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Bloque 6. A: Revolución liberal en el reinado de Isabel II.

Carlismo y guerra
civil. Construcción y evolución del Estado liberal.

Introducción

El reinado de Isabel II (1833-1868) constituye una etapa revolucionaria en la Historia de


España, debido a que se produce el cambio de una monarquía absoluta a un Estado
burgués parlamentario, y el paso de una economía y sociedad del AR a un sistema
capitalista. Es una época llena de cambios y de agitación política, donde encontramos
los partidos liberales diferenciados, los moderados y los progresistas, turnándose en el
poder, mediante al pronunciamiento militar, muy común en la historia de España. Fuera
de este sistema quedarán los absolutistas, los carlistas, y otras fuerzas políticas, como el
Partido Demócrata, y el movimiento obrero, que mostrara su fuerza a partir de 1868, en
el Sexenio Revolucionario.

1. El Reinado De Isabel II

1.1. El conflicto dinástico.

Fernando VII no tuvo descendencia hasta que nació Isabel. Las leyes castellanas
permitían el reinado de una mujer, pero las borbónicas (Ley Sálica) lo impedían.
Fernando publica la Pragmática Sanción anulando dicha ley. Los absolutistas, por su
parte, se habían ido acercando a Carlos María Isidro, hermano de Fernando y heredero
según la Ley Sálica. Éste intentó convencer a Fernando de que anulara la Pragmática
Sanción, lo que llevó a un enfrentamiento entre ambos. Fernando VII murió en 1833
dejando a Isabel con tres años y con un candidato Carlos María Isidro que aunaba a los
absolutistas.

De la regencia se ocupó la esposa de Fernando VII, Mª Cristina de Borbón, quien hubo


de apoyarse en los liberales, puesto que los absolutistas estaban con su cuñado. Estos
serán llamados carlistas. Los carlistas eran antiliberales y tradicionales. Agrupaban a
gran parte de la nobleza rural, gran parte del clero y los campesinos especialmente del
norte, País Vasco, Navarra, gran parte de Cataluña, Aragón y Valencia, pequeños
propietarios, artesanos o arrendatarios empobrecidos que desconfiaban de la igualdad
jurídica, la separación de la Iglesia y el Estado y sobre todo, de la abolición de los
fueros. El lema de los carlistas fue "Dios, patria, Rey", y más tarde "Dios, patria y
fueros", aunando los conceptos de monarquía de derecho divino y las leyes
tradicionales.
La defensa de los fueros contra el liberalismo uniformizador cobró también
importancia. Por último destacar que fue un movimiento esencialmente rural y que
solo recibió el apoyo exterior de la Santa Alianza (Prusia, Rusia y Austria), de carácter
únicamente moral.
Los cristinos o isabelinos representan las fuerzas que defendían el liberalismo y que
se veían favorecidas por la introducción de las prácticas capitalistas: la mayor parte
de la nobleza y la burguesía y las clases populares urbanas. Recibió apoyo
material de la Cuádruple Alianza: Francia, Gran Bretaña, España y Portugal.

1.2. La primera guerra carlista. 1833-1840.


La primera guerra carlista se inició con el levantamiento de 1833 y se
prolongó durante seis años (1833-1840). Pero durante este periodo los carlistas
no van a conseguir nunca generalizar el conflicto a todo el territorio español ni
ocupar por mucho tiempo las grandes ciudades del país. Dominaron siempre zonas
rurales y utilizaron la táctica guerrillera, bajo la forma de partidas de
soldados. Aunque el general Zumalacárregui intentó organizar un ejército, su
muerte en el sitio de Bilbao en 1835 inició una etapa en la que los carlistas fueron
progresivamente vencidos por el ejército liberal bajo el mando de Espartero (Victoria
de Luchana, 1836).

El último periodo del conflicto (1837-1839) se caracterizó por: el traslado de la


g u e r r a a l a zona más conflictiva, al Maestrazgo, donde se levantaron las
partidas de Cabrera, y por la división ideológica dentro del carlismo. Por una parte
se encontraban los partidarios de llegar a un acuerdo con los liberales (los llamados
transaccionistas) y de otra los “intransigentes” (formados por la dirección política
más próxima a Don Carlos y buena parte de la base campesina), que consideraban
este pacto una traición a los ideales carlistas.
La división facilitó que el jefe de los transaccionistas, el general Maroto, acordase
por su cuenta la firma del Convenio de Vergara (1839) con el general Espartero,
que reconocía la victoria liberal a cambio del mantenimiento dentro del ejército
de la oficialidad carlista y de la promesa de Espartero de pedir a la reina el
mantenimiento de los fueros. El convenio puso fin a la guerra en el País Vasco,
mientras continuó en el Maestrazgo hasta 1840 cuando Cabrera fue derrotado
militarmente.

2. LA ETAPA DE LAS REGENCIAS (1833-1843)

2.1. la regencia de Mª Cristina 1833-1840

Confirma en el gobierno a CEA BERMÚDEZ, un absolutista ilustrado que estaba con


Fernando VII (1832-34). Facilita la transición al régimen liberal con la aplicación de
reformas administrativas como.
- la creación del ministerio de Fomento.
- a su cargo Javier de Burgos es nombrado Secretario de Estado de Fomento que ordena
la división en provincias (1833)
- la creación de subdelegados de fomento (gobernadores civiles).

El descontento de los liberales, que reclamaron la convocatoria de cortes y


el estallido de la guerra civil hicieron ver a la regente la necesidad de
profundizar más en el camino liberal como única forma de tener los suficientes
apoyos para vencer al carlismo, así es como un viejo liberal moderado llegó al poder.

Mª Cristina llama a Fº MARTÍNEZ DE LA ROSA (enero 1834), conocido del trienio


liberal.
El nuevo gobierno de Martínez de la Rosa pretendía, lejos de ninguna
aspiración revolucionaria, encontrar el apoyo de los grupos liberales
burgueses, pero sin romper con los viejos grupos dominantes. El símbolo de
esta primera transición fue la promulgación del ESTATUTO REAL (1834)

- Inspirado en la Carta Otorgada francesa de 1814, pero incompleta.


- No contempla ni la soberanía nacional ni siquiera una declaración de
derechos.
- No habla del poder ejecutivo ni judicial
- Las cortes no tienen potestad legislativa, ya que es una "gracia real", eso sí,
tenían derecho de petición. Sólo votaban los impuestos.
Se dividían en:
- Estamento de los Próceres: designación real, obispos, grandes de España...
- Estamento de Procuradores: sufragio censitario (0'15% de la población)

Los liberales defenderán pues, sus ideas no en las Cortes, sino en la prensa, las
tertulias y clubs. Para los liberales más radicales era claro que el Estatuto Real
era demasiado moderado y no sería suficiente para realizar las reformas a que
aspiraban. La escisión que ya se había perfilado durante el Trienio Liberal entre
moderados y progresistas se iba haciendo cada vez más grande.
Durante la mayor parte del siglo XIX la corona no se limitó a jugar un papel
de árbitro entre los partidos, sino que intervino activamente en la vida política,
situándose siempre al lado de los moderados. La Corona nunca llamaba a formar
gobierno a los progresistas, que recurrieron a los pronunciamientos para poder
llegar al poder.

1835 es un año de malas cosechas y cólera, lo que provoca movimientos populares,


instigados por la burguesía. En Barcelona se queman conventos y fábricas. Se forman
Juntas, apoyadas por la milicia urbana, asumen el gobierno y presentan
reivindicaciones (convocatoria a cortes, reforma de la ley electoral y libertad de
imprenta). Martínez de la Rosa dimite y se nombra al CONDE DE TORENO como
primer ministro, al mismo tiempo estalla una sublevación carlista.

Como resultado de esta presión y ante el temor del avance carlista, María
Cristina nombró jefe del gobierno a un progresista: JUAN ALVAREZ DE
MENDIZÁBAL, progresista, muy trabajador y en seis meses crea las diputaciones
provinciales para controlar a las juntas y apoyado por procuradores convierte la
Milicia Nacional en Guardia Nacional para hacer frente a los Carlistas.

Inició un programa de reformas que va a resultar decisivo. Lleva a cabo lo


fundamental de la reforma agraria liberal entre 1835 y 1837: (TEMA APARTE)
- La disolución del régimen señorial
- La desvinculación de las tierras
- La desamortización

En mayo de 1836, la desamortización se aplaza unos meses, ya que


Mª Cristina cree que es muy radical y destituye a Mendizábal, disuelve las Cortes y
nombra un nuevo gobierno presidido por e l m o d e r a d o FRANCISCO
JAVIER ISTÚRIZ. Los progresistas son fuertes en las grandes ciudades y reanudan
los pronunciamientos (julio y agosto de 1836). Se producen levantamientos en
ciudades y el Pronunciamiento de los Sargentos en la Guarnición de la Granja
(agosto). Todo obliga a Mª Cristina a proclamar la Constitución de 1812.

El Gobierno será presidido por el progresista JOSÉ Mª CALATRAVA, y se inicia


la revolución liberal, con la promulgación de la Constitución de 1837, que es una
revisión de la de 1812 e incluye otra serie de leyes para acabar con el Antiguo
Régimen.

La CONSTITUCIÓN DE 1837, tiene elementos progresistas y moderados


Elementos progresistas.

- Soberanía nacional, aunque en ningún artículo se reconoce.


- Derechos individuales, libertad de imprenta
- Ayuntamientos nombrados por los vecinos
- Milicia Nacional

Elementos moderados

- la potestad de legislar reside en las Cortes con el Rey


- Poderes del rey: convocar, suspender y disolver Cortes, potestad de legislar,
nombrar y separar libremente a los ministros
- Estructura bicameral:
- Senado, elegido por el rey
- Congreso de Diputados: sufragio directo y censitario (22%): Son los propietarios y
"capacidades", profesiones liberales, administración, ejército...
- Religión católica: obligatoriedad de sostener a la Iglesia Católica

Como valoración, es una constitución progresista, aunque no volvía a los principios


de 1812 y sólo significaba una concesión a los progresistas templados y moderados
más progresistas, como demostraba la elección del gobierno por el rey, pero
aprobado por las cortes. Aquí se ve el supuesto papel moderador de la Corona.
Algunos piensan que es más técnica que la de 1812, pero está a medio camino entre
ésta y el Estatuto Real. Recoge el constitucionalismo vigente en Europa (Francia,
1830, Luis Felipe de Orleans; y Bélgica 1831). Para Solé Tura, es de inspiración
francesa, sin embargo, dice, que no llevó consigo la consolidación de un régimen
semejante al francés. Los jefes de Estado no fueron árbitros, sino que entregaron el
poder a sus políticos favoritos.

OBRA LEGISLATIVA DEL GOBIERNO DE CALATRAVA.

El nuevo gobierno fue presidido por el progresista Calatrava, pero fue Mendizábal
quien desde la cartera de Hacienda y Marina, puso en marcha el proceso de
desmantelamiento del Antiguo Régimen y organizó el ejército liberal que derrotó al
carlismo.

- Favoreció el mercado nacional con la supresión de las aduanas interiores y la


extinción de los gremios que se oponían al libre ejercicio de la industria y el
comercio.
- Disolución del régimen señorial y los mayorazgos. Se suprimen los señoríos
jurisdiccionales.
- Abolición del diezmo
- DESAMORTIZACIÓN ECLESIÁSTICA DE MENDIZÁBAL. ( tema
aparte)

Se consumaba así un conjunto de reformas (ya iniciadas desde la guerra contra


Napoleón) que consolidaban la transición al liberalismo y eran el inicio de
una etapa de crecimiento económico y de introducción del capitalismo en España.

Ante esto los moderados preparan rebeliones, aunque algunos colaboran con el
gobierno, pero ganan las elecciones de 1837 y vuelven al poder, recortando la
Constitución (con la ley de prensa y la ley de Ayuntamientos). En 1840 su nuevo
proyecto de ley de municipios, intentó quitar a la burguesía progresista otro centro
de poder ya que facultaba a la Corona a nombrar los alcaldes de capitales de
provincias y el resto a los Gobernadores Civiles. Esta ley de carácter centralista
provoca levantamientos progresistas con la creación de juntas revolucionarias, y
manifestaciones dirigidas por la Milicia Nacional y los ayuntamientos progresistas.
Esta nueva oleada de protestas hacen caer a Mª Cristina (octubre 1840), que se exilia.

2.2. La regencia de Espartero 1840-1843

General progresista, de gran prestigio por la guerra carlista. Va nombrando como jefes
de gobierno a hombres de su confianza, gracias a las prerrogativas de la Constitución
de 1837.
El periodo de la nueva Regencia siguió a grandes rasgos la línea progresista de
desmantelamiento del régimen señorial y desamortización eclesiástica, con una
nueva desamortización que afectaba a los bienes del clero secular o parroquial,
p e r o es un período de inestabilidad política:

- En el ejército: enfrentamiento entre los ayacuchos (partidarios de Espartero) y el


resto.
- En los progresistas: enfrentamiento entre los líderes civiles contra el poder militar, y
en el ala izquierda los demócratas, incluso algunos republicanos relacionados con el
proletariado urbano.
- En los moderados: conspiran contra los progresistas apoyados desde el exilio por
Mª Cristina, provocando una dura represión contra ellos.

La chispa que provocó un amplio movimiento en contra del general fue la adopción
de medidas librecambistas el año 1842, que abrían las puertas a los tejidos
británicos y perjudicaban la naciente industria catalana.
En respuesta de esto en Barcelona se produjo un fuerte levantamiento al que
Espartero respondió bombardeando la ciudad desde Montjuic.
Estos hechos hicieron que el regente perdiese su prestigio y el apoyo de buena
parte de la población, incluida la mayoría de los progresistas. Las
conspiraciones moderadas protagonizadas por sectores del ejército contrarios a
Espartero y encabezadas por Narváez y O´Donell, dejan a Espartero aislado y
provocan su dimisión. En Julio de 1843 Espartero sale al exilio británico y para no
tener que nombrar un tercer regente se decidió avanzar la mayoría de edad de
Isabel II y proclamarla reina.

3. EL REINADO DE ISABEL II (1843-1868): LA MAYORÍA DE EDAD

En esta etapa se produce la consolidación del Estado liberal, de tipo doctrinario y


conservador. El partido moderado copa el poder excepto en el bienio 1854-56.

3.1. La década moderada 1844-1854

Tras la inestabilidad política se nombra a Isabel mayor de edad en noviembre de 1843.


Sube al poder NARVÁEZ, el Espadón de Loja (1843). Se elabora la
CONSTITUCIÓN DE 1845, similar a la de 1837, casi la reproduce íntegramente.
Se establece en la Constitución:
 la monarquía constitucional como forma de gobierno.
 el principio de soberanía compartida
 el poder legislativo reside en las Cortes, bicamerales, con el Rey.
 Los diputados son elegidos mediante sufragio censitario por un periodo de 5
años.
 los senadores son de designación real y carácter vitalicio.
 Expone una organización territorial basada en los ayuntamientos elegidos por
sufragio censitario, aunque con posterioridad la Ley de Ayuntamientos concrete
el nombramiento real para los alcaldes de los principales municipios y las
capitales de provincia.

 El carácter moderado de la constitución se hace patente también en las escasas


referencias a derechos individuales, de los que sólo tenemos mención al de
imprenta, sujeto a las leyes, que limitarán su alcance y establecerán la censura
previa, y no aparecen garantías sobre derechos.

 En cuanto a las relaciones Iglesia/Estado, el art. 11 establece un Estado


confesional.

Otros aspectos interesantes a comentar son las reglamentaciones relativas a la


sucesión al trono, de manera que, para evitar problemas sucesorios como el
ocurrido con el carlismo, se establece la convocatoria de Cortes ante el trono
vacante (art. 27) y la regulación por ley de la sucesión (art. 53). Igualmente, se
cita la incompatibilidad entre la regencia y un nuevo matrimonio para el regente,
clara alusión al escándalo del matrimonio secreto de Mª Cristina de Borbón con
el guardia de corps Fernando Muñoz, que legalmente la inhabilitaba para el
cargo (art. 58)

Observamos que, con respecto a la constitución de 1837, en este momento se


hacen mayores concesiones a la Corona, por ejemplo la designación de
senadores y la disolución del Congreso; además, la reina tiene la iniciativa
legislativa y derecho de veto. El sufragio censitario es más restrictivo y el
Senado es vitalicio, además se endurecen las condiciones para ser candidato y el
mandato de los diputados se alarga a 5 años. Además, la Ley Electoral de 1846
estableció un sufragio tan restringido que apenas permitía participar al 1% de la
población. Por otra parte, los derechos y libertades no aparecen regulados en la
Constitución, sino que se remite a leyes posteriores que, en muchas ocasiones los
recortan; además, al no tener rango constitucional, pueden dejarse en suspenso.
Así, la libertad de prensa se limita al poner trabas a la publicación de artículos
que pongan en entredicho a la Corona, el ejecutivo, la Iglesia, etc. 

Recoge el texto, la ideología del liberalismo doctrinario (defensor de la


Soberanía Compartida, la restricción de los derechos individuales y el sufragio
censitario muy restringido), haciendo de ella una constitución partidista,
conculcando el principio de que la norma suprema del Estado debe ser válida
para toda la nación. 

El liberalismo moderado, representado en esta constitución, se separaba del más


progresista de Cádiz en importantes aspectos. No obstante, supuso un gran
avance con respecto a la restauración absolutista de Fernando VII y el tímido
reformismo de la Reina Regente.

La permanencia de esta constitución, vigente de 1845 a 1869 (salvo el paréntesis


1854-56, cuando se dejó en suspenso), se prolongó en su influencia sobre la de
1876, pues los principios moderados se mantendrán durante la Restauración.

Un conjunto de leyes y reformas completaron el proceso de formación del


nuevo Estado moderado que en el periodo 1844-1868 institucionalizó el régimen
liberal al servicio del nuevo grupo dominante: la burguesía terrateniente.
Las reformas moderadas se hacen por medio de leyes:

- Reordenación territorial, a través de una nueva Ley municipal muy centralista,


con las provincias de Javier de Burgos.
- País Vasco y Navarra conservan sus fueros con recortes.
- Se crean los gobernadores civiles.
- Orden jurídico unitario, con un nuevo código penal
- Reforma de la instrucción pública de Pedro José Pidal y la creación de 10
universidades, nuevas especialidades.
- Modernización del ejército, sobre todo de la Marina.
- Instauración de la Peseta.
- Reforma de Hacienda de Alejandro MON, que dura hasta hoy, a través de:

a) Impuestos directos: contribución (sobre propiedades inmobiliarias urbanas y


rendimientos de fincas rústicas, 25% de los ingresos).
b) Impuestos indirectos: de consumos, y transmisión de bienes.

- Creación de la GUARDIA CIVIL, para el orden público, los bandoleros, es la


contrarréplica a la Milicia Nacional. Creada por el Duque de Ahumada. Un cuerpo
para-militar.

- Reforma de la Administración funcionarial: jerarquía, racionalización y selección


de miembros.

Para mejorar las relaciones con la SANTA SEDE, (deterioradas por la


desamortización de Mendizábal) en 1851 se firma un concordato. La Santa Sede
acepta la desamortización a cambio de que el Estado asuma la obligación de sostener
a la Iglesia.

Durante el año 1848, la oleada revolucionaria en toda Europa es temida y Narváez,


ante las noticias de París, asume poderes excepcionales. Hay revueltas en marzo en
Madrid y en verano en Levante, Andalucía, Cataluña... Están impulsadas por los
progresistas, demócratas y republicanos. A la vez estalla la 2ª Guerra Carlista, una
vez muerto Carlos Mª Isidro y sustituido por su hijo, el conde de Montemolín
(Carlos VI para sus seguidores). El gobierno se hace más conservador y no se nota la
oleada revolucionaria. Como recompensa, la Santa Alianza (Prusia, Rusia y Austria)
reconocen a Isabel II, aunque les atraían más los carlistas.

Es una época en la que la práctica política está regida por los militares, por lo que se
utiliza el término de "parlamentarismo pretoriano". También es importante el papel de
la Corona, que más que moderadora de las fuerzas políticas, va dejando el poder a sus
camarillas, grupos de presión, que acaparaban y se disputaban el poder al margen de
la organización parlamentaria, lo que vició y corrompió el sistema. La manipulación
y el control electoral degradaron definitivamente el sistema y dejaron a la oposición
en la más absoluta marginación política expulsando sistemáticamente a los
progresistas.

El gobierno se hace más conservador, y en 1852, BRAVO MURILLO, jefe de


gobierno -famoso por construir el Canal de Isabel II-, presenta una reforma
constitucional de carácter antiparlamentario y autoritario, muy similar a la de Luis
Napoleón en Francia. Una especie de dictadura tecnócrata. La oposición es total y
coinciden moderados, progresistas... Bravo Murillo dimite en diciembre de 1852. Le
suceden gobiernos inestables y corruptos como los de Roncali, Lersundi o Sarturius,
que es incluso rechazado por la Corona, el pueblo, los progresistas, moderados...

3.2. Bienio progresista 1854-1856.

Más que una revolución son tres:

- Revolución desde arriba: El moderado Leopoldo O'DONNELL se pronuncia en la


VICALVARADA: se inicia con un pronunciamiento en Alcalá de Henares en
junio de 1854 dirigido por los generales Dulce y O´Donell. En Vicálvaro, en las
afueras de Madrid se produce una batalla nada decisiva. Esto hizo comprender a los
sublevados la necesidad de sumar a los progresistas al pronunciamiento.

- el apoyo del joven Cánovas con el MANIFIESTO DEL MANZANARES,


que incluía importantes puntos del programa progresista:
- contra la "camarilla".
- por la rebaja de los impuestos.
- autonomía municipal, Milicia Nacional, nueva ley electoral y de imprenta.

- Movilización civil de los progresistas, Las tres jornadas gloriosas. Revolución desde
abajo: Juntas de Salvación, con ideario democrático y republicano en Madrid,
Barcelona, Valencia, Zaragoza, Sevilla, Granada y San Sebastián.

Para frenar la Revolución, la reina encarga a Espartero, que pacte con O'Donnell. Es
un pacto entre moderados y progresistas.

La principal tarea que van a llevar a cabo los progresistas es retomar la tarea
de profundización del régimen liberal. El Gobierno progresista con O´Donnell de
ministro restaura la constitución de 1837, aunque ampliando el voto. Se intenta hacer
una nueva, la de 1856 "non nata" (progresista).

Se elabora la CONSTITUCIÓN DE 1856 -NON NATA-, de carácter progresista y


con la siguientes características

- Soberanía nacional
- Limitación de poder a la Corona, aunque ésta tiene aún la iniciativa legislativa,
sanciona y promulga las leyes y derecho de veto.
- Congreso y senado electivos. Con diputación permanente
- También elegidos los gobiernos locales y provinciales.
- Amplia declaración de derechos.
- Milicia Nacional
. Confesionalidad del Estado pero no persecución de otros cultos.

Reformas económicas en el sistema financiero como las leyes para las Sociedades
Anónimas y que el banco de emisión sea sólo el Banco de San Fernando, antiguo San
Carlos, que pasa a llamarse Banco de España. También se elabora la normativa para la
construcción ferroviaria, la red básica radial y se trata de atraer capital francés. Quizás
lo más importante es la DESAMORTIZACIÓN DE MADOZ.(tema aparte)
Estos dos años son muy inestables:
- los carlistas (1855-56);
- conflictividad social con las primeras huelgas generales en Cataluña /junio
1855). Reivindican la libertad de asociación, jornada de 10 horas y tribunales
paritarios para mediar los conflictos laborales.

El pacto con O'Donnell se rompe y éste, apoyado por la Corona forma gobierno
en julio de 1856

3.3. Vuelta al moderantismo y crisis. 1856.1868

O'Donnell, forma la Unión Liberal, alternándose en el poder con Narváez.


Hasta 1858 se suceden varios gobiernos moderados y centralistas. Entra de
nuevo en vigor la constitución de 1845.

En 1857 entra en vigor la Ley de INSTRUCCIÓN PÚBLICA de Claudio


MOYANO, con la enseñanza primaria obligatoria. También en ese año se hace
el primer censo de población. De junio de 1858 hasta febrero de 1863 O'Donnel
gobierna con la Unión Liberal, que más que un partido es un proyecto político
al que apoyan algunas élites, los más progresistas de los moderados y los más
moderados de los progresistas.

Es un período de estabilidad política, se asegura la mayoría en Cortes, pero


también una representación minoritaria de moderados y progresistas. También
es una época de progreso económico que incita al entusiasmo en la intervención
en el interior.
- Para buscar prestigio internacional se hacen expediciones:
o Guerra de Marruecos (59-60): desde 1844 ataques marroquíes a
posiciones españolas en torno a Ceuta y Melilla. 1859 se declara la
guerra a Marruecos, derrota marroquí de Wad-Ras (1860) y firma del
tratado de Tetuán, por el que se amplían posiciones en Ceuta, se
obtiene Ifni y se impone una multa al sultán de Marruecos de 400.000
reales.
o Santo Domingo (61-65)
o México (61-62): expulsión del embajador español y agravio de nuestros
intereses económicos. Interviene España en colaboración de Francia y
Gran Bretaña que tenían fines propios. 1862: Prim firma con Juárez la
Convención de Soledad. Francia nombra a Maximiliano emperador
(1867 ajusticiado).
o Pacífico (63-66)
o la Conchincina (56-63): matanza de misioneros. Intervención con
apoyo de Francia, que obtiene ventajas territoriales (base de la
futura indochina francesa). España: obtiene libertad religiosa,
indemnización de guerra, libertad de comercio (1857-1863).

Responde también al espíritu del nacionalismo romántico.

Los problemas del período son el levantamiento carlista de San Carlos de la Rápita, la
insurrección de campesinos andaluces (1857 en Utrera y El Arahal, y 1861 en Loja) y
las discusiones internas dentro de la Unión Liberal.
La crisis comienza en 1863 por la inestabilidad política, con siete gobiernos en cinco
años, incluyendo los de Narváez y O'Donnell. Se descompone la Unión Liberal. Los
progresistas se niegan a seguir participando en el fraude de las elecciones, acercándose
a los demócratas. Prim y otros militares progresistas comienzan los pronunciamientos
como el de Villarejo de Salvarés (enero 1866). Los demócratas aumentan sus
seguidores. Se sublevan los Sargentos en el Cuartel de San Gil (junio 1866) con rápida
represión (66 fusilados) Intelectuales como Castelar (demócrata) son destituidos de su
cátedra. Las universidades se movilizan, los estudiantes se enfrentan a la Guardia Civil
con varios muertos en la NOCHE DE SAN DANIEL (abril 1865)

Acompaña una crisis económica, financiera al hundirse las acciones del ferrocarril y la
bolsa por la especulación; crisis en la industria catalana por la guerra de Secesión
americana que corta la importación de algodón. Además hay una crisis de subsistencia
entre 1867-68. Finalmente hay una crisis social por el descontento del paro y la
burguesía financiera se va alejando del régimen y de la corona.
Progresistas, demócratas y republicanos planifican una estrategia común, el PACTO
DE OSTENDE (agosto de 1866), cuyos dos objetivos principales eran:

- derrocar a Isabel II.


- La elección de una Asamblea Constituyente por sufragio universal (decidirá
monarquía o república).

Los unionistas, muerto O'Donnel (noviembre 1867) se unen al pacto.


A la corona sólo le queda la camarilla, con sectores de la nobleza y la Iglesia.
Pronunciamiento en septiembre de 1868 con TOPETE en Cádiz, Prim y Serrano
(antiguo unionista) derrotan a los isabelinos en Alcolea, proclamando ¡VIVA
ESPAÑA CON HONRA! La reina se exilia en Francia.

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