Reforma de la Constitución Política de 1991.

La Carta Política tiene aptitud de permanencia, toda vez que le son

consustanciales las pretensiones de estabilidad y de vigencia perdurable. No
obstante, contiene normativa que consagra procedimientos para su reforma, asi, a
partir del autorreconocimiento de que su contenido es susceptible de
modificaciones, se persigue que la Constitución tenga larga vida.

En ese sentido, es preciso nombrar que, la Constitución más antigua del mundo,
siendo la Constitución de Filadelfia, fue expedida en 1787 y ha sufrido
27enmiendas. De otro lado, en Colombia, la Constitución de 1886 fue reformada
en varias oportunidades, pero subsistió casi 105 años, no obstante, el exceso de
reformas la debilita y por consiguiente, le hace perder fortaleza.

En ese orden de ideas, cabe mencionar que, en virtud del artículo 374 de la
Constitución Política, el poder de reforma puede radicar una competencia
extraordinaria que se otorga al Congreso de la República, al pueblo a través del
Referendo, o a un órgano como la Asamblea Constitucional, para que revise o
modifique su contenido. De ese modo, se erigen como mecanismos de reforma
previstos por la Constitución Política de 1991, la reforma mediante Acto
Legislativo, mediante convocatoria a una Asamblea Constituyente, y a través de
Referendo.

En referencia a la clasificación anterior, en primer lugar, en lo concerniente a la

reforma mediante Acto Legislativo, esta se concibe como el procedimiento que le
permite al Congreso reformar la Constitución; término que se utilizó por primera
vez en la Constitución de 1843, se conservó en la de 1853, y reapareció en la de
1886, para continuar en la actual.

En efecto, en virtud de lo enunciado por el artículo 375 de la Constitución Política,

asi como por la Corte Constitucional en Sentencia C-543 de 1998, se señala que
cuando la reforma es realizada por el Congreso de la República, el Acto
Legislativo correspondiente debe cumplir los requisitos que contempla la
Constitución y algunas disposiciones de la Ley Orgánica N° 5 de 1992
(Reglamento del Congreso). En consecuencia, dentro de respectivas exigencias
constitucionales, se hallan las siguientes: la iniciativa, teniendo en cuenta que, los
proyectos de Acto Legislativo pueden provenir del Gobierno, de los miembros del
Congreso en número no inferior a 10, del 20% de los concejales o de los
diputados, y de los ciudadanos en un número equivalente al menos al 5% del
censo electoral vigente; la publicación en la Gaceta, toda vez que, el proyecto de
Acto Legislativo debe publicarse en la Gaceta del Congreso antes de darle curso
en la Comisión respectiva; el informe de ponencia, ello, en la medida que, el Acto
Legislativo, deberá tener informe de ponencia en la respectiva Comisión
encargada de tramitarlo y a él deberá dársele el curso correspondiente; la
aprobación, es preciso nombrar que, el Acto Legislativo debe aprobarse en dos
períodos ordinarios y consecutivos, así: en la primera legislatura por la mayoría de
los asistentes y en la segunda, por la mayoría de los miembros de cada Cámara.
Asi mismo, como exigencias, también se encuentran: la publicación, ya que
aprobado el proyecto en el primer periodo, el Gobierno deberá publicarlo; el
debate e iniciativas, teniendo en cuenta que, en el segundo periodo solo pueden
debatirse iniciativas presentadas en el primero; los términos, siendo preciso
nombrar que, entre el primero y segundo debate deberá mediar un lapso no
inferior a 8 días y entre la aprobación del proyecto en una de las Cámaras y la
iniciación del debate en la otra deberán transcurrir por lo menos 15 días;
modificaciones, en respectivo requisito, se enuncia que durante el segundo
debate cada Cámara podrá introducir al proyecto las modificaciones, adiciones y
supresiones que juzgue necesarias; el rechazo de propuestas, allí, en el informe
para la Cámara plena en segundo debate, el ponente deberá consignar la totalidad
de las propuestas que fueron consideradas por la Comisión y las razones que
determinaron su rechazo; la unidad de materia, los actos legislativos también
deben cumplir con esta exigencia constitucional, en cuyo caso, el asumo
predominan no es otro que la reforma de determinados títulos, capítulos o
artículos de la Constitución, y como ultima exigencia, se halla el título, el cual
deberá corresponder exactamente a su contenido y a su texto.

En ese sentido, es de alta relevancia mencionar que, de conformidad con lo

dispuesto en el artículo 379 del Estatuto Superior los Actos Legislativos, la
convocatoria a Referendo, la Consulta Popular o el acto de convocación de la
Asamblea Constituyente, sólo podrán ser declarados inconstitucionales cuando se
violen los requisitos nombrados con antelación.

En segundo lugar, en cuanto a la reforma mediante Convocatoria a una Asamblea

Constituyente, el artículo 376 de la Constitución Política, abrió la posibilidad de su
reforma por medio de una Asamblea Constituyente, y con ello, una serie de
condiciones, entre las cuales, de un lado, se requiere que, el Congreso disponga
mediante una Ley citar a los ciudadanos para que en votación popular decidan si
convocan una Asamblea Constituyente, con la competencia, el periodo y la
composición que la misma Ley determine, la cual deberá ser aprobada por la
mayoría absoluta de los miembros de una y otra Cámara. Y por otro lado, se hace
necesario, que la convocatoria a la Asamblea sea aprobada por un número de
ciudadanos no inferior a la tercera parte del censo electoral.

Ahora bien, por último, en lo referente a la reforma a través de Referendo, es

preciso mencionar que la Constitución prevé este mecanismo de reforma para
aprobar o para derogar una norma constitucional, es asi como el artículo 377 de la
misma, establece que deben someterse a referendo las reformas constitucionales
que haya aprobado el Congreso mediante Acto Legislativo cuando traten sobre los
derechos constitucionales fundamentales y sus garantías, y los mecanismos de
participación ciudadana y el Congreso. Sin embargo, debe proponerse dentro de
los seis meses siguientes a la promulgación del Acto Legislativo, por un 5% de los
ciudadanos que integran el censo electoral.

Adicionalmente, para que la reforma sea derogada, deberá haberse obtenido el

voto negativo de la mayoría de los sufragantes, siempre que en la votación
hubiere participado al menos la cuarta parte del censo electoral.

Al igual, cabe señalar que la Corte Constitucional ha precisado que la convocatoria

el pueblo debe ser tramitada como una ley ordinaria ( La denominada ley
ordinaria es aquella en la que no hay trámites especiales para su aprobación. Supone ser
una norma de rango legal que requiere de una tramitación sencilla para su promulgación
definitiva) que, conforme con el artículo 241 Superior, tiene revisión previa y,
además debe ser aprobada por mayoría absoluta. Dicha característica permite que
sea discutida en sesiones extraordinarias y que pueda ser objeto de mensaje de
urgencia por parte del Gobierno Nacional.

el acto mediante el cual se convoca al pueblo a un referendo constitucional, se

encuentra conformado por diversas actuaciones que deben agotarse de manera
sucesiva, que de conformidad con la Constitución y las leyes estatutarias 130 y
134 de 1994, se encuentra conformado por las siguientes etapas: la iniciativa
popular; la aprobación de una ley, mediante la cual se incorpora el texto del
articulado que recibió los apoyos ciudadanos; la revisión de la Corte
Constitucional; la sanción presidencial; la convocatoria del pueblo, para que se
manifieste a favor o en contra del texto reformatorio de la Carta Política, y la
entrada en vigencia del mismo.

Finalmente, la Constitución Política de un Estado, si bien son el texto jurídico de

mayor relevancia en un sistema jurídico constitucional, las mismas deben
adaptarse y ser dinámicas para responder a las necesidades del colectivo que
rigen, no obstante, aunque sea notoria la necesidad de permitir la adaptación de la
Constitución a las exigencias del momento, no menos cierto es que estos
mecanismos deben ser usados para su fin legítimo: adaptar y mejorar, no destruir.