanza General de esta ley, que derogue y reemplace totalmente a
la anterior”. Cumpliendo con este mandato, el 05 de junio de 1992 se publicó en el Diario
Oficial el DS Nº47 del Ministerio de Vivienda y Urbanismo.
Esta ordenanza contiene, de acuerdo al art.2 LGUyC, “las disposiciones
reglamentarias de esta ley (la LGUyC) y que regula el procedimiento administrativo, el
proceso de Planificación urbana, urbanización y construcción, y los standards técnicos de
diseño y construcción exigibles en los dos últimos”.
c) Ley Orgánica del Ministerio de la Vivienda y Urbanismo, DL Nº1305(LOMVyU). Esta
ley organiza, distribuye y delimita las distintas competencias del Ministerio de Vivienda y
Urbanismo.
En nuestro tema, son especialmente relevantes las potestades urbanísticas que le
confiere a la «División de Desarrollo Urbano» del Ministerio, en su art.12.
d) Ley Orgánica Constitucional sobre Municipalidades, Ley Nº18.695 (LOCM). Esta ley le
otorga determinadas funciones urbanísticas privativas a las municipalidades. Ellas son: “La
planificación y regulación de la comuna y la confección del plan regulador comunal, de
acuerdo con las normas legales vigentes” y “Aplicar las disposiciones sobre construcción y
urbanización, en la forma que determinen las leyes, sujetándose a las normas técnicas de
carácter general que dicte el ministerio respectivo” (art.3, letras b y e LOCM).
Además, las municipalidades, dentro de su territorio, y de manera coordinada con
otros órganos de la administración del Estado, pueden desarrollar funciones relativas a “la
urbanización y la vialidad urbana y rural” (art.4 letra f LOCM).
Es importante señalar que esta ley, en su art.24, nombra las funciones de la unidad de
obras municipales.

56
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

e) Ley Orgánica Constitucional sobre Gobierno y Administración Regional, Ley Nº19.175


(LOCGAR). El art.20 letra f) LOCGAR, le otorga al gobierno regional la facultad de
“aprobar los planes regionales de desarrollo urbano, los planes reguladores metropolitanos
e intercomunales, y los planes reguladores comunales y seccionales”.
f) Ley de Bases Generales del Medio Ambiente, Ley Nº19.300 (LBGMA). El art.10 letra h)
LBGMA somete al sistema de evaluación de impacto ambiental a los “planes regionales de
desarrollo urbano, planes intercomunales, planes reguladores comunales, planes
seccionales, proyectos industriales o inmobiliarios que los modifiquen o que se ejecuten en
zonas declaradas latentes o saturadas”.
2. Con respecto al contenido y limitación de la Propiedad.
a) Constitución Política de la Republica (CPR). Ella es plenamente aplicable, en cuanto
otorga a la ley (reserva legal) el modo de “usar y gozar” de la propiedad y la posibilidad de
establecer “limitaciones y obligaciones” a esta, siempre que deriven de la “función social”
de la misma. En todo caso, nunca estas obligaciones legales pueden llegar al punto de
privar de la propiedad, “del bien sobre que recae o de alguno de los atributos o facultades
esenciales del dominio”, salvo que opere el mecanismo expropiatorio que la misma
Constitución establece (art.19 Nº24 CPR).
Lo anterior se complementa con el art.19 Nº26 CPR, que establece que “no podrán
afectar los derechos en su esencia, ni imponer condiciones, tributos o requisitos que
impidan su libre ejercicio”.
III. PRINCIPIOS DE DERECHO URBANÍSTICO.
El derecho urbanístico se caracteriza, como casi todo el Derecho Administrativo, por
una amplia dispersión normativa, a pesar de contar con una regulación general o una Ley
general (LGUyC) existen una variedad de cuerpos normativos repartidos entre
Reglamentos e instrumentos de planificación, así como de otras normas referidas o con
efectos en la ordenación urbanística, como medioambientales y de otras naturalezas. En
este contexto, se hace necesario delimitar y enunciar los principios jurídicos que informan
la legislación urbanística.
1. El principio de planificación: La planificación urbana es el principio central del derecho
urbanístico, es la forma de ejecución directa de la regulación urbanística, por el cual se lleva
adelante y se concreta en cada espacio de terreno delimitado determinado régimen jurídico.
Es el plan el que define, el uso del suelo, la altura, densidad de población, el límite de
espacio urbano y rural, etc.
Dentro de la planificación como principio encontramos otros principios que
informan, a su vez, el sistema de planificación urbana:
a) Principio de competencia: Este significa, que cada uno de los instrumentos de
planificación tendrá un ámbito de acción propio, tanto en relación a la superficie de
territorio que abarcan como a las materias y disposiciones que contienen (arts.2.1.1, 2.1.7, y
2.1.10 OGUyC).
b) Principio de jerarquía: Los instrumentos de planificación constituyen un sistema en el
cual las disposiciones del instrumento de mayor nivel tienen primacía y son obligatorias
para los de menor nivel (arts.2.1.1 OGUyC).
c) Principio de supletoriedad: Los planes reguladores intercomunales o comunales, podrán
establecer, sólo para los territorios no planificados disposiciones transitorias con carácter
supletorio sobre las materias propias de otro nivel.

57
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

d) Principio de coordinación: Este es un principio que informa la actividad orgánica


interna de la Administración, por éste se entiende que la toma de decisiones, que
involucren más de una esfera administrativa, se haga de manera conjunta. Dentro de las
técnicas más utilizadas, se encuentra la «técnica de planificación conjunta», que supone la
elaboración en común de planes y programas de desarrollo. Para el caso del urbanismo su
significado tiene que ver con que la planificación tiene que hacerse en coordinación de
todos los órganos administrativos encargados y teniendo en cuenta todo los planes de
niveles superiores.
2. Función social de la propiedad: Este es uno de los principios, del derecho urbanístico,
que tienen que ver directamente con la esencia misma de esta disciplina del Derecho, de
éste se deriva el fundamento, límite y contenido de la regulación urbanística. El
fundamento de las restricciones a la propiedad sólo puede derivarse de la función social de
la propiedad, la cual según el propio texto constitucional incluye: los intereses generales de
la nación, la seguridad nacional, la utilidad y la salubridad públicas y la conservación del
patrimonio ambiental.
3. El principio de igualdad: Con este principio se pretende que los propietarios que están
en iguales condiciones se les imponga las mismas limitaciones o cargas urbanísticas, es decir
es el principio que consagra igual reparto de los beneficios y cargas urbanísticas a
propiedades en condiciones similares. Pero, más que la igualdad de cargas en propiedades
de similar situación, cosa que muchas veces es imposible, pues el límite entre una zona u
otra gráficamente hablando depende, muchas veces, no de una situación física determinada
sino de una potestad o decisión administrativa (la misma división entre espacios urbanos y
rurales, hace que propiedades separadas por metros estén sometidas a una distinta
regulación). Y es que, “la normativa urbanística es esencialmente desigual porque norma
situaciones desiguales”18 y no se puede pretender que siempre coincidan los mismos
regímenes para situaciones aparentemente iguales.
4. Principio de la temporalidad de las cargas singulares: Este es para el caso de la declaración
de inmueble afecto a declaración de utilidad pública, régimen presente en la actual LGUyC,
en su art.59, donde se reconoce un término de cinco o diez años, para la caducidad de la
declaración referida; pues de lo contrario se podrían encubrir formas de privaciones
indefinidas sin que haya mediado la correspondiente indemnización.
5. Principio de publicación: Este principio se traduce en la obligación de las
Municipalidades de publicar e informar el proyecto de Plan Regulador Comunal,
especialmente a los afectados, informándolos acerca de las principales características del
instrumento de planificación propuesto y de sus efectos.
6. Principio de participación: Este principio se suele confundir con el anterior, como si la
sola publicación de un plan fuera suficiente para configurarlo, además de ésta, los
interesados y afectados podrán formular, por escrito, las observaciones fundadas que
estimen convenientes acerca del proyecto hasta quince días después de la audiencia pública.
La participación ciudadana adquiere especial trascendencia en la tarea de la
planificación territorial, pues la eficacia de los planes depende en gran medida de su
aceptación por parte de la comunidad y del compromiso que para su concreción asuman
los destinatarios del mismo.
Para que la participación ciudadana cumpla realmente su objetivo debe cumplir con
ciertas condiciones:

18
LETELIER p. 1

58
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

a) Debe ser informada, y por ende hay que generar un espacio de socialización y
participación de la comunidad más amplio y profundo, por tanto no puede limitarse a la
sola exposición por 30 días de un plan.
b) Debe necesariamente incorporar distintos niveles, que están dados por los compromisos
que naturalmente se van dando, ya que no es lo mismo opinar sobre un territorio
inmediatamente cercano, que uno que está distante, aun cuando forme parte de la misma
comunidad.
c) También es necesario considerar la oportunidad de la participación; pensar que sólo basta a
nivel de la formulación es insuficiente, debe ser un proceso quizás continuo, y
definitivamente más recurrente que el actual, ajustado a las dinámicas propias de una
ciudad.
IV. ORGANIZACIÓN ADMINISTRATIVA DEL URBANISMO.
En Chile las potestades urbanísticas están entregadas a una variedad de órganos de
distintas jerarquías de naturaleza centralizada y descentralizada, que parten con las
potestades entregadas al Ministerio de Vivienda y Urbanismo, pasa por los Gobiernos
Regionales con las Secretarias Regionales respectivas, y llega hasta las Municipalidades y sus
estructuras administrativas con incidencia urbanística.
1. El Ministerio de Vivienda y Urbanismo, es el que tiene a su cargo la política
habitacional del país y la coordinación de las instituciones que se relacionan con el
Gobierno por su intermedio. Elabora los planes de viviendas urbanas y rurales,
equipamientos comunitarios y desarrollo urbano.
Además, dicta ordenanzas, reglamentos e instrucciones generales sobre urbanización
de terrenos, construcción de viviendas y sobre desarrollo y planificación urbana.
Le corresponderá, asimismo, aprobar por Decreto Supremo por orden del Presidente
de la República, los Planes Regionales de Desarrollo Urbano y los Planes Reguladores
Intercomunales (art.3 LGUyC).
El ministerio establece normas específicas para los estudios, revisión, aprobación y
modificaciones de los instrumentos de planificación (art.29 LGUyC). Se trata de la potestad
reglamentaria de desarrollo de la LGUyC, materializada a este respecto en el Título 2 de la
OGUyC.
Al interior de este ministerio, existe la «División de Desarrollo Urbano» (en adelante,
DDU). Mediante esta división, el ministerio ejerce importantes funciones urbanísticas, ya
que por medio de esta división puede “impartir las instrucciones para la aplicación de las
disposiciones de esta Ley y su Ordenanza General, mediante circulares, las que se
mantendrán a disposición de cualquier interesado” (art.4 inc.1º LGUyC). Esto da origen a
las Circulares de la DDU, de gran importancia en esta materia.
2. Las Secretarias Regionales Ministeriales, ejercen el control y deben supervigilar las
disposiciones legales, reglamentarias, administrativas y técnicas sobre construcción y
urbanización e interpretar las disposiciones de los instrumentos de planificación
territoriales (art.4 inc.1º LGUyC).
También conocen de los reclamos en contra de los actos administrativos emitidos
por el Director de Obras Municipales (art.12 LGUyC).
3. Las Municipalidades y el Director de Obras Municipales.
a) Municipalidades: Les corresponde aplicar la LGUyC, la OGUyC, las normas técnicas
y demás Reglamentos, en sus acciones administrativas relacionadas con la planificación

59
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

urbana, urbanización y construcción, y a través de las acciones de los servicios de utilidad


pública respectivos (art.5 LGUyC).
i) Las Municipalidades, son como ya lo hemos dichos las que ejecutan la LGUyC, y lo
hacen a través de las potestades de: a) planificación urbana comunal, b) fiscalización y
sanción, c) otorgamiento de autorizaciones para la urbanización y construcción (a través de
la DOM).
ii) Los Alcaldes, también podrán conocer de los reclamos en contra de los actos
administrativos emitidos por el Director de Obras Municipales, a través del reclamo de
ilegalidad municipal en su fase administrativa19.
b) Director de Obras Municipales: En todas las Municipalidades existe un cargo de
Director de Obras (DOM), que deberá ser desempeñado por un profesional con título
universitario, que corresponde o dirige la Dirección de Obras Municipales. El cargo de
DOM en las comunas con más de 40.000 habitantes deberá ser desempeñado por un
arquitecto o ingeniero civil (art.8 inc.1º LGUyC).
Esta función es exclusiva, ya que “ningún otro funcionario municipal podrá ejercer
estas funciones” (art.8 inc.1º LGUyC).
A falta, o en el caso de que no exista el cargo de DOM, los permisos los otorgará la
Secretaría Regional correspondiente al Ministerio de Vivienda y Urbanismo (art.11
LGUyC).
Serán funciones del DOM, según el art.9 LGUyC:
i) Estudiar los antecedentes.
ii) Dar los permisos de ejecución de obras.
iii) Conocer los reclamos durante las faenas.
iv) Dar recepción final de ellas, todo de acuerdo a las disposiciones de la LGUyC.
v) Dirigir las construcciones municipales que ejecute directamente el Municipio.
vi) Supervigilar estas construcciones cuando se contraten con terceros.
Los DOM (al igual que los Asesores Urbanistas), “deberán representar al Secretario
Regional de Vivienda y Urbanismo y a la Contraloría General de la República las acciones
ilegales del Municipio, que vulneren las disposiciones legales y reglamentarias que les
corresponde aplicar” (art.14 LGUyC).
4. Los Intendentes y Gobernadores. Les corresponderá supervigilar que los bienes
nacionales de uso público se conserven como tales, impedir su ocupación con otros fines y
exigir, en su caso, la restitución (art.6 LGUyC).
V. INSTITUCIONES JURÍDICAS DE DERECHO URBANÍSTICO.
A/ TERMINOLOGÍAS Y CONCEPTOS.
Esta rama del derecho se estructura en base a algunos conceptos fundamentales
como urbanismo, derecho urbanístico, ordenamiento territorial, planificación territorial y
planificación urbana. Conceptos que necesitan ser delimitados para poder encontrar el
exacto contenido y naturaleza del derecho urbanístico.
1. Urbanismo, desde un punto de vista etimológico proviene de urbe, que significa
ciudad; y de urbano, que es aquello que pertenece o es relativo a la ciudad, luego es posible

19
Art.140 LOCM y Dictamen Nº 7.052, 13 de febrero de 2006.

60
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

entender urbanismo como “el conjunto de conocimientos que se refieren al estudio de la


creación, desarrollo, reforma y progreso de los poblados en orden a las necesidades
materiales de la vida humana”20. Este concepto ha evolucionado, desde entender que al
hablar de urbanismo se estaba haciendo referencia a ordenanzas, pavimentaciones,
alcantarillado y otros elementos similares hasta nuestra actualidad donde se le entiende
como “el arte de proyectar y construir las unidades de concentración humana en forma que
sean satisfechas todas las premisas que garantizan la vida digna de los hombres y la eficacia
de la gran empresa que constituye una ciudad”21.
2. Derecho Urbanístico, es un conjunto de normas y principios jurídicos de naturaleza
común y administrativa que regulan la actividad urbanística, es decir, el conjunto de
acciones relacionadas con la planificación urbana, el proceso de urbanización y
construcción en la estructuración de las ciudades.
Algunos autores como Antonio Carceller han entendido este derecho como un
“conjunto de normas jurídicas, que por sí o a través del planeamiento que regulan,
establecen el régimen urbanístico de la propiedad del suelo y la ordenación urbana y
regulan la actividad administrativa encaminada al uso del suelo, a la urbanización y a la
edificación”. 22
A partir del concepto anterior es posible distinguir algunos de los elementos
principales que se conjugan en esta área del derecho, como son: la organización
administrativa, el régimen del suelo, la calificación y clasificación de los terrenos, la gestión
urbanística, entre otras. Luego, en base a estos elementos y a pesar de las distintas teorías
que se han elaborado respecto de la naturaleza del derecho administrativo, la tendencia
mayoritaria es estimarlo como perteneciente al derecho administrativo, a su parte especial;
lo que no obsta para que se comprenda en relación con algunas instituciones del Derecho
Civil, en particular con el derecho de propiedad.
3. Ordenamiento Territorial. Este concepto tiene gran amplitud y se suele confundir con
el de planificación territorial. La diferencia entre ambos es que, el primero de ellos, es mucho
más amplio, pues tiene un carácter integral y coordinado de varios temas asociados a la
regulación y planeamiento del suelo.
Se puede afirmar que el Ordenamiento Territorial (OT) ha sido objeto de diversas
interpretaciones, las cuales expresan distintas maneras de entender la naturaleza y el objeto
del OT.
En cuanto al objeto, los distintos planteamientos respecto de él llevan implícita o
explícitamente la idea de regular u organizar el uso, ocupación y transformación del
territorio en pro de su óptimo aprovechamiento. Este aprovechamiento se asocia
generalmente con el uso racional o sustentable de los recursos naturales (planificación
física-ambiental), en estrecha correspondencia con patrones adecuados de distribución de
asentamientos y de actividades económicas.
De acuerdo a su naturaleza el OT es un proceso planificado, integral, coordinado,
prospectivo-estratégico y democrático.
En este sentido, se han planteado las siguientes escalas: a) internacional, b) nacional, c)
regional, d) departamental, en el caso de países federados, y e) municipal.

20
Diccionario de la Lengua Española, Real Academia Española, Madrid, España, Editorial Espasa-Calpe,
1956.
21
BIDAGOR (1962) p.58.
22
CARCELLER (1992) p.17.

61
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

4. Planificación territorial. Normalmente esta planificación es sinónimo de zonificación.


La eficacia de esta planificación, necesariamente pasa por un gran esfuerzo de coordinación
y acoplamiento de múltiples intereses sectoriales y territoriales, en otras palabras “requiere
una coordinación tanto en sentido horizontal, es decir, entre los distintos departamentos de
la Administración Pública, como vertical, esto es, interadministrativa, entre diferentes
niveles de decisión. Si estos mecanismos en ambos sentidos no funcionan entonces se
corre el peligro de que los objetivos de la planificación territorial no se cumplan y que las
leyes de ordenación del territorio y planes territoriales queden en papel mojado y como
puros ejercicios académicos de estudio”.23
La «planificación territorial» es una modalidad de planificación física y normativa que
interviene justamente en la «ordenación» de los usos del suelo24.
La planificación territorial surge como respuesta a nivel nacional a tres fenómenos
territoriales a considerar:
a) El constante crecimiento urbano y la formación de áreas metropolitanas, que dado sus
características especiales escapan a la planificación urbana25 convencional.
b) Los desequilibrios regionales o territoriales en general.
c) Las áreas con problemáticas específicas, como por ejemplo las áreas rurales, las del litoral
o borde costero nacional, donde esta planificación, comporta normalmente una
“zonificación”26 detallada del territorio, estableciéndose directrices y promoviendo
actuaciones específicas para cada tipo de zona.
5. Planeamiento urbanístico, es la base necesaria y fundamental de toda ordenación
urbana, en tanto constituir el medio a través del cual es posible ordenar la ciudad.
En nuestro país el legislador se ha encargado de definir la «planificación urbana» en
términos generales, disponiendo que es “el proceso que se efectúa para orientar y regular el
desarrollo de los centros urbanos en función de una política nacional, regional, comunal de
desarrollo socioeconómico”27.
A partir del concepto anterior es posible desprender algunos elementos de esta
planificación, como por ejemplo que constituye un proceso, que su fundamento es orientar
y regular el desarrollo de las ciudades y; que la planificación se sustenta en una política de
desarrollo socioeconómico elaborada en cada uno de los niveles de planificación.
6. Otros conceptos relevantes. Ahora bien, conviene precisar y diferenciar algunos
vocablos muy comunes en la literatura del ordenamiento territorial como planeación,
planificación, política regional, planificación regional y planificación territorial.

23
HILDENBRAND, (1996) p.
24
ROMÁ PUJADAS (1992) pp.187.
25
La planificación urbana constituye una herramienta a través de la cual el Estado pretende alcanzar y
proteger el bien común y su fin último, en los asentamientos humanos, puede considerarse como el afán por
asegurar a la población unas adecuadas condiciones de habitabilidad en concordancia con el grado de
desarrollo socio-económico del país.
26 “
Se entiende por “zonificación” como la definición de límites de una zona en un área determinada. Esta definición
de límites dependerá de consideraciones tanto políticas, sociales, administrativas, ecológicas y económicas. Así
por ejemplo en el caso de querer aplicarla en áreas costeras que forman parte del borde costero nacional, se
deberán evaluar entro otros factores, los asentamientos humanos presentes, los recursos naturales
disponibles, los usos dentro de un área determinada, los conflictos entre los usuarios, la calidad de gestión de
las autoridades administrativas a cargo, proyectos y futuras inversiones, principales problemas
medioambientales, etc.” Álvarez Torres (2001) p.214.
27
Art.27 LGUyC, DFL 458 de 1976.

62
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

a) Planeación y planificación, no hay acuerdo entre los autores por una definición. Si al
menos éstos han intentado establecer una diferencia entre ambos conceptos señalando que
la planeación expresa un proceso técnico conducente a la formulación de planes de negocios
de las empresas para maximizar su ganancias sin importar sus consecuencias sociales y
ambientales; en tanto la planificación lleva implícita la valoración de los intereses sociales por
encima de los intereses de grupos políticos y empresas privadas y, por tanto, la
participación social se hace imprescindible.
b) Planificación global, sectorial y espacial, se refiere a una diferenciación de la planificación
según sus ámbitos de aplicación. La primera se identifica con la planificación económica, a
través de la cual se establecen las políticas generales de desarrollo socioeconómico,
aplicadas a un país, región, municipio o ciudad. La planificación sectorial desagrega a la global
en diversas partes o sectores de acuerdo a la organización operativa del Estado. La
planificación espacial o territorial es la que integra a las dos anteriores, tomando como base el
territorio, es normal que tome como hilo conductor al desarrollo urbano-regional,
económico-regional o el uso del territorio.
c) Política regional y planificación regional, el primero tienen un sentido más amplio
respecto del segundo. La política regional son directrices o lineamientos que expresan la
visión regional del modelo de desarrollo económico social y no requiere de la elaboración y
aprobación de planes pues se acerca más a la programación de inversiones públicas. En
tanto que la planificación regional implica un proceso y un sistema de organización
institucional para la gestión, que se fundamenta en planes, programas, estrategias, proyectos
y acciones tendientes a resolver desequilibrios del desarrollo regional.
La terminología que usa la LGUyC, respecto de los términos anteriores, es
instrumentos de planificación territorial, por lo que para algunos autores de la doctrina esta
distinción es irrelevante.
B/ INTERVENCIÓN URBANÍSTICA: LIMITACIONES AL DERECHO DE
PROPIEDAD Y AL IUS EDIFICANDI.
1. Las limitaciones (delimitaciones) al Derecho de propiedad. Una de las características de la
regulación que impone el derecho urbanístico a la propiedad es su carácter limitador; esto
significa que la regulación del derecho de propiedad no puede ser nunca, por la vía de la
planificación o intervención urbanística, de carácter privativo, es decir no puede encubrir la
legislación urbanística acciones que afecten el contenido o esencia del Derecho de
propiedad, pues dejaría de estar justificada en pos del interés general o público y tendría
que ser indemnizado.
Por «limitación» se entiende “cualquier restricción que pueda imponerse al derecho
de propiedad, sea que consista en deberes de acción o abstención (…)”28. “(…) La ley, al
concretar la función social de la propiedad, puede exigir de los propietarios conductas
activas en relación a sus bienes (…)”29.
Es decir, las limitaciones se concretan en verdaderos deberes jurídicos, aquellos
deberes que impone la ley a los propietarios en relación al ejercicio de su derecho de
propiedad, derivados de la función social de este último y que no pueden vulnerar la
esencia de las facultades inherentes al dominio, en cuanto el propietario tiene el deber de
soportarlos en beneficio del bien general y común. Estos se caracterizan por no ser
indemnizables mientras no se produzca un enriquecimiento para alguna de las partes30 y no

28
RAJEVIC (1996) P. 46
29
RAJEVIC (1996) P. 46
30
ALDUNATE (2006) p. 295.

63
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

se afecte el contenido esencial de las facultades de dominio. Es decir, “las limitaciones


pueden ser controladas por el parámetro constitucional del contenido esencial o esencia del
derecho”31.
Ahora, ¿cuáles son las facultades esenciales del dominio que no pueden ser
vulneradas?
El texto constitucional reconoce: “Nadie puede, en caso alguno, ser privado de su
propiedad, del bien sobre que recae o de alguno de los atributos o facultades esenciales del
dominio, sino en virtud de la ley general o especial que autorice la expropiación por causa
de utilidad pública o de interés nacional, calificada por el legislador”. Art.19 Nº24 CPR.
Asimismo establece: “La seguridad de que los preceptos legales que por mandato de
la Constitución regulen o complementen las garantías que ésta establece o que las limiten
en los casos en que ella autoriza, no podrán afectar los derechos en su esencia, ni imponer
condiciones, tributos o requisitos que impidan su libre ejercicio”. Art.19 Nº26 CPR.
El Tribunal Constitucional chileno (TC) con respecto a este tema ha entendido, que
un derecho es afectado en su esencia cuando se le priva de aquello que le es consustancial,
de manera tal, que deja de ser reconocible y que impide el ejercicio libre en aquellos casos
en que el legislador lo somete a exigencias que lo hacen irrealizables, lo entraban más allá
de lo razonable o lo privan de tutela judicial32.
Para la doctrina33, los elementos formales que integran el contenido esencial del
dominio son: a) la facultad de goce, consistente en el aprovechamiento o explotación del
bien sobre el que recae la propiedad, sin necesidad de intermediarios; y b) la facultad de
disposición, o sea el poder de traslación o transferencia de los bienes. Por lo tanto,
pareciera ser que mientras no se impida, en términos generales, la facultad de uso o goce
(de cualquier tipo que este sea) del terreno o la facultad de disponer del bien, se justifica
por el contenido de la función social del instituto de la propiedad cualquier limitación o
delimitación de la propiedad.
2. El Ius edificandi. El derecho a edificar está enmarcado dentro de la regulación de la
ley urbanística, ésta regula las formas y el régimen de las construcciones que pueden realizar
los propietarios del suelo urbano y rural. La discusión más intensa con respecto a este
derecho, tiene que ver con si se le considera o no como uno de los modos de ejercicio del
dominio, y por tanto formando parte de aquél, o simplemente es un derecho que nace y se
adquiere con la planificación y que es independiente del derecho de propiedad.
La tesis mayormente aceptada en la doctrina extranjera es la de considerar el derecho
de edificar como una facultad del derecho de propiedad, es decir una facultad que sólo
puede ejercer el que es propietario del suelo, pero que no forma parte del núcleo duro del
derecho de propiedad, en cuanto para que este derecho se configure se necesita que el Plan
Regulador no le prohíba al particular su ejercicio.
Las formas para hacer efectivo el «ius edificandi» es a través de las autorizaciones (o
permisos, en la terminología de la LGUyC) que otorga la DOM respectiva; lo cual conduce
a entender, y de acuerdo a lo regulado en la OGUyC, que con las autorizaciones y permisos
sólo se remueve un obstáculo para que el particular pueda ejercitar el derecho que
ostentaba a partir de la aprobación del plan. Otros autores, sin embargo, consideran que de
la planificación sólo derivan meras expectativas, y que sería imposible hablar de derechos

31
ALDUNATE (2006) p. 288.
32
TC, Rol nº43, 24 de febrero de 1987.
33
BARNES (1995) p. 49.

64
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

urbanísticos adquiridos, en cuanto la Administración tiene la potestad de modificación o


variación del planeamiento urbano34.
Lo cierto es que el derecho a edificar es uno de esos derechos que provoca cierta
incertidumbre en cuanto al momento o instante de su nacimiento o configuración, pues
son derechos que se han añadido o limitado de acuerdo y en consecuencia de la propia
legislación urbanística muchas de las veces coyunturales y promovidas por la necesidad del
desarrollo y crecimiento de las ciudades.
En la jurisprudencia chilena la discusión se ha centrado en los efectos (actuales,
pasados y futuros) que provoca las modificaciones de las condiciones o régimen inicial del
suelo; por ejemplo, cuando se ha entregado un derecho de edificar y antes de iniciadas las
obras se modifica el uso del suelo el cual sería incompatible con el nuevo plan. O cuando
iniciadas las obras de urbanización de un terreno se modifica el plan regulador que lo
afecta.
En el derecho chileno la modificación del Plan Regulador o la dictación de uno
totalmente nuevo no produce efectos retroactivos con respecto a los usos permitidos,
consolidadas y adquiridos válidamente. Y de haber una diferencia entre el uso del suelo
anterior y el vigente, procede a aplicar lo establecido en el art.62 LGUyC: “los terrenos
cuyos usos no se conformare con los instrumentos de planificación territorial
correspondientes, se entenderán congelados. En consecuencia, no podrá aumentarse en
ellos en volumen de construcción existente para dicho uso del suelo”. Lo que significa que
las edificaciones construidas conformes las normas antiguas que vulneren las disposiciones
del nuevo plan regulador no podrán ampliarse o rehacerse.
En el caso de los usos y restricciones actuales, sólo estarán condicionadas a posibles
modificaciones del Plan, es decir son válidamente respetadas mientras dure la vigencia del
Plan Regulador.
C/ INSTRUMENTOS Y TÉCNICAS EN LA INTERVENCIÓN URBANÍSTICA.
La intervención de la autoridad pública en el desarrollo urbano ha sido una inevitable
consecuencia del crecimiento de las ciudades y de sus conflictos, particularmente durante el
siglo que acaba de terminar35.
La legitimación, de la potestades de intervención urbanística, parte genéricamente de
la Constitución (“Sólo la ley puede establecer el modo de adquirir la propiedad, de usar,
gozar y disponer de ella y las limitaciones y obligaciones que deriven de la función social”
art.19 Nº24 CPR) y se hace efectiva en distintas técnicas e instrumentos jurídicos que
establecen esencialmente la LGUyC y su ordenanza, pero en especial en la potestad
planificadora o de realización del Plan que ostenta la autoridad administrativa respectiva. La
LGUyC establece las regulaciones generales y abstractas con vocación de vigencia
indefinida de la regulación urbanística (responsabilidad, régimen de permisos o
autorizaciones, presupuestos y contenido de los planes reguladores); pero el instrumento en
el que aparecen y se perfilan las necesidades reales, las limitaciones concretas, es en el Plan.
El Plan es la técnica por excelencia de la ordenación territorial, en el caso de Chile,
concretamente el plan regulador comunal.

34 “De esta manera, la planificación y sus efectos (zonas de restricción, determinación de usos de suelo, etc.)
son meras expectativas, no derechos ingresados en el patrimonio de los administrados: llevan per se una nota
de esencial caducidad, derivada de todas las normas que autorizan expresamente su modificación” RAJEVIC
(1998) p.80
35
Cfr. “Derecho y legislación Urbanística en Chile”, en Revista de Derecho Administrativo Económico, Vol. II, N°
2, año 2000, pp. 527 – 548.

65
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

Revisaremos ahora las distintas formas en que se presenta la intervención urbanística


en Chile.
1. La Zonificación o Calificación del suelo. Esta intervención se ha traducido, en Chile, en
una regulación con notas específicas como es regular a través de un proceso de
zonificación. La primera (la zonificación) es una definición de límites de una zona en un área
determinada. Esta definición de límites dependerá de consideraciones tanto políticas,
sociales, administrativas, ecológicas y económicas. La segunda (la calificación) se caracteriza
porque se establece que el atributo urbano de un terreno no se da sólo por el hecho de
estar dentro de un territorio considerado como tal, sino porque tal atributo está dado por la
autoridad, la cual fija determinadas zonas como urbanas, de extensión urbana (urbanizable)
y las novedosas zonas de desarrollo urbano condicionado (que a pesar de no estar
reconocidas en la LGUyC varios planes reguladores si la reconocen), así como la
determinación de las zonas rurales. Ahora, estas clasificaciones generales pueden implicar
otras calificaciones más específicas que tienen que ver con el tipo del uso del suelo, como
son por ejemplo: industrial, residual, comercial, deportivo y cultural o en el caso rural
(agrícola, ganadera o forestal).
La zonificación o calificación del suelo, “consiste en la reserva del suelo, de un concreto
suelo fijado incluso gráficamente, a determinado o determinados destinos, usos o
aprovechamientos, de suerte que la prescripción de la reserva supone la licitud o ilicitud de
las correspondientes actividades sobre el suelo en cuestión”36.
La propiedad entonces se encuentra regulada de acuerdo a su ubicación o situación
en un determinado espacio, esto significa que el propietario sólo podrá usar o disponer de
su propiedad de acuerdo a ciertas limitaciones y obligaciones, o como se denomina en la
doctrina “cargas urbanísticas”, que estarán establecidas en el instrumento de planificación
comunal.
La calificación o zonificación del suelo, un tema de relevada importancia en materia
urbanística37, depende, en el Derecho chileno, no del estado o situación del terreno sino de
una calificación jurídica incorporada en los planes reguladores comunales; lo cual significa
que mientras no se modifique el instrumento de planificación territorial y con
independencia de lo que se haya producido en los hechos el terreno mantiene esa
calificación. Esta calificación general del suelo, según el régimen vigente en Chile, es: área
urbana, área de extensión urbana y área rural.
Esta clasificación es esencial pues establece el principal límite de la urbanización, a
partir de éste se definen las zonas de edificación, las zonas urbanizables y no urbanizables,
así como qué actividades económicas pueden realizarse en cada una38.
Las acciones urbanísticas, de acuerdo a la legislación urbanística vigente en Chile,
son: i) planificación urbana, ii) urbanización y iii) construcción. Acciones que describen el
ámbito o escenario de la regulación urbanística, y que a continuación desarrollamos.
2. Planificación e Instrumentos de Planificación.
a) Objetivos Generales. La planificación tiene como ideas matrices u objetivos generales:
36
PAREJO ALFONSO (1986) p. 9.
37
El debate que se ha dado en España a partir de la nueva del Ley del suelo, pone en primer lugar el tema de
la calificación del suelo.
38
Su importancia, y los efectos que provoca su determinación pueden examinarse en el caso español como
ejemplo paradigmático, donde la conjunción de varios factores, pero en especial la calificación del suelo de
acuerdo, no a su estado actual, sino a la expectativa en cuanto su estado futuro, provocó una situación de
sobrevaloración del suelo, por lo que los precios en el mercado llegaron a cifras insostenibles. Situación, y así
se expone en la exposición de motivos de la Ley del Suelo española, por la cual fue modificada en el 2007.

66
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

i) Mejoramiento de la calidad de vida de las personas. La pérdida de calidad de vida de


muchas ciudades, revirtiendo la tendencia de la primera mitad del siglo XX, que hoy afecta
a la mayoría de la población, tiene como signos la marginalidad y la pobreza, la inseguridad
de las personas, la desintegración social y la contaminación ambiental.
El mejoramiento de la calidad de vida de las personas constituye no sólo un atributo
que debe tener toda planificación territorial, sino y principalmente es un fin en sí mismo. La
calidad de vida es justamente el factor más amenazado y vulnerable de cuantos constituyen
los objetivos de la ciudad, precisamente por las crecientes externalidades negativas que
caracterizan a los centros urbanos modernos.
ii) Bienes y servicios básicos. Aquí se trata de mejorar la accesibilidad de las personas a los
bienes y servicios básicos, tanto a través de programas sociales de apoyo a sectores de
menores ingresos normalmente bajo gestión municipal como a través de la acción explícita
del Estado por medio de sus distintos niveles de administración. Los bienes y servicios
básicos son esencialmente aquellos que corresponden al espacio físico habitable, a
infraestructura y equipamiento.
iii) Valorización de los espacios públicos. Los espacios públicos son elementos físicos
necesarios para lograr una sana convivencia de las personas en sus barrios y para crear un
sentido de identidad con la ciudad. Lograr un equilibrio entre espacio público y espacio
construido permite un desarrollo adecuado de las ciudades e incide en la creación de un
espíritu de ciudadanía.
b) Planificación. La principal potestad de la Administración para regular este fenómeno
ha sido la de planificar el uso del territorio, tarea que desarrolla a través de los llamados
planes reguladores y que constituye el punto de partida de una intensa y necesaria
regulación urbanística. Como ha dicho Ríos, estos planes son el auténtico “eje estructural”
del urbanismo, a cuya sombra se crean “órganos y figuras jurídicas cuya misión es plasmar
el plan en la realidad”39 junto a diversos mecanismos de control y represión, incluso
penales.
Con ello se pretende conciliar el interés público con el interés privado, garantizando a
los ciudadanos una calidad de vida adecuada en las ciudades.
En este sentido nuestra jurisprudencia ha señalando que “...el urbanismo compendia
y exterioriza toda la gama de valores vigente en la sociedad que lo elabora. De allí que el
derecho urbanístico (...) concierna no sólo al interés privado, sino principalmente al interés
público y social, porque la ciudad, la calidad de vida y las posibilidades de realización
personal que ella proporciona constituyen un bien común destinado a todos y valioso para
todos...”40.
La Constitución establece que para el gobierno y administración interior del Estado
debe observarse como principio básico “la búsqueda de un desarrollo territorial armónico y
equitativo” (art.104), mandato que recoge la LOCGAR41 al asignar a los gobiernos
regionales una serie de funciones en materia de ordenamiento territorial y planificación
urbana42. Esta última43 se encuentra sustantivamente regulada en la LGUyC, que la define

39
RÍOS A. (1985) p. 281.
40
R.D.J., T. 90, 1993, 2° parte, S.V., p. 80.
41
El Decreto Supremo N°291, del Ministerio del Interior, publicado en el D.O. del 20.03.93, fijó el texto
refundido de la Ley N°19.175, orgánica Constitucional sobre Gobierno y Administración Regional.
42
P. Ej. arts.17, 20 f), 24 o) y 36 c).
43
La Constitución y la LOCGAR hablan de ordenamiento del territorio, expresión que comprende tanto el
área rural como urbana. Ello no quita que en algunos supuestos excepcionales la planificación afecte a
sectores rurales.

67
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

como el proceso que “se efectúa para orientar y regular el desarrollo de los centros urbanos
en función de una política nacional, regional y comunal de desarrollo socioeconómico”
(art.27 LGUyC). Para lograr este objetivo la LGUyC contempla una serie de normas de
naturaleza administrativa, de diferente nivel geográfico y jerárquico, encargadas de
particularizar las normas urbanísticas a supuestos espaciales concretos44.
c) Instrumentos. Los instrumentos de planificación territorial son esencialmente el Plan
Nacional de Desarrollo Urbano, el Plan Regional, el Plan Regulador Intercomunal, el Plan
Regulador Comunal, los planos y planes seccionales y el límite urbano, llamados
precisamente en términos genéricos por el reglamento de la LGUyC “instrumentos de
planificación territorial” (art.2.1.1. OGUyC).
De estos instrumentos son los “planes reguladores” los que han adquirido relevancia
en la vida nacional en los últimos tiempos, entre otras causas, a raíz de la controversia que
ha generado la edificación en altura y el aumento de la densidad poblacional en los sectores
residenciales, trayendo en no pocas ocasiones el deterioro de la calidad de vida de sus
habitantes, la insuficiencia de medios de vías de transportes y los efectos de una expansión
acelerada y no siempre ordenada de la ciudad.
En la elaboración y aprobación de estos instrumentos intervienen numerosos
organismos, entre los que destacan los Gobiernos Regionales, las Municipalidades y el
Ministerio de la Vivienda y Urbanismo (en adelante MINVU).
d) Niveles de planificación urbana.
i) El nivel nacional. Según el art.29 LGUyC, el MINVU está encargado de la
planificación del desarrollo urbano a nivel nacional, correspondiéndole a la DDU “elaborar
los planes nacionales de desarrollo urbano de acuerdo a las instrucciones formuladas por el
Ministro” (art.12 b) LOMVyU). Hasta hoy, no existe ni ha existido tal plan nacional, y
parece tan utópica como innecesaria una norma de esta naturaleza (de hecho, la OGUyC
no contiene referencias a este nivel de planificación). En cambio, lo que si se ha sancionado
es una Política Nacional de Desarrollo Urbano (mediante el DS. Nº31 MINVU, del
04.03.1985)45, lo que parece mucho más sensato y útil para guiar las políticas públicas
sectoriales (aunque sólo se trate de un documento programático, al punto que, pese a los
considerables cambios vividos por la sociedad chilena desde 1985, su contenido no ha sido
modificado).
ii) El nivel regional. La planificación urbana regional, que debe orientar el desarrollo de
los centros urbanos en el territorio regional, tampoco ha tenido mejor suerte. En 25 años
de vigencia de la LGUyC no se ha aprobado ningún Plan Regional de Desarrollo Urbano,
si bien varias regiones siguen intentándolo.
iii) El nivel intercomunal. El tercer nivel de planificación es el intercomunal, “que regula
el desarrollo físico de las áreas urbanas y rurales de diversas comunas que, por sus
relaciones, se integran en una unidad urbana” (art.34 LGUyC). Corresponde al SEREMI de
Vivienda y Urbanismo calificar las áreas sujetas a Planificación Urbana Intercomunal y las
comunas que estén sujetas a la aprobación previa del Plan Regulador Intercomunal para los
efectos de la confección del Plan Regulador Comunal. A la fecha tan sólo existen 8
instrumentos de esta naturaleza46, de manera que puede decirse que se trata de una facultad
escasamente ejercida.

44
GARCÍA DE ENTERRÍA y PAREJO ALFONSO (1979) p. 162.
45
El art.8 LOMVyU encarga al MINVU la formulación de la política nacional habitacional y urbanística del
gobierno, debiendo proponerle tales políticas la DDU (art.12 LOMVyU).
46
La Serena-Coquimbo, Valparaíso, lago Rapel, Rancagua, Colbún-Machicura, Concepción, Villarrica-Pucón.

68
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

Cabe señalar que, estando en estudio una modificación del plan regulador
intercomunal, el art.17 LGUyC permite al Alcalde postergar el otorgamiento de permisos
de subdivisión, de loteo o urbanización predial y de construcciones en los sectores
afectados, como lo veremos más adelante.
iv) La planificación urbana comunal. El último nivel de la planificación urbana a que se
refiere la ley es el comunal o local, que origina los planes reguladores comunales,
instrumentos básicos de la gestión comunal que deben promover el desarrollo armónico
del territorio comunal, en especial de sus centros poblados, en concordancia con las metas
regionales de desarrollo económico-social (art.41 LGUyC). Para ello contiene un conjunto
de normas sobre las condiciones de higiene y seguridad en los edificios y espacios urbanos,
y de comodidad en la relación funcional entre las zonas habitacionales, de trabajo,
equipamiento y esparcimiento. Señala la ley que “sus disposiciones se refieren al uso del
suelo o zonificación, localización del equipamiento comunitario, estacionamiento,
jerarquización de la estructura vial, fijación de límites urbanos, densidades y determinación
de prioridades en la urbanización de terrenos para la expansión de la ciudad, en función de
la factibilidad de ampliar o dotar de redes sanitarias y energéticas, y demás aspectos
urbanísticos” (art.41 inc. final LGUyC). Como se ve, se trata de una amplia competencia
que busca normar todos los aspectos posibles de la vida urbana47.
A la fecha existen aproximadamente 230 planes reguladores comunales en un
conjunto de 345 Municipios, lo que es una cifra bastante significativa considerando la
realidad de los anteriores instrumentos de planificación. El procedimiento de aprobación
de estos instrumentos se ha ido desperdigando progresivamente en diversas leyes
especiales, sin que la LGUyC dé cuenta de dichas modificaciones tácitas. Si uno quiere
revisar las normas aplicables debe revisar los arts.43 y ss. LGUyC, los arts.21, 56, 65 b), 82,
94 y 99 LOCM, los arts.20 f), 24 y 36 c) LOCGAR, el art.11 h) LBGMA, el art.3 Nº24 de la
resolución Nº520/96, de la Contraloría General de la República y los arts.2.1.6. y 2.1.7.
OGUyC.
v) Planos y planes seccionales. Son instrumentos de rango inferior al plan regulador
comunal, que se limitan a planificar sectores precisos de una comuna, sea porque el plan
regulador comunal existente debe ser detallado para permitir o facilitar su aplicación (art.46
inc.1, LGUyC y art.21, inc. final letra b) LOCM) o porque en comunas que carecen de plan
regulador es necesario planificar una parcialidad del territorio urbano (art.46 inc.2 LGUyC).
En el primer caso el art.46 de la LGUyC habla de “planos”, y en el segundo, de “planes”.
Su uso es bastante frecuente, registrándose 384 en la base de datos del MINVU (si bien
muchos de ellos corresponden a la misma comuna; Arica, por ejemplo, tiene 67).
Los planos seccionales constituyen, conforme a la Circular DDU 55, “un
instrumento complementario, que no puede ser utilizado para modificar el Plan Regulador
Comunal, y cuya principal función es establecer normas de diseño urbano referidas al
espacio público, y eventualmente a las edificaciones, en los casos en que estas no hubieran
estado previstas en el nivel superior. Por la naturaleza de las materias que regula, puede ser
el instrumento determinante del carácter de un barrio”. El inciso final del art.46 LGUyC
señala algunos supuestos en que resulta obligatorio confeccionar estos instrumentos que -
insistimos- no pueden modificar el plan comunal, sino sólo detallarlo.
Hay tres procedimientos aplicables a la aprobación de seccionales:

47 Tal como reconoce la extensa Circular DDU Nº55, de 1999: “El Plan Regulador es una herramienta de
gran potencia. Sus disposiciones son obligatorias para todo proyecto que se emplace en el área reglamentada,
siendo al mismo tiempo el instrumento a través del cual la comuna decide el momento, las prioridades y las
modalidades de expansión del territorio apto para acoger actividades urbanas”

69
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

1) Decreto supremo, aplicable únicamente a los confeccionados para declarar zonas


de remodelación o de construcción obligatoria.
2) El de los “planes” reguladores comunales, aplicable a los que se dictan cuando no
hay plan regulador y que se tramita igual que este (posiblemente esto explique que muchas
veces se llame seccional a cualquier modificación puntual del plan regulador comunal).
3) El procedimiento simplificado del art.45 LGUyC, aplicable a los seccionales que
detallan y no modifican el plan regulador.
Los seccionales serán válidos desde su publicación en el Diario Oficial, junto a su
ordenanza (art.2.1.13 OGUyC), y están compuestos por los mismos documentos que un
plan comunal (art.2.1.9 OGUyC).
vi) El límite urbano como instrumento de planificación, El art.52 LGUyC define al límite
urbano como “la línea imaginaria que delimita las áreas urbanas y de extensión urbana que
conforman los centros poblados, diferenciándolos del resto del área comunal”.
La Contraloría General de la República ha entendido que “el límite urbano separa al
territorio comunal en dos porciones diferenciadas; en una se encuentran las superficies
urbanas ya consolidadas, (áreas urbanas) y las susceptibles de urbanización (áreas de
extensión urbana), y en la otra, el resto del área comunal, llamada rural, donde está
prohibido abrir calles, subdividir, formar poblaciones, construir y demás. El concepto de
límite urbano se aplica también a la planificación intercomunal, de modo que los planes
reguladores intercomunales no pueden establecer zonas de expansión urbana en terrenos
rurales”.48
Normalmente el límite está incluido en el plan regulador (art.54 LGUyC) y no
constituye, por tanto, un instrumento de planificación en sí mismo. Sin embargo, el art.53
LGUyC permite fijar límites urbanos en comunas que no cuenten con plan regulador, con
lo cual ha constituido el nivel mínimo de planificación posible en una comuna (arts.2.1.1 y
2.1.10 OGUyC), señalando cuál es el área urbana de la comuna. Sin embargo, se trata de
una decisión de gran trascendencia por lo que recibe casi la misma tramitación que un plan
regulador comunal.
Precisamente esta simplicidad hace que sea el instrumento más usado, presente en
cerca de 240 comunas.
e) Participación ciudadana en los distintos planes. Reseñaremos someramente dónde
encontramos este tipo de participación en cada uno de los distintos planes que
precedentemente se han comentado.
i) Planes Regionales de Desarrollo Urbano: Cuenta entre sus atribuciones el Gobierno
Regional la de “…emitir opinión respecto de los planes reguladores regionales”, además al
estar comprendidos entre los proyectos y actividades susceptibles de causar impacto
ambiental deben someterse al SEIA, siéndole aplicables las normas del art.26 y ss. LBGMA
que están bajo el título denominado “De la participación de la comunidad en el
procedimiento de Evaluación de Impacto Ambiental”.
ii) Planes Reguladores Intercomunales: Corresponde al Gobierno Regional la aprobación
de esta especie de planes, se aplican también las mismas normas de la LBGMA.
iii) Planes Reguladores Comunales: Se exige la exposición al público del proyecto del Plan
Regulador, son 30 días de exposición, para que los interesados formulen por escrito…las

48
Dictamen Nº2.373, de 1984.

70
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

observaciones que estimen convenientes, las que deben ser oportunamente puestas en
conocimiento del Consejo respectivo. Son igualmente aplicables las normas de la LBGMA.
iv) Planes seccionales: Se rigen por el procedimiento establecido para los planes
reguladores comunales, por lo que se consultan en éstos las vías antes enunciadas.
f) Procedimiento para la elaboración y modificación de los planes. Los planes precedentemente
señalados constituyen, y así lo considera parte importante de la doctrina49, normas
reglamentarias, aprobadas por actos administrativos, respecto de los cuales, los
procedimientos para su elaboración y modificación, constituyen en la especie
procedimientos administrativos y como tales participan de sus características y se
encuentran orientados por los principios que guían a la actividad procedimental en esta
rama del Derecho.
Ahora, no es posible desconocer que si bien estos procedimientos administrativos se
encuentran reglados presentan una complejidad mayor a la hora de su tratamiento
normativo, pues existen respecto de ellos una diversidad de órganos y sujetos que
participan en su elaboración, entre los principales podemos citar:
i) Las Secretarias Regionales Ministeriales de Vivienda y Urbanismo: ellas participan
confeccionando Planes Regionales de Desarrollo Urbano y Planes Reguladores
Intercomunales, también calificando las áreas sujetas a planificación urbana intercomunal y,
emitiendo el informe técnico que requieren los Planes Reguladores Comunales.
ii) Los Servicios Regionales o Metropolitano de Vivienda y Urbanización: en casos especiales
tratándose de sus proyectos pueden proponer a través de las respectivas Secretarías
Regionales Ministeriales de la Vivienda y Urbanismo modificaciones a los planes
reguladores comunales.
iii) Los Gobiernos Regionales: ellos deben aprobar los planes reguladores intercomunales
y comunales de acuerdo a la normativa que rija en la materia y emitir opinión respecto de
los planes reguladores regionales.
iv) Las Municipalidades: es función privativa de estas la planificación y regulación
urbana de la comuna y la confección del plan regulador comunal (la confección del plan
comunal y la proposición de modificaciones corresponde a la unidad encargada de obras
municipales, el Alcalde requiere acuerdo del Concejo para aprobar el proyecto de Plan
Regulador Comunal), tienen además derecho a ser oídas en la elaboración de los Planes
Intercomunales.
v) La Contraloría General de la República: toma parte en este proceso en cuanto los
decretos y resoluciones que aprueben los planes reguladores y sus ordenanzas, al igual que
sus modificaciones, están afectos al trámite de Toma de Razón.
vi) Los particulares: ellos pueden formular observaciones a los planes comunales dentro
del plazo que indica la LGUyC, como también pueden efectuar presentaciones a
Contraloría General de la República.
Además de los señalados pueden intervenir otros organismos como el Ministerio de
Agricultura, los Servicios Regionales de Salud, el Servicio de Evaluación Ambiental y en
general todos aquellos que sean públicos o privados, sujetos individuales o colectivos que
tengan interés en estos procedimientos cuya participación se encuentre prevista por la ley
en la fase pertinente, ya sea de modo imperativo o facultativo.

49
RAJEVIC (1998) p. 67.

71
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

3. Urbanización. La urbanización es otras de las acciones urbanísticas que establece la


LGUyC, por ésta se entiende, el conjunto de obras necesarias para la creación de una
estructura urbana óptima que permita la existencia de unidades de suelo sobre las cuales se
pueda edificar.
Para Eduardo Cordero, “la urbanización es la parte o fase dinámica del urbanismo y
está vinculada con la actividad de ejecución del planeamiento urbanístico o del instrumento
de planificación territorial, teniendo como elemento distintivo y central el proceso de
transformación del suelo de acuerdo a las previsiones contenidas en el plan urbanístico,
tanto para la producción de suelo urbano y de unidades edificables, así como para la
transformación del ya existente”. Continúa diciendo que, “por esta razón, se distingue entre
lo que es la ejecución del planeamiento, que es la actividad material y sistemática de
transformación del suelo (…) y el acto de aplicación del planeamiento, que permiten
materializar las normas de uso y edificación”.
La urbanización es, entonces, la fase siguiente al planeamiento, la que ha de dotar al
suelo de los servicios necesarios para que sea apto para edificar. Es la fase en la que se
transforma el suelo rústico en solar, o en terreno edificable. Es lo que comúnmente se
conoce como loteos.
Según la LGUyC (art.65), el proceso de subdivisión y urbanización del suelo
comprende tres casos: a) subdivisión de terrenos, sin que se requiera la ejecución de obras
de urbanización, por ser suficientes las existentes. b) loteos de terrenos, condicionados a la
ejecución de obras de urbanización, incluyendo como tales la apertura de calles y formación
de nuevos barrios o poblaciones. c) urbanización de loteos existentes, cuyas obras de
infraestructuras sanitarias y energéticas y de pavimentación no fueren realizadas
oportunamente.
4. Edificación y construcción. La edificación es la fase final de la actuación urbanística, por
esta se entiende la construcción de las obras previamente diseñadas, las cuales podrán ser
de cualquier naturaleza. La edificación es una actividad económica que puede ser sometida
al régimen jurídico ordinario o común, en el marco del ejercicio de la libertad de empresa;
pero sometido a un régimen administrativo, en cuanto para su ejercicio se necesita, previo
cumplimiento de ciertos requisitos, de una autorización de la autoridad administrativa
correspondiente.
Además, como las demás acciones urbanísticas, la edificación, debe ajustarse a los
límites y usos establecidos para el suelo sobre el cual se pretende edificar conforme al Plan
respectivo; así como, deberá respetar los estándares establecidos en la OGUyC en lo
relativo a:
a) Trazados viales urbanos.
b) Áreas verdes y equipamiento.
c) Líneas de edificación, rasantes, alturas, salientes, cierros, etc.
d) Dimensionamiento mínimo de los espacios, según su uso específico (habitación, comercio,
oficina, escolar, asistencial, circulación, etc.).
e) Condiciones de estabilidad y sismicidad.
f) Condiciones de incombustibilidad.
g) Condiciones de salubridad, iluminación y ventilación.
h) Dotación de servicios sanitarios y energéticos.
i) Otras materias que señale la ordenanza general.

72
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

Por lo tanto, a pesar de ser la actividad de edificación una actividad de iniciativa


privada, a la cual no está obligada la Administración como servidor público, tiene impuesto
un específico régimen administrativo, referido a: calificación de suelo edificable, permiso de
edificación, cumplimiento de estándares técnicos constructivos y otros.
VI. AUTORIZACIONES EN MATERIA URBANÍSTICA.
1. Certificado de Informaciones Previas. De acuerdo con el art.116 inc.6 LGUyC, “La
Dirección de Obras Municipales, a petición del interesado, emitirá un certificado de
informaciones previas que contenga las condiciones aplicables al predio de que se trate, de
acuerdo con las normas urbanísticas derivadas del instrumento de planificación territorial
respectivo. El certificado mantendrá su validez mientras no se modifiquen las normas
urbanísticas, legales o reglamentarias pertinentes”.
Esta certificación se detalla ampliamente en el art.1.4.4. OGUyC. Si es relevante
mencionar que, en virtud de esta norma reglamentaria, se le exige a la DOM respectiva
emitir el Certificado de Informaciones Previas en un plazo máximo de 7 días. Este plazo
aumenta a un máximo de 15 días, en el caso que la DOM no cuente con información
catastral sobre el predio.
De este modo, una vez emitido dicho certificado por la DOM respectiva, no podría
modificarse mientras no se alteren las normas urbanísticas aplicables al predio, lo que
aporta un principio de certeza.
En verdad, el Certificado de Informaciones Previas, más que un documento que
asegure la aprobación de un anteproyecto o proyecto, sólo se encarga de precisar las
normas aplicables al predio de que se trata, que los profesionales deberán tener presente al
momento de preparar el anteproyecto y/o proyecto.
Ahora bien, dado que el Certificado de Informaciones Previas, tal como hemos
dicho, sólo mantiene su validez mientras no se modifiquen las normas urbanísticas, éste no
ofrece al interesado la seguridad necesaria para desarrollar su proyecto, por lo cual debe
presentarlo ante la DOM y obtener la aprobación del anteproyecto de construcción50.
2. Anteproyecto de Construcción. Se encuentra regulado en el art.116 inc.7 LGUyC, el que
expresa que “podrán someterse a la aprobación del Director de Obras Municipales,
anteproyectos de loteo, de edificación o de urbanización. El anteproyecto aprobado
mantendrá su vigencia respecto de todas las condiciones urbanísticas del instrumento de
planificación territorial respectivo y de las normas de la Ordenanza General de Urbanismo
y Construcciones consideradas en aquél y con las que se hubiere aprobado, para los efectos
de la obtención del permiso correspondiente, durante el plazo que determine la misma
Ordenanza”.
Todos los antecedentes que el solicitante debe presentar para obtener la aprobación
de este anteproyecto se encuentran ampliamente detallados en el art.5.1.5. OGUyC.
El art.1.4.11. OGUyC agrega plazos de vigencia del anteproyecto, señalando que “El
anteproyecto aprobado, para los efectos de la obtención del permiso correspondiente,
mantendrá su vigencia respecto de todas las condiciones urbanísticas del Instrumento de
Planificación Territorial respectivo y de las normas de la Ordenanza General de Urbanismo
y Construcciones consideradas en aquél y con las que se hubiere aprobado. El plazo de
vigencia será de 180 días, salvo en los casos que a continuación se señalan, en que dicho
plazo será de 1 año:
1. Tratándose de anteproyectos de loteo cuya superficie sea superior a 5 hectáreas.

50
FIGUEROA VELASCO (2006) p. 172.

73
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

2. Tratándose de anteproyectos de edificación cuya superficie edificada sea superior a


10.000 m2.
3. Tratándose de anteproyectos que requieran, para obtener el permiso de edificación
o urbanización, el pronunciamiento de otra repartición pública”.
De este modo, queda claro que los anteproyectos de construcción, una vez
aprobados por el DOM, incorporan al patrimonio del beneficiario un derecho personal, un
derecho adquirido a presentar y obtener la aprobación de una solicitud de Permiso de
Edificación, por un tiempo limitado, por lo que se trata de un derecho adquirido pero no
permanente51.
3. Permiso de Edificación. El permiso es el acto administrativo por excelencia que emite
el DOM. El cual se entiende como: el acto administrativo de autorización que reconoce la
existencia de un derecho cuyo ejercicio es autorizado en razón de haberse comprobado por
la Administración el cumplimiento de las exigencias legales para su otorgamiento, es decir
ajustado a la normativa urbanística aplicable al tipo de obra (art.116 LGUyC).
Como señala el mismo art.116 LGUyC, “La construcción, reconstrucción,
reparación, alteración, ampliación de edificios y obras de urbanización de cualquier
naturaleza, sean urbanas o rurales, requerirán permiso de la Dirección de Obras
municipales, a petición del propietario, con las excepciones que señale la Ordenanza
General”. El art.5.1.1. OGUyC, confirma lo anterior, señalando que “Para construir,
reconstruir, reparar, alterar, ampliar o demoler un edificio, o ejecutar obras menores, se
deberá solicitar permiso del Director de Obras Municipales respectivo”. Una vez entregado
el permiso al propietario del suelo, se produce el reconocimiento de un derecho
preexistente, adquiriendo la calidad de derecho adquirido.
Las obras que no requieren permiso se encuentran en el art.5.1.2. de la OGUyC, y
son:
“1. Obras de carácter no estructural al interior de una vivienda.
2. Elementos exteriores sobrepuestos que no requieran cimientos.
3. Cierros interiores.
4. Obras de mantención.
5. Instalaciones interiores adicionales a las reglamentariamente requeridas, sin
perjuicio del cumplimiento de las normas técnicas que en cada caso correspondan, tales
como: instalaciones de computación, telefonía, música, iluminación decorativa, aire
acondicionado, alarmas, controles de video, y otras.
6. Piscinas privadas a más de 1,5 m del deslinde con predios vecinos.
7. Instalación de antenas de telecomunicaciones. En este caso el interesado deberá
presentar a la Dirección de Obras Municipales, con una antelación de al menos 15 días, un
aviso de instalación, adjuntando los siguientes documentos.”
En el caso que se ejecuten obras en contravención a los Planes Reguladores o sin
haber obtenido el correspondiente permiso, el Secretario Regional de Vivienda y
Urbanismo podrá, fundadamente y con auxilio de la fuerza pública, si fuere necesario,
ordenar la paralización y por resolución fundada, la demolición total o parcial de las obras, con el
solo informe del Director de Obras Municipales respectivo, quien deberá emitirlo dentro
del plazo máximo de 15 días (art.157 LGUyC).

51
Cfr. FIGUEROA VELASCO (2006) p. 173.

74
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

a) Naturaleza jurídica. En el derecho chileno el acto de otorgamiento del permiso de


urbanización o edificación, tiene las siguientes características52:
i) Es un acto reglado de autorización. El permiso consiste en una autorización o licencia
para realizar un acto que está permitido, que tiene el carácter de acto administrativo
declarativo reglado, en cuanto, una vez verificado por la autoridad administrativa cumple
con todas las condiciones y requisitos que establece la ley debe otorgárselo.
ii) Es un acto reglado de carácter real. Es decir aún cuando se le otorgue individualmente
al propietario interesado, este afecta al suelo o propiedad, por lo tanto podrá ser transferido
a un nuevo propietario.
iii) Y de él emanan ciertos derecho.: El titular de un derecho de edificación o urbanización
adquiere la facultad de ejecutar edificaciones, así como adquiere el derecho a la estabilidad
de la autorización otorgada para la construcción de la obra y que ésta una vez terminada sea
recepcionada o aprobada conforme a la normativa que determinó la autorización.
b) Procedimiento para el otorgamiento del permiso.
i) Actos previos o de control.
1) Las DOM, a petición del interesado emitirá un “certificado de informaciones previas”
que, como ya lo vimos, deberá contener las condiciones aplicables al predio de que se trate
de acuerdo con las normas urbanísticas derivadas del Instrumento de Planificación
Territorial.
2) También podrán someter a aprobación los anteproyectos de loteo o subdivisión (que
también ya revisamos) los cuales mantendrán su vigencia, de acuerdo al IPT, hasta la
obtención del permiso correspondiente.
ii) Otorgamiento del permiso.
1) Presentación ante el DOM de la solicitud del permiso por parte del interesado.
Todo lo que se requiere se detalla ampliamente en el art.5.1.6. OGUyC.
2) El DOM tendrá un plazo de 30 días desde la presentación para pronunciarse sobre
el permiso (art.118 inc.1 LGUyC). El plazo se reducirá a 15 días, “si a la solicitud de
permiso se acompañare el informe favorable de un revisor independiente o del arquitecto
proyectista en su caso” (art.118, inc.2º LGUyC).
3) Es requisito para la eventual obtención del permiso, el previo pago de los derechos
municipales correspondientes (art.116 inc.5º LGUyC).
4) El DOM otorgará el permiso requerido “si, de acuerdo con los antecedentes
acompañados, los proyectos cumplen con las normas urbanísticas” (art.116 inc.5º LGUyC).
5) En el caso que el DOM no apruebe la solicitud presentada, suscribirá un Acta de
Observaciones, la que “deberá poner en conocimiento del interesado, por escrito, en un
solo acto y dentro del plazo máximo para pronunciarse que corresponda para la actuación
requerida (esto es, 30 o 15 días, dependiendo del caso), la totalidad de las observaciones
que estime deben ser aclaradas o subsanadas antes de aprobarse”.
6) El peticionario tiene un plazo máximo de 60 días, contados desde la comunicación
formal de dicha Acta, para aclarar o subsanar las observaciones realizadas por el DOM en
ella. Si no evacua dicha respuesta, el DOM deberá rechazar la solicitud de aprobación del
permiso y devolver todos los antecedentes al interesado, debidamente timbrados (art.1.4.9.
OGUyC).

52
FIGUEROA VELASCO (2006) p.174.

75
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

iii) Postergación de Permisos de Construcción. Existe la posibilidad de que un permiso de


construcción (además de otro tipo de permisos que señala la misma norma) se pueda
postergar hasta por un plazo de tres meses, “cuando el sector de ubicación del terreno esté
afectado por estudios sobre modificaciones del Plan Regulador Intercomunal o Comunal,
aprobados por resolución del Alcalde. Esta postergación deberá ser informada previa y
favorablemente por la Secretaría Regional correspondiente del Ministerio de Vivienda y
Urbanismo” (art.117 LGUyC).
En el art.117 inc.2 LGUyC se permite extender el plazo señalado “hasta completar
un máximo de doce meses”, es decir, nueve meses adicionales al máximo establecido en el
inc.1º, siempre que exista un Decreto Supremo del MINVU por orden del Presidente de la
República o Resolución del SEREMI de Vivienda y Urbanismo respectivo, dependiendo si
se trata de estudios sobre modificaciones de un Plan Regulador Intercomunal o de un Plan
Regulador Comunal, respectivamente.
iv) Caducidad de Permisos de Construcción. Esta posibilidad está contemplada en el
art.1.4.17. OGUyC, el que señala: “El permiso caducará automáticamente a los tres años de
concedido si no se hubieren iniciado las obras correspondientes o si éstas hubieren
permanecido paralizadas durante el mismo lapso.
Una obra se entenderá iniciada una vez realizados los trazados y comenzadas las
excavaciones contempladas en los planos del proyecto”.
El fundamento de esta caducidad objetiva deriva del incumplimiento por el
particular de las condiciones a que la misma estuviera subordinada, en que “se trata de
conjugar y armonizar la prerrogativa de la administración con la garantía del administrado,
permitiendo aquella figura impedir el resultado poco estético de edificaciones en permanente
construcción y la apariencia de licencias obtenidas para la ejecución de obras que no se van
a llevar a cabo por el momento, cuando ya se sabe o se presiente que una nueva ordenación
las haría inviables y evitar peticiones de licencias meramente especulativas, simplemente
para traficar con ellas”5354.

53
ORTEGA BERNARDO, Julia, citado en FIGUEROA VELASCO (2006) p. 180.
54
En relación a la caducidad del permiso existe una interesante sentencia de la Excma. Corte Suprema con
motivo de un recurso de protección acogido contra una Dirección de Obras que había rechazado la solicitud de
un grupo de vecinos de declarar la caducidad del permiso de edificación otorgado a una empresa inmobiliaria
para construir un edificio de 12 pisos, por haber transcurrido más de 3 años sin que se iniciaran las obras,
restableciéndose lo siguiente:
N°5 "Que el plazo señalado en el permiso de edificación N° 08/93 es de caducidad, razón por la cual expiró por el simple transcurso del
tiempo y, en consecuencia, al iniciarse las obras de construcción a que él se refiere, ya se encontraba caducado, lo que significa, en el hecho, que
no existe tal permiso";
N°6 "Que, así las cosas, al rechazar la recurrida la petición de caducidad del señalado permiso que se le formulara por los
recurrentes, actuó en forma ilegal y arbitraria, vulnerando la garantía constitucional contemplada en el artículo 19 N° 24 de la
Constitución Política de la República, pues con ello permite la construcción de un edificio de mayor altura en un área en que actualmente,
conforme a la reglamentación municipal, sólo se pueden levantar edificaciones de menor altura que la proyectada inicialmente lo cual,
evidentemente, aparte de ser ilegal, afecta a los actores";
N°7 "Que, como se señaló anteriormente, el efecto de la caducidad del permiso de edificación es que ya no puede edificarse el inmueble a que él se
refiere, lo cual no obsta a que la empresa afectada por ello pueda iniciar o reanudar los trabajos, debiendo sí mediar una nueva solicitud de
permiso y el pago de los correspondientes derechos, sometiéndose a la reglamentación vigente y con las limitaciones que ésta actualmente establezca,
tal como lo determina el artículo 5.1.20. de la Ordenanza General de Urbanismo y Construcciones" .187-188
De lo expuesto precedentemente, y reconocido por la propia Corte Suprema, queda en claro que la
caducidad de un permiso de edificación significa que no puede edificarse el inmueble a que él se refiere, lo cual
no obsta a que el propietario afectado pueda ejecutar dicha obra en virtud del otorgamiento de un nuevo
permiso, el que se someterá a la normativa urbanística aplicable a la época de esta nueva solicitud de
permiso.
Lo anterior significa que habiendo operado la caducidad de un permiso no podría la Dirección de Obras
Municipales autorizar la modificación de dicho permiso caducado, sino que únicamente otorgar uno nuevo, en

76
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

v) Invalidación y revocación de los permisos de edificación. Esta posibilidad, creemos


que está vedada, ya que una vez otorgado válidamente el permiso por el órgano
administrativo competente (el DOM) al particular, ha entrado a formar parte de su
patrimonio, de su propiedad, la que se encuentra protegida constitucionalmente (art.19
Nº24 CPR). De esta manera, no podría la autoridad administrativa que otorgó el permiso
dejarlo sin efecto posteriormente por una causal externa, distinta a las condiciones en que
se otorgó el acto administrativo (como lo serian las causales de caducidad objetivas que
explicamos, las que sujetan a dicho acto al cumplimiento de ciertos requisitos fijados con
anterioridad a la dictación del acto administrativo).
VII. CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO ESPECIAL

1. Recurso jerárquico. Recurso que se interpone frente al SEREMI de Viviendas en


contra de cualquier acto que emita el Director de Obras Municipales (art.12 LGUyC).

2. No se establece en la LGUyC un proceso contencioso especial, propiamente


dicho, en contra de lo resuelto por el Director de Obras Municipales o en su caso por la
Secretaría regional correspondiente. No obstante, ha sido aceptado por la jurisprudencia
judicial y administrativa (CGR) la posibilidad de que se interponga reclamo de ilegalidad
municipal ante la Corte de Apelaciones respectiva, en virtud del art.140 LOCM que establece
la posibilidad de reclamar contra las resoluciones u omisiones del Alcalde o las de sus
funcionarios; considerándose al Director de Obras Municipales como un funcionario
municipal.

Bibliografía
ALDUNATE LIZANA, Eduardo (2006): “Limitación y expropiación: Scilla y Carbdis de la
dogmática constitucional de la propiedad”, Revista Chilena de Derecho (Pontificia Universidad
Católica de Chile, Santiago) pp. 285-303.
Álvarez Torres, Sandra (2001):“El Borde Costero y su Uso”, tesis para optar al grado de
Licenciado en Derecho (Pontificia Universidad Católica de Chile) pp. 214.
BIDAGOR, Pedro (1962): Discurso de apertura del Primer Congreso Nacional de Urbanismo
(Madrid) p. 58.
BRUNA CONTRERAS, Guillermo (1996): “Uso y goce de la propiedad urbana”, Revista de
Derecho Público (Universidad de Chile, Santiago) 59-70 pp.
CARCELLER FERNÁNDEZ, Antonio (1992): Introducción al derecho urbanístico (Editorial Tecnos,
Madrid) p. 17.
CORDERO QUINZACARA, Eduardo (2006): “El derecho urbanístico chileno y la dogmática
constitucional de la propiedad”, ponencia presentada en las Primeras Jornadas de Derecho
Inmobiliario y Urbanístico de la Pontificia Universidad Católica de Chile.
FERMANDOIS VÖHRINGER, Arturo (1997): “Discrecionalidad urbanística y garantías
constitucionales”, Revista Chilena de Derecho (Pontificia Universidad Católica de Chile) pp.
243-248.
FIGUEROA VELASCO, Patricio y FIGUEROA VALDÉS, Juan Eduardo (2006): Urbanismo y
construcción (Lexis Nexis, Santiago) 327 pp.
GARCÍA DE ENTERRÍA, Eduardo y PAREJO ALFONSO, Luciano (1979): Lecciones de Derecho
Urbanístico, 1° Edición (Madrid, Civitas) T. I, p. 162.

la medida que se dé cumplimiento a la normativa vigente, y a través de este expediente renovar el permiso
primitivo caducado. Figueroa Velasco (2006) pp. 180-181.

77
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

HILDENBRAND, A. (1996): “Política de ordenación del territorio en Europa” (Universidad de


Sevilla, Consejería de Obras Públicas y Transportes de la Junta de Andalucía, Sevilla).
JACQUOT, Henri (2004): Droit de l’urbanisme (Dalloz, Paris) 913 pp.
LARIAS TABUENCA, Federico (1975): “La facultad de edificar y el proceso de urbanización”,
en Revista de Administración pública, nº 75. pp. 32-63.
PAREJO LUCIANO, Alfonso (1986): Derecho urbanístico. Instituciones básicas (Mendoza, Ciudad
Argentina) 684 pp.
RAJEVIC MOSLER, Enrique Petar (1998): “La propiedad privada y los derechos adquiridos
ante la planificación urbana, Revista Chilena de Derecho (Pontificia Universidad Católica de
Chile, Santiago) pp. 65-112.
RAJEVIC MOSLER, Enrique Petar (1996): “Limitaciones, reserva legal y contenido esencial
de la propiedad privada”, Revista Chilena de Derecho (Pontificia Universidad Católica de Chile,
Santiago) pp. 23-97.
RAJEVIC MOSLER, Enrique Petar (2000): “Derecho y legislación urbanística en Chile”,
Revista de Derecho administrativo Económico (Pontificia Universidad Católica de Chile, Santiago)
pp. 527-548.
RÍOS, Lautaro (1985): El urbanismo y los principios fundamentales del derecho urbanístico
(Universidad Católica de Chile, Santiago) 630 pp.
ROMÁ PUJADAS, Jaume Font (1992): “Ordenación y Planificación Territorial”. Espacios y
Sociedades, Serie Mayor (Editorial Síntesis, Madrid) pp. 187.
Normativa
Ley General de Urbanismo y Construcción. DFL 458.
Ordenanza General de Urbanismo y Construcción. Decreto 47.
Decreto Ley 3516, Normas sobre división de predios rústicos.
Ley Nº20. 071 de 2005. Crea y regula el Registro Nacional de Revisores independientes de
obras de edificación.
Ley Nº8.946. Sobre pavimentación comunal.
Ley Nº19.778. Modifica la Ley 19.175 Orgánica Constitucional sobre gobiernos regionales
y administración regional en materia de planes reguladores.
Jurisprudencia
-TC Rol Nº146.
-TC Rol Nº43, 24 de febrero de 1987.
Jurisprudencia judicial
“Vecinos del barrio Jardín del Este” con Dirección de obras Municipales de la Municipalidad de Las
Condes”. 24 de abril de 1995.
“Beldar y otros contra Ministro de Vivienda y Urbanismo” de fecha 22.06.98, ROL 5.203-97.
“Las Américas administradora de fondos de inversión con la Municipalidad de Providencia”. Rol 3226-
2007.
Jurisprudencia administrativa
- Dictamen 46317, 6 de octubre de 2008.
-Dictamen 2965, 22 de octubre de 2008.
-Dictamen 9655, 28 de febrero de 2006.

78
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

ÍNDICE DETALLADO

TERCERA PARTE
RECURSOS NATURALES Y MEDIO AMBIENTE
(Continuación)

§ 7. DERECHO ADMINISTRATIVO DE BOSQUES


I. EL BOSQUE COMO HECHO JURÍDICO
II. MARCO REGULATORIO DEL DERECHO FORESTAL EN CHILE
1. Decreto Supremo Nº 4.363, de 1931. Ley de bosques (LB)
2. Decreto Ley Nº 2.565 de 1979. Ley de fomento Forestal (LFF)
3. Ley Nº 20.283, de 2008. Regulación del bosque nativo (LBN)
4. Ley Nº 18.362, de 1984. Ley del SNASPE
III .PRINCIPIOS JURÍDICOS DEL DERECHO FORESTAL
1. Fomento de la actividad forestal
2. Planificación Previa
3. Resguardo del Bosque Nativo.
4. Protección del Medio Ambiente
IV. INSTITUCIONALIDAD ORGÁNICA FORESTAL
1. Naturaleza jurídica de la CONAF
2. Juridicidad de las atribuciones de la CONAF
V. INSTITUCIONES Y PROCEDIMIENTOS
1. Planes.de manejo
2. Otras autorizaciones
3. Concesiones
A/ PLANES DE MANEJO Y CONCESIONES EN LA LEY DE BOSQUES (LB)
B/ INSTITUCIONES EN LA LEY DE FOMENTO FORESTAL (LFF)
1. De la calificación de terrenos forestales
2. De los planes de manejo
3. De los incentivos a la actividad forestal
a) El Estado bonificará, por una sola vez por cada superficie, un porcentaje de los costos netos de las
siguientes actividades realizadas en terrenos ya calificados como forestales
i) La forestación en suelos frágiles, en ñadis o en áreas en proceso de desertificación
ii) La forestación en suelos degradados y las actividades de recuperación de dichos suelos o de
estabilización de dunas
iii) El establecimiento de cortinas cortavientos, en suelos de cualquier clase, que se encuentren
degradados o con serio peligro de erosión por efecto de la acción eólica
iv) La forestación que efectúen los pequeños propietarios forestales en suelos de aptitud
preferentemente forestal o en suelos degradados de cualquier clase
v) La primera poda y el raleo de la masa proveniente de las forestaciones realizadas por los
pequeños propietarios forestales
vi) Las forestaciones en suelos degradados con pendientes superiores al 100%
b) Estarán exentos del impuesto territorial que grava los terrenos agrícolas, los siguientes
i) Los terrenos calificados de aptitud preferentemente forestal que cuenten con plantaciones
bonificadas y los bosques nativos
ii) Los terrenos cubiertos con bosques de protección
c) Las utilidades derivadas de la explotación de bosques naturales o artificiales obtenidas por personas
naturales o jurídicas estarán afectas al impuesto general de la Ley sobre Impuesto a la Renta (LIR)
4. De las sanciones
C/ INSTITUCIONES EN LA LEY DE BOSQUE NATIVO (LBN)
1. Definición de conceptos
a) Bosque
b) Bosque nativo

79
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

i) Bosque nativo de preservación


ii) Bosque nativo de conservación y protección
iii) Bosque nativo de uso múltiple
2. Tipos forestales
3. Planes de manejo
a) Clasificación de los planes de manejo
i) Plan de manejo de preservación
ii) Plan de manejo forestal
b) Explotación de bosques nativos
c) Acreditadores forestales
i) Que los datos de los planes de manejo correspondan a la realidad
ii) La correcta ejecución de las actividades comprometidas en el plan de manejo para obtener
las bonificaciones contempladas en el Fondo
4. Fondo de conservación, recuperación y manejo sustentable del bosque nativo
5. Delitos y sanciones
a) Delitos
i) El acreditador que certificare un hecho falso o inexistente
ii) El que presentare o elaborare un plan de manejo basado en certificados falsos o que
acrediten un hecho inexistente, a sabiendas de tales circunstancias
iii) El que, con el propósito de acogerse a las bonificaciones establecidas en la LBN, hubiere
presentado a sabiendas, un plan de manejo basado en antecedentes falsos, distintos de los
señalados en el art.49
b) Infracciones
6. Conclusiones relevantes
D/ LEY Nº 18.362, DE 1984. LEY DEL SNASPE
1. Antecedentes generales y objetivos
a) Mantener áreas de carácter único o representativas de la diversidad ecológica natural del país
b) Mantener y mejorar recursos de la flora y la fauna silvestre y racionalizar su utilización
c) Mantener la capacidad productiva de los suelos y restaurar aquellos que se encuentren en peligro o
en estado de erosión
d) Mantener y mejorar los sistemas hidrológicos naturales
e) Preservar y mejorar los recursos escénicos naturales y los elementos culturales ligados a un ambiente
natural
2. Categorías de manejo del SNASPE
a) Reserva de Región Virgen
b) Parque Nacional
c) Monumento Natural
d) Reserva Nacional
3. Rol de la CONAF en el SNASPE
VI. CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO ESPECIAL
1. Reclamación.

§ 8. DERECHO ADMINISTRATIVO DEL MEDIO AMBIENTE


I. EL HECHO JURÍDICO
II. MARCO REGULATORIO: FUENTES DEL DERECHO AMBIENTAL EN CHILE
1. Constitución Política de la República (CPR)
2. Legislación Sectorial Ambiental
a) Ley de Bases Generales del Medio Ambiente 19.300 de marzo del año 1994 (LBGMA)
i) Dar contenido concreto a la garantía constitucional del derecho a vivir en un medio ambiente
libre de contaminación
ii) Crear una institucionalidad ambiental
iii) Crear instrumentos eficientes de gestión ambiental
iv) Servir de referente a la legislación ambiental posterior
b) Reglamento del Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental, DS Nº 95 del Ministerio
Secretaría General de la Presidencia, del 2001 (RSEIA)

80
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

c) Ley 20.417 de 26 de Enero de 2010, artículo segundo: LOC de la Superintendencia de


Medioambiente (LOCSMA)
3. Normas ambientales dispersas en otros cuerpos normativos
III. PRINCIPIOS JURÍDICOS DEL DERECHO MEDIOAMBIENTAL
1. Generalidades: Nuevos Aportes LBGMA
a) El Art. N°1
i) Derecho a vivir en un ambiente libre de contaminación
ii) Protección del Medio Ambiente
iii) Preservación de la Naturaleza
iv) Conservación del Patrimonio Ambiental
b) El Art. N°2
c) El Art. N°3
i) El que está contaminando debe asumir los costos técnicos de no contaminar (Principio
Contaminador Pagador)
ii) Si ha causado daño, debe repararlo
d) El Art. N°4
i) Participación ciudadana
ii) Educación ambiental
e) El Art. N°5
2. Principios Doctrinarios (que informan la Ley de Bases del Medio Ambiente).
a) Principio Preventivo
b) Principio Participativo
c) Principio de la Eficiencia
d) Principio “El Que Contamina Paga”
e) Principio de la Responsabilidad
III. CONCEPTOS BÁSICOS EN MATERIA AMBIENTAL
1. Contaminación (concepto normativo)
2. Impacto Ambiental
3. Daño Ambiental
4. Evaluación Ambiental Estratégica
5. Evaluación de Impacto Ambiental
6. Medio ambiente (concepto normativo)
7. Medio Ambiente libre de contaminación (concepto normativo)
8. Normas de calidad ambiental
9. Normas de Emisión
IV. INSTITUCIONALIDAD AMBIENTAL
1. Ministerio del Medio Ambiente
a) Funciones en particular
i) Proponer las políticas ambientales e informar periódicamente sobre sus avances y
cumplimientos
ii) Velar por el cumplimiento de las convenciones internacionales
iii) Colaborar con las autoridades competentes a nivel nacional, regional y local en la
preparación, aprobación y desarrollo de programas
iv) Coordinar el proceso de generación de las normas de calidad ambiental, de emisión y de
planes de prevención y/o descontaminación
v) Interpretar administrativamente las normas de calidad ambiental y de emisión, los planes
de prevención y/o de descontaminación
vi) Fomentar y facilitar la participación ciudadana
b) Composición del Ministerio
i) Ministro del Medio Ambiente
ii) Subsecretario
iii) Divisiones
iv) SEREMIS del Medio ambiente
v) Consejo Consultivo nacional y Consejos Regionales
2. Consejo de Ministros para la Sustentabilidad

81
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

a) Proponer políticas para el manejo y aprovechamiento sustentable de recursos naturales no


renovables, y la adopción de criterios de sustentabilidad
b) Pronunciarse sobre los criterios y mecanismos en virtud de los cuales se deberá efectuar la
participación ciudadana
c) Emitir pronunciamientos respecto de proyectos de ley o de actos administrativos
3. Servicio de Evaluación Ambiental
a) Competencias del Servicio
i) Administrar el SEIA
ii) Uniformar criterios, requisitos, exigencias técnicas y procedimientos de carácter ambiental
iii) Interpretar administrativamente las RCA
iv) Fomentar y facilitar la participación ciudadana en la evaluación de proyectos
4. Superintendencia del Medio Ambiente
a) Instrumentos que fiscaliza
i) Resoluciones de calificación ambiental (RCA)
ii) Planes de descontaminación y prevención
iii) Normas de calidad y emisión
iv) Planes de manejo
b) Sistemas de fiscalización
i) Directo
ii) Sectorial
iii) Privada
c) Sanciones que puede impartir la Superintendencia
i) Amonestación por escrito
ii) Multa de 1 a 10.000 UTA
iii) Clausura temporal o definitiva
iv) Revocación de la RCA
d) Recursos
i) Recurso de Reposición
ii) Recurso de Reclamación
V. INSTRUMENTOS DE GESTIÓN AMBIENTAL
A/ NORMAS DE CALIDAD AMBIENTAL
1. Declaración de zona Saturada Latente y Saturada
a) Zona Latente
b) Zona Saturada
B/ NORMAS DE EMISIÓN
C/ SISTEMA DE EVALUACIÓN DE IMPACTO AMBIENTAL (SEIA)
1. Características generales del procedimiento administrativo del SEIA
a) No discriminatorio
b) Transparente y público
c) Participativo
d) Termina por una resolución de carácter imperativo
e) Sistema de ventanilla única
2. Iniciación del procedimiento
a) Obligatoria
b) Voluntaria
3. Estudio o Declaración
a) Estudio de impacto ambiental
i) Riesgo para la salud de la población
ii) Efectos adversos significativos sobre la cantidad y calidad de los recursos naturales
renovables
iii) Reasentamiento de comunidades humanas, o alteración significativa de los sistemas de vida
y costumbres de grupos humanos
iv) Alteración de monumentos, sitios con valor antropológico, arqueológico, histórico y, en
general, los pertenecientes al patrimonio cultural
b) Declaración de impacto ambiental
4. Organismo ante el que se presenta

82
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

a) En el evento que una actividad o proyecto produzca o genere impacto ambiental en dos o más
regiones
b) Cuando la actividad o proyecto genera impacto ambiental en una sola región
c) En el evento que existan dudas
5. Estudio de Impacto Ambiental
a) Tramitación: documentos que se deben presentar
i) El estudio propiamente tal
ii) Acompañar tantas copias como órganos del Estado con competencia ambiental deban
pronunciarse
iii) Acompañar un extracto del estudio
b) Plazo
c) Publicidad y Participación
d) Pronunciamiento de la Autoridad
i) Rechaza el Estudio
ii) Aprueba el Estudio
e) Recursos
i) Reclamación por el rechazo del Estudio de Impacto Ambiental
ii) Reclamación por el rechazo del recurso de reclamación
6. Declaración de Impacto Ambiental
a) Procedencia
b) Plazo de Tramitación de una declaración
c) La Resolución Final: Resolución de Calificación Ambiental
d) Recursos
i) Recurso de Reclamación por rechazo de la Declaración de Impacto Ambiental
ii) Reclamación por rechazo del recurso de reclamación
e) Publicidad y participación
7. Principales diferencias entre el Estudio y la Declaración de Impacto Ambiental
a) Plazo de tramitación
b) Contenido
c) Autoridad ante quien se presentan los recursos
d) Publicaciones
e) Participación Ciudadana
D/ PLANES DE MANEJO, PREVENCIÓN Y DESCONTAMINACIÓN
1. Planes de Manejo
a) Mantención de caudales de aguas y conservación de suelos.
b) Mantención del valor paisajístico.
c) Protección de especies en peligro de extinción, vulnerables, raras o insuficientemente conocidas
2. Planes de prevención y descontaminación
a) Normas de emisión.
b) Permisos de emisión transables
c) Impuestos a las emisiones o tarifas de los usuarios (ecotributos)
d) Otros instrumentos de estímulo.
VI. RESPONSABILIDAD POR DAÑO AMBIENTAL
1. Definiciones básicas:
a) Daño Ambiental
b) Reparación
2. Tipos de responsabilidad
3. Acciones que otorga la LBGMA
a) Características de estas acciones
i) Requisitos
ii) Prescripción
iii) Tribunal competente
b) Acción Ambiental
i) Titulares de la acción ambiental
ii) Presunciones de responsabilidad por daño ambiental
iii) Solidaridad Municipal

83
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

c) Acción indemnizatoria
i) Titular de la acción indemnizatoria

CUARTA PARTE
OBRAS PÚBLICAS Y URBANISMO

§9. OBRAS E INFRAESTRUCTURAS PÚBLICAS


I. HECHO JURÍDICO
II. MARCO REGULATORIO
1. DFL Nº 850, Ley Orgánica Constitucional del MOP (LOCMOP)
2. Decreto Nº 75 de 2004, Reglamento para contratos de obras públicas (RCOP)
3. Decreto Supremo MOP Nº 900 de 1996, Ley de Concesiones (LCo)
4. Decreto Supremo MOP Nº 956 de 1997, Reglamento ley de Concesiones de Obras Públicas (RLCo)
III. PRINCIPIOS JURIDICOS DE TODA OBRA PÚBLICA
1. Principio de planificación previa
2. Autorización presupuestaria previa
3. Especificaciones técnicas aprobadas
4. Fijación de prevención de riesgos y efectos medioambientales
5. Necesidad de licitación pública
6. Ius variandi
7. Principio de equilibrio económico financiero
IV. ORGANIZACIÓN ADMINISTRATIVA EN MATERIA DE OBRA PÚBLICA
1. El Ministerio de Obras Públicas
2. Los Servicios de Vivienda y Urbanismo
3. Las Municipalidades
V. INSTITUCIONES JURÍDICAS DE OBRA PÚBLICA
A/ INTRODUCCIÓN
1. Dos fases en la obra pública
a) Las fases de planificación, construcción y en su caso explotación de la obra
b) La fase de explotación o uso público, o fiscal
2. Licitación y contrato de obra pública más concesiones de bien y servicio público
a) La fase de ejecución y construcción de una obra
b) La fase de administración de la obra
3. ¿Concesión de obra pública?
4. Obra pública y expropiación
5. Diversas obras públicas y regímenes
B/ CONCEPTO DE OBRA PÚBLICA
1. Caracterización de la obra pública en Chile de acuerdo a la normativa vigente
a) Es un bien inmueble ya construido o reparado
b) Están destinados a una finalidad pública
c) Están construidas sobre los bienes nacionales de uso público y bienes fiscales
d) Pueden estar financiadas y administradas por la Administración como por los particulares
2. El concepto en la doctrina y la jurisprudencia
a) En la doctrina
b) En la jurisprudencia
C/ TIPOS O FORMAS DE EJECUCIÓN DE LA OBRA PÚBLICA
1. Ejecución directa
2. Contrato de ejecución de obra pública
a) Características del contrato de ejecución de obra pública
b) Las partes del contrato son
i) La Administración

84
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

ii) El contratista
3. La concesión de obra pública
a) Régimen jurídico de la concesión de obra pública
i) La adjudicación del contrato
ii) Expropiaciones y adquisición de bienes
iii) Derecho y obligaciones del concesionario
iv) Tarifas
v) Duración definida, Suspensión y Extinción
D/ FASES EN LA EJECUCIÓN DE LA OBRA PÚBLICA
1. Las etapas del contrato de construcción de obra pública.
a) Licitación
b) Adjudicación
c) Ejecución
d) Término
i) El caso de que el contratista o uno de los socios que conforman la empresa contratista sea
condenado por un delito que merezca pena aflictiva
ii) Si por error en la ejecución de los trabajos la obra quedara con defectos graves que no
pudieran ser reparados y ellos comprometieran su seguridad o fueren sustanciales al proyecto,
otras causales
iii) Si el contratista fuera declarado en quiebra
2. Las etapas del contrato de concesión de obra pública
a) Fase de construcción
i) Diseño de la obra pública
ii) Construcción efectiva de la obra
b) Fase de explotación y caducidad
i) El cumplimiento del plazo
ii) Mutuo acuerdo de las partes
iii) Incumplimiento grave de las bases por parte del concesionario
iv) Otras causales contempladas en las bases de licitación
VI. CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO EN MATERIA DE OBRA PÚBLICA
1. En los casos de Concesión de obra pública
2. En los casos de contratos de ejecución de obra pública

§ 10. DERECHO URBANÍSTICO


I. EL HECHO JURÍDICO
1. Ser la actividad urbanística una actividad de interés público y una función pública.
2. Ser un modo de limitación del derecho de propiedad.
3. Y una necesidad para la vida en sociedad.
II. MARCO REGULATORIO
1. Con respecto a la Planificación Territorial, Urbanización y Construcción
a) Ley General de Urbanismo y Construcciones (LGUyC)
b) Ordenanza General de Urbanismo y Construcciones (OGUyC)
c) Ley Orgánica del Ministerio de la Vivienda y Urbanismo (LOMVyU)
d) Ley Orgánica Constitucional sobre Municipalidades (LOCM)
e) Ley Orgánica Constitucional sobre Gobierno y Administración Regional (LOCGAR)
f) Ley de Bases Generales del Medio Ambiente (LBGMA)
2. Con respecto al contenido y limitación de la Propiedad
a) Constitución Política de la Republica (CPR)
III. PRINCIPIOS DE DERECHO URBANÍSTICO
1. El principio de planificación
a) Principio de competencia
b) Principio de jerarquía
c) Principio de supletoriedad
d) Principio de coordinación

85
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

2. Función social de la propiedad


3. El principio de igualdad
4. Principio de la temporalidad de las cargas singulares
5. Principio de publicación
6. Principio de participación
a) Debe ser informada
b) Debe necesariamente incorporar distintos niveles
c) También es necesario considerar la oportunidad de la participación
IV. ORGANIZACIÓN ADMINISTRATIVA DEL URBANISMO
1. El Ministerio de Vivienda y Urbanismo
2. Las Secretarias Regionales Ministeriales
3. Las Municipalidades y el Director de Obras Municipales
a) Municipalidades
i) Las Municipalidades
ii) Los Alcaldes
b) Director de Obras Municipales
i) Estudiar los antecedentes
ii) Dar los permisos de ejecución de obras
iii) Conocer los reclamos durante las faenas
iv) Dar recepción final de las faenas
v) Dirigir las construcciones municipales que ejecute directamente el Municipio
vi) Supervigilar estas construcciones cuando se contraten con terceros
4. A los Intendentes y Gobernadores
V. INSTITUCIONES JURIDICAS DE DERECHO URBANISTICO
A/ TERMINOLOGÍAS Y CONCEPTOS
1. Urbanismo.
2. Derecho Urbanístico.
3. Ordenamiento Territorial
4. Planificación territorial
a) El constante crecimiento urbano y la formación de áreas metropolitanas
b) Los desequilibrios regionales o territoriales en general
c) Las áreas con problemáticas específicas
5. Planeamiento urbanístico
6. Otros conceptos relevantes
a) Planeación y planificación
b) Planificación global, sectorial y espacial
c) Política regional y planificación regional
B/ INTERVENCIÓN URBANÍSTICA: LIMITACIONES AL DERECHO DE PROPIEDAD Y
AL IUS EDIFICANDI
1. Las limitaciones (delimitaciones) al Derecho de propiedad
2. El Ius edificandi
C/ INSTRUMENTOS Y TÉCNICAS EN LA INTERVENCIÓN URBANÍSTICA
1. La Zonificación o Calificación del suelo
2. Planificación e Instrumentos de Planificación
a) Objetivos Generales

86
Sistema de Derecho Administrativo Económico Alejandro Vergara Blanco 2010

i) Mejoramiento de la calidad de vida de las personas


ii) Bienes y servicios básicos.
iii) Valorización de los espacios públicos
b) Planificación
c) Instrumentos
d) Niveles de planificación urbana
i) El nivel nacional
ii) El nivel regional
iii) El nivel intercomunal
iv) La planificación urbana comunal
v) Planos y planes seccionales.
vi) El límite urbano como instrumento de planificación
e) Participación ciudadana en los distintos planes
i) Planes Regionales de Desarrollo Urbano
ii) Planes Reguladores Intercomunales.
iii) Planes Reguladores Comunales.
iv) Planes seccionales
f) Procedimiento para la elaboración y modificación de los planes
i) Las Secretarias Regionales Ministeriales de Vivienda y Urbanismo
ii) Los Servicios Regionales o Metropolitano de Vivienda y Urbanización
iii) Los Gobiernos Regionales
iv) Las Municipalidades
v) La Contraloría General de la República
vi) Los particulares
3. Urbanización
4. Edificación y construcción
VI. AUTORIZACIONES EN MATERIA URBANÍSTICA
1. Certificado de Informaciones Previas
2. Anteproyecto de Construcción
3. Permiso de Edificación
a) Naturaleza jurídica
i) Es un acto reglado de autorización
ii) Es un acto reglado de carácter real
iii) Y de él emanan ciertos derechos
b) Procedimiento para el otorgamiento del permiso
i) Actos previos o de control
ii) Otorgamiento del permiso
iii) Postergación de Permisos de Construcción
iv) Caducidad de Permisos de Construcción
v) Invalidación y revocación
VII. CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO ESPECIAL
1. Recurso jerárquico
2. Reclamo de ilegalidad municipal

87

También podría gustarte